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CAMPO

tierra adentro NO SABE Ni CONTESTA // EL hOMBrE DE kiCiLLOF

El 30 de diciembre pasado, en el marco de un reunión de la comisión de emergencia que convocó en su despacho, Javier Rodríguez, secretario de Coordinación Político Institucional y Emergencia Agropecuaria, estuvo en apuros. Los representantes de las entidades del agro Ernesto Ambrosetti, Daniel Asseff y Juan Rey Kelly le objetaron el informe de ejecución presupuestaria del fondo de $ 500 millones porque estaba incompleto, con errores y no precisaba a cuántos productores efectivamente se había asistido y con qué monto. A mitad de año sólo se había ejecutado un 30% del fondo. “No sé”, fue la respuesta breve que dio Rodríguez a sus interlocutores cuando lo apuraron para conocer respuestas más concretas sobre el manejo del fondo. Rodríguez es el lugarteniente de Kicillof en Agricultura. ß

EN PrOCESióN // PArA vEr A CAPiTANiCh

Todos los caminos conducen al despacho del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. En medio del cepo del Banco Nación a los productores de soja, empresarios de primera línea de la cadena comenzaron a desfilar por su oficina en ayuda porque tienen frenado el financiamiento de esa entidad. Así como los directivos de la cooperativa AFA fueron a ver a Kicillof, un empresario agroindustrial concurrió para buscar la ayuda de Capitanich. ¿Se largó la procesión al despacho del jefe de Gabinete? ß

NO ESTá PArA BOLLOS // iNDUSTriA LEChErA

En el Centro de la Industria Lechera (CIL) el horno definitivamente no está para bollos. A las discusiones internas que hubo por si todas las empresas se sumaban a la baja de precios impulsada por Molfino, Verónica, Williner y Milkaut, varios empresarios tuvieron que escuchar a un exaltado Arturo Videla, subsecretario de Lechería. Cuentan que el funcionario no fue nada diplomático con firmas a las que les exigió retrotraer la decisión de bajar los precios. “Te voy a mandar el gremio [Atilra]”, le habría deslizado a un industrial el funcionario que aprendió modales con Guillermo Moreno.ß El Pampa

| Sábado 10 de enero de 2015

LA SEMANA DEL CAMPO

DE BUENA FUENTE

El credo de los sampedrinos: toda acción tiene su reacción

Se prevé una mejor campaña que en 2014 en la siembra de pasturas

Félix Sammartino LA NACION

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aúl Victores, presidente de la Sociedad Rural de San Pedro, y toda su comisión directiva salieron de las cuerdas, sobre la que está recostada buena parte de la dirigencia gremial, para tomar el centro del ring. Mucho de este repentino cambio de actitud se explica por la tercera ley de Newton, el principio de acción y reacción, que afirma que “todo cuerpo A que ejerce una fuerza sobre un cuerpo B experimenta una fuerza de igual intensidad en la misma dirección, pero en sentido opuesto”. Los sampedrinos entendieron que la acción del cuerpo A, el Banco Nación y su resolución de cortarle los créditos a todo productor sospechoso de tener soja, merecía una reacción que vaya más allá de la protesta y el reclamo. Así decidieron que el cuerpo B, la Sociedad Rural de San Pedro, retire sus casi 100.000 pesos y cancele las cuentas sueldo que tenía con el banco. Ahora bien, para ajustarse estrictamente a la tercera ley de Newton y equiparar la fuerza de esta reacción con la acción de la entidad presidida por Juan Ignacio Forlón, un abogado de 38 años amigo de Máximo Kirchner y militante de La Cámpora, están reclamando que el resto de los agricultores y comercios vinculados los acompañen en el cierre de cuentas del Banco Nación. Interpelan a un universo de clientes agropecuarios que tendría el Banco Nación del cual no hay cifras, pero que se estima superior a las 70.000 cuentas. El que fue en su momento un banco de fomento de todas las actividades productivas del agro, sin discriminaciones, con sucursales hasta en los pueblos más remotos y ol-

vidados, otorga alrededor del 40% de los créditos que van al sector. ¿Cuántos se sumarán a la propuesta de este éxodo bancario? ¿Se canalizará por este medio parte del descontento y de la frustración actual? “Pasará como una patriada más, una acción en solitario. No creo que los productores la acompañen. Si les tiran un crédito con tasa subsidiada, lo agarran y se olvidan de cualquier acción gremial”, vislumbraba un descreído directivo de la banca privada. De todas formas será interesante observar la reacción que se producirá de aquí en adelante. El efecto más inmediato de esta movida generada en la Sociedad Rural de San Pedro es que abre un interrogante incómodo tanto al resto de las entidades del campo como a los productores. No se sabe a ciencia cierta si es lo que se propusieron, pero en definitiva le terminaron moviendo el piso a más de uno. La reacción de cerrar la cuenta corriente significa correrse del papel de víctima. Un lugar que co-

RESUMEN

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Silobolsas cortados Son los hechos vandálicos denunciados en los campos de Oliva, Córdoba, durante 2014

