BOLETÍN MENSUAL Boletín número 129. Julio 2011
1.- Artículo del mes: CAZANDO TORCACES EN LA MEDIA VEDA 2.- Producto recomendado: CARABINA REMINGTON VANTAGE. Una magnífica elección.
3.- Promociones especiales. 4.- Nuestros compañeros los perros: BARBET 5.- Gastronomía: – –
Ficha nº 257: CONEJO ASADO Ficha nº 258: CONEJO A LA SIDRA
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1.- ARTÍCULO DEL MES: CAZANDO TORCACES EN LA MEDIA VEDA
D
e un tiempo a esta parte, la paloma torcaz ha venido
experimentando un notable y paulatino auge en las salidas de caza durante la media veda. Aunque tal vez la paloma torcaz se ha puesto en el punto de mira del cazador por motivos ajenos a ella (es decir, por la falta de otras especies), lo cierto es que se trata de una especie de magníficas características desde el punto de vista cinegético. Hay que tener en cuenta que cada año se queda un mayor número de torcaces en España, incluso se ven más en las grandes ciudades. A todos nos gusta regresar a casa con algo en el macuto y, durante los últimos veranos, la torcaz es una de las pocas especies que pueden permitírnoslo. Por eso hemos creído interesante dedicar el artículo de este mes a esta especie cuya caza, sin duda, consigue enganchar a cualquiera.
CONOCER LA ESPECIE Llama la atención lo pequeño de su cabeza en relación con el resto del cuerpo, ya que la Torcaz es la mayor de las palomas, con una envergadura de 68 cm. y 41 cm. de altura, si bien es su especial plumaje la que la distingue principalmente del resto de palomas. De tonos grises y azulados, tiene dos manchas blancas a ambos lados del cuello, así como manchas blancas en las plumas cobertoras de ambas alas; estas manchas son visibles desde bastante distancia y facilitan la identificación de este ave. En el cuello tiene además irisaciones azul verdosas. El pico es anaranjado y las patas son de color rojizo. La coloración de las palomas inmaduras es notablemente más apagada que el de las adultas, faltando incluso las manchas blancas del cuello. En cuanto a su alimentación, la torcaz es un ave principalmente vegetariana: aunque las bellotas son su pasión (prefiriendo las de los alcornoques antes que las de las encinas), también gusta de semillas de gramíneas, leguminosas, trigo, maíz... A pesar de eso, no hará de menos a unas larvas o pequeñas lombrices. Su devoción por las bellotas es tal que en Extremadura está comprobado que, según la producción de bellotas que haya cada año, así será la asistencia de torcaces, hasta tal punto que en muchas ocasiones han debido considerarse como plaga. Pero tan importante (o más) que la comida, para una torcaz es el agua. Y es que esta ave necesita beber y bañarse varias veces al día, para lo que precisará disponer de alguna laguna, río o charco. Come durante el día, en tierra, utilizando las ramas más altas de los árboles durante la noche para descansar. La época de cría se desarrolla desde el mes de abril hasta el de agosto. Tienen hasta 3 puestas de 2 huevos cada una, aunque lo más habitual son 2 en un año. La incubación dura unos 17 días, encargándose de ello tanto la hembra como el macho: éste lo hace de medio día a media tarde y la hembra el resto del día. Habita en encinares y bosques caducifolios, si bien de manera ocasional puede ocupar pinares no muy espesos y sotos de ríos con vegetación arbustiva. Cada vez es más común verla en los parques urbanos de nuestras ciudades. Fuera del periodo de reproducción, se pueden encontrar en grandes bandos, reuniéndose sobre dormitorios comunes para pasar la noche. En la elección de estos dormitorios se tienen en cuenta diferentes variables, como son: la altura de los árboles, la presencia humana, los depredadores, la visión del suelo... En relación a su distribución geográfica, la paloma torcaz se localiza en Europa, al norte de África y en Asia hasta la India, Nepal y China.
En lo que concierne a la Península Ibérica en particular, podemos hablar de dos grupos de torcaces: – Grupo sedentario: nos referimos a las palomas “locales”, nacidas en nuestro país, y que habitan aquí a lo largo de todo el año. Éstas palomas realizan migraciones locales, a poca distancia. Año tras año se viene comprobando el aumento de esta población. – Grupo del centro y norte de Europa: que aparecen en otoño a través de los pasos tradicionales del Pirineo vasconavarro. Conviene saber que por lo general es un ave muy sensible a los cambios de tiempo, soporta bien la lluvia y hasta cierto punto el frío, pero no resistirá ante temperaturas extremas (tanto altas como bajas). A pesar de eso, es capaz de adaptarse en un tiempo récord a las condiciones del entorno.
