UNIVERSIDAD VERACRUZANA Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales
Doctorado en Historia y Estudios Regionales
Estrategias y redes de los empresarios textiles de la Compañía Industrial de Orizaba S.A. 1889-1930
Tesis que para obtener el título de Doctor en Historia y Estudios Regionales:
Presenta Mtra. Erika Yesica Galán Amaro
Director de tesis: Dr. Feliciano García Aguirre
Xalapa, Veracruz, Agosto 2010.
A mi asesor: Por su paciencia y conocimiento A mis maestros: Por sus enseñanzas A mi familia, compañeros y amigos Por su apoyo incondicional Y a todos los que contribuyeron a que logrará esta meta
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INDICE Introducción
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Capitulo 1. Experiencias historiográficas Miradas Nacionales Miradas Regionales Empresarios barcelonnettes Consideraciones teóricas
10 12 27 53 59
Capitulo 2: Importancia de una red Comerciantes Fundación de la Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA) Sociedades fundadoras Los principales socios Redes de negocios Red de negocios interpersonal Red de negocios interinstitucional
68 72 81 93 116 123 135 138
Capitulo 3: Estrategias de los empresarios en CIDOSA En la producción Principales fábricas y compañías textiles en México Recursos Agua Procesos de trabajo Patentes En la comercialización Marcas. Redes de distribución Laborales Salarios y el papel del Estado Prestaciones y seguridad social. Financieras Inversiones y rendimientos Dividendos y capital
148 150 150 166 166 178 186 190 190 196 203 203 210 214 214 221
Capitulo 4: Efectos regionales Importancia de CIDOSA Industria textil de algodón CIDOSA en el Valle de Orizaba Derrama económica Un acercamiento a la urbanización de Orizaba
230 233 233 244 250 256
Conclusiones
266
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Bibliografía
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Fuentes:
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ANEXOS Anexo A. Datos sobre la Industria textil Nacional 1917-1933 Anexo B. Maquinaría Anexo C. Salarios Anexo D. Balances Anexo E. Resultados del Primer censo industrial, 1930 Anexo F. Datos de la industria textil de algodón en los Estados en México, 1926-1939.
285 286 287 300 343 344 347
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Introducción Las primeras organizaciones consideradas empresas en Occidente fueron las ferias y las bolsas de mercancías, o ferias permanentes como la de la ciudad de Brujas. En éstas se podía contratar mercancías, valores y títulos. Los primeros comerciantes diversificaron sus actividades en comercio al menudeo, posesión de minas, propiedades rústicas, créditos a artesanos, municipios y hasta en la monarquía. Algunas, como las compañías marinas holandesas, en el comercio internacional. Sin embargo, a pesar de esa diversidad, algunas empresas se especializaron en el comercio de lana, hierro, trigo, tejidos y otras mercancías. Los primeros comerciantes fueron dueños, gestores y administradores de sus negocios. Fue a partir del siglo XVI que contrataron comisionistas para realizar tratos ajenos.1 En lo que respecta a las unidades productoras, éstas se organizaban como: A. Industrias domésticas y familiares2, en las que se producían artículos no agrícolas para el autoconsumo. B. Talleres artesanales, en éstos los aprendices, oficiales y maestros elaboraban artículos textiles, metales, cuero, alimentos, artículos de construcción y de madera para vender en el mercado. C. Industrias concentradas, como en el caso de la industria de la seda, la porcelana o de barcos, en éstas y debido al alto costo de su materia prima, el secreto de sus diseños, o por las dimensiones de su operación, los bienes debían elaborarse en un mismo taller o edificio, bajo la vigilancia de un director. D. Industrias rurales (a domicilio), en las que un empresario mercader repartía las materias primas en 1
García Ruiz, José Luis (Coor.).Historia de la empresa mundial y de España. Serie Historia Económica. Editorial Síntesis, España, 1998. Capítulo 1 y 2, pp. 15-67. 2 En la literatura económica se ha confundido la firma familiar con una empresa pequeña y/o artesanal, pero lo importante no es el tamaño de la firma, sino la distinción entre propiedad y control. Se dice que una empresa es propiedad familiar cuando un porcentaje suficiente de socios con derecho a voto tiene vínculos familiares (sanguíneos o políticos). Se dice que una empresa está controlada de forma familiar cuando el gerente general, ejecutivo en jefe, y/o las posiciones claves de dirección son controladas por miembros que pertenecen a una familia. Los miembros de la familia que pertenezcan a la empresa como socios o directores no necesariamente deben ser la mayoría, pero sí los que tengan el mayor poder de decisión (Casson, Mark. “The family firm in analysis of the dynastic motive” en Casson Mark. Enterprise and leadership: studies on firms, markets and networks. Cheltenham Edward Elgar, 2000, pp. 197-235).
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diferentes hogares, para que las trabajarán. Posteriormente, recogía los productos que él mismo comercializaba en la región. Con el desarrollo de sistemas legales e institucionales que permitían la asociación de capitales (como el Código de Comercio napoleónico de 1807 3), el desarrollo de algunos medios de transporte y comunicaciones -el telégrafo y los ferrocarriles (1820-1850)-, pero sobre todo con el impulso de la primera Revolución industrial (en Inglaterra a finales del siglo XVIII), se generó un nuevo tipo de empresa, mecanizada, con grandes instalaciones, un gran número de obreros, con múltiples departamentos y técnicas especializadas de contabilidad, almacenaje, distribución, y concentración de los procesos productivos en un solo edificio. Es decir, el sistema centralizado de la fábrica moderna, o gran empresa.4 Las primeras grandes empresas modernas en el mundo fueron las compañías ferroviarias, mineras y de textiles de algodón. Las compañías ferrocarrileras desde sus inicios necesitaron grandes sumas de capital y miles de trabajadores para operar y dar mantenimiento a las vías y a los vagones de los trenes. También requirieron de supervisores y directores de tiempo completo para controlar y coordinar el trabajo de los empleados operativos. Además, en el terreno de la administración, necesitaron innovadores procedimientos contables y de control interno, así como nuevas estructuras organizacionales. Las compañías ferroviarias fueron algunas de las primeras en crear las jerarquías administrativas, introducir organismos asesores y establecer la división de funciones en departamentos más especializados: control de tráfico, mantenimiento, almacenes de materiales, contabilidad de costos y finanzas.5
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El código napoleónico identificaba tres tipos de sociedades: la sociedad colectiva, donde todos los socios son responsables de las deudas y gestión de la empresa; la sociedad comanditaria, en la que algunos socios aportan el capital, pero no participan en su gestión, y la sociedad anónima, constituida por accionistas con responsabilidad limitada. Sin embargo, desde el siglo XVI ya encontramos la figura de la commenda (donde varios socios se agrupan por un tiempo determinado y negocio concreto, aportando dinero o capital, y siendo responsable sólo por el capital aportado), la compagnia (donde varios mercaderes crean una sociedad con u fin y un periodo de años concreto, cada uno aporta un determinado capital y participa en la gestión de la compañía) y las compañías por acciones. (García Ruiz, Op.cit. 1998, pp.21-23,52-53). 4 Idem, pp. 15-67. 5 Chandler, Alfred D. La mano visible: la revolución en la dirección de la empresa norteamericana. Tr. Ángeles Conde. Madrid, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, 1987, p.131.
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En el caso de la minería, es posible identificar innovaciones de capitalización y organizacionales en los inicios de la Revolución Industrial. El crecimiento de la demanda de carbón hizo que fuera necesario aumentar el tamaño de las minas, con un mayor número de máquinas, la construcción del ferrocarril para transportar personas
y materiales,
numerosos
obreros,
y una
compleja
estructura
organizacional con mandos medios. En cuanto a la industria textil algodonera, constituyó uno los primeros sectores que se mecanizó, debido a la producción artesanal que existía en esa rama, y porque los primeros inventos de la Revolución Industrial eran aplicados en ella (telar mecánico, 1785, la lanzadora volante, 1733, hiladora mecánica, 176467, etc.). Es importante señalar que las primeras empresas textiles en su mayoría fueron de tamaño medio (entre 100 y 200 obreros). Requirieron poca capitalización por la sencillez de las primeras máquinas de hilado y tejido y fueron familiares, no había una clara división entre la propiedad y la dirección. Asimismo, en ellas el dueño fungía como administrador. Los familiares eran los empleados directivos, y se confundían las estrategias empresariales con las familiares. Por ejemplo, eran frecuentes los matrimonios para expandirse. Las primeras empresas textiles no requirieron grandes capitales. Cuando esto se hizo necesario, los empresarios usaron la reinversión de sus ganancias, el préstamo de redes de amigos, familiares, o el contrato de créditos a corto plazo con alguna institución financiera. Manchester fue de las primeras regiones que desarrolló fábricas textiles movidas por maquinaria. No obstante, el proceso de industrialización, en general, y el agrandamiento del tamaño de las fábricas fue lento y progresivo. Hasta mediados del siglo XIX lo que predominó en el sector industrial de la mayor parte de los países europeos, así como en Estados Unidos, fue la pequeña y mediana empresa. Antes del año de 1850 sólo empresas como Atkinson, McConnel y Kennedy, Ashworth, Dolfus-Mie, Motte y Bossut, y la fábrica de Robert Owen, en New Lanark (con 1600 obreros), en el sector textil; Guest de Dowlais, Cyfarthfa y los complejos minero metalúrgicos de Cokeril, en Bélgica, o las minas de Chauncy Townsend, fueron casos de empresas de gran tamaño, elevado número de 3
empleados y con integración vertical parcial: por un lado, eran proveedores de sus propias materias primas y, por otro, sus propios distribuidores. Al mismo tiempo, en lo que concierne a su integración horizontal, fundaron empresas similares para controlar la competencia.6 Años después, se facilitó la posibilidad de fabricar a gran escala con: I) la segunda
Revolución
Industrial
(1880-1900),
que
generó
principalmente
innovaciones tecnológicas en la química, el petróleo y la electricidad. II) La disminución de los costos de transporte por la expansión de las líneas del ferrocarril. III) La ampliación de los mercados, en buena medida por el crecimiento de la población. IV) La ampliación del sector financiero (tan sólo en EU los bancos se incrementaron de 87, en 1812, a 700, en 1826) e instrumentos bursátiles como obligaciones, opciones, acciones convertibles, etcétera. La producción a gran escala difirió de la producción fabril en que la maquinaria y equipo no substituyeron a las operaciones manuales, sino que posibilitaron una producción mayor en cada una de sus fases. En estas compañías, la maquinaria se situaba y utilizaba, de manera que las distintas fases estaban integradas y coordinadas tecnológica y administrativamente dentro de un mismo establecimiento industrial. Por eso el flujo de materiales y productos era mayor en cada fase que si cada una de ellas se hubiera realizado en establecimientos independientes.7 Además, a medida que crecía la producción, la empresa establecía para cada proceso productivo un departamento principal con maquinaria especializada, una fuente central de energía (hidroeléctrica, eléctrica), un control y coordinación de cada subunidad, una producción integrada vertical y horizontalmente, así como una oficina central dentro de la fábrica. No obstante, los grandes rendimientos de estas empresas no provenían del tamaño del establecimiento (en términos de número de trabajadores o valor del equipo), sino del incremento de la velocidad y 6
García Ruiz, José Luis. Op. Cit.,1998 pp. 42-43. y Chandler, Alfred. Scale and Scope: The dynamics of industrial capitalism. Cambridge, Mass. Belknap Press, 1990. 7 Chandler, Op.cit.1987, pp.340-349. Este aspecto que nuestro autor destaca claramente, en realidad tiene que ver con las posibilidades de extracción de plusvalía absoluta y relativa, descubierta y expuesta por Carlos Marx en El Capital Sección 4 y 5, Siglo XXI, México, 1979 pp. 379-645. Estos mismos fenómenos habrían de revalorarse en la medida que otras formas de organización empresarial y tecnológica apareciense en la historia económica moderna, como sucedió con el taylorismo y el fordismo.
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en el volumen del flujo de materiales, que disminuía los costos y aumentaba la producción por trabajador y por maquinaria.8 En México, las grandes empresas, en términos de capital, número de obreros y complejidad de organización, existieron desde fines del siglo XVIII. Fueron las grandes casas mercantiles pertenecientes a los consulados de comercio de México o Veracruz, el monopolio de tabaco que tenía 8000 operarios, más 500 empleados administrativos y varios millares de estanquilleros. Y la compañía minera La Valenciana, en Guanajuato, que contó con 3000 operarios, y un alto volumen de inversiones. En estas empresas sus trabajadores fueron asalariados. Contaron con una singular división y especialización del trabajo, con una elaborada estructura financiera y contable, así como un sistema productivo y comercial integrado.9 En el siglo XIX se unieron a estas grandes empresas, las fábricas textiles y el ferrocarril. Éste último nació en 1837, con la concesión otorgada a Manuel Escandón para construir la vía México-Veracruz, la cual debido al atraso tecnológico, la mano de obra no calificada, la falta de financiamiento (inversiones internas) y la no clara regulación e inexistentes instituciones dirigidas al sector, fue terminada en 1873. Fue hasta 1880, con las concesiones10 otorgadas al capital privado en su mayoría extranjero, que el sector ferroviario cobró auge. Empresas como las estadounidenses: Nickerson, Atchinson, Topeca y Santa Fe Railroad, construyeron el Ferrocarril Central Mexicano (1884), que poseía la ruta México-Ciudad Juárez. La Cía. Palmer y Sullivan fundaron el Ferrocarril Nacional Mexicano (1888), el cual viajaba de México a Nuevo Laredo. La
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Ídem. Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Historia de las grandes empresas en México, 1850-1930, UANL y FCE, México, 1997, pp.20-21. Los aspectos relacionados con las grandes empresas mercantiles han sido estudiadas en Veracruz por Camen Blázquez, Abel Juárez, Soledad García, Filiberta Gómez y Yolanda Molohua. 10 Las concesiones otorgadas a los ferrocarriles eran por 99 años o más. El estado se comprometía a otorgarles una subvención para ayudar a construir las vías ($6 a $8,000/Km.), les concedía el derecho de vía de 70 metros hacia cada lado de la línea, les regalaban terrenos para la construcción de oficinas, talleres, etc.; y también podían contar con materiales para la construcción gratis (piedra, arena, madera) que encontraran en sus rutas. Además, no pagaban impuestos a la importación de maquinaría y material para su funcionamiento por 20 años, así como una exención del impuesto a la producción y capital por el mismo periodo de tiempo (San Juan Victoria, Carlos y Velásquez Ramírez, Salvador. “X. El Estado y las políticas económicas en el Porfiriato”, en Cardoso, Ciro (Coordinador). México en el siglo XIX (1821-1910). Historia económica y de la estructura social. Nueva Imagen, México 1980, pp.291). 9
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Huntihgton Southern Pacific Company construyó el Ferrocarril Internacional (1888), que iba de Piedras Negras a Torreón, conectando al ferrocarril Central. Estas tres líneas, junto con el Ferrocarril Interoceánico que viajaba MéxicoVeracruz (igual que el Ferrocarril Mexicano), fueron las principales del sistema ferroviario mexicano.11 En el ramo textil, las primeras fábricas de algodón en México fueron la fábrica de Colima fundada en 1826 propiedad del inglés George A. Resol, “La Aurora Yucateca” construida en 1833 y propiedad de Abarda y Cía. y “La Constancia Mexicana”, propiedad de Esteban de Antuñano y establecida en 1835; ambas ubicadas en Puebla; “La Magdalena Contreras”, de Antonio Garay, Lozada Carrera y el inglés Archivaldo Hope que se situó en el Valle de México e inició operaciones en 1836; al igual que “Cocolapan” localizada en Orizaba, propiedad de Lucas Alamán y los hermanos Legrand; “La Abeja” de los ingleses L. Hammekan y Gradison, y la fábrica “La Colmena” propiedad del inglés Hope y del francés Massie, ambas ubicadas en el Estado de México y fundadas en 1839. De estas fábricas la que más sobresalió fue Cocolapan. En 1841, fue “la hilandería más grande del país con 240 telares, su propio sistema de iluminación y alrededor de 600 empleados que trabajaban en tres turnos”.12 A pesar de estos ejemplos, la mayoría de las empresas en México durante los siglos XVIII y XIX fueron unidades productivas del tipo familiar, con menos de 100 empleados y tecnología tradicional.13 Fue a partir de 1876, con Porfirio Díaz en el poder, que se aceleró la formación de manufactureras de producción a gran escala porque se generó la infraestructura urbana (telégrafo, electrificación, vías de comunicación, puertos, etc.), la red de transporte ferroviario, algunas instituciones financieras con sucursales en todo el país (como el Banco Nacional de México en 1884, Banco de Londres y México en 1889, Banco Central Mexicano 11
Herrera Canales, Inés. “XV. La circulación (comercio y transporte en México entre los años 1880-1910)”, en Cardoso, Ciro, Op.cit. 1980, p. 439 12 Rivera Carbó, Eulalia. Herencia colonial y modernidad burguesa en un espacio urbano. El caso de Orizaba en el siglo XIX. Colección historia urbana y regional. Instituto Mora. México, 2002, pp.64 y 66. Es necesario no perder de vista, la importancia del Banco de Avío (1830-1842) y su papel como financiero. 13 Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Op.cit., 1997 pp.20-22 Estos autores utilizan este concepto para describir los sistemas de trabajo artesanales utilizados en los obrajes, en las pequeñas y medianas compañías mineras y en la mayoría de las haciendas, latifundios y plantaciones de principios del siglo XIX.
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en 1898, entre otros), oficinas de gobierno (Secretaría de Obras Públicas y de fomento) y leyes necesarias para la expansión de este sector (Código de Comercio, Ley de instituciones de Créditos). Las manufacturas a gran escala que más sobresalieron en el país de 1890 a 1930 fueron: la Fábrica Vidriera de Monterrey (1909); la Cía. Industrial Jabonera de La Laguna (1896); la Cía. de Papel San Rafael y Anexas (1890); la Cervecería Cuauhtémoc (1890); la Cía. Cigarrera El Buen Tono (1873), y las compañías textiles de San Antonio Abad (1892), San Idelfonso (1895); Cía. Industrial de Atlixco
(1902);
Cía.
Industrial
de
Guadalajara
(1899);
Cía.
Industrial
Manufacturera, Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA, 1899), y la Cía. Industrial Veracruzana SA (CIVSA, 1892).14 Se han realizado numerosos estudios que describen la historia del desarrollo industrial en México, gracias a esas investigaciones quienes actualmente nos hemos interesado por estudiar algunos casos concretos del desarrollo industrial y empresarial, nos hemos visto grandemente beneficiados y estimulados. Algunos de estos estudios se han enfocado a la industria en general, otros al análisis de un solo sector industrial, y otros a una empresa concreta, como Mario Cerrutti que estudio los casos de la Cía. Fundidora de fierro y Acero de Monterrey S.A. para los años de 1900 a 1930 y el de la Cía. Industrial de la Laguna para el periodo 1880-1925. La presente investigación está orientada a estudiar la experiencia que nos ha legado la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). Usaremos como hilo conductor del presente estudio las redes y estrategias de negocios utilizadas por sus empresarios para crecer y sostenerse durante los años que van de 1889 a 1930. Se eligió a esta compañía como objeto de estudio debido a su importancia en la economía nacional de la época y por el destacado papel de sus empresarios, inmigrantes franceses provenientes del Valle de Ubaye, conocidos como barcelonnettes.
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De acuerdo a Haber, éstas fueron las 12 corporaciones industriales que obtuvieron las mayores ganancias en México durante el periodo de 1890-1940. Haber, Stephen. Industria y subdesarrollo. La industrialización de México 1890-1940. Alianza Editorial Mexicana. México, 1992, pp.109-151.
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El periodo de estudio se definió tomando como punto de partida la firma del acta constitutiva de CIDOSA (1889) y se termina en 1930, por la conjugación de una serie de circunstancias: una de ellas y tal vez la más importante, es sin duda el poder apreciar en el sistema contable de la empresa en este año una caída en su nivel final de ventas y por ende en sus ganancias; aspecto que se conjugó con los vientos de crisis internacional iniciada el año anterior en Estados Unidos. Estos fenómenos sin duda se enlazaron con las dificultades del inicio de la vida republicana que en esos años se reflejaron en crecimientos negativos del producto interno bruto y las dificultades de financiamiento de los programas de gobierno. Adicionalmente y en términos prácticos, la imposibilidad de consultar los archivos notariales de la Ciudad de México en fechas posteriores a la década de 193015. Por ello, nuestro periodo de análisis se ajustó a los años trascurridos entre 1889 y 1930. La presente investigación pretende demostrar que en el caso de la Cía. Industrial de Orizaba SA, la red fue uno de los instrumentos más aptos para adaptarse en contextos impredecibles y de cambios turbulentos. La red de intereses comerciales, industriales y financieros, permitió a CIDOSA convertir la incertidumbre en riesgos y maximizar sus ganancias. Fueron las redes creadas por sus propietarios las que condujeron al éxito económico, amén de los apoyos y políticas gubernamentales de la época. Con la finalidad de probar la hipótesis enunciada, se revisaron los estudios historiográficos realizados por otros investigadores, referentes al objeto de estudio. Esto permitió una mirada integral de las formas y los métodos empleados por quiénes me han precedido en este camino. También se tuvo acceso a fuentes primarias documentales como: los contratos de alianzas y fusiones depositados en el Registro Público de la propiedad de los municipios de Orizaba, Nogales, Ciudad Mendoza y Río Blanco, Veracruz y en las escrituras del Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México. El Archivo General de la Nación, Archivo Histórico del Centro de Estudios de Historia de México CARSO, Archivo Histórico 15
Es necesario aclarar que el reglamento de consulta de los mencionados archivos indica que solo se puede tener acceso a los libros notariales con setenta años de antelación. Para el momento que esta investigación se había concluido, se pudo tener acceso a la década de 1940.
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del Agua, Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca, Archivos Históricos de BANAMEX y Archivos Históricos de patentes del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial. Adicionalmente, gracias a la asistencia de ciertos coloquios nacionales e internacionales y al acercamiento con especialistas destacados. Se efectuaron algunas entrevistas a investigadores que continúan indagando diversos aspectos de la historia de la industria y desarrollo empresarial. Dichas entrevistas permitieron ubicar aspectos no contemplados en el diseño original de esta indagación. Con el propósito de presentar los resultados obtenidos, se realizará el siguiente
recorrido
capitular:
en
el
Capítulo
uno
titulado
Enseñanzas
historiográficas, se efectúa una valoración de la producción historiográfica nacional referida al desarrollo industrial y empresarial para la época que nos ocupa. Lo cual permitió explorar la manera en que han sido analizados las empresas y los empresarios de la industria textil. Un doble objetivo se prefiguró con este análisis. Primero examinar los asideros teóricos, empíricos y epistemológicos de otros autores y segundo hurgar en la manera en que se ha estudiado el papel de los empresarios en tanto actores de una trama, con estrategias y formas de relacionarse. En el Capítulo dos bajo el titulo Empresarios Barcelonnettes, se describen los antecedentes y el entorno sociopolítico y económico que influyeron en la forma organizacional bajo la cual se fundó y trabajó el grupo empresarial propietario de CIDOSA, de 1889 a 1910. En el Capítulo tres, nombrado Estrategias de los empresarios textiles del Valle de Orizaba se estudian a profundidad las estrategias que los empresarios de CIDOSA aplicaron en sus fábricas durante el periodo de 1911-1930. En el Capítulo cuatro, titulado Efectos regionales son descritas las influencias que empresas como CIDOSA ocasionaron en el entorno social, cultural y económico de la región de Orizaba. Para finalizar, se ofrecerán una serie de conclusiones, que sintetizan cada uno de los recorridos anteriores.
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Capítulo: 1.Experiencias historiográficas El periodo transcurrido entre el inicio del siglo XIX y principios del XX ha sido considerado por los historiadores occidentales como el de los años dorados del capitalismo industrial.16 En América Latina, el siglo XIX fue el siglo de la liberación y construcciones nacionales, momento de convulsiones sociales, golpes de Estado, invasiones, mutilaciones territoriales. También fue el periodo en el que con más fuerza se impulsó la modernización de las instituciones, los sistemas productivos, medios de transporte, tecnología empleada por la fuerza productiva y los sistemas financieros. Fueron los años de elaboración de constituciones, reglamentaciones y de presencia de legendarios personajes orientados a abrir espacio al capital, sobre todo transnacional. En este sentido histórico quienes promovieron el reconocimiento de México como nación en los países centrales se encargaron, también, de ofrecer el país a los inversionistas extranjeros. En el caso de México las élites ilustradas de la época, liberales y conservadores por igual, desde 1830 en adelante impulsaron reformas, entre ellas la desamortización de los bienes de la Iglesia, que ampliaron el mercado interno de mercancías y crearon condiciones para la acumulación de capital en manos de comerciantes y hacendados, como Juan Antonio Béistegui, Manuel Escandón, la familia Martínez del Río, Cayetano Rubio, Antonio Garay, Gregorio Mier y Terán, entre otros. Estos comerciantes participaron activamente haciendo valer su poder económico-, en la dirigencia del país en un periodo favorable a sus intereses, como fue el Porfiriato. Durante esta época, las fuerzas políticas y económicas de México se amoldaron a la cambiante realidad de Europa y América. Los cambios tecnológicos, la utilización del vapor y del acero, impactaron el transporte de mercancías ultramarinas. La expansión ferrocarrilera generó la más grande acumulación del capital ocurrida en el mundo durante ese periodo, y las primeras industrias, las fábricas textiles, llegaron a México impulsadas por este oleaje capitalista. 16
Wallerstein, Immanuel. El capitalismo histórico. XXI: México, 5ª. Edición, 2003.
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La industria textil, identificada como un emblema de la modernización capitalista por el valor agregado que generaba, se instaló inicialmente en el centro de Veracruz, justo en la segunda década después de consumada la independencia de España. Posteriormente, en la ciudad de Puebla, Valle de México, Guadalajara y Querétaro. Se eligieron estos lugares porque los inversionistas los consideraban estratégicos, con agua en abundancia, clima benigno, accesibilidad a los mercados nacionales y extranjeros y, por supuesto, con facilidades administrativas, burocráticas e institucionales otorgadas por parte de las autoridades políticas y militares. Entre los promotores de la industrialización en México se ha identificado a Lucas Alamán, Esteban de Antuñado, y los hermanos Escandón. Ellos pusieron especial énfasis en el transporte de personas y mercancías entre el puerto de Veracruz y la Ciudad de México. El recorrido histórico de la experiencia industrializadora antes referido, fue identificado como la vía promisorio para lograr el desarrollo económico. Este fenómeno historiográfico se ha explorado con acuciosidad. La intención de tales búsquedas pretende identificar los motivos que condujeron al desarrollo industrial. Así, se ha podido centrar la atención en los factores institucionales importantes; en los entornos sociohistóricos; en la importancia coyuntural de un factor productivo; en las penurias de pueblos enteros; el tamaño y consolidación del mercado interno; en la importancia de los triunfos militares o en el papel del espíritu empresarial emprendedor. Incluso, en el factor religioso o en la laboriosidad e inventiva de los pobladores, etc. De la misma manera, se ha destacado la importancia de la prontitud con que fue asumido el régimen de producción capitalista y las capacidades locales para difundir sus efectos socioculturales al resto de las regiones de un país. Sin la intención de agotar la extensa y compleja problemática aludida, se procederá a la revisión general del legado historiográfico mexicano referido a la historia económica nacional y regional de la industria textil, tratando de responder a las siguientes preguntas: ¿Cuáles fueron las primeras fábricas? ¿Dónde se establecieron? ¿Cuál fue su organización? ¿Cuál el entorno institucional en el que 11
operaron? ¿Quiénes fueron los sujetos sociales implicados en su desarrollo? Y, finalmente, ¿qué posturas teóricas se han utilizado para estudiarlas?
