Espectáculos

Página 2/LA NACION

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Miércoles 30 de diciembre de 2009

TEATRO/TELEVISION Ricardo Fort: estrenará Fortuna, en Mar del Plata

El millonario que quiere ser famoso Continuación de la Pág. 1, Col. 4 sus Harley Davidson, su novia, sus coches en una casa en cuyo living hay una pantalla de televisión (la misma que reprodujo su imagen en el programa de Tinelli en una historia conocida por todos más allá de nosotros mismos). Al mejor estilo Ozzy Os
 bourne también tiene una cámara que lo sigue todo el tiempo para que lo cotidiano se convierta en algo visto por todos. En la ciudad piensa estrenar una obra de teatro que se llamará Fortuna porque todo en él parece girar alrededor del poderoso Don Dinero. Por ahora, su mejor puesta en escena es él mismo. Todo en su mundo parece milimétricamente pensando para dar en el punto justo del imaginario del tipo rico, del tipo obscenamente rico. La llegada a su casa (su “mansión”, como remarca su agente de prensa) es una fiel demostración de ese registro con descapotables, infinidad de coches negros, música y manos en alto. Primero va él con Virginia Gallardo, su novia. Luego, sus modelos (“mis gatos”) junto a los patovicas de seguridad, su madre impecable, los dos niños que nacieron en vientres alquilados, su agente de prensa, su… (me perdí). Son más de 20. Como siguiendo una consigna se van al living y ven en la tele que está Guido Süller llorando. “Es tan patético”, dice él. El resto asiente porque parece que los roles también están preestablecidos. El entorno compuesto por amigos musculosos, coches ricos y famosos, chicos lindos que se sacan las remeras, una cámara que nos sigue todo el tiempo, una mujer voluptuosa que parece ocupar un papel de reparto y una pileta reluciente parece ser el set de filmación ideal para una película porno gay. ¿Cómo es vivir en medio de todo esto y con la gente en la calle? “Yo lo disfruto. Me gusta, no es algo que pesa. Me encanta”, dice ahora él en un charla seguida por varios integrantes de su troupe. –¿Y el manejo de la timidez ante semejante contexto de exposición? –No tengo timidez para nada, soy un caradura. Totalmente. –Si querías ser famoso lo lograste. Queda ahora no ser una ola. –Exacto. –¿Cuál es la estrategia? –No tengo estrategia. No hice nada pensado. Se fue dando como algo mágico. Primero fue el reality en YouTube. De ahí salió a la televisión, que empezó a levantar esas imágenes en los programas, comenzaron a darse cuenta de que tenía rating y me llamó Tinelli. Demostré que sé cantar y bailar. La gente ya no me tomó como un bicho mediático, como alguien extravagante que le gusta poner toda la plata sino que luché toda mi vida por lo que quería. Ahora viene teatro acá, en Mar del Plata, mi playa…

Cueste lo que cueste



El chico del momento ¿Hará falta señalar que acá todos

En su mansión de Mar del Plata Este verano tendrá su propia playa y su obra de teatro, mientras planea importantes proyectos como producir el musical Sunset Boulevard

MAURO V. RIZZI

hablan de él? Ejemplo: antes de la entrevista le pido al taxista, un señor mayor, que me lleve al teatro Diagonal para conocer la fachada en donde va a presentar la obra. “¿Qué? Va a sacar entradas para ver a Fort?”, me contesta. Esta semana es tapa de varias revistas en las que él luce su cuerpo, ese cuerpo trabajado en base a horas de gimnasio y otras yerbas, y lo muestra como si fuera el mapa de su recorrido de vida, su misma obra de arte. Tan acostumbrado está a eso que cuando se le pide hacer fotos él se traba como si estuviera en un torneo de fisiculturismo. Y es tan directo, tan humildemente directo

–término paradójico tratándose de un millonario que se jacta de serlo– que parece ser que mucho más no se le puede pedir. Que ése es él. Como subido en su moto, piensa llevar la obra a Buenos Aires, tiene planeado hacer una comedia musical (“estoy hablando con Vicky Buchino, quizá sea Sunset Boulevard”), dice estar en tratativas con Quique Estevanez para hacer la obra de teatro en televisión y cuenta que está por firmar un contrato con la Warner. Pero en lo inmediato, su proyecto artístico es el estreno de Fortuna, de Carolina González. “Es un vodevil en el cual el personaje central es Ricardo Fort

