GRATITUD Señor que en poco estimaste Tu morada celestial Y como un hombre carnal Hasta la tierra llegaste. Sobre el pecado triunfaste Cuando el diablo te tentó, Tu obra se perfeccionó Y allí, de la cruz clavado Al cielo fuiste exaltado, Dónde Dios te recibió. Jesús, Mesías prometido, El Sacrificio Perfecto, Tú siempre hiciste lo recto, Mas mi camino es torcido. Pero a salvarme has venido: Tu labor has culminado, Aunque yo siga extraviado, Negándote día a día Esa culpa es solo mía Y me aleja de tu lado. Mi Dios, en el corazón Ya te he buscado un lugar, Pero esclavo soy del mal, De pecado y trasgresión. Aunque no exista razón Para esa vida vivir, Quiero Dios por ti sentir El mismo amor que me tienes Porque si mañana vienes No sé que pueda decir. Toma mi vida, Señor, Que ya de nuevo nací Y haz que me parezca a ti, Termina en mí la labor. Haciendo a tu nombre honor, Alúmbrame con tu luz Cargando, al fin, con mi cruz Y desde lo más profundo Pueda yo gritar al mundo, ¡Cuán grande es mi amor, Jesús! Rogelio E. Pérez Díaz Usado con permiso El autor es miembro de la agrupación paraeclesiástica cubana: Ministerio CRISTIANOS UNIDOS. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.