Martes 16 de enero de 2007
Página 2/Sección 5/LA NACION
Apertura: ¿adónde exportar?, ¿a quién venderle?, ¿con quién asociarse? Aquí se ofrece una guía de productos solicitados en el exterior. ANDORRA
Compra de azúcar de caña o remolacha, y sacarosa sólida Posición arancelaria: 1701. Vigencia: hasta el 7/3/2007. FRANCIA
Compra de ajo Posición arancelaria: 070320. Vigencia: hasta el 26/3/2007. IRLANDA
Compra de purificadores de agua para uso doméstico Posición arancelaria: 842121. Vigencia: hasta el 31/1/2007. POLONIA
Compra de hortalizas Posición arancelaria: 0713. Vigencia: hasta el 6/3/2007. RUSIA
Compra de vino y mosto de uva Posición arancelaria: 2204. Vigencia: hasta el 3/4/2007. Las empresas que estén interesadas en obtener más información deben ingresar en el portal de negocios de la Cancillería argentina, y registrarse en forma gratuita: www.argentinatradenet.gov.ar
| OPINION |
Por Antonio Zuidwijk
Por qué es necesario crear un Ministerio de Transporte ¿Conviene que la Argentina tenga un Ministerio de Transporte y Comunicaciones? El 29 de noviembre de 2006 se reunió en Mar del Plata el Consejo Portuario para analizar las necesidades de un sistema portuario competitivo y se redactó un documento con las conclusiones, que fueron elevadas a las autoridades. Allí se demostró que, en un país en crecimiento, no se pueden separar los problemas de los puertos de los del transporte en general y que ambos deben ser considerados partes integrales de un mismo sistema. Se desnudó la complejidad de los problemas que hay en las conexiones terrestres de los puertos y varios participantes propusimos la conveniencia de crear un Ministerio de Transporte y Comunicaciones, lo que no fue aceptado en la redacción final del documento que se elaboró porque se consideró irrelevante si el tema se maneja con una secretaría o con un ministerio que sólo agregaría una instancia burocrática más. Pero sólo el hecho de que casi todos los países industrializados y la mayoría de los países en vías de desarrollo, incluyendo muchos de América latina, tienen un Ministerio de Transporte y Comunicaciones podría ser aceptado como una razón a favor de la creación de tal ministerio, que debería trabajar junto con el ministro de Economía, como se hace en los Estados Unidos. Si la Argentina quiere seguir creciendo, se deben estructurar urgentemente planes de transporte y puertos, como se ha reclamado muchas veces. La Argentina fue, en una época, un país muy competitivo, con un sistema de puertos y ferrocarriles totalmente integrados: aquí se practicaba el transporte intermodal puro mucho antes de que se hablara en otras partes del mundo del tema, incluso antes de haberse “inventado” el término. Durante mucho tiempo se usaron los modos de transporte más eficientes en largas distancias –el ferrocarril y el transporte fluvial– y uno de los mejores ejemplos fue la Ruta del Azúcar de la década de 1930: se cargaban las bolsas de los ingenios de Jujuy directamente en los vagones del Ferrocarril del Estado (que se transformó en el Ferrocarril Belgrano), y se transportaban hasta Barranqueras (Chaco),
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NEGOCIOS & OPORTUNIDADES
El uso del transporte de cargas por vía férrea está subutilizado en un país de largas distancias
donde se las pasaba a los buques motor de la compañía Mihanovich-Dodero para seguir por vía fluvial hasta Rosario y Buenos Aires. Todos los puertos del país estaban conectados a una eficiente red de ferrocarriles. Pero esta integración se perdió y es aconsejable estudiar cómo puede recuperarse parte de esa eficiencia. Ahora que todos los países desarrollados estudian los costos totales que paga la comunidad por el transporte y se esfuerzan por ahorrar energía, en la Argentina se transportan casi todas las cargas por camión sobre distancias que superan hasta los 1600 kilómetros, lo que es a todas luces un despropósito.
Estudios necesarios Es necesario que se hagan en la Argentina estudios serios sobre cómo instrumentar un sistema real de transporte intermodal, para las cargas de importación y exportación, y también para las domésticas. No es algo sencillo, como ha comprobado la experiencia de los Estados Unidos, que tiene el sistema de transporte más competitivo. Hay que corregir fallas estructurales de muy difícil solución, vencer enormes resistencias y hacer grandes obras de infraestructura.
En el comienzo de la década de 1960, en Estados Unidos el transporte por ferrocarril había declinado y el sistema de transporte mostraba serias deficiencias. Había un fuerte antagonismo entre camiones y ferrocarriles. En 1967 se creó el Ministerio de Transporte para atacar el problema de frente y se realizaron estudios sobre la economía del transporte que avanzaron muy lentamente. Sólo en 1976 se creó la Comisión Nacional para el Estudio de Políticas del Transporte en el Congreso de los Estados Unidos, que entregó, en 1979, su estudio final: National Transportation Policies through the Year 2000. Las ocho recomendaciones elevadas fueron: planear sistemas multimodales antes que enfoques intramodales; reducir las regulaciones económicas del Gobierno; dar igual trato a los distintos modos de transporte; aumentar la competencia y mejorar la eficiencia dejando actuar a las fuerzas del mercado; realizar un análisis económico de la política global; perfeccionar las organizaciones gubernamentales (streamlining); coordinar mejor las actuaciones del Gobierno y aprovechar al máximo el sector privado.
A partir de la publicación del estudio, toda la política se dirigió a crear un ambiente de “complementación y cooperación” entre los modos de transporte. En 1980 se aprobaron dos importantes leyes: la ley de transporte por automotor (Motor Carrier Act) y la ley de ferrocarriles (Staggers Rail Act), que sentaron las bases para una competencia sana y transparente entre todos los operadores y se consiguieron los objetivos fijados. Y comenzó una nueva era en el transporte en los Estados Unidos. Se debe crear conciencia en todos los círculos de que el país no puede seguir despilfarrando energía en sistemas de transporte y puertos deficientes y que es del interés de todos que se forme un sistema de competencia transparente entre todos los modos de transporte y de puertos. Para eso hace falta un enorme trabajo. Esta tarea es tan complicada que solamente tendrá posibilidad de éxito si se crea un ministerio dedicado a los problemas del transporte y de los puertos, que debería trabajar en contacto directo con el presidente y el ministro de Economía. El autor es consultor en temas portuarios y transporte multimodal (www.azuidwijk.com.ar).