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SEGURIDAD

| Miércoles 5 de dicieMbre de 2012

SEGURIDAD Edición de hoy a cargo de Luis Moreiro | www.lanacion.com/seguridad

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Dos policías complicaron a Gustavo Juliá en el narcojet en barcelona. Los guardias civiles

dijeron que ese piloto “asumió la culpa” de la carga de droga que iba en el avión Viene de tapa

Los agentes también aseguraron que el empresario les indicó otros sectores donde estaba oculta la droga. “El señor Gustavo asumió la culpa”, dijo el oficial identificado como K44687Q. En ese momento, el empresario se quebró. El testigo K44687Q también recordó que cuando subió a la aeronave un perro para hacer la inspección los hermanos Juliá se pusieron nerviosos y que el copiloto (por Miret) tuvo una actitud distinta y hasta sintió curiosidad por el animal. Ante una pregunta del abogado defensor, Carlos Echavarri, el oficial volvió a explicar que en el momento del hallazgo de la droga Miret estuvo tranquilo y amable. El otro uniformado dijo que decidieron revisar el lujoso jet por el nerviosismo que tenían el piloto y el pasajero (por los Juliá). También afirmó que el empresario dijo que “la droga era suya y que los pilotos no sabían nada” y les señaló otros sectores donde buscar la cocaína. Al igual que su compañero, exculpó a Miret y sostuvo que cuando se descubrió la carga el copiloto preguntó si todo se trataba de “una cámara oculta o una broma”. Los oficiales explicaron que un día antes de que llegara el avión a Barcelona se habían enterado de que tenía una infracción aduanera en el aeropuerto de Málaga y que, por la ruta que había hecho el lujoso jet, se trataba de un vuelo de riesgo, pero que sospecharon más de un caso de tráfico de diamantes, por su escala en las islas de Cabo Verde, que de un contrabando de estupefacientes. Los testigos afirmaron que los Juliá presenciaron la requisa y el hallazgo de la droga (situación que negaron los tres detenidos). Los oficiales sostuvieron que la droga fue descubierta por el perro.

Antes de las palabras de los oficiales fue el turno de los acusados. La pequeña sala de audiencias estaba colmada para escuchar a los detenidos. La mayoría de las sillas fue ocupada por los familiares de Miret, que llegaron hace cinco días desde Buenos Aires. A diferencia de lo que sucede en la Argentina, en España los jueces, fiscales y abogados usan togas dentro de la sala de audiencias. Al primero de los detenidos que le sacaron las esposas para que comenzara a declarar fue a Gustavo Juliá, que comenzó por responder las preguntas del fiscal, David Benages. Vestido de pantalón azul y suéter negro, el empresario estuvo casi una hora de pie relatando su versión de los hechos. Contó lo que dijo en la instrucción, que fue contratado por un empresario español de nombre Gerardo Fernández para trasladar en su lujoso jet documentación bancaria, obras de arte y personas. Dijo que a pedido de su cliente se hicieron cambios en la aeronave y se pusieron dos sofás camas. Explicó que las modificaciones las llevaron adelante tres personas que contrató el empresario español. Se trata de una cuestión clave, porque gran parte de la droga fue hallada en dos falsos sofás camas. Durante su relato, Juliá dejó bien en claro que su hermano y Miret no tuvieron acceso al jet mientras estuvo en el aeródromo de Morón, donde se habría cargado la cocaína. “Ellos [el piloto y el copiloto] no tuvieron acceso al avión, yo controlé las modificaciones. Las llaves las tenía yo y las tres personas que hicieron los arreglos”, sostuvo el empresario. Aseguró que no estuvo presente cuando la Guardia Civil descubrió la droga y negó haber dicho que la droga era suya. “Nunca nombré la palabra droga.