Miradas Nacionales Entre las obras más importantes que nos han legado conocimientos sobre la industria y el desarrollo industrial destacan, Keremitsis Dawn (1973), Walter Bernecker (1992), Aurora Gómez-Galvarriato (1999), John Coastwoth (1992), Stephen Haber (1992) y Manuel Plana (2004). También aquellos que han estudiado las condiciones en que el desarrollo del país se ha llevado a cabo: Ciro Cardoso (1981), Mario Ramírez (1987), Aldo Musacchio y Ian Read (2007). Una de las obras precursora e imprescindible de conocer, si se realizan estudios sobre la industria textil, es el libro de Dawn Keremitsis, La industria textil mexicana en el siglo XIX. Para realizar esta investigación, Keremitsis consultó fuentes de la Biblioteca Bancroft, de la Universidad de California, en Berkeley, del Centro de Estudios de Historia de México de Condumex, del Archivo General de la Nación, de la Biblioteca Nacional, la Hemeroteca Nacional, de la Biblioteca de la Secretaría de Hacienda y del Colegio de México. En esta obra, el autor realiza una descripción y análisis de los factores que impulsaron u obstaculizaron el proceso de crecimiento de la industria textil en México desde la Colonia hasta los primeros años del siglo XX. Para Keremitsis, los factores que impulsaron el desarrollo de la industria textil fueron el uso de la energía eléctrica, la importación de maquinaria mecanizada, la asociación entre inversionistas franceses, españoles y asturianos, y la política gubernamental de Porfirio Díaz. Durante el Porfiriato se impulsó la industrialización a través de: I. La estabilidad política y económica que impuso el régimen; II. La implementación de derechos aduanales e impuestos arancelarios para proteger la industria nacional; III. El otorgamiento de concesiones y privilegios a inversionistas extranjeros que instalaran fábricas en el país; IV. La creación de estructuras institucionales y legales (como el Código de Comercio, reformado en 1883 y 1886) que fomentaban la creación de sociedades económicas; V. La
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fundación de escuelas técnicas y comerciales; VI. El establecimiento de una burocracia más eficiente. A la vez el mismo autor señala que, los obstáculos al desarrollo fueron: los periodos de inestabilidad política y económica -como la Reforma, la intervención francesa, la pérdida de Texas y la Revolución Mexicana-, la falta de mano de obra, pero sobre todo la falta del algodón. Esta obra a pesar de ser no tan reciente, sigue contando con elementos explicativos vigentes del desarrollo de la industria textil. Otra obra importante que analiza el desarrollo industrial del país desde 1500 hasta 1990’s, es la escrita por Manuel Plana, Las industrias siglos XVI al XX. El autor basado en fuentes secundarias elabora una significativa síntesis del mencionado desarrollo, enfatizando los siguientes aspectos: 1. Las manufacturas e industrias intensivas de recursos naturales renovables es decir, el obraje y la industria textil; 2. Las manufacturas e industrias de transformación de productos primarios donde incluye al ingenio azucarero, las fábricas de tabaco, las fábricas cerveceras, de papel, jabones y calzado; 3. Las industrias de recursos naturales no renovables e intensivas de tecnología siderúrgica y química; 4. Las industrias de transformación de bienes de consumo final mecánica, secundaria y automotriz. Éste es uno de los esfuerzos con mayor alcance temporal del que se dispone hasta el momento. Respecto a la industria textil, Plana menciona que el proceso productivo de algodón era más sencillo que el de la lana. Fue por eso que este último se desarrolló con fuerza para el siglo XVIII. Sin embargo, -describe el autor- para 1804 el aumento de las importaciones de algodón de Inglaterra y el inicio del movimiento de independencia en 1810, frenaron el crecimiento de la naciente industria textil. El autor menciona que los industriales textiles durante la primera mitad del siglo XIX, debieron enfrentar la escasez de algodón, el aumento de las empresas fabriles y, consecuentemente con ello, el aumento de la producción de hilados, las tarifas internas sobre el comercio, las importaciones y el contrabando. A diferencia de otros estudiosos, Plana reconoce que México sí contaba con mano de obra 13
capacitada para realizar el trabajo textil; especialmente la mano de obra poblana, como afirmó Jan Bazan17. Afirma que la fuerza de trabajo que utilizaron las primeras empresas textiles fue la misma que usaron en los países centrales, por lo que ese no fue jamás un obstáculo para la industrialización de este tipo. No sucedía lo mismo con el capital, que en cambio sí podía influir en la forma, uso y funcionamiento de todos los componentes de la actividad económica específica. De ahí la importancia de analizar el comportamiento de las empresas textiles como unidades específicas de producción. Según el autor, otros elementos que impulsaron a la industria textil entre 1889 y 1911, fueron la creación y ampliación de la red ferroviaria, el incremento de inversión extranjera directa a las minas y los servicios públicos, la energía eléctrica pero principalmente la disponibilidad de algodón; como fueron los cultivos de algodón en la región de La Laguna, Mexicali, Baja California Norte y Camargo, Chihuahua.18 Plana concluye que desde el inicio de la Revolución Mexicana hasta la segunda Guerra Mundial, la industria textil mexicana seguía dependiendo de las importaciones. Además afirma que con la crisis de 1929, los empresarios decidieron disminuir los salarios y los empleos para continuar con el mismo margen de ganancia. Así, a pesar de que Plana realiza un análisis ágil y adecuado del desarrollo de la industria textil desde la Colonia a la actualidad, su estudio queda como una visión muy general. No profundiza en aspectos claves del proceso de industrialización como: actores sociales, condiciones institucionales, cambios tecnológicos y estrategias empresariales, etc. Sin embargo, esto no demerita su obra, ya que finalmente cumple con el objetivo planteado desde su inicio: realizar una síntesis del desarrollo de las industrias en México, que es muy importante para quienes estudiamos la historia industria y la industrialización en nuestro país. Otra obra especialmente importante, dedicada a estudiar el proceso de industrialización en México y enfatizando los obstáculos del desarrollo económico 17
Bazant, Jan. “Evolución de la industria textil poblana (1544-1845)” en Historia Mexicana, Vol. XIII, No. 4. El Colegio de México, México, abril-junio 1964. 18 Plana, Manuel. Op.cit. 2004 pp.43-44
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en el periodo de 1800 a 1880, es el libro de John Coastsworth, Los orígenes del atraso. Nueve ensayos de historia económica de México en los siglos XVIII y XIX. Los textos reunidos en esta obra, fueron en su mayoría publicados con antelación en revistas o libros de México, España (Revista de Historia Económica), República Federal de Alemania (Reinhard, Liehr. América Latina en la época de Simón Bolívar. La formación de las economías nacionales y los intereses económicos europeos 1800-1850) y Estados Unidos (American Historical Review) en el periodo de 1975 a 1989. No obstante Coastsworth en el ensayo Los orígenes del atraso, señala que no fueron la Iglesia, ni la organización de la tierra ni el colonialismo español, los elementos que limitaron el desarrollo económico de México a principios del siglo XIX, sino la geografía accidentada, montañas, mesetas, valles y la falta de transportes adecuados. México no contaba con suficientes ríos navegables para transportar las mercancías que generalmente se producían en los valles alejados del mar. Además, registraba una ineficiente organización económica, pues las instituciones y políticas gubernamentales, como la alteración de precios, controles de producción, aduanas e impuestos internos, así como las leyes que prohibían la movilidad de la mano de obra, entorpecían las actividades productivas en vez de fomentarlas. Un estudio más, que retoma la explicación de los obstáculos de desarrollo industrial mexicano es el libro de Sthepen Haber, Industria y subdesarrollo. La industrialización de México 1890-1940. En esta obra se realiza el estudio de las estructuras de producción, estrategias empresariales y rendimientos económicos de las doce corporaciones industriales que obtuvieron las mayores ganancias en México durante el periodo de 1890-1940, las cuales fueron: Fábrica Vidriera de Monterrey (1909); Cía. Industrial Jabonera de La Laguna (1896); Cía. San Rafael y Anexas (1890); Cía. Nacional Mexicana de Dinamita y Explosivos (1901); Cementos Hidalgo (1906); Cementos Cruz Azul (1907); Cementos Tolteca (1909); Cervecería Cuauhtémoc (1890); Cervecería Moctezuma (1890); Cía. Cerveza de Toluca y México (1865); Cía. Cigarrera El Buen Tono (1873); Cigarrera Mexicana, Tabacalera Mexicana, Cía. San Antonio Abad (1892); Cía. San Idelfonso (1895); 15
Cía. Industrial de Atlixco (1902); Cía. Industrial de Guadalajara (1899), Cía. Industrial Manufacturera (1899), Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA, 1889) y la Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA,1892). En base a datos obtenidos, principalmente de los archivos de las empresas, de los informes de la Bolsa Mexicana de Valores y los publicados por el periódico El Economista Mexicano, de los años 1895-1911, el autor calcula que estas empresas obtuvieron tasas de rendimiento promedio del 5 por ciento de 18961910 y 4.7 por ciento de 1901-1910. Haber explica que estas tasas eran bajas debido a que no podían ocupar toda su capacidad productiva porque el mercado interno era estrecho y, además, no les era posible exportar por sus altos costos de producción, derivados de la escasez de capital financiero, la importación de maquinaria y la baja productividad de la mano de obra mexicana. Para poder aumentar sus ganancias, estas manufactureras decidieron repartirse el mercado interno, organizándose en oligopolios y monopolios a través de la integración vertical y horizontal, la compra o fusión de la competencia y la limitación de la participación de otras empresas en el mercado, a través del bloqueo al acceso de la
tecnología,
materia
prima,
protección
gubernamental
y
red
de
comercialización.19 El autor afirma que con la revolución de 1910, se reforzó la estructura industrial del Porfiriato. Es decir, los oligopolios integrados verticalmente. Durante los primeros años de guerra civil (1910-1913), los empresarios disminuyeron su producción, enfrentaron la ocupación de sus fábricas por los ejércitos revolucionarios y la destrucción de los sistemas de transportes. No obstante, no dejaron de producir. Incluso, fábricas de telas y cigarros generaron utilidades y repartieron dividendos. Por lo tanto no fue una etapa de destrucción y caos total como otros autores indican. El mismo autor refiere que en el periodo de 1926 y 1932 la producción, la demanda y la inversión en México disminuyeron principalmente por: 1. Los conflictos políticos; 2. La organización de la clase obrera (CROM); 3. La desconfianza en las nuevas leyes (Constitución de 1917, Ley del trabajo, etc.); 4. 19
Haber, Sthepen. Op.cit. 1992, pp.109-151.
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Aumentos de salarios para los obreros sindicalizados, 5. Disminución de las Cías. petroleras extranjeras, que emigraron a Venezuela, donde la extracción del petróleo era más barata y más fácil; 6. Caída de los precios internacionales de la plata, el cobre y el plomo; 7. Deportación de los trabajadores mexicanos de EU; 8. Caída en los ingresos del gobierno por reducirse las exportaciones de minerales y petróleo y 9. La aplicación de una política monetaria y fiscal restrictiva por parte del gobierno mexicano. Estos factores, junto con la contracción de la demanda en Occidente, por la crisis del 29, provocaron que en México las industrias que mayormente disminuyesen sus operaciones fueran: las de bienes de consumo, textiles de algodón, tabacaleras y cerveceras y no las de bienes intermedios materiales de construcción como cemento y acero, como al principio del siglo XIX. El libro de Haber presenta un análisis novedoso del desarrollo del proceso de industrialización en México, al basar su explicación en las estructuras de producción, finanzas y estrategias empresariales de las 12 compañías que menciona el estudio. Sin embargo, su obra sólo da prioridad al enfoque económico-financiero, sin considerar la actuación y el contexto social, cultural y político de los empresarios. Dentro de esta misma línea de investigación –obstáculos al desarrollo industrial-, aparece el libro: La Industria textil en México, compilado por Aurora Gómez Galvarriato. El libro incluye los siguientes ensayos: I. Protoindustria colonial, de Manuel Miño Grijalva; Continuidad y cambio en la industria manufacturera mexicana, 1800-1870, de Guy P.C. Thomson; Industria versus comercio: ¿Orientación hacia el interior o hacia el exterior?, de Walter L. Bernecker; Fragilidad institucional y subdesarrollo: la industria textil mexicana en el siglo XIX, de ella misma; Mercados financieros y desarrollo industrial en Brasil y en México, 1840-1930, de Stephen Haber, y Los momentos de la actividad textil, de Leticia Gamboa.20 Las obras de Leticia Gamboa y Aurora Gómez serán revisadas más adelante cuando se aborde el análisis regional. 20
Todos esos ensayos ya habían sido publicados anteriormente en obras de los propios autores, pero al reunirlos en esta antología se pretende contribuir al mejor entendimiento del desarrollo de la industria textil. El de Manuel Miño en un artículo de la Revista Historia Mexicana, del Colmex, en su volumen XXXVIII,
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En el ensayo de Guy Thomson, señala que las primeras fábricas textiles en México debieron enfrentar dos grandes obstáculos: la falta de insumos productivos y energéticos, así como la escasez de mano de obra. El primero de estos obstáculos fue un problema temporal que pudo resolverse con el algodón cultivado en la región de La Laguna, el uso de la fuerza hidráulica, así como el descubrimiento de unos depósitos de carbón en Coahuila. El segundo fue un problema estructural, debido a que no sólo se refería a la escasez física de mano de obra, que algunas veces se resolvió con migraciones, sino también a la falta de experiencia y resistencia a la disciplina y trabajo fabril que presentaban los primeros obreros textiles- en su mayoría campesinos-. Este problema se resolvió importando mano de obra de Gran Bretaña y Estados Unidos, sobre todo para puestos administrativos y técnicos encargados de la instalación, operación y mantenimiento de la maquinaria. Este trabajo contrasta con las tesis desarrolladas por Viqueria, Jan Bazan y Manuel Plana que afirman que la mano de obra nunca fue un verdadero obstáculo, ya que existían ciertas destrezas entre la población creadas por los obrajes. Otros problemas estructurales de la industria textil durante el periodo 18301870, señalados por él mismo fueron: I. El bajo poder adquisitivo de las clases rurales que representaban el principal mercado de la industria textil, sobre todo los hombres que consumían manta para sus trajes diarios. II. La falta de una infraestructura de transportes y comunicaciones internas que limitaban la amplitud y profundidad del mercado interno. III. La baja calidad y altos precios de los textiles nacionales que limitaban el mercado externo y frenaban el crecimiento de la industria.21 En el ensayo de Gómez-Galvarriato, Fragilidad institucional y subdesarrollo: la industria textil mexicana en el siglo XIX, sostiene que la industria textil en No. 4 de 1989; el de Guy Thompson, en el libro de Jean Batou: Between development and underdevelopmente: the precocious attemps at industrialization of the periphery, 1800-1810. editado por Librarie Doz, Ginebra, 1991. El de Haber en su libro “How Latin America fell behind?”, publicado en 1997 por la Universidad de Stanford. El de Bernecker en su libro “De agiotistas y empresarios. En torno de la temprana industrialización mexicana (siglo XIX.)”, que se analiza más adelante. El de Gamboa en su libro “Los empresarios de ayer. El grupo dominante en la industria textil de Puebla, 1906-1929”. El ensayo de Gómez Galvarriato fue una traducción de un apartado del primer capítulo de su tesis doctoral: “The impact of revolution: Busines and labor in the Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. 21 Thomson, Guy, Op.cit. 1999, pp. 81-82.
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México durante el periodo vio obstaculizado su desarrollo debido a la inexistencia de un régimen de leyes que estableciera de manera eficaz los derechos de propiedad. Las políticas gubernamentales cambiaron constantemente, afectando los aranceles a la importación del algodón, beneficiando a unos cuantos empresarios, quienes fueron los que monopolizaron el mercado, como Antonio Béistegui, Manuel Escandón, Cayetano Rubio Antonio Garay, Gregorio Mier y Terán y Patricio Milmo.22 Este estudio, al igual que el de Coastsworth, intenta explicar el crecimiento económico mediante el sistema institucional establecido con anterioridad al desarrollo capitalista. Un libro publicado con antelación, dedicado a analizar los casos de algunos de los empresarios que fueron beneficiados por las políticas gubernamentales, es el coordinado por Ciro Cardoso, Formación y desarrollo de la burguesía en México Siglo XIX. Éste se ha convertido en una obra obligada para conocer la historia de los primeros inversionistas en la industria textil del siglo XIX. El libro se conforma con los ensayos de Margarita Urías Hermosillo: Manuel Escandón: de las diligencias al ferrocarril 1833-1862; Guillermo Beato: La casa Martínez del Río, del comercio colonial a la industria fabril 1829-1864; Rosa María Meyer: Los Béistegui, especuladores y mineros 1830-1869; Shanti Oyarzábal: Gregorio Mier y Terán en el país de los especuladores, 1830-1869; Mario Cerutti: Patricio Milmo, empresario regiomontano del Siglo XIX. En torno a la acumulación de capitales en Monterrey (1845-1890), y Roberto Hernández Elizondo: Comercio e industria textil en Nuevo León, 1852-1890. Un empresario: Valentín Rivero. Margarita Urías identificó que Manuel Escandón de 1833 a 1862 fue propietario del primer negocio de diligencias en la región Veracruz-Puebla-México, de la Mina Real del Monte en Pachuca, Hidalgo, del estanco de tabaco y la fábrica textil de Cocolapan, en Orizaba, y de la concesión para construir el ferrocarril México-Veracruz. En palabras de la autora, Escandón decidió invertir en las ramas básicas, de la minería y el transporte, para poder monopolizarlas e integrarlas. Pero también invirtió en productos como el tabaco, pues de esa manera podía aprovechar un mercado cautivo. Asimismo, los préstamos y contratos celebrados 22
Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit., 1999, pp. 142-182.
19
con el gobierno y las diferentes relaciones económicas estratégicas con grupos de poder militar, redes de parentesco y capitalistas extranjeros, le permitieron mantener el control de ciertos mercados y aumentar constantemente sus ganancias.23 Guillermo Beato utilizó fuentes del Archivo de Notarías de la Ciudad de México y del Archivo Judicial de 1830 a 1870, para describir cómo la familia Martínez del Río, ingresaron a México desde 1829 e invirtieron en la Cía. Restauradora del Mineral de Tlalpujahua, 10 minas en Tepejupilco, Mineral del Chico y Santos Ángeles Custodios o Zopilote, en Pachuca, Hidalgo, donde se asociaron con Manuel Escandón. También analiza cómo se convirtieron de comerciantes a agiotistas y posteriormente a industriales textiles, al fundar en el Distrito Federal, en 1840, la fábrica textil Miraflores, la cual entre 1840-1855 se ubicó en el quinto lugar en la producción nacional.24 Rosa María Meyer estudió a Juan Antonio Béistegui, quien de 1820 a 1846 prestó dinero con la condición de que si no se pagaba a tiempo, se apropiaba de los bienes. Además también actuó como banco al recibir dinero, invertirlo y pagar por ello un interés del seis por ciento anual. Bajo estas prácticas de especulación, Juan A. Béistegui logró adquirir el estanco de tabaco en Sinaloa y la mina La Purísima, en Guanajuato. También se asoció con Archivaldo y Cuthberto Hope y Eduardo Keon para fundar la fábrica de hilados y tejidos de algodón “La Abeja” y “La Colmena”. Asimismo, en 1855 participó como socio de la fábrica de hilados y tejidos de San Idelfonso, la Cía. Real del Monte, Cía. Mineral de oro y Tlalpujahua, Mineral de Catorce y del Estanco de Tabaco de México, donde era socio de Manuel Escandón, Miguel Bringas, Ewen Mackinstosh25. La autora afirma que a pesar de ser socio en estos negocios, el principal destino para invertir de Juan Béistegui eran los bonos de caminos en Europa, que eran más seguros y no tan
23
Urías Hermosillo, Margarita. Op.cit. 1981, pp. 25-56. Beato, Guillermo. Op.cit, 1981, p.57-107. 25 Ewen C. Mackintosh fue el cónsul inglés en la Ciudad de México, y otorgó varios préstamos al gobierno y a la Iglesia, además de ser socio en la casa comercial Manning y Mackintosh. 24
20
redituables, en comparación con los negocios afectados por la inestabilidad política de México.26 Shanti Oyarzábal investigó a Gregorio Mier y Terán, quién llegó a México en 1818 y contó con la ayuda de su tío Antonio Terán, que poseía casas de comercio. De acuerdo a la autora, Gregorio Terán hizo su fortuna otorgando préstamos al gobierno, empresas, iglesias, comerciantes y hacendados. También participó en la minería, los ferrocarriles y el telégrafo.27 Mario Cerutti analizó el caso de Patricio Milmo, quién casó con la hija del gobernador de Nuevo León, Santiago Vidaurri. Debido a la guerra entre MéxicoEU (1846) que acercó a Monterrey a la frontera, la política arancelaria de su suegro (zona libre) y la Guerra de Secesión de EU (1860-65), Milmo logró vender a través de sus casas comerciales de Piedras Negras y Matamoros productos manufacturados, alimentos, etc., con los estados del sur a cambio de algodón, que durante ese periodo fue muy escaso y por ello fue vendido a precios elevados. Con esto, Milmo logró obtener cuantiosas ganancias que invirtió en préstamos dirigidos al gobierno y a los empresarios. Gracias a la falta de pago en algunos de estos préstamos, Milmo adquirió acciones de la Cía. Fundidora de Fierro y Manufactura de Monterrey; Cía. Ladrillera de la Silla, y Cía. Industrial de Monterrey.28 Roberto Hernández estudió a Valentín Rivero, quien en 1852 residía en Monterrey y ocupaba el cargo de Vicecónsul de España. Este empresario fue el primero en establecer una fábrica textil en Nuevo León, en 1854: “La Fama”. Posteriormente, en 1871, participó en la fundación de la fábrica textil “El Porvenir”, que fue en 1889 la más grande del estado, con 5,000 husos y de 30 a 40,000 piezas de producción anual29. Como se puede deducir en este recorrido historiográfico, el empresariado mexicano del siglo XIX estuvo integrado por inversionistas extranjeros y nacionales. Ellos amasaron sus capitales en las actividades comerciales y en los
26
Meyer, Rosa, María.Op.cit, 1981, pp. 108-139. Oyarzábal, Shanti. Op.cit, 1981, pp. 140-163. 28 Cerutti, Mario. Op.cit, 1981, pp.231-266. 29 Hernández Elizondo, Roberto. Op.cit. 1981, pp. 167-286. 27
21
préstamos a empresarios, Iglesia y Gobierno. Se sirvieron como es bien sabido, de sus relaciones familiares, políticas y asociaciones entre ellos. Otra publicación que profundiza sobre el comportamiento de los primeros empresarios durante el siglo XIX, es el libro de Walter Bernecker, De agiotistas y empresarios. En torno de la temprana industrialización mexicana. En esta obra el autor utiliza diversas fuentes documentales en archivos de Alemania, Francia y México. La tesis principal que defiende este autor es, que los verdaderos protagonistas del proceso de industrialización en México fueron los comerciantes (extranjeros y mexicanos), que tenían suficiente capital para prestar a los industriales a altas tasas de interés. Los cual les permitió apropiarse de las fábricas cuando estos últimos no tenían para pagarles. Empero, la mayoría de estos personajes no sabían nada sobre la industria. Bernecker señala que el empresariado textil no era un empresario en el sentido industrial, sino que era al mismo tiempo especulador, acreedor y partícipe de las consideraciones
políticas-económicas
y,
por
tanto,
muchos
de
ellos
probablemente no estaban interesados en eliminar los obstáculos institucionales – que muchas veces les favorecían- para permitir una rápida y amplia industrialización.30 Otra obra que refuerza la idea de que los empresarios textiles aprovecharon la existencia de obstáculos institucionales en México para obtener beneficios económicos es la de Mario Ramírez Rancaño, Burguesía textil y política en la Revolución mexicana. En esta obra el autor prueba que de 1906 a 1918 la burguesía textil en México “fue capaz de negociar con los diferentes gobiernos revolucionarios para retener sus intereses y propiedades. Además demuestra que fue por los conflictos obreros y la falta de materia prima que la burguesía textil sufrió mayores embates, y no por el conflicto revolucionario en sí, ya que generalmente el gobierno en turno protegió a la burguesía con tal de atraerla a su causa”.31 Las fuentes utilizadas para probar lo anterior fueron periódicos y revistas de la Biblioteca Lerdo de Tejada de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de
30 31
Bernecker, Walter. Op.cit. 1992, pp. 163-191. Ramírez Rancaño, Mario. Op.cit. 1987, p.8.
22
1906 a 1907; información del ramo de trabajo y gobernación del Archivo General de la Nación de 1911 a 1914; periódicos de la Hemeroteca Nacional de la UNAM, el Diario de Debates de la Cámara de Diputados y Senadores y el Archivo Histórico del Centro de Estudios de Historia de México, Condumex, de 1915-1918. Ramírez eligió el periodo de estudio de 1906 a 1918 porque coincide con la formación del Centro Industrial Mexicano de Puebla, el final del Porfiriato y la Revolución Mexicana, hechos que en palabras del autor “obligaron a la burguesía textil a reordenar sus fuerzas y redefinir nuevas estrategias de acción y de supervivencia para navegar contra la guerra civil”.32 Termina en 1918, cuando se constituye la Confederación Nacional de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos. En esta obra, Ramírez coincide con otros autores que afirman que los industriales extranjeros consiguieron aliarse con la dictadura de Porfirio Díaz para gozar de su protección y ser favorecidos. Además mantuvieron una compleja red de comercio-industria-banca-tierra y fundaron sus propias organizaciones para defender sus intereses, como el Centro Industrial Mexicano en Puebla, en 1906.33 Con todo, entre los empresarios también surgieron divisiones, como señala Ramírez al describir que un grupo de empresarios textiles opositores al Centro Industrial Mexicano constituyeron el 8 de mayo de 1912 la Confederación Fabril Nacional Mexicana, con sede en la Ciudad de México. En este grupo se encontraban Antonio Reynaud, de CIDOSA; Félix Vinatier, de CIVSA, León Barbaroux, de La Hormiga, SA; Luis Veyan, de Veyan Jean y Cía; Anselmo Morín, de la Cía. Industrial Manufacturera, entre otros.34 Ramírez también afirma que “todos los gobiernos que asumieron la Presidencia de México, de 1912 a 1920, sin importar su ideología fueron generosos con la burguesía textil. Por ejemplo, Madero propone a la Cámara de Diputados un impuesto del 8 por ciento sobre la venta de hilados y tejidos, el cual se reintegrará en un 50 por ciento si el empresario cumple con las tarifas del reglamento autorizado por la Segunda Convención en julio de 1912. Con este 32
Ídem, p. 7 Ídem, pp.7, 13-14. 34 Ídem, p.62 33
23
impuesto, el gobierno maderista resultó ser más generoso que el de Díaz al disminuir, en una tercera parte, las cargas impositivas”. 35 Otro caso fue el del gobierno de Victoriano Huerta, que “era de mayor coincidencia con los industriales debido a la política de mano dura hacia los obreros que compartía con la dictadura de Díaz, represión, uso de la policía local y especial para resguardar las fábricas textiles, y el establecimiento de propios cuerpos de seguridad rural para defender sus propiedades si el gobierno local no acudiera a su rescate”.36 Inclusive, “el gobierno de Carranza también manifestó su apoyo a la burguesía textil con el decreto del 16 de noviembre de 1915, en que obligó a los productores de algodón a vender su cosecha al gobierno, para que éste la distribuyera a las fabricas, y donde además se amenazó con la expropiación a todos aquellos productores que se negaran a vender su fibra al gobierno. Así el autor destaca que el gobierno de Carranza favorecía a la burguesía en general y especial a la textil que era su consentida.37 A pesar de que el libro de Ramírez es rico en detalles cuando narra las relaciones entre los industriales y el gobierno, no abunda en el estudio de casos individuales, como los empresarios de CIDOSA o de cualquier otra empresa. No obstante, la importancia de este trabajo -como lo afirma el propio autor- es que “no existen estudios sobre la burguesía industrial nacional para esa etapa”.38 Una obra más reciente sobre la colusión de empresarios con el gobierno es el artículo de Aldo Musacchio y Ian Read, Bankers, industrialists and their cliques elite network in Mexico and Brazil during early industrialitation. En este texto, los autores comparan las redes de hombres de negocios de México y Brasil en el periodo de 1890-1913. Para construir la red de empresarios en México, los autores utilizaron los datos de 98 empresas del Mexican Yearbook, de 1909. En él, identificaban si uno o más miembros de los Consejos de Administración de una empresa pertenecían a los consejos de otras compañías. Si esto era así, el hombre de negocios formaba parte de la red. Los autores mencionan que “las
35
Ídem, pp.87 Ídem, pp. 98-101. 37 Ídem, pp. 185-187 38 , Ídem, p.8 36
24
redes de hombres de negocios fueron cruciales para una iniciar la industrialización en México. De estas redes se obtenían capitales o información, y estaban formadas por prominentes políticos, quienes ayudaban a los empresarios a obtener concesiones y privilegios".39 En virtud de que el artículo de estos autores todavía no es muy conocido conviene tener presente sus contenidos. El texto se divide en cuatro secciones: la primera es una introducción a la situación política y económica de cada país. La segunda explica las diferencias institucionales entre México y Brasil. La tercera señala la metodología del estudio. La cuarta presenta los resultados y conclusiones obtenidas. Aunque el artículo menciona que “no va a teorizar sobre la relación entre redes e instituciones, porque los resultado no muestran con certeza si la ausencia de instituciones guían una fuerte alianza económica en redes o si la larga tradición de los agentes económicos, operando a través de redes, debilitan el establecimiento de instituciones formales, sí logra demostrar que en México los hacedores de leyes también eran los empresarios que más beneficios obtenían, por lo que podría pensarse que estos intentaban continuar con una estructura institucional débil para seguir obteniendo ganancias de sus redes. Éstas fueron más informales, más densas, con mayor número de conexiones y con mayor influencia política que las de Brasil, donde sí existió un sofisticado sistema de instituciones formales”. 40 Si bien el artículo de Musacchio y Read muestra elementos relevantes en la aplicación de la teoría de redes para el caso de la industrialización mexicana, adolece de las mismas fallas que el estudio de Haber, al no considerar las relaciones sociales, de amistad y parentesco de los hombres de negocios. Las obras enumeradas de Keremitsis, Plana, Haber, Coatsworth, GómezGalvarriato, Cardoso, Bernecker, Ramírez, Musacchio y Read fueron publicadas entre los años 1979 y 2007. Todas analizan los factores que impulsaron y los que obstaculizaron el desarrollo industrial capitalista de nuestro país durante el siglo XIX y principios del siglo XX, sólo que Keremitsis, Bernecker, Gómez-Galvarriato y
39 40
Musacchio. Aldo y Read, Ian. Op.cit. 2007, pp. 842-880. Ídem, pp.842-847.
