Dilemas de la sociedad mediática

20 abr. 2008 - vesar la política de la historia, confrontar la culpa y arribar a un memorial adecuado de crímenes nacionales que también ofrece un camino ...
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Enfoques

Página 2/Sección 6/LA NACION

[ PUNTO DE VISTA ]

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Domingo 20 de abril de 2008

Puerto Libre Por Orlando Barone MIGUEL ACEVEDO RIU

La semana en foco

La memoria y la herida racial

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Dilemas de la sociedad mediática

Por Roger Cohen The International Herald Tribune Deambulaba por el Centro Martin Luther King, en Atlanta, cuando di con la filmación de una mujer negra que decía indignada: “Si no podemos vivir en nuestro país y ser aceptados como ciudadanos y seres humanos libres, entonces algo anda mal con algo, y no soy yo”. Parecía una buena y sencilla síntesis del conflicto central que ha sacudido la vida de EE.UU. desde su fundación, a través de la esclavitud y la segregación y sus amargos legados. Cuando la mujer habló, hace menos de medio siglo, era una estadounidense en cadenas. La educación que recibía, dónde podía sentarse y con quién podía casarse eran cosas determinadas por su raza. Ese “algo anda mal con algo, y no soy yo” es un gran tema, el “pecado original del país” según las palabras de Barack Obama. Además es doloroso, ya que muestra que hay diferencias entre los ideales y las prácticas. Abu Ghraib fue un recordatorio de ello. Es trabajoso para las naciones enfrentar sus fallas. Involucra lo que los alemanes, expertos en este terreno, llaman Geschichtspolitik, “la política de la historia”. Exige pasar de lo personal a lo universal, de la memoria individual al memorial. Y aún no existe un memorial adecuado en EE.UU. a los estragos causados por la cuestión racial. El centro King es una buena institución. Pero es un museo modesto, como otros en EE.UU. dedicados a la cuestión que más divide al país. Al ver la muestra me pregunté por qué el Holocausto, un crimen alemán, se destaca más que los linchamientos en EE.UU. en la memorialización del país. Quiero ser claro: no estoy comparando los linchamientos con el asesinato industrializado, ni sugiero que haya una equivalencia moral exacta entre el Ku Klux Klan y los nazis. Pero hay un desplazamiento psicológico cuando un magnífico Museo Me...“Al promover morial del Holocausto, en el que los criminales el primer candino son estadounidenses, dato negro serio, precede a una institución de Washington de EE.UU. redefine estatura equivalente dedicada a la larga sala psicología de ga de violencia nacional que es la esclavitud y la su poder”... segregación. Viví tres años en Berlín, durante el período en que se tomó la decisión, en 1999, de construir un Memorial en homenaje a los Judíos Asesinados en Europa. El debate, 54 años después del colapso del Reich de Hitler, fue duro. Lleva largo tiempo atravesar la política de la historia, confrontar la culpa y arribar a un memorial adecuado de crímenes nacionales que también ofrece un camino posible hacia la reconciliación. Los alemanes enfrentaron lo monstruoso en sí mismos. Por fin llegaron a la conclusión de que la mancha era tan generalizada que se permitió a Degussa, vinculada a la compañía que produjo el gas Zyklon-B, proveer la cobertura contra graffitis para el memorial. La verdad puede ser brutal, pero escapar a ella es aún más devastador. La narrativa heroica de EE.UU. aún huye de la cuestión racial. La decisión de construir el Museo Nacional Smithsoniano de Historia y Cultura Afroamericana refleja el deseo de rellenar ese hueco. Pero aún está por inventarse qué será exactamente esta institución de 500 millones de dólares. Creo que, medio siglo después del movimiento por los derechos civiles, EE.UU. está listo para este doloroso acto de memoria. Pero no será fácil. Los tres contendientes por la presidencia ofrecen distintas imágenes de EE.UU.: John McCain conforma la narrativa heroica clásica. Hillary Clinton quiebra el dominio masculino sobre esa narrativa y la transforma. Obama la transfigura de otra manera al personificar la victoria de EE.UU. sobre su primera y más visceral mancha. El mundo está cansado de la narrativa del excepcionalismo trascendente de Estados Unidos. Algo anda mal con algo. Las Armas y Dios, el nuevo mantra de Hillary, no resolverá la cuestión. Tampoco lo hará pasar 100 años en Irak. Más bien es hora de que el país se haga duras preguntas pospatrioteras y permita la memorialización incluso de sus capítulos más oscuros. Exigir que otras naciones reconozcan la verdad y evadirla en casa no sirve. Al comprometerse con un importante museo de Historia Afroamericana y promover el primer candidato negro serio, EE.UU. redefine la psicología de su poder. Eso asusta. Pero también puede ser saludable.

