vidriera

2 abr. 2009 - de seda labrada, otros de crochet ne- gro con forro de seda marfil, indica- dos para la hora del cóctel, igual que el vestido camisero de encaje ...
2MB Größe 11 Downloads 71 vistas
MODA&BELLEZA

Jueves 2 de abril de 2009

3

CARA&CECA

Rafael Garófalo

Catálogo de la crisis en primera fila Otras maneras de mostrar el invierno/ Y altibajos en la facturación/ POR CARMEN ACEVEDO DIAZ

[VIDRIERA] | Inaugura hoy la exposición internacional de arte textil argentino-canadiense Américas sinuosas, intersección de extremos, con trabajos de Rosa Skific, Raquel Podestá, Constanza Martínez, Claudia Mazzola, Monique Beauregard, Helle Derrick y Lyne Girard, entre otros. Hasta el sábado 11, en Muchatela Taller, Lavalle 3946.

| Hasta mañana hay tiempo de darse una vuelta por la feria de accesorios que organiza la firma Airedelsur con productos de otras temporadas a buen precio. Para aprovechar, cinturones con hebilla de alpaca por 180 pesos; combinados con ónix, $ 290, y carteras de gamuza o cuero, $ 340. De 15 a 20, en Pereyra Lucena 2582, 3° B; www.airedelsur.com

| Samsonite, clásica marca de equipajes, lanza una línea para Semana Santa: Freeminder Flex, compuesta por siete modelos de poliéster y bolsas frontales para artículos personales. Todos, con opciones de transportación. Más información, www.samsonite.com

| Continúa la campaña Piecitos calentitos 2009 de la Fundación Cecilia Grierson, que reúne medias para niños de entre 3 y 5 años. Esta vez los beneficiarios serán los jardines de infantes de menos recursos de Bahía Blanca. Desde que comenzó la acción, en 2002, ya se entregaron 25.163 pares. Más información; www.fundaciongrierson.org.ar

| Llega la 4ª edición del Encuentro Latinoamericano de Diseño, que repartirá 10.000 dólares en premios. Los participantes, profesionales y estudiantes de áreas del diseño podrán elegir entre los concursos Aire urbano, Pasión visual latina, El sofá latino, La marca latina y Perspectivas del diseño latinoamericano, con manifestaciones que abarcan desde el diseño de indumentaria, propuestas industriales y gráficas hasta un ensayo de 90.000 caracteres. Como en las ediciones anteriores, este certamen está organizado por la Facultad de Diseño de la Universidad de Palermo, es gratuito y los interesados pueden inscribirse antes del 31 de julio en www.palermo.edu/dyc

Susana Ortiz

EVANGELINA BOMPAROLA. Retro y a la vez moderna, la diseñadora mezcla sacos de otras épocas con babuchas y baggies de sastrería. Marca la cintura con fajas, destaca los hombros con volados importantes o el cuello con gran variedad de jabots, incluido uno extra large. Sin caer en la estridencia, combina la abundante paleta negra con lujo a la italiana: un animal print de leopardo satinado tanto para camisas como fajas y faldas. Más toques de brillo en tapados de brocato y un look total en vestidos largos de hombro descubierto. Para la diseñadora, vale también combinar fuerte: top de encaje con faja animal print. O top de animal print con pollera lápiz negra plisada. En tonos más oscuros como azul o violeta, propone enteritos que recuerdan los años 80, pero con piernas englobadas. Los zapatos de gamuza negra con hebilla de piedras fueron creados por Ricky Sarkany en edición limitada y exclusiva para Bomparola. Todo, elegante y actual. CLAUDIO COSANO. A sala completa, y con Mirtha Legrand en primera fila, el diseñador cerró el ciclo con un verdadero show de famosas de la TV a todo brillo. Un chemise de encaje para Wanda Nara; un vestido dorado para Pamela David, y otro en blanco y negro para Nicole Neumann. También dijeron presente Dolores Barreiro y Daniela Urzi en su paso por la Argentina. Lookeadas con abundante flequillo y cola de caballo, las modelos mostraron desde vestidos ultracortos hasta largos estilo flamenco, en muchos colores. Pero la tendencia fue clara: el brillo ante todo, que no llega sólo con lentejuelas o pedrería, sino en telas con incrustaciones espejadas, modernas. Y si es en violeta, mejor.

Fotogalería. Más imágenes de este clásico ciclo en www.lanacion.com.ar

Iaia Cano

SYLVIE BURSTIN. Para el cóctel o una gran fiesta, nada mejor que vestidos muy elaborados, que ciñen la cintura y levantan vuelo. La combinación de materiales es clave en esta colección en la que se suele velar bordados orientales, plisados, lunares o telas brillosas con transparencias negras o monocromía. ¿Buenos recursos de la temporada? Las plumas salpicadas por la falda o apliques de tela como flores, repollos o cintas que le dan estructura. Valen los vestidos a la rodilla, largos hasta el piso, strapless, hombro descubierto y remate de strass o perlas. Otro buen segmento son los tapados, de cuellos grandes borda-

dos que están inspirados en la naturaleza, o de aires étnicos. En una variada paleta, modelos elaborados, pero sin recargar. Modernos, pero con cierto clasicismo. Y, por sobre todo, confeccionados con géneros y una tijera impecable.

