Vírgenes del todo

El Zoco era el primer sitio en el que podías torcerte si cruzabas la calle. Significaba dejar de comer pipas sentadas al borde de la fuente del parque, frente al ...
36KB Größe 7 Downloads 39 vistas
Vírgenes del todo Solo veíamos las letras verdes desde fuera. El Zoco era el primer sitio en el que podías torcerte si cruzabas la calle. Significaba dejar de comer pipas sentadas al borde de la fuente del parque, frente al kiosco. Con la sal de las cáscaras nos santiguábamos al ver pasar a las que empezaban a pintarse más que un cuadro o a las que ya conocían el universo de las mechas. Todavía no habíamos salido del cascarón y soñábamos con tener la melena del revés: las de pelo lacio con moldeadores y las de pelo rizado con los evidentes desrizantes. De esa manera aprendimos que hay que desear lo que no puede ser. Sin saber cómo, caímos en la tentación y un sábado entramos. Rompimos el hielo y averiguamos que los cubitos no tienen por qué hacer honor a su nombre, pues en aquel lugar tenían forma redondeada. Descubrimos para qué servían esos vasitos que habíamos visto alguna vez en el mueble bar de casa. Los camareros los llenaban con líquidos que tomaban nombres de lo más pintorescos, entre los cuales el más inocente era el de “piruleta”. Compramos a medias nuestros primeros paquetes de “Fortuna” que tantos dólares y dolores de cabeza nos cuestan aún. Llevábamos entonces en el bolsillo una moneda en la que aparecían Sofía y Juan Carlos, que misteriosamente nos hacía volver con calderilla a casa. Pensamos que el mundo ya era pan comido y nos dimos licencia para entrar en la "Amity" y en la "Whiskería". Allí tonteamos con los primeros. También tonteamos con lo ridículas que estábamos bajo aquellas extrañas luces que nos dibujaban una sonrisa fluorescente o que transparentaban nuestros primeros sujetadores blancos. Mentíamos piadosamente a nuestras madres con fiestas pijama inexistentes para arañar media hora más en nuestra exploración de la noche “bullera” y nos intercambiábamos la ropa aunque jamás habíamos escuchado la palabra INDITEX.