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eDITORIALeS | CARTAS

| Sábado 1º de junio de 2013

Fundado por Bartolomé Mitre el 4 de enero de 1870 Número 1, Año 1 “la nacion será una tribuna de doctrina” Director: Bartolomé Mitre

Uso y abuso político del arte La elevada calidad artística del pabellón argentino en Venecia termina siendo bastardeada por el afán propagandístico y desubicado de nuestro gobierno

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l miércoles pasado, en anticipación a la apertura al público de la 55ª. Bienal de Venecia, que acontecerá hoy, los periodistas especializados, críticos y expertos en arte pudieron visitar los pabellones de la gigantesca muestra en un ambiente más sereno que el que predominará hasta su cierre, en noviembre próximo. Se trata, sin duda alguna, de uno de los acontecimientos más relevantes de las artes plásticas a escala mundial. La Argentina tiene su pabellón en un lugar estratégico, ubicado junto al de la Santa Sede. Como el Vaticano es uno de los países que se presentan por primera vez en la muestra, su vecindad y el interés de su propuesta de aunar arte y fe suman más público al nuestro. Tampoco está lejos del pabellón italiano que, como país anfitrión, atrae muchedumbres, y del chino, extraordinariamente atractivo por la novedad de sus propuestas plásticas, impensadas en un país sometido a un régimen no precisamente amable con sus disidentes. La propuesta del pabellón argentino, creada por Nicola Costantino, artista de innegable creatividad y sensibilidad, es de una elevada calidad artística, de un maravilloso despliegue técnico, de exquisita manufactura y de innegable valor plástico. Se basa en la figura de Eva Perón, personaje de clara pertenencia política, y lo hace con extraordinario respeto, con una lectura neutral e intimista que puede llevarse a cabo en varios niveles, aun el más crítico hacia el personaje así retratado, y que deja de lado tanto la exaltación mística como el folklorismo primitivo, que resultaría claramente incomprensible para el público internacional. En lugar de caer en la retórica política, Costantino se concentra en la representación visual, auditiva y melancólica de los sentimientos encontrados y en las imágenes contradictorias que un ser humano, en circunstancias semejantes, a solas y en la intimidad, puede encarnar. Tampoco cae en una innecesaria reivindicación política ni en una exaltación religiosa del personaje. Desde el punto de vista de las exigencias de una muestra artística internacional y, más allá del juicio individual, la obra de Costantino pone a la Argentina en el nivel correspondiente.

Nuestro pabellón desarrolla su guión a lo largo de cuatro ambientes claramente diferenciados. Pero el público es inevitablemente conducido hacia un quinto, ajeno a la obra de Costantino –y seguramente a contrapelo de su intención artística– donde inesperadamente se pierden todos los límites y las formas, para caer en una tosca y burda utilización de esa obra con torpes fines políticos subalternos y autorreferenciales. Lamentablemente, no existe una clara separación física entre la obra de arte y lo que eufemísticamente las autoridades presentes en Venecia llaman “propaganda institucional”, por lo que la confusión entre el hecho artístico y la barricada es inevitable. La agresión al espectador es evidente. Se tergiversa y se abusa de este modo del sentido de la obra de arte. Exhibir videos con los jóvenes de La Cámpora junto a la obra de Nicola Costantino es, en la Bienal de Venecia, como mostrar otra vez la Biblia junto al calefón, pero ante la mirada atónita de la crítica artística internacional. Para colmo de males, el catálogo de la muestra argentina es casi un panfleto, repleto de fragmentos de discursos presidenciales como si en nuestra cultura hubiera un antes y un después de la esclarecida palabra de Cristina Kirchner en materia de arte. En ningún otro pabellón se intenta una asimilación semejante entre arte y partidismo político como ocurre en el nuestro. En el pabellón chino ni siquiera hay símbolos comunistas. Ocurre con frecuencia que es el artista quien, legítimamente, usa su arte como herramienta, testimonio y lenguaje de la política. También ocurre que la política use el arte para sus propios fines. Pero ello entraña un serio peligro: el mayor de los cuales es la pérdida de la libertad del propio artista, que constituye la materia prima de su capacidad creadora. Ante los primeros visitantes de la Bienal de Venecia, especializados en la crítica y en la visión del arte, la Argentina ha introducido de rondón, junto a una evidencia legítima de su capacidad creativa, un lenguaje grotesco y desacostumbrado, fuera de lugar, ajeno a la tradición de la Bienal y de la libertad artística, que muestra otra vez el desconocimiento, la soberbia y el desprecio del Gobierno por los valores universales de la cultura.

