Exterior

Martes 30 de enero de 2007

LA NACION/Página 3

Claves americanas

La guerra que no termina

La política y el factor humano

AP

En medio de una tormenta de arena, los soldados iraquíes se preparan para renovar su ofensiva contra insurgentes en las afueras de Najaf

Bush sube el tono de sus advertencias a Teherán Dijo que responderá “con firmeza” a los intentos de Irán por influir en Irak Por Hugo Alconada Mon Corresponsal en EE.UU. WASHINGTON.– A pesar de su debilidad política y de los aprietos con que lidia el Pentágono, el presidente George W. Bush subió ayer el tono de sus advertencias a Teherán. Dijo que Estados Unidos responderá “con firmeza” si continúa expandiendo su influencia sobre su caótico vecino, Irak, y alimentó así el temor de que la escalada pública entre ambos países derive en un enfrentamiento militar. “Si Irán aumenta sus acciones militares en Irak en detrimento de nuestras tropas o de iraquíes inocentes, responderemos con firmeza”, dijo Bush, durante una entrevista con la Radio Pública Nacional, aunque evitó precisar por qué vías –diplomáticas, económicas o militares– podría autorizar la represalia. Bush descartó, no obstante, una invasión (“no tengo intención de ir a Irán”, comentó), aunque tam-

bién insistió en su advertencia: “Si hallamos que los iraníes movilizan armas que terminan hiriendo a tropas norteamericanas, nos encargaremos de eso”. La advertencia contra Irán, que junto con Irak y Corea del Norte conformó el controvertido “eje del mal” que trazó Bush en 2002, aumentó aún más la tensión en Medio Oriente, zona a la que el Pentágono envió otros dos portaaviones con sus respectivas flotas, hace unas semanas. La Casa Blanca acusa a Teherán de apoyar el terrorismo en Irak, al entrenar, armar y dar refugio a los insurgentes. Ayer, el vocero del Consejo de Seguridad Nacional, Gordon Johndroe, renovó esas acusaciones. “Irán juega un rol destructivo en los asuntos de Irak”, dijo. Ambos gobiernos protagonizan desde hace años una polémica pública sobre el programa iraní de enriquecimiento de uranio. Washington sostiene que el gobierno de Mahmoud Ahmadinejad quiere construir armas nucleares, mientras que desde Teherán replican que sólo

alientan objetivos pacíficos. La tensión bilateral alcanzó, sin embargo, niveles de tensión aún más elevados en las últimas semanas. Soldados norteamericanos allanaron supuestas oficinas “de enlace” iraníes en Irak, según Washington, o “diplomáticas”, según Teherán, y detuvieron a sus funcionarios. La semana pasada, además, el flamante secretario de Defensa, Robert Gates, confirmó que sus tropas recibieron la autorización para matar agentes iraníes. Hasta ahora, los militares tenían orden, como máximo, de detener a los iraníes e identificarlos, para luego liberarlos. Pero a pesar de las advertencias, Teherán continuará con sus planes de “seguridad” y “reconstrucción” en Irak, según adelantó el embajador iraní en Estados Unidos, Hassan Kazemi Qumi, en una entrevista con The New York Times. “Tenemos experiencia en la reconstrucción después de una guerra y estamos listos para transmitirla a los iraquíes”, dijo, en alusión a la guerra que su país man-

