Predisposición y otros factores importantes del dolor

inflamación en las articulaciones producido por determinados mensajeros como el TNF-alfa, la interleuquina 6 y la interleuquina 1. Muchas de las terapias eficaces han cubierto esta inflamación. Además, la artritis reumatoide puede agravarse por factores psicológicos como la depresión y la ansiedad y los tratamientos ...
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• FACT SHEET No. 7

Predisposición y otros factores importantes del dolor articular Graeme Jones, MBBS (Hons), MMedSc, MD, FRACP, FAFPHM

La artritis es muy común en la población general, con más de 150 tipos que se han identificado. De todos estos, la artrosis y la artritis reumatoide son los más comunes, pero hay otros muchos como la espondiloartropatía, la gota y la artritis psoriásica. El dolor es la razón principal por la que los pacientes con artritis buscan ayuda médica. Existe una correlación fuerte entre la calidad de vida y la interferencia en las funciones diarias. Actualmente las artritis no son tratadas adecuadamente, y existe una gran diferencia entre los beneficios de los tratamientos actuales y las expectativas de los pacientes. El dolor relacionado con las articulaciones está presente en más de la mitad de la población mayor de 50 años, pero esta patología no es extraña incluso en la adolescencia. Se sabe bien poco relativamente sobre este dolor y las investigaciones se han reducido a los tipos más frecuentes de artritis. En la artritis reumatoide ( presente en aproximadamente el 1% de la población) el dolor se relaciona con la inflamación en las articulaciones producido por determinados mensajeros como el TNF-alfa, la interleuquina 6 y la interleuquina 1. Muchas de las terapias eficaces han cubierto esta inflamación. Además, la artritis reumatoide puede agravarse por factores psicológicos como la depresión y la ansiedad y los tratamientos para estos puede mejorar el dolor. En las artrosis (presente en el 10% de la población) el dolor se conoce mucho menos y por tanto el tratamiento es mucho menos satisfactorio. Hay una correlación pobre entre las radiografías y el dolor. Durante muchos años, esto hizo pensar que el dolor y los cambios estructurales eran dos fenómenos ampliamente separados. No obstante, ha quedado claro en la última década que las radiografías son una medida pobre de la salud articular. Técnicas de imagen más poderosas como la RMN han dado una imagen más clara de dónde viene el dolor en la artrosis. El dolor puede originarse desde dentro de la _____________________________________________________________________________________________

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articulación, de alredor de la articulación o por otros factores, pero todos estos pueden producir eventualmente los mismos cambios radiológicos después de muchos años. Cuando se mira dentro de la articulación, uno puede identificar alteraciones específicas relacionadas con el dolor. Estas incluyen lesiones en la médula ósea, defectos cartilaginosos, lágrimas meniscales, efusión/sinovitis ( ambos son medidas de inflamación) posibles osteofitos y alteraciones en la almohadilla grasa patelar. Todos estos se asocian de forma independiente con el dolor, lo cual sugiere que tratando cada cambio podríamos aliviar el dolor, pero este tipo de investigación no se ha llevado a cabo. Los factores alrededor de la articulación incluyen la fuerza muscular y la alteración de la alineación. Hay evidencia positiva que mejorando la fuerza muscular o fitness se mejora el dolor, pero no queda claro si esto produce un daño articular posterior. Una alteración de la alineación es un factor de riesgo para el empeoramiento de la artrosis pero está fuertemente asociado con las lesiones en la médula ósea y por tanto no pueden ser asociadas independientemente con el dolor. Otros factores entre los que se incluyen la obesidad ( la cual es la correlación más potente con el dolor y que además puede causar dolor incluso en una articulación anatómicamente normal) niveles inflamatorios sistémicos bajos, déficits de vitamina D (