Relatos de un hombre apasionado por lo rural

18 jun. 2011 - cencerro que atesoro era el de San- tos Vega. Con sorpresa recibimos la noticia de su partida a galopar otras inmensidades en enero pasado.
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Campo

Página 12/Sección 5/LA NACION

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Evolución del tiempo para el agro RINCON GAUCHO

Comparación de índices verdes

Por Roberto L. Elissalde Para LA NACION

Sin precipitación mm

Precipitación acumulada

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Sábado 18 de junio de 2011

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Representa la cantidad y el vigor de la vegetación (actividad fotosintética) -0.1 -0.05 0 0.04 0.14 0.24 0.34 0.44 0.54 0.64 0.74 1 Agua Nubes Vegetación débil y escasa Vegetación densa y vigorosa Nieve

PROMEDIO JUNIO 1961-1990 (normal)

Relatos de un hombre apasionado por lo rural

7 AL 16 DE JUNIO

2011

En El campo que yo viví, Jorge Raúl Cúneo describe las vivencias de sus años como mayordomo de estancias on Jorge Raúl Cúneo fue uno de los más típicos exponentes del señorío criollo. No tuvimos el gusto de vernos personalmente, pero su amigo Angel Manuel de Estrada fue el chasqui que nos mantuvo en contacto, por certificarme que el cencerro que atesoro era el de Santos Vega. Con sorpresa recibimos la noticia de su partida a galopar otras inmensidades en enero pasado. Su pasión y amor por el campo lo llevaron a recorrer los más distintos puntos del nuestro país como mayordomo de importantes establecimientos. Cuando se retiró de la vida activa volcó el descanso en fecundo trabajo a través de su pasión la doma familiar, con la Escuela de Amanse Manuel Giles, en su establecimiento de campo Los Santos Inocentes, en Mar Chiquita. Allí alcanzó el justo reconocimiento como lo señaló LA NACION en éste suplemento el 21 de enero de 2006, porque enseñó a “domar potros combinando las viejas técnicas indígenas con las europeas”. Don Jorge había publicado en 1974 su primer libro, Doma de caballos, pero las experiencias de una vida de trabajo y sus numerosas vivencias contadas con sencillez no exenta de elegancia impulsaron a Angel de Estrada a pedirle las pusiera en el papel. Después de no poca insistencia, se logró el cometido con 25 historias, que a pesar de no haberlas visto impresas su autor, su amigo logró compilar para cumplir “con la palabra”, como relató emocionado en la presentación del libro en el Pabellón de las Bellas Artes de la Universidad Católica Argentina, en el marco de la exposición

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del arquitecto Carlos Moreno. Instalados con mesas y sillas, como simulando una vieja pulpería, Diego Peralta Ramos presentó El campo que yo viví de Jorge Raúl Cúneo. Como bien apuntó en el penúltimo relato: Mi vida siempre fue dura, fechado en enero de 2008, el autor afirma que siempre omitió fechas porque lo suyo no era el deseo de hacer historia, sino anotar los recuerdos, personajes y episodios. Y justifica ese título, porque “siempre dije la verdad y anduve con vueltas para decirla y eso tal vez la endureció más”. Su sentido de la responsabilidad comenzó a los 15 o 16 años en el campo familiar Santa Silvina, cerca de Pilar, una cabaña de Holando Argentino y de Corriedale. Más tarde pasó al establecimiento de don Adolfo Erdman del Carril, en Salvador María, cerca de Lobos. De allí pasó a la estancia La Luisa, de doña María Luisa Saavedra Zelaya de Carreras. Pasó también como mayordomo a los esteros del Iberá, en el establecimiento Curuzú Laurel, de doña Irma Frieboes de Bencich, donde afirma “sentí por primera vez que estaba en el lugar y en la estancia que inconscientemente había buscado toda la vida”. A través de sus relatos, Cúneo nos describe gauchos, indios, policías y peones sin dejar de narrar con emoción el recuerdo del nacimiento de su hija Manuela, ni de reconocer la calidad de la mujer de campo cuando evoca a la suya, Silvina de Estrada. Bienvenido este libro, infaltable en cualquier biblioteca de quienes sienten amor por las tradiciones de nuestra tierra.

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PROMEDIO JUNIO 1961-1990 (normal)

Para la última imagen, no se ha podido medir correctamente el valor de la actividad fotosintética ya que este se ve totalmente afectado por el efecto de la nube de ceniza del Volcán Puyehue que en menor o mayor grado ha cubierto a la región. El área celeste corresponde a nube meteorológica mezclada con ceniza.

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Fuente: Servicio Meteorológico Nacional

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