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CAMPO
| Sábado 21 de junio de 2014
inseguridad rural | hechos violentos en la provincia de Buenos aires
El interior, víctima de hechos de violencia
El abigeato se incrementó en Olavarría, Tandil y Azul; los productores demandan mayor presencia policial
El crecimiento de la ola delictiva sorprende al campo con las defensas bajas
Recomendaciones para el productor LO QUE ESTÁ BIEN Maximizar medidas de seguridad en puertas y ventanas de la vivienda rural
Tener alarma y cámaras de seguridad
Tener perros guardianes
Recomiendan a los productores que denuncien los robos y los asaltos y que actúen en forma solidaria con sus vecinos Roberto Seifert LA NACiON
“Las noches claras de luna son peligrosas” es la insólita pero certera advertencia para los hombres de campo para evitar ser víctimas de la delincuencia rural en provincia de Buenos Aires. En el campo se vivía muy tranquilo. Pero ese envidiable privilegio hace mucho tiempo que se esfumó y hoy la inseguridad es casi la misma que se vive en cualquier zona urbana. Si bien las estadísticas oficiales de la provincia indican que desde junio de 2011 a 2013 incluido el robo de ganado disminuyó un 40 por ciento, hay muchas denuncias que no se hacen y eso distorsiona la situación real. Por eso en el campo sienten que los delitos se incrementan. “Aumentó mucho el abigeato (robo de ganado), en las zonas de Tandil, Olavarría, Azul, seguido de la carneada para vender cortes en forma clandestina”, dijo a la nacion Abel Guerrieri, representante de la Sociedad Rural Argentina (SRA) ante la Mesa Provincial de Prevención de Delitos Rurales, que funciona en el Ministerio de Seguridad bonaerense. A la luz de los acontecimientos, los productores deben empezar a ingeniárselas para protegerse. En ese sentido el dirigente dijo que “hay que tener mucho cuidado las noches de luna, porque los delincuentes aprovechan la penumbra para escapar, cosa que en noches cerradas se les dificulta”. Guerrieri agregó que ningún consejo al productor difiere del que se le pueda dar a un habitante urbano. “Cuando salen o entran del establecimiento les decimos que observen bien si hay algún movimiento sospechoso de personas o vehículos. En ese caso deben eviten salir. No aconsejamos salir en horario nocturno. Tampoco está demás reforzar las cerraduras en puertas y ventanas de las casas; instalar alarmas y cámaras de seguridad, mantener cerradas las tranqueras con candado y tener perros guardianes”, señaló.
Dedicados a la prevención Consejos y acciones en la zona rural bonaerense
enrique a. salcedo Crio. gral./ sup. de seg. rural
“Los Comandos de Prevención Rural (CPR) estarán afectados las 24 horas del día y los 365 días del año a la prevención rural”
abel guerrieri mesa de prev. delitos rurales
“Aumentó mucho el abigeato y la carneada en zonas de Tandil, Olavarrría y Azul para vender cortes en forma clandestina”
pedro apaolaza mesa de prev. delitos rurales
“En el campo todo el mundo se conoce. Es fácil darse cuenta cuando alguien no es de la zona y si hay algún auto sospechoso”
En el Ministerio de Seguridad bonaerense saben de la problemática y acusaron el golpe. Se creó la Superintendencia de Seguridad Rural, con personal y móviles que se destinan exclusivamente a patrullar los campos y para ello se incorporaron efectivos, cien camionetas nuevas, un helicóptero y un avión (como se informa por separado). “Por supuesto que con eso no alcanza, pero por lo menos se ha dado una muestra que el ministro de Seguridad, Alejandro Granados cumplió con lo que había prometido. Además, cuando nosotros llamamos tenemos respuestas”, reconoció Guerrieri. Según el comisario general Enrique Alejando Salcedo, a cargo de la citada superintendencia, la zona más virulenta es la de Cañuelas y la de todo el corredor de la ruta 6, que une las localidades de Brandsen y Cañuelas y está bordeando el conurbano. “Y en el centro de la provincia está la faena clandestina en Olavarría, Tandil y Azul”, agregó. Desde la cartera de Seguridad también instan a los productores a ser discretos a la hora de concretar operaciones comerciales y bancarias son actitudes a tener en cuenta. Por su parte, Pedro Apaolaza, de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) e integrante de la Mesa de Prevención, dijo que “en el campo todo el mundo se conoce y es fácil darse cuenta cuando alguien no es de la zona y si hay algún auto sospechoso. El productor debe ser solidario y avisar y eso es lo que hacemos, entre todos nos cuidamos un poco”. Según Apaolaza, en muchos lugares, el personal policial es escaso. “Por eso debemos colaborar con la fuerza aportando información de lo que ocurre en los distintos distritos de la provincia”, agregó. Apaolaza insiste en la importancia de la presencia policial y agregó que la patrulla rural debe cumplir su misión para la que se creó: quedarse en el campo y no en el pueblo cumpliendo otras funciones. “Muchas veces vemos que los móviles son derivados a otras tareas, como