Escasa visibilidad, caos en el transporte y preocupación por los efectos sobre la salud causó la masa de humo que esta semana cubrió la ciudad y que fue originada por la quema de unas 70.000 hectáreas en el delta

[ PRISMA ]

El Big Crunch digital Algunos de los temores de la sociedad de la información, ciertamente justificados, tienen que ver con la imposibilidad de proteger la privacidad. Para escribir un libro sobre la materia, por ejemplo, David Holtzman, ex analista de inteligencia, decidió buscar cuánta información podía obtener de sí mismo de fuentes que estuvieran disponibles para cualquier persona. Cuando juntó los datos, había sido capaz de descubrir tanto de sí mismo que su editor le impidió que publicara todo lo encontrado. La información de crédito, las transacciones financieras, el listado de llamadas telefónicas e e-mails, las páginas web que visitaba, entre otras cosas, configuraban un rastro absolutamente preciso de su vida. Hasta había registros de su circuncisión. Sin embargo, justamente porque la información digital ha pasado a

Por Enrique Valiente Noailles Para LA NACION ser el sistema nervioso central de la sociedad contemporánea, han despertado ahora inquietudes de otro orden. La infraestructura y las arterias de ese sistema podrían infartar por completo, reenviándonos de manera involuntaria a una situación preinformática. Los expertos de Nemertes Research acaban de pronosticar el posible colapso de internet para 2010. Unos 1330 millones de personas usan internet cada día, 162.662 millones de sitios coexisten en la web, y cada día YouTube distribuye el equivalente a 75.000 millones de correos electrónicos. Imaginemos un mundo en el que se vieran afectados seriamente la actividad de los bancos, los teléfonos, los correos electrónicos y el comercio en general. El tamaño del cosmos digital se

calcula hoy en 281.000 millones de gigabytes. Como si quisiera recordarnos su configuración dual, la realidad tiene una tendencia a corregir toda forma de unilateralidad y exceso. A una gran explosión sucede muchas veces una implosión (regla implícita a la que pocas cosas se sustraen, como lo demuestran en estos días también los mercados de crédito). Tal como algunos predicen para el universo real, es enteramente posible que al Big Bang del universo digital pueda sucederle un Big Crunch, movimiento simétrico e inverso de similar intensidad a la explosión original. Y así como alguna vez el deseo de la humanidad fue salir del anonimato, dejar minuciosas huellas y precisos registros de sí, podría estar germinando también un movimiento inverso, un oculto deseo de borrar el rastro tras de sí. [email protected]

Patrick Chappatte / Le Temps, de Ginebra, Suiza – Fue Dios quien me inspiró para ir a la guerra... pero desde entonces no he vuelto a saber de él.

Steve Kelley / The New Orleans Times - Picayune –¿Por qué los demócratas le darían la nominación a un elitista como Barack Obama... cuando obviamente la merezco yo por ser quien soy? Pat Bagley / Salt Lake Tribune, de Utah, EE. UU. La Madre Naturaleza, ante un dilema.

Lo natural y lo artificial. He ahí el dilema. Ya resuelto el dilema entre el amor cárnico y el platónico a favor del primero, quedan el de la milanesa de ternera o la soja transgénica; el del gabinete ministerial rosa o el gabinete del Viagra. O el del observatorio o la discriminación libre; el periodismo o los intereses; el público o la hinchada; la prensa o la empresa. La cáscara o el grano. A partir de aquel dilema universal se suceden dilemas subalternos. Por ejemplo, se acaba de saber que un antiguo dilema de astilleros, resuelto a favor de los remaches “truchos” de bajo costo en lugar de remaches seguros más caros, es lo que determinó el hundimiento del Titanic. También el dilema de cómo limpiar de pastizales zonas del delta, en Entre Ríos, se resolvió por el bajo costo de un fósforo. El precio alto lo pagaron los que se tragaron el humo. Nazarena Vélez agotó la tirada de la revista Playboy con sus pechos esféricos de relleno no biodegradable, y Silvio Berlusconi ganó las elecciones de Italia con su máscara del “Joker” o Guasón, el burlón enemigo de Batman. Ambos

