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INFORMACION GENERAL

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Viernes 7 de mayo de 2010

EL ASALTO AL BANCO RIO DE ACASSUSO s COMO SIGUEN LA CAUSA PENAL Y LA INVESTIGACION

Van tras más ladrones del robo del siglo Con las condenas contra cuatro sospechosos, los fiscales buscan detener y juzgar al resto de la banda; hay un abogado en la mira #14) 1/ )1 1 )1)/);11));1/6)/1)7 6.6),:&)1) ) 1):),,: , 1) , 1,)1:). 16/)/1)*).,7,)/1)14 6/,/))1),/1,)/1)%#)*2);6::1

 

  

 
   

   

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A partir de las condenas a cuatro sospechosos que fueron considerados responsables de asaltar la sucursal Acassuso del Banco Río y de robar 19 millones de dólares de 135 cajas de seguridad, los investigadores del denominado “robo del siglo” intentarán apresar y someter a juicio al resto de la banda. Ayer, el Tribunal Oral Criminal N° 1 de San Isidro consideró que Raúl Alberto de la Torre, Julián Zalloecheverría, Fernando Araujo y Sebastián García Bolster formaban parte del grupo que, el 13 de enero de 2006, irrumpió en la entidad situada en Perú y Avenida del Libertador, tomó a 23 clientes y empleados como rehenes y después de seis horas huyó con el millonario botín, luego de burlar a los 200 policías que rodeaban la sucursal. Pero para el equipo de fiscales integrado por el fiscal general de San Isidro, Julio Novo; Eduardo Vaiani, y Gastón Garbus, los cuatro sospechosos condenados ayer, luego de una sesión que duró más de 20 horas (ver nota aparte), no fueron los únicos miembros de la banda que concretó el cinematográfico asalto. Según explicaron los fiscales en los alegatos, “el gran ausente” en el juicio que terminó ayer fue Luis Mario Vitette Sellanes, alias “El Uruguayo” o “Marito”. Actualmente, Vitette está detenido y será sometido a juicio oral a fin de año. En este caso, el debate estará a cargo del Tribunal Oral N° 6, de San Isidro. Según los fiscales, Vitette fue el sospechoso que comandó el robo dentro de la entidad. Fue señalado por los testigos como “el hombre del traje gris”, en referencia a la filmación de las cámaras de seguridad del banco. Vitette eludió la condena que ayer recibieron sus cómplices porque logró dilatar el proceso con distintas apelaciones. Mientras gozaba de la excarcelación que le concedió el juez de Garantías de San Isidro, Rafael Sal Lari, Vitette fue apresado cerca de la esquina de Figueroa Alcorta y Tagle cuando intentaba robar en un lujoso edificio. Durante el juicio, nadie pudo explicar qué había en ese edificio que pudiera interesar tanto al sospechoso


       

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LA NACION

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de haber participado en el millonario asalto contra el Banco Río. En el debate, los testigos identificaron a por lo menos tres de los cinco ladrones que entraron en la entidad de Acassuso y simularon una toma de rehenes para ganar tiempo y así poder terminar el boquete que les permitiría llegar desde el subsuelo del banco hasta el túnel del desagüe pluvial. Los testigos señalaron a De la Torre y Araujo, mientras que Vitette fue identificado en la etapa de la investigación.

HOMICIDIOS Y ATAQUES SEXUALES

Según los responsables de la pesquisa, otro de los sospechosos que entraron en el banco fue un abogado que estudió Derecho en el Centro de Estudios Universitarios que funciona en el penal de Villa Devoto y habría sido el encargado de reclutar a los miembros de la banda. Pocos días después del asalto, luego de revisar las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de la entidad, los fiscales pidieron al juez Sal Lari la captura de este abogado, pero el magistrado no hizo lugar al pedido.

La captura de este imputado fue solicitada nuevamente en otra etapa de la investigación, a partir del peritaje atropométrico que comparó los rasgos fisonómicos del ladrón que aparece en el video con la foto del abogado sospechoso y que figura en el legajo 25 de la causa. Pero el pedido de detención fue rechazado otra vez. El quinto hombre que entró en el banco nunca fue identificado y está prófugo, mientras que García Bolster se encargó de esperar a sus cómplices en el túnel, donde construyó un precario dique que otorgó

la flotabilidad necesaria para que el voluminoso botín pudiera ser trasladado en botes de goma hasta la alcantarilla situada en la esquina de Libertad y Tres Sargentos, a 20 cuadras del banco. Allí, Zalloecheverría esperó a sus seis cómplices, que lograron huir del banco y pasar debajo de los 200 policías que rodeaban la entidad con un botín que, según los reclamos de los 135 damnificados, fue de 19 millones de dólares entre efectivo y joyas. El monto de las penas, en tanto, se conocerá el 21 de este mes.

