Comunidad/Editoriales/2006/Normas de Buen Gobierno Corporativo


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CARTA DEL MES 29 de Septiembre de 2006

Normas de Buen Gobierno Corporativo un reto para Ecuador La Corporación Andina de Fomento esta comprometida con el impulso al Gobierno Corporativo Regional, en nuestro país la Bolsa de Valores de Quito tiene a cargo la difícil tarea de implementar en los sectores privado y público las denominadas Normas de Buen Gobierno, tarea titánica pues son normas de carácter ético y de compromiso social, antes que un marco legal dispuesto por autoridades administrativas o de control. Mientras en otros países latinoamericanos ya se realizaron reformas normativas en este sentido, por vía de las autoridades regulatorias y de control (por ejemplo Chile, Argentina, Brasil, Colombia, México, entre otros..), las prácticas de Buen Gobierno Corporativo en el Ecuador tanto en las empresas o corporaciones privadas como en las de capital Estatal, están tratando de ser implementadas por la Bolsa de Valores de Quito, apelando a la conciencia y al interés de los directivos y accionistas, antes que a una norma de cumplimiento obligatorio. Por lo tanto es importante invocar el compromiso de cambio razonado y voluntario, es decir, aceptación conciente, por sobre la imposición legal. Las empresas y corporaciones deben crear estándares de conducta óptima que legitimen su presencia empresarial ante la sociedad y que, a su vez, les permita obtener una mejor valoración comercial y bursátil. A partir de la hecatombe financiera de las transnacionales Enron y Parmalat quedó demostrado que las “estructuras huecas no hacen realidades”, la falla en la transparencia de la información, la falta de igualdad en los derechos para con los accionistas pequeños, la Inexistencia de independencia y ética de los auditores, el deseo de los directivos de complacer a los accionistas, entre otras muchas razones precipitaron la caída de esos gigantes, las mismas razones han impulsado una verdadera cruzada por implementar normas de conducta fiables y con estándares internacionales susceptibles de ser auditados por cualquier persona, en cualquier lugar o tiempo. La Unión Europea que en los últimos años ha tratado de reformar la manera de gobernar sus grandes empresas, ha desechando la solución de una reforma legislativa optando en cambio por la vía de la "norma blanda", la cual cambia a medida que el entorno empresarial lo amerite. En los Estados Unidos se han promulgado 33 Códigos de Buen Gobierno preparados por entes públicos y por comités creados por bolsas de valores o por acción directa de los empresarios. Aclaramos que a diferencia de los varios países de América Latina mencionados anteriormente, estos códigos o normas europeos y norteamericanos, no constituyen leyes en sentido tradicional, son recomendaciones de mejores prácticas para dar explicaciones públicas a cualquier plaza y que sea el mercado el que sancione o premie a las empresas que por sus buenas prácticas. La Bolsa de valores de Quito esta inmersa en este modelo de concienciación antes que uno de imposición. La Comisión Europea publicó un estudio sobre el impacto de los Códigos de Buen Gobierno en los países Europeos que los han adoptado, “este estudio destaca que a nivel

legislativo no ha habido forma de promulgar una regulación Europea común mientras que con los Códigos de Buen Gobierno de aplicación voluntaria, la convergencia es casi total en las empresas” En nuestro país el camino es largo y tedioso, no solamente en el sector privado, la inseguridad política y jurídica complica la aplicación de estas políticas en aquellas empresas cuyo principal accionista es el Estado y más aún en la corporaciones públicas sujetas a la inestabilidad permanente del cambio de autoridades, a la nula gestión gerencial y al paradigma de autoridad frente al de servidor. Es necesario impulsar dentro del sector empresarial dos temas recurrentes y necesarios para la protección de las empresas (privadas o públicas) frente a la firma de Tratados de Libre Comercio con cualquier país del mundo que ya tenga implementado las normas de Buen Gobierno Corporativo y las de Responsabilidad Social Administrativa, como parte de los estándares de calidad en los procesos, en la administración y en los productos finales. A esto se suma el Gobierno Electrónico, como un requerimiento propio para todo el Sector Público y para los entes encargados de dar servicios vitales como salud, seguridad social, tributación, créditos orientados a la producción, gestores de normativa jurídica, organismos de control, etc.. Intentaremos una muy pequeña y limitada descripción de estos tres temas: GOBIERNO CORPORATIVO: Es difícil intentar una definición de este tema, mas aún cuando los expertos no se ponen de acuerdo, sin embargo podemos decir que son un conjunto de conductas practicadas dentro de la empresa o corporación, que determinan transparencia en la gestión y armonía entre los directivos, accionistas, usuarios y sociedad, en base a determinar funciones y responsabilidades y asumir compromisos. El Gobierno Corporativo incluye las relaciones entre los directivos de la empresa, el consejo de administración, los accionistas y otras partes interesadas. También proporciona la estructura a través de la cual se fijan los objetivos y se determinan los medios para conseguir esos objetivos y se controla el desempeño. La estructura de Gobierno Corporativo especifica la distribución de derechos y responsabilidades entre los diferentes miembros de la organización y otras partes interesadas y detalla las reglas y procedimientos para la toma de decisiones. Entre mayor sea la calidad del Gobierno Corporativo mayor es la confiabilidad de los reportes financieros para la tasación desde del mercado de valores y desde luego para la valoración desde la sociedad. Maximizando así el valor de la empresa a través de un buen manejo financiero y del cumplimiento de las obligaciones legales y contractuales. Por esto las compañías deben redescubrir las virtudes de la transparencia y el comportamiento ético. "Teniendo en cuenta que ninguna empresa puede ser exitosa, ni competitiva, si la opinión publica desconfía de sus negocios". Los estudios realizados nos muestran que las empresas y corporaciones que adoptan voluntariamente por ejemplo los sistemas de divulgación de información mejoran su reputación en el mercado, se benefician del menor costo de los capitales y por