–dice el mismo Ricardo Fort– que es un millonario, un excéntrico, que tiene varias novias a las que visita cuando viaja por el mundo. Pero mi madre me envía a mi hermana para controlar los gastos y me pone una contadora, papel a cargo de Carolina Papaleo y...”. Y vendrán las confusiones y Gino Renni y Anabel Cherubito y su mundo en el cual la realidad y la ficción parecen ser una misma cosa. Se agregan Adriana Salgueiro, Claudia Fernández, Virginia Gallardo y Félix Rossi. Estarán dirigidos por Carlos Moreno. Dicen que es la versión local de París Hilton. Matías Alé lo llamo

llamadas constantes a las boleterías desde las mismas playas entre protectores solares y celulares sonando a pleno. Finalizado el fin de semana, y con números en la mano, los tres montajes lograron algo que podría llamarse “empate técnico”. El empate, con medias que rondan los 300 espectadores por función, deja algunas sospechas que se irán confirmando cuando venga el gran público de enero, que define lo que, por ahora, son tibias tendencias. Hasta el momento, Valientes dicen que es más un fenómeno en la entrada del teatro que

adentro. De hecho, anteayer vendió muy pocas localidades durante todo el día, aunque tenga tanta publicidad, la maquinaria Suar y todo el gran aparato publicitario, y chicos lindos, con rating, que muestran sus cuerpos. Rumores (Carlos Calvo & Cía.) se la defiende solito. Y Baraka (Grandinetti, Marrale, Arana y Leyrado) parece convocar al público teatrero y al que se quedó con las ganas de ver a Gasalla pero que, al llegar a último momento a la puerta de la boletería, opta por ellos, ya que tanto una obra como la otra van en el

Willy Wonka. Hugo Moyano lo comparó con Francisco de Narváez (o al revés). Otros dicen que es un ícono queer (“¿qué es queer?”, pregunta él), o que es exponente tardío del menemismo. El se ríe. “No me molestan para nada todas esas cosas”, se ríe. Y repite lo dicho mil veces: “Me van a aparecer 20 novias, 20 novios, 20 hijos, 20 madres que van a decir… Pero no me preocupa, no me modifica mi vida”. Unos de sus muscle-amigos da una versión bastante honesta de toda esta realidad: “El bajón es cuando volvés a tu casa después de todo esto”. Mientras tanto, “livin” la vida loca.

(Post-solar) Tendencia. A falta de datos oficiales, la cantidad de espectadores por montaje es la gran incógnita. Como en todas las temporadas, sólo las obras que les van bien lo dicen a los cuatro vientos y hasta publican en sus avisos cifras o frases como “la elegida del público”. De hecho, el espectáculo de Gasalla ya anuncia la cantidad de gente que vio Más respeto que soy tu madre. El fin de semana pasado estrenaron aquí Valientes, Rumores y Baraka. Entre los productores había inevitables dudas, especulaciones de todo tipo, quizás alguna apuesta y

mismo lugar. O sea, el famoso efecto rebote. En este contexto, la sorpresa la están dando los chicos de Valientes, que, de seguir así, volvería a cuestionar hasta qué punto un éxito televisivo tiene su correlato directo en el teatro. ¿La producción tendrá que cobrarles a la cantidad de chicas (y no tan chicas y también chicos) que se paran en la puerta del teatro para sacarse una foto junto a la marquesina de Castro, Heredia y Martínez? Sería complejo de implementar, cierto, pero el mundo del espectáculo marplatense da para todo.

Por más que Ricardo Fort tenga mucho dinero no le fue fácil conseguir una sala en Mar del Plata. Según cuentan otras fuentes, ofreció mucha plata, pero el ámbito teatral le negó acceso. “Lo suyo no es lo nuestro”, dice un productor en off. Otro llama a la lógica: “Cuando propuso la obra ya estaban todos las salas grandes ocupadas”. Al final, cerró con el Diagonal, ubicado cerca del shopping regenteado por un grupo de anarquistas que debatieron mucho antes de dar el sí. Fort tendrá la sala de jueves a domingos y el resto la programarán ellos. El estreno estaba previsto para el 7, pero ahora él plantea que será el 15. “Estamos remodelando la sala porque desde hace años que no se usaba. No es la dimensión de teatro que quería pero… Primero estuve en tratativas con el Tronador, pero al final pude conseguir éste”, señala. “Cuando quise definir con el Tronador me dijeron que no. El dueño del Hermitage me ofreció el Auditorio del Provincial, pero me pidió medio millón de dólares, lo cual me pareció una barbaridad. No sé si fue un insulto o un chiste. Antes de ése me habían ofrecido el Provincial, donde está Rumores [N. de la R.: Rumores estaba programada desde hace tiempo]”. –¿Cuánto estás invirtiendo en el Diagonal? –Hay que arreglarlo pero, por suerte, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, me está ayudando, cosa que agradezco mucho. –¿Es decir que estás arreglando la sala también con dineros públicos? –Estoy devolviendo a Mar del Plata un teatro muy lindo que estaba abandonado. Según fue publicado en Noticias, el aporte del gobierno provincial sería de unos 100.000 pesos. Según Fort, él invierte unos 160.000 pesos para la obra. Sin embargo, el mismo presidente del Instituto de Cultural Provincial, Juan Carlos D’Amico, negó que existiera tal acuerdo. A lo sumo recordó que en otra instancia, sí hubo una charla entre el gobernador Scioli y el mismo Fort para arreglar el Salón de las Américas del Provincial, acuerdo que no prosperó y en el cual la provincia iba a aportar dineros públicos.