EL EQUIPO Empecemos por lo más importante: el arma. Pues bien, la escopeta que más resultados suele dar cazando torcaces es la superpuesta calibre 12. De hecho, suele ser la elegida por la gran mayoría de los cazadores si bien nosotros le recomendaríamos que valore como principal cualidad del arma la comodidad que le ofrezca. Si durante la media veda utiliza un arma que habitualmente no usa, asegúrese de que esté perfectamente preparada y que le ofrezca unos tiros cómodos y, en consecuencia, seguros. Muchos cazadores optan por la semiautomática, una opción perfectamente válida, sobre todo en aquellas jornadas en las que sabemos de antemano que vamos a poder realizar muchos disparos (algo sin duda muy habitual). De cualquier forma podemos decir que, en principio, la escopeta habitualmente utilizada en la caza en mano, con 70 ó 71 cm. de cañón y con medio choke (4, 5 ó 6 décimas) en el primer cañón y full (8, 9 ó 10 décimas) en el segundo para escopetas paralelas o superpuestas, resulta perfectamente válida. En cuanto a los cartuchos, le recomendamos que no lleve un único tipo de cartucho ya que, sobre todo en verano cuando la torcaz puede mostrarse tan impredecible, podremos necesitar desde los 30 gramos y octava hasta los 34 gramos de sexta... sin embargo y como norma general un buen cartucho de 32 gramos en séptima y sexta es el más polivalente. Dentro del equipo, querríamos hacer también una recomendación en relación a la ropa adecuada: Es totalmente necesario que se confunda con el entorno si no quiere que la paloma huya, incluso antes de que usted se dé cuenta de su presencia. Por tanto es indispensable llevar ropa de camuflaje, y prestar atención a que ésta no sea ruidosa. Además debe ser cómoda y ligera. Por último recordar que el uso de un buen repelente para insectos puede ser la diferencia entre una agradable jornada de caza o hacernos pasar un mal rato.
LOS SECRETOS DEL TIRO A LA TORCAZ Cuando la densidad de palomas es muy grande, aunque nuestra técnica de tiro no sea del todo correcta es fácil hacer buenas perchas, pero cuando cazamos en lugares en los que estas aves escasean es necesario aumentar nuestra destreza como tiradores si queremos tener cierto éxito. Su especial forma de volar le confiere una gran dificultad para el tiro, por lo que un acierto se convierte siempre en un logro a celebrar por cualquier cazador. Efectivamente, a pesar de su tamaño y de que pueda parecernos, hasta cierto punto, un poco lenta, su tiro es muy complicado y es normal que incluso un magnífico tirador “gaste” entre tres y cuatro cartuchos por pieza. Algo que sin duda nos hará valorar mucho más cada torcaz que logremos llevar para casa. El error más común es el de la precipitación, efectivamente, muchos cazadores fallan al ser incapaces de encarar bien y adelantar la escopeta lo justo. A esto se suma el hecho de que, debido principalmente a su desconfianza, la torcaz suele volar a mucha altura, por lo que el cazador deberá hacer un blanco rápido en el vuelo. Además debemos destacar la sorprendente resistencia al impacto de los perdigones que presenta este ave. Por eso, para tirar bien a la torcaz, resulta prioritario que aprendamos a valorar las distancias. Para muchos cazadores el truco se encuentra en ver las tiras blancas de la pieza: es en ese momento justo cuando hay que realizar el disparo. Aunque por supuesto no tiene porqué valer en todos los casos y dependerá de los chokes y cartuchos utilizados en cada ocasión en concreto, lo cierto es que como referencia resulta totalmente válida.
