JESÚS CAMBIÓ MI VIDA LOS PASTORES—Contar Su historia ahora es mi responsabilidad Serie de Adoración de Adviento – Semana 4 Anuncios y ofrendas:

Cancionero #513 ¡Oh, santísimo, felicísimo!

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3 estrofas

Canciones adicionales Cancionero #507 – En los campos se ha escuchado

TB-693

Llamado a la adoración: “Dichosos son los humildes”, exclamó Jesús. Dichosos son los que están disponibles. Dichosos son los conductos, los túneles, las herramientas. . . Es por eso que el anuncio fue dirigido primero a los pastores. Ellos no le preguntaron a Dios si estaba seguro de lo que estaba haciendo. Si el ángel se hubiera aparecido a los teólogos, ellos hubieran consultado primero sus comentarios. Si se hubiera aparecido a la élite, ellos hubieran mirado a su alrededor para ver si alguien los estaba mirando. Si se hubiera aparecido a las personas exitosas, ellos hubieran mirado primero su calendario. Por eso fue a los pastores. Hombres que no tenían que proteger su reputación, ni un interés egoísta, ni peldaño alguno que subir. Hombres que no sabían lo suficiente como para decirle a Dios que los ángeles no le cantan a las ovejas y que los mesías no se encuentran envueltos en trapos y durmiendo en un pesebre (One Incredible Moment [Un momento increíble], página 31).

Cancionero #510 ¡Oh, aldehuela de Belén!

NTB-156 – Igual

Canción adicional Cancionero #506 – Cuidando estaban el TB-144 – Antiguo redil Winchester

Lectura responsiva/Para encender la vela:

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3 estrofas

7 estrofas

Líder:

¿Qué prestigio tenia un pastor local en los tiempos del nacimiento de Jesús? El pastoreo era una ocupación que todos necesitaban y que nadie deseaba. Los hebreos en particular, valoraban el aseo y la pureza. La vida entre las ovejas implicaba pies cansados, largos turnos de trabajo y olores indeseables. ¿Quiénes fueron los que recibieron la invitación para dar la bienvenida al rey recién nacido? Sus nombres no quedaron registrados en la Biblia. Pero a pesar de ser unos desconocidos, honraron la lista de invitados para el momento más feliz que haya registrado la historia de la humanidad.

Solo 1:

Venid, adoremos.

Solo 2:

Emanuel, Dios con nosotros.

Líder:

Imagina el asombro en esa madrugada, para aquellos que tenían humildes manos campesinas. En un momento, los cielos estaban oscuros, y sus ánimos quizás también lo estuvieran. Al momento siguiente, los ángeles estaban ante su presencia, con noticias sorprendentes. Es probable que los pastores compartieran nuestras preguntas: ¿Por qué aquí? ¿Por qué nosotros? Ellos tuvieron mucho miedo. (Encender la cuarta vela de Adviento).

Solo 2:

Mientras encendemos la cuarta vela, se nos llama a abrir nuestros corazones al milagro de la venida de Cristo y su plan para nuestra vida.

Líder:

Pero estos hombres sencillos siguieron las instrucciones sencillas que les dieron los ángeles. Recorrieron el camino hasta Belén y formaron parte de una experiencia que incontables generaciones de cristianos han envidiado. Al marcharse, le relataron a todo aquel que encontraron en el camino las cosas que les habían sucedido. Sus vidas nunca volvieron a ser las mismas; el cielo jamás volvería a parecerles tan oscuro. Ahora sabían que mientras cuidaban de sus ovejas durante la noche, Alguien mucho más grande estaría cuidándolos a ellos.

Solo 1:

Quizás al envejecer, sus mentes recordaran aquella extraordinaria

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imagen del cielo abriéndose ante sus ojos. Tan pronto como el primer ángel entregó su mensaje, apareció “una multitud de ángeles del cielo” (Lucas 2:13), todos alabando a Dios: Todos:

“Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los que gozan de su buena voluntad” (Lucas 2:14).

Solo 2:

Esas palabras no serían olvidadas; no mientras esos pastores tuvieron vida y aliento. Los ángeles podían aparecérseles a ellos. A ellos. Y habría paz en la tierra para “los que gozan de su buena voluntad”.

