Documento no encontrado! Por favor, inténtelo de nuevo

LA PERSPICUIDAD DE LA BIBLIA Por Fran Schmidt La - ObreroFiel

entender (Hebreos 5:12-14). Lo que significa es que, si bien hay algunas enseñanzas de la. Palabra que el creyente más inteligente y preparado jamás podrá ...
68KB Größe 166 Downloads 140 vistas
LA PERSPICUIDAD DE LA BIBLIA Por Fran Schmidt La “perspicuidad” en las Escrituras se refiere a la doctrina de que la Biblia es clara e inteligible en su mensaje. La Biblia no fue escrita para esconder las verdades espirituales de la humanidad sino para revelar a la humanidad la verdad acerca de Dios, su carácter, su plan, y su provisión para la salvación del hombre. Por lo tanto, todo creyente, con la iluminación del Espíritu Santo, puede entender las Escrituras cuando las lee con la intención de conocer a Dios y responder en fe y obediencia. Esta doctrina para nada descarta la necesidad de estudiar las Escrituras (2 Ti. 2:15), de seguir las reglas sanas de la interpretación (2 P. 2:15-16), de ocupar herramientas de estudio (2 Ti. 4:13), o de exponer la Palabra en sermones y estudios bíblicos (2 Ti. 4:2). Tampoco significa que todos los pasajes o todas las enseñanzas bíblicas sean igualmente fáciles de entender (Hebreos 5:12-14). Lo que significa es que, si bien hay algunas enseñanzas de la Palabra que el creyente más inteligente y preparado jamás podrá profundizar, el creyente más sencillo puede leer las Escrituras con provecho y puede entenderlas y aplicarlas a su vida. Históricamente, los que rechazan la perspicuidad de la Biblia la rechazan porque quieren imponer otra autoridad por encima de la autoridad de la Biblia. Los que han rechazado esta doctrina han desanimado a la gente a tener su propia copia de la Biblia, mucho menos leerla. Han dicho que solo las autoridades eclesiásticas o los doctos pueden interpretarla. Hay varias pruebas de la perspicuidad de la Biblia: • Las Escrituras fueron inspiradas por Dios con el propósito de ayudar al hombre a ser salvo y vivir una vida agradable a él (2 Timoteo 3:15-17). • A través de la historia hay abundantes testimonios de personas que se han convertido a Cristo por la sencilla lectura de la palabra de Dios. • Las Escrituras se dirigen a la gente común y no únicamente a los expertos religiosos (la nación de Israel, Deuteronomio 6:4; “a los santos,” Efesios 1:1, 1 Co. 1:2; “gran multitud del pueblo le oía [a Jesús] de buena gana” Marcos 12:37). • Hay una presunción en las Escrituras de que el hombre común puede meditar en la palabra, entenderla, sacar provecho espiritual de ella (Salmo 1:1-3; 119:105) y encontrar en ella cómo arreglar su situación con Dios (Lucas 16:29-31). A la luz de la perspicuidad de la Biblia, en nuestra predicación y enseñanza debemos animar a los hermanos a leer y estudiar la Biblia en forma personal, comprobando la certeza de nuestra enseñanza con su propio estudio (Hechos 17:11), así edificando su fe en Dios. También debemos tener cuidado de no dejar la impresión de que sólo los pastores o sólo los muy preparados pueden entender la Biblia. Seamos fieles animando a nuestra iglesia local a estudiar la Biblia. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.