25
Ramírez únicamente describen y analizan los que afectaron a la industria y empresarios textiles nacionales, mientras que Plana, Haber, Coatsworth, Cardoso, Musacchio y Read los que afectaron a toda los empresarios y a todas las industrias. Plana realiza su obra sobre la base de una síntesis de otros libros, pero todos los demás autores construyeron su investigación con fuentes documentales obtenidas en diversos archivos, fuentes hemerográficas y estadísticas. Algunos, como Haber y Gómez Galvarriato, lo hicieron directamente de los archivos de empresas. En el caso de Bernecker, él no sólo consulta archivos nacionales, sino también de Alemania y Francia. Respecto a sus posturas teóricas, Bernecker utiliza la teoría de la dependencia versus la “autonomía”, para explicar el papel de los comerciantes extranjeros en México, que de 1820-1850 se convirtieron en industriales, invirtieron a largo plazo sus capitales en el país anfitrión, se volvieron miembros de la burguesía y renunciaron a su papel de agentes del poder “dominante”, que les asigna la teoría de la dependencia.41 Coatsworth y Gómez-Galvarriato utilizan la teoría del desarrollo del marco institucional de Douglas North, para explicar cómo la falta de leyes e instituciones favoreció la creación de monopolios textiles durante la segunda mitad del siglo XIX. Musacchio y Read utilizan la teoría de redes. En el caso de los trabajos de Keremitsis, Cardoso, Ramírez, Plana y Haber, por ser de carácter monográfico no se identifican con una postura teórica en especial. Más allá de los elementos que señalan los estudios nacionales, es necesario identificar pormenorizadamente en dónde se establecieron las primeras fábricas textiles. ¿Cuáles fueron las regiones pioneras en el desarrollo industrial? ¿Qué actores locales y regionales participaron en su establecimiento y consolidación? Para ello, es forzoso acudir a los estudios regionales.
41
Bernecker , Op.cit., 1992, p. 273.
26
Miradas Regionales Las regiones textileras más relevantes del país de 1890 a 1930 fueron Orizaba, Puebla, Guadalajara y el Valle de México. Existen numerosos estudios acerca de las empresas y empresarios que en ellas operaban. Para los fines de esta investigación se analiza parte de la obra de Eulalia Rivera Carbó, Bernardo García Díaz y Aurora Gómez-Galvarriato para la región de Orizaba; para Puebla, la de Leticia Gamboa, Angelina Alonso y Coralia Gutiérrez; para Guadalajara, Jalisco, la de Guillermo Beato, Jaime Olveda y Sergio Valerio; y para el Valle de México, la de Mario Trujillo Bolio y María Eugenia Romero Ibarra. También se incluyen, por su importancia en los estudios regionales, algunos libros de Mario Cerutti sobre el norte del país. La primera fábrica textil moderna, al estilo inglés, se instaló en Orizaba Veracruz. Se eligió Orizaba por su ubicación junto a corrientes de agua caudalosas que la hacían idónea para la industria mecanizada y por su cercanía con la Ciudad de México. En el libro de Rivera Carbo, Herencia colonial y modernidad burguesa en un espacio urbano. El caso de Orizaba en el siglo XIX, se analizan los elementos básicos que definieron la estructura y la actividad de la ciudad de Orizaba durante el siglo XIX, haciendo énfasis en los grupos sociales con poder que incidieron en su evolución. Utilizando fuentes del Archivo Municipal de Orizaba y de la Biblioteca Hayden, de la Universidad Estatal de Arizona, Rivera Carbo describe que el Banco de Avío hizo un préstamo al empresario Lucas Alamán para que asociado a los hermanos Legrand, originarios de Francia, instalara en 1836 la Fábrica de Cocolapan.42 Cocolapan se convirtió en la hilandería más grande del país en 1841, con 600 empleados que trabajaban en tres turnos. Debido a los servicios y oficios que requería de forma directa e indirecta la fábrica, impulsó el desarrollo de empresas de construcción y transportes en la zona. Sin embargo, por la falta de materia prima, la competencia de los productos extranjeros que eran más baratos y la
42
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit. 2002, p. 15
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deficiencia en comunicaciones que presentaba la región, la fábrica disminuyó su producción. En 1848 fue comprada por Manuel Escandón.43 Rivera indica que “los grandes capitales detrás de la industria textil de la primera mitad del siglo XIX (Escandón, Alamán y Legrand) no tenían interés en Orizaba, más que en lo que podía afectar directamente al desempeño de su empresa. Fue hasta las últimas décadas del siglo XIX, con la llegada del ferrocarril, del comercio exterior, los distintos servicios públicos y de la política industrial impulsada por el Porfiriato y con la instalación de otras fábricas textiles en la región (“Cerritos” (1882), la “San Lorenzo” (1882) y “Río Blanco” (1892), “Santa Gertrudis (1893)”; “Santa Rosa” (1899)) que la estructura premoderna de Orizaba se modificó a fondo”.44 Dentro de los estudios regionales, referentes a los trabajadores de las fábricas textiles de la región de Orizaba, se encuentran obras como la de Bernardo García Díaz, Un pueblo fabril del Porfiriato: Santa Rosa, Veracruz. En la cual el autor ofrece una mirada amplia de las formas y los estilos de vida, sí como los avatares de la lucha obrera en las fábricas textiles Cerritos, San Lorenzo, Río Blanco, Cocolapan, pertenecientes a CIDOSA, Santa Gertrudis, Mirafuentes, y Santa Rosa, propiedad de CIVSA. También destaca el papel de todas estas empresas en la transformación del entorno urbano de Orizaba. Utilizando fuentes hemerográficas (periódico El Paladín, El Cosmopolita, El Reproductor, El Imparcial, La Revolución Social) y documentales obtenidas del Archivo General del Estado de Veracruz, del Archivo General de la Nación, del Archivo Municipal y Archivo del Registro Civil de Ciudad Mendoza, Archivo de La Parroquia Santa Rosa de Lima, Archivo Municipal de Nogales, y Orizaba, del archivo de CIVSA, y de la Colección General Porfirio Díaz, de la Universidad de las Américas, Puebla, el autor identifica que una estrategia efectiva para la acumulación de riqueza por parte de los barcelonnettes durante finales del siglo XIX e inicios del XX fue la de estandarizar el proceso productivo con un mayor control sobre los trabajadores. García narra que en las fábricas de Santa Rosa y
43 44
Ídem, pp.64-66. Ídem, p.301.
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Río Blanco los obreros mexicanos percibieron bajos salarios por laborar extensas jornadas y fueron tratados de manera despótica y hasta recibieron maltrato físico por parte de los jefes. García también describe que en estas fábricas las casas habitación de los empleados mexicanos fueron de espacios limitados y condiciones insalubres. Asimismo, señala que los empresarios barcelonnettes para asegurar rentas monopólicas y recuperar el gasto en salarios, obligaron a sus empleados mexicanos a realizar sus compras en las tiendas de raya de las fábricas, que eran propiedad de socios o parientes de los dueños. Estas condiciones de trabajo dieron pauta para el desarrollo de organizaciones sindicales que sentaron las bases para la creación de los sindicatos de Santa Rosa y Río Blanco (como el Club Melchor Ocampo, el Gran Círculo de Obreros Libres y la Casa del Obrero Mundial), y suscitaron la huelga de Río Blanco (1907) y la Gran Huelga de Orizaba (1919)45, que junto con la Huelga de Cananea, se consideran los conflictos laborales de mayor relevancia histórica del país. En este libro, García Díaz cuenta con una redacción atrayente, pero mayormente descriptiva. Aún así constituye un valioso legado para conocer las estructuras organizacionales de las fábricas de CIDOSA, objeto de estudio de esta investigación. Otra obra dedicada al estudio a la industria textil es la tesis doctoral de Aurora Gómez Galvarriato, The impact of revolution: Busines and labor in the Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. En su tesis doctoral, Gómez-Galvarriato identifica cuáles fueron los efectos de la Revolución Mexicana en el desarrollo económico del país, además de cuestionar el mejoramiento de los trabajadores a causa de la revolución. Para ello, estudia el caso de la Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA), de 1900 a 1929. Elige a esta empresa porque representa un ejemplo de un sector el textil en la temprana industrialización de México, además que se ubica en el pueblo de Santa Rosa, localizado en la región de Orizaba, Veracruz, cuyo movimiento obrero se asocia con el inicio de la Revolución.
45
Una profundización mayor sobre la huelga de Río Blanco y la organización de los trabajadores textiles, sobre la cual volveremos más adelante, fue compilada por Bernardo García Díaz en el 2007.
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Para probar su hipótesis la autora desarrolló modelos econométricos, económicos, estadísticos y financieros. En su opinión, “los números proporcionan resultados precisos que la sola narración, aunque deben ser utilizados con cuidado y suspicacia”.46 Las fuentes que utilizó fueron los Archivos de CIVSA y en menor parte los de CIDOSA, el Archivo Municipal de Orizaba, el Archivo del Departamento del trabajo del AGN, la Colección de Porfirio Díaz, de la Universidad Iberoamericana, el Archivo del Banco Nacional de México (Banamex), el fondo especial de la Biblioteca Lerdo de Tejada, la Biblioteca de la Secretaría de Finanzas, el Archivo de Condumex, la Biblioteca del Banco de México, la Biblioteca “Benito Juárez”, de Ciudad Mendoza, y la Biblioteca de Harvard University. En virtud de que su obra ha sido básica para el desarrollo de la presente investigación, dedicaremos especial atención al enfoque utilizado por Gómez Galvarriato. Ella basa su estudio en la propuesta teórica de Alfred Chandler para explicar la evolución de la estructura organizacional y las estrategias de la empresa. La estructura organizacional de CIVSA, según la autora, poseía características de una empresa capitalista y una familiar. Se acompañó de una red de relaciones étnicas, que le permitieron el aumento de capital y la disminución del riesgo de fraude, en un contexto de subdesarrollo financiero y de instituciones legales. La tesis de Gómez Galvarriato aporta valiosos análisis pormenorizados de los estados financieros, las actas de consejo, las nóminas de la empresa, de la historia de los dueños y de los trabajadores de CIVSA. No obstante, falta la comparación de esta empresa con similares de otras regiones textileras del país y la comparación de sus empresarios con más dueños de fábricas textiles de la época. Estas comparaciones las efectúa en el artículo electrónico divulgado en la página del CIDE: La revolución en la distribución y en la producción de textiles en México durante el Porfiriato. Gómez analiza las estrategias de producción, condiciones tecnológicas, operación, distribución y financiamiento de las: 1. Compañía Industrial de Orizaba, propietaria de las fábricas Cocolapan, San 46
Gómez, Galvarriato, Aurora. Op.cit. 1999a, p. 1-5.
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Lorenzo, Cerritos y Río Blanco en el Estado de Veracruz; 2. La compañía Industrial Veracruzana SA, a la que pertenecía la fábrica Santa Rosa ubicada, en el estado de Veracruz; 3. La Compañía Industrial de Manufacturera SA, cuyos dueños también poseían las fábricas textiles Hércules, San Antonio y Río Grande, ubicadas las dos primeras en Querétaro y la última en Jalisco; 4. La Compañía Industrial San Antonio Abad SA, propietaria de las fábricas San Antonio Abad, La Colmena y Miraflores, ubicadas en el DF y el Estado de México. 5. La Compañía Industrial de Atlixco SA, (CIASA), dueña de la Fábrica de Metepec, Puebla. 6. La Compañía Industrial San Idelfonso SA, que poseía la fábrica de San Idelfonso, de la Ciudad de México. 7. La Hormiga SA, propietaria de la fábrica La Hormiga, en el DF. 8. La Compañía Industrial de Guadalajara SA, propietaria de las fábricas Río Blanco, La Experiencia y Atemajac, en Jalisco. 9. En 1898, de la sociedad Veyan Jean y Cía S. En C. Propietarios de la fábrica de La Magdalena, en el DF. La autora afirma que “estas empresas textiles, elaboraron en 1912 el 36.2 por ciento de la producción de telas en México. Contaron con más del 40 por ciento del total de husos y telares que existían en el país y tuvieron el 38.1 por ciento del total del mercado nacional de productos textiles”.47 Lo cual le sirvió para describir los factores que impulsaron el desarrollo de estas compañías textiles.48 También, señala que “los grandes cambios tecnológicos en comunicaciones y transportes junto con los importantes cambios políticos en México ayudaron a integrar un mercado nacional, y para abastecer este mercado más amplio, hubo que transformar los negocios de fabricación para producir grandes volúmenes de artículos y desarrollar redes de comercialización y distribución nacional, que permitieron generar economías de alcance49. Claro que esto sólo fue posible con 47
Ídem, p.59 Según la autora, debido a la maquinación de los procesos de trabajo aumentó el tamaño de las fábricas textiles en México a un ritmo sin precedente: mientras en el periodo de 1843 a 1879 el número de husos había aumentado en 138 por ciento, en los 35 años siguientes (1879-1913) aumentaron en 194 por ciento. Igualmente los medios de transporte y comunicaciones, permitió a las fábricas textiles disminuir sus costos de transportes y aumentar sus economías de alcance. Ídem. 49 Es necesario hacer la distinción del concepto de economía de escala y economía de alcance. Para Alfred Chandler, las economías de escala se producen cuando al aumentar el tamaño de una sola unidad de producción o distribución o de un solo producto se reducen los costos de producción o distribución. Mientras que las economías de alcance resultan de usar una sola unidad de negocios para producir o distribuir varios productos y con esto reducir los costos de transacción. Chandler, Alfred. D. Scale and scope: the dynamics of industrial capitalism. Cambridge, Mass., Belknap Press, 1990, pp. 17-18. 48
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grandes capitales, por lo que los empresarios textiles –en su mayoría de origen barcelonnette- integraron sus negocios comerciales a sus compañías textiles y a bancos en donde la participación de los empresarios franceses fue mayoritaria”.50 El artículo de Gómez demuestra que el producir a grandes volúmenes (economías de escala) y comercializar mediante redes de distribución nacional e internacional (economías de alcance) resultaron ser las estrategias adecuadas para el desarrollo de las compañías textiles en México, durante y poco después del Porfiriato (1876-1912). Un libro que debe ser mencionado, aunque sólo resulte una publicación de aniversario, es la obra de Luis Everaer (1990), Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba SA, Centenario, 1899.-1989. En este libro el autor utiliza fuentes documentales de la empresa y estudios de otros investigadores para narrar la historia la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). La obra inicia con una historia descriptiva de la industria textil en México desde la época prehispánica hasta la Independencia. Continúa con la descripción de la región de Orizaba, donde los empresarios barcelonnettes, socios de CIDOSA, decidieron llevar a cabo su estrategia principal de comprar y modernizar las fábricas textiles activas de Cerritos, San Lorenzo y Cocolapan, así como fundar, la Fábrica de Río Blanco. Posteriormente relata el nacimiento, vicisitudes y estrategias de renovación que aplicaron los dueños de CIDOSA para permanecer compitiendo, a pesar de los vaivenes de la economía nacional y su atraso tecnológico. Finalmente aporta ciertos testimonios documentales, como los resúmenes de los informes del Consejo de Administración de 1903 a 1944, y un análisis pormenorizado de las áreas de trabajo de cada una de las fábricas – ambos piezas fundamentales para este estudio- que enriquecen y fortalecen el objetivo principal de la obra: contar la historia del centenario CIDOSA. Otra región que fue uno de los centros de producción textil más importantes desde la Colonia hasta el siglo XIX fueron las ciudades poblanas de Puebla y Atlixco. Las fábricas textiles se instalaron ahí por las siguientes razones: A. Era la ruta entre el puerto de Veracruz y el DF, con lo cual se ofrecía a los inversionistas 50
Gómez, Galvarriato, Aurora. Op.cit. 1999a, pp. 60-64
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la cercanía con las ciudades más densamente pobladas y, por lo tanto, su mercado; B. Fue de las primeras regiones en ser colonizadas y contaba con infraestructura como molinos y haciendas para instalar fábricas; C. Disponía de ríos, como Atoyac y San Baltasar –entre otros- que atravesaban las ciudades de Puebla y Atlixco y les proporcionaban a esos molinos y haciendas energía hidráulica, y posteriormente energía hidroeléctrica a las fábricas textiles; D. Podía disponerse de materia prima rápidamente debido a la proximidad del algodón importado que arribaba al puerto de Veracruz, o al cultivado en el Papaloapan que era el principal abastecedor antes de La Laguna, E. Pero principalmente por la tradición de mano de obra capacitada en el trabajo de hilanderos y tejedores, que además trabajaban por bajos salarios. Los industriales textiles en Puebla entre 1880-1890, pagaban 25 centavos de salario mínimo mientras que en Orizaba era de 35 centavos. Igualmente, la tradición textilera de Puebla como factor de localización proporcionaba a los inversionistas una red comercial y circuitos mercantiles establecidos con antelación.51 Leticia Gamboa, en su tesis de maestría, Los empresarios de ayer. El grupo dominante en la industria textil de Puebla 1906-1929, proporciona un acercamiento a la historia de un grupo de empresarios de la región de Puebla durante las primeras tres décadas del siglo XX. Para ello, la autora utilizó el tomo 1 al 18 del libro 3 de Comercio (1876-1930) del Archivo Público de la Propiedad del Estado de Puebla, documentos de 1911-1912 del Archivo Judicial del Estado de Puebla, documentos de 1911-1925 del Archivo General de la Nación, y algunos documentos de la Junta de Conciliación y arbitraje. Inicia su análisis comparando a Puebla con otras regiones textiles como Veracruz (específicamente Orizaba) y el Distrito Federal (DF), para identificar las razones por las que Puebla mantenía la primacía de la industria textil mexicana. Con estas comparaciones, Gamboa determina que las fábricas poblanas tenían menor capacidad de producción que las veracruzanas y, por ello, compensaban su pequeñez con numerosidad, por lo cual Puebla siempre mantuvo el mayor porcentaje de fábricas textiles que las otras regiones. Después de este apartado, 51
Gamboa Ojeda, Leticia, Op.cit. 1985, pp. 40.
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analiza varios hechos del periodo para ubicar el contexto en el que los empresarios debieron actuar. Examina los cierres por saqueos y daños de la Revolución Mexicana, la escasez de algodón, los incendios de las fábricas, los movimientos obreros, los gobiernos y las crisis mundiales.52 En la segunda parte del libro, ofrece el estudio de los empresarios textiles, en su mayoría españoles provenientes del norte (familia Rivera-Quijano, CondeConde, Díaz Rubín y Gabito Méndez), algunos franceses originarios mayormente del pueblo de Barcelonnette (Lions, Reynaud, Sibilot) y mexicanos (Conde-Conde, De Velasco, Gavito-Méndez, Mantiezo, Ritter) que ostentaban el poder económico, social y político en Puebla de 1906-1929. Estos empresarios, indica Gamboa, participaron en el comercio (La Ciudad de México), la industria textil (CIDOSA, la Perfeccionada, San Idelfonso), haciendas, agroindustrias, bancos (Banco Oriental de Puebla), petróleo (Cía. Pánuco del comercio de Puebla), cemento (Cía. Manufacturera de Cemento Eiva SA) y Comunicaciones (Cía. Telefónica de Puebla). Es decir, constituyeron oligopolios diversificando sus inversiones, pero siempre tratando de mantener sus negocios en sociedades familiares o con personas allegadas (amigos, otros compatriotas). Afirma Gamboa, fueron grupos cerrados que mantenían su composición étnica por el matrimonio endogámico, la creación de instituciones culturales y religiosas. Aunque no muchos de ellos tuvieron puestos públicos, mantuvieron relaciones cercanas al gobierno, lo cual garantizó y fomentó su poder oligárquico. En su último apartado, Gamboa realiza un estudio puntual de las familias Rivera Quijano y Familia Conde-Conde. Sin embargo, a pesar de ser una obra con una redacción y análisis espléndidos, no considera la política industrial y la organización empresarial de los fabricantes pues menciona la propia autora, eso es tarea de otra investigación. Otro libro de la misma autora, donde sí examina a la organización empresarial de las fábricas textiles de la familia Rivera-Quijano, es Empresas y empresarios textiles de Puebla. Análisis de dos casos. El interés primordial de Gamboa en este ensayo se centra en el de las formas jurídicas y sus 52
Ídem, pp. 32.
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implicaciones económicas en el caso de la industria textil poblana. En esta obra la autora describe cómo la industria textil en el siglo XIX comenzó organizándose a través de las sociedades de personas en dos modalidades: sociedad de nombre colectivo limitado y sociedad en comandita simple. Después, las de mayor capital en sociedades anónimas.53 Un tercer trabajo referente al comportamiento y estructura de los empresarios textiles de Puebla es la obra de Angelina Alonso, Los libaneses y la industria textil en Puebla. El objetivo general de este trabajo fue estudiar las características de las minorías étnicas no indígenas en México, sus procesos de integración al país y las relaciones entre su cultura de minoría y la cultura dominante en México. En particular analizó las características de la industria textil en la ciudad de Puebla, estableciendo los mecanismos de inserción de los inmigrantes libaneses en esa rama. Las fuentes que utilizó fueron materiales del Departamento de Extranjería del Archivo del Ayuntamiento de Puebla, el Archivo General de Notarías de Puebla, fuentes hemerográficas y entrevistas a la comunidad libanesa de la primera, segunda y tercera generación. A lo largo de esta obra, la autora determina que los libaneses ingresaron a México a partir de 1860 y se dedicaron inicialmente al comercio ambulante y, posteriormente, al fijo. Entre 1925-1940 estos inmigrantes invirtieron de manera importante en la industria textil, aprovechando la coyuntura de la crisis. Entre 1907-1908 compraron varias fábricas ya establecidas (La Regla, El Patriotismo, La Campana, entre otras) y las equiparon con nueva maquinaria. Al igual que los españoles también diversificaron sus inversiones en copropiedad con otros libaneses; se integraron hacia atrás y hacia adelante, es decir incorporaron a la estructura de la empresa las actividades de obtención de materias primas, al producir su propio algodón que surtía a sus fábricas de ropa, la cual también ellos mismos comercializaban. Sus gerentes y administradores fueron sus hijos. También crearon sus propias instituciones para fortalecer su cohesión, como la Cámara de Comercio Libanesa, el Centro Libanés en Puebla (1969), la Sociedad Financiera para proporcionar capital, el Club Femenino Libanés en Puebla, la 53
Gamboa, Leticia, y Estrada, Rosalina. Op.cit. 1986, pp. 55.