Líder:

¿Quién hubiera dicho que Dios podía favorecer a un pastor? (¿Por qué el nacimiento de Jesús, páginas 83-87)

Drama:

Semana #4 DRAMA Una vez más Por Martyn Scott Thomas

© 2007 por Martyn Scott Thomas. Todos los derechos reservados. Usado con permiso.

Tema:

El mensaje de Dios.

Escritura:

Lucas 2:8-24

Sinopsis:

Dos pastores meditan en las actividades de la noche anterior.

Personajes:

Jorge – un pastor afuera de Belén. Marco – su amigo y también un pastor.

Vestuario:

Ropa bíblica o moderna.

Escenario:

Vacío.

Tiempo:

4 minutos.

[Marco está parado en el centro del escenario mirando hacia el cielo] Jorge:

[entra y camina hacia Marco] Marco, ¿qué estás haciendo?

Marco:

Sólo mirando.

Jorge:

Se supone que tienes que estar mirando a las ovejas y no al cielo.

Marco:

Lo sé, pero están casi dormidas. 43

Jorge:

Casi no es suficiente. Sabes que Caleb se pondrá muy enojado si una de sus ovejas se pierde; especialmente si es por nuestra culpa.

Marco:

No se van a perder.

Jorge:

¿Cómo lo sabes?

Marco:

No se perdieron anoche.

Jorge:

Eso fue anoche.

Marco:

Lo sé. ¿Fue maravilloso, no es cierto?

Jorge:

¿Maravilloso que ninguna de las ovejas se perdió cuando corrimos al pueblo? Claro que sí, pero no creo que podamos tener tanta suerte dos noches seguidas.

Marco:

Me estaba refiriendo a los ángeles.

Jorge:

Ah, sí. No creo que tengamos tanta suerte otra vez.

Marco:

Pero fue genial.

Jorge:

Supongo que sí, pero, ¿no te dio miedo?

Marco:

Ah, sí. ¿No me oíste gritar?

Jorge:

Pensé que era una oveja.

Marco:

Las ovejas dicen, [imitando una oveja] “Beee!” Yo estaba gritando, [gritando muy fuerte y sonando asustado] “Aaaaaay!”

Jorge:

Puedo escuchar la diferencia.

Marco:

Pero valió la pena. Nunca había visto algo así.

Jorge:

O escuchado algo así. Pensé que mi tía Miriam podía cantar, pero esos ángeles eran celestiales.

Marco:

[le da una mirada incrédula a Jorge]

Jorge:

¿Y el bebé?

Marco:

Acostado en un pesebre, tal como los ángeles dijeron.

Jorge:

¿Por qué crees que no fueron más personas?

Marco:

¿Qué quieres decir? 44

Jorge:

Quiero decir que, ¿por qué no fueron más personas al pesebre?

Marco:

No lo sé.

Jorge:

Y después de que les contamos a todos lo que habíamos visto, ¿por qué no fue nadie más a ver al bebé?

Marco:

Tal vez no nos creyeron.

Jorge:

¿Por qué no?

Marco:

Pues míranos. Sólo somos unos pastores.

Jorge:

¿Y?

Marco:

Vivimos en el campo.

Jorge:

¿Y?

Marco:

Olemos a oveja.

Jorge:

¿Y?

Marco:

Tal vez si hubieran visto a los ángeles también.

Jorge:

Sí, tal vez fue eso. Estaban esperando a los ángeles.

Marco:

Estoy seguro que todos hubieran creído entonces.

Jorge:

Tal vez van a regresar.

Marco:

Tal vez.

Jorge:

Oye, espera. ¿Es eso lo que estabas buscando?

Marco:

Tal vez.

Jorge:

Entonces, crees que si regresan, ¿vamos a poder hacer que algunas personas vengan y escuchen su mensaje?

Marco:

No sé. Sólo estaba esperando que regresaran por nosotros.

Jorge:

¿Sólo por nosotros?

Marco:

Pues, sí.

Jorge:

¿Por qué quieres que regresen sólo por nosotros? 45

Marco:

Sólo quería agradecerles.

Jorge:

¿Agradecerles qué?

Marco:

Agradecerles por asegurarse de que no nos perdiéramos ver al bebé.