Revelan un informe de inteligencia

Inquieta a Brasil la presencia militar de EE.UU. en la región Sugiere que es posible una futura invasión del Amazonas Por Carlos Turdera Para LA NACION SAN PABLO.– Las fuerzas armadas y la inteligencia brasileña creen que el Amazonas puede convertirse en una zona de conflictos bélicos próximamente, según reveló el diario Jornal do Brasil, de Río de Janeiro. Reivindicaciones indígenas, ONG controladas por extranjeros y la creciente influencia de Estados Unidos sobre países cercanos al Amazonas “ponen en riesgo la seguridad nacional”, afirma el documento citado por el diario y atribuido al Grupo de Trabajo del Amazonas (GTAM), equipo compuesto por representantes de la Agencia Brasileña de Inteligencia y de los órganos de seguridad. “Un elemento relativamente nuevo en materia de seguridad en la región amazónica brasileña es la creciente presencia de asesores militares norteamericanos y la venta de equipamientos sofisticados a las fuerzas armadas colombianas, supuestamente para apoyar los programas de erradicación de drogas, pero que pueden ser utilizados en el combate a las FARC [Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia] y al ELN [Ejército de Liberación Nacional]”, apunta el informe. Específicamente sobre un riesgo de invasión militar en la región, los autores del informe señalan que la presencia de tropas norteamericanas, que ya se constata en Guyana, Ecuador, Perú, Bolivia y recientemente Paraguay, “podrá expandirse a otros países sudamericanos para transformar la lucha contra las drogas (y contra las FARC y el ELN) en una embestida militar no sólo colombiano-norteamericana. El plan probablemente es parte de la estrategia de Estados Unidos para asegurar su presencia militar en la región andino-amazónica y en el Cono Sur, alrededor de Brasil”. Para hacer frente a esos supuestos planes de invasión, Brasil contaría con fuerzas armadas especialmente entrenadas. “Hace 10 años que se desarrolla en el Amazonas la Estrategia de la Resistencia, que se basa en una guerra irregular en medio de la selva, fundada en una hipótesis de conflicto de invasión de alguna potencia, que nunca es descartada”, explicó el

ARCHIVO / AFP

Un helicóptero sobrevuela una región de la selva amazónica

coronel retirado del ejército brasileño Geraldo Cavagnari, profesor de la Universidad de Campinas. El coronel sostuvo que sólo Estados Unidos tiene capacidad para invadir el Amazonas brasileño. “Sin embargo, ocuparla es muy difícil. Ellos no tienen capacidad para ocupar. Las fuerzas armadas de Brasil están bien estructuradas en el Amazonas”, apuntó el experto en estrategia.

Espionaje La cuestión indígena y la acción de organizaciones no gubernamentales extranjeras también fueron ejes de la advertencia que, a través del organismo de inteligencia, encuentra como destinatario directo al propio presidente Luiz Inacio Lula da Silva. Según el reporte, se realizarían actividades de espionaje en esa vasta zona de casi 8 millones de kilómetros cuadrados que linda con Colombia, Venezuela, Perú y Bolivia. “Especial preocupación es el número de extranjeros [en la zona]”, dice el informe. El impacto del texto era analizado ayer en ámbitos legislativos brasileños, principalmente en lo que se refiere a la cuestión de seguridad. “Ahora le toca al Congreso exigir

una política eficaz en la defensa del Amazonas. Es evidente que el Poder Ejecutivo ya está al tanto de los riesgos de desnacionalización del área”, dijo a LA NACION Tales Farias, autor del artículo que reveló el informe de la inteligencia brasileña sobre la “amenazante” presencia de tropas norteamericanas en la región. “La bancada del Amazonas deberá dar ahora una respuesta [al informe], pues el Ejecutivo ya tiene toda la información necesaria para actuar y aún no ha hecho nada significativo”, dijo otra fuente que entiende en temas amazónicos de la cámara en Brasilia. El titular de la Comisión de Medio Ambiente de la Asamblea Legislativa, diputado Sebastião Almeida, dijo a LA NACION estar “asustado” con la revelación del informe, en particular en lo que atañe a organizaciones no gubernamentales. “Es evidente que falta una mayor fiscalización”, afirmó. “El Amazonas es el mayor laboratorio natural del mundo, y en ese sentido debe ser preservado de los intereses comerciales que están por detrás de acciones como las denunciadas por el informe”, añadió el legislador.

tuvo contra Irak durante los 80. La ayuda incluiría desde la apertura de una sucursal del Banco Nacional de Irán en Bagdad hasta el envío de entrenadores para capacitar a las fuerzas armadas iraquíes. La administración de Bush reaccionó primero con cautela, pero luego renovó sus críticas. El vocero del Departamento de Estado, Sean McCormack, dijo ayer que existen muchas pruebas que vinculan a Irán con los ataques sectarios dentro de Irak. Pero los círculos de poder de esta capital se preguntan hasta dónde podría llegar esta escalada, según expuso el director de Seguridad Internacional de la prestigiosa Corporación Rand y ex funcionario del gobierno de Bush, James Dobbin. “Hay un peligro creciente de que la actual confrontación pueda aumentar de una retórica áspera y sanciones económicas a la acción militar.” Entretanto, en Irak, ayer continuó la ofensiva de las fuerzas locales contra grupos chiitas en Najaf, que ya habría dejado 300 muertos.