De espaldas, Matías Miret y Gustavo Julia, vigilados por tres policías, frente a los jueces Sí expliqué que los pilotos no tenían absoluto conocimiento de nada, pero para referirme a que yo había hecho el contrato y las modificaciones y ellos hacían su labor”, afirmó el acusado. Después declaró Eduardo Juliá, que dijo ser inocente. Contó que su hermano lo contrató para hacer el vuelo a España y que la idea era continuar trabajando con el Bombardier Challenger 604 en 2011 durante la campaña presidencial, pero sin mencionar para qué candidato. Explicó que era imposible advertir la tonelada de droga. “El incremento de consumo de combustible con ese peso es insignificante”, afirmó el piloto. “Cuando vi que encontraron droga me quería morir”, concluyó, pero dijo que no vio la requisa. Por último declaró Miret, de 39 años. Utilizó su tiempo para explicar también que era inocente, que no tenía conocimiento de la carga oculta que llevaba el avión y afirmó que cuando los oficiales de la Guardia Civil descubrieron la cocaína, el empresario aeronáutico dijo: “Ellos [por el piloto y el copiloto] no saben nada, todo es mío”. Hoy seguirá la declaración de los testigos, y la jugada fuerte de los abogados de los Juliá, Lourdes Izquierdo Montijano, Carlos Broitman y Darío Kaen, es que pedirán la nulidad del juicio.ß

Para evitar una violación, matan a golpes al abusador

mar del plata. La víctima intentaba ultrajar a una nena de cinco

años; pacto de silencio entre los vecinos; no hay detenidos Darío Palavecino

CORRESPONSAL EN MAR DEL PLATA

MAR DEL PLATA.– Un motociclista que pasaba por el lugar fue el que dio la alarma. “En el campito tienen a la nieta del boliviano”, avisó a los gritos. Y los vecinos corrieron hacia el descampado, donde encontraron a la nena de 5 años ya desnuda, y a su lado, un hombre con los pantalones bajos y listo para abusar de ella. Sin margen para que atinara a alguna defensa, lo mataron a golpes. Cuando los policías llegaron al lugar encontraron a la menor llorando, ya en brazos de su familia, y sobre los pastizales el cadáver de quien fue identificado por la misma fuerza del orden como Roberto Andrés Romero, de 40 años y un reciente habitué del barrio Belisario Roldán. El mismo barrio de la afueras de Mar del Plata donde, anteanoche, encontró la muerte. Tenía el cráneo destrozado. Al fiscal Paulo Cubas, que se hizo cargo de la investigación, esos uniformados no pudieron entregarle y ni siquiera insinuarle algún responsable del crimen. En el vecindario se estableció una suerte de pacto de silencio para que no haya acusados en este literal caso de justicia por mano propia. “Va a ser una investigación difícil porque la colaboración de la gente es cero, nula”, reconoció el funcionario judicial al ser consultado por la nacion. Los médicos que asistieron a la víctima del abuso confirmaron que no fue penetrada, pero sí surge de los estudios médicos un indicio claro de que la violación estaba en vías de consumación. Cubas informó que los profesionales que

atendieron a la nena constataron lesiones en sus órganos sexuales. El intento de violación ocurrió a pocos metros de la intersección de Alvarado y 190, la esquina donde el abuelo de la niña tiene una despensa. Allí había estado Romero anteanoche, primero para comprar una cerveza y luego para consumirla en la vereda. Incluso dio charla en el comercio. “Preguntó un par de cosas y después se quedó tomando afuera”, contó Oscar, el responsable del local. Por lo que se supo de lo poco que hablaron los vecinos, era habitual que la pequeña estuviera jugando entre las estanterías y las heladeras del comercio de su abuelo. “Salía a la vereda y volvía a entrar, y por eso nadie se percató de su ausencia hasta que el motociclista llegó a los gritos pa-

Un antecedente en La Matanza ^b^b^ LA PLATA.– Lucas

Navarro tenía 15 años cuando lo lincharon, el 28 de marzo de 2010, luego de intentar robar un auto, en el barrio Los Pinos, partido de La Matanza. Un grupo de vecinos redujo al adolescente y lo mató a golpes. En uno de los canteros de la casa había un bulto que parecía una pistola 3.80; no era un arma, era una réplica. El caso fue elevado a juicio; los cinco acusados permanecen en libertad.