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Unión Mutualista Libanesa, entre otros. El
texto
de
Alonso
es
un
ensayo
descriptivo de fácil lectura e interesantes propuestas. Estudia a un grupo de empresarios libaneses que hasta ese momento no habían sido analizados. Un libro más reciente sobre los empresarios textiles en la región de Puebla es el de Coralia Gutiérrez, Experiencias contrastadas. Industrialización y conflicto en los textiles del centro-oriente de México, 1884-1917. El objetivo de este trabajo es probar que el proceso de producción de la industria en México se ha construido socialmente por la interacción entre empresarios y obreros. Para ello, se toma como caso de estudio las fábricas textiles de Puebla y Tlaxcala, de 1884-1917. En esta obra, la autora reconstruye un grupo empresarial en una región definida y en una rama de la economía, tratando aspectos del poder o de otros grupos relacionados. También realiza un análisis de las relaciones obrero-empresarios, obrero-Estado, y empresarios-Estado en periodos de trastornos sociales, porque es en estos momentos cuando son más nítidas, ya que es en las coyunturas donde mejor se observa cómo se integra y actúa el grupo, pero primordialmente cómo ejerce el poder. Las fuentes que utiliza para su investigación son: en el ámbito nacional, la Colección General Porfirio Díaz, los documentos de la Embajada de España en México, los archivos del Centro de Estudios de Historia de México de Condumex, (Venustiano Carranza, Francisco León de la Barra, General Jenaro Amezcua, Ramón Corral, Manuel González) los fondos de Gobernación, Presidentes, Revolución y Trabajo del Archivo General de la Nación, el Archivo de la Revolución Mexicana y el de Francisco I. Madero del INAH, el Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional. En el ámbito regional, el archivo privado del gobernador de Puebla, de 1892-1811, Mucio Martínez (que no se había utilizado para estudiar a los empresarios), el del notable empresario de la época en Puebla y Tlaxcala Andrés Matienzo, el Archivo del Congreso del Estado de Puebla, el Archivo del Ayuntamiento de la ciudad de Puebla, el Archivo Histórico de la Cámara de la Industria textil de Puebla y Tlaxcala y el Archivo General de Notarías de Puebla. Gutiérrez menciona que el análisis de los protocolos notariales le permitió vislumbrar aspectos de los empresarios que hasta la fecha se sabía poco, 36
como las relaciones endógenas y políticas de los años noventas del siglo XIX, el origen del capital, la diversificación y la dinámica de las inversiones. En palabras de la autora, los estudios de empresarios, aunque abundantes y muchos de ellos con gran riqueza monográfica y documental, se han ocupado básicamente de sus actividades económicas y cuando han tratado aspectos del poder o de otros grupos relacionados con ellos, ha sido casi siempre sin elegirlos como punto central de análisis.54 Por eso a su juicio, al incluir en este libro las relaciones de poder que generan las actividades económicas junto con los avances obtenidos por los estudios regionales de historia empresarial de otros investigadores, le permiten aportar varias ideas que contribuyan a explicar algunos ejes articuladores del conjunto de la burguesía mexicana en el ámbito intra e interregional, así como nacional, además de los lazos estrechos que ésta tenía con el Porfiriato.55 Para Coralia Gutiérrez, desde el nacimiento como actores sociales y políticos, los industriales estuvieron ligados al Estado. Posteriormente, con la llegada de Porfirio Díaz al poder, se impulsó el proceso de industrialización a través de capitales extranjeros, con lo que se subordinó el desarrollo del país a los intereses capitalistas de Europa y Estados Unidos (EU), y además se otorgó prestigio político a estos empresarios debido a que desde la perspectiva de “los científicos”, los empresarios eran agentes centrales del progreso. El resultado de la política económica del Porfiriato, en este aspecto, fue la coincidencia entre el grupo gobernante y los empresarios. La autora señala que los empresarios textiles de Puebla en su mayoría eran españoles, que llegaban a México trabajando por algún tiempo como dependientes en tiendas de otros compatriotas, luego conseguían algún préstamo y se establecían por su cuenta. De acuerdo a Gutiérrez, las fortunas que estos empresarios amasaron fueron principalmente generadas en la época de la Reforma y la República restaurada mediante el comercio, el matrimonio y
54 55
Gutiérrez Álvarez, Coralia. Op.cit. 2000, p.20 Ídem, pp. 21-26
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aprovechando la desamortización de bienes de la Iglesia, pero además por la diversificación e integración de sus inversiones. La diversificación de sus inversiones se visualiza cuando la autora describe cómo a partir de la segunda mitad del siglo XIX los empresarios españoles controlaban en Puebla la industria textil y mantenían inversiones en la industria química (blanqueadores para los textiles), la de alimentos (harina, aceites, azúcar, piloncillo, bebidas alcohólicas, tabaco, chocolate, aguas gaseosas, galletas, pastas), actividades minero metalúrgicas (cobre, hierro, plomo, oro, plata) e instituciones de crédito (Banco Oriental). Así, identifica que a diferencia de los empresarios que antecedieron al grupo analizado, esta generación estimulaba la inversión, diversificándola y contando con el apoyo del gobierno. Con respecto a la integración, se describe que casi todos estos empresarios mantuvieron sus negocios comerciales. Entonces ellos mismos se encargaban de la distribución de sus productos, sobre todo respecto a los textiles que se vendían en la ciudad de Puebla. Asimismo, cuando estos empresarios necesitaban recursos financieros para incrementar sus inversiones, los obtenían de las relaciones familiares y de paisanaje y del Banco Oriental, fundado por ellos mismos, con lo cual cerraban la cadena producción-distribución-financiamiento. Justamente el Banco Oriental fue el que otorgó préstamos al gobierno, lo cual consolidó el poder de este grupo empresarial. Los vínculos esenciales entre empresarios poblanos con el régimen rebasaban al Gobierno del Estado de Puebla, ya que estos empresarios se las ingeniaban para mantener vínculos con Porfirio Díaz y los científicos como Joaquín Casasús, que fue representante de la firma más importante de Puebla (Quijano-Rivera Cía.), fue accionista del Banco Oriental y también fue colaborador del gobierno central. En el ámbito local, la autora describe que algunos empresarios textiles ocuparon el ayuntamiento y el Congreso de Puebla, pero no hubo muchos empresarios textiles que participaran directamente en la política poblana de manera directa y convencional, sino que su influencia se daba por medio de acreditados abogados liberales que fueron sus voceros, enlaces y apoderados, como Félix Bestegui, Antonio Pérez Marín, Rafael Isunza y Miguel López Fuentes. 38
Tener la supremacía del poder local, aunque compartido con la élite económica y política, significaba no sólo una forma de obtener prestigio social y riqueza, sino contar con una estructura para acumular poder y relaciones que los empresarios heredaban a sus hijos, un legado de gestión.56 Con estos recursos políticos los empresarios lograron beneficios económicos: rebajas a las pensiones de aguas vigentes o la cobertura institucional para controlar las localidades donde estaban situadas las fábricas textiles por medio de jueces de paz.57 Coralia Gutiérrez también realiza un análisis pormenorizado de los conflictos obreros en las fábricas textiles de Puebla y Tlaxcala, mencionando los principales líderes obreros, políticos y empresarios que participaron en ellos. Entre los empresarios menciona a Ignacio Morales, Tomás Benítez Furlog, Luis Arias, Adrián Reynaud, Enrique Tron, José Signoret, y Manuel Rivera Collada, heredero de los Quijano Rivera y principal empresario textil de Puebla, dueño de las fábricas “La Esperanza” y “El Mayorazgo”, ubicadas en la Ciudad de Puebla; “La Maravilla”, en la Ciudad de México, y “Vistahermosa”, en Oaxaca. Concluye que el desarrollo de algunos grupos empresariales supuso vínculos estrechos con los científicos como el grupo de Puebla. Las características de todos los grupos eran similares. En el caso de los empresarios de Puebla y Tlaxcala el poder económico y político se reveló en distintas adscripciones organizativas del ramo económico (agricultura, comercio, industria y banca), político (funcionarios, asesores, etc.) y de clase (Centro Industrial Mexicano). Posteriormente con la crisis del régimen, la Revolución y el cambio de gobierno, los empresarios de Puebla y Tlaxcala no perdieron influencia en el gobierno, sino que nuevos sectores, como las organizaciones obreras, ganaron poderío al incorporarse a la oposición política. La solidez de la organización de los empresarios y la debilidad de los obreros les permitió a los primeros seguir obteniendo ciertas concesiones gubernamentales, sólo que ahora en forma de instituciones.58 El libro de Coralia Gutiérrez representa un loable esfuerzo por integrar un análisis regional de tres actores (empresarios, obreros, Estado) en un determinado 56
Ídem, pp.122, 127. Ídem, p. 130. 58 Ídem, pp. 351-352. 57
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periodo. En algunas secciones de su obra profundiza en algunos detalles de empresas y empresarios particulares, pero la mayor parte del libro está enfocado a un estudio general de las relaciones de poder entre los empresarios y el Estado como el libro de Ramírez Rancaño. Una tercera región textilera importante del siglo XIX era la del Valle de México. Referente a esta región, se eligió la obra de Mario Trujillo Bolio, porque este autor se enfoca a analizar a los trabajadores, empresas y empresarios textiles del Estado de México y el Distrito Federal durante el siglo XIX. En primer lugar había de poner atención a su tesis de maestría, Operarios fabriles en el Valle de México 1864-1884 espacio, trabajo, protesta y cultura obrera. En este trabajo, Trujillo Bolio utiliza fuentes documentales obtenidas de la Dirección General de las Industrias Nacionales y de los Anales del Ministerio de Fomento, para tratar de recrear el entorno del trabajo fabril de los obreros de la Fábrica La Magdalena Contreras. A través de su obra, se muestran los episodios que les permitieron aflorar a los obreros, sus demandas colectivas, métodos de autodefensa, protesta organizada y sus manifestaciones culturales59. Para ello se sirve de abundantes estadísticas y gráficos, sin embargo adolece de un análisis pormenorizado de las estrategias de negocios de sus propietarios. Estas se analizan en el artículo La Fábrica Magdalena Contreras (18361910). Una empresa textil precursora en el Valle de México. En este ensayo, el autor utiliza documentos proporcionados por la propia fábrica para describir su funcionamiento desde 1836 hasta el periodo revolucionario. Trujillo afirma que esta fábrica se estableció estratégicamente en un espacio económico en el que se había realizado la manufactura artesanal de paños durante la época colonial. Tuvo como socio principal a Antonio Garay, empresario español que figuró como prestamista del gobierno, socio mayoritario en compañías mineras, el estanco de tabaco y el contrato de construcción del camino de hierro entre Perote y Veracruz, así como uno de los hombres de negocios que ocupó mayor número de cargos en los gobiernos. Fue responsable de la Dirección de Colonización e Industria (1846),
59
Trujillo Bolio, Mario. Op.cit. 1997.
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de la Dirección General de Industrias, Ministro de Hacienda (1834 y 1846) y formó parte de la Junta Directiva del Ramo de Peajes (1846). En lo que respecta al funcionamiento de la fábrica, el autor señala que tenía integrada su operación: desde el sembradío de algodón, la producción de telas en la fábrica, hasta los cajones de ropa donde se distribuían y comercializaban sus productos. Asimismo, describe que debido a problemas financieros, entre 1856 y 1863, la fábrica Magdalena Contreras fue vendida en 1864 a Pío Bermenejillo, quien en 1898 la vendió a Meyran Donnadie y Cía., y en 1912 a Adrián Jean y Luis Veyan, los cuales continuaron con ganancias considerables aún después de la Revolución.60 Otra obra más reciente de Trujillo Bolio es el libro Empresariado y manufactura textil en la Ciudad de México y su periferia S XIX. Los ejes centrales del quehacer histórico de esta obra -en palabras del autor- son: “1) Las conexiones causales que se refieren a las formas productivas que adquirió la manufactura textil en la Ciudad de México y zonas aledañas. 2) La forma en que se llevo a cabo el abasto de las fibras textiles y la realización comercial de hilados y tejidos y ropa. 3) El tipo de empresariado que emergió en la readecuación y establecimiento de los centros fabriles. 4) Las relaciones sociales que se dieron entre las esferas públicas y privadas para atender los asuntos de la industria textil”.61 Para cumplir con estos ejes Trujillo estudia la Fábrica de San Idelfonso, y de la Magdalena Contreras. Obtiene gran parte de sus datos de sus libros anteriores y del Inventario de existencias de estas dos fábricas en el Archivo del Tribunal de Justicia del Distrito Federal. En esta obra nuevamente describe la historia de la fábrica de La Magdalena Contreras, sus dueños, y funcionamiento, sólo que ahora incluye información de los circuitos comerciales de textiles en la región, de los vínculos entre empresarios textiles con algunos gobernantes y la descripción del funcionamiento de la fábrica San Idelfonso. Además anexa a la mitad de la obra magníficas ilustraciones de las fábricas, algunas tomadas por el mismo autor, que enriquecen el relato. Una de
60 61
Trujillo Bolio, Mario. Op.cit. 1997, pp.245-274. Trujillo Bolio, Mario. Op.cit. 2000, p.15.
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sus aportaciones más valiosas, desde nuestra perspectiva es, que permite identificar algunas de las estrategias productivas en cuanto a tecnología y disposición de la planta productiva de estas dos fábricas. Otra obra historiográfica que estudia la actividad empresarial en general del Estado de México y del estado de Sinaloa en los siglos XIX y XX es la de María Eugenia Romero Ibarra. De esta autora es importante destacar los aportes de dos de sus obras relacionados con el marco teórico de esta investigación: la teoría de redes. La primera, Hombres de negocios y cambio institucional en el Estado de México, 1880-1910. En este texto la autora indica que su objetivo es estudiar la historia de la actividad empresarial y su interrelación con los cambios del aparato institucional en el Estado de México en el último tercio del siglo XIX. Las preguntas que guían su investigación son: ¿De qué forma se produjo la tardía industrialización de esta región y cuáles fueron las características del proceso? ¿Quiénes fueron los hombres que lo iniciaron y cómo se relacionan con el poder del Estado? 62 De acuerdo a Romero Ibarra, la industria del Estado de México inició a finales del siglo XIX por un grupo de hombres de negocios ligados al poder porfirista de la región. Esos hombres tenían en común su origen agrario. Fueron dueños de haciendas agrícolas y se dedicaron al comercio. En general, fueron empresarios de fortunas medianas, a excepción de Íñigo Noriega (industrial textil) e Ignacio de la Torre, quienes destacaron a nivel nacional por su riqueza y sus relaciones con otros empresarios. Asimismo, se mantuvieron ligados al poder de la región mediante alianzas e inversiones estatales en infraestructura y comunicaciones que benefició el desarrollo de sus negocios, pero que también impulsó la urbanización de la zona.63 La autora señala que los empresarios que destacaron a nivel estatal fueron: Henkel, Graff, Pliego, Riba y Echeverría, De la Torre y Mier, Medina Garduño, Cortina, Pichardo, Pagaza y otros. Algunos de origen y raíces coloniales, con fuertes vínculos con el antiguo grupo de poder económico: los hacendados de la 62
Romero, Ibarra, María Eugenia. Op.cit. 1999, pp. 123-124. “En 1880 el Gobierno del Estado, a cargo de Zubieta, introdujo agua potable y drenaje, alumbrado, telégrafo y teléfono y reorganizo las fuerzas de seguridad y se construyo el ferrocarril en mayo de 1882” (Ídem). 63
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región de Lerma. Después de 1890 algunos de estos empresarios formaron grupos con relaciones sociales y políticas que no eran permanentes y que se aglutinaban de acuerdo a los conflictos políticos o económicos que se presentaban. Así, se formaron dos grupos: uno encabezado por los hermanos Henkel, ligados al gobierno de Villada, y otro no siempre cohesionado de empresarios innovadores y liberales al que pertenecía Manuel Medina y que no gozaba de los favores de la administración estatal. Después, con la Revolución, los empresarios no continuaron con la reproducción del capital, hasta 1934, cuando empezaron a recuperarse.64 La segunda obra, Redes empresariales, industria azucarera y políticas públicas en México. 1900-1940. En este texto, la autora estudia cómo la producción azucarera en México durante el siglo XIX enfrentó diferentes crisis de producción y consumo y para 1910 debió hacer frente también, a los problemas de financiamiento y de comercialización. Romero afirma que debido a estas crisis, surgieron las asociaciones de empresarios azucareros regionales (Sinaloa, Morelos, etc.) que buscaron enfrentar a los acaparadores que controlaban el mercado del Distrito Federal; regular los precios y crear sus propias redes de comercialización y distribución. Estas redes se apoyaron en el Estado para lograr sus objetivos y, además, al productor que no aceptara las condiciones de la red, se le sancionaba sin créditos, sin mercado y vetándoles los permisos de venta. Estas asociaciones impusieron cuotas de producción, se encargaron de exportar el excedente y de presionar al gobierno para evitar la importación de azúcar con aranceles. Su éxito se baso en la disciplina de los empresarios y la aceptación de sus acuerdos.65 Romero señala que las redes fueron el mejor medio disponible para resolver y enfrentar la crisis de la industria del azúcar hasta la Revolución. Asimismo un medio muy eficaz para comprender la forma que se asumieron posteriores integraciones con otras asociaciones de empresarios azucareros que compitieron entre ellas y debilitaron el cumplimiento de los acuerdos hasta 1931. En un
64 65
Ídem, pp. 132-141. Romero Ibarra, María Eugenia, Op.cit. 2006, pp. 309-355.
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momento en el cual la crisis del 1929 condujo a asociarse nuevamente en la Asociación Azúcar SA.66 En estos ensayos Romero Ibarra logra demostrar que cuando los empresarios enfrentan entornos complejos con altos niveles de incertidumbre, optan por asociarse entre ellos, con el gobierno o con otros grupos de poder para sobrevivir y aumentar sus ganancias. Por lo que hace a la región más occidental del país, las fábricas textiles se instalaron en Guadalajara, debido a su situación geográfica, la cual les permitía distribuir sus mercancías hacia el noroeste (Durango, Zacatecas, Colima, Nayarit, Sinaloa) y el centro de México (Guanajuato, México DF). Algunos de los autores que investigan a las empresas y a los empresarios textiles de Jalisco son Jaime Olveda, Guillermo Beato y Sergio Valerio Ulloa. Jaime Olveda ha realizado una extensa investigación sobre la región de Guadalajara. Entre sus obras destacan el libro compilado por él y José María Muría, Industria y Comercio. En este libro se reunieron los trabajos elaborados por distintos historiadores para explicar el desarrollo de la industria y el comercio en la región. De estos estudios, resaltan los textos de Jorge Durand: La Industria textil en el siglo XIX; el del propio Jaime Olveda, El monopolio rebocero GuadalajaraZamora; el de Luisa Gabayet, La industria textil, y el de Patricia Arias, El proceso de industrialización: siglo XX. Jorge Durand utilizó los protocolos de notarios del Archivo de Instrumentos Públicos de Guadalajara para relatar cómo surgieron las fábricas textiles en Jalisco. De acuerdo al autor, las primeras manufacturas textiles fueron la de “Jauja”, propiedad de la Casa Barron Forbes y Cía., instalada en 1838, y la “Bellavista”, propiedad de la Casa comercial Castaños, en 1841, ambas establecidas en el cantón de Tepic. En Guadalajara, “La Escoba”, de Manuel Olasagarre, y “la Prosperidad Jalisciense”, mejor conocida como “Atemajac”, de José Palomar, ambas inauguradas en 1841. Posteriormente, en 1866 se fundó “Río Blanco”, propiedad de Lowere Hermanos, y “La Experiencia”, también propiedad de Manuel Olassagarre y Sotero Prieto y Cía. Estas cuatro fábricas 66
Ídem.
44
constituyeron la gran industria de esa época y tuvieron a su alrededor talleres que las abastecieron de hilo e hilaza. Fueron financiadas por capitalistas locales que habían hecho sus fortuna en el comercio, haciendas, minas y cualquier actividad que les generara dividendos. En 1889, las fábricas de “La Escoba”, “Río Blanco” y “Atemajac” fueron compradas por la Cía. Industrial de Jalisco SA. Esta empresa fue un holding67 y en 1899 se transformó en la Cía. Industrial de Guadalajara SA (CIGSA). En 1896 surgió la Cía. Industrial Manufacturera, liderada por la familia Martínez Negrete, dueños de la fábrica Río Grande. Debido a las deudas de esta familia con el Banco de Jalisco, la compañía se declaró en quiebra en 1904 y la fábrica textil pasó a manos de los franceses Cuzin, Fortoul Bec, Lebré y Brun, quienes posteriormente compraron la fábrica “Hércules”, de Querétaro, y formaron un holding similar al de CIGSA.68 Jaime Olveda utilizó información del Archivo de Instrumentos Públicos del Estado de Jalisco y del Archivo Histórico Municipal de Guadalajara para estudiar el monopolio rebocero de Guadalajara-Zamora. De acuerdo a Olveda, la rebocería figuró como uno de los principales oficios tapatíos de mediados del siglo XIX. La producción de rebozos de Guadalajara cubrió la demanda local y de los estados de Sinaloa, Sonora, Durango y Zacatecas. Inicialmente su producción fue artesanal, hasta que un grupo de franceses (Carlos Tarel, Luis Lyon, Santiago Fortul y Carlos Durpat) invirtieron en el ramo y la elaboración se cambió de talleres familiares a manufacturas de rebozos, como la fábrica de rebozos de seda de Tarel y Cía. Sus socios mantuvieron el monopolio de hacer rebozos durante el siglo XIX, ya que habían comprado en 1849 la patente para hacerlos a Vicente Munguía, artesano de Zamora, Jalisco.69 Luisa Gabayet empleó datos del Archivo Histórico del Estado de Jalisco para explicar el papel de los empresarios franceses, en especial los provenientes del Valle de Ubaye, los barcelonnettes, en el desarrollo de la industria textil y la urbanización de Guadalajara. La autora menciona que estos empresarios 67
Es una empresa cuyo capital consiste sólo en acciones de otras firmas, las cuales están bajo su control. Jorge Durand, Op.cit. 1993, pp. 21-32. 69 Olveda, Jaime. Op.cit. 1993, pp. 33-53. 68
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establecieron en Guadalajara “Las Fábricas de Francia”, una de las primeras tiendas departamentales de la región y que ha operado en gran escala desde 1886. Esta tienda vendía a los estados vecinos del Noroeste y el Pacífico. También señala que los barcelonnettes invirtieron en la industria textil de algodón porque recibieron diferentes concesiones del gobierno local. Por ejemplo, la Compañía Industrial de Guadalajara, obtuvo una exención de impuestos por 10 años con la condición de hacer funcionar una planta hidroeléctrica que debían alimentar de electricidad a sus dos fábricas textiles y a la ciudad de Guadalajara. La empresa tuvo dos fuentes de ingreso: la producción textil y la venta de electricidad. La empresa también construyó y operó un ferrocarril eléctrico, por lo cual recibió una concesión de impuestos por 20 años. En 1907 la compañía vendió los derechos de propiedad del ferrocarril. Gabayet afirma que los mercaderes franceses tuvieron una notable influenza en el desarrollo urbano de Guadalajara y participaron en las negociaciones para la terminación del ferrocarril México-Guadalajara y su extensión hacia Colima. También hicieron posible el tranvía, el alumbrado público, los teléfonos, telégrafos y el sistema de autobuses urbanos.70 Patricia Arias estudia el proceso de industrialización de Jalisco en el siglo XX. Para ello utiliza información extraída del Archivo Histórico del Estado de Jalisco. La autora señala que en Guadalajara coexiste la producción de bienes de consumo, de bienes intermedios y de capital. El proceso de industrialización de los bienes de consumo inició a partir de 1930 por pequeños capitales locales, con unidades productivas de pequeña escala que utilizaron intensivamente mano de obra familiar y asalariada. La de los bienes intermedios y de capital inició en 1960 y estuvo ligada con capitales extralocales y transnacionales. En los bienes de consumo sobresalieron el tejido de punto, el calzado y la ropa. En la de los bienes intermedios, la metal-mecánica. La industria se desarrolló en Guadalajara, porque de acuerdo a la autora esta ciudad proporcionó la infraestructura urbana y el crecimiento demográfico que se necesitaba. En 1900 Guadalajara tenía 100,000 habitantes y fue la segunda más 70
Gabayet, Luisa. Op.cit. 1993, pp. 55-73.
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poblada del país después del DF. Además contaba con agua y electricidad desde 1883, así como teléfono y transporte eléctrico desde 1896. Por sus comunicaciones atrajo a pequeños industriales de Colima, Tepic, Mazatlán y Zacatecas, lo que a su vez aumentó la migración de mano de obra y el mercado. Patricia Arias destaca que desde mediados del siglo XIX, Guadalajara abasteció de manufacturas a todo el noroeste del país y al interior del estado de Jalisco, por medio de los comerciantes propietarios de las grandes casas comerciales de la ciudad, que enviaban convoyes viajeros a todas esas regiones. Estas casas vendieron principalmente manufacturas importadas de Europa y Estados Unidos. El mercado que atendieron fueron los grupos sociales de altos ingresos. La tendencia del siglo XX fue la de crear y consolidar un mercado regional amplio y masivo. El sector social que lo hizo fueron los pequeños industriales y comerciantes locales, basados en una amplia red de relaciones sociales con los productores urbanos. Estas redes estuvieron constituidas en el comercio de calzado y textil por los inmigrantes judíos y libaneses.71 De acuerdo a los análisis de los autores anteriores el crecimiento de la industria textil en Guadalajara, fue similar a la de Puebla, al ser impulsada por las pequeñas y grandes fábricas propiedad de empresarios extranjeros que se aliaban con otros empresarios para obtener concesiones del gobierno. Otro libro de Olveda, más reciente es Guadalajara, Abasto, religión y empresarios. En él se recopilan varios artículos presentados anteriormente, para identificar los elementos que hicieron de la ciudad de Guadalajara la capital que construyó la región noroccidental de México. De este libro es de mi interés el texto VII. Franceses y afrancesamiento a finales del siglo XIX. En este artículo Olveda señala que entre los grupos de inmigrantes que llegaron a Guadalajara durante el Porfiriato destacaron los inversionistas provenientes del Valle de Barcelonnette, en Francia. Éstos fueron en su mayoría empresarios modestos que se dedicaron al comercio en pequeña escala hasta 1850. Sin embargo, con la guerra de Reforma y la desamortización de los bienes, algunos, como Emilio Signoret, se hicieron de varias propiedades que les permitieron ampliar sus fortunas y fundar grandes 71
Arias, Patricia. Op.cit., 1993, pp. 75-.109.
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casas de comercio, como “La Ciudad de Londres”, constituida en 1856 y propiedad de Lébre y Cía. También “El Sombrero Colorado”, creada en 1878 por Fortoul, Honnorat y Gariel y Parra, y “Las Fábricas de Francia”, establecida en 1877, pero la cual después de 1887 fue dirigida por Fortoul, Chapuy y Cía. y cuyo éxito, según el autor, sirvió de modelo para que otros franceses fundaran otras tiendas de ropa y lencería (Las fábricas de México, El Nuevo Mundo, El Progreso, El Nuevo París, etc.) e invirtieran como accionistas de las fabricas textiles de “La Escoba”, “Atemajac” y “Río Blanco”. Con estas y otras inversiones, los franceses controlaron la actividad productiva de los textiles, modernizaron las prácticas de su comercialización e impusieron la moda en la región.72 Respecto a la obra de Beato, comentaremos el artículo, Los inicios de la gran industria y la burguesía en Jalisco. En él analiza el proceso de formación de la burguesía jalisciense, a través del estudio de la Compañía Industrial de Guadalajara SA (CIGSA). Utilizó fuentes del Archivo de Instrumentos Públicos de Jalisco, Archivos de la Compañía depositados en la Universidad Iberoamericana, para describir el proceso productivo y aspectos organizativos de la fábrica. De acuerdo al autor, CIGSA aportó innovaciones organizativas al desarrollo de la industria textil de Jalisco, ya que desde el inicio su capital se distribuyó no entre individuos particulares que se asociaron, sino entre empresas (Fortoul, Chapuy y Cía, L. Gas y Cía, E. Lebre y Cía, Bellón, Agorreca y Cía, Laurens Brun y Cía.). Esta transformación conllevó a la sustitución de los antiguos empresarios locales que administraban sus propios negocios por accionistas extranjeros (franceses en su mayoría), que las operaron desde el exterior a través de representantes.73 Su obra aporta elementos valiosos para conocer lo socios, tipos de sociedad y evolución de la burguesía en Jalisco. De Sergio Valerio destaca el libro, Empresarios extranjeros en Guadalajara durante el Porfiriato. Ésta es una obra rica en detalles, en él se analizan las experiencias de los inmigrantes franceses, alemanes y españoles que llegaron a convertirse en importantes empresarios de Guadalajara a finales del XIX. El autor
72 73
Olveda, Jaime. Op.cit. 2006. Beato, Guillermo. Op.cit. 1986, pp. 273-277.