Fernanda corbani/archivo
Mantener la tranquera cerrada con candado Observar si hay algún movimiento sospechoso de vehículos o personas antes de abandonar el establecimiento. Tener un sistema de alerta vecinal y avisar de la presencia de vehículos y personas sospechosas. Ser solidario con el vecino
LO QUE ESTÁ MAL Estar armado
El ingreso y egreso nocturno del establecimiento
Comentar con extraños o en lugares públicos transacciones comerciales No avisar a la patrulla cuando observa movimientos sospechosos de vehículos o personas, ya sea en cercanías de su establecimiento o de vecinos
No denunciar hechos delictivos sufridos
Denunciar hechos delictivos sufridos Pedir antecedentes al personal a contratar
LA NACION
custodiar partidos de fútbol, bailes y dejan de estar en el campo. El hombre rural debe gozar de las mismas garantías que el urbano”, señaló el dirigente. “Es la única manera de que el productor esté protegido. Se pueden cerrar las tranqueras, pero los ladrones cortan los alambres para entrar”, agregó. Consultado si los productores están armados, el dirigente dijo “siempre algún arma hay, es normal que así sea, pero no es lo más recomen-
“La zona más virulenta es la de Cañuelas y todo el corredor de la ruta 6” dable”. En cambio, Apaolaza aconseja al productor que avise cuando se ausenta y que tome precauciones cuando va al pueblo y realiza operaciones comerciales. Miedo “ Tenemos personas que no quieren vivir más en el campo. La sensación es que estamos a merced de los ladrones. Estamos evaluando medidas de seguridad para todos los campos que administramos para brindar a la gente algo de tranquilidad”. Así
definió el ingeniero Carlos Alejandro de La Tour el momento que viven productores y empleados en la zona de Vivoratá, en la provincia de Buenos Aires. Dijo que desde que trabaja en esta actividad (fines del 2003) en esa zona del partido de Mar Chiquita hubo varios hechos delictivos con diferente grado de gravedad y de violencia, como se informa por separado. “Más allá de la voluntad de la policía, creo que no tienen los recursos necesarios. Al hablar con ellos, dicen que cuentan con 20 litros de gasoil por móvil, camionetas con poco mantenimiento, sin sistemas de comunicación y los celulares son los particulares de los agentes… ¿cómo se hace para trabajar en zonas rurales con eso?”, se preguntó De La Tour. En tanto, el presidente de la Sociedad Rural de Mar Chiquita, Eduardo Freije, dijo que “muchísimos delitos menores no se denuncian”. Agregó que están enviando correos electrónicos y mensajes a personas damnificadas pidiendo que realicen las denuncias “ya que, si no, las estadísticas indican otra cosa”. En cuanto a la actitud que deben adoptar los productores al ser víctimas de un asalto, el dirigente dijo que solicitaron instructivos a la policía de la zona, pero aún no tuvieron respuestas.ß
Uno de los hechos más violentos de los últimos tiempo ocurrió en la Estancia Vivoratá, el 30 de abril último por la mañana. Según recordó el ingeniero Alejandro De la Tour, que trabaja para ese establecimiento, aparentemente, los delincuentes habrían entrado caminando desde la ruta hasta el casco, unos siete kilómetros, durante la noche anterior. “Eran cuatro, estaban armados, dos encapuchados y dos a cara descubierta. Cuando vieron llegar al ayudante del encargado al escritorio, lo redujeron, maniataron y comenzaron a hacer preguntas. Lo golpearon mucho tanto a él como al encargado a quien le rompieron costillas y tabique”, señaló el administrador. Según De la Tour también hubo mucha violencia verbal. Cuenta cómo lo amenazaron al encargado: “Guacho, danos la plata porque si no te matamos”, dijo que fueron las palabras de los delincuentes. Y además contó que hubo “violencia psicológica”. Recordó que “Le pasaban un cuchillo por el cuello a la empleada de la casa delante de la mujer del encargado diciéndole «si no nos das la plata la matamos a ella y vos vas a ser la culpable»”. Finalmente dijo que los delincuentes se fueron con las cosas robadas: televisores, computadoras, cuchillos, recados y ropa en la camioneta del campo, que luego dejaron en la ruta. De la Tour también recordó casos de abigeato en diversas ocasiones en la misma Estancia Vivoratá, en Estancia San José (en Energía, partido de Necochea) y en Estancia Santo Domingo (en Lobería). Relevamiento Por su parte, Abel Guerrieri, director de Acción Gremial de la Sociedad Rural Argentina e integrante de la Mesa de Prevención de Delitos Rurales de la provincia de Buenos Aires, mostró a la nacion un relevamiento efectuado por los delegados zonales de la entidad. Los datos más significativos son los siguientes: ● En la localidad de Napaleufú, en el partido de Balcarce, zona muy conflictiva, proponen que se realicen