ra avisar que alguien la llevaba por la fuerza al campito”, dijo un antiguo morador de la zona que pidió no ser mencionado por su nombre y apellido. El campito en cuestión está a unos pocos metros del negocio del abuelo de la niña. “El tipo llevaba una cerveza en la mano y con la otra la tironeaba a la piba para que no se quede”, dijo el testigo a los investigadores. Los pocos vecinos que estaban allí corrieron hasta el descampado y, apenas rescataron a la nena, la emprendieron a los golpes contra Romero. La autopsia recién se realizará hoy por la mañana, pero los primeros indicios indican que el abusador fue asesinado a palazos y puntapiés. Del muerto se sabe que anteriormente vivía en el barrio Santa Rita y que por un problema de violencia familiar se había mudado hace tres meses al barrio donde encontró su trágico fin. Quienes lo conocían aseguran que había sido remisero o taxista y, en los últimos tiempos, changarín. El fiscal confirmó que sólo tiene antecedentes por un robo, lo que le valió 30 días de cárcel, pero nada relacionado con casos de abusos sexuales. Ayer, en el barrio y a pocas horas de acontecido el crimen, se advertía un clima de indignación por el intento de abuso, alivio porque no llegó a ser consumado plenamente y expresiones de conformidad por el final que tuvo. Lo dijeron dos mujeres, vecinas de la niña: “Lo mejor que hicieron fue matar a ese h... de p..., y si estábamos ahí, también le dábamos palos hasta limpiarlo”, coincidieron.ß

adrián quiroga

Los familiares de los acusados no cruzaron palabra dentro de la sala La esposa de Miret insultó a Gustavo Juliá cuando el empresario ingresó en el recinto BARCELONA (De un enviado especial).– La primera en llegar a los tribunales para presenciar la primera audiencia fue Amelia, la esposa de Gustavo Juliá. Pocos minutos después, en dos taxis, arribaron los familiares del copiloto, Matías Miret. Agustina Conil Paz de Miret y sus hijas Agustina, Martina, Milagros y Trinidad, de sólo seis meses, estaban acompañadas por su abuela paterna, Raquel Zavala, y una hermana de su padre. Se sentaron en un banco en la puerta de la sala de audiencias para esperar el inicio de la audiencia. La esposa de Juliá y Conil Paz quedaron a una distancia considerable. No se cruzaron palabra. La ansiedad y los nervios de los familiares era perceptible. Hubo un momento de tensión cuando subieron desde el subsuelo a los detenidos. Cuando Gustavo Juliá

en san isidro

estaba por ingresar en la sala de audiencias fue insultado. La mujer de Miret le gritó: “Hijo de puta”. Después, la tranquilidad llegó con el paso de las horas. Conil Paz no pudo ingresar en la sala donde se hacía el debate hasta que no declaró como testigo, sus dos hijas mayores sí y siguieron las alternativas del juicio con rigurosidad y atención. Amelia de Juliá se sentó al lado de los abogados Carlos Broitman y Darío Kaen. A las 13.20, cuando se levantó para declarar, Miret se sacó la campera. Momento que aprovechó para girar su cabeza y saludar con un beso a sus hijas. Tranquilidad Al término de la audiencia y después de la declaración de los dos oficiales de la Guardia Civil que favorecieron a Miret, sus familiares habían transformado la ansiedad en esperanza. Sintieron que la jornada fue una victoria de la posición de la defensa. “Fue una audiencia clave en todos los puntos. Estamos con mucha tranquilidad porque los testigos fueron muy contundentes en no

en santa fe

Abrió un local de pagos falso y estafó a más de 80 personas

Murió un matrimonio en un choque frontal

Un hombre que abrió un falso local de cobro de impuestos y servicios en Beccar, San Isidro, y engañó a más de 80 personas, fue detenido. Los investigadores de la Dirección Departamental de Investigaciones de San Isidro arrestaron al sujeto, de 41 años, en Rolón y Francia, de esa ciudad. El local fue inaugurado en junio en Guido al 2400 y los reclamos de los clientes comenzaron en noviembre, tras recibir intimaciones de las empresas por falta de pago. Pero el hombre se dio a la fuga.ß