48
consultó principalmente documentos localizados en el Archivo de Instrumentos Públicos del Estado de Jalisco, para realizar una descripción pormenorizada de los montos de las inversiones, fechas de constitución, quiebra, firma de sociedades y testamentos de los empresarios franceses Alberto Abbadie, Teófilo Fortuol. Alemanes: Teodoro Kunhardt, hermanos Collignon, Carlos Behn, Blume y Cía. Y españoles, Francisco Martínez Negrete, los hermanos Fernández Somellera y Fernández del Valle, así como de las empresas francesas: Fábricas de Francia, La Ciudad de México, El Nuevo Mundo, Compañía de Fomento de Bienes y Raíces de Guadalajara, E. Lebre, Barriere y Cía., El Sombrero Colorado. Alemanas: Casa Siemes en México, Cervecería La Estrella. Y españolas: fábrica textil La experiencia, Atemajac, La Escoba, Río Grande, y Fábrica de Papel El Batan, así como también empresas fundadas en conjunto por estos empresarios: Cía. Industrial de Jalisco, Cía. Industrial de Guadalajara y el Banco de Jalisco. A través del análisis de estos tres grupos de empresarios extranjeros, el autor identifica las siguientes similitudes entre ellos: A. Generalmente llegaron a México jóvenes, solteros y sin un capital, sino que por el contrario, éste lo producían en México mediante su trabajo; B. Sus primeros trabajos fueron en comercios o negocios de familiares, amigos y paisanos, que seguían el mismo patrón de “migración en cadena” que se había seguido los españoles desde la Colonia, el cual consistió en que los inmigrantes ya establecidos traían de su país parientes más jóvenes que aprendían el oficio y luego extendían las redes del comercio familiar. Dicho patrón migratorio no fue exclusivo de los españoles, ya que tanto franceses como alemanes lo siguieron, C. Después de juntar cierto capital, se unieron a familiares, amigos y paisanos para formar pequeñas sociedades comerciales de 3 a 4 socios en comandita simple. De estos socios uno o dos eran socios capitalistas y uno sólo era el industrial. Es decir, el que se encargaba de la administración de la empresa. Estas sociedades se planeaban por 5 años (o menos), pero podían terminar antes por la muerte o la salida de algún socio, con lo cual se establecía una nueva sociedad con otros socios para seguir operando la empresa. Estas sociedades fueron la base de las posteriores sociedades anónimas industriales de las fábricas textiles, almacenes comerciales, 49
compañías de bienes raíces y otras empresas; D. Finalmente, el autor concluye que todos estos empresarios fueron innovadores, en el sentido shumpeteriano, al aplicar nuevos métodos de producción, introducir nuevas tecnologías en sus fábricas, establecer nuevos circuitos mercantiles, otras formas de organización y, en general, realizar nuevas combinaciones entre los factores productivos. Reconoce que no fueron los únicos que innovaron. Otra región que impulsó el desarrollo industrial del país fue la conformada por Nuevo León, Durango, Coahuila y Tamaulipas. Esta región ha sido estudiada minuciosamente por Mario Cerutti, investigador que ha marcado pauta en los estudios regionales y que cuenta con innumerables libros, artículos, ponencias y trabajos sobre empresas, empresarios, e industrias de esta región. Para los fines de esta investigación sólo citaré dos de sus principales obras: Burguesía, capitales e industria en el norte de México. Monterrey y su ámbito regional (1850-1910) y Propietarios, empresarios y empresas en el norte de México. En el primer libro utilizó como fuentes al Archivo General del Estado de Nuevo León, del Estado de Tamaulipas y el archivo de la Compañía Fundidora de Fierro y acero, para analizar mediante la teoría regional los mecanismos que permitieron la aparición y consolidación de los grupos burgueses. De acuerdo al autor, dichos mecanismos fueron el comercio legal e ilegal, la apropiación de tierras por expulsión y exterminio de los indígenas, el aprovechamiento y especulación, así como el poder político y militar. Cerutti presenta su obra en tres partes: la primera llamada Nueva frontera y formación de capitales en Monterrey (1850-1890). En ella explica cómo la guerra de EU y México de 1846-1847 acercó la frontera a Monterrey y con eso se provocó un aumento del comercio legal e ilegal. Además, señala cómo el gobernador Vidaurri instaló un arancel especial a las mercancías extranjeras, con el que logró mayores recursos para el Estado, así como préstamos de los empresarios que les pagaba a cambio de concesiones en los impuestos aduanales y arancelarios. En la segunda parte, Burguesía productora e industria (1890-1910), analiza el proceso de formación de los diez grupos empresariales dueños de los 50
principales establecimientos manufactureros de la región. Estos grupos se asociaron entre ellos por inversiones y lazos matrimoniales, y dentro de los nombres que más sobresalieron se encuentra a la familia Ferrara, Garza, Sada, Zambrano, Hernández-Mendirichaga, Madero, Milmo y Calderón. En esta apartado también describe cómo la política del gobernador Bernardo Reyes impulsó una legislación abierta y favorable a la instalación y expansión de manufacturas. La tercera parte, Individuos y proceso en el gran norte Oriental, incluye el estudio de dos principales empresarios: Evaristo Madero y el general Treviño. Cerutti concluye que en Monterrey se concretaron ciertas características que la transformaron en una de las ciudades de mayor atractivo para la industria: la existencia de un ferrocarril que la comunicaba con el mercado de Estados Unidos; la dotación de minerales que desarrolló la industria metal-mecánica; el gobierno local y su legislación. Ésta exentaba de impuestos hasta por 30 años, dependiendo del monto de la inversión. Y las características del empresariado regiomontano, quienes para diversificar sus inversiones y así participar en negocios más redituables: la industria, minería, transporte, bancos, comercio y el ramo agropecuario, se asociaron entre sí en repetidas y múltiples maneras, así como con otros empresarios poderosos (Enrique C. Creel, Joaquín Casasús, Tomás Braniff, León Signoret y Antonio Basagotti).74 En el segundo libro, Cerutti considera que el desarrollo industrial de Monterrey se debió a las redes familiares, a los vínculos con Estados Unidos, especialmente con Texas; a la capacitación del empresariado y a su alta capacidad de adaptación. Cerutti narra que de 1820 a 1850 la población de Monterrey se dedicó principalmente al cultivo y exportación de caña, maíz y frijol. Aunque también existió la ganadería y las actividades artesanales: zapateros, herreros, curtidores, etcétera. Posteriormente, con la habilitación de Matamoros, Tamaulipas como puerto, aumentó el comercio entre New Orleans-Matamoros y el Golfo, con lo cual todos los productos se trasladaron por Monterrey, desde donde se distribuían a San Luis Potosí, Durango, Chihuahua y Jalisco. Durante la Guerra de Reforma y la 74
Cerutti, Mario. Op.cit. 1992.
51
intervención francesa, se demandaron cuantiosos recursos para los soldados (alimentos, animales, monturas, mochilas, etc.). Para mantener a su ejército el gobernador de Nuevo León Vidaurri acudió a las rentas del Estado por impuestos aduanales, a la de las exportaciones de plata y a los préstamos forzados o voluntarios de los comerciantes del área. También instaló puestos aduanales en el Río Bravo y un arancel especial para las importaciones. Durante la Guerra de Secesión en Estados Unidos (1860-1865), los empresarios de Monterrey y Matamoros, como Patricio Milmo, Luis Terrazas, Enrique C. Creel y Evaristo Madero, se beneficiaron del comercio de algodón a cambio de surtir al Ejército Confederado de alimentos, armas, animales y otros productos que venían de Europa. Para Cerrutti, otros factores que impulsaron el crecimiento de la región fueron: la línea del ferrocarril Central que unía a EU, Piedras Negras, Torreón, Tampico y Monterrey, y el desarrollo de la industria pesada, que permitió operar a las empresas Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey SA, la Cía. Industrial Jabonera de La Laguna SA, Cementos Hidalgo, y Vidriera de Monterrey SA, utilizando el gas como combustible y se vieron beneficiados por las leyes estatales. Los empresarios de la región en general no sufrieron grandes daños con la Revolución, pero sí se anticiparon a sus efectos. Fundaron un sindicato blanco para evitar la influencia de las organizaciones obreras nacionales que se construirían en el periodo posrevolucionario y fundaron la Confederación patronal mexicana (COPARMEX) en 1929. De acuerdo al autor, las empresas en Monterrey crecieron con las fusiones e integraciones, con sucursales en otras partes del país y agregando nuevos socios de otras familias. Cerutti afirma que, los conglomerados como Cemex; Vitro; Alfa, etc., en 1970 siguieron usando las mismas estrategias de las SA de 1895, redes familiares, entrelazamiento familiar y alianzas estratégicas para resolver la coyuntura de las fisuras del modelo económico de sustitución de importaciones y de la crisis del petróleo de 1974-1975.75
75
Cerutti, Mario. Op.cit. 2000.
52
Los estudios regionales analizados han aportado en este momento, sugerentes formas de abordar los análisis empresariales, en un periodo en el cual se cristalizaron comportamientos visibles más allá del periodo que nos ocupa. Casi todos ellos describen la región en donde se encuentran instaladas las empresas, la operación de las mismas, la conformación del grupo de propietarios en burguesía regional y nacional; así como las relaciones y conflictos entre el capital y el trabajo. Destacan por supuesto la importancia de las políticas económicas gubernamentales y de las leyes que les benefician. De ellos aprendemos que los empresarios de las diferentes regiones del país tienen un comportamiento similar al organizarse en redes familiares, diversificando sus inversiones siempre relacionados con los círculos del poder político. Sin embargo, las estrategias de los empresarios referidas a la organización empresarial muestran algunos faltantes, que pudieran ayudarnos a responder a algunas interrogantes por ejemplo: cuáles eran a sus prácticas religiosas, como se vincularon con las fuerzas armadas, cuáles fueron las características y extensión de la red de su negocios, como se vincularon y hasta donde con los intereses extranjeros.
Empresarios barcelonnettes Una vez efectuado el recuento de los legados historiográficos sobre la industria textil regional y nacional de México, se procederá a revisar el conjunto de aportes
destinados
a
analizar
el
comportamiento
de
los
empresarios
barcelonnettes, principales accionistas de CIDOSA. Dentro de los libros publicados en nuestro país sobre los barcelonnettes se encuentra el de Maurice Proal y Pierre Charpenel: Los barcelonnettes en México.76 Inicia con una descripción del proceso histórico de la fundación del Valle de Ubaye -de donde provenían estos empresarios- para explicar las razones del comportamiento social y el sistema de valores que poseían estos inmigrantes. 76
Este libro es una síntesis de la obra autobiográfica de Arnaud, Francois Charpenel, Anselme y Martín, León. “Les Barcelonnettes au Mexique recit er temolgnagnes”. Barcelonnette, Sabenca de la Valéla. 1891 y el libro Patrice Gouy, “Peregrinations des barcelonnettes au Mexique”, publicado por la Universitaries de Grenoble, en 1980.
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Posteriormente, expone las causas y el desarrollo de la migración a México. Finalmente detalla el comportamiento económico, político, social y cultural de estos empresarios en México, sobre todo durante su periodo de auge económico: 1880-1910. Esta obra es una descripción agradable, ilustrada, pero de contenido general. En el año 2001 y 2004 se publicaron respectivamente dos obras de corte literario: De Barcelonnette llegaron y De Barcelonnette llegaron: la generación mexicana, escritas por Marcelo Derbéz Amézquita. En ambas, el autor narra, mediante una historia de amor, la vida de alguno de sus antepasados que se estableció en México a finales del siglo XIX. A pesar de que el autor advierte que los hechos presentados en sus obras son ficticios, la lectura de estas novelas permite
identificar
patrones
de
comportamiento
de
estos
inmigrantes
documentados por otros autores, como la red de trabajo de paisanaje. Otros libros, artículos en revistas y electrónicos publicados en México y que hacen referencia a los empresarios barcelonnettes, son: Los franceses en México durante el Siglo XIX, de Jean Meyer; el libro México-Francia. Memoria de una sensibilidad común. Siglo XIX-XX, coordinado por Javier Pérez Siller y el artículo electrónico también de Pérez Siller La migración francesa de los siglos XIX y XX, una contribución a la modernidad”. Estas tres obras presentan semejanzas y diferencias. Semejanzas al definir el comportamiento de los empresarios barcelonnettes en México y diferencias en los elementos de análisis que utilizan para llegar a sus conclusiones. Las publicaciones mencionadas despertaron mi interés por estudiar a este grupo de empresarios y sirvieron de base para desarrollar la investigación de mi autoría: Los barcelonnettes en México. Un ejemplo de espíritu empresarial. 18211930. A través de este trabajo de investigación y siguiendo los supuestos de la Teoría de Inserción Social (Castañeda 2002) y la Teoría de Redes de los inmigrantes (Kyung Yoo, 1998) probé que las condiciones socioeconómicas de México durante 1820-1930, aunadas a la cultura empresarial de los barcelonnettes y los recursos de capital social que estos obtuvieron de la red que implementaron en México, constituyeron los factores que impulsaron su éxito y posterior declive 54
económico. Utilizando sólo fuentes secundarias, logré identificar -al igual que señala Gouy (1980)- que los barcelonnettes durante el periodo de 1881 a 1910 formaron en México dos grandes grupos económicos77: el integrado por los accionistas de CIDOSA y el integrado por los accionistas de CIVSA. Los miembros y las empresas que formaban el grupo empresarial de CIDOSA eran propietarios de 13 tiendas de comercio, 7 fábricas textiles y socios de 2 bancos y 4 sociedades financieras. Mientras que los socios de CIVSA eran de 12 tiendas, 9 fábricas. Otra obra sobre estos empresarios es la de Gonzalo Castañeda “The barcelonnettes: an example of Networrk entrepreneurs in XIX century México. An expanation basad on a theory of bounded rational Choice with Social embeddedness. En ella Castañeda demuestra mediante el uso de un modelo matemático -basado en la teoría de juegos y la teoría de la racionalidad limitada-, la existencia de un empresariado que al momento de tomar sus decisiones considera las normas sociales para aumentar sus ganancias. Otra obra que no ha sido publicada en México, es la de Emile Verdell, Les Barcelonnettes au Mexique: réussite et déclin. Coment interpréter la réussite et le déclindes Barcelonnettes par una approche manageriale? Verdell menciona que los motivos que le llevaron a elegir este tema fueron el querer trabajar con una problemática histórica, económica, comercial y de gestión. Aunque al principio se interesó por las empresas francesas en México, al estudiarlas descubrió el peso de los barcelonnettes en la economía mexicana. Si bien otros historiadores y miembros de la comunidad han estudiado a este grupo de inmigrantes, ninguno lo ha hecho desde la perspectiva de la gestión administrativa. Por ello se propone a través de las teorías de la contingencia, los clusters, redes empresariales y estrategia de la competitividad, identificar los factores y elementos que influyeron en el éxito y declive de los empresarios barcelonnettes.78
77
De acuerdo a Castañeda, los grupos económicos son redes de empresas relacionadas por vínculos familiares, étnicos o de amistad, que poseen una estructura autoritaria y centralizada con una jerarquía vertical, donde sólo los miembros de la familia, clan o grupo de control ocupan los puestos más altos, y donde sus empresas se integran vertical y horizontalmente para disminuir costos de transacción, aprovechar economías de escala y obtener ventajas monopólicas. Castañeda, Gonzalo. Fundamentos microsociales del comportamiento económico, las instituciones y su evolución. UDLA, 20002 Cholula, Puebla. México 78 Verdell, Emile, Op.cit. Juin 2005, pp 4-9.
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Identifica que factores externos como la independencia de México, las relaciones comerciales entre México y Francia, la intervención francesa, el gobierno de Porfirio Díaz, influyeron en el éxito económico de los barcelonnettes, y por otro lado la Revolución, la Primera Guerra Mundial (PGM), la política migratoria de México a partir de 1913 y la Gran Depresión, influyeron en su declive. Destaca que a pesar de los factores enunciados, el papel de los barcelonnettes no se puede reducir a simples empresarios que se adaptan o reaccionan pasivamente al ambiente, pues tuvieron la capacidad y libertad de elegir sus decisiones y de influir en el medio.79 Por la importancia que este trabajo tiene en la presente investigación, habremos de hacer una pausa para revisar su experiencia con la teoría de las redes y cluster.80 La teoría de las redes es utilizada para explicar el desarrollo y evolución de las tiendas comerciales “El Palacio de Hierro”, “Liverpool” y las fábricas textiles CIDOSA y CIVSA. La teoría de los cluster la desarrolla con el objetivo de responder a preguntas tales como: ¿el cluster, considerado una forma de organización, favorece realmente a la competitividad de las empresas que forman parte de él? Para el caso de los barcelonnettes Verdell señala que estos se beneficiaron de los clusters, al obtener capital de bancos de su propiedad, préstamos de la red a la que pertenecían y capitales europeos, principalmente de Francia, así como mano de obra calificada (jóvenes educados en escuelas técnicas del Valle de Ubaye), escasos en México. Pero también les trajo desventajas: el no permitir la innovación que les exige la competencia y al terminarse el flujo migratorio del Valle, ya no contar con más capital ni mano de obra.81 79
Ídem, pp. 11-23. Verdell (:42), utiliza las nociones de Michael Porter sobre las redes y los cluster. Este autor define a las redes sociales como el conjunto recurrente de asociaciones entre grupos de individuos vinculados por lazos ocupacionales, familiares, culturales y afectivos, que contienen generalizaciones morales, creencias sobre el comportamiento o metanormas de confianza social que permiten que el comportamiento de sus miembros sea predecible. Los clusters son “concentraciones geográficas de empresas interconectadas, proveedores especializados, proveedores de servicios, empresas de sectores afiliados e instituciones conexas en competencia, pero cooperando al mismo tiempo. Los cluster se integran para facilitar el proceso de producción o de venta, y pueden ser horizontales cuando se forman por empresas que realizan la misma actividad; verticales cuando se integran procesos de la cadena de producción, y laterales cuando las empresas similares pertenecientes al sector son capaces de realizar juntas sinergias. 81 Ídem., pp.44-49. 80
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Finaliza con el análisis a través de la teoría de la competitividad. Esta teoría señala que una empresa está dotada con recursos y competencias82 que le permiten elaborar una estrategia para permanecer en su mercado. En el caso de los barcelonnettes, al iniciar con las fábricas textiles no contaban con experiencia y conocimientos en procesos industriales, hubieron de construirlos al expandir sus intereses con la adquisición de fábricas que ya estaban operando. Los autores hasta aquí citados coinciden en que los barcelonnettes en México, entre 1881 y 1910, constituyeron una colonia de inmigrantes cerrada, que mantenía su cohesión basándose en la creación de sus propias instituciones y organizaciones económicas (fábricas textiles, bancos, comercios), sociales y culturales (Sociedad de Beneficencia, Casino Francés, Parroquia Francesa de Nuestra Señora de Lourdes, etc.), en las que sólo participaban familiares, amigos u otros inmigrantes provenientes del Valle. Estas mismas instituciones, junto con el sistema de valores desarrollado desde la fundación del Valle, permitieron a estos inmigrantes obtener ventajas monopólicas y cuantiosas ganancias económicas. Otras obras más recientes que también han contribuido a esclarecer el intrincado mundo de los negocios y de las cuales hemos obtenido sugerentes puntos de vista son las obras de Leticia Gamboa, Jean Louis De Anglade y Patricia Martínez Gutiérrez a ellas me voy a referir sucintamente. El libro de Leticia Gamboa: “Au delà de l’océan. Les barclonnettes à Puebla. 1845-1928. Desmitifica la idea de que los barcelonnettes fundaron una colonia cerrada, al menos en la ciudad de Puebla para ello utiliza fuentes documentales francesas además de los fondos que ella ya había consultado para sus obras anteriores. Analiza las redes sociales, particularidades, familias, estrategias como empresarios y el comportamiento humano y social de la colonia barcelonnette en la región de Puebla, de 1840 a 1930.
82
Los recursos que posee una empresa pueden ser tangibles como el capital financiero, la inversión en maquinaría etc., e intangibles como las capacidades de sus recursos humanos, su reputación en el mercado, su cultura organizacional, etc. La competencia es algo que hace bien la empresa por encima de sus competidores. Ídem.
57
Gamboa estudia la migración de los barcelonnettes desde el lugar al que arriba y no sólo del que lo expulsa, como es el caso de la mayoría de los estudios de migración. Además cuenta la historia económica y social de estos inmigrantes, aplicando las dicotomías de migración individual (el caso de Joseph Couttolenc) contra colectiva, solitaria o en cadena, dirigida u organizada contra libre o espontánea, selectiva contra indiferente, temporal y definitiva.83 El libro más reciente sobre los empresarios barcelonnettes es el de Jean Louis De Anglade, Un gran patron barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille. Esta publicación es una historia de familia que utiliza archivos personales y testimonios de la Familia Ollivier (los hermanos José y Mario Ollivier, el sobrino Sebastián Robert, los hijos Luisa Maquet, Jacqueline Campio-Moenneclaer y Luis Ollivier), León Signoret, Genevieve Berau Suberville y Mauricio Proal. También utiliza archivos de México y Francia, como el Archivo General de Notarías de Distrito Federal, el Registro civil, Archivo Notarial de París, el Archivo Departamental de Los Alpes, Archivo de La Legión de Honor, entre otros. En palabras de Leticia Gamboa- “un aporte importante para quienes realizan historia compartida entre México y Francia”.84 Otra obra que recientemente se publicó es la tesis de maestría de Patricia Martínez Gutiérrez: El Palacio de Hierro, arranque de la modernidad arquitectónica de la ciudad de México. En este texto se utilizan documentos del archivo de El Palacio de Hierro SA y de otros archivos para analizar, desde una perspectiva de historia del arte, “el impacto que el edificio del Palacio de Hierro representó en la concepción urbana y arquitectónica de la ciudad de México”.85 Los libros y artículos sobre los empresarios barcelonnettes que han sido enumerados en los párrafos anteriores son en su mayoría estudios monográficos y descriptivos. Están basados en la historia del comportamiento socioeconómico de algunos barcelonnettes (familia Lions, Reynaud, Tron, Ollivier, Signoret, Ebrad, Garcín, etc.), que no representaban el comportamiento generalizado de estos inmigrantes en México, pero que sí figuraban como socios o propietarios de las 83
Gamboa, Leticia. Op.cit. 2004, pp.13-17. De Anglade, Jean-Louis. Op.cit, 2006, pp. 11. 85 Martínez Gutiérrez, Patricia. Op.cit. 2005, p.19. 84
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empresas de mayor peso en economía nacional y regional de fines del siglo XIX y principios del XX: las tiendas comerciales “El Palacio de Hierro”, “Fábricas de Francia”, “Liverpool”, compañías textiles como CIDOSA, CIVSA, Compañía Industrial de Atlixco, Cía. Industrial Manufacturera, Cía. Industrial de Guadalajara, Cía. Industrial de San Idelfonso y bancos como Banamex, Banco de Londres y México, entre otros. Concluido el análisis historiográfico -nacional y regional-, sobre las empresas y empresarios textiles en México, así como de los empresarios barcelonnettes, es importante enfatizar las teorías explícitamente empleadas por nuestros autores, con la finalidad de apreciar sus alcances y debilidades en la interpretación de fenómenos históricos complejos, como son las estrategias y las redes de expansión empresarial.
Consideraciones teóricas La importancia de la industrialización capitalista ha sido destacada históricamente. Dos casos emblemáticos en la historiografía occidental han sido referentes de la mayor parte de los estudios realizados en México y América Latina. Estos son el Reino Unido y los Estados Unidos de Norteamérica. Uno por su papel pionero en el desarrollo del capitalismo y otro por las innovaciones empleadas en los procesos productivos. En ambos casos el estudio de las estrategias
utilizadas
por
los
empresarios,
el
entorno
institucional
y
gubernamental, han sido acuciosamente analizadas. Como se ha podido apreciar en el conjunto de autores revisados anteriormente, algunos de ellos implícitamente tuvieron presentes los casos emblemáticos de la industrialización antes aludidos, sobre todo para ubicar el conjunto de factores que incidieron en el proceso de industrialización (Haber, Bernecker, Keremitsis, Coastworth, Marichal, Cerrutti, Romero, Ramírez, etc.). Otros más eligieron la ruta promisoria del análisis regional, analizando a profundidad
casos concretos de empresas y empresarios,
los factores
institucionales y su papel en la industrialización (Cerutti, Gamboa, Gómez59
Galvarriato, Gutiérrez, García, Olveda, Arias, Romero, Beato, Valerio, Alonso, Trujillo, etc.). Ello nos ha permitido tener acceso a una serie de estudios novedosos que emplearon explícitamente nociones teóricas que hasta entonces no habían sido utilizados en los análisis historiográficos. Por la importancia que para esta investigación tienen los análisis regionales entorno a las empresas y los empresarios, destacare en enseguida las teorías en ellos empleadas. En ese conjunto, es posible identificar dos principales corrientes teóricas. La primera, denominada el “paradigma” de Chandler, que consiste en el análisis histórico de la evolución de la estrategia y estructura de las grandes corporaciones, haciendo especial énfasis en la organización compleja de administración de las grandes empresas (Gómez-Galvarriato). La segunda teoría desarrollada por Douglas North, centra la explicación del proceso empresarial en el desarrollo del marco institucional de la economía, en especial los condicionantes de las normas políticas, legales y conductuales en el desempeño económico (Gómez Galvarriato, Coastworth, etc.). Adicionalmente y de manera implícita, otros autores utilizan la teoría de los costos de transacción, expuesta principalmente por Ronald Coase y Oliver Williamson. Esta teoría explica el funcionamiento de las empresas y su relación con la economía a nivel de los mercados y su dinámica. Sin embargo el uso de esta explicación teórica se combina con la teoría de redes para comprender el comportamiento de los grupos de empresarios analizados (Ramírez, Romero Ibarra, Alonso, Gutiérrez, Gamboa, etc.). Las sugerentes propuestas teóricas disponibles, si bien nos han dotado de conceptos y ángulos de mirada importantes, ante el análisis de experiencias concretas se perciben vacíos difíciles de llenar. La conjunción de elementos administrativos, económicos, histórico, regionales, políticos, sociales y culturales-, vinculados a las experiencias empresariales que tuvieron lugar en México, durante los años 1889 a 1930, muestra claramente su incomplitud. Por ello enseguida se realiza una exposición sucinta de los autores y las teorías que fueron empleadas en la presente investigación.
60
Alfred Chandler señala en su obra La mano visible: la revolución en la dirección de la empresa norteamericana, que antes del siglo XIX sólo existían empresas que se ocupaban de una única función económica como comercializar una línea de producto; en una unidad operativa como taller, fábrica, banco o en un área geográfica limitada y cuyas actividades eran coordinadas y controladas por los mecanismos del mercado y precios. Estas empresas eran propiedad de una familia y sus miembros cercanos, los cuales mantenían una relación estrecha con sus directivos y un papel fundamental en las decisiones administrativas del negocio. Funcionaba en un sistema de capitalismo patronal o familiar. Posteriormente, con el surgimiento de las instituciones bancarias, se separó la dirección de las empresas de su propiedad y se desarrolló el sistema de capitalismo financiero. En éste los inversionistas influían en las decisiones de las empresas, de acuerdo a la participación que tuvieran en el consejo de administración de las mismas. Sin embargo, fue a partir del nacimiento del ferrocarril (1840) que se desarrolló el sistema de capitalismo gerencial y las denominadas “empresas modernas”.86 Para el autor, el capitalismo gerencial se identifica cuando la propiedad de las empresas se encuentra dispersa entre numerosos accionistas que no poseen el conocimiento, experiencia, influencia y voluntad para tomar parte de la alta dirección, por lo cual los directivos, profesionales capacitados para administrar una empresa, toman el control de la misma. Estas poseen dos características específicas: constan de muchas unidades operativas y son dirigidas y controladas por una jerarquía de ejecutivos asalariados de tiempo completo, que rinden cuenta a numerosos accionistas que ya no forman parte del organismo regulador de la empresa. Estos negocios cuentan con diferentes unidades operativas, lo cual las convierte en organizaciones multiunitarias, donde sus empleados coordinan y controlan las actividades productivas y de distribución y en donde cada unidad teóricamente puede funcionar como una empresa independiente. 87 La empresa
86 87
Chandler, Op.cit, 1987, pp. 16-28. Ídem
61
multiunitaria reemplazó a la pequeña empresa tradicional; cuando la coordinación administrativa disminuyó los costos de operación y aumentó la productividad, que se tradujo en un incremento sustancial de las ganancias. Esto impulsó la creación de nuevas empresas que lograron controlar sectores fundamentales y aumentar su poderío en la economía en general. Para Chandler, algunos profesionales se han preocupado más por estudiar la continuidad del capitalismo familiar y financiero que por el capitalismo gerencial, siendo que es este último el que verdaderamente controla a las empresas y, por ende, a la economía, ya que aunque las empresas modernas no han sustituido al mercado como fuerza principal en la producción de bienes y servicios, sí lo han reemplazado en la coordinación e integración del flujo de los servicios y mercancías, al crear grandes empresas integradas que realizan desde la obtención de materia prima, pasando por los diferentes procesos de transformación, hasta la venta al consumidor final.88 La decisión de integrar a la estructura de la empresa las actividades de obtención de materias primas y distribución-venta del producto final, se explica por la disminución de costos que la coordinación administrativa genera respecto a los mecanismos de mercado. Es decir, por la explicación teórica y conceptual que ofrece la teoría de los costos de transacción de Ronald Coase (1937, 1988) y Olliver Williamson (1989). Los costos de transacción refieren “los costos de la administración del sistema económico”. Los más comunes son los costos de información, costos de negociar, costo de hacer cumplir los contratos o el riesgo de un comportamiento oportunista post-contractual y el costo de control y supervisión de la empresa. El propósito principal y el efecto de las instituciones económicas del capitalismo (incluyendo la empresa) es el de reducir los costos de transacción. Por ello, cuando el internalizar alguna etapa del proceso productivo signifique menores costos que efectuarla en el mercado, la empresa optará por integrarla selectivamente, hacia atrás (obtención de materiales), lateralmente (fabricación de componentes) o hacia delante (distribución y venta al consumidor final del producto). El grado de integración de la empresa dependerá de los beneficios 88
Ídem, p.26.