Crecen los delitos rurales Con nuevas y más violentas modalidades, la delincuencia rural sigue actuando al amparo de un Estado que no atiende sus obligaciones

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os delitos rurales no sólo han recrudecido en el país; adquieren cada vez más peligrosas características. El clásico abigeato, consistente en el hurto o robo de animales, va hoy acompañado por despiadados métodos que perfecciona día tras día una delincuencia que cuenta con la ventaja de la distancia que separa a las víctimas del auxilio de la fuerza pública. Los productores y sus empleados quedan en manos de los asaltantes en establecimientos, domicilios y depósitos de maquinarias, herramientas, plaguicidas, semillas, y en todo otro lugar que sugiera algún tipo de valor para delinquir. Peligra hasta la propia vida de las personas. El maltrato a golpes y las amenazas son utilizados para asegurarse de que la víctima entregue sus bienes. Para hacerse de las reses, los ladrones cortan alambrados y matan a los animales. A su paso, dejan tiradas las cabezas, las patas y las vísceras de escaso valor. Otra metodología cada vez más habitual es la de apoderarse de los camiones de hacienda en las rutas, donde la vigilancia es casi nula. De allí, llevan lo robado a un matadero. Esa audacia llega hoy a extremos impensados, como haber irrumpido en un feedlot de donde los delincuentes se alzaron con 47 vaquillonas de 300 kilos cada una. En tanto, el robo de granos se focaliza en los silos bolsas y, también, en el secuestro de camiones, a cuyos choferes se obliga a abrir los grifos para poder apropiarse del preciado botín. Un hecho por demás insólito ocurrió a un productor de trigo en un predio alquilado. Cuando concurrió a cosechar sus frutos, verificó que alguien ya lo había hecho por él. Otro tanto suele suceder con la producción lanar cercana a pueblos del interior, la que resulta económicamente deficitaria por el robo de los corderos. O con los porcinos: dos veces diezmaron su plantel a una productora santafecina, próxima a Arroyo del Medio. En Alcorta, también en Santa Fe, dos conocidos productores han sido víctimas reiteradas de delitos de abigeato. En una oportunidad, les arrebataron 90 cabezas bovinas, la mitad de las cuales recuperaron a tiempo de un frigorífico del sur bonaerense, porque las otras 45 se habían “servido” en la gastronomía veraniega de Santa Teresita. En ese último caso los animales robados recorrieron por lo menos media provincia de Buenos

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Aires. ¿Sin que nadie los viera? Dadas las condiciones en las que tienen lugar estos delitos, la prevención es el mejor sistema para procurar su control. El Estado nacional había creado el Programa Nacional de Seguridad Rural, que dotaba de algunos elementos para ejercer esa función, tales como personal, equipamiento y fondos adicionales aportados por los productores. Lamentablemente, el programa fue desactivado mientras el Gobierno seguía introduciendo regulaciones de todo tipo sobre las actividades agropecuarias, centro de ataques rutinarios de la burocracia camporista. En la provincia de Buenos Aires se estableció un sistema de patrullas rurales destinado a recorrer y vigilar caminos vecinales, con base en la policía y en los municipios. Pero la falta de uniformados y de móviles para cumplir esa indispensable función licuaron su eficacia. Se crearon de igual modo fiscalías especiales que padecieron las mismas deficiencias de personal, de equipos y de fondos. Cuando comenzó esta ola de delitos rurales, los propios productores se turnaban en rondas para proteger sus patrimonios, sistema que, por razones obvias, no puede sostenerse indefinidamente. La creación de la Mesa de Prevención de Delitos Rurales, conformada por las principales entidades radicadas en la provincia, con el propósito de reclamar y prestar apoyo a la acción oficial, no ha alcanzado su objetivo frente a la magnitud del problema, que supera todo lo conocido hasta ahora. Un arma exitosa para resolver delitos, en tanto, ha sido la prestación del servicio de la Sociedad Rural Argentina para identificar el ADN de los animales robados, tema que deberá profundizarse. Víctimas los productores de la inseguridad física y jurídica, que en realidad afecta a todos los sectores del país y que se profundizará si el Gobierno consigue imponer la farsa “democratizadora” de la Justicia, nadie debe sorprenderse de las quejas airadas que expresan en asambleas, en exposiciones y en cuanta oportunidad se les presenta para poner de manifiesto la desidia y el desdeñoso comportamiento gubernamental hacia ellos. Ante este cuadro urge que el Gobierno asuma las responsabilidades que le incumben en la protección de las actividades agropecuarias y deje de perder tiempo en dislates propagandísticos que terminan pagando los contribuyentes.