Comenzará en enero con reposiciones y un estreno

El Complejo tiene su temporada

Opinión Por Marcelo Stiletano

Continuación de la Pág. 1, Col. 6 Precisamente Mucho ruido... es una de las obras que quedó colgada de este año, la otra es Estado de ira, de Ciro Zorzoli, que se estrenará en julio en el Sarmiento, con las actuaciones de María Inés Sancerni, Diego Velázquez y otros. La tercera era Ultramarina, un proyecto que por ahora quedó en la nada de Edgardo Cozarinsky y de Marcelo Lombardero. Una de las grandes apuestas del año –uno que estará tapado de celebraciones por el 50° aniversario del teatro y el Bicentenario de la Patria– sin duda es la de hacer La vida es sueño, de Calderón de La Barca, en la sala Martín Coronado, con la dirección del prestigioso (y provocador) régisseur español Calixto Bieito. La propuesta llegará en el mes de julio con la actuación de Joaquín Furriel, Osvaldo Santoro y Ana Yovino, entre otros. También en el San Martín se estrenará el 31 de marzo la obra del francés Jean Luc Lagarce, Estaba en casa y esperaba que llegara la lluvia, con dirección de Stella Galazzi, y la actuación de Graciela Araujo, Martha Lubos y Valentina Bassi, entre otros. Los sueños de Cohanaco, de Mariana Chaud y Leandro Halperín, se estrenará en abril, en la sala Cunill Cabanellas, con la actuación de Agustín Rittano y Santiago Gobernori, entre otros. Mientras que en agosto subirá a escena El Dibuk, una obra clásica del teatro judío de Shlomoh An-Ski, que dirigirá el argentino radicado en Israel, Jacobo Kaufmann. Y el último título del San Martín será el que ofrecerá en julio, El panteón de la Patria, de Jorge Huertas. El Presidente Alvear, por su parte, albergará no sólo a La gran magia, la obra de Eduardo De Filippo que soñaba hacer Daniel Suárez Marzal (a partir del 15 de abril), con Víctor

Las criaturas de Julio Chávez

Figó, De Grazia, Surraco e Inoccenti harán Mucho ruido y pocas nueces TGSM

“Es evidente que no tenemos la producción de otros años, los tiempos han cambiado” Laplace, Karina K y Gustavo Garzón, sino también a gran parte de los programas que presentará el Ballet Contemporáneo, que repondrá Carmina Burana, de Mauricio Wainrot (en mayo), y presentará obras de Carlos Casella, Diana Theocharidis y Wainrot, en septiembre. Además, se está en negociaciones con las autoridades culturales francesas para hacer una obra del coreógrafo Jean Claude Gallotta. Más acá en el tiempo, a partir del 19 de marzo, la compañía repondrá Voces del silencio, de Wainrot, y Escrito en el aire, de Oscar Araiz. El Sarmiento recibirá en marzo a

El pasado es un animal grotesco, con texto y dirección de Mariano Pensotti, con Julieta Vallina, Juan Minujín, Javier Lorenzo y Pilar Gamboa. El Regio, a Santa Juana de América, de Andrés Lizarraga, con dirección de Hugo Alvarez, con Juan Palomino y Alejandra Flechner, entre otros, y Largo viaje de un día hacia la noche, de Eugene O’Neill, con dirección de Villanueva Cosse. Y el Teatro de la Ribera, sí, evidenciará un cambio sustancial, ya que pasará a ser la sede oficial de todas las actividades relacionadas con el tango en la ciudad. Aunque recibirá a la Orquesta del Tango de la Ciudad y al futuro Ballet del Tango, Staiff destacó que seguirá bajo la órbita del Complejo Teatral y que, de hecho, está programado en esa sala el estreno de 1810, una obra de Martín Coronado que dirigirá Eva Halac. “Es evidente que no tenemos el nivel de producción de otros años, los tiempos han cambiado y los presupuestos también, pero la calidad siempre será la mejor –concluye Staiff, que continuará todavía en su cargo por lo menos hasta mediados de 2011–. Recién ahí vendrá otro.”