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obtenidos no por los costos de producción de la empresa, sino por los ahorros de los costos de transacción que se generen con la integración.89 El ahorro de costos de transacción por internalizar las actividades de producción y distribución en las empresas se hicieron efectivas al crearse una jerarquía administrativa. Los directores no sólo coordinaron a los mandos medios, sino que inventaron nuevos métodos operativos para asignar recursos a la producción y distribución de mercancías, planeando la producción futura y controlando la producción actual.90 Algunos de los métodos para controlar eficientemente la producción fueron el taylorismo y el fordismo. El taylorismo corresponde a las primeras teorías administrativas (18901910) diseñadas por ingenieros para acrecentar los beneficios de las empresas mediante la racionalización o estandarización de los procesos productivos, la extensión del ritmo de trabajo y la introducción de maquinaria, con el fin de disminuir el costo de la producción. El gran logro del taylorismo fue despojar al obrero de su conocimiento del oficio y del control de los modos operatorios individuales, para instalar en su lugar la ley y normas patronales. Primero se dividieron las tareas en actividades para permitir que los obreros no calificados (que no sabían el oficio) ingresaran al taller. Después se instauró el movimiento “open shop” (1903), que ingresó obreros no sindicalizados. Esto debilitó la organización económica y política de los sindicatos y terminó por prevalecer una mano de obra sin oficio, no organizada, que no contaba con instrumentos políticos para defender sus derechos contra el capital. El tercer paso fue eliminar los tiempos muertos entre las actividades y, con ello, controlar el ritmo de trabajo del obrero de un “sistema de holgazanería”-según palabras de Taylor- a un sistema productivo eficaz, regido por la lógica del cronómetro. Así, el capital ganaba más al: 1) Transformar las condiciones del ejercicio de trabajo. 2) Cambiar la composición de la clase obrera requerida. 3) Alargar la duración de la jornada de trabajo, aumentando la explotación.91
89
Williamson, Olivier. Las Instituciones económicas del capitalismo. México, FCE, 1989, pp.29-167. Chandler, Op.cit. 1987, pp. 26. 91 Coriat, Benjamín. El taller y el cronómetro. Ensayo sobre el taylorismo, el fordismo y la producción en masa. Siglo XXI, México, 1982, pp. 23-37. 90
63
El fordismo (1910-1920) fue más allá del taylorismo, al controlar no sólo los tiempos y movimientos del trabajador, sino también determinar la cadencia o velocidad del trabajo. Lo hizo de manera totalmente mecánica y externa al obrero mediante la línea de montaje y la velocidad que se le dio a ésta. Henri Ford estableció una línea o cadena de montaje que servía de transportador de piezas, las cuales pasaban delante del obrero para que estos fijaran pieza por pieza hasta que al final del transportador, el producto quedara totalmente armado. Empero, las verdaderas dificultades que retrasaron la introducción de la línea de producción no se presentaron en el montaje, sino en el mecanizado. Para que todas las piezas pudieran ser fijadas, unas tras otras, en el transportador era preciso que fuesen rigurosamente idénticas e intercambiables. En pocas palabras, era necesario que la producción de piezas y el mecanizado fueran estandarizados. Además del mecanizado al montaje se suscitó el perfeccionamiento del transportador de cintas y de cadena, de las grúas de puente, las máquinas especializadas, las redes aéreas de herramientas, y de la fábrica racionalizada.92 Posterior a estos sistemas de fabricación, y a partir del auge de la producción en masa (1940-1980), se han desarrollado teorías administrativas que centran su atención en una visión psico-sociológicas de las relaciones humanas (Elton Mayo) y en una visión cultural (Barnard), las cuales definen a los trabajadores como seres humanos con sentimientos y valores, y la fábrica como un sistema social en equilibrio, donde se fomente la cohesión, la cooperación y la solidaridad. Es decir, la creación de redes sociales.93 Existen numerosos autores que han desarrollado la teoría de redes. Para fines de esta investigación se utilizarán los aportes de Portes, Casson, Boltansky y Chiapello. Portes indica que las redes sociales son el conjunto recurrente de asociaciones entre grupos de individuos vinculados por lazos ocupacionales, familiares, culturales y afectivos, que contienen generalizaciones morales, creencias sobre el comportamiento o metanormas de confianza social que permiten que el comportamiento de sus miembros sea predecible. Al compartir 92
Ídem, pp. 41y 42. Chanlat, Jean F. Ciencias sociales y administración. En defensa de una antropología general. Tr. Luz Elena Arango. Fondo editorial Universidad EAFIT, Colombia, Mayo, 2002, pp.35-51 93
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normas sobre el actuar de los miembros, ayuda a determinar lo que es socialmente aceptado y lo que es incorrecto, y la sanción que se recibe por ello.94 Entonces, gracias a este sistema de normas y sanciones, las redes sociales se vuelven un recurso económico que permite a sus miembros realizar intercambios en el mercado con bajos costos de transacción (por menores o casi nulos costos de monitoreo para detectar comportamientos oportunistas) y, por lo tanto, motivar la asociación de individuos y empresas. Casson señala que las asociaciones de empresas o de negocios, son redes cuyos miembros comparten total o parcialmente su interés por los negocios. Surgen de la formalización de los clubes y asociaciones que generan ganancias a sus miembros. Se pueden formar por personas (red interpersonal) o por compañías (red inter-institucional), que se encuentran localizadas en una región particular (redes regionales), o en lugares geográficos lejanos (red interregional), y en ocasiones se especializan en procesar información (redes metropolitanas). Todas las redes de negocios buscan promover la coordinación y los lazos de confianza, a través de flujos de información, flujos de producción y flujos de factores productivos que disminuyan los costos de transacción y permitan la integración vertical de las empresas. Estas redes se definen por la confianza, que es garantía mutua de cumplir con ciertos acuerdos. La eficacia de la red –señala el autor- depende de las sanciones morales y sociales (exclusión de otras transacciones, pérdida de reputación) que emplee para que sus miembros no traicionen la confianza del grupo (es decir, incumplan convenios) y con esto se eleven los costos de transacción.95 Boltansky y Chiapello revelan que todos los seres humanos tienen la necesidad de conexión (de contacto con otros). Ésta es la razón por la cual pueden insertarse en redes. Por otro lado, el individuo desea profundamente libertad, autonomía e independencia, pero también tiene una profunda convicción de que la vida no tiene sentido más que cuando es compartida con otros. Por eso,
94
Portes, Alejandro. The economiic sociology of inmigratios. Essays on Networks, Ethinicity and entrepreneurship. Rusell Sage Foundation, 1995, p.8 95 Casson Mark. Enterprise and leadership: studies on firms, markets and networks. Cheltenham Edward Elgar, 2000.
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la forma más natural para cumplir ambos propósitos es la red. Las redes han existido desde siempre. Son organizaciones primitivas y universales: la familia, los amigos, los compañeros del colegio, los miembros de organizaciones religiosas, etc. En la empresa anteriormente la red eran grupos informales en contra de la organización oficial, pero actualmente ya no se utiliza este enfoque. Ahora se considera la gestión empresarial en red como algo benéfico para el desarrollo de una empresa.96 Para ambos autores, el concepto de red empresarial se ha tratado en las ciencias humanas a través de tres líneas: la de la comunicación (Habermas, Bateson y Watzlawick), la complejidad (Dupuy, Edgar Morin) y la del caos y autoorganización (Prigogine, Stengers, Atlan, Heisenber, Hofstadter y Varela). Anteriormente el concepto de red se usaba como peyorativo (mafia), sin transparencia interna y externa, con relaciones secretas que beneficiaban a unos cuantos en detrimento del bien público. Sin embargo, en la actualidad la red en los libros de gestión empresarial ya no hace referencia a un clan cerrado y exclusivo con sistema de enchufe, sino a un sistema unificador de agentes de diferentes servicios, con centros de interés común.97 Para Boltanski y Chiapello, el desarrollo del capitalismo se explica por sus espíritus. El primer espíritu del capitalismo encomiaba una moral del ahorro. El segundo, una moral de trabajo y competencia. El nuevo espíritu del capitalismo, un cambio en la relación con el dinero y el trabajo. De 1800-1930, el ahorro constituía la principal vía de acceso al mundo del capital y el instrumento más importante para la promoción social. La estabilidad y la restricción eran a preciadas por las empresas. Sin embargo, en el mundo del tercer espíritu, el mundo en red, el tiempo es el recurso escaso e invertirlo en relaciones que generen dinero es lo ideal.98 La red supone la capacidad para establecer y estabilizar relaciones de interdependencia y de confianza a largo plazo. La confianza es el argumento estelar de los defensores de la red. Otra ventaja es que con la red se tiene la 96
Boltansky y Chiapello. El nuevo espíritu del capitalismo. Akal, Madrid, España, 2002, pp 185-187. . Idem, 228-229. 98 Idem, pp.230 97
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posibilidad de compartir información precisa entre sus miembros. Además se limita la búsqueda de ganancias puramente egoístas. En la red las conexiones son útiles y enriquecedoras cuando tienen la capacidad de modificar a los seres que entran en la relación. Es intercambiando información como la conexión modifica a los individuos que entran en relación. La relación modifica la información que cada uno de los colaboradores tiene del otro, pudiendo cambiar la representación que uno tiene del otro. A este proceso evolutivo se hace referencia cuando se habla de ganar o perder la confianza de alguien, lo cual abre o cierra el acceso a recursos (bienes, servicios, créditos, reputaciones). En un mundo interconectado, los productos no son diferenciados de las personas. Nadie sabe de golpe lo que puede ganar o perder en la relación. Por eso la flexibilidad, capacidad para aprender y adaptarse a situaciones cambiantes, se convierten en las cualidades más importantes que deben poseer los individuos y las empresas para generar ganancias económicas.99 Como se ha podido apreciar todas estas teorías enfatizan algunos de los aspectos relacionados con el funcionamiento de las empresas, las organizaciones empresariales y sus alcances en el desarrollo industrial. Por eso serán empleadas para el análisis que me propongo realizar en torno a la Compañía Industrial de Orizaba S.A. Habida en cuenta ninguna de ellas por sí sola es capaz de lograr una explicación del conjunto.
Miradas Nacionales ......................................................................................................... 12 Miradas Regionales ......................................................................................................... 27 Empresarios barcelonnettes ............................................................................................. 53 Consideraciones teóricas ................................................................................................. 59
99
Ídem, pp.193
67
Capítulo 2: Importancia de una red. Siguiendo el ejemplo de Inglaterra, México apostó por industrializarse para alcanzar el desarrollo económico. Para ello, el gobierno de Porfirio Díaz creó estructuras institucionales y legales que fomentaban la integración de mercados regionales y la creación de sociedades económicas, tales como: a) El Código de Minería, formulado en 1892, que permitía a los particulares ser dueños de los recursos naturales de la Nación, y que incrementó las inversiones de los ingleses en las minas y de los norteamericanos en el petróleo. b) La Ley de Terrenos Baldíos (1894), en la que al declararse baldío un terreno, podía adquirirse sólo deslindando. Además se eliminaba el límite para la adquisición de tierras por parte de particulares, sin la obligación de cultivarlas. Esto contribuyó al acaparamiento de la propiedad agraria en manos de los grandes terratenientes.100 c) El Código de Comercio (expedido en 1884 y reformado en 1889) autorizó las sociedades anónimas por acciones, y permitió la creación de empresas de mayor tamaño que requerían de mayor inversión, como las siderúrgicas. d) La Ley del Timbre (1893), que imponía un impuesto indirecto al consumo y eliminó las alcabalas y aduanas internas (1896), para contribuir a la integración de mercados regionales y a una mayor circulación de mercancías. e) La Ley General de Instituciones de Crédito (1897), que permitió al gobierno otorgar concesiones para el establecimiento de bancos en el país, regular el funcionamiento de ya existentes e impulsar el desarrollo del sistema financiero del país. f) La Secretaría de Obras Públicas y Comunicaciones, fundada en 1891 como encargada del control y fomento de puertos, puentes, caminos, líneas de navegación, vías fluviales, etcétera. 100
Rosenzweig, Fernando. “La evolución económica de México 1870-1940” en El Trimestre Económico, No.221 Ene-Marzo, 1989, pp.11-56.
68
g) La Secretaría de Fomento, la cual a partir de 1891 se encargaría de fomentar la industria a través de ferias, exposiciones, obtención de estadísticas y registro de patentes.101
El gobierno porfirista también decidió aplicar una política proteccionista, primeramente para aumentar los ingresos del Estado y después para proteger la industria local, principalmente de textiles y alimentos elaborados. Durante la década de 1880 los aranceles a las importaciones de algunos bienes de consumo que aplicaba el gobierno de México aumentaron hasta convertirse casi en los más altos del mundo, sólo superados por Rusia y Brasil, y por el contrario los aranceles a la importación de maquinaria, materia prima e insumos productivos (como químicos) que necesitaban las fábricas para operar, disminuyeron o fueron eliminados de la legislación, con el fin de fomentar el crecimiento de la industria nacional.102 Igualmente con el fin de incrementar la inversión industrial, el gobierno disminuyó los impuestos a las grandes empresas, exentó a las nuevas industrias, con capital mayor de $250,000, del pago de impuestos directos y derechos aduanales sobre maquinaria y otros materiales necesarios para la construcción de sus fábricas, obsequió terrenos y materiales gratis. Además, otorgó concesiones por 99 años o más en los ferrocarriles, minas y otras industrias extractivas. Todas estas facilidades y privilegios atrajeron a la inversión extranjera a la industria mexicana, lo cual era una de las estrategias del general Díaz para lograr los objetivos de crecimiento económico planteados. Los extranjeros que más invirtieron en estas empresas durante el Porfiriato fueron los de origen norteamericano (38.2%), inglés (29.2%) y francés (26.7%).103 Los estadounidenses invirtieron principalmente en minas y ferrocarriles. Los ingleses en minería, agricultura para la exportación y ferrocarriles. Y los franceses en el comercio, bancos, industria y deuda pública. Entre estos empresarios galos, 101
Connolly, Priscila. “S. Pearson & Son: contratista de obras públicas” en Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Op.cit, 1997, pp.107-135. 102 Herrera Canales, Inés. “XV. La circulación (comercio y transporte en México entre los años 1880-1910)” en Cardoso, Ciro (Coordinador). Op.cit, 1980, p.456. 103 Ídem.
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se encontraron los provenientes del pueblo de Barcelonnette, ubicado en el Valle de Ubaye, en los bajos Alpes franceses (ver Mapa 1), los cuales fueron identificados con el nombre de "barcelonnettes”. Los barcelonnettes lograron figurar como uno de los grupos extranjeros con mayor riqueza y poderío en el México de la postrimería del siglo XIX. Fueron propietarios y/o socios de negocios: Liverpool, Fábricas de Francia, El Palacio de Hierro, Compañía Industrial de Orizaba SA, Compañía Industrial Veracruzana SA, Fábrica de San Idelfonso, Cía. Industrial de Atlixco, Cigarrera El Buen Tono, Fábrica de Papel San Rafael, Banco Nacional de México, y Banco de Londres y México -entre otros-. Con estos negocios consiguieron un poder monopólico en el comercio de textiles (1870). Controlaban más de la mitad de la producción de telas nacionales (1890) y poseían, con otros inversionistas franceses, dos tercios del capital bancario del país (1910).104 En este capítulo he puesto atención en conocer: ¿cómo se comportaron los empresarios barcelonnettes en México105? ¿Cuáles negocios poseían y dónde los establecieron? ¿Quiénes fueron los empresarios que invirtieron en la “Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA)? ¿Qué los motivó a crear esta compañía? Y, particularmente, ¿cómo se organizaron para hacer frente a las condiciones político-socio- económicas del país? Para
dar
respuesta
a
estas
interrogantes,
se
analiza
primero
el
comportamiento de comerciantes barcelonnettes en general. Después la historia de las empresas y los empresarios que constituyeron CIDOSA y, finalmente, las redes de negocios de las que formaron parte de 1889-1910. Al contar la historia de estos empresarios y describir las estructuras organizacionales que seleccionaron para hacer frente al entorno sociopolítico y 104
Pérez Siller, Javier (Coor). México-Francia. Memoria de una sensibilidad común. Siglo XIX-XX. Ed. BUAP, El Colegio de San Luis A.C. y el Centro Francés de estudios mexicanos y centroamericanos. México, Octubre 1998. 105 Cabe señalar que en esta investigación sólo se describirá y analizará el comportamiento socioeconómico que adoptaron algunos de los empresarios barcelonnette socios de CIDOSA en México en el periodo de 18891930. Para conocer más sobre el comportamiento de los inmigrantes barcelonnettes, en general, se recomienda consultar Arnaud, Francois Charpenel, Anselme y Martín, León. Les Barcelonnetttes au Mexique recit er temolgnagnes. Barcelonnette, Sabenca de la Valéla. 1891, Gouy, Patrice. Peregrinations des barcelonnettes au Mexique. Grenobre, Press. Universitaries de Grenoble, 1980 y Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Los Barcelonnettes en México. Clío. México, 1998.
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económico bajo los cuales operó la compañía, pretendo demostrar, que amén de los apoyos a la industrialización de la época ofrecidos por el Estado, lo que condujo a su éxito económico fue la construcción de redes de negocios creadas por sus propietarios en un medio complicado e incierto.
Mapa 1. . Valle de Ubaye, Francia.
Fuente: uk.alpes-haute-provence.com/geographie/213.htm
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Comerciantes Los barcelonnettes lograron figurar como uno de los grupos extranjeros con mayor riqueza y poderío en el México de finales del siglo XIX. Sus conocimientos empresariales en la producción y venta de telas, su cultura de trabajo, frugalidad y lazos solidarios, así como su red de negocios, les permitieron alcanzar altos rendimientos económicos en diferentes sectores de la economía mexicana. De acuerdo a Pérez Siller, la migración francesa del siglo XIX se debió a las condiciones internas de Francia (las guerras napoleónicas, las revoluciones de 1830 y 1848, el expansionismo de Luis Napoleón Bonaparte (1850-1870), la guerra franco-prusiana de 1870-1871 y la política colonialista de la Tercera República) y a las concesiones (terrenos gratuitos, excepción de impuestos, etc.) que algunos países como México les otorgaban a los extranjeros de origen latino. Aunado a estas circunstancias, otro factor que incrementó la migración de barcelonnettes a México fue la caída en las ventas de las sederías y talleres de hilados, ya que debido a que las telas que producían sus pequeñas fábricas eran de baja calidad y burda confección, no podían competir con las telas delgadas y lujosas mayormente comercializables de las fábricas textiles de Inglaterra.106 Los pocos ingresos que generaban los talleres de hilados provocaron el cierre de varios de ellos, como la sedería en Jausier, propiedad de Francois Arnaud, quien decide terminar con el negocio y emigrar a México para convertirse en el proveedor del Ejército estadounidense, con la intención de obtener mayores ingresos. Al llegar a la Ciudad de México funda la tienda de ropa y novedades “Las Siete Puertas”.107 Los primeros negocios en México propiedad de los barcelonnettes fueron en su mayoría tiendas que comercializaban telas, ropa y novedades provenientes de Francia. Estas tiendas no eran lujosas, tenían un solo cuarto, sin vitrinas y divididas en dos por un mostrador. Contaban una insignia en una manta colgada
106
Pérez Siller, Javier. La migración francesa de los siglos XIX y XX una contribución a la modernidad. Octubre, 1999 (www.cultura.df.gob.mx/babel/fran/Siller.htm). 107 Arnaud, Francois Charpenel, Anselme y Martín, León. Op.cit. 1891.
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sobre un cuadro de madera, y abajo de 3, 5, o 6 grandes letreros de abierto, sus ventas eran al detalle, a precios bajos y dirigidos a todas las clases sociales del país.108 En estas tiendas sólo se contrataba a familiares, amigos y/o compatriotas, con quienes se compartía una identidad de paisanaje109 y en quienes se confiaba totalmente. De acuerdo a Arnaud, en las tiendas de ropa de los barcelonnettes “en la noche se juntaba el dinero en la gaveta para entregarlo al patrón o al cajero, si es que había uno. No se llevaba un control, ni se anotaban las ventas diarias en un cuaderno. Había una confianza total, que rara vez, muy rara vez era traicionada”.110 La mayoría de los empleados eran apadrinados. Es decir, algún empresario les pagaba su boleto a México, a cambio de que trabajaran para él. Estos trabajadores debían esforzarse mucho, aguantar malos tratos, ser sumisos y leales con el empresario que los contrataba. Incluso solidarizarse con disminución de sus salarios en épocas malas para la empresa, porque debían pagar la deuda del boleto y someterse a las reglas. De lo contrario serían despedidos y se les prohibía volver a instalarse en otro comercio barcelonnette.111 Otra práctica común entre los dueños de negocios barcelonnettes en México era permitir y contribuir a la movilización social y económica de otros compatriotas, así como facilitar el flujo de información relevante. De acuerdo a Arnaud, los empresarios del Valle de Ubaye no obstaculizaron el desarrollo de otros miembros de su clan. Al contrario, les otorgaron empleos, financiamiento en inventarios y en capital para que fundaran su propia empresa. A la larga esto contribuía a expandir los vínculos laborales y de negocios entre miembros de la colonia. Por ejemplo, la tienda de telas y novedades "El Cajón de Ropa de las Siete Puertas", fundada en 1821, en la Ciudad de México, por los hermanos Arnuad, contrató en 1830 a Eugene Caire, Alphonse Jauffres y Tessier, quienes con los ahorros obtenidos por su trabajo y asociándose con Gabriel Derbéz fundaron en 1838 también en el 108
Ídem. Desde inicios de la creación del Valle de Ubaye, los barcelonnettes desarrollaron una identidad colectiva que los ayudaba hacer frente a las adversidades naturales, económicas, políticas y religiosas. La gente del Valle vivía en un espacio y bajo reglas de solidaridad determinadas que señalaba que la importancia de ser barcelonnette era: I) Hacer de pocos recursos económicos, empresas competitivas. II) constituirse en un grupo estable que compartiera principios de confianza, solidaridad, esfuerzo, dedicación y lealtad (Gouy, Patrice. Op.cit, 1980.) 110 Arnaud, Op.cit. 1891. 111 .Gouy, Op.cit.,1980 109
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Distrito Federal la tienda de ropa “El portal de las Flores”. En ésta, a su vez, otorgaron trabajo a otros coterráneos que continuaron migrando y cumpliendo el proceso de trabajo, ahorro y asociación para crear más empresas. Otro ejemplo es la tienda de Fábricas Universales, en Puebla, fundada en 1903 por Juan Pedro Chaix, que recibía créditos con mayores plazos, grandes descuentos en mercancías de su casa matriz en la Ciudad de México y, a la vez, les aseguraba a los socios de la matriz la expansión de las ventas hacia los estados del Puebla y Tlaxcala112. A pesar de estas medidas de cooperación, también existía un sistema de sanciones y recompensas, el cual estipulaba –entre algunas cosas- que ningún comerciante del Valle tenía el derecho de aprovisionarse fuera de los círculos comerciales barcelonnette, pero a cambio recibía de sus paisanos buenas facilidades de pago y ayuda para la ampliación o creación de nuevas empresas.113 Bajo estas estrategias de negocios y laborales -comunes entre grupos de inmigrantes- los comerciantes barcelonnette lograron establecer en 1864, 18 tiendas de novedades en la Ciudad de México y 25 en la provincia; en 1890 un total de 110 en todo el país y en 1910 eran 214 114. De estas tiendas las que más sobresalieron fueron: “La Ciudad de Londres”, “El puerto de Liverpool”, “El Correo Francés”, “El Puerto de Veracruz“, “La Reforma del Comercio”, “El Palacio de Hierro”, “El Gran Oriental”, “Fabricas de Francia”, “El Centro Mercantil” y “Las Fábricas Universales”, todas ellas ubicadas en el primer cuadro de la Ciudad de México.115 Las fachadas de los edificios, los nombres, años de inicio, y datos de las sociedades que eran dueñas de estas tiendas de 1879 a 1904 se encuentran especificados en la Imagen y el Cuadro 1. La imagen 1 muestra los membretes que utilizaban las tiendas del “El Puerto de Veracruz”, “El Gran Oriental” y “La Ciudad de Londres” en su papelería oficial; así como la publicidad de las tiendas “El Puerto de Liverpool”, “El Palacio de Hierro” y “El Centro Mercantil”, publicada en periódicos franceses de la época. En estas iconografías resaltan los edificios de las tiendas, sus direcciones en la 112
Gamboa, Leticia. “Los barcelonnettes en la ciudad de Puebla: panorama de sus actividades económicas en el Porfirato”, en Pérez Siller, Javier (Coor). Op.cit, 1998.pp. 171-193. 113 Gouy, Op. cit , 1980 114 Ídem. 115 Arnaud, Op. cit., 1891.
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Ciudad de México y el listado de los servicios y productos que ofrecían, recalcando que muchos de ellos eran importados. El Cuadro 1 muestra la fecha de constitución, el tipo de sociedad legal, duración, montos de capital, datos personales y responsabilidades de los socios de las principales tiendas de los barcelonnettes. En él, es posible observar que los socios que tenían menor aportación de capital en esas tiendas eran hombres solteros, de entre 25 a 40 años. Los que poseían mayor aportación (del 30 al 40% del capital) eran hombres casados mayores de 40, que radicaban en Francia. Esto obedeció a que cuando los barcelonnettes eran empleados, no se casaban “por miedo a que las cargas familiares no les permitieran cumplir con su propósito de hacer fortuna y regresar a la patria”.116 Las ganancias generadas por las actividades comerciales y la lógica del ahorro y reinversión usada por estos inmigrantes, así como algunos factores externos (guerra de secesión de EU de 1860-1865, la invasión francesa a México de 1862-1867 y guerra franco-alemana de 1870), aunado a que en 1883 un importante grupo de casas alemanas dedicadas al comercio de ropa al mayoreo compró a las fábricas textiles mexicanas la totalidad de su producción, impulsó a estos inmigrantes galos a invertir en la creación de sus propias fábricas textiles.117
116
Ídem. Meyer, Jean. “Los franceses en México durante el Siglo XIX”. Tr. Pastora Rodríguez. Relaciones. Vol. 1, No.2, México 1980. 117
75
Imagen 1. Publicidad de las principales tiendas barcelonnettes en la Ciudad de México, 1879-1913.
El Puerto de Veracruz Signoret, Honnorat y cía.
El Gran Oriental Garcín, Fuadon y cía.
La Ciudad de Londres J.Ollivier y cía.
76
El Puerto de Liverpool J.B. Ebrard y cía.
77
El Palacio de Hierro J.Tron y cía.
78
El Centro Mercantil S. Robert y cía.
Fuente: Archivo General de la Nación (AGN), Fondo Texidor, Tx.1-036 y Tx. 1-030 y Hemeroteca, Periódico El centro Mercantil, Caja 42. Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT), Fondo Joaquín Amaro, Proveedores Serie 205, Inventario 105 Legajo 3.
