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Página 6/Sección 5/LA NACION

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AGROINDUSTRIA

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Sábado 10 de diciembre de 2011

) Producción de etanol en Córdoba

La planta de BIO IV está en la zona maicera de Córdoba; en primer plano, tanques para la fermentación en construcción; al fondo, silos de plástico con cereal IRMA MONTIEL

El maíz encontró una veta rentable Continuación de la Pág. 1, Col. 3 los únicos y se suman a los que ya tienen industrias, como se informa por separado, sí son exclusivamente formados por productores, como los de, BIO IV, en Río Cuarto, y Agroctanos, en La Carlota, ambos en la provincia de Córdoba. “Somos todos productores de maíz y este es un cultivo que lo hacemos obligados para rotar y en una proporción alta. Pero los números de los últimos diez años no fueron tan rentables y a partir de ahí empezamos a buscar alternativas para darle más valor”, dijo Manuel Ron, presidente de BIO IV, una empresa formada por 24 socios en 2006 que ya cuenta con un cupo de 50 millones de litros anuales que deberá proveer a partir del año próximo a las empresas petroleras. Ron y los socios Esteban Oldano, Federico Cola, Germán Di Bella y Mercedes Vazquez (todos ingenieros agrónomos), y el gerente de planta Miguel Phagouape (doctor en Química) recibieron a LA NACION en el predio de 23 hectáreas donde se construye la planta de producción (que ocupará nueve hectáreas) a 7 kilómetros de la ciudad de Río Cuarto, con la ingeniería de la empresa Porta (de Córdoba). “Los márgenes pueden ser mayores o menores pero la demanda de energía va a seguir”, sostuvo el productor, y agregó: “Hoy con los precios relativos que hay del maíz y del etanol, es suficiente para recuperar la inversión en cinco años”. Explicó que con una tonelada de maíz se obtienen 400 litros de etanol. “Cada peso que hay en maíz se transforma en tres pesos con el etanol”, señaló el productor. Por su parte, Oldano acotó que esperaban una facturación anual de 300 millones de pesos. En tanto, Haroldo Dahn, ingeniero químico y presidente de Agroctanos, dijo que este proyecto es atractivo desde el punto de vista de la rentabilidad. “La empresa va a facturar 70 millones de dólares anuales”, acotó.

Inversiones BIO IV invirtió más de 28 millones de dólares para construir una planta con una capacidad para producir 80 millones de litros. Cada socio hizo aportes de capital a título individual y después la empresa obtuvo el crédito del Bicentenario con una hipoteca a favor del Banco Nación. “También hicimos una emisión de obligaciones negociables en la Bolsa de Comercio de Córdoba”, sostuvo Ron. Por su parte Dahn dijo que Agroctanos invirtió 43 millones de dólares y, al igual que la anterior, con aportes de los socios y un crédito del Bicentenario y otras financiación gubernamental. Agroctanos terminó de gestarse en 2010. La planta se levantará, con tecnología nacional, en un predio de 16 hectáreas en el kilómetro 501,3 de la ruta 8, en La Carlota. El gobierno ya le aseguró un cupo de 84 millones de litros. Su capacidad de producción diaria será de 250.000 litros, con lo cual superará ese cupo. Agregó Dahn que la planta demandará 70 puestos de trabajo que “se multiplicarán en términos de la demanda de servicios”. Según Eduardo Pasman, ingeniero agrónomo y director de la empresa, explicó que tienen el compromiso de empezar a producir en junio de 2013. “La clave del negocio es instalarse en el corazón maicero”, señaló.

Proyectos que se suman a la industria del etanol Un laboratorio del INTA mide los rendimientos

La construcción avanza; la planta comenzará a operar el año próximo IRMA MONTIEL

Se espera un impacto favorable en el desarrollo económico regional La ubicación de las plantas de etanol beneficia a productores de maíz del sur cordobés RIO CUARTO, Córdoba (De un enviado especial).– La radicación de plantas transformadoras de maíz en etanol tendrá un fuerte impacto positivo en el sur de Córdoba, opinaron los protagonistas de estos nuevos emprendimientos. Haroldo Dahn, presidente de Agroctanos, dijo que se puede advertir que la localización de la planta (en La Carlota) tiene ventajas estratégicas. “Para el maíz, porque está dentro de la principal zona maicera del país, con fácil acceso de rutas y caminos; para el bioetanol, porque tiene una ubicación conveniente respecto de las refinerías, y para el residuo del maíz (grano de destilación seca –DDGS, por sus siglas en inglés–), porque se utiliza en los feedlots locales, tambos, criaderos de cerdos y de aves y plantas de alimentos balanceados.” Según Dahn, se montó un sistema tal que permita primero, en forma macro, la industrialización de la producción maicera de Córdoba, y segundo, la posibilidad de que los productores locales se sumen al proyecto como accionistas, como proveedores de maíz y como clientes de subproductos. En cuanto a las ventajas para los productores locales, Eduardo Pasman, director de Agroctanos, dijo que “tener alguien que le compre el maíz a 30, 40, 50 o 100 kilómetros de donde lo produce es sumamente atractivo; hay ventajas de logística y de fletes”. Agregó Pasman que estas plantas de producción de etanol pasan a transformarse en compradores de maíz que antes no existían. “El precio lo regula el mercado y se toma de la pizarra de la Bolsa de Comercio de Rosario”, agregó.

mente del 5 al 7 por ciento, y del 7 al 10 por ciento. Al respecto, el socio Esteban Oldano estimó que el Gobierno puede subir “tranquilamente” el corte hasta el 20 por ciento, porque esa suma “no es significativa” para las exportaciones. “En Brasil hoy el corte es de hasta el 24 por ciento”, añadió.

