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Página 16/LA NACION

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Jueves 4 de septiembre de 2008

La masacre en General Rodríguez: avances en la investigación

Solange Bellone, la viuda de Forza, llega al juzgado en Campana

Mariela, la esposa de Damián Ferrón, antes de declarar

Verónica, la esposa de Bina, habla por teléfono en la puerta del juzgado FOTOS DE RICARDO PRISTUPLUK

La Justicia apunta a ex socios de Forza Declararon las esposas de las víctimas del triple crimen; luego de estar cuatro días prófugo, se entregó el funcionario Poggi Por Gustavo Carabajal y Gabriel Di Nicola De la Redacción de LA NACION Sus testimonios fueron clave. Cada una de las viudas de Sebastián Forza, Damián Ferrón y Lepoldo Bina, las víctimas del triple crimen en General Rodríguez, estuvo más de dos horas y media ante el juez federal Federico Faggionatto Márquez, que investiga una red de narcos mexicanos. Las palabras de una de ellas fueron tan importantes que fuentes de la investigación no descartaron que, en las próximas horas, se confirme que la masacre fue una venganza por el negocio de la venta ilegal de efedrina. También, que se ordenen allanamientos y detenciones de dos personas que tuvieron vinculación comercial con Forza. Cuando las mujeres declaraban en el juzgado federal de Zárate-Campana, se entregó uno de los prófugos de la causa en la que se investiga la “cocina” de éxtasis allanada en Ingeniero Maschwitz. Se trata de Manuel Poggi, el funcionario de la Municipalidad de General Rodríguez que alquiló un galpón donde los narcos mexicanos investigados por Faggionatto Márquez habrían depositado tambores con efedrina “ciento por ciento” pura. Poggi llegó pocos minutos antes de las 11.30 en un Volkswagen Gol Country rojo acompañado de su abogado, Ariel Fusco. El sospechoso quedó detenido e incomunicado. A las 17 había comenzado a ser indagado y al cierre de esta edición, después de negar vinculación con la red de narcos, era trasladado a un penal federal. Si bien Faggionatto Márquez no investiga el triple crimen en General Rodríguez, decidió tomarles declaración testimonial a las mujeres de las víctimas porque sospecha que Forza tenía contactos con los narcos investigados por el magistrado federal de ZárateCampana, que habían instalado un laboratorio de droga sintética. Las viudas tuvieron que responder preguntas sobre los contactos telefónicos de sus maridos y de las reuniones comerciales que tuvieron antes de desaparecer, el 7 del mes pasado. De hecho, el nombre Sebastián F. estaba anotado en la agenda de los teléfonos secuestrados al presunto líder de la banda, el prófugo mexicano Jesús Martínez Espinoza, y al argentino Luis Tarzia, procesado con prisión preventiva sospechado de ser el “gerente local” de la organización.

FOTOS DE SILVANA COLOMBO

La oficina donde trabajaba el ahora detenido Manuel Poggi, que fue allanada por la policía bonaerense el domingo último

Después del testimonio de las mujeres y antes de indagar a Poggi, el juez Faggionatto Márquez dispuso el secreto de sumario en el expediente. El magistrado les preguntó a las viudas por nombres de personas vinculadas comercialmente con Forza en el negocio de los medicamentos. Una de las mujeres habría hecho hincapié en dos nombres que compartieron sociedades con Forza, uno de ellos habría estado “observado” por la DEA (el organismo antinarcóticos de los EE.UU.). “En este caso está en juego la seguridad del Estado. Faggionatto Márquez está haciendo una investigación muy importante y tiene una matriz investigativa concreta”, dijo el abogado Miguel Angel Pierri, que representa a las tres viudas. Las mujeres pedirán que Faggionatto Márquez se haga cargo de la investigación del triple crimen en lugar de la fiscal porteña Ana Yacobucci.

Fotogalería. Los lugares frecuentados por Poggi www.lanacion.com.ar/fotos Video. El momento de la entrega de Manuel Poggi www.videos.lanacion.com.ar

En la oficina de Poggi, una foto de Kirchner y Coronel

Manuel Poggi, el vecino desconocido Está preso por su presunta relación con narcos; nadie conocía sus movimientos Por Sol Amaya De la Redacción de LA NACION Carpetas y papeles desparramados por todo el lugar, post-it con las actividades por realizar en la semana y una gran foto enmarcada con la figura del intendente de General Rodríguez, Marcelo Coronel, junto al ex presidente Néstor Kirchner. Así quedó la oficina de Manuel Poggi, el ex funcionario de ese municipio que ganaba $ 2600, pero alquilaba por $ 10.000 un galpón donde se hallaron tambores de efedrina que estarían vinculados con la trama del crimen de los tres empresarios. Al parecer, el ex director de Desarrollo Industrial, de unos 30 años, no sospechaba que sería citado por la Justicia. No tenía planes para estar prófugo cuatro días. En su oficina, de apenas 3 por 2 metros, había mensajes por todos lados con las actividades por realizar esta semana y varios documentos de trabajos en proceso. Otros papeles (como su le-