79
Cuadro 1. Principales tiendas propiedad de barcelonnettes en México 18791904 (pesos corrientes). Datos de la Sociedad
Nombre
Tienda Sociedad Fundación
El Puerto de Liverpool J.B. Ebrard y cía 28-3-1888 Tipo de sociedad Colectiva Duración 5 años
Juan B. Ebrad Antonio Proal Francisco Proal Honnorato Beraud
Tienda Sociedad Fundación
La Ciudad de Londrés J.Olliver y cía 15/1/1879 Tipo de sociedad Colectiva-mercantil Duración 5 años
José Ollivier Sebastian Robert Mario Robert Silvano Balp
Tienda Sociedad Fundación
José Leautaud José Tron Julio Tron Enrique Tron Damián Proal
El Palacio de Hierro J.Tron y Cía. 30-1-1888 Tipo de sociedad Colectiva Duración 4 años Tienda Sociedad Fundación
El Puerto de Veracruz Signoret, Honnorat y cía 28-3-1887 Tipo de sociedad Colectiva-mercantil Duración 5 años Tienda Sociedad Fundación
El Correo Francés Lambert, Reynaud y cía 7-3-1889 Tipo de sociedad Colectiva Duración 3 años Tienda Sociedad Fundación
El Gran Oriental Garcín, Faudon y cía 22-2-1886 Tipo de sociedad Colectiva Duración 5 años
Datos de los socios Estado Domicilio Capital Porcentaje Sueldo
Edad 41 42 40 40
Civil Casado Soltero Soltero Soltero
París D.F. D.F. D.F. TOTAL París D.F. D.F. Veracruz TOTAL
Puesto
aportado de utilidad Mensual1 $ 40,000 40% Gerente Superior $ 20,000 20% Gerente-Admdor $ 20,000 20% Gerente-Admdor $ 20,000 20% Gerente-Admdor $ 100,000 100% $ 20,000 $ 15,000 $ 8,000 $ 7,000 $ 50,000
38% 28% 16% 18% 100%
40 Casado París 39 Soltero D.F. D.F. 25 Soltero D.F. 35 Soltero D.F. TOTAL
$ 50,000 $ 20,000 $ 15,000 $ 10,000 $ 5,000 $ 100,000
20% 20% 20% 25% 15% 15%
$ $ $ $ $ $
100 100 100 100 100 500
León Signoret Antonio Signoret León Honnorat
31 Soltero D.F. 36 Soltero D.F. 27 Soltero D.F. TOTAL
$ $ $ $
4,000 4,000 4,000 12,000
35% 35% 30% 100%
$ $ $ $
150 Gerente-Admdor 150 Gerente-Admdor 150 Gerente-Admdor 450
Mateo Lambert* Casimiro Reynaud Graciano Guichard Julio Beraud
33 31 32 34
D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ $ $ $ $
4,000 4,000 2,000 2,000 12,000
40% 36% 14% 10% 100%
$ $ $ $ $
100 100 80 70 350
Eduardo Garcín León Faudón Mario Plésant
26 Soltero D.F. 25 Soltero D.F. 33 Soltero D.F. TOTAL
$ $ $ $
5,000 5,000 5,000 15,000
33.33% 33.33% 33.33% 100%
$ $ $ $
50 Gerente-Admdor 50 Gerente-Admdor 50 Gerente-Admdor 150
Soltero Soltero Soltero Soltero
Tienda Sociedad Fundación Tipo de sociedad Duración
Las fábricas Universales A.Reynuad y cía 4-5-1896 Colectiva -mercantil 5 años
José Signoret Alejandro Reynaud Eugenio Signoret Juan Derbez
40 Casado Casado 37 Soltero 37 Soltero
D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ $ $ $ $
10,000 20,000 10,000 5,000 45,000
25.00% 25.00% 25.00% 25.00% 100.00%
Tienda Sociedad Fundación Tipo de sociedad Duración
La Reforma del Comercio A. Richaud y cía 4-2-1899 Colectiva-mercantil 5 años
Adolfo Richaud Agustín Garcín Emilio André Juan Thomé Emilio Audiffred
56 37 31 31 37
La Valenciana S. Robert y cía 3/01/1889 4 años
Sebastian Robert Fermin Manuel José Pinoncely
$ 20,000 $ 20,000 $ 20,000 $ 10,000 $ 10,000 $ 80,000 $ 100,000 $ 35,000 $ 35,000 $ 170,000
25% 25% 25% 12.5% 12.5% 100%
Tienda Sociedad Fundación Duración
DF/Paris DF DF DF DF TOTAL Francia
Tienda Sociedad Fundación
El Centro mercantil S. Robert y cía 23/02/1904
Sebastian Robert Emilio Meyran Santiago Arechederra Pedro A. Chain**
Casado Soltero Soltero Soltero Soltero
TOTAL
$ 1,000 Gerente-Admdor $ 100 Gerente-Admdor $ 100 Encargado de vtas. $ 150 Gte.- Mostrador Encargado de vtas. Gerente-Admdor Gerente superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
Gerente superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
$ 1,000 $ 200 $ 200 $ 150
$ $ $ $ $
100 100 100 100 100
Gerente-Admon Admón. Personal
56 Casado Francia
$ 160,000 44% $ 70,000 25% $ 140 $ 40,000 18% $ 100 $ 30,000 13% $ 100 TOTAL $ 300,000 100% * De origen italiano ** De origen español 1 1. Se encuentra expresado en Francos para José Ollivier de la tienda de la Ciudad de Londres y para José Signoret de Las Fábricas Universales Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México (AHNM) Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha Sociedad 444 Rafael Morales Antiguo 3023 56 28/03/1888 J.B. Ebrard y cía 99 Ignacio Burgoa Antiguo 34 15/01/1879 J.Olliver y cía 99 Ignacio Burgoa Antiguo 655 34 30/01/1888 J.Tron y Cía. 294 Miguel María Garduña Antiguo 2006 54 28/03/1887 Signoret, Honnorat y cía 697 Agustín Roldan Antiguo 9225 107 07/03/1889 Lambert, Reynaud y cía 99 Ignacio Burgoa Antiguo 651 78 22/02/1886 Garcín, Faudon y cía 31 Fco Diez Bonilla Antiguo 1 50 04/05/1896 A.Reynuad y cía 25 Juan M. Villeda Antiguo 13 38 04/02/1899 A. Richaud y cía 725 José Villela Antiguo 2 03/01/1889 S. Robert y cía 5 Bernando Cornejo Contemporáneo 8 23/02/1904 S. Robert y cía
80
Fundación de la Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). Antes de 1870, los comerciantes barcelonnettes importaban sus mercancías a Europa o las compraban a industriales españoles establecidos en México. Sin embargo, con la intervención francesa (1862-1867) se estableció una línea marítima de San Nazaire a Veracruz, con la cual los comerciantes galos consiguieron comprar directamente a proveedores en Francia y abandonar a los alemanes, españoles e ingleses. Además, durante esta etapa abastecían de mercancías y servicios al ejército francés que se encontraba en México, y con ello mantenían un mercado cautivo. Esto cambió por el término del imperio de Maximiliano (1864-1867) y por la guerra franco-alemana (1870), que dificultó proveerse de Francia.118 Por otro lado, con la Guerra de Secesión norteamericana (1860-1865) se abarató el algodón y se permitió que algunos comerciantes barcelonnettes como J. Ollivier y cía. y Ebrard, Fortoulis y Cía., entre otros, se enriquecieran lo suficiente para iniciar ellos mismos sus propias importaciones, y se adueñaran de gran parte del comercio de importación y distribución de textiles a partir de 1873.119 El siguiente paso lógico, para que prosperaran, era que ellos mismos fabricaran los productos que vendían. Para ello tenían dos caminos. El inmediato consistía en la adquisición de una fábrica de hilados, tejidos y acabados que estuviera funcionando y se encontrará en buenas condiciones. El de largo plazo, construir, equipar y operar una fábrica que respondiera a sus requerimientos de producir y comercializar artículos de más alta calidad que las mantas crudas.120 Debido a la nula experiencia en el campo fabril, los empresarios barcelonnettes
118
Ídem. Everaer, Luis, Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués, Querétaro, 1990, p.64. 120 Ídem. 119
81
decidieron comprar la fábrica ya establecida: “San Juan de Cerritos”, propiedad de Enrique L. Wiechers, situada en Orizaba, Veracruz.121 Cerritos elaboraba mantas, tejidos y estampados de algodón. Surtía a tiendas de la capital, como “La Ciudad de Londres”, propiedad de J. Ollivier y Cía. En sus terrenos de treinta cuartillas de tierra (44 mil 800 metros cuadrados) contaba con oficinas, casas y almacenes (ver Imagen 2). También tenía la concesión del ferrocarril urbano que unía a la fábrica con la estación del puerto de Veracruz, y el derecho de uso de dos bueyes de agua del río Orizaba, concedida por el Ayuntamiento de Orizaba, y por lo que pagaba $100 pesos anualmente. Estos activos, junto con la maquinaria, enseres, útiles y construcciones de los departamentos de la fábrica, fueron vendidos el 20 de abril de 1886 a la Compañía Manufacturera de Cerritos SA a un precio de $400,000; y pagados la mitad en efectivo y la mitad en abonos semestrales. El precio de venta no incluyó las existencias de algodón en rama, manta blanqueada, algodón en telares, leña y otros materiales que se encontraban en la fábrica al momento de la venta; ni los cilindros y piezas de refacción que estaban en camino.122 La Compañía Manufacturera de Cerritos SA fue constituida el 19 de abril de 1886 por Signoret, Boujarc y Cía., dueños de la tienda “El Puerto de Veracruz”, Lambert, Reynaud y Cía., propietarios de “El Correo Francés”; Garcín, Faudon y Cía., dueños de “El Gran Oriental”, Antonio Aubert Sucesores, M. Bellon y Cía. y Meyran hermanos. Esta empresa tenía un capital de $500,000, representados por 500 acciones de $1,000 cada una. Su objeto principal era comprar y administrar la fábrica textil de “San Juan de Cerritos”. 123 Los comerciantes barcelonnette eligieron formar una sociedad anónima, porque a diferencia de las sociedades colectivas, la Sociedad Anónima es más estable y su duración no es por periodos cortos y renovables. Asimismo, en una sociedad anónima se aportan mayores capitales y por tener mayor duración se 121
Orizaba se encuentra situada en la latitud 18°50’59’’ y longitud 097°06’13’’. Su altura es de 1230 metros sobre el nivel del mar. Es una región montañosa de clima templado-húmedo, con una temperatura media anual de 18.2°C y una precipitación pluvial promedio de 2,043 ml por año. 122 Archivo Histórico del Agua (AHA), Fondo Aprovechamientos Superficiales, caja 1436, expediente 19546. 123 Ídem.
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evita que periódicamente entren y se retiren los socios, obligando a la empresa a hacer ajustes frecuentes a su capital.124 En 1887, los socios Antonio Aubert y Sucesores, M. Bellon y Cía., y Meyran Hermanos cedieron sus acciones a Signoret, Honnorat y Cía.125, Lambert, Reynaud y Cía., y Garcín, Faudon y Cía., quienes se convirtieron en los dueños exclusivos de la Cía. Manufacturera de Cerritos S.A126. Dos años bastaron para comprobar lo acertado de la decisión de conservar sus acciones, y para persuadir a otros empresarios a construir una empresa que no sólo adquiriera fábricas en producción, sino que se comprometiera a crear una fábrica textil con la tecnología más avanzada. Para ello, se invitó a otros comerciantes barcelonnettes, los señores Escandón, dueños de la fábrica de Cocolapan, ubicada en Orizaba (ver Imagen 2) y a Tomás Braniff, propietario de la fábrica de San Lorenzo, ubicada en Nogales, a 30 kilómetros al poniente de Orizaba, Veracruz127 (ver Imagen 2). Los señores Escandón no aceptaron, pero los demás empresarios sí estuvieron de acuerdo. El 28 de junio de 1889, el norteamericano Tomás Braniff, dueño de la fábrica textil de San Lorenzo, Antonio Proal, gerente de J. B. Ebrard y Cía., propietarios de la tienda comercial “El puerto de Liverpool”, Juan E. Dachary gerente de J. Ollivier y Cía. dueños de “La Ciudad de Londres”, José Tron gerente de J. Tron y Cía. dueños de “El Palacio de Hierro”, León Signoret, gerente de Signoret, Honnorat y Cía., propietarios de “El puerto de Veracruz”, Mateo Lambert, italiano, y gerente de Lambert, Reynaud y Cía., dueños de “El Correo Francés”, León Faudon, gerente de Garcín, Faudon y Cía., propietarios de “El Gran Oriental” y Juan Quinn, se reunieron en la Ciudad de México para fundar la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). Esta compañía era un negocio independiente y separado de los establecimientos que representaban. Contaba con un capital inicial de $2,550,000, dividido en 25,500 acciones de $100 cada una. Su objeto 124
De Anglade, Jean-Louis, Op.cit., 2006, p.205. Sociedad sucesora de Signoret, Boujarc, cía. según AHNM, Escritura 53, volumen 2006 de la Notaria 294 a cargo de Miguel Ma. Garduña, 28/3/1887 126 Archivo Histórico del Agua (AHA), Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. 127 Everaer, Luis, Op. Cit.1990, p. 64 125
83
principal era la explotación en la República Mexicana de fábricas de hilado, tejido y estampado y de cualquier género que la compañía levantara, adquiriera o tuviera por compra y/o arrendamiento. Su domicilio legal era la Ciudad de México, pero se le permitía tener consejos consultivos en el extranjero o en los lugares que convinieran a sus intereses. Su duración se estableció en 30 años, con opción de prórroga. Aunque también podía terminarse si se perdía la mitad del capital social, se fusionaba con otras sociedades, o en los casos que la ley pronunciaba la disolución. Se convino que la administración estuviera a cargo de un Consejo de Administración compuesto por cinco accionistas propietarios y cinco suplentes. También se acordó que, de las utilidades anuales que obtuviera la compañía, el 10% se quedaría en reserva hasta que se alcanzara la quinta parte del capital social exhibido.128 Los accionistas fundadores de CIDOSA, los montos de capital aportados, y las tiendas y/o empresas que representaban se encuentran especificados en el Cuadro 2. Cuadro 2. Accionistas fundadores de CIDOSA, 1889 (pesos corrientes). Accionistas Datos de la empresa
Nombre Fundación Sociedad Duración
CIDOSA 28-6-1889 Anónima (S.A.) 30 años
Nombre
Capital aportado
Número de % de acciones acciones Valor $100 que posee
Tienda que administraban y/o
Tomás Braniff
$
700,000
7,000
27.45% Fábrica Textil San Lorenzo
Ubicación Nogales, Ver.
J.B. Ebrad y cía
$
323,000
3,230
12.67% El Puerto de Liverpool
México, D.F.
J.Olliver y cía
$
323,000
3,230
12.67% La Ciudad de Londrés La Ciudad de Londrés La Ciudad de Londrés Molino de Río Hondo Casas de alquiler
empresas que representaban
México, D.F. Veracruz, Ver.
Paris México, D.F.
J.Tron y Cía.
$
323,000
3,230
12.67% El Palacio de Hierro
México, D.F.
Signoret, Honnorat y cía
$
323,000
3,230
12.67% El Puerto de Veracruz El Zafiro Cía. Manufacturera de Cerritos S.A.
México, D.F. México, D.F. Orizaba, Ver.
Lambert, Reynaud y cía
$
242,000
2,420
9.49% El Correo Francés
México, D.F.
Garcín, Faudon y cía
$
216,000
2,160
8.47% El Gran Oriental
México, D.F.
Juan Quinn
$
100,000
1,000
3.92%
TOTAL $ 2,550,000 Fuente: Archivo histórico de Notarías de la Ciudad de México Notaría Notario Fondo Volumen 444 Rafael Morales Antiguo 3025
25,500
100%
Escritura 155
Fecha 28/06/1889
128
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México (AHNM), Escritura 155 del Volumen 3025, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/6/1889.
84
En este cuadro se observa la fecha de constitución de CIDOSA y el tipo de sociedad en que se organizó, así como los socios que la conformaron, el capital que aportaron, las tiendas o negocios que representaban y el porcentaje de acciones que poseían. De acuerdo a estos datos, las tiendas de los comerciantes barcelonnettes poseían en conjunto entre el 68 y el 69% de las acciones de CIDOSA. Aunque individualmente su participación accionaria era menor que la de Tomás Braniff (27.45%, debido a que éste aportó el capital y activos de la Fábrica de San Lorenzo), eran las sociedades de J. B. Ebrard y Cía., J. Ollivier y Cía., J. Tron y Cía., Signoret, Honnorat y Cía., Lambert, Reynaud y Cía. y Garcín, Faudon y Cía., las que tomaban las decisiones. “El objetivo de los comerciantes que fundaron CIDOSA, fue crear fábricas que produjeran un mayor volumen de prendas textiles y operaran con un mayor grado de eficiencia que las fábricas actuales. Por estas razones, eligieron como estrategia principal, adquirir y modernizar fábricas textiles ya activas (“San Lorenzo”, “Cerritos” y “Cocolapan”), así como construir nuevas fábricas con maquinaria mecanizada (telares y husos) y donde se utilizaría otras fuentes de energía diferente al carbón (vapor y energía eléctrica), como en el caso de la fábrica de Río Blanco (ver Imagen 2).129 La fábrica de San Lorenzo pasó de inmediato a ser parte de CIDOSA. Contaba con un edificio de dos pisos, el primero dedicado a la hilatura y la preparación de tejidos y el segundo para los telares. También tenía un local aparte para el departamento de acabado.130 El valor al que se tomaron sus activos fue de $700,000, que corresponde al capital aportado por Tomás Braniff. La fábrica de San Juan de Cerritos fue comprada el 12 Julio de 1889 a Signoret, Honnorat y Cía., Lambert, Reynaud y Cía. y Garcín, Faundon y cía. accionistas de la Cía. Manufacturera de Cerritos SA-. Se les pagó en efectivo la cantidad de $70,000 por el inmueble (terrenos y edificios); $330,000 por la maquinaria, telares, útiles, herramientas, muebles y enseres; y $214,946.77 por las existencias de estampados, mantas, drogas (no especifica cuáles, pero se 129
Gómez Galvarriato, Aurora. “La Revolución en la distribución y en la producción de textiles en México durante el Porfiriato” (s/f) en www.cide.mx, p.38. 130 Everaer, Luis, Op. Cit.1990, p. 59.
85
piensa que eran productos químicos relacionados con los textiles), algodón en telares y en pacas, leña y por el crédito hipotecario a cargo de don Ángel Jiménez, sobre la línea de ferrocarril urbano de Orizaba. En total, $614,646.76.131 La fábrica de Río Blanco inició su construcción en 1889, en Tenango, de Río Blanco, Veracruz (ver Imagen 2). Fue planeada como una de las fábricas textiles más grandes de México. Poseía al momento de su inauguración -el 9 de octubre de 1892- 1,000 telares y 34,000 husos; así como una capacidad de producción comparable a las fábricas europeas de principios del siglo XIX.132 Contaba con una producción totalmente integrada: desde la generación de energía para sus procesos productivos con sus plantas hidroeléctricas, el cardado del algodón, la producción, hasta la venta de las telas. Tenía talleres y servicios anexos de carpintería, fundición, caldera, bomberas, así como toda una infraestructura (casa para los empleados, iglesias y enfermería) que permitió a las familias vivir alrededor de la fábrica.133 La inversión que se necesitó para finalizar la construcción de la Fábrica de Río Blanco obligó a los socios a incrementar el capital social en $450,000. En asamblea general extraordinaria del 27 de agosto de 1892, Tomás Braniff (a su nombre), Honorato Beraud, de J. B. Ebrard y Cía., Mario Ollivier, de J. Ollivier y Cía., León Signoret, de Signoret, Honnorat y Cía., Enrique Tron, de J. Tron y Cía., Eduardo Garcín, de Garcín, Faudon y Cía., Mateo Lambert, de Lambert, Reynaud y Cía., así como los nuevos socios Arturo Durand (a su nombre y como apoderado de Alfonso Leimenstoll y Oscar Herman) y Antonio Aubert, en representación de Richaud, Aubert y cía., deciden emitir 4,500 acciones adicionales, para distribuir de manera proporcionar entre los socios ya existentes, y conformar un nuevo capital de $3,000,000, representado por 30,000 acciones con valor de $100 cada una. Ese capital fue destinado para la Fábrica de Río Blanco, y se acordó que las utilidades de las nuevas acciones se contarían a partir del 1 de Julio de 1892, y con ello sólo considerarían el 50% del dividendo para ese año.134
131
AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. García, Bernardo, Op.cit, 1980. 133 Proal, Op.cit ,1998. 134 AHNM, Escritura 122 del Volumen 3032, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 27/8/1892. 132
86
En el Cuadro 2A es posible identificar los socios, el monto inicial aportado y el aumento que efectuaron en 1892 al capital de CIDOSA, así como el porcentaje de acciones que les correspondían. El cuadro también muestra que el capital aportado por Juan Quinn (antiguo administrador de la fábrica de San Lorenzo) permaneció igual, a pesar del incremento. Cuadro 2A. Accionistas de CIDOSA, 1892 (pesos corrientes). Fecha
Nombre
14-10-1892 Tomás Braniff J.B. Ebrad y cía J.Olliver y cía J.Tron y Cía. Signoret, Honnorat y cía Lambert, Reynaud y cía Garcín, Faudon y cía Richaud, Aubert y cía. Oscar Herman J. B. Signoret Arturo Durand Alfonso Leimenstoll Juan Quinn TOTAL Fuente: Notaría 444 444
Capital anterior
$ $ $ $ $ $ $
700,000 323,000 323,000 323,000 323,000 242,000 216,000
$ $
100,000 2,550,000
Capital aportado $ 105,900 $ 57,000 $ 57,000 $ 57,000 $ 64,600 $ 37,900 $ 35,300 $ 22,100 $ 5,300 $ 3,500 $ 2,600 $ 1,800 $
Accionistas Capital Actual Número de
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ 450,000 $
805,900 380,000 380,000 380,000 387,600 279,900 251,300 22,100 5,300 3,500 2,600 1,800 100,000 3,000,000
% de
acciones Valor
acciones
$100
que posee
8,059 3,800 3,800 3,800 3,876 2,799 2,513 221 53 35 26 18 1,000 30,000
26.86% 12.67% 12.67% 12.67% 12.92% 9.33% 8.38% 0.74% 0.18% 0.12% 0.09% 0.06% 3.33% 100%
Tienda que administraban y/o
Ubicación
empresas que representaban
Fábrica Textil San Lorenzo El Puerto de Liverpool La Ciudad de Londrés El Palacio de Hierro El Puerto de Veracruz El Correo Francés El Gran Oriental
Nogales, Ver. México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F.
Archivo Historíco de Notarías de la Ciudad de México Notario Volumen Escritura Rafael Morales 3032 122 Rafael Morales 3035 157
El 5 de agosto de 1899, los dueños de CIDOSA adquirieron la fábrica de Cocolapan. Esta manufactura era propiedad de Manuel, Vicente, Guadalupe y Dolores Escandón y Arango. Tenía una extensión de 61 hectáreas, 4 aras y 44 metros2. Su precio de compra fue de $670,000; de los cuales correspondieron: $270,000 por los edificios, terrenos, derechos y aprovechamiento de las aguas del río Blanco otorgados por el Ayuntamiento de Orizaba, las presas, canales, zanjas, acueductos, compuertas y demás obras hidráulicas. La misma cantidad por las máquinas de hilados, tejidos, las herramientas, útiles, aperos, refacciones y la fábrica de papel. $20,000 por los muebles de casa y capilla, el ganado vacuno, animales de tiro, siembra y existencia de café y de frutas. $110,000 por las máquinas, turbinas, dinamos, postes, alambres, lámparas en las calles, edificios públicos y casas particulares, así como el traspaso de la concesión de la negociación de Luz Eléctrica de la Ciudad de Orizaba. Los inventarios de papel de estraza, manta y algodón en almacén y máquinas se vendieron por la cantidad de $28,425.32. Este último monto, junto con $220,000, fueron pagados en efectivo.
87
Lo demás se liquidó por cinco bonos anuales de $90,000 cada uno, a una tasa de interés de 6 por ciento.135 Imagen 2. Fábricas propiedad de CIDOSA 1889-1892. Fábrica de San Lorenzo
Fábrica de Cerritos
Fábrica de Río Blanco
Fábrica de Cocolápam
Fuentes: San Lorenzo: Archivo Municipal de Nogales, Veracruz. Cerritos: Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Fondo Orizaba, Foto 72 negativo 11. Río Blanco: Archivo General de la Nación (AGN), Fondo Propiedad artística y literaria , Briquet A .No.2 Cocolápam : Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Fondo Orizaba, Foto 61 negativo 0
135
AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546.
88
La modernización de las fábricas de San Lorenzo y Cerritos, así como la compra de la fábrica de Cocolapan, también requirió de continuos aumentos en el capital. El primero se efectuó el 9 de febrero de 1894, cuando la Asamblea General decidió aumentar el capital en $500,000, haciendo un total de $3,500,000. Para este aumento se acordó que las acciones serían vendidas a los socios preferentes. Sólo si resultaban acciones sobrantes, se vendería a extraños a la compañía y bajo lo que señalan los parámetros de la escritura constitutiva del 28 de junio de 1889.136 El segundo se realizó el 15 de mayo de 1896 y fue por $3, 000, 000.137 El tercero fue en 1898, cuando los accionistas de CIDOSA acordaron participar en la Bolsa de valores de Ginebra y París, cuidando que el control permaneciera en las sociedades fundadoras.138 El cuarto se autorizó en la asamblea del 14 de junio de 1901 y fue por $2, 000, 000. En esta asamblea se cambiaron los estatutos de la compañía, ampliando su duración a 50 años, con opción de prórroga.139 El último de los incrementos de capital de CIDOSA durante el Porfiriato (1876-1910), se solicitó el 21 de febrero de 1908, cuando en la sesión del Consejo de Administración, los socios Enrique Tron, Eugenio Tron, Mauricio Honnorat, Adran David, y Antonio Reynaud, señalaron que: Importantes y costosas formas de mejoramiento se han efectuado en nuestras fábricas, no sólo en su dotación de maquinaria sino también en la ampliación de sus edificios. Se han adquirido y consolidado importantes derechos a la propiedad de aguas que en su mayor parte emplean como fuerza motriz en nuestros establecimientos industriales, todos estos elementos de acción constituyen importantes medios de producción que dan una situación sólida y segura a nuestras fábricas en el presente a la vez que son factores que garantizan y aseguran el porvenir de nuestra compañía. Nos ha sido posible alcanzar el punto de perfección que tiene nuestra empresa, debido a la inversión de crecidas sumas y a la erogación de gastos importantes. Estas inversiones que constituyen por sí mismas la movilización de fuertes capitales, han dado por resultado un aumento del valor de los bienes de la compañía. Inspirándose en esta idea, proponemos a esta asamblea, la aprobación de un aumento al capital social de $6 ,500, 000 para incrementarlo a $15,000,000. (AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908). 136
AHNM, Escritura 157 del volumen 3035, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 9/2/1894. AHNM, Notaria 543, a cargo de Agustín Pérez Roldán, 15/5/1896. 138 Everaer, Luis. Op. cit, 1990, pp. 78-79. 139 AHNM, Escritura 13, volumen 1, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 26/04/1902. 137
89
Para justificar esta petición, los socios mencionados presentaron un estudio de valuación realizado el 20 de febrero de 1908 por el arquitecto Miguel Ángel de Quevedo y el ingeniero Manuel Oyarxbal, donde se calculaba que “el valor de las cuatro fábricas y las dos instalaciones hidroeléctricas (con los terrenos, edificios y maquinaria), ascendía a $16, 336 475.81”140, como se muestra en el Cuadro 2 B. El monto de la inversión que corresponde a cada fábrica es la suma del valor de la maquinaria, terrenos, edificios, tubería hidráulica, casas de los empleados administrativos y obreros, bodegas, tiendas, iglesias y terrenos anexos a la fábrica.