En muchas ocasiones las torcaces obligan al cazador a efectuar tiros a larga distancia con cartuchos de alto gramaje, por lo que disponer de chokes extralargos nos ayudará a sacar todo el provecho de ese tipo de cartuchería. La repetidora es el tipo de escopeta más recomendada para el tiro a las torcaces ya que poder disfrutar de un tercer tiro contribuirá en gran medida a que los resultados sean más satisfactorios por el número de capturas obtenidas. Los adelantos de nuestros tiros serán muy variados y sobre todo dependerá de la distancia a la que los realicemos. De no hacerlo así el tiro se quedará trasero, confundiendo al cazador. Cuando disparamos sobre palomas por detrás, es decir, una vez que han superado nuestro puesto, tendremos que hacerlo con la precaución de disparar ligeramente por debajo de éstas, ya que ese será el punto de adelanto correcto para poder abatirlas. Cuando realicemos nuestros disparos es muy importante no retirar la culata de la cara entre tiro y tiro: con ello contribuiremos a que el número de aciertos con el segundo o tercer disparo aumenten notablemente. Debemos tener en cuenta que no es lo mismo tirar a una paloma suelta que a una que forma parte de un grupo. A la paloma solitaria podremos tirarle cuando se encuentre en nuestro radio de tiro, puesto que si no acertamos lo único que perderemos será eso: una pieza. Sin embargo si entra un grupo es muy importante que pongamos atención en no disparar por delante y a las primeras, ya que provocaremos un revuelo tal que será del todo imposible alcanzar a cualquier otra. Tiraremos por tanto a las últimas para que las primeras sigan su camino, sin darse cuenta, dirigiéndose hacia otros puestos donde, tal vez, otros cazadores también puedan probar suerte
LA CAZA EN VERANO Sin lugar a dudas lo más importante para conseguir resultados durante el verano con la siempre cambiante torcaz, es conseguir el puesto “ideal”, aquel lugar desde el que poder afrontar una jornada de caza con las máximas garantías. Pero, ¿cómo saber que hemos elegido bien?, ¿cuáles son las claves?, nosotros se las damos. Siempre que acuda a una tirada de torcaces, trate de buscar un puesto que reúna las siguientes características (o si no todas, por lo menos parte de ellas): – Debemos tener en cuenta que la torcaz es un ave de costumbres bastante ordenadas, siempre y cuando no se le moleste demasiado. Es metódica en sus horarios de comida, agua y sesteo, por lo que las esperas del cazador se verán muy reducidas siempre y cuando conozca bien las querencias y horas de paso. – Las querencias más habituales son las siguientes: – Aproximadamente a la salida del sol comienzan los vuelos hacia el lugar de comer (puede desplazarse más de 40 km. para comer) – Permanece en el lugar de comida hasta más o menos las 10 o las 11 de la mañana. – Emprende de nuevo el vuelo, en busca esta vez de agua. – Prefieren bebederos tapados, o por lo menos rodeados de arboleda. – Tras beber y/o mojarse, se dirige a las arboledas de sesteo, donde permanecerá las horas de más calor del día. – Bien entrada la tarde, repite el mismo ciclo y costumbres realizadas por la mañana: comedero, agua, y al dormidero. – Estos horarios pueden variar en función de si se trata de palomas migratorias o de nuestro país y, sobre todo, en función de la época del año en concreto (sobre todo por las horas de salida y puesta del sol). – El material de fabricación del puesto deberá ser el que exista en la zona: ramas, retamas... nunca utilice un puesto de los prefabricados ni de tela, la paloma sabrá que está usted allí. El tema de la mimetización con el medio resulta fundamental para conseguir resultados, ya que a la mínima sospecha de duda, la torcaz escapará. En este sentido conviene tener especial cuidado con los puestos que se mantienen de una temporada para otra, nunca estará de más “actualizarlos” porque con mucha seguridad el material con el que están hechos ya no se corresponda ni tenga las mismas características que el presente en el entorno. – Las vaguadas, faldas o collados de la sierra suelen ser los lugares más acertados. – Siempre son preferibles las zonas con agua, con vegetación cercana. – Rehuya colocarse debajo de cualquier árbol.
2.- PRODUCTO DESTACADO CARABINA REMINGTON VANTAGE. Una magnífica elección. Arma con cañón abatible que viene equipada con una mira óptica de 4x32 aumentos y con un sistema de miras abiertas. Es una excelente elección para los aficionados al tiro. Además, para afinar aún más su increíble precisión, el disparador de esta nueva carabina se puede ajustar en 2
fases.
Características técnicas: – Disponible en calibre 4,5. – Velocidad de salida: 320 m/s. – Longitud total: 113 cm. – Peso: 2,7 kg.
EN ÁLVAREZ POR SÓLO 249 euros. Ver en la Tienda On-line
3.- PROMOCIONES ESPECIALES Pinche sobre cada imagen para acceder a la promoción directamente.
4.- NUESTROS COMPAÑEROS LOS PERROS: BARBET
Existen diferentes hipótesis sobre el origen del Barbet. Una de las teorías sitúa su origen en Polonia, mientras otras lo trasladan al Norte de África, desde donde llegaría a Europa allá por la Edad Media. Quizás la más válida sea esta última teoría, según la cual el Barbet ha ido dejando un gran rastro de genes que, con los siglos, ayudaron en la conformación de razas como el caniche o gran parte de perros pastores.
CARACTERÍSTICAS FÍSICAS: – – – – – –
Tamaño: 54 cm. Capa unicolor: negra, gris, marrón, leonada, arena o blanca. Su principal característica es, sin duda, su pelaje: denso, lanoso, largo y ondulado. Aspecto general de un perro fuerte, robusto. Orejas de implantación baja. Son anchas, largas y planas. Cola ligeramente elevada.