INSEGURIDAD EN TIERRA DEL FUEGO

Es una historia de rituales con descuartizamientos, decapitaciones y delitos sexuales. El protagonista fue detenido ayer en una casa situada en las islas del delta del Paraná. Se trata de un pai umbanda, acusado de matar a dos mujeres, de violar a una nena de nueve años y sospechoso de apoderarse de los bienes de un jubilado de nacionalidad alemana. La investigación comenzó el 23 de junio de 2008, cuando vecinos de la zona del arroyo Abra Vieja, en el delta de Tigre, descubrieron, a la altura del muelle 365, una pantorrilla seccionada que flotaba en las aguas. Los investigadores de la Subdelegación Departamental de Investigaciones de Tigre, que se hicieron cargo de la causa, relacionaron el hallazgo con una denuncia de paradero radicada por el pai umbanda Jorge Lumbrano, de 48 años. Veinte días antes, Lumbrano había denunciado que su esposa, María Teresa Colombo van Rensburg, veterinaria de profesión y de 72 años, había desaparecido sin dejar rastros. Los investigadores se pusieron en contacto con los hijos de la veterinaria. Uno de ellos, que vive en los Estados Unidos y trabajaba en el Departamento de Estado de ese

país, afirmó que su madre le tenía terror a Lumbrano. La mujer le había puesto a su nombre una casa en San Fernando, tres hectáreas en San Martín de los Andes y un auto. “Análisis genéticos determinaron que la pantorilla pertenecía a la veterinaria. En ese momento se comenzó a investigar al marido”, afirmó a LA NACION un jefe policial. Los investigadores determinaron que, dos años antes, el sospechoso había estado en pareja con Diana Puebla, quien habría sido asesinada en medio de un ritual umbanda. La mujer fue descuartizada y su cabeza habría sido “pescada” en el río Luján. “El sospechoso habría adoptado a un hija de Puebla, de nueve años. Pero cuando se fue a vivir con Colombo van Rensburg la dejó al cuidado de otra ex pareja. Está mujer denunció que la menor fue violada por el padre adoptivo, según las palabras de la niña”, agregó la fuente consultada. Detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro, al mando del comisario inspector Marcelo Peña, investigan si el sospechoso está relacionado con otros dos asesinatos, entre ellos la de un jubilado de ciudadanía alemana, vecino del pai, quien “heredó” todas sus propiedades, según dijeron fuentes del caso.

Mató a su mujer y a su hijo, y se suicidó LA PLATA.– “Estaremos siempre juntos.” Así se despidió por escrito un paraguayo, luego de matar a su mujer, embarazada de dos meses, y a su hijo de 3 años. Luego se ahorcó, en su casa de Villa Ponzatti, en La Plata. El hombre tomó la trágica decisión tras haber descubierto una relación extramatrimonial de su esposa. Alertado por un vecino, personal de la DDI platense llegó hasta la finca de 661, entre 126 y 127, y, antes de ingresar, advirtió, por una de las ventanas de la casilla de madera, que colgaba el cuerpo de una mujer. Adentro hallaron los cadáveres de Rony Meza, de 30 años; de su esposa, Lorena Cáceres, de 24, y del hijo de ambos.

El juicio oral por el denominado robo del siglo terminó con una audiencia que duró más de 20 horas. Si bien no es común que un encuentro de ese tipo se extienda durante tanto tiempo, el planteo realizado por los fiscales provocó que el tribunal, integrado por los jueces María Elena Márquez, Alberto Ortolani y Gonzalo Aquino, tuviera que dictar un veredicto condenatorio o absolutorio luego de escuchar los alegatos de los representantes del Ministerio Público y de los abogados defensores de los cuatro imputados. Ninguno de los cuatro acusados llegó al debate detenido en un penal con prisión preventiva, debido a que el juez de Garantías de San Isidro Rafael Sal Lari les concedió distintos beneficios, como la excarcelación, la prisión domiciliaria con vigilancia policial o la tobillera magnética. En sus alegatos, los fiscales Eduardo Vaiani y Gastón Garbus pidieron que los imputados fueran condenados a penas de entre 15 y 20 años de cárcel y que se adelantara el veredicto. Ese planteo se fundó en la necesidad de solicitar las detenciones debido a que existía riesgo de fuga de los acusados frente al probable panorama de que recibieran duras condenas. Los sospechosos llegaron al juicio acusados de “robo calificado por el uso de arma cuya aptitud para el disparo no fue acreditada”, cuya pena máxima es de 10 años. Pero, durante el debate, los fiscales pidieron que se los juzgara por “robo calificado por el uso de arma apta para disparar”, donde la pena máxima se duplica. El 21 de este mes, a las 11, el tribunal resolverá por cuál de las dos calificaciones corresponde condenarlos.