MIAMI.– La noticia de que el ex hombre fuerte de Panamá Manuel Noriega será liberado de su prisión en Miami en septiembre me recordó una de las lecciones periodísticas más importantes que aprendí cuando cubría sus últimos años en el poder, a fines de los ochenta: al analizar hechos políticos, Por Andrés nunca hay que Oppenheimer olvidar el factor humano. Cuando comentamos las noticias mundiales –ya sea los discursos del presidente George W. Bush sobre Irak o las arengas del presidente de Venezuela–, tendemos a reducir todo a enfrentamientos ideológicos. Sin embargo, a menudo los acontecimientos se desencadenan por motivos que tienen poco que ver con la política. Es el factor humano. Los eventos que llevaron al ocaso de Noriega y la invasión de Panamá por Estados Unidos, en 1989, son un buen ejemplo. Estos se dispararon por las revelaciones místicas del entonces oficial número dos en las Fuerzas de Defensa de Panamá, el coronel Roberto Díaz Herrera, quien era seguidor del gurú hindú Sai Baba. Díaz Herrera, ahora embajador en Perú, me contó los entretelones de su rebelión contra Noriega en una entrevista que le hice en su exilio en Venezuela, en 1989. El se había distanciado de Noriega en 1985, cuando se esparció la sospecha de que el entonces presidente había ordenado el asesinato de Hugo Spadafora, un ex guerrillero que lo había acusado de narcotraficante. También estaba frustrado por no haber sido promovido al puesto de Noriega. Había sido el alumno más brillante en la escuela militar a la que ambos habían asistido en Perú y era reconocido como más sofisticado que Noriega. Pero fueron el Sai Baba y sus yoguis quienes le dieron el empujón final para que convocara a su famosa conferencia de prensa, en 1987, en la que denunció la corrupción y los abusos de los derechos humanos de su jefe. Sus declaraciones provocaron

una avalancha de protestas e hicieron que Estados Unidos investigara a fondo las relaciones de Noriega con el narcotráfico. Díaz Herrera comenzó a interesarse por el gurú hindú durante un viaje a Buenos Aires, en 1986, cuando el cantante Piero le presentó a su líder espiritual, una yogui argentina, nacida en Rusia, de 87 años, llamada Indra Devi. Devi lo dejó pasmado con su sabiduría y con sus relatos sobre Sai Baba. Devi, a su vez, le presentó a una vidente californiana llamada Shama Calhoum. De regreso en Panamá, Díaz Herrera invitó a Devi y a Calhoum, con todos los gastos pagos por las fuerzas armadas. En uno de estos viajes, Calhoum le dijo: “Tienes una misión por delante. Hay una causa muy importante que está esperando tu ayuda”.

Visión mística Noriega, cuyos servicios secretos estaban espiando a Díaz Herrera, hizo traer a su propio asesor espiritual –un astrólogo brasileño– para enfrentarlo. Pero no pudo evitar que el 6 de junio de 1987 Díaz Herrera hiciera sus denuncias. La semana pasada llamé a Díaz Herrera. No había hablado con él en casi dos décadas. Me dio la impresión de que se había distanciado un tanto de Sai Baba, aunque afirmó que estaba interesado en las religiones orientales. Y también me sugirió que quizás había usado “un poco de guerra psicológica esotérica” en su campaña contra Noriega. Sin embargo, admitió que lo que lo había terminado de impulsar a enfrentarse a Noriega había sido “una conmoción espiritual” influenciada por sus yoguis. Y agregó que no se arrepentía de ello, “aunque muchas personas pensaron que estaba loco”. Mi opinión: aunque soy escéptico sobre los gurúes que hacen magia, creo que el mundo estaría mejor si más funcionarios experimentaran “conmociones espirituales”. En cuanto a las lecciones de esta historia, me pregunto cuántas de las noticias actuales, desde la decisión de Bush de invadir Irak hasta los diálogos públicos de Chávez con el retrato de Bolívar, están influenciadas por visiones místicas. Lo único que puedo hacer es repetirme: “No te olvides del factor humano”.