Bastante tiempo antes de zambuartista plástico siempre estuvieron llirse como personaje en las agitadas en el primer plano. “La TV es muy aguas de Tratame bien, Julio Chávez demandante y, en el momento de hablaba desde otro terreno de la preelegir, prefiero otras cosas. Es disencia constante de los conflictos fafícil que la televisión pueda aunar miliares en su trabajo artístico. “Las los gustos que me da la profesión: mías son familias ignorantes. Mis asunto, libro, director, tiempo. Todo personajes no están analizados: no es más difícil”, reconoció en aquel tienen cultura de observarse ni re2008 que parece, a la luz de lo que flexionan acerca de su naturaleza”, acaba de ocurrir con Tratame bien, comentaba a LA NACION en febrero de mucho más lejano. 2008, cuando se disponía a acometer * * * como productor y director teatral el Quizás hayan sido coincidencias desafío simultáneo de reponer una O tal vez fuerzas que terminaron obra y estrenar otra. mancomunándose para que finalNo es difícil entender a partir de mente la TV encontraestas palabras y del exira un espacio propicio gente rigor con el que Gracias a sus para alguien en condiencara nuevos comprociones de enaltecerla y misos (todos saben que roles en Trata- quitarle, desde el lugar es totalmente reacio intérprete, algo de a interpretar papeles me bien y Epi- del su proverbial tendenen los que no cree) que cia a banalizar todo lo Chávez haya puesto estafios es el que tiene entre manos. te año todo su enorme Lo cierto es que, durantalento al servicio del personaje del te 2009, Chávez encongran personaje televisitró una doble y simulvo de 2009 en términos año que se va tánea puerta abierta de ficción: el atribulado y atormentado José, para que sus inquietuuno de los protagonistas de Tratades hayan encontrado finalmente un ámbito compatible con las inquietume bien. des del medio. Hasta 2009, la televisión había Primero, a través de la segunda ocupado un lugar secundario en cualquier recorrido por la trayecparte de Epitafios, uno de los ciclos toria profesional de Chávez, sobre con el que HBO busca iniciar en el mercado televisivo hispanoparlantodo cuando se hace desde sus prote un camino similar al que llevan pias palabras. Una notable trayecadelante sus elogiadas producciotoria teatral (primero como actor y más tarde convertido en dramanes realizadas en Estados Unidos. turgo, productor y director), un puY casi inmediatamente después, por medio de Tratame bien, una señado de aplaudidas composiciones rie de Pol-ka que acaba de concluir cinematográficas y su labor como

rodeada de elogios, al punto de ser reconocida como una de las ficciones de 2009. Junto a Cecilia Roth, que fue nada casualmente su compañera en ambos ciclos, Chávez pudo al fin encontrar su lugar en el mundo televisivo. Lejos de las maratónicas exigencias de las tiras diarias, el espacio de un actor de sus características es el de la producción semanal, con más tiempo y espacio para construir personajes con espesor dramático, fortaleza e identidad propia. “Roth y Chávez demostraron ser capaces de encarnar contradicciones y aristas que el guión del ciclo aún no ha descubierto sobre sus personajes”, señaló desde estas páginas Dolores Graña al comentar Tratame bien. Y así fue. Había que ver a Chávez derrochando humanidad con sus arrestos de furia o sus retrocesos culposos, buscando nuevas formas de expresión a través del cuerpo y de la voz, apelando a la comprensión y el sosiego en soliloquios o desesperados diálogos con sus seres queridos para protagonizar algunos de los mejores momentos de 2009. Porque la TV lo cobija gracias a grandes personajes (al José de Tratame bien se suma el policía que encarna en Epitafios II) y porque logró con su presencia hacer todavía más atractivos los programas en los que apareció, además de disimular y atenuar sus puntos flacos, Julio Chávez es, para esta columna, la gran figura del año. [email protected]