Jorge:

Es una muy buena idea. ¿Te importaría si los busco contigo?

Marco:

Pero, ¿qué vamos a hacer con las ovejas?

Jorge:

No se fueron a ningún lado anoche [mira hacia el cielo].

Marco:

Eso es lo que pensé [mira hacia el cielo].

[Se cierra el telón] Alabemos al Señor:

Cancionero #503 ¡Al mundo paz!

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3 estrofas

Canciones adicionales Cancionero #507 – En los campos se ha escuchado

CA #169 – Aleluya CA #123 – ¡Brilla en mí!

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CA-169 Canción adicional CA-123

4 estrofas

CD 15/19 CD 11/P13

Oración: (Tenga escogido una persona para que lea la siguiente oración). Querido Salvador, te agradezco porque eres mi Señor y mi Salvador. Gracias por venir y por ponerte a nuestra merced. Llévame al establo para aprender de Ti. Al pesebre. A los pañales. Al lugar callado en la paja. Ahí oraré para que me des los ojos y los oídos apropiados para que te pueda ver desde cualquier lugar que vengas, para escucharte de cualquier manera que hables. Llévame al campo para aprender de los pastores. Dame el corazón humilde de esos pastores, a quienes, por su humildad, se les confió una revelación tan importante. Dame su corazón que presta atención, que con temor y temblor escuchó cada palabra que cayó del cielo. Dame su corazón que busca, que dejó su trabajo para buscar en los establos de Belén hasta encontrarte.

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Texto: Lucas 2:8-20 Con razón el anuncio de tu nacimiento vino a ellos—los modestos, los que escuchan, los que buscan. Y con razón ellos fueron escogidos para ser los primeros evangelistas. Por favor concédeme la gracia, justísimo Señor Jesús, para que un día pueda experimentar un derramamiento de la gloria del cielo sobre el campo que yo vigilo. Concédeme el eco de una canción angelical en la monotonía de mi trabajo diario. Y concédeme un corazón para contemplar las cosas celestiales en los lugares más humildes. . . Amén (Moments With the Savior [Momentos con el Salvador], páginas 37-38). Mensaje – Los pastores—Contar Su historia ahora es mi responsabilidad

JESÚS CAMBIÓ MI VIDA Serie de Adoración de Adviento – Semana 4 Los pastores—Contar Su historia ahora es mi responsabilidad

¿Te acuerdas de la serie “Misión Imposible”? Dependiendo de tu edad, sabes que el líder del grupo era el señor Phelps o el señor Hunt. De cualquier manera, la premisa siempre era la misma: los miembros del grupo tenían que hacer lo que fuera necesario y enfrentar cualquier peligro o circunstancia hostil para cumplir con su misión. Bueno, la Navidad será dentro de dos días. El apuro está casi por terminar y nuestro tiempo de preparación casi ha llegado a su fin. Hoy examinaremos la parte central de la narrativa cristiana, y quizás una de las partes más familiares, en la que algunos pastores escucharon las importantes noticias del nacimiento de Jesús, el Mesías. Esos sencillos pastores se encontraron a sí mismos reclutados, no para una misión imposible, sino increíble. Fueron testigos de uno de los pasos cruciales del plan de Dios para la salvación de toda la humanidad. Es verdad que no fue una grabadora que explotaba la que le dio a los pastores su misión: fue un gran grupo de ángeles en el cielo sobre una montaña a las afueras de Belén quien les cantó su misión. Puede que ellos hubieran comenzado esa noche como sólo pastores, pero debido a sus experiencias, a la mañana siguiente tenían un nuevo rol que cumplir: se convirtieron en locutores—contándole a todos sobre los mensajeros y el pesebre. Esta mañana, al revisar una vez más esta historia tan conocida sobre los pastores, es mi oración que todos experimentemos nuevamente el maravilloso milagro de esa noche. Y como los pastores, nos demos cuenta que también nosotros tenemos la responsabilidad de compartir con el mundo la gran historia