sonríen. También sus respectivos admiradores se sienten felices. Admiran menos a la naturaleza que a sus respectivas recreaciones plásticas. Es la tendencia. El dilema vuelve a inclinarse para el lado del artificio y no para el de la naturaleza. Por suerte Marilyn Monroe viene desde el pasado a poner las cosas en su sitio. El video porno que protagoniza, filmado antes del informe de Masters y Johnson, desmitifica la difundida idea de que el sexo, con las variaciones que hoy se lo conoce, sea un invento de las generaciones actuales. De haber existido videos en la época de Cleopatra y Marco Antonio, o en la de Atila y sus carpas colmadas de mujeres, descubriríamos que también ellos se lucían en surtidas perfomances. Para no remontarnos a alcobas prehistóricas donde vaya a saberse qué fantasías se nos ocurrían sin ducha ni bañera en grutas tapizadas de lapas y murciélagos. La faena que Marilyn ahí desarrolla desmiente la falsa creencia juvenil de que el “pete” es una creación reciente. Tanta ingenuidad conmueve. Esta vez la resolución del dilema fue a favor de la naturaleza. Y está el caliente dilema de los medios. También la opción entre la naturaleza original y la que fue adquiriendo alejándose de aquélla. Es la opción entre el tabú y la hipocresía; entre la utopía teórica y el realismo empírico. Desde uno y otro lado presumen tener alguna certeza sobre la sociedad mediática. Sobran fanáticos; y sobran argumentos ficcionales y argumentos reales. Pero no reconocemos que estamos todos nadando presuntamente libres como peces en un acuario, y si nos agitan el agua tememos que la vuelquen y libres perdamos la libertad del cautiverio. Como esos delfines que una vez liberados en el mar vuelven al lugar donde fueron domesticados. No hay observatorio que le impida a Truman Burbank (Jim Carrey), en The Truman show, escaparse de la omnisciente mirada del director de cámaras “Criftof ”, Ed Harris. Finalmente se escapa. Por más que se pongan observatorios nunca se verá la procesión que va por dentro. Y es más sano no verla. Las procesiones internas son internas por eso: porque no quieren que se las vea. Se trata del dilema entre la realidad real y la realidad contada por nosotros. Los periodistas. Es un acto de fe optar por una u otra. O por ambas, ateniéndonos a las consecuencias. Qué quiere que le diga. El implacable cocinero Anthony Bourdain cuando cuenta cómo es y qué pasa en la cocina de un restaurante (y pasa de todo, desde mozzarella en desuso hasta perros para empanadas) debe de sentir que traiciona a su especie. Y no hay especie –ni política ni social ni mediática– que resista la sinceridad de un cocinero contando la cocina.

Traducción: Gabriel Zadunaisky

[ SERA NOTICIA ]

[ IDEAS EN MARCHA ]

HILLARY SWANK: la actriz norteamericana comenzará a rodar a fines de mes su nueva película, titulada Amelia, que estará basada en la vida de la piloto Amelia Earhart y su difícil relación con su marido, el editor George Putnam (Richard Gere). El film se rodará en Canadá y Sudáfrica y su estreno está previsto para el año próximo.

El mercado de la música, cada vez más digital tendencias

DANIEL BARENBOIM: el reconocido músico y director ofrecerá mañana un concierto en Valencia, como broche de oro a los actos conmemorativos del 20° aniversario del Palacio de la Música de esa ciudad española. Allí interpretará el “Concierto N° 1 para piano y orquesta” de Brahms y el “Concierto N° 3 para piano y orquesta” de Beethoven.

La venta de música en formato digital continúa creciendo en forma sostenida. Un estudio de la consultora In-Stat, especializada en el mercado tecnológico, calcula que este tipo de comercialización representó el diez por ciento del mercado musical mundial durante el año último, un cuatro por ciento más que en 2006. Pero lo más impactante son las proyecciones a futuro: se estima que

en 2012 el medio digital absorberá el cuarenta por ciento del total del mercado musical del planeta. El trabajo menciona tres aspectos centrales para este crecimiento: la penetración cada vez mayor de la banda ancha, sumada a las estrategias de la industria que, como respuesta a la piratería online, está trabajando con mucho impulso en el desarrollo digital de catálogos de música y de

descargas de canciones. También, el posicionamiento cada vez mayor de los dispositivos móviles como receptores de música. De acuerdo con este trabajo, mientras que en 2007 las ventas de música digital alcanzaron los 3500 millones de dólares, dentro de cinco años sólo las descargas hacia teléfonos celulares representarán ventas por unos 4200 millones de dólares.

HORST KISCH: este químico alemán encabeza un equipo científico que creó una pintura capaz de absorber las sustancias tóxicas del aire. La pintura ya fue probada en una oficina y demostró ser eficaz: en pocos días, la concentración de sustancias nocivas se había reducido en un ochenta por ciento. El secreto de esta pintura, producida en el Instituto de Química Orgánica de la Universidad de Erlangen, reside en la adición de dióxido de titanio que, al ser modificado estructuralmente, es capaz de eliminar sustancias como el monóxido de carbono, el formaldehído, el dicloroetileno y el benzol. Al proyecto, que ya cuenta con el visto bueno del gobierno alemán por su potencial en la lucha contra la contaminación, sólo le resta un gran desafío: lograr la reducción de los costos para volverse más accesible. Una lata de 15 litros cuesta 200 dólares.