Aritza

RAFAEL GAROFALO. Sugiere mucho abrigo con una colección para enfrentar un invierno duro, en todo sentido. Hay diseños para usar durante el día, intercambiarlos para realzar algún equipo de cóctel o bien transformar un conjunto para una fiesta. La idea es seguir la clave del diseñador: “Aprovechar cada prenda para distintos usos”. Multiplicidad de faldas, de tiro extra largo, tubo, con movimiento, caderines o godets se combinan con blusas románticas que llevan volados, encajes, jabots y cuellos a lo María Estuardo. El vestido negro, infaltable. Además, pantalones para todas, fuseaux, rectos, clásicos y anchos en la botamanga. Sobresalen los abrigos de paño, rectos y en línea A, con buenas hebillas y botones. Suma ruanas, capas con mangas orientales, suéteres amplios, chalecos de piel y camperas de nylon y seda con efecto satinado. El dúo blanco y negro invade la paleta, que también brilla con destellos en fucsia, violeta, langostino y azul francia.

Darío Arbina

Mariela Allaix

DORINA VIDONI. Con Graciela Borges, Tini de Boucourt, María Kodama, Bea Carabio y Susú Pecoraro en primera fila, tuvo asistencia masiva de espectadores de todas las edades (algunos estudiantes tuvieron que sentarse en el piso). Dedicada al modal en todas sus variantes de peso y color, la colección, práctica por destino y factura, exhibió una mirada a las culturas nómadas de cosacos, beduinos y tuaregs. Babuchas dentro de las botas, chalecos con bordes de piel sintética, borcegos de gamuza, camisas amplias, parkas y capas bien desplegadas en una propuesta basada en las superposiciones. Los efectos envolventes del modal se alternan con livianos textiles tapiceros y crean una ilusión de sinfín de franjas y colores: violeta con azafrán, crudo, lacre, verde y tonos de tierra. La novia cerró en sintonía, vestida con pantalones, gorro de piel estilo cosaco y capa dorada.

Solo Ivanka

Claudio Cosano

SOLO IVANKA. Camisas de seda con mangas al codo, vestidos de lana con doble volado en el ruedo a la rodilla y en minivestido negro con gorguera blanca. A los abrigos de jersey de lana mélange, cerrados con jabot siguió una versión del tailleur pantalón donde las botamangas vinieron rectas y polleras con aplicaciones tono sobre tono. Para tapados clásicos prefirió colores como camel y verde manzana con costuras destinadas a enfatizar materiales. La versión del pantalón de montar apareció urbanizada con recortes a contratono en la entrepierna. Más arreglados, unos abrigos cortos de seda labrada, otros de crochet negro con forro de seda marfil, indicados para la hora del cóctel, igual que el vestido camisero de encaje negro, naturalmente. Una colección clásica y llena de recursos cuyo punto más alto estuvo en un tapado corto, de paño rosa Dior, con aplicaciones de encaje negro.

I

Un diseñador con años en el métier y clientas fieles confiesa que, cansado de tener que hacer esfuerzos para calmar los ánimos de quienes se ofenden por tener que ir a la segunda fila de su desfile, cortó por lo sano y cambió de dinámica. En lugar de la presentación habitual, mesas de té y modelos circulando entre ellas para mostrar la colección. Y todas las invitadas contentas, asegura. Sucede que ese estado de ánimo no suele ser el habitual de las primeras filas de los desfiles, donde todo el mundo quiere estar cueste lo que cueste. Desde la famosa que ha sido invitada y llega seguida por todas las cámaras hasta la señora o la chica que nadie conoce y con cara de piedra asegura, por ejemplo, que es amiga de la diseñadora o que escribe en un medio asimismo ignoto. Una pesadilla para los relaciones públicas, que en cada temporada hacen de malos de la película espantando a los colados del día, que por lo general no son pocos. Tampoco hay primera fila, aunque se podría sospechar, en una nueva modalidad de presentación que parece el resultado de un desfile, pero no lo es. Se trata del lookbook, suerte de sinfín fotográfico que reemplaza el catálogo y llega a la clientela y los medios de prensa como lanzamiento de temporada. En general con fondo blanco o gris, la modelo protagonista parece avanzar hacia la cámara, como lo haría en pleno desfile, mostrando en cada imagen un equipo diferente; en cualquier caso, las tomas son útiles para reproducir en los medios y suficientemente atractivas para que la clientela decida ya mismo qué es lo que quiere comprar. Y salga a darse el gusto. O no, depende. Porque mucho no se vende. O mejor dicho, según se comenta, se factura lo mismo que el invierno anterior, lo que en buen criollo significa que se vende menos. Basta decir que ya empezaron las promociones de las tarjetas de crédito, algunas con descuentos significativos en compras de moda. Y agregar que los precios de este invierno, salvo excepciones, se mantienen prácticamente en igual nivel que en la misma temporada de 2008, cuando no menos: hay firmas todo terreno que arrancaron colgando el otoño-invierno con valores casi de liquidación. Aunque hay excepciones; marcas de renombre que venían de temporadas muy tranquilas y de repente ven que se multiplica su facturación sencillamente porque las tendencias les son favorables (muy en su estilo, podría decirse) y aprovechan bien la oportunidad para retomar posiciones. Lo cierto es que el mercado está muy tranquilo y el del lujo internacional no es la excepción, como sucedió alguna vez. Sus responsables cuidan los presupuestos al igual que las marcas nacionales y esperan a ver qué pasa. Como en la Aduana esperan los productos de varias de ellas (entre otras, los destinados a la apertura en Patio Bullrich de la boutique de una famosa diseñadora venezolana-neoyorquina) gracias a las limitaciones a la importación, que no contempla la diversificación del mercado. Blanco o negro, como siempre.

[email protected]