consiguiente sus acciones se cotizan más caras. RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA: El Libro Verde de la Unión Europea define a la RSC como “un concepto con arreglo al cual las empresas deciden voluntariamente contribuir al logro de una sociedad mejor y un medio ambiente más limpio”. La adopción de criterios de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) en la gestión empresarial implica la formalización de políticas y sistemas de gestión en los ámbitos económico, social y medioambiental; también, la transparencia informativa respecto de los resultados alcanzados en tales ámbitos; y, finalmente, el escrutinio externo de los mismos. Las organizaciones ejercen su responsabilidad social cuando satisfacen las expectativas que, sobre su comportamiento, tienen los diferentes grupos de interés, contribuyendo a un desarrollo social y ambientalmente sostenible, y económicamente viable. Los temas básicos de que trata la RSC son: Relación con sus clientes y espectadores: conocer sus perfiles y características; ampliar y mejorar la oferta; buscar la calidad en el servicio; facilitar una comunicación fluida y apostar por la tecnología de punta. Relación con sus empleados: crear oportunidades; potenciar el desarrollo profesional; impulsar la formación y fomentar la actividad docente académica; lograr políticas conciliatorias; desarrollar la comunicación interna y vigilar la salud y seguridad en el centro de trabajo. Transparencia informativa: comunicación con los accionistas y la comunidad financiera y con la sociedad. Entorno social: activa participación en acción social y solidaria; apoyo a medidas de protección medioambiental y al desarrollo social sostenible y respaldo a las manifestaciones culturales y sociales. Presentar Indicadores Públicos de actuación: Con relación a los clientes: ventas, distribución geográfica de mercados, etc. Con relación a los proveedores: pagos, porcentaje de compras a proveedores, etc. Con relación a los empleados: valor de las remuneraciones-incluyendo salarios, pensiones y otros beneficios y al respeto a los derechos humanos. Con relación a los Inversionistas: intereses, dividendos etc. Con relación al sector público: impuestos pagados y subsidios recibidos más los Impactos económicos indirectos. GOBIERNO ELECTRÓNICO: Utilizando la Tecnología de Información y Comunicaciones TICs, surge una nueva forma de relación entre ciudadanos y las Administraciones Públicas. Portales o sitios Web de la Administración Estatal desde donde las y los ciudadanos pueden encontrar información pública, realizar trámites y contactar representantes del gobierno y los

Administradores o Mandatarios Públicos rinden cuentas de sus actividades y dan servicio a los usuarios. Fases que involucra el EGov o Gobierno Electrónico: Información ("Presencia"). En esta fase los Servicios tienen la capacidad de proveer información sobre su acción al ciudadano, es decir, existe información en línea. Sin embargo, el contacto se realiza por teléfono o correo (no e-mail); siendo básico el sitio Web. Interacción ("Interacción"). Considera comunicaciones simples entre el Servicio y el ciudadano, y la incorporación de esquemas de búsqueda básicas; permite, por ejemplo, la descarga de archivos y formularios, y el uso de correo electrónico. Interacción en dos vías ("Transacción"). Incluye una interacción electrónica bidireccional entre el ciudadano y el Servicio, en forma alternativa a la atención presencial en las dependencias del órgano. Incluye autentificación, procesamiento de formularios, etc. Integración Vertical Interna (“Transformación”). En esta fase el sitio Web es transaccional, la interacción es personalizada (decisión, entrega y eventualmente pago). Gobierno Electrónico Unificado. Esta etapa final se caracteriza por la existencia de una Ventanilla Única para la realización de cualquier trámite e involucra que todas las redes y/o prestaciones de servicios a disposición en las instituciones públicas estén interconectadas. Atención Integral a las personas naturales y a las jurídicas. Democracia Electrónica: Es la última etapa de gobierno electrónico y se la define como el modelo de interacción en línea entre ciudadanía y administradores, mandantes y mandatarios, empresarios y clientes. Es una relación directa horizontal prescindiendo de jerarquías verticales, cadenas de mando u órganos regulares de dirección. Las autoridades consultan al ciudadano y este consulta y cuestiona a sus representantes, la democracia (gubernativa, social o societaria) utilizando la tecnología se convierte en radical y directa. La rendición de cuentas es inmediata y comprobable y por lo tanto la relación gobierno/ciudadano es diferente y por ende con roles activos, participativos, incluyentes y transparentes. Dr. Marco Albuja DIRECTOR FUNDACION LEXIS