gajo) están en manos de la Justicia desde que la policía allanó el lugar, el domingo pasado. “Poggi no militaba en política”, se apuró a aclarar un empleado municipal cuando esta cronista advirtió el cuadro en un rincón de la oficina en el que aparecen muy juntos Coronel y Néstor Kirchner. Es que la denominación de Poggi como “funcionario K” que se difundió en los últimos días no cayó bien en la municipalidad de General Rodríguez. “Poggi no participaba de los actos ni militaba en el peronismo, como sí lo hacen la mayoría de los otros funcionarios”, dijo a LA NACION un vocero de la Secretaría de Producción, de la cual depende la cartera del ex funcionario. “Relacionarlo con el kirchnerismo es pura «mala leche»”, agregó, mientras su celular sonaba al ritmo de la marcha peronista. Cabe recordar que según Santiago Nino, candidato por la UCR a intendente de General Rodríguez en las últimas elecciones en las que ganó

Coronel, “en los círculos políticos y empresariales de General Rodríguez se conocía a Poggi como el recaudador del intendente Coronel”.

Un vecino poco sociable En un pueblo de 100.000 habitantes, donde todos se conocen y se saludan en la calle, Poggi era –o al menos eso dice la gente– un completo extraño en lo que respecta a su vida personal. “Lo conocí en su rol de funcionario porque me solucionó varias cuestiones de trabajo con mucha eficiencia”, contó Juan Carlos Molina, un comerciante local. “De su vida privada no sé nada; sólo que no vivía lujosamente y no hablaba mucho”, agregó. Una compañera de trabajo de Poggi dijo a LA NACION que en la oficina están muy conmocionados desde que se enteraron de la posible vinculación del ex funcionario con el tráfico de drogas. “Era un excelente técnico y nunca tuvimos problemas con él”, dijo la mujer, que trabajó con Poggi durante cinco años. “Pero ni sabía que tenía hijos”,

Operativo antidrogas en Recoleta

Lo acusan en México de traficar efedrina y ganar US$ 205 millones

Por un cargamento secuestrado en 2007

Se trata de Zhenli Ye Gon; está detenido vínculo con la fabricación de metanfetaminas. Y denunció que ese dineEnviado especial ro hallado en su casa era para financiar la campaña de Felipe Calderón, CIUDAD DE MEXICO.– El desem- el actual presidente mexicano, y que barco de supuestos narcotraficantes lo amenazaron para que guardara el mexicanos en la Argentina tiene una dinero. razón y se llama Zhenli Ye Gon, un Dijo que le mandaban la plata en bolempresario de la industria farmacéu- sas de lona con 5 millones de dólares tica nacido en China y nacionalizado en cada uno y que le advirtieron que mexicano a quien le secuestraron en iban a cortarle el cuello si hablaba. su elegante mansión, en las Lomas de Pero el gobierno rechazó esas acusaChapultepec, un inmenso colchón de ciones y las consideró “un intento de chantaje perverso’’. Aquí nadie le cree 205 millones de dólares. Tantos eran los billetes a Zhenli Ye Gon. La histoque ocupaban una habiria comenzó en la década tación de la casa. Así lo del 90, cuando la fabricaafirman las autoridades ción de drogas sintéticas judiciales aquí, que sinestaba en manos del cartel dican a Zhenli Ye Gon de los hermanos Amezcua como quien fue el mayor Contreras, quienes traían importador de efedrina los químicos de China, a México, pero tras su elaboraban metanfetadesaparición del mercamina aquí y la exportado los carteles debieron ban a Estados Unidos. buscar los químicos en Pero una vez detenidos otro lado, por ejemplo en Zhenli Ye Gon entraron en ese negocio los actualmente poderola Argentina. El millonario de 44 sos carteles de Sinaloa años, fanático apostador de bacarat y del Golfo. Advertidas las autoridades en 2005 en los casinos de Las Vegas, fue detenido por la DEA el 23 de julio de 2007 de que se importaba más efedrina de en Maryland, Estados Unidos, acusado la que necesita para la industria farde lavado de dinero, y México pidió su macéutica, sólo permitieron que granextradición. El hombre de negocios, des laboratorios la trajeran al país. Y nacido en Shanghai, que recibió su aquí entra en escena Zhenli Ye Gon. carta de ciudadanía de manos del ex Nacido en Shanghai, emigró a Méxipresidente Vicente Fox, niega todo co en 1990 y obtuvo la ciudadanía en