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Responsabilidad La Presidenta, buscando exonerar de culpa a intendentes amigos del conurbano, sostuvo que la responsabilidad en lo relativo a las políticas de seguridad es de la provincia; dicho en otros términos, del gobernador de Buenos Aires. Razón no le falta..., pero genera en lo inmediato una pregunta: ¿si la cabeza del Poder Ejecutivo provincial es la responsable de la brutal inseguridad que existe en la provincia, quién lo es en la Nación toda, donde se vive un panorama similar? Siguiendo con el mismo razonamiento llegamos a la cabeza del Poder Ejecutivo nacional, responsable de las fuerzas federales y de las políticas de seguridad (“asegurar la paz interior”, exige la Constitución). En esta interpretación las palabras presidenciales suenan a “confesión de parte...” Juan Antonio Portesi

DNi 4.914.405

Reformas En los últimos días el Congreso fue escenario de una tragedia anunciada, al convalidar reformas que implican nada más ni nada menos que la violación de la Constitución nacional. Muchos legisladores permanecieron impávidos ante esto. Nada los impulsó a meditar sobre el camino que se encaraba, solamente importó la disciplina y la complicidad con las decisiones adoptadas. No importó la Constitución, las leyes fundamentales de la Nación, el pueblo al que dicen defender. Es una traición a la patria. Gregorio Belkin

LE 4.173.242

San Marino En el programa A dos voces, emitido por el canal TN el 15 de mayo, la diputada Carrió abordó el tema del blanqueo de dinero en la Argentina y los movimientos de fondos al exterior. En ese momento fue mencionado el consulado de San Marino, por lo que debo dejar constancia de que son inexactos los conceptos por ella vertidos. Rechazamos firme y totalmente los términos expresados por la entrevistada, y aclaramos que la tarea exclusiva que realiza el consulado es la asistencia a los propios conciudadanos, la producción de certificaciones para cuestiones de ciudadanía y de pasaportes, y la promoción cultural y turística del país. Más aún: el 7 de diciembre de 2009 se firmó el acuerdo entre el gobierno de la República de San Marino y el gobierno de la Argentina sobre el intercambio de información en materia fiscal (TiEA), que fue ratificado por el Parlamento de San Marino el 21 de enero de 2010 y entró en vigor el 16 de junio del año pasado. De lo expuesto se desprende claramente que las afirmaciones de la diputada Carrió resultan sin fundamento. Viviana Gennari

Cónsul de San Marino [email protected]

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centes hombres eran casi todos profesionales, por lo cual enseñaban por vocación y no por necesidad. Además, ningún docente debería trabajar en dos turnos, porque entonces no puede preparar debidamente sus clases, corregir tareas y perfeccionarse ya que también tiene una vida y una familia. Los niños pierden clases no por culpa de los docentes, sino de los gobiernos que han degradado la educación en todos sus aspectos: programas de estudio, manuales malísimos, infraestructura desastrosa y burocracia institucional. Por eso digo que los maestros están enseñando a sus alumnos algo muy importante: luchar por una mejor educación. Y como decía Mariano José de Larra: “Un derecho no reclamado es un derecho perdido”

