SEGURIDAD

Sábado 21 de abril de 2012

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GUERRA DE CARTELES EN BUENOS AIRES s REVISAN LOS VIAJES DEL TRAFICANTE COLOMBIANO

La conexión local del narco asesinado La víctima planeaba distribuir un embarque de cocaína a una banda de San Martín, liderada por el dueño de una agencia de autos

Causas de drogas que se ligan en la Capital

GUSTAVO CARABAJAL LA NACION El narcotraficante colombiano asesinado el martes pasado en Barrio Norte operaba en nuestro país con un importante grupo de traficantes de cocaína instalado en la zona del partido bonaerense de San Martín. Según informaron fuentes de la investigación, los narcotraficantes argentinos se encargaban de proveer apoyo logístico para futuros embarques de cocaína que, supuestamente, el falso Carlos Brausin García planeaba enviar a Europa. Se trata de los mismos traficantes argentinos que le compraban cocaína al grupo que integraba Juan Sebastián Galvis Ramírez, el ciudadano colombiano asesinado en febrero de 2009 frente a un negocio de venta de motos de agua, en San Fernando. En las últimas horas se confirmó que el verdadero nombre de Brausin García sería Héctor Jairo Saldarriaga Perdomo, alias “Mojarra” o “Guajiro”. Según la policía colombiana, Saldarriaga Perdomo sería el brazo ejecutor de los asesinatos que supuestamente encargaba Daniel Barrera Barrera, también conocido como “El loco”, uno de los narcotraficantes más importantes buscados por la Interpol. En los últimos cuarenta días, Saldarriaga Perdomo se valió de su falsa identidad para realizar seis viajes a la Argentina desde Colombia. Ese nombre, sin antecedentes penales, le posibilitó cruzar los controles migratorios sin que las autoridades advirtiera quién era. Con su verdadera identidad llegó por primera vez a la Argentina en 2008, cuando todavía trabajaba para Barrera Barrera. Según los investigadores, mientras estuvo en la Argentina, Saldarriaga Perdomo hizo viajes a Brasil y a Uruguay con la camioneta Honda CRV nueva, propiedad de un comerciante de la zona de San Martín. Saldarriaga Perdomo, cabe recordar, utilizaba una cédula azul para circular con la camioneta y evitar que la policía lo detuviera o secuestrara el vehículo ante la sospecha de que fuera robado. Este no es un dato menor. El pro-

pietario de la Honda CRV es un testaferro del jefe de una banda de narcotraficantes que tiene como base de operaciones la zona de San Martín. La camioneta todo terreno fue comprada en una agencia de automóviles situada en la avenida Illia, en la localidad de Villa Maipú. El dueño de esa agencia, que vive en un lujoso chalet situado en la calle Santa Marta de dicha localidad, tiene varias causas judiciales por tráfico de drogas en la justicia federal de San Martín. Además, adquirió varios cargamentos de cocaína con otra banda que le compraba la droga al grupo que integraba Galvis Ramírez, el ciudadano colombiano asesinado por dos sicarios en febrero de 2009, en San Fernando. Otros datos y personajes vinculan a Saldarriaga Perdomo con otro

ASALTO VIOLENTO

LA MUERTE DE LA MUJER DATARIA DE ENTRE CUATRO Y SIETE MESES

Garré dijo que hay dos presos imputados por dos operativos contra bandas internacionales GABRIEL DI NICOLA LA NACION

TELAM

Secuestraron 23 kilos de cocaína en “Rolex blanco” Unos 23 kilos de cocaína fueron secuestrados ayer y dos hombres, uno de ellos de nacionalidad colombiana, fueron detenidos por la policía bonaerense durante un allanamiento en las inmediaciones del puerto de Campana. La

droga fue hallada en el interior de un auto Alfa Romeo con el que los delincuentes se movilizaban y estaba acondicionada en “ladrillos” cubiertos por un papel que tenía fotos de relojes Rolex. El operativo fue bautizado “Rolex blanco”.

asesinato “narco”, ocurrido en la Argentina. Con esa identidad viajó a nuestro país a mediados de 2008, pocos días antes de la denominada masacre del shopping de Martínez. Allí fueron asesinados Jorge Quintero Gartner y Héctor Duque Ceballos, dos presuntos narcos colombianos. En Colombia, según los medios de ese país, las autoridades abonaron la sospecha que indicaría que Saldarriaga Perdomo no habría sido ajeno a esos homicidios que fueron ordenados por su jefe, Barrera Barrera. Hasta anoche, el fiscal Eduardo Necol, a cargo de la investigación del falso Brausin García, no había recibido la confirmación a través del cotejo de las fichas de huellas dactilares, realizado por las autoridades colombianas, que indicaba

que la verdadera identidad de la víctima correspondería a Saldarriaga Perdomo. Ese nombre volvió a aparecer recientemente, en otra investigación impulsada por la justicia federal argentina. Una de las detenidas a raíz del operativo “Luis XV” fue la ex mujer de Barrera Barrera, quien había instalado una inmobiliaria en un lujoso country de Tigre. La mujer, embarazada de ocho meses, está acusada de integrar una banda que planeaba mandar 280 kilogramos de cocaína a Europa. Además, de la droga secuestrada, los investigadores de la Policía Federal, descubrieron que la organización había lavado en el país más de US$ 50.000.000 provenientes del narcotráfico mediante la compra de propiedades, inmobiliarias, empresas y campos.

