Meritocracia en crisis

17 feb. 2013 - Bjørn Lomborg, un escéptico del discurso verde que busca salvar el planeta. pROTAgONISTAS. Guillermo O'Donnell, a quien consi- dera uno ...
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domingo 17 de febrero de 2013

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Meritocracia en crisis

¿El fin de una utopía equivocada?

Sueño de toda sociedad ilusionada con un sistema justo de posicionamiento social, hoy el modelo educativo meritocrático está en el banquillo de los acusados, cuestionado por elitista e inequitativo, Pero, ¿es necesario renunciar a la meritocracia en pos de la inclusión? Luciana Vázquez PARA LA NACION

L

a ciudad de Nueva York también tiene su Nacional Buenos Aires. Es el Hunter College High School, en pleno Manhattan, una secundaria más que centenaria, gratuita, de financiación pública, altamente selectiva y, como el Buenos Aires en la Argentina, una de las más prestigiosas de Estados Unidos. Cada año, miles de chicos de sexto grado venidos de todos los rincones de Nueva York, de todas las clases sociales y siempre que hayan logrado superar con gran puntaje las pruebas nacionales estandarizadas de evaluación, se presentan para sortear el

segundo obstáculo que los separa de una de las ofertas educativas de mayor calidad en el mundo: el examen de ingreso para entrar a Hunter. Pero el cupo es descorazonador: de los 4000 chicos que rinden el examen, sólo entran 185. Los que obtuvieron las mejores notas en el ingreso. La repetición de ese ritual selectivo durante décadas convirtió a Hunter en uno de los ejemplos indiscutidos de meritocracia en Estados Unidos. Al menos hasta 2010. En junio de ese año, un alumno de Hunter, un chico negro de Harlem llamado Justin Hudson, fue el encargado de dar el discurso de egresados del secundario. Todos quedaron boquiabiertos. Continúa en la Pág. 4

arte de tapa: melisa suarez

OpINIóN

pROTAgONISTAS

Marcelo Leiras. “Hoy los defensores del Gobierno no ven en las políticas oficiales un claro propósito emancipador”

Un jugador de billar en la mesa de los acuerdos Objetivos laterales de las negociaciones oficiales, según Pablo Mendelevich Página 2

El muNdO

Testigos del horror y objetivos de guerra

ENTREVISTA CON

Los riesgos de informar desde Siria, donde ya murieron 23 periodistas

Bjørn Lomborg, un escéptico del discurso verde que busca salvar el planeta

Página 5

Página 6

Politólogo e investigador del Conicet, anticipa una “sucesión difícil” en el PJ y advierte que las nuevas batallas culturales del cristinismo generan menos adhesión en la militancia K

Laura Di Marco PARA LA NACION

En pleno verano, la Universidad de San Andrés, ubicada en al zona norte del Gran Buenos Aires, parece desierta. La mayoría de las oficinas de los profesores e investigadores, cuyos ventanales dan al parque que rodea el edificio, están vacías. Pero el politólogo Marcelo Leiras, que dirige las carreras de Ciencia Política y de Relaciones Internacionales, no parece registrar el verde que lo rodea. Cuando hacemos esta entrevista para Enfoques, está en su despacho, como si fuera la temporada de clases, escribiendo un capítulo para un libro-homenaje a

Guillermo O’Donnell, a quien considera uno de sus maestros. Doctor en Ciencia Política por la Universidad de Notre Dame, investigador del Conicet y consultor de diversos organismos internacionales (se especializa en partidos políticos y federalismo), Leiras es un intelectual que podríamos definir como no alineado, parado a mitad de camino entre el kirchnerismo y el antikirchnerismo. Y como esa postura es minoritaria (y una rareza), en la polaridad en algunos momentos parece un intelectual kirchnerista y, en otros, uno antikirchnerista. Parado en ese lugar, arriesga un resultado magro para el kirchnerismo

en las elecciones legislativas de este año –con guarismos similares a los de 2009, aunque “mucho más difíciles de leer” que en aquella oportunidad, en la que Daniel Scioli fue asociado con Néstor Kirchner (y el FPV perdió con un 30 por ciento)– y afirma que “en ningún caso será una contienda cómoda” para el Gobierno. “El termómetro electoral –cree Leiras– será de nuevo la provincia de Buenos Aires, y todo dependerá de qué tan asociado o divorciado vaya el FPV de Daniel Scioli”, a quien comparó con Nicolino Locche por esa cualidad boxística de agotar a sus rivales sin pegarles. Continúa en la página 3