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Página 8/Sección 5/LA NACION

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URUGUAY

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Sábado 14 de julio de 2007

) Prevalece el sistema pastoril

El Hereford domina las praderas y los rodeos vacunos Tiene la mayoría de los 12 millones de cabezas que hay en el país; en la estancia La Macarena, Miguel Martirena es la cuarta generación de criadores de pedigreee SAN JOSE DE MAYO , Uruguay (De un enviado especial).– Paisaje típico del campo uruguayo. Praderas onduladas salpicadas por palmeras y montes de eucaliptos y otros árboles. Las ovejas, en este país, muy numerosas, pastan tranquilas hasta que huyen despavoridas cuando notan las presencia de extraños. Entremezcladas con ellas los típicos vacunos marrones y blancos: son los Hereford, que en el Uruguay predominan astados, representando una amplia mayoría del rodeo total del país, de unos 12 millones de cabezas. Aquí, en el departamento San José, al sur del Uruguay, y a 120 kilómetros de Montevideo, está la estancia La Macarena, de unas 3200 hectáreras, propiedad del joven productor Miguel Martirena Bove, que al mismo tiempo es presidente de la Sociedad de Criadores de Hereford. “Acá la raza se produce pura y astada. Tenemos un plantel que viene desde 1887 (de mi bisabuelo paterno) y soy la cuarta generación que trabajo sobre el mismo rodeo de pedigree que provee de toros propios al ganado comercial de otro establecimiento que tenemos en Tacuarembó (en el Norte, cerca de la frontera con Brasil)”, comentó Martirena a LA NACION. “En Tacuarembó nacen los terneros y terneras que llegan hasta aquí y que luego de una preselección algunos quedan como reproductores y otros van a engorde que se venden a 450 kilogramos al frigorífico que trabaja para carne Hereford”, agregó el criador. –¿Cómo son los suelos de esta región? –Los suelos son muy buenos, muy mejorables, aceptan muy bien la implantación de pasturas y cultivos de verano, como sorgo y maíz, que son muy importantes para darle al ganado en invierno. Para Martirena, por una cuestión de precios el maíz es prohibitivo para producir carne, por eso usa grano húmedo de sorgo. “Se cosecha con 28 por ciento de humedad se mi-

Para Mujica, la rentabilidad del ganadero es buena

“El Estado tiene que intervenir siempre” Lo dijo el ministro de Ganadería uruguayo, José Mujica

Miguel Martirena Bove, en su campo La Macarena FOTOS DE FACUNDO BASAVILBASO/ENVIADO ESPECIAL

cropica y se confecciona el silo en bolsa de plástico. Se levanta en el otoño y en el invierno se los damos al ganado”, explicó. En este establecimiento de impecables pasturas se realiza la invernada y se producen los toros. El verde de la avena completa un cuadro de intensos colores. En diferentes lotes separados co alambrado eléctrico se alimentan novillos que a fin de año van a faena; vaquillonas con primera preñez, toros jóvenes que aún no fueron puestos en servicio y terneros, con una carga de 1,4 animal por hectárea. Si bien reconoce el buen momento que atraviesa la ganadería vacuna uruguaya y el mercado de carnes. Martirena sostuvo que la reciente reforma fiscal, en la que se recorta la devolución de los impuestos

indirectos provoca cierta incertidumbre. “Vamos a ver cómo nos pega...”, acotó. Martirena pasa la mayor parte de la semana en sus campos. También se ocupa de la presidencia de la sociedad de criadores en las oficinas de Montevideo y los fines de semana se encuentra con su familia (esposa y cinco hijos) en la ciudad capital. –¿Todos los productores uruguayos viven en el campo, como usted? –Hay de todo. Los ganaderos del Norte viven más en el campo. Los del Sur, usan más Montevideo como base.

Sistema pastoril Lo que se concluye de la visita a los campos uruguayos es que aquí la ganadería se maneja mayoritariamente con un sistema pastoril. Es muy

poco (el 4 por ciento) el engorde a corral (feedlot). El manejo de las pasturas se hace bajo tres modalidades; en la zona del litoral se trabaja sobre la base de cultivos de trigo y cebada asociados con praderas. Esta es una modalidad muy uruguaya, se siembra mezclando las semillas, se levanta la cosecha y queda la pradera, es una manera de achicar costos. Después hay mejoramientos extensivos en cobertura: arriba del tapiz natural se siembran semillas de trébol, lotus y se fertiliza. El otro sistema de mejoramiento es con trébol blanco, lotus, raigrás o festuca. En general los suelos uruguayos tienen déficit de fósforo y cuando se hacen estos cultivos asociados se usan fertilizantes binarios: sulfato de amonio y luego se refuerza con nitrógeno.

MONTEVIDEO (De un enviado especial).– En este país se reconoce con satisfacción que el Estado no interviene en los mercados. Incluso no tiene retenciones a la exportaciones, como ocurre en la Argentina. Sin embargo, en un encuentro fugaz con LA NACION, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, José Mujica, dijo que “el Estado tiene que intervenir siempre, pero el asunto es cómo y en qué interviene”, aunque enseguida aclaró: “Tratamos de toquetear lo menos que podamos”. El funcionario hizo esas declaraciones luego de firmar con el presidente del Banco de la República Oriental del Uruguay, Fernando Calloia, un plan de refinanciación de deudas para pequeños y medianos productores. En este país existen programas de ayuda para los productores, según informó el director de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria (Opypa), dependiente del Ministerio de Ganadería, Martín Buxedas López. Explicó que hay un programa ganadero que cuenta con 19 millones de dólares para ejecutar en varios años y que tiene dos líneas de trabajo. Una es promover la cría, ya que es una actividad de más largo plazo y que ha sido menos dinámica que el engorde. La otra apunta a promover “proyectos novedosos” y consiste en “subsidios no generalizados sino para determinados grupos de empresas familiares y medianas”, concluyó.

Sin embargo, una luz de alerta se encendió en la cadena de ganados y carnes. La última reforma tributaria decretada a principios de mes recorta la histórica devolución de impuestos directos que el sector paga para los productos de exportación. Si bien la medida entrará en vigor en octubre y el gobierno abrió un ámbito de discusión, en el sector de ganados y carnes se lo da como un hecho y crea cierta incertidumbre. Históricamente, el gobierno devolvía el 5,50 por ciento que la industria pagaba por dichos tributos. A partir del nuevo decreto, el reintegro se reduce al 2,50 por ciento.

Preocupación “Esta medida puede significar una pérdida para el sector de 38 millones de dólares (entre 28 de carnes y 10 de cueros)”, dijo el director ejecutivo de la Cámara de la Industria Frigorífica (CIF), Daniel Belerati. Para Miguel Martirena, productor ganadero en el departamento San José y presidente de la Sociedad de Criadores de Hereford, la medida oficial provoca incertidumbre. “Vamos a ver cómo nos pega”, señaló. Sobre el tema, el ministro Mujica opinó que “todos los gremios agropecuarios del mundo tienen dos características en común: trabajan la tierra y lloran”, y concluyó: “La rentabilidad (del ganadero) es buena; aumentaron los costos pero aumentó más la rentabilidad en el último años”.