Las grandes causas de tráfico de drogas en la Argentina parecen tener conexiones importantes. El hallazgo de 444 kilos de cocaína en un velero abandonado en Puerto Madero, en junio pasado, y el reciente operativo bautizado “Luis XV”, que desbarató una organización internacional de narcotraficantes que lavó activos en el país por 50.000.000 de dólares, están relacionados. Así lo informó ayer la ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré. La funcionaria afirmó que Alejandro Elvira y Jaime Eduardo García Rivera, alias “Jaime”, detenido en la investigación de “Luis XV” fueron imputados en la causa judicial a cargo del juez federal Norberto Oyarbide, donde se intenta determinar el origen de la cocaína secuestrada en el velero Traful. Según explicaron Garré y el subsecretario de Investigación del Delito Organizado y Complejo, Miguel Robles, Elvira, de nacionalidad argentina, quedó filmado cuando llevó los 444 kilos en una camioneta Mitsubishi Montero hasta el velero Traful, amarrado en un astillero de Berazategui. La camioneta que manejaba Elvira fue secuestrada en los allanamientos del operativo “Luis XV”. “Estaba escondida en un garaje, capaz sabían que el vehículo estaba filmada”, dijo un investigador. Además, según Garré, “Jaime” García Rivera, de nacionalidad colombiana, tuvo comunicaciones telefónicas con Juan Jacinto Morales Delgado y José Martin Martin, dos ciudadanos españoles que eran los

tripulantes de Traful, el llamado “velero narco”. Según pudo saber LA NACION de fuentes oficiales, las comunicaciones telefónicas ocurrieron antes del 17 de junio pasado. Ese día, la Prefectura Naval descubrió la droga oculta en el velero Traful. La embarcación había zarpado del puerto de La Plata el 14 de junio del año pasado a Piriápolis, en Uruguay. Pero a la altura de la Playa Onda, frente a la costa de Olivos, sufrió una avería. El guardacostas Bahía Blanca de la Prefectura Naval remolcó el velero hasta el Yacht Club de Puerto Madero. Con la excusa de ir a comprar un repuesto, Morales Delgado y Martin Martin huyeron. Después, fueron descubiertos los 444 kilos de cocaína.

Detenido en Porto Alegre Los tripulantes del velero tomaron un ferry y viajaron a Uruguay, para después cruzar a Brasil. Pero Martin Martin fue detenido el 25 de noviembre pasado en Porto Alegre y ahora se espera su extradición a la Argentina. Un importante jefe policial explicó a LA NACION que ahora se hará un peritaje para establecer si la droga secuestrada en el “velero narco” es del mismo origen que los 280 kilos de cocaína que se incautaron en los diferentes allanamientos de “Luis XV”: “El análisis criminal de estos casos indica que estamos ante una organización de gran magnitud dedicada al narcotráfico y a millonarios lavados de activos, con soporte logístico internacional”, sostuvo la ministra Garré.

DECISION JUDICIAL

Persecución, tiroteo y detenidos en Belgrano

Excarcelan a la “Hiena” Barrios

Un delincuente y un policía, heridos

MAR DEL PLATA.– No llegará a cumplir tres semanas en la cárcel. Condenado a cuatro años de prisión de cumplimiento efectivo por provocar la muerte de Yamila González, una joven embarazada de 26 años, el boxeador Rodrigo “La Hiena” Barrios recuperará la libertad tras un fallo de Cámara, que le otorgó la excarcelación y le permitirá seguir en esa condición hasta que la sentencia quede firme. La liberación se pudo haber concretado ayer mismo, pero se demorará hasta pasado mañana porque la familia de Barrios debe depositar 200.000 pesos que la Justicia impuso como caución real. Barrios, además, debe cumplir otras condiciones como fijar domicilio en territorio bonaerense, presentarse una vez por semana en sede policial y no ausentarse por más de 24 horas. También se le retiene el pasaporte para que no salga del país. Ahora la suerte de Barrios, detenido aún en Campana, depende de la Cámara de Casación Penal, a la que recurrirán tanto la querella como la defensa, una en busca del agravamiento de la pena y, la restante, en procura de la absolución de su cliente o, en el peor de los escenarios, una condena en suspenso. En su fallo del 4 de este mes, el Tribunal Oral Criminal N°3 consideró que Barrios fue el único culpable del accidente ocurrido el 24 de enero de 2010 en Independencia y Ayacucho. Manejaba su camioneta BMW cuando chocó contra un Fiat 147, con dos mujeres como ocupantes, vehículo que luego salió despedido y atropelló a González, que cruzaba la calle junto a familiares. La joven falleció. El boxeador huyó del lugar y recién se entregó seis horas después. También se pudo confirmar que mientras conducía estaba hablando por celular y circulaba a más de 60 kilómetros por hora. Anoche, en tanto, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, dijo que pedirá a la Justicia que Barrios sea inhabilitado para conducir hasta que quede firme su condena.