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de Dios. I. Recibir la misión A. El escenario. 1. Los pastores, clase trabajadora, en el turno de la noche. Este parece ser un grupo inverosímil para que Dios les anuncie el nacimiento de su Hijo. 2. Con frecuencia Dios ha elegido usar a gente común. David fue elegido rey. Doce hombres muy comunes fueron elegidos para ser los apóstoles de Jesús. William y Catherine Booth, al seguir la guía de Dios para su vida, fundaron el Ejército de Salvación. 3. Los pastores estaban haciendo su trabajo. Estaban cuidando (protegiendo) sus rebaños. Cuando somos fieles nos ponemos en la posición de ser útiles a Dios. B. El Mensajero—aparece un ángel con “buenas noticias”. En la Biblia, los ángeles siempre están presentes para hacer la voluntad de Dios y difundir su mensaje junto con la salvación de los seres humanos. 1. En el desierto, los ángeles ministraron a Jesús después de la tentación (Mateo 4:11). 2. En el jardín de Getsemaní, un ángel ministró a Jesús mientras que oraba (Lucas 22:43). 3. Un ángel removió la piedra del sepulcro (Mateo 28:2). 4. Los ángeles anunciaron el regreso de Cristo (Hechos 1:10-11). C. Lucas dice “La gloria del Señor los envolvió en su luz, y se llenaron de temor”. Otra traducción dice “aterrorizados”. Puedo imaginar cómo su terror fue transformado en gozo cuando escucharon las buenas noticias del ángel, enfatizadas por el coro de las huestes celestiales. Al hacer esto, los pastores recibieron su misión. 1. “Hoy les ha nacido en la ciudad de David un Salvador—un Salvador— para salvar a su pueblo de sus pecados” (Lucas 2:11; Mateo 1:21). 2. “Cristo”—el ungido, el Mesías que nos había sido prometido (Isaías 7:14). 3. “Señor”—Dios mismo, el soberano de los reyes de la tierra (Apocalipsis 1:5). 4. ¿El resultado? La paz que llega como resultado del favor de Dios (Romanos 5:1).

II. Responder a la misión A. Después de que recibieron la misión, los pastores tuvieron que tomar una decisión. ¿Qué harían con esas noticias? 1. Recibir la información no es suficiente. Muchos piensan que la educación por sí misma transformará a la sociedad y a su gente. 2. ¿Qué habría pasado si después de que los ángeles se fueron al cielo los pastores hubieran dicho “En efecto, ésas son buenas noticias”, pero después se hubieran ido a cuidar de sus rebaños?

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3. Tú y yo también nos enfrentamos a las mismas decisiones. Aprendemos mucho sobre Dios en nuestra educación cristiana y estudio de la Biblia. ¿Qué haremos con ese conocimiento? ¿Lo conservamos sólo como conocimientos en nuestro cerebro o hacemos algo con él? B. Los pastores eligieron actuar de acuerdo con la información; decidieron averiguar por sí mismos de qué estaban hablando los ángeles. 1. “Vamos a Belén a ver esto que ha pasado y que el Señor nos ha dado a conocer” (Lucas 2:15). 2. Los pastores fueron a Belén y encontraron a María, José y Jesús, tal como los ángeles lo habían anunciado (Lucas 2:16). 3. Los pastores podrían haber ido a contarle a todos “Oigan, ¡acabamos de ver unos ángeles!,” pero entonces los demás probablemente habrían pensado que estaban borrachos o locos. Si sólo hubieran ido a contarles a todos sobre su experiencia en la montaña habrían hablado más sobre los ángeles que sobre Jesús. 4. Al averiguar la verdad de la historia de los ángeles, los pastores establecieron un ejemplo firme para nosotros. La historia está llena de ejemplos de personas que “perdieron el rumbo” espiritual como resultado de basar imprudentemente sus decisiones sólo en una experiencia emocional en la cumbre. Aunque las emociones ciertamente juegan un papel muy importante en nuestra adoración a Dios, para prevenir perdernos en la cumbre emocional, sería bueno asegurarnos que es en realidad Dios que nos está hablando. Juan dice, “Queridos hermanos, no crean a cualquiera que pretenda estar inspirado por el Espíritu, sino sométanlo a prueba (al espíritu) para ver si es de Dios” (1 Juan 4:1). C. Otro aspecto de la respuesta de los pastores a la misión, fue la impresión que dejaron en María y José. 1. ¿Puedes imaginarte a María y a José escuchando las experiencias de los pastores con los ángeles y lo que dijeron sobre su bebé? Escuchar su relato debe haber sido reconfortante y debe haber proporcionado una confirmación adicional a sus propias experiencias. 2. La interacción de los pastores con María y José habría reforzado la comprensión de su papel en el plan de Dios; cuánto deberían cuidar y proteger a este niño especial. 3. Lucas dice, “María guardaba todas estas cosas en su corazón y meditaba acerca de ellas” (Lucas 2:19). 4. Escuchar testimonios sobre lo que Dios está haciendo en la vida de otras personas proporciona aliento a nuestra vida espiritual. III. Transmitir la misión A. Los pastores completaron su increíble misión cuando asumieron el rol de comunicadores. Lucas nos dice que empezaron a contarle a todos los que estaban dispuestos a escucharlos sobre las buenas noticias de los ángeles y la evidencia que afirmaba que todo “sucedió tal como se les había dicho” (Lucas 2:20).