LA FRASE Jorge capitanich jefe de gabinete

“La rotura de los silobolsas no responde a una política deliberada”

mo todo lugar donde se permanece más del tiempo debido se convierte inevitablemente en una zona de confort. Los productores que acompañan a Raúl Victores bien podrían haber despachado un comunicado de protesta a la resolución del Banco Nación de cortar los convenios para giros en descubierto y venta de cheques desde el primer día hábil de 2015 y la imposibilidad de renovar la tarjeta AgroNación. En lugar de eso cambiaron la lógica: utilizaron la lógica de un agente económico. Al fin de cuentas, se trata de clientes y los clientes además de tener siempre la razón tienen en teoría la sartén por el mango ya que pueden ejercer la opción de quedarse o irse del lugar donde utilizan un servicio. Claro, vale la pena aclarar que este poder del cliente o agente económico no siempre se cumple en la práctica. Con frecuencia no se tiene en cuenta el valor de diversificar y construir opciones productivas, comerciales y empresarias. Se generan así modelos poco flexibles donde a menudo se cae preso de una actividad, de un cultivo o de un banco. El peor mensaje que durante décadas se transmitió a la sociedad y a la política fue que a pesar de todos los contratiempos o confiscaciones de la renta por la alta presión impositiva, el campo nunca iba a dejar de producir. Desde más de una tribuna rural los dirigentes realizaron un sostenido elogio del martirologio de los productores. Tuvo consecuencias nefastas porque reafirmaba el concepto de que el campo ofrecía una oferta inelástica, indiferente tanto a los castigos como a los estímulos. El kirchnerismo tomó este mensaje al pie de la letra. Los sampedrinos tenían opciones y las ejercieron. Creen que si a cada acción del Gobierno se generará una reacción en el plano económico y las víctimas se transformarán en actores protagónicos, otro sería el cantar.ß

Carlos Marín Moreno PARA LA NACION

E

n pocas semanas comienza la campaña de siembra de pasturas, en un año con buenos precios ganaderos. Este marco genera buenas expectativas entre los titulares de las semillerías, que notan interés de los productores por recuperar las superficies praderizadas luego de las pérdidas sufridas en un año llovedor como 2014, aunque también advierten que éstos disponen de pocos recursos para hacer frente a los gastos de implantación. “La intención de siembra de pasturas de los productores me llevaría a pensar que se venderá 10-15 por ciento más de semilla que en la campaña pasada, pero la barrera para que eso se concrete es la disponibilidad de fondos por parte de los productores, que están muy desplatados”, afirma Juan Lus, gerente general de GAPP. Esta demanda se enfrentará con una oferta normal o levemente inferior a lo normal. Por un lado, existe un sobrante no vendido en 2014, que funcionará como amortiguador de una caída de la producción de gramíneas en Entre Ríos y norte de Buenos Aires. En esa región se cosechará 30-40 por ciento menos de lo esperado por una combinación de excesos de lluvias en floración, que lavaron el polen y generaron enfermedades fúngicas, con temperaturas muy altas que arrebataron los cultivos y generaron mucho vaneo o grano liviano. En esta zona se producen principalmente festuca, raigrás y cebadilla. En el sur de Buenos Aires, los rendimientos de los lotes de raigrás y de festuca que no sufrieron anegamientos tienden a valores cercanos al promedio histórico. Por su parte, comenzó la cosecha de alfalfa en Mendoza y al sur de Pedro Luro, con rindes bajos en los primeros lotes, muy depen-

dientes del clima en las próximas semanas. También empezó la cosecha de tréboles y lotus, con síntomas de daños por las tormentas de los últimos días. Importaciones complicadas La oferta también se conforma con semilla importada. Joaquín González Bonorino, titular de Gentos SA, dice que “los operadores sufrieron muchos rechazos al solicitar las autorizaciones para importar”. “Documentaciones denegadas, observadas o aprobadas tardíamente redujeron significativamente los volúmenes ingresados al país, que en el pasado representaban el 50 por ciento del total vendido”, agrega. Históricamente las importaciones de semilla forrajera conformaban 8500 toneladas, contra 4500 ingresadas en los dos últimos años. “Por ahora, los precios están en niveles semejantes a los del año pasado”, afirma el empresario. La cebadilla criolla se vende de 1,80 a 2,20 dólares por kilo. Variedades antiguas de festuca exigen 4 dólares por kilo contra 6,50 de un cultivar de punta. Un pasto ovillo Porto vale 4 dólares contra 5-5,20 de uno mejorado. El agropiro común cuesta 2,50 dólares contra 3,50 de uno de mayor productividad. Las alfalfas de punta cuestan de 9 a 12 dólares según el grupo. El trébol blanco El Lucero exige 6 dólares, y uno mejorado, 7,50. El lotus cotiza a 7-8 dólares por kilo. Los productores que carecen de los recursos necesarios para comprar pueden recurrir a las tarjetas agropecuarias o a cheques posdatados a 90-120 días. “La tasa de interés corriente es del 2,5-3 por ciento en pesos, que es lo que cobra una entidad financiera para el descuento”, aclara González Bonorino. Con estas herramientas se busca llegar a la cosecha de granos gruesos o a la venta de hacienda gorda que se cargará antes de entrar al invierno.ß