SANTA FE.- Un matrimonio radicado en Rosario murió ayer en un choque frontal entre un camión y una camioneta, en el kilómetro 57 de la autopista Rosario-Santa Fe, en jurisdicción de Maciel, a 105 km al sur de esta capital. La pareja fue identificada como Elizabeth Alonso, de 49 años, y Santiago Lucas Pérez, de 55. Héctor Heredia, de 49 años, conductor del camión, sufrió la fractura del fémur de la pierna izquierda y fue trasladado hasta el hospital provincial Dr. José María Cullen, de esta ciudad.ß

Foto: marcelo manera

santa fe

Asaltaron en un banco y le robaron a una clienta SANTA FE.– La sucursal del Banco Credicoop de Pueblo Esther, departamento de Rosario, a 188 km al sur de esta capital, fue asaltada en la mañana de ayer por cuatro delincuentes que actuaron a cara descubierta. El hecho ocurrió a las 8 de ayer, a poco de que la entidad abriera sus puertas, a las 7. En primer término atacaron a una clienta, a quien le extrajeron 18 mil pesos que iba a depositar.

Luego, se dirigieron a la zona de cajas y tomaron el dinero que allí había (unos 50 mil pesos). El monto estaría lejos de las expectativas de los malvivientes, que diagramaron un operativo para obtener un cifra varias veces superior. Los delincuentes huyeron en un Citroën C3, el mismo vehículo en el que habían arribado al lugar, y la policía montó un operativo cerrojo para detenerlos, aunque hasta ayer no lo habían logrado.ß

vincular a Matías”, sostuvo a este enviado Conil Paz en la puerta de tribunales, un poco más aliviada. La esposa de Miret agregó: “Hay que esperar, pero todo se dio cómo esperábamos”. A pesar de que las palabras de la Guardia Civil podrían haber complicado a sus defendidos, el abogado Broitman se retiró de tribunales con tranquilidad. “Fue una jornada aceptable. El fiscal preguntaba y daba las respuestas él mismo. Los que estaban nerviosos no eran los hermanos Juliá, sino los oficiales de la Guardia Civil que ingresaron en el avión en forma ilegítima”, afirmó a la nacion el abogado Broitman. La defensa de los Juliá intentará probar que los oficiales de la Guardias Civil requisaron el avión sin ninguna orden que los habilitara, que ninguno de los acusados observó el momento que fue hallada la droga y que no fue el perro quien descubrió la carga oculta. Todos motivos que fundamentan la tranquilidad de Broitman. El juicio continuará hoy con la declaración de otros testigos.ß

“Acá no se investigó nada”, dijo Temes Coto manzanas blancas. El

acusado apuntó contra un juez y un fiscal

Valentín Temes Coto, el empresario español acusado en el caso “Manzanas Blancas”, por el que se secuestraron 3347 kg de cocaína, cargó ayer contra el juez de instrucción Jorge Brugo y el fiscal Emilio Guerberoff. “Aquí no se investigó nada, porque si no, hoy sabríamos la verdad”, lanzó ayer el imputado por “contrabando agravado”, en la segunda jornada de declaración en el juicio que se le sigue en el Tribunal Oral en lo Penal y Económico (TOPE) N° 3. “Se hizo todo en base a un informe de la policía de España que es un invento”, dijo el acusado, y aprovechó para leer la declaración del agente español a cargo de la investigación. De paso, intentó poner de manifiesto varias contradicciones que, obviamente, lo beneficiarían. “Sobre ese informe se montó toda la causa. ¿Qué va a pasar cuanto esto se caiga en España?”, se preguntó. Además, reclamó que no se investigó a un “canadiense”, identificado como “Jacques Joubert”, que meses antes de que se descubriera el cargamento con droga compraba empaques al doble de precio de lo que valían en el mercado. “En una investigación privada que encargué, se descubrió que esta persona vivía en Paraguay, que tenía doble identidad”, dijo Temes Coto, quien también deslizó que Joubert no sería canadiense, sino sudafricano. “El cargamento de manzanas que fue descubierto con droga era uno que Nelson [por Hinricksen, otro de los imputados] había preparado para Joubert. Pero como éste no lo pagó, la carga se vendió a España”, deslizó Temes Coto. ß Mariano Gaik Aldrovandi