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EXTERIOR

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Sábado 20 de agosto de 2011

EL EXTREMISMO ISLAMICO s LOS TALIBANES, EN LA MIRA

Paquistán: terror en un templo Un adolescente se inmoló en una mezquita y dejó 48 muertos y decenas de heridos ISLAMABAD.– En el primer ataque de importancia en Paquistán durante el mes sagrado de Ramadán, por lo menos 48 personas murieron y más de 120 resultaron heridas en un potente atentado suicida en una mezquita de Khyber, uno de los siete distritos tribales del noroeste del país, a pocos kilómetros de la inestable frontera con Afganistán. Según varios testigos, un suicida de entre 15 y 16 años irrumpió en la mezquita a través de una ventana durante el tradicional rezo comunitario de los viernes e hizo estallar la carga explosiva que portaba. En el momento de la explosión, en el recinto había unos 300 fieles. “Fue un atentado suicida. El kamikaze llevaba entre 8 y 10 kilos de explosivos, y los activó en la sala principal de la mezquita”, indicó el

subjefe de la administración distrital, Jalid Mumtaz Kundi. El funcionario precisó que para hacer más letal la explosión, el atacante agregó astillas de metal en la carga explosiva. Muchos heridos fueron trasladados a la ciudad de Peshawar y fuentes de la administración de Khyber no descartaron que el cómputo de fallecidos aumente con el paso de las horas, debido a la gravedad de las lesiones de algunos de ellos. Las imágenes de televisión mostraron un edificio extensamente dañado por el ataque. Por doquier yacían solideos de plegarias, zapatos y las alfombrillas verdes que usan los feligreses en sus oraciones, mientras que los ventiladores suspendidos del techo aparecían retorcidos y calcinados.

Si bien el atentado no fue reivindicado por ninguna organización, la táctica hace pensar en un accionar de los talibanes, que controlan el valle de la frontera donde son frecuentes los enfrentamientos armados entre distintos grupos tribales. Casi todos los atentados más letales de los últimos años han sido cometidos por el Movimiento de Talibanes de Paquistán (TTP), aliado de la red Al-Qaeda, que le declaró la guerra santa al gobierno por haberse aliado con Estados Unidos. Tras la muerte de Osama ben Laden, además, extremistas vinculados a su organización han perpetrado varios atentados para vengar a su líder. El más sangriento de ellos ocurrió tan sólo dos días después de que el fundador de Al-Qaeda fuese abatido por un comando nor-

teamericano, cuando dos kamikazes mataron a 98 personas en un centro de entrenamiento policial del nordeste del país. Ayer, por otro lado, pocas horas antes del atentado contra la mezquita, dos misiles lanzados por aviones teleguiados estadounidenses destruyeron una vivienda y mataron a cuatro insurgentes en la región de Waziristán del Sur, otro de los siete distritos tribales en la frontera afgana, según reportaron fuentes locales. Estados Unidos y Paquistán forjaron una alianza militar en 2001, cuando las tropas estadounidenses invadieron Afganistán, pero sus relaciones se hallan en su peor momento desde la operación contra Ben Laden, el pasado 2 de mayo. AP

Agencias DPA, AP, EFE y AFP

Sandalias y sangre de algunas de las víctimas del kamikaze

Atacan el British Council en Kabul La ofensiva talibana duró nueve horas KABUL (AFP).– Por lo menos ocho personas, en su mayoría policías, murieron ayer, día del aniversario de la independencia afgana de Gran Bretaña, en un ataque suicida reivindicado por los talibanes contra la sede en Kabul del British Council, la agencia cultural británica. Dos explosiones tuvieron lugar en las oficinas de la capital afgana de la agencia británica, después de que tres kamikazes entraran al edificio y provocaran un tiroteo que se inició en la madrugada local y duró unas nueve horas. Cuatro explosiones más se oyeron durante esas horas siguientes. El ataque terminó con la muerte de todos los milicianos, según indicó el embajador británico en Kabul, William Patey. El diplomático añadió que dos británicos y un sudafricano, que se encontraban en el interior del edificio en el momento del ataque, lograron escapar indemnes después de haberse refugiado en una habitación de seguridad. “Un militar de la ISAF [fuerza de la OTAN en Afganistán] murió durante el ataque”, informó más tarde el organismo en un comunicado, sin dar más detalles. Un vocero de esa fuerza dijo que la OTAN había enviado un número limitado de soldados al lugar de la ofensiva talibana, en momentos en que el gobierno afgano tiene a su cargo la seguridad en Kabul. El complejo está situado en el barrio de Kart e Parwan. En uno de los muros se podía ver una brecha creada por la explosión de un vehículo. Un cuerpo vestido con uniforme de la policía fue llevado al exterior del recinto y, más tarde, los de guardias de seguridad. El de ayer fue el tercer ataque sufrido por Kabul en menos de dos meses. Recientemente, un atentado contra el hotel Intercontinental dejó 20 muertos.

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