Alimentos y ambiente

Eduardo Pasman y Haroldo Dahn, de Agroctanos MARCELO GOMEZ

En su opinión, “esta industria dará movimiento al flete local, a las labores locales, a los talleres, va a generar mano de obra que hoy no existe”. Por su parte, el presidente de BIO IV, Manuel Ron, sostuvo que la empresa cuenta con el apoyo de la comunidad y de la Universidad de Río Cuarto. “Es una comunidad agropecuaria, que vive del campo; esto [la radicación de plantas productoras de etanol] multiplica el valor de la producción agropecuaria en la zona y les da trabajo a los profesionales de la Universidad. Nosotros ya trabajamos con la cátedra de Ingeniería”, sostuvo.

Ampliar el cupo Entusiasmado, el directivo vaticinó que si el proceso y todo lo

que tienen planeado se cumple van a producir más que el cupo. “Por ese motivo hemos pedido una ampliación del cupo de 14 millones de litros y creemos que la producción va a ser todavía un poco mayor”, sostuvo Ron. En cuanto a motivaciones e incentivos, Miguel Phagouape, gerente de planta de BIO IV, dijo que actualmente hay un faltante de alcohol para las naftas. “La ley [de biocombustibles 26.903] dice que el corte de las naftas se debe efectuar con un 5 por ciento de etanol, y actualmente no se llega al 3 por ciento”, dijo el ejecutivo. Agregó el gerente de planta que en la medida en que haya una mayor producción de etanol la Secretaría de Energía de la Nación podría elevar el corte progresiva-

Frente a las controversias que han rodeado a esta industria, como por ejemplo de ser responsable de la crisis de alimento a nivel mundial, Ron justificó que “para abastecer el cupo otorgado de 50 millones de litros de bioetanol al año se necesitarán 140.000 toneladas de maíz, lo que representa sólo el 2% del maíz cosechado en el país [28 millones de toneladas] y un 1% del grano exportable”. Por su parte, la socia Mercedes Vázquez acotó que “además, lo que queda de los granos destilados vuelve a ingresar en el mercado de alimento de animales”. También descartan que existan riesgos ambientales. Según el socio Federico Cola, se trata de “una planta limpia, no tiene efluentes, incluso hay un proyecto para capturar anhídrido carbónico que sale de la planta”, explicó. De la misma manera, el proyecto en Agroctanos está diseñado para desarrollar una industria limpia. Así lo exlplicó Haroldo Dahn: “Todo lo que produce, incluso sus subproductos, tiene valor comercial, con lo cual es absolutamente un pecado tener efluentes. El único efluente que puede haber es vapor de agua; pero no utilizamos químicos de ningún tipo. Es una industria extremadamente limpia”.

RIO CUARTO, Córdoba (De un enviado especial).– A partir de la ley de Biocombustibles comenzaron a presentarse varios proyectos que encaran la transformación de maíz en etanol. A las de BIO IV y Agroctanos se suman, entre otros, los siguientes: L Renova, en Avellaneda, Santa Fe, de Vicentín. Se están invirtiendo 35 millones de dólares para producir 50.000 metros cúbicos al año. Para ello consume unas 120.000 toneladas de maíz o sorgo. Comenzará a producir a fines de julio de 2012. L Pro Maíz. Es un joint venture entre AGD y Bunge. Con una inversión de 850 millones de pesos levantará su planta en Alejandro Roca, Córdoba. El cupo otorgado para 2012 es de 128.000 metros cúbicos y, a partir de 2013, de 135.000 metros cúbicos. Empezará a producir el primer semestre de 2013. L Asociación de Cooperativas Argentinas - BIO en Villa María, Córdoba. Tiene unos 25.000 productores asociados. Tiene un cupo de 125.000 metros cúbicos de bioetanol por año, a suministrar a partir de 2013. La inversión se estima en 540 millones

5% Es el corte de etanol en naftas Así lo dispone la ley de biocombustbles en el país. En Brasil, esa proporción llega al 24 por ciento.

484 Litros de etanol Es lo que rinde en promedio una tonelada de maíz, según lo estableció el laboratorio del INTA. de pesos, a los que hay que sumar la inversión en capital de trabajo. Dará empleo a unas 60 personas. L Indagro en Las Lajitas, Salta. Asimismo, Claudio Molina, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustibles dijo que hay ingenios azucareros que planean integrar a sus destilerías la producción de bioetanol de maíz o sorgo.

Laboratorio del INTA En el laboratorio del INTA Pergamino se logró, por primera vez en el país, evaluar el rendimiento de etanol de una serie de híbridos de maíz, que dio un promedio de 484 litros de etanol por tonelada de maíz. Se evaluó una muestra aleatoria de 17 híbridos de maíz en las localidades de Pergamino, Ferré y San Antonio de Areco, que son los lugares en los que además se evalúa el rendimiento del grano.