Identifican a agresores de un joven

Fue detenido en una isla de Tigre; sospechan que mató a su esposa y a una ex pareja LA NACION

Los fiscales habían pedido detenciones

HERIDO EN CONGRESO

Apresan a un pai acusado de asesino y violador GABRIEL DI NICOLA

Una audiencia de 20 horas por temor a las fugas

GENTILEZA LA VOZ FUEGUINA

Los vecinos se concentraron frente a la gobernación para exigir medidas de prevención

Masivo reclamo en Ushuaia por el homicidio de un taxista Hubo cese de actividades y 4000 vecinos se manifestaron en las calles El asesinato de un taxista, degollado anteayer en Ushuaia en un intento de robo cuando conducía su vehículo, motivó la reacción de los colegas y familiares de la víctima, primero, y de decenas de miles de vecinos, después, lo que hizo que la actividad de la capital de Tierra del Fuego quedara virtualmente paralizada por los reclamos generalizados de mayor prevención y seguridad. Hubo ayer cortes de calles y piquetes espontáneos en distintos puntos de la ciudad que, al cierre de esta edición, proseguían, según el diario local por Internet Sur 54. Ese mismo medio alertaba anoche que vecinos de Río Grande proponían una movilización en la rotonda de la Plaza de las Américas. Ayer, aproximadamente 4000 personas se manifestaron frente a la sede del Poder Ejecutivo de la provincia para reclamar el esclarecimiento del homicidio del chofer Antonio Toledo, de 64 años, y para exigir medidas que refuercen la seguridad pública. Al cese de actividades de los taxistas, a partir de la muerte de su compañero, se sumaron los

colectiveros, que suspendieron el servicio en solidaridad con sus colegas de transporte. Además, muchos comercios no abrieron sus puertas, según informó la agencia Télam. La gobernadora fueguina, Fabiana Ríos, que decretó asueto administrativo, jornada de duelo y suspensión de clases, se reunió con representantes del sindicato de taxistas y se comprometió a reforzar la seguridad en las calles, para lo cual ordenó liberar a policías adscriptos a tareas de oficina para destinarlos al patrullaje preventivo, según se informó oficialmente.

El ataque El hecho que motivó la reacción de los fueguinos ocurrió el martes pasado, a las 22.30, en la ruta nacional 3, cuando Toledo llevaba en su taxi Renault Logan a un presunto pasajero que había solicitado un viaje hacia las afueras de esta ciudad. El comisario mayor Roberto Osmar Vélez, subjefe de la policía fueguina, dijo a Télam que Toledo fue amenazado con un arma blanca, pero que se resistió al robo y se trabó en lucha con el delincuente.

“Se ve que resistió lo más que pudo, tanto dentro como fuera del vehículo. La herida principal es un profundo corte en el cuello, por donde perdió mucha sangre, pero también tiene heridas punzantes en todo el cuerpo”, describió Vélez. Si bien el delincuente huyó tras atacar al taxista sin robar nada, el comisario Vélez explicó que la principal hipótesis que se maneja es la de un crimen vinculado a un asalto. Toledo fue trasladado de inmediato al hospital local, donde murió anteayer, a las 19. Entonces, más de 3000 personas acompañaron a los taxistas en una movilización por el centro de la ciudad y se manifestaron frente a la Casa de Gobierno, donde pidieron “justicia y seguridad” y la renuncia del secretario de Gobierno provincial, Guillermo Aramburu. El intendente de Ushuaia, Federico Sciurano, dijo a Télam que “la movilización popular espontánea” había sido “ inédita en la ciudad, en relación con un hecho de inseguridad”, y explicó que responde a “un proceso en el que fueron en aumento los hechos violentos en ocasión de robo”.

Mientras el joven estudiante de Derecho baleado de siete tiros a dos cuadras del Congreso se recupera, los investigadores del hecho tendrían identificada a la pareja que protagonizó el ataque. Fuentes de la investigación también confiaron a LA NACION que continúa internado en el Sanatorio de la Trinidad-Mitre el joven Leonardo Glantt, de 26 años, estudiante de cuarto año de la Universidad Kennedy, quien evoluciona favorablemente de las heridas de bala sufridas. “El que disparó fue el joven. La muchacha que estaba con él es su cómplice. Ambos ya están identificados. Sólo falta confirmar unas pruebas para que se pueda ordenar la detención”, sostuvo una fuente del caso. Glantt, cabe recordar, fue atacado a balazos el sábado pasado a la madrugada en Montevideo y Rivadavia, cuando esperaba un taxi, junto con dos compañeros universitarios. “Fue todo muy rápido. Se les acercó una parejita, el pibe disparó nueve tiros y se fueron corriendo”, dijo Guillermo, el empleado de una heladería que fue testigo de los hechos. La hipótesis principal de los investigadores es que se trató de un intento de robo. Se supone que el atacante habría sufrido una crisis producto de estar bajo los efectos de alcohol o drogas, por lo que disparó nueve tiros, siete de los cuales hirieron al estudiante. Ayer, en la puerta del sanatorio, una joven leyó una carta hecha por los familiares y amigos del joven herido, en la que se sostuvo que el estudiante recibió siete impactos de bala sin motivo alguno y que tienen fe en que se hará justicia. En la carta se sostuvo que el estado de salud de Glantt “es estable y que está peleando para salir adelante hora a hora”. Se agradeció a la Policía Federal, al SAME y a los médicos del hospital Ramos Mejía y del sanatorio de la Trinidad-Mitre. En la red social Facebook se armó un grupo para pedir justicia.