Dos hombres fueron detenidos ayer y otros tres escaparon después de una persecución policial que se inició con un asalto a una empresa de administración de consorcios del barrio de Belgrano. A raíz de la persecución resultaron con heridas cortantes y traumatismos un cabo de la Policía Federal y uno de los delincuentes, quienes fueron hospitalizados, aunque fuera de peligro, informaron fuentes del Servicio de Atención Médica de Emergencias (SAME). El hecho ocurrió ayer por la mañana en un edificio de oficinas, situado en Cabildo 2950, a metros del cruce con la avenida Congreso, perteneciente a una administración de consorcios. Los voceros policiales dijeron que cinco delincuentes bien vestidos lograron acceder con una excusa al edificio y, una vez en una de las oficinas, dijeron que se trataba de un robo. Aparentemente alguien advirtió el asalto y avisó a la policía por medio del número de emergencias 911, por lo que rápidamente llegaron al lugar agentes de la comisaría 35a., con jurisdicción en la zona. Al notar la presencia policial, los ladrones desistieron del asalto y huyeron hacia un patio que da al pulmón de manzana, por lo que la policía comenzó a perseguirlos y, según algunos testigos, llegó a efectuar uno o dos disparos intimidatorios con intención de amedrentarlos. Poco después, la policía detuvo a dos de los sospechosos, uno de ellos herido por una caída durante la persecución, mientras que los tres restantes lograron escapar y eran intensamente buscados en la zona. También, a raíz de la persecución sufrió heridas un cabo de la policía, quien presentó lesiones en una pierna y fue derivado al hospital Churruca para su atención.

DARIO PALAVECINO CORRESPONSAL EN MAR DEL PLATA

GENTILEZA EL TRIBUNO DE SALTA

Personal de la Policía Científica traslada los restos hallados en Cafayate para que se les practiquen los peritajes forenses

No creen que sean de María Cash los restos óseos hallados en Cafayate También lo afirmó la madre; los estudios de ADN se realizarán en la Universidad de Buenos Aires CARLOS F. PASTRANA PARA LA NACION SALTA.– La identificación de los restos óseos encontrados anteayer en Cafayate, que generaron conmoción nacional ante una versión de que podrían ser los de María Cash, sólo se podrá conocer la semana próxima cuando se terminen los estudios de ADN de las muestras que el Ministerio de Seguridad de Salta envió a la Universidad de Buenos Aires, pero también se cotejarán con otras personas desaparecidas en la provincia. Ayer la atención se centró en la autopsia con un equipo médico en la morgue del hospital San Bernardo, a cargo del jefe forense del Poder Judicial, Benjamín Ruiz de los Llanos, que determinó que se trataría de una mujer de entre 24 y 27 años sin signos

de violencia y que la muerte dataría de entre cuatro y siete meses. Sin embargo, el estudio es complicado porque no hay partes blandas, sólo huesos, algunos con restos de ropa, y la dentadura. Llamó la atención que nadie haya descubierto el cadáver que estaba al costado de la ruta en medio de yuyales en una zona despoblada, unos dos kilómetros al este de Cafayate y cerca del club de campo El Bosque, donde hay cabañas. Alguien tendría que haber percibido los malos olores, comentó un lugareño. No pudo verificarse el origen de la versión que relacionó el hallazgo de los restos dispersos del cadáver con la joven desaparecida, ya que en ningún momento se reportó su presencia en Cafayate ni en los Valles Calchaquíes y el vocero del Poder

Judicial, Marcelo Báez, recordó que se la vio en julio pasado en el acceso a Salta por la ruta 9 y hubo una búsqueda a lo largo de la carretera provincial. Pobladores cafayateños consultados confirmaron que nunca se mencionó esa presencia. Muchos mochileros que acampan en lugares donde no hay que pagar tampoco creen que sea María Cash. En Buenos Aires, a su vez, María del Carmen, madre de María Cash, afirmó: “No creo que los restos hallados en Salta se traten de los de mi hija”. Los huesos fueron encontrados por un obrero el jueves a la mañana y por la tarde llegó el juez de instrucción de la V Nominación, Pablo Arancibia; el jefe de policía, Marcelo Lami, y otros funcionarios, lo que alertó sobre la importancia del hallazgo.

Hubo que rastrillar un amplio espacio para recoger huesos, algunos con restos de ropa, hasta con una media, diseminados seguramente por perros salvajes que comieron las partes blandas. Una de las piernas fue entregada por Saturnino González, un obrero que el 19 de marzo último la encontró y la llevó a la comisaría, pero un policía se la devolvió diciéndole que una médica había dicho que no eran restos humanos, según declaró a la radio Cadena Máxima. Igualmente, el hombre enterró los restos. Los restos fueron traídos a la capital salteña para la autopsia, que concluyó en la tarde de ayer y en la que participaron, además del doctor Ruiz de los Llanos, médicos de la policía y del Cuerpo de Investigadores del Ministerio Público.