controles en caminos rurales en forma constante. ● General Lavalle desde el paraje Pavón –Punta Médanos hasta la denominada Cava de Cabezas, es una zona que carece de control, Se observa la circulación de gran cantidad de gente extraña y por eso se propone que se implemente un sistema de control por parte de las patrullas rurales como sucede en otros partidos. ● En Coronel Dorrego la patrulla rural está compuesta entre agentes y jefes son entre 5 y 6 personas que “no alcanzan para cubrir los turnos”. ● En Nueve de Julio la patrulla rural está formada con jóvenes provenientes de los pueblos de la zona, que conocen y que han aprendido a trabajar en forma específica en delitos rurales. ● En Tapalqué hay controles de las patrullas rurales en los caminos de tierra. “Es algo positivo, pero uno de los inconvenientes es el grave estado de intransitabilidad de los caminos rurales, sobre todo por falta de mantenimiento y exceso de agua, sumado a que los móviles son 4x2. Esto hace que las patrullas restrinjan sus recorridas”, afirman.ß
Refuerzan las patrullas con móviles y personal capacitado Se crearon los Comandos de Prevención Rural, que se formarán con efectivos que tienen conocimientos geográficos de la zona “Últimamente notamos que hay campos que están descuidados totalmente. Cada vez se ven menos puesteros. Lo hablo permanentemente con los productores. Nosotros aconsejamos que siempre haya puesteros”, fue la opinión del comisario general Enrique Alejandro Salcedo, que se desempeña al frente de la Superintendencia de Seguridad Rural dependiente del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires. Salcedo habló con la nacion acerca de las medidas de prevención que tomó el gobierno provincial para combatir el delito rural y del papel que juegan en esto los productores. “Como los pueblos son muy chicos
y se conocen todos, lo que se sugiere es que los productores no comenten cuando concretan una venta de hacienda, o que van a cambiar la camioneta o que fueron al banco a realizar algún movimiento”, recomendó el jefe policial. Otra observación que hizo Salcedo fue sobre los que dicen practicar la caza. “Hay algunos que lo hacen por deporte o porque viven de eso, pero hay otros que en realidad van a hacer inteligencia y ver los campos y saber quien está o no está, a qué hora vienen, a qué hora se van..., es un sinfín de cuestiones.” En consecuencia, el superintendente dijo que “la mejor prevención que debe realizar un productor es
que ante un hecho o duda o ver personas sospechosas, es llamar a la policía para que concurra e identifique a las personas”. Salcedo recordó que la Superintendencia de Seguridad Rural se creó en junio de 2011, a instancias del reclamo de una mayor presencia policial que formuló la Mesa Provincial de Prevención del Delito Rural, que funciona en el ámbito del Ministerio de Seguridad Bonaerense. Desde esa fecha, según las estadísticas oficiales, bajó el 40 por ciento la cantidad de robos de animales en la provincia. A manera del mapa del delito rural el funcionario sostuvo que las zonas más caliente son las de Cañuelas
y la de todo el corredor de la ruta 6, que une las localidades de Brandsen y Cañuelas y está bordeando el conurbano. “Y en el centro de la provincia está la faena clandestina en Olavarría, Tandil y Azul”, completó. Sistema Siempre atendiendo el pedido de la Mesa de Prevención, el alto oficial recordó que el 11 de este mes se lanzó en General Alvear el Sistema de los Comandos de Prevención Rural (CPR), dependiente de la citada Superintendencia. “Anteriormente a esto había algunas patrullas rurales en algunos distritos bonaerenses, pero ahora
se amplió a toda la provincia con la creación de estos CPR para dinamizar la prevención en las zonas rurales”, explicó Salcedo. Ese mismo día se concretó la incorporación de cien patrulleros nuevos y un helicóptero que había prometido tiempo atrás el ministro de Seguridad, Alejandro Granados, quien también se comprometió a entregar otros cien patrulleros en unos tres meses, según informaron fuentes del ministerio. Además, según Salcedo, a fin de año se incorporarán a la fuerza 10.000 efectivos, “de los cuales una parte, que todavía no sabe cuánto es, será afectada a la Superintendencia de Seguridad Rural”.
Para ello explicó que se abrieron 26 escuelas descentralizadas en distintos lugares de la provincia. “Lo importante es que con esta Superintendencia se hizo una especialización. Es decir, los policías que se están formando van a tener la especialidad en seguridad rural y es personal que tiene conocimiento sobre el campo y los delitos rurales en sí”, señaló el funcionario bonaerense. El personal de los CPR “estará afectado las 24 horas del día los 365 días del año a la prevención rural y siempre será el mismo efectivo quien recorra la zona, para que se pueda identificar mutuamente con el vecino”, concluyó Salcedo.ß