En Recoleta, un mapa del delito vecinal

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SEGURIDAD

Lunes 7 de mayo de 2012

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INSEGURIDAD PORTEÑA s LA GENTE IDENTIFICA ZONAS CRITICAS

En Recoleta, un mapa del delito vecinal   !$ 

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Se presentará en todos los puntos del barrio Desde pasado mañana, la Asociación Barrio Recoleta y las organizaciones y vecinos que participaron de la confección del mapa del delito recorrerán las calles de la zona para presentar la estadística. “Queremos que la gente participe, conozca y se involucre, para que la solución también pueda surgir de los vecinos”, dijo a LA NACION Nelson Durisotti, presidente de la asociación. “Iremos por los puntos más transitados y de mayor exposición del barrio, para que todos tengan acceso al mapa del delito”, indicó. La iniciativa comenzará este miércoles, aunque la primera presentación oficial está prevista para el sábado próximo, a las 10.30, en Santa Fe y Pueyrredón. Allí los vecinos po-

drán dar a conocer hechos delictivos sufridos en el último tiempo para sumarlos al mapa y discutir, además, qué medidas son necesarias para reducir el índice de delitos. “Con la confección del mapa del delito de Recoleta intentamos hacer conocer en su justa dimensión los actuales y reales problemas de seguridad del barrio, que no se reflejan en las estadísticas oficiales”, dijo a LA NACION Durisotti. Y concluyó: “Queremos que se ejecuten políticas inmediatas de prevención y de mayor presencia policial en la zona, y que al mismo tiempo se comiencen a diseñar e implementar políticas públicas de seguridad a mediano y largo plazo, atacando las causas para resolver la cuestión de fondo”.

Un cacerolazo contra los asaltos y los prostíbulos Será hoy, a las 19, en Vicente López y Junín

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“Entraderas” Precisamente, una de las novedades del mapa del delito actual es la cantidad de denuncias de asaltos a departamentos. “En varios de ellos, sin que se haya forzado la puerta de calle de los edificios”, indicó Durisotti. Ese tipo de delito aparece de forma generalizada en distintos puntos del barrio, tal como reflejó LA NACION en ediciones de los últimos meses. “Hemos recibido también un mayor número de denuncias relacionadas con lugares en los que funcionan prostíbulos y departamentos privados en los que se ejerce la prostitución”, dijo Durisotti. Otra área marcada como peligrosa es la aledaña al hospital Rivadavia. Frente a su fachada, Carlos Reising fue víctima de un robo hace unos días. Le sacaron dinero y su celular. “Una semana antes, en el mismo lugar, habían asaltado a mi hija. La amenazaron con un arma para robarle el celular. El episodio fue muy traumático. Y yo le había advertido que tuviera cuidado por ser esa una zona riesgosa”, contó Reising, que, como otros tantos vecinos, optó por no realizar la denuncia en la comisaría. “Te tratan mal, te hacen esperar, usan un lenguaje que sólo ellos entienden y después todo queda en la nada”, expresó. “Es por esto que el mapa se confeccionó con datos oficiales y datos de delitos no denunciados aportados en su gran mayoría por vecinos del barrio”, dijo Durisotti. También aportaron datos los integrantes de la Asociación Barrio Recoleta, la Fundación Imagina Buenos Aires y la Asamblea de Vecinos de Recoleta. La semana próxima, los vecinos solicitarán una audiencia con el ministro de Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, y con la ministra nacional, Nilda Garré, “para encontrar junto con los funcionarios soluciones inmediatas y a mediano y largo plazo”, afirmó Durisotti.

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zonas ya aparecían en el mapa de junio de 2011: plaza Houssay, plaza Emilio Mitre y la zona comprendida por el hospital Rivadavia, el colegio San Agustín y la Biblioteca Nacional. Ahora sumamos una cuarta, en la intersección de Avenida del Libertador y Callao”, explicó. En esa cuarta zona, los delincuentes se las ingeniaron para hacer agujeros en el alambrado que separa las vías del ferrocarril Mitre con la avenida Brigadier General Facundo Quiroga. “Por allí escapan fácilmente para tomar un tren o bien para esconderse en la villa 31. Incluso, abren las rejas del parque Thays con crickets y asaltan a los que usan ese espacio público”, dijo a LA NACION Ana María Di Sarli, vecina de la zona. “Uno de los grandes problemas es que el delito está tan estigmatizado que es fácil echar culpas a la villa 31. Entonces, por más que te vengan a robar en un BMW dos hombres de traje, van a culpar a los que viven allí”, sostuvo Durisotti. “Con muchos vecinos hemos coincidido en que hay que enfrentar la inseguridad con mejor educación, más cultura, combatiendo la inequidad y la exclusión, y con más compromiso social”, señaló. “Toque timbre”, se lee en un cartel de un local de ropa situado en Pueyrredón y Peña. Esa intersección está dentro de uno de los cuatro círculos en los que más delitos se registraron durante el sondeo. A una cuadra de allí se encuentra la plaza Emilio Mitre, donde actualmente se ejecuta una obra de la línea H del subte. Allí, dos chicos intentaron robarle a Di Sarli hace una semana, a las once de la mañana. “Tendrían entre 10 y 12 años; me apuntaron con una navaja en pleno día, ante gran cantidad de gente. Lo único que me salió fue gritar y se fueron corriendo”, contó la víctima a LA NACION. Allí también asaltaron hace pocos días a Agustina Verguizas, una estudiante universitaria que volvía a su casa, a las 20. “Iba escuchando música con el iPod y de repente apareció un joven, me amenazó y me lo sacó”,