Diana Di Lauro

LC 3.783.063

A contramano Escuché anteayer un reportaje al diputado provincial Fernando Navarro, apodado “el Chino”. En un momento, mientras se discutía la situación de la ganadería, el diputado dijo: “El mundo va a contramano de lo que hace la Argentina” (sic). Recordé el chiste sobre esa persona que, manejando a contramano por la avenida General Paz en la hora pico, y habiendo escuchado la alerta por radio que había un conductor desaprensivo manejando en contramano, exclama enojado: ¡No son uno! ¡Son miles! Jorge Froilán González

Es curioso ver cómo en estos últimos meses algunos conductores de TV que nunca se dedicaron a la política y que pertenecen a los canales más beneficiados por la pauta publicitaria oficial, hoy se muestran como fervientes defensores de este modelo de gobierno. Pero lo más lamentable es ver cómo se convierten en fiscales y jueces acusando y condenando a colegas de otros medios simplemente por pensar diferente, convirtiéndolos en enemigos a los que hay que destruir. Del mismo modo se manejan con sus entrevistados, a quienes los presionan para que digan si apoyan al Gobierno o no. Si lo hacen motu proprio es lamentable, pero si les bajaron línea es repudiable. Supongo que debe ser lo segundo, porque en un medio nadie hace absolutamente lo que se le da la gana, por más que digan lo contrario. Miguel Ángel Berman

DNi 4.444.527

Salarios docentes Quiero referirme a la carta del señor Santiago W. Fuchs del 26 de mayo. Tengo 74 años y soy docente jubilada con 50 años de profesión, y necesito preguntarle al autor de la carta si le diría a un médico de hospital que se dedique a otra cosa si no gana lo suficiente. ¿Quién atendería a los pobres que no tienen obras sociales ni prepagas? Si todos los docentes de escuelas públicas que no ganan lo suficiente se fueran, ¿quién enseñaría a esos niños que no pudiendo ir a una privada y tampoco cuentan con ayuda adecuada en sus hogares? Cuando yo estudiaba las maestras eran esposas o hijas de familias con buena posición económica y los do-

Carlos Luengo

DNi 4.134.853

Ingresos brutos Por ser monotributista y habitar en la ciudad de Buenos Aires tengo que inscribirme en ingresos brutos, para lo cual debo solicitar la Clave Ciudad en la comuna que corresponde a mi domicilio, en este caso la N° 5, situada en Carlos Calvo 3325. Grata impresión me causó el edificio: prolijo, ordenado, cómodo. Solicité el número para ser atendido y luego de la espera correspondiente la empleada encargada del trámite me informó: “Creo que la página no funciona”. Oh sorpresa, la página efectivamente no funcionaba. Rumiando bronca protesté y pregunté por qué razón no se le informa al contribuyente al solicitar ser atendido. Pedí, además, por residir un poco lejos, que me faciliten un número telefónico de la comuna para averiguar si todo está en orden para efectuar el trámite, a lo que se me contestó que sólo tenían un teléfono en el tercer piso y allí no sabrían notificarme... Huelgan los comentarios. Leonardo Cleiman

DNi 4.263.817

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Velódromo Coincido con lo expresado en su carta por el lector Morel Quirno con respecto a la expropiación del lugar que luego fue ocupado por el Velódromo Municipal. Discrepo en cuanto a que ese velódromo nunca sirvió para nada. Fue construido de acuerdo con las más exigentes normas de la Unión Ciclista internacional, y desde

