ORACIÓN POS-MODERNA Un niño en el regazo de su madre Pensó su muerte, Planeó el martirio en la gloria de su vida Se halló el peligro de sentirse repudiado No esquivó la cruz ni a colgar abandonado. ¿Qué será de mí, tan necio hombre, Que anhelo refugiarme en la alegría? Ayúdame a entender tu letanía De angustia, lloro, pena, sangre. “Quiero de ti retenerte De tu Espíritu encontrarme Quiero la paz de tu herida Para en tu llaga calmarme.” Hay tanto egoísmo en mi vida Al ver que de ti quiero todo Cuanto tarda en entender el alma mía Que el discípulo es menor que su maestro. “Cuántas cosas que vivir en nuestra vida, Prefiero administrarla a mi manera Parte la herencia que me toca Y déjame probar de mi prudencia.” Mas, Regreso con la frente baja. ¡Oh Papá! Veo tus brazos abiertos a lo lejos No miras de mi cuerpo los harapos Y me dices que me amas. Siento que tus brazos me acarician Y me dices: Hijo mío. “Mejor es ser el obrero de la undécima Que por poco recibió todo el salario.” Ten paciencia, suplico en tu presencia Pero exijo en los demás lo refinado Que ridículo me siento en la mañana Al hallar que tu amor es renovado. ¡Oh Señor! Transforma mi existencia, Anhelo comprender en ti, el calvario. Por Jorge Eladio Pérez Argibay Usado con permiso Este escrito es una contribución de la agrupación para eclesiástica cubana: Ministerio CRISTIANOS UNIDOS. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.