Serie de sermones: Un cónyuge en la casa Mensaje 4: Conviértase en un cónyuge poderoso Pastor Mike Chapman Con este mensaje concluimos la serie sobre el matrimonio. Hoy nos enfocaremos en las estrategias para trabajar nuestros matrimonios. ESTRATEGIAS PARA EL ÉXITO La mayoría de la gente quiere que su matrimonio funcione. La pregunta es, ¿cuál será la estrategia? Estrategias para la felicidad conyugal: 1. Mantenga el enamoramiento. 2. Mejore su compatibilidad sexual. 3. Tenga hijos. 4. Tome las medidas para asegurar sus finanzas. 5. Desarrolle una relación comprometida con Jesucristo. Existe solamente una estrategia fuerte para sostener a un matrimonio. ¿PUEDE JESÚS HACER LA DIFERENCIA? El compromiso con Jesucristo cambia nuestra idea sobre el fin del matrimonio. 1 Corintios 7:2, “Sin embargo, por causa de las fornicaciones tenga cada uno su propia mujer, y tenga cada una su propio marido”. El matrimonio nos lleva a una relación íntima con otra persona para que trabajemos en las áreas en que debemos conformarnos a Cristo. 1 El fin del matrimonio no es hacernos felices, sino santos. El matrimonio es parte del plan de Dios para su desarrollo. El compromiso con Cristo cambia nuestra conducta. 1 Juan 4:16-17, “Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor, y el que permanece en amor permanece en Dios y Dios en él. En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio, pues como él es, así somos nosotros en este mundo”. Su amor mejorará en la medida en que profundice su relación con Cristo. Será cambiado de orgulloso y a la defensiva a humilde y vulnerable. El compromiso con Cristo cambia nuestra perspectiva. Efesios 5:21, “Someteos unos a otros en el temor de Dios”. Cuando está comprometido con Cristo, tiene las siguientes perspectivas:

Acerca de su matrimonio... “Esto es entre tú y yo y Cristo”. “No trata sobre nosotros, sino de los tres”. “No puedo hacer lo que me dé la gana porque Jesús es parte de nuestra relación”. “Puedo hacer lo que sea necesario porque Jesús es parte de nuestra relación”. 2