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1. Una vez que verdaderamente comprendemos la profundidad del amor de Dios por nosotros, sin duda deseamos compartir ese amor con los demás. 2. Es como cuando nace un hijo o un nieto en la familia, o cuando consigues el último artefacto electrónico. Quieres decírselo a todos. Quieres mostrárselo a todos. 3. ¿Cuándo fue la última vez que te sentiste entusiasmado por contarle a alguien sobre Jesús? B. Por último, también deberíamos recordar el impacto que tuvo el testimonio de los pastores en aquellos que escucharon lo que había sucedido. Lucas nos dice, “Cuantos lo oyeron se asombraron” (Lucas 2:18). 1. ¿Por qué estaban sorprendidos? ¿Fue por el hecho de que los ángeles se aparecieron a los pastores? ¿Fue el relato de los pastores de haber encontrado a la sagrada familia tal como se les había dicho? ¿O fue esto la consecuencia natural por las buenas noticias de paz y del favor de Dios para todos? 2. En el día de Pentecostés el pueblo también se sintió desconcertado y maravillado ante lo que Dios estaba haciendo (Hechos 2:7, 12). ¿Por qué es que la gente de fe responde con sorpresa cuando Dios actúa? 3. Como mencioné la semana pasada, el relato de los pastores a los demás sobre el anuncio del ángel respecto al nacimiento de Jesús pude haber hecho más sencilla la búsqueda de los magos del que había nacido “Rey de los judíos”. ¡Los pastores escucharon las buenas noticias y actuaron como consecuencia de esto! Cuando el ángel dijo, “Les traigo buenas noticias que serán motivo de mucha alegría para todo el pueblo”, los pastores aceptaron con ilusión un rol activo para difundir las noticias. Esta mañana yo te reto a que recuerdes cuando recibiste por primera vez las buenas noticias de gran gozo. ¿Te acuerdas de cuán entusiasmado te sentiste cuando fuiste salvado y cómo querías contarle a todos sobre el Dios que te ama y que te perdonó? Como resultado de su experiencia en esa primera noche de Navidad los pastores asumieron la responsabilidad de contar la historia de Jesús. ¿Cómo responderás al regalo del Hijo de Dios? ¿También harás que sea tu responsabilidad contar su historia? Adoremos al Señor

CA #139 “Hay un mensaje”

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CD 12/19

Canciones adicionales CA #120 – En el pesebre

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Bendición: Señor Jesús, venimos con alabanza y gratitud por la maravilla y el milagro de tu nacimiento que celebramos en esta época. Ven otra vez a nosotros en esta hora para que podamos regocijarnos porque has nacido en nuestros corazones.

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Oramos para que en todas nuestras labores, en todas nuestras relaciones, en toda nuestra vida, Tú vivas y ames a través de nosotros, en todas las épocas de nuestra vida, como nuestro Señor y Salvador. En tu nombre oramos (Coronel Henry Gariepy).

Bendición vocal – CA #149 – Tan solo en Cristo

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Opción para la bendición vocal CA #141 – Loores dad a Cristo el Rey

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Recursos recopilados por Mayor Eduardo Almendras S.T. de Literatura – Comunicaciones Adviento – Semana 4 – 2014

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