Cita con la música Jorge Drexler enamoró con sus canciones en Canal Encuentro El cantante uruguayo asistió al primer programa de la 7ma temporada del aclamado ciclo de conciertos y entrevistas que conduce Lalo Mir y que es auspiciado por el Ministerio de Educación.

Como cada año, se dio inicio a las nuevas emisiones de “Encuentro en el Estudio” por Canal Encuentro, ciclo conducido por el locutor Lalo Mir, y que tuvo la gran participación del premiado compositor Jorge Drexler en un recorrido completo por sus vivencias, su música y su pasión por la escritura y medicina. Cada emisión del ciclo a lo largo de los últimos años, ha reunido a artistas de la talla de Rubén Rada, Gustavo Santaolalla, Lisandro Aristimuño, Kevin Johansen, mostrando facetas de la música nacional y ribereña; como también exponentes del Rock, abarcando así un abánico de estilos completo, como Rata Blanca, Pedro Aznar, Fito Páez, y Divididos, entre otros. Entre susurros suaves de Lalo Mir, Jorge Drexler entremezcló recuerdos y relatos profundos de su vocación por el Arte. Drexler recordó que los estudios son una especie de templo para un no creyente como él. Asimismo compartió que sentarse ahí es como ir a un lugar donde reverberan muchos discos e influencias que lo formaron y que cambiaron su vida. “Parte del sonido de esta habitación esta en mi ADN grabado”, dijó el cantante y comenzó a entonar las primeras notas de “Nada se pierde, todo se transforma” en un vaivén mágico de músicos y sonidos que continuaron toda la hora. Y escuchando su música se entiende al hombre que creció rodeado de sonidos desde Monteverdi a los Beatles, legado de su padre, y el inmenso folklore uruguayo de Citarrosa, Biglieti, y José Luis Mareños que su madre le regaló. Exaltado, Jorge Drexler expresó: “Volví a casa en estado de epifanía”, en referencia a su primera visita al cine viendo “Help” de los Beatles y a su gran despertar musical. El cantante comenzó a tocar el piano a sus jóvenes cinco años, y mientras que intercaló periodos con la música y el aprendizaje de guitarra clásica, también comenzó su pasión por la escritura la cual duró años. Lalo Mir acompaña a cada uno de sus invitados por un recorrido tranquilo, profundo, y de intensas revelaciones que reconfortan el alma del principio hasta el final. Dijo Drexler: “A los 29 años me ganaba la vida con la medicina, me pagué dos discos haciendo guardias de 24 horas”. Luego agregó: “Soy una persona muy lenta en mis procesos personales, empecé a vivir de la música a los 30 años”, y finalmente sonrió, agradecido.