En la Red La Ciudad medirá la inflación Facebook

Rutas argentinas Circulando por la ruta 3, uno se da cuenta de que los desaparecidos fueron y serán por siempre en esta Argentina. Gente que desaparece por no poder sobrevivir a un Estado que no hace nada por el bien de su propio país y su gente. Las rutas argentinas engullen a miles de personas por año, por no estar en estado, por no tener control policial. Destruyen familias, proyectos y esperanzas; ¡destruyen a quienes construyen este país día tras día! Y así perdemos vidas, perdemos compatriotas. Y éstos, sólo viven en la memoria de unos pocos por sed de justicia, que no olvidan. El Estado mismo no está en buen estado, ¿cómo podemos pretender que las rutas lo estén? Triste presente que tenemos que cambiar. Sólo quiero recordar a todas esas personas que quedaron sepultadas bajo tan injusto anonimato. Queremos rutas argentinas, no asesinas. Elisa Zorraquín

DNi 35.365.580

Cazuela y Tertulia “El va a decir que es del 40 y el Indec que es del 20, ninguno de los dos sirve. Aparte, los precios de capital no son los precios del país” Paulo Galíndez Pisarello

Conductores de TV

el Velódromo cumplió una muy importante misión, y a todos los amantes del deporte nos apena su estado actual. En algo más discrepo del señor Morel Quirno. Un ciclista jamás tiene miedo a caer y lastimarse, cualquiera que sea la calidad del piso donde compite. Si fuera así, no competiría.

“Todos los gobiernos provinciales deberían adoptar la misma medida para sus territorios y no seguir las mentiras del Indec. Bien por Macri, por lo menos en esta decisión” H. Jorge Córdoba

“Excelente, pero por favor, también si es que pueden midan la mugre, que nuestra hermosa ciudad merece estar limpia” María Ester Wilsen

El martes pasado asistí a una extraordinaria función en el Teatro Colón. El placer estético fue empañado al enterarme de que en las localidades de pie en Cazuela y Tertulia, respectivamente, desde décadas se realiza una segregación por sexo; mujeres en Cazuela y sólo hombres en Tertulia, mientras que en el Paraíso hombres y mujeres asisten de pie sin discriminación alguna y por ello estaba repleto, en tanto que las otras localidades populares de los pisos inferiores estaban prácticamente libres. Obviamente, dado que los precios eran iguales (70 pesos por persona), los amigos, novios y familiares habrían optado por no estar separados durante la función. Me pregunto cómo la Legislatura porteña no ha subsanado este resabio segregatorio y cómo se les explica en boletería a los turistas, cuando quieren adquirir entradas de este tipo, que los argentinos no discriminamos. Ezequiel Di Natale

DNi 27.147.528

Aguirre Suárez su inauguración hasta el cierre –dispuesto por el intendente Grosso en 1991– vio competir a grandes ciclistas nacionales e internacionales. A principios de la década del 50 se dieron cita allí importantes ciclistas europeos, como los italianos Gino Bartali, Fausto Coppi y Fiorenzo Magni. Allí se corrieron torneos regionales, nacionales, rioplatenses, panamericanos y mundiales, y tuvimos oportunidad de aplaudir a Jorge Batiz, subcampeón mundial de velocidad los años 1954 y 55. En esa pista comenzó a competir Luciano Dazzan, campeón mundial juvenil de velocidad en 1975, e hizo sus primeras armas Marcelo Alexandre, campeón mundial del kilómetro contrarreloj en 1981. En 1979 se desarrolló en su pista el campeonato mundial juvenil de ciclismo. Y allí se coronó campeón el norteamericano Greg Le Mond, luego ganador del Tour de France en tres oportunidades. Más allá de su origen espurio,

Querido negro: el lunes 27 de mayo entraste al campo de juego como cuando eras jugador, ese defensor aguerrido que imponía respeto a los rivales y confianza a tus propios compañeros. Figura fundamental del equipo de Osvaldo Zubeldía, siempre fuiste al frente. Un lugar en el palco estaba reservado para vos, recibiste el cariño de la gente y la camiseta con nuestros colores cuyo texto decía: “Gracias eternas” “Tricampeón de América 68-69- 70” “Campeón del Mundo”. Tus ojos brillaban en una mezcla de llanto, emoción y alegría. Fue tu último partido y lo jugaste hasta el final. “La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente”(F. Mauriac). Tu recuerdo, Ramón Aguirre Suárez, querido tucumano, lo llevaré por siempre. Daniel Ridner

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