agregó. Sólo algunos de sus vecinos de la calle Intendente Manny al 1200 lo veían a diario con sus dos hijos, pero ninguno de ellos tenía trato personal con el ex funcionario. “Apenas un hola y chau, lo que en un pueblo chico es muy raro”, contó una vecina. A Osvaldo Carrizo, dueño del galpón que alquilaba Poggi, no lo sorprende que el ex funcionario casi no tenga amigos en el pueblo. “El es de Morón y hace pocos años que vive acá: por eso no es tan sociable como somos todos los rodriguences”, dijo Carrizo a LA NACION. Por el alquiler del galpón Poggi pagaba $ 10.000. “Me dijo que almacenaba aceite para exportar y que trabajaba con mexicanos”, contó Carrizo. En el contrato de alquiler figura como finalidad de uso del lugar “servicio de control y despacho aduanero”. En cuanto a la personalidad de Poggi, Carrizo lo describe como “un hombre que parece siempre muy nervioso, como eléctrico, pero claramente no es muy sociable”.

Por Hernán Cappiello

EL UNIVERSAL / GDA

Los 205 millones de dólares que le secuestraron a Zhenli Ye Gon ocupaban casi una habitación

2002. Importó textiles, ropa y calzado e hizo una fortuna como revendedor de productos decomisados en aduanas mexicanas. Creó en 1997 una compañía farmacéutica, Unimed. Zhenli dijo que después de 2004 dejó de importar pseudoefedrina debido a los controles, pero aquí el gobierno afirma que el 5 de diciembre de 2006 encontró en el puerto de Lázaro Cárdenas, en Michoacán, un barco que venía de China con 19 toneladas de acetato de pseudoefedrina, importadas ilegalmente por Zhenli. Incluso se descubrió que el empresario había levantado en el estado de México un megalaboratorio para fabricar especialidades medicinales que sospecha la justicia era para manufacturar drogas sintéticas, ya que el 80 por ciento de las que consumen en

Estados Unidos proviene de aquí. La Procuraduría General de la República afirma que importó en verdad 70 toneladas de efedrina entre 2005 y 2006, con las que obtuvo más de 300 millones de dólares. Casado con Ye Gon, reportes de prensa dicen que se paseaban con ella en un lujoso Lamborghini. Durante sus viajes en Las Vegas apostó 150.000 dólares en una sola mano de bacarat y el hotel Venetian Resort le ofreció un Rolls-Royce para su comodidad. El empresario declaró al fisco que entre 1997 y el 2006 perdió casi 41 millones de dólares en apuestas en casinos de Las Vegas. Pero dinero no le faltaba. El 15 de marzo de 2007, cuando el exitoso empresario ya no estaba en México, sino en los Estados Unidos, la policía allanó su mansión de Sierra Madre 515,

en el elegante barrio de Las Lomas de Chapultepec, en esta ciudad. Allí encontraron 205,6 millones de dólares en efectivo, 18 millones de pesos mexicanos , 200.000 euros y 113.000 dólares de Hong Kong, además de numerosas joyas. El dinero exhibido a la prensa ocupaba todo un cuarto. Desde la caída del empresario, los carteles debieron buscar efedrina y pseudoefedrina en otros lugares. Un documento de PGR señala que pudieron seguir con el negocio porque, entre otros factores, tienen “la posibilidad de establecer centros de producción en países donde existen controles menores o no hay normas para la importación, distribución y manejo de los precursores”. La Argentina, tras los arrestos de Ingeniero Maschwitz, ya demostró que está incluida en esa lista.

La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) allanó ayer el departamento, en el barrio porteño de Recoleta, de Gabriel Darío Spena, detenido el lunes pasado acusado de narcotráfico, de donde se secuestró documentación que será aportada en la causa. Fuentes de la PSA dijeron que el procedimiento se hizo en el séptimo piso de un edificio de avenida Callao 1290, donde Spena vivía hasta que el lunes fue detenido tras pasar más de un año prófugo. El procedimiento fue ordenado por el juez federal porteño Daniel Rafecas y en el lugar se encontró documentación que será aportada en la causa en la que se le imputa su vinculación con la banda de narcos a la que se le secuestraron unos 100 kg de cocaína y 340 kg de efedrina. La efedrina fue secuestrada a principios de junio pasado en una vivienda Flores, en la casa de los padres de Spena. La sustancia química estaba distribuida en ocho tambores y 27 bolsas, agregaron fuentes con acceso al expediente. Después de la detención de Spena, que tenía un pedido de captura desde el 20 de junio de 2007, se elevó un informe a la fiscal de instrucción porteña Ana Yacobucci, que investiga el triple crimen en General Rodríguez, cuyo móvil podría estar vinculado con el negocio de la venta ilegal de efedrina.