contó a LA NACION. Agustina vive en avenida Pueyrredón 1854, en un edificio donde, hace pocas semanas, ladrones ingresaron en uno de los departamentos y lo desvalijaron. Sus dueños se enteraron al volver de sus vacaciones en Punta Del Este.

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HERNAN ZENTENO

La plaza Emilio Mitre, uno de los puntos señalados como peligrosos por los vecinos de Recoleta

Vecinos de Recoleta y voluntarios de la fundación La Alameda convocaron para hoy, a las 19, a una protesta en la esquina de Junín y Vicente López, en la entrada del shopping. Será un “cacerolazo en Recoleta contra la inseguridad”, con la consigna “basta de prostitución, narcos y zonas liberadas”, que se suma al clásico reclamo por los asaltos a departamentos, comercios y en la calle, y el robo de autos y la venta de drogas. El periodista Lucas Schaerer, de La Alameda, anunció que en la manifestación presentarán un mapa del crimen organizado, realizado por vecinos en asambleas del salón parroquial de la iglesia Patrocinio de San José. “Contabilizamos 41 narco-prostíbulos VIP instalados en la Comuna 2 [Recoleta]. Algunos falsamente habilitados como whiskerías, confiterías o bares, y otros llamados «privados»”, adelantó Schaerer a LA NACION. Según denuncian los vecinos, en esos lugares se ejerce la trata de personas, la venta de todo tipo de drogas; además, se registra un incremento del índice de otros delitos en las zonas aledañas. “Al haber zonas liberadas para la venta de drogas y la prostitución, es más fácil para los delincuentes robar en esa área”, explicó Schaerer. En un extenso informe difundido por La Alameda, en el que se detallan hechos delictivos, la calle Junín rankea primera: sobresalen el robo de autos, arrebatos y asaltos de “motochorros”. En sintonía con el mapa realizado por la Asociación Barrio Recoleta, la plaza Emilio Mitre figura como uno de los lugares predilectos por los delincuentes para los arrebatos, incluso a chicos que salen de los colegios. Las salideras bancarias también son protagonistas en la lista. Según el mapa difundido por La Alameda, hubo casos a la salida de los bancos Santander Río, de Córdoba y Pueyrredón; BBVA Francés, de Las Heras y Austria; Nación, de Pueyrredón entre Gutiérrez y Las Heras; Sudameris, en Córdoba y Junín; Standard Bank, en Pueyrredón y Juncal, y Santander Río, en Pueyrredón y Peña. “Hay tres denuncias. Una hecha por La Alameda el 2 de febrero, que cayó en el juzgado federal N° 2, contra el local Madaho’s y otros prostíbulos VIP; otra realizada por Lorena Martins contra su padre, Raúl, por varios lugares en donde se ejerce la trata [el cierre de la causa está apelado ante la Cámara], y una realizada en noviembre de 2011 por Karina Ramos, una chica que logró escapar del boliche Black, que con Madaho’s son los más importantes de la ciudad. Esta última, en manos del juez Rodolfo Canicoba Corral”, dijo Schaerer.

