Muestra Anual de Fotoperiodismo 2015

Por el otro lado, están las fotografías del nieto recuperado número 114, Ignacio Guido. Montoya Carlotto, tan buscado por su abuela Estela Barnes de Carlotto.
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Muestra Anual de Fotoperiodismo 2015 La Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA) presenta la 26° Muestra Anual de Fotoperiodismo Argentino en el Palais de Glace. La exposición se realizará hasta el 17 de agosto de 2015, con entrada libre y gratuita. Las fotografías fueron tomadas durante el año 2014 y son testimonio de la amplia cultura nacional, desde lo más cotidiano hasta eventos de importancia internacional. El proceso de selección fue llevado a cabo por un jurado integrado por Diego Aráoz, Daniel García, Sergio Goya, Mateo Pepe y RES. Más de 3 mil fueron presentadas y solo 300 se exponen hoy, ya que son las que reflejan acertadamente la cultura argentina, bajo las categorías propuestas. Se exponen temas muy variados. Es una secuencia fotográfica que no discrimina la política, los deportes, la música, las catástrofes naturales, medio ambiente, vida cotidiana y demás. Por un lado, está la foto de portada de la exposición, en la cual se aprecia a un niño de tres años con una enfermedad (Ictiosis) que resquebraja la piel, causada por la problemática de los agroquímicos y sus componentes tóxicos. La madre de este pequeño fue expuesta al glifosato durante su embarazo, sin protección. Es una foto que denuncia y hace visible una irresponsabilidad institucional. Por el otro lado, están las fotografías del nieto recuperado número 114, Ignacio Guido Montoya Carlotto, tan buscado por su abuela Estela Barnes de Carlotto. El fotógrafo Leo Vaca pudo imprimir allí la obviedad de los genes, el parecido de los dos y el amor de ese primer abrazo público tan luchado por Estela. Esta foto agrega un componente esperanzador a la muestra. Las fotos del Mundial de Fútbol de Brasil, en el cual Argentina ha quedado en el segundo puesto, muestran diferentes emociones y momentos del evento que tienen gran repercusión en su público. Asimismo, se encuentran retratados importantes músicos del rock nacional como Charly García, Fito Páez, el difunto Gustavo Cerati y el Indio Solari. En otra de las salas se puede apreciar la naturaleza, desde los bichos y animales hasta las catástrofes como fue el alud de lodo y piedras en Rodeo y Siján (Catamarca), causando destrozos y muertes. Por otro lado, están reflejadas las manifestaciones por los muertos en la tragedia de once, reclamando justicia, en las cuales se ven diferentes caras con carteles y fotos de sus familiares perdidos. También, se ve cómo Domingo Cavallo, ex ministro de economía, se esconde detrás de una mesa al ser recibido con huevazos cuando se disponía a dar una conferencia en la Universidad Católica Argentina. La muestra oscila entre nostalgia y admiración, entre esperanza y desconsuelo, entre justicia y repudio. El notorio contraste abre un abanico de realidades, tan heterogéneas y dispares, desde acontecimientos pequeños que no son cubiertos por los medios hasta momentos que serán escritos en los libros de historia. Cada uno de ellos, son parte constitutiva de la cultura y realidad argentina.

Los retratos más diversos El fotoperiodismo da para todo. La portada: un niño “con Ictiosis, una afección que resquebraja la piel. Comúnmente se lo conoce como niño cristal”. Al lado de esta foto se ve al “grupo drag queen esperando participar de un casting para elegir actores y bailarines” en la Vendimia Gay. Se puede caminar por el Palais de Glace en la exposición anual de fotoperiodismo de AGRA y encontrarse con pedacitos de historia reciente, ya que las fotografías fueron tomadas durante el año 2014. Es posible encontrarse con recuerdos aun resonantes en la memoria, uno al lado del otro, colgados en una pared, con una distribución dudosa, no lineal, pero que nos despierta y seduce pieza a pieza. “También me gusta la distribución, que sea acá en el Palais de Glace no creo que sea casualidad, tiene esta estructura circular que te lleva”, dice Sofía de 21 años, mientras dibuja un espiral con su dedo índice. Al transitar por la muestra uno empieza a caminar por los pasillos de su nostalgia que, en su forma circular, lo hace volver sobre lo que ya pasó o ver desde otro ángulo, distancia, perspectiva aquel acontecimiento tan conocido o descubierto hace apenas unos minutos. Se exponen cotidianeidades desconocidas como las vacaciones en la Isla Maciel, Avellaneda, como dice la descripción de la foto colgada: “En la Isla Maciel el verano es un espacio temporal en el que no pasan muchas cosas. Así son las vacaciones de los que no salen de vacaciones (…)”. Estas piezas tomadas por Carolina Pierri nos enseñan juegos veraniegos, con piletas pelopincho, perros, canchitas y cajas de cartón. Al pasar a otra sala se aprecia una foto de Vanesa Orieta, la hermana de Luciano Arruga, quien reclamó y continúa reclamando justicia por su hermano asesinado por la policía. Siguiente, la detención de un interrogador de prisioneros acusados de pertenecer a Montoneros, siguiente, Cavallo (ex ministro de economía) resguardándose de los huevazos en la Universidad Católica, siguiente, Fito Páez mirando a cámara con sus manos reflejadas en sus anteojos espejados, tocando el piano. Pero algo obliga a detener el paso y ver a Estela de Carlotto abrazando por primera vez a su nieto Ignacio (o Guido) marcando el fin de su lucha y el comienzo de muchas otras. El no contraste entre los dos rostros, la obvia igualdad entre sus sonrisas hace pensar cuántas almas más estarán separadas esperando encontrarse y cuántas han sido arrebatadas para siempre. Otro rostro vuelve a marcar una pausa en el camino. Una mujer, de no más de 40 años, lee la descripción de la foto y agrega un tímido “qué desastre”. Se le dibuja una mueca de indignación en el rostro que le achica sus ojos ámbar y le dificulta la desconexión entre su mirada y la de ese niño al cual no quiere abandonar. Sin embargo, él no está allí sino en Colonia Aurora, Misiones, expuesto a agroquímicos fumigantes y padeciendo de la enfermedad Ictiosis. Por esto, es que la muestra revuelve el pasado reciente pero también hace un llamado hacia el futuro, denunciando de alguna manera lo que está por debajo de la agenda mediática. En Catamarca se sufrieron aludes de barro y piedras dejando familias incompletas, arrasando casas enteras. En la foto de Mariano Quiroga sólo se ve el techo de una casa y el montón de piedras que la tapó y rodeó. Es una visita que se disfruta, sorprende con nuevos conocimientos y visiones, con afectos guardados en una canción o en un lugar, una persona, una profesión o en el Mundial de Fútbol llevado a cabo en Brasil. Es una muestra que toma varias categorías de nuestra complicada cultura argentina. Es una muestra que da para todo.