CARÁCTER: Se trata de una raza de carácter muy alegre. Es un animal audaz y muy dócil. No es miedoso ni agresivo. Suele mostrarse sumamente afectuoso con su amo, hacia quien desarrollará un gran apego.
UTILIZACIÓN EN LA CAZA: Esta raza está clasificada como perro cobrador (sin duda su principal virtud) y levantador de caza. Gracias a sus magníficas dotes como nadador y a su capacidad para mantenerse en el agua durante mucho tiempo (gracias a su especial pelaje no siente frío), también se muestra muy útil como perro de agua, para la caza de aves acuáticas.
CUIDADOS ESPECÍFICOS: –
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Teniendo en cuenta el tipo de pelaje, resulta conveniente un cepillado periódico y enérgico, con el que tratemos de desenredar el pelo, para que no se apelmace. Si no se le educa desde cachorro de forma firme, puede acabar desarrollando un carácter muy dominante. Precisa de ejercicio diario.
5.- GASTRONOMÍA Dos nuevas recetas de una de esas especies que están deliciosas, se cocinen como se cocinen...
RECETA 257: CONEJO ASADO
RECETA 258: CONEJO A LA SIDRA
RECETA 257:
CONEJO ASADO Dificultad: Fácil. Ingredientes: Para 4 personas: – 1,5 kg. de conejo. – 50 g. de cacahuetes tostados. – 3 cucharadas de leche. – 2 cucharadas de cilantro. – ½ kg. de patatas. – 1 cebolla mediana. – 2 dientes de ajo. – Comino molido. – Pimienta molida. – Aceite de oliva virgen (5 cucharadas). – Sal.
Primer paso: Lo primero será limpiar bien el conejo, retirando las vísceras y secándolo bien con papel absorbente. Lo partimos en trozos. Después lo condimentamos con los ajos (previamente machacados), el comino, la sal y la pimienta. Colocamos los trozos sobre una parrilla y ésta la ponemos encima de una bandeja de horno, de forma que en esta bandeja iremos recogiendo todo el jugo que suelte el conejo. Para ello lo meteremos al horno, previamente precalentado a 190ºC y esperando hasta que esté bien dorado. De vez en cuando lo untamos con aceite y le vamos dando la vuelta.
Segundo paso: Lavamos las patatas y las cocemos en agua con sal, hasta que estén tiernas. En ese momento las escurrimos y las pelamos. Preparamos la salsa: para ello rehogamos la cebolla picada en una sartén con aceite. Cuando esté transparente añadimos los cacahuetes tostados y molidos, el comino, la pimienta, la sal y la leche. Una vez que empiece a hervir, añadimos el cilantro. Cocemos, removiendo con frecuencia, durante unos 10 minutos y entonces retiramos del fuego.
Tercer paso: Emplatamos poniendo el pollo y echando por encima la salsa.
RECETA 258:
CONEJO A LA SIDRA Dificultad: Media. Ingredientes: Para 4 personas: – 1,5 kg. de conejo. – 2 vasos de sidra. – 100 g. de bacon en lonchas. – 100 g. de champiñones. – 4 escalonias. – 1 yema de huevo. – 1 vasito de calvados. – 1 cucharada de mostaza. – 6 cucharadas de nata. – Pimienta. – Aceite de oliva (1 cucharada). – Sal.
Primer paso: Lo primero será limpiar bien el conejo, retirando las vísceras y secándolo bien con papel absorbente. Lo partimos en trozos. Salpimentamos y dejamos macerando durante toda la noche con la sidra. Al día siguiente, lo sacamos de la maceración y reservamos el jugo obtenido. Cortamos los champiñones en rodajas finas y salteamos en una sartén con el resto de ingredientes, con las escalonias picadas y el bacon. Reservamos el sofrito obtenido. En esa misma sartén doramos el conejo, añadimos el vasito de calvados y dejamos que se evapore. Echamos la sidra antes reservada, llevamos a ebullición y tapamos. Dejamos cocer a fuego lento durante unos 30 minutos.
Segundo paso: Transcurrido este tiempo, echamos el sofrito antes preparado y dejamos al fuego durante otros 15 minutos más. Ponemos en una fuente los trozos de pollo, los champiñones, el bacon y las escalonias. Batimos la yema del huevo con la mostaza y la nata. Llevamos a ebullición el fondo de cocción hasta que espese y añadimos la mezcla del huevo.
Tercer paso: Dejamos que ligue todo a fuego lento, sin dejar que llegue a hervir. Removemos continuamente y salpimentamos a gusto. Echamos la mezcla obtenida sobre el conejo. Ya está listo para servir.