VIOLENCIA Y TRAGEDIA EN BURZACO

Un futbolista murió cuando un policía disparó durante un robo

Mendoza: quedó preso un agente

Es Lautaro Bugatto, defensor formado en Banfield; el agente quedó preso Un joven futbolista de primera división formado en Banfield y con paso por las selecciones juveniles fue asesinado ayer de un tiro en la puerta de su casa, en Burzaco. Un policía que disparó contra delincuentes que le habían intentado robar el ciclomotor a su hermana quedó detenido como autor del homicidio. El marcador lateral izquierdo Lautaro Bugatto, de 20 años, estaba próximo a casarse con su novia, la madre de la pequeña hija de ambos; jugaba a préstamo en Tristán Suárez –equipo que disputa el torneo de Primera B Metropolitana– y a mediados de año debía regresar a Banfield. El acusado es el agente de la Policía Buenos Aires 2 David Benítez, de 32 años. Como se dijo, el fiscal del Departamento Judicial de Lomas de Zamora Juan José Vaello le imputó el delito de homicidio simple. Según testimonios e indicios, mató al futbolista cuando quiso evitar a los tiros que le robaran el ciclomotor en el que circulaban su hija y su hermana. Fuentes policiales y judiciales informaron a la agencia de noticias Télam que el hecho ocurrió en la madrugada de ayer, aproximadamente a las 3, en el cruce de la avenida Monteverde y Pedro Goyena, de Burzaco, partido de Almirante Brown, en la zona sur del conurbano.

Una vida segada ➔ La víctima. Lautaro Bugatto tenía 20 años y era padre de una niña de 2; tras la muerte de su padre, el año pasado, se había convertido en el sostén de la familia.

➔ Deportista. Empezaba su carrera de futbolista profesional tras jugar en las divisiones inferiores de Banfield, donde ganó torneos en 2009 y 2010. Fue citado al seleccionado Sub 20. Estaba a préstamo en Tristán Suárez.

Todo comenzó cuando el policía, que estaba franco de servicio y vestido de civil, se desplazaba en un Renault 12 junto con su esposa; delante de ellos circulaban, en un ciclomotor Zanella, su hermana y su hija menor. Dijeron las fuentes consultadas que, según la versión de los familiares de Benítez, dos delincuentes armados quisieron robar el ciclomotor, por lo que el policía se resistió con su arma reglamentaria y efectuó varios disparos hacia los asaltantes. Sería uno de esos proyectiles el que impactó en el cuerpo de Bugatto, que estaba a unos 30 metros de distancia. El lateral salía en ese

preciso instante de su casa, junto con un hermano y dos amigos con los que iba a ir a bailar en su Peugeot 206 gris.

“Me quema la espalda” “Cuando [Bugatto] estaba por subir al auto, sintió que algo le pegaba en la espalda y se quiso meter a la casa; alcanzó a decirle a la mamá que le habían pegado un tiro”, indicó ayer a la prensa Adrián Romero, representante del futbolista. El mánager relató que, inicialmente, los amigos de Bugatto pensaron que “estaba haciendo una broma, porque les dijo: «Me quema la espalda», pero cuando notaron que sangraba y le levantaron la camisa vieron una perforación de bala en las costillas a la altura del pulmón”. Romero añadió que los amigos de Bugatto lo llevaron en el Peugeot a la Clínica Burzaco, donde el futbolista murió a poco de ingresar. “Me dijeron que cuando llegó a la clínica todavía respiraba, pero perdió mucha sangre porque aparentemente [el tiro] le perforó el pulmón”, añadió el representante. Según Romero, el año pasado Lautaro Bugatto había sufrido el fallecimiento de su padre y, en consecuencia, se había convertido en “el sostén de la familia”.

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Lautaro Bugatto, de 20 años, lateral izquierdo formado en Banfield

Uno de los once policías de Mendoza demorados por haber participado de la represión a un grupo de jóvenes que participaban en una fiesta en Godoy Cruz, hecho en el que un joven de 19 años murió de un tiro en la cara, quedó detenido e imputado por homicidio agravado. Según varios testigos, el agente, identificado como Walter Darío García, realizó el disparo mortal desde un móvil de la Unidad Especial de Patrullaje de aquel departamento del aglomerado urbano que rodea a la capital provincial. En la tarde de ayer, durante la despedida de los restos de Franco Díaz, allegados a la víctima confirmaron que hoy, a las 11, se concentrarán frente a la Casa de Gobierno mendocina para exigir justicia. En especial, porque temen que García –que se negó a declarar ante la fiscal que investiga el caso, Claudia Ríos– quede en libertad por el solo hecho de ser policía. En tanto, la UCR local presentará un pedido de informes para que el ministro de Seguridad, Carlos Aranda, explique cómo fue el procedimiento que terminó con la muerte de Díaz. El hecho ocurrió en la madrugada de ayer, cuando por una llamada al 911 por ruidos molestos, 11 policías llegaron en cinco móviles a la casa donde se festejaba un cumpleaños. Según la policía, los recibieron a pedradas; unos tiraron con balas de goma; sólo uno lo hizo con balas de plomo.