Cuadro 2B. Estudio de Valuación de los activos de CIDOSA, 1907 (pesos corrientes). FÁBRICA RÍO BLANCO Inmuebles Edificio de la fabrica Casas habitación de empleados y admon Bodegas Presas, turbinas, tuberías y tuneles Tuberia de la laguna Ojo de agua Terrenos anexos a la fabrica Casas de operarios, tiendas, iglesia Maquinaría Hilados y tejidos (transmición) Estampado, acabados, carpitenría mécanica, calderas (electrico y trasnmisión) SUBTOTAL FÁBRICA SAN LORENZO Inmuebles Edificio de la fabrica Canal, presa, turbinas, etc. Bodegas Casas habitación interiores Casas exteriores para operarios Terrenos anexos a la fabrica Maquinaría Hilados y tejidos (transmición) SUBTOTAL Fuente: Notario Bernando Cornejo
140
$ 3,200,000.00 $ 225,000.00 $ 250,000.00 $ 450,000.00 $ 100,000.00 $ 500,000.00 $ 1,037,452.93 $ 2,400,000.00 $ 2,100,000.00 $ 10,262,452.93
$ $ $ $ $ $
600,000.00 280,000.00 40,000.00 80,000.00 25,000.00 200,000.00
$ 1,400,000.00 $ 2,625,000.00
FÁBRICA CERRITOS Inmuebles Edificio de la fabrica Casas habitación interiores Bodegas Acueductos, turbinas, etc. Terrenos Casas de operarios Maquinaría Hilados y tejidos (transmición) SUBTOTAL FÁBRICA COCOLAPAN Inmuebles Edificio de la fabrica, casas habitación interiores, bodegas, e instalación antigua y canal Casas para operarios, rancho y terrenos Maquinaría Hilados y tejidos (transmición) SUBTOTAL Instalación eléctrica Cocolapan Instlación hidroeléctrica Rincón Grande TOTAL
$ $ $ $ $ $
130,000.00 20,000.00 20,000.00 120,000.00 30,000.00 10,000.00
$ $
465,000.00 795,000.00
$
478,000.00
$
413,000.00
$ 563,022.88 $ 1,454,022.88 $ $
400,000.00 800,000.00
$ 16,336,475.81
Archivo Historíco de Notarías de la Ciudad de México Notaría Volumen Escritura Fecha 5 35 2436 24/04/1908
AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908.
90
De acuerdo a este estudio y por el monto que alcanzaban las reservas de los libros de la compañía, fue autorizado por la asamblea del 23 de abril de 1908 aumentar el capital de $8, 5000, 000 a $15,000,000. Este aumento se generó del fondo de previsión en $3, 000 ,000 y el resto en emisión de acciones, con valor nominal de $100, y distribuidas a los actuales socios en una proporción de 13 por 17.141 Los aumentos de capital de CIDOSA ocurridos durante el periodo de 1889 a 1908 se encuentran resumidos en el cuadro 2C e Imagen 3. En el cuadro se muestra la fecha, el tipo de modificación, los montos y porcentajes de cambio del capital. De acuerdo a su información, el incremento de 1896 fue el alto del periodo de 1892 a 1908, y representando el 85% del capital anterior. La Imagen 3 muestra el membrete impreso en la papelería oficial de la empresa a partir de 1908, el cual incluye el edificio de la fábrica de Río Blanco, una imagen de un León, que era su marca registrada, la lista de sus fábricas e instalaciones hidroeléctricas y el monto de capital que ascendía a $15,000,000.
Cuadro 2C. Incrementos al capital de CIDOSA, 1892-1908 (pesos corrientes). Fecha 14/10/1892 14/4/1894 15/5/1896 26/04/1902 24/04/1908 Fuente: Notaría 444 444 444 543 5 5
141
Capital anterior Capital Capital Actual Tipo de Modificación aportado Incremento $ 2,550,000 $ 450,000 $ 3,000,000 Incremento $ 3,000,000 $ 500,000 $ 3,500,000 Incremento $ 3,500,000 $ 3,000,000 $ 6,500,000 Incremento $ 6,500,000 $ 2,000,000 $ 8,500,000 Incremento $ 8,500,000 $ 6,500,000 $ 15,000,000 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notario Fondo Volumen Escritura Rafael Morales Antiguo 3025 155 Rafael Morales Antiguo 3032 122 Rafael Morales Antiguo 3035 157 Agustín Peréz Antiguo Bernando Cornejo Contemporáneo 1 13 Bernando Cornejo Contemporáneo 35 2436
% del cambio 17.65% 16.67% 85.71% 30.77% 76.47% Fecha 28/06/1889 14/10/1892 14/04/1894 15/05/1896 26/04/1902 24/04/1908
AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908.
91
Imagen 3. Ilustración de CIDOSA, publicada en su papelería oficial.
Fuente: AGN, Presidentes, Madero, Caja 51. Carpeta 1439-3
Los incrementos al capital de CIDOSA de 1892 a 1908 fueron posibles porque los empresarios del Valle de Ubaye desarrollaron un modelo capitalista que inició con negocios de bajo capital físico y financiero en el comercio, con los cuales pudieron ahorrar las utilidades suficientes para acumular capital que invirtieron en la industria, donde aplicaron la misma estrategia de ahorro. Igualmente contaban con socios en Francia, que les brindaban mercancías y financiamiento a costos bajos. Además como la falta de un mercado formal de capitales limitaba la expansión de las empresas en el país, decidieron invertir o crear sus propias instituciones financieras. Este comportamiento se describe en el siguiente apartado, que enumera la evolución organizativa de las sociedades fundadoras de CIDOSA.
92
Sociedades fundadoras Como se determinó en el apartado anterior, las sociedades J. B. Ebrard y Cía., J. Ollivier y Cía., J. Tron y Cía., Signoret, Honnorat y Cía., Lambert, Reynaud y Cía. y Garcín, Faudon y Cía., fueron los socios fundadores y mayoritarios de CIDOSA durante el periodo de 1889-1930. J.B. Ebrard y Cía. surgió en el DF como una sociedad en comandita, donde el socio comanditario (quien aportaba el capital) era Juan Bautista Ebrard y el comanditado (quién aportaba trabajo) era Eduardo Ebrard. Este último se encargaba de administrar la tienda de novedades “El Puerto de Liverpool”, ubicada en la Ciudad de México. Debido a algunos problemas que tuvo la sociedad en Londres con la Cía. Gassier y Baunno fue liquidada en enero de 1888 y el 28 marzo del mismo año Juan Bautista Ebrard decidió constituir una nueva sociedad: J.B. Ebrard, Sociedad Colectiva, que poseyó un capital inicial de $100,000 pesos. Sus socios fueron Juan Bautista Ebrard, Antonio y Francisco Proal y Honorato Beraud. Todos fueron considerados socios, gerentes y administradores. Sin embargo, como la nueva sociedad absorbió el activo y pasivo de la tienda “El Puerto de Liverpool”, se designó como gerente superior a Juan Bautista Ebrard, quien vivía en París y se encargaba de las compras en Europa. La sociedad inicialmente acordó una duración de 5 años, pero con opción de prórroga. 142 El 14 de marzo de 1893, los socios declararon que deseaban continuar en la sociedad, pero ahora bajo el nombre de J. B. Ebrard y Cía. Sucesores; e integrada por un nuevo socio: Alfonso Michel. Juan B. Ebrard ya había fallecido. Esta nueva sociedad siguió operando el comercio de “El Puerto de Liverpool”. Continuó como una sociedad colectiva, pero ahora tuvo una duración de 3 años, prorrogable cada año, a menos que alguno de sus socios decidiera separarse. Sus miembros acordaron que no podían formar parte de otras empresas de manera particular, pero sí la sociedad como tal. Además, se decidió que el nuevo socio, Alfonso
142
AHNM, Escritura 56 del volumen 3023 de la Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/3/1888.
93
Michel, tenía que vivir en México y ser el director de los negocios. Los demás podían residir en Europa, pero los debía consultar para decisiones importantes. 143 El 5 de marzo de 1907 llegó a su término la sociedad J. B. Ebrard y Cía. Sucesores. Los socios convinieron en constituir la sociedad en comandita simple J. B. Ebrard y Cía. Sucesores, la cual tenía de socios comanditarios a Antonio y Francisco Proal y Honorato Beraud, y de comanditados Alfonso Michel, Juan Bautista Ebrard Jr, y Antonio Jaubert. La nueva sociedad asumió por objeto explotar el giro mercantil y almacenes del “El Puerto de Liverpool”, y continuar con la administración de los negocios, bienes y valores de la anterior sociedad J.B. Ebrard y Cía. Sucesores (ver Cuadro 4). Los socios comanditados debieron radicar en el país, pues estuvieron a cargo de la gerencia de los negocios comerciales, administrativos y judiciales, así como el uso de la firma social de la compañía, pero les quedó estrictamente prohibido hacer uso de dicha firma para negocios particulares o ajenos al objeto de la sociedad. Sí esto sucedía se les separaba inmediatamente. Los socios comanditarios radicaron fuera del país, pero debieron permanecer en él al menos 6 meses. La duración de la sociedad fue de 5 años, con opción de prórroga.144 La evolución de sociedad J.B. Ebard y Cía., así como la información de sus socios, capitales aportados, utilidades y sueldos que les correspondieron, se encuentran en el Cuadro 3. En este cuadro se observa que el porcentaje de utilidad asignado a los socios fundadores Ebrard y Proal y Berau era superior al de los demás. Para 1907 éstos tenían 59 y 61 años, vivían todos en Francia y estaban casados. Además de la tienda de novedades “El Puerto de Liverpool”, J.B. Ebrard y Cía. Sucesores también participó como accionista del Banco Central Mexicano y otras compañías manufactureras, las cuales se enumeran en el Cuadro 4. En este cuadro se señala la fecha en que aparece como socio y el número de acciones que poseía, excepto para la Fábrica de Papel San Rafael y Anexas SA y la Fábrica de Tejidos de Lana San Idelfonso SA, donde no se logró obtener ese dato. 143
AHNM, Escritura 102 del volumen 3033 de la Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 14/3/1893. AHNM, Escritura 1366 Volumen 31, del 5/3/1907 y Escritura 4249, volumen 54 del 15/11/1910 Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo. 144
94
Cuadro 3. Evolución organizativa de la sociedad J.B. Ebrard y cía. 1888-1907 (pesos corrientes). Datos de la sociedad
Nombre
Edad
Estado
Datos de los socios Domicilio Capital Porcentaje Sueldo
Civil
aportado
de utilidad Anual
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.B. Ebrard y cía El Puerto de Liverpool 28-3-1888 Colectiva 5 años
Juan B. Ebrad Antonio Proal Francisco Proal Honnorato Beraud
41 42 40 40
Casado Soltero Soltero Soltero
París D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 40,000 $ 20,000 $ 20,000 $ 20,000 $ 100,000
40% 20% 20% 20% 100%
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.B. Ebrard y Cía. Sucesores El Puerto de Liverpool 14/3/1893 Colectiva 3 años
Antonio Proal Honnorato Beraud Alfonso Michel Francisco Proal
48 45 27 45
Soltero Soltero Soltero Casdao
D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 25,000 $ 25,000 $ 25,000 $ 25,000 $ 100,000
26.66% 26.66% 20.0% 26.66% 100%
Nombre
J.B. Ebrard y Cía. Sucesores en comandita El Puerto de Liverpool 05/03/1907 Comandita simple 5 años
Antonio Proal Honnorato Beraud Francisco Proal Alfonso Michel Juan B. Ebrad jr. Antonio Jaubert
61 59 59 41 39 38
Casado Casado Casado Casado Soltero Soltero
París $ 225,000 París $ 325,000 Barcelonnette$ 325,000 D.F. $ 20,000 D.F. $ 20,000 $ 20,000 TOTAL $ 935,000
Tienda Prórroga Sociedad Duración
Fuente: Notaría 444 444 5
Puesto
Gerente Superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
$ $ $ $
4,000 4,000 4,000 4,000
Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
22% Socio comanditario 22% Socio comanditario 22% Socio comanditario 6% $ 6,000 Gerente-Admdor 15% $ 2,400 Gerente-Admdor 13% $ 2,400 Gerente-Admdor 100%
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notario Fondo Volumen Escritura Fecha Rafael Morales Antiguo 3023 56 28/03/1888 Rafael Morales Antiguo 3033 102 14/3/1893 Bernando Cornejo Contemporáneo 31 1366 05/03/1907
Cuadro 4. Acciones propiedad de la sociedad J.B. Ebrard y Cía. 1892-1909 (pesos corrientes). Empresa 1
CIDOSA Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 1 de San Idelfonso S.A. 1 Banco Central Mexicano Compañía Bancaria de París y México S.A. 2 Fábrica de Papel de San Rafael y Anexas S.A. 2 San Idelfonso Fábrica de tejidos de Lana S.A. TOTAL 1. Aumento de Capital
Fecha
No. de
Valor
Capital
acciones nominal 3,800 14/10/1892 $100 $ 23/07/1903 550 $100 $
380,000 55,000
13/05/1904 28/10/1909
5,200 362,000
52 3,620
$100 $ $100 $
$ 8,022 2. Datos de The Mexican Year Book 1909-1910.
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notaría Fondo Compañía
Notario
Vol
Escritura
444 CIDOSA
Antiguo
Rafael Morales
3032
729 Banco Central Mexicano
Antiguo
Jose del Villar
5087
Contemporáneo
Ramón Ruiz
14
650
3 Banco Central Mexicano
Contemporáneo
Ramón Ruiz
30
1,138
3 Banco Central Mexicano
Contemporáneo
Ramón Ruiz
37
1,670
5 Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo
B. Cornejo
3,542
51
5 Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo
B. Cornejo
3,694
53
3 Cía. explotadora de las fuerzas hidroel éctricas
12 2 8
de San Idelfonso S.A.
95
J. Ollivier y Cía.145 fue constituida en la Ciudad de México el 15 de enero de 1879, por José Ollivier, Silvano Balp, Sebastián Robert y Juan Dachary, representante de Mario Robert. Esta compañía administró la tienda de novedades “La Ciudad de Londres”, en París, el DF y su sucursal en el puerto de Veracruz, algunas casas de alquiler y la sociedad con Isidro de la Torre, “El Molino de Río Hondo”. El 18 de febrero de 1884 los socios decidieron disolver esta sociedad y asignar el activo y el pasivo de todos sus negocios a José Ollivier y Silvano Balp, quienes junto a Mario y Antonio Ollivier y Juan Dachary constituyeron en esa misma fecha la sociedad colectiva y mercantil J. Ollivier y Cía., con un capital inicial de $75,000 pesos. Esta nueva sociedad tuvo como objeto explotar el comercio en la tienda de novedades “La Ciudad de Londres”. En ella, se designó como administrador de la casa y compras de París a José Ollivier, quien ahí vivía, y a Silvano Balp de las casas comerciales del DF y del puerto de Veracruz. Balp también debía comprar mercancías y designar funciones a los empleados. En el caso de Juan Dachary lo eligió para atender el mostrador y ser el responsable de la vigilancia. A Mario y Antonio Ollivier los nombró encargados de ventas. Sus obligaciones comprendían levantar pedidos, atender a clientes y realizar las notas. Si alguno de los socios desmereciere de la confianza de sus consorcios por la infracción de los deberes que les corresponde por mala conducta, por el juego, la embriaguez u otra causa que dañara a la sociedad y reportara el descrédito sobre la razón social, sería separado por acuerdo unánime y se liquidaría hasta que se disolviera la sociedad. J.Ollivier y Cía. fue establecida por un periodo de 5 años, pero fue prorrogada en 1888.146 El 30 de Marzo de 1889, los señores José Ollivier, Juan Dachary, Marius y Antonio Ollivier decidieron continuar con la sociedad J. Ollivier y Cía. por 5 años más. José Ollivier siguió administrando la casa de París y los demás socios debían consultarlo para las decisiones importantes de los negocios en México,
145
Para conocer la historia completa de J. Olliver y Cía., ver De Anglade, Jean-Louis, Un Gran patrón barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille. Sabenca de la Valeia y Jean –Louis D’Anglade. Barcelonnette, 2006. 146 AHNM, Escritura. 75 y 76 del volumen 647 de la Notaría 99 a cargo de Ignacio Burgoa, 18/2/1884.
96
como la compra de bienes inmuebles, la asociación con otras personas o compañías. Juan Dachary, Marius y Antonio Ollivier permanecieron en México y después de 2 años Juan Dachary fue a vivir a París y recibía 10,000 francos para gastos. También se estipuló que en caso de uso indebido de la firma social o por separación voluntaria de algún socio, éste no podía exigir el pago del capital que tuviera con la sociedad a la fecha de su separación, sino hasta la conclusión de la misma. La utilidades se establecieron en 30% para José Ollivier y 23.33% para los demás. Sin embargo, éstas tampoco podían recibirse, sino hasta el término de la sociedad. Asimismo, por el capital que aportaban los socios recibían el 5% de interés anual (éstos sí podían retirarse). Si los socios otorgaban préstamos a la sociedad recibían el 6% de interés anual, pero sólo podían retirarlo de manera prudente para que no perjudicara al negocio. La sociedad no se disolvió por el fallecimiento de los socios, sino hasta que se cumplió el tiempo acordado.147 En 1894, se prorrogó como sociedad colectiva J. Ollivier y Cía., pero ahora incorporando como socios a Juan B. Bellón, León y Teófilo Ollivier, hermanos de Mario Ollivier y sobrinos de José Ollivier. Esta nueva sociedad tuvo un capital de $83,000 y una duración de 5 años. En 1898 antes de volver a renovar la sociedad, José Ollivier, de 70 años, decidió disolverla y no entregar la parte que le correspondía de los negocios propiedad de J. Ollivier y Cía. a sus sobrinos Mario y León (ver Cuadro 6). Esto porque incumplieron con la Cláusula 17, que les impedía viajar a Francia y dejar de vivir en México, ya que eran responsables de la administración de los negocios de la sociedad en el país, y además por asignarse un sueldo como si aún trabajara en la tienda de la Ciudad de Londres. Estas acciones molestaron tanto a José Ollivier que dispuso romper con la sucesión familiar en los negocios e invitar a Eugenio Roux, José Spitalier y Armando Desvignes a formar parte de la nueva J. Ollivier y Cía., constituida en abril de 1898, con un capital de $160,000. 148 El capital aportado, los porcentajes de utilidad y los sueldos asignados a cada socio en la evolución histórica de J. Ollivier y Cía. de 1879 a 1910 se encuentran
147 148
AHNM, Escritura 56 del volumen 14, Notaria 40 a cargo de Eugenio Pérez, 30/3/1889. D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 261-262.
97
especificados en el Cuadro 5. En este cuadro resalta que José Ollivier se mantuvo al frente de la sociedad hasta 1910, a pesar de tener 80 años. Aunque residía en París desde 1879, regresó a vivir a la Ciudad de México en 1894 por los problemas con sus sobrinos, como se explicó anteriormente. El conflicto entre José Ollivier y sus sobrinos se arregló bajo las reglas que barcelonnettes tenían para estos casos: asignando a otros empresarios del Valle de alta reputación como árbitros del conflicto. Los designados fueron Enrique Tron y Eduardo Garcín, quienes como amigos de José Ollivier le dieron la razón a él, pero le estipularon una indemnización para sus sobrinos. Mario Ollivier tenía derecho como capital e intereses en los negocios de México a la suma de $858,419 pesos, y en los de París en 684,136 francos. León debía recibir $548,420 pesos por las empresas de México y de 190,110 francos por las empresas francesas.149 Las empresas en México donde participó como accionista J. Ollivier y Cía. antes de la salida de sus sobrinos en 1898 se especifican en el Cuadro 6. En él se incluye el nombre de la empresa y el número y valor de las acciones que poseía. Si comparamos esta información con la del Cuadro 6A, que también señala las acciones que ostentaba J. Ollivier y Cía. en México, pero para el periodo de 18991909, es posible identificar que por la indemnización que pagó José Ollivier a Mario y León Ollivier su participación en CIDOSA bajó un 10%, ya que de poseer 7,698 acciones, quedó con 6,928. Lo mismo sucedió para la Cía. de loza del Niño Perdido, donde perdió 76 acciones, y en el Banco de Jalisco, en que disminuyó su participación de 100 a 90 acciones. J. Ollivier y Cía. también era socio de J.B. Ebrard y Cía. en la Fábrica de Papel San Rafael, Fábrica de Lana San Idelfonso, y Cía. Eléctrica e Irrigadora de Hidalgo SA y en el Banco Central Mexicano. Lamentablemente no poseemos información sobre los negocios en que J. Ollivier y Cía. y las demás sociedades barcelonnettes participaban en Francia, lo cual podría resolverse en otra investigación, donde se consulten los archivos notariales de París.
149
Ídem.
98
Cuadro 5. Evolución organizativa de la sociedad J. Ollivier y Cía. 1879-1910 (pesos corrientes). Datos Estado Domicilio Civil París D.F. D.F. Veracruz TOTAL
de los socios Capital Porcentaje aportado de utilidad $ 20,000 38% $ 15,000 28% $ 8,000 16% $ 7,000 18% $ 50,000 100%
Datos de la sociedad
Nombre
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 15/1/1879 Colectiva-mercantil 5 años
José Ollivier Sebastian Robert Mario Robert Silvano Balp
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 18-2-1884 Colectiva-mercantil 5 años
José Ollivier Sivano Balph Mario Ollivier Juan Dachary Antonio Ollivier
Nombre Tienda Prórroga Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 30/3/1889 Colectiva-mercantil 5 años
José Ollivier Juan Dachary Mario Ollivier Antonio Ollivier
59 38 32 31
Nombre Tienda Prórroga Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 26/2/1894 Colectiva-mercantil 5 años
José Ollivier Mario Ollvier Antonio Ollivier Léon Ollivier Téofilo Ollivier Juan Buatista Bellón
64 36 35 28 26 33
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 28/4/1898 Colectiva-mercantil 5 años
Jose Ollivier Juan Buatista Bellón Eugenio Roux Jose Spitalier Armando Desvignes
70 Casado París D.F. D.F. D.F. París TOTAL
$ 100,000 $ 50,000 $ 10,000 $ 4,000 $ 2,000 $ 166,000
100%
Edad
Sueldo Puesto Anual1 $ 1,000 $ 1,200 $ 1,200 $ 1,800
París D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ $ $ $ $ $
30,000 25,000 12,000 5,000 3,000 75,000
34% 25% 14.5% 14.5% 12% 100%
$ $ $ $ $ $
1,800 1,200 1,200 1,200 1,200 6,600
Casado Casado Soltero Soltero
París D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 25,000 $ 5,000 $ 5,000 $ 5,000 $ 40,000
26.66% 26.66% 20.0% 26.66% 100%
$ $ $ $
12,000 2,400 1,800 1,200
Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
Casado Soltero Soltero Soltero Soltero Soltero
D.F. D.F. París D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ $ $ $ $ $ $
30% $ 30% $ $ 20% $ 10% $ 10% $ 100%
12,000 2,400 8,000 1,560 1,200 1,200
Director superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
$ $ $ $ $
12,000 2,400 1,800 1,560 6,000
Director superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
Casado Casado Casado Soltero
40,000 20,000 5,000 10,000 5,000 3,000 83,000
40% 30% 22% 8%
Gerente-Admdor Gerente-Admdor Encargado de vtas. Gerente y mostrador Encargado de vtas.
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 28/02/1904 Colectiva-mercantil 6 años
Jose Ollivier Juan Buatista Bellón Eugenio Roux Jose Spitalier Armando Desvignes Federico Proal
75 43 41 37
Paris Paris D.F. D.F. Paris D.F. TOTAL
$ 100,000 $ 50,000 $ 10,000 $ 4,000 $ 2,000 $ 4,000 $ 170,000
25% 25% 20% 12% 12% 6% 100%
$ $ $ $ $ $
12,000 10,000 3,600 2,400 2,400 2,100
Director superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.Olliver y cía La Ciudad de Londrés 17/02/1910 Colectiva-mercantil 3 años
Jose Ollivier Eugenio Roux Armando Desvignes Jose Spitalier Federico Proal
80 Casado Paris 49 Casado D.F. Paris 43 Soltero D.F. 40 Soltero D.F. TOTAL
$ 100,000 $ 10,000 $ 2,000 $ 4,000 $ 4,000 $ 120,000
28% 26% 16% 16% 14% 100%
$ $ $ $ $
12,000 4,000 10,000 3,000 3,000
Director superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
1. Se encuentra expresado en Francos para José Ollivier, Armando Desvignes, Eugenio Roux y Juan B. Bellon en 1879,1889, 1894,1898,1904,1910. Fuente: De Anglade, Jean-Louis. Un Gran patrón barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille . Sabenca de la Valeia y D'Anglade. Barcelonnette, 2006 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México: Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha 99 Ignacio Burgoa Antiguo 34 15/1/1879 99 Ignacio Burgoa Antiguo 647 75 18/2/1884 99 Ignacio Burgoa Antiguo 647 76 18/2/1884 99 Ignacio Burgoa Antiguo 657 135 30/3/1899 40 Eugenio Pérez Antiguo 39 26/2/1894 5 Bernando Cornejo Antiguo 36 28/4/1899 5 Bernando Cornejo Antiguo 10 04/04/1904 5 Bernando Cornejo Contemporáneo 50 3746 03/02/1910 5 Bernando Cornejo Contemporáneo 53 3769 17/02/1910
99
Cuadro 6. Acciones propiedad de J. Ollivier y Cía. al 31/12/1898 (pesos corrientes). Empresa
No. de acciones
CIDOSA Banco de Londres y México San Rafael S.A. San Idelfonso S.A. Compañía Eléctrica, Irrigadora de Hidalgo S.A. La Teja Cía. de Loza del Niño perdido Banco de Jalisco TOTAL Fuente: De Anglade (2006), pp. 249.
Valor
7,698 1,031 2,346 1,350 442 555 764 100 14,286
Capital
$ $ $ $ $ $ $ $
245 150 128 107 72 45 65 75
$ $ $ $ $ $ $ $ $
1,886,000 155,000 300,000 144,000 32,000 25,000 50,000 7,500 2,599,500
Cuadro 6A. Acciones propiedad de J. Ollivier y Cía. 1899-1909 (pesos corrientes). Compañía
Fecha
CIDOSA 1 Banco de Londrés y México 1 Cía. Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A. Cía. Francesa de Porcelana S.A. El niño pérdido Banco de Jalisco 1 Azucarera del Panúco S.A. 1 Azucarera del Panúco S.A. Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 1 de San Idelfonso S.A. 1 San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A. 1 Banco Central Mexicano Compañía Bancaria de París y México S.A. TOTAL 1. Aumento de Capital
1899 14/7/1896 29/04/1899 1899 1899 20/08/1900 20/08/1900 23/07/1903 28/09/1903 13/05/1904 28/10/1909
No. de Valor nominal acciones 6,928 $ 100 1,031 $ 100 45 $ 100 688 $ 65 90 150 $ 100 400 $ 100 450 $ 100 1,900 22 9,770 21,474
$ $ $
100 100 100
Capital $ $ $ $
692,800 103,100 4,500 44,720
$ $ $
15,000 40,000 45,000
$ $ $
190,000 2,200 977,000
Fuente: De Anglade, Jean-Louis (2006) pp. 145-153, 205, 238-250, 265, 274-279, 307 -315, 347. Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Fondo
Com pañía Cía. explotado ra de las fuerzas hidroeléctricas
Notario
Vol
Escritura
Contemporáneo
Ramón Ruiz
14
650
B anco de Londrés y México Compañía Bancaria de París y México S.A.
Antig uo Contemporáneo
Rafael Morales B. Cornejo
3026 3,542
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo
B. Cornejo
3,694
S an Idelfonso Fábrica de tejid os de lana S.A.
Contemporáneo
Ramón Ruiz
19
Cía Irri gadora del Estado de Hidalgo S.A.
Antig uo
Ramon Ruiz
27
B anco Central Mexicano
Contemporáneo
Ramón Ruiz
30
1,138
B anco Central Mexicano
Contemporáneo
Ramón Ruiz
37
1,670
de San Idelfonso S.A. 2 51 53 752 120
En México, J. Ollivier y Cía. continuó renovándose por dos ocasiones más: una en febrero de 1904, cuando aumentó su capital a $170,000, y otra el 3 de febrero de 1910, en que disminuyó su capital a $120,000. La sociedad de 1910 estuvo integrada por José Ollivier, Eugenio Roux, Armando Designer, José 100
Spitalier y Federico Proal. Fue una sociedad mercantil de nombre colectivo que continuó con los negocios y establecimientos comerciales en las ciudades de México y París de la anterior sociedad (ver Cuadro 6). Su duración fue de tres años y su capital fue de menor monto que su antecesora debido al retiro de Juan Bautista Bellón. En esta sociedad se designó a José Ollivier y Armando Designer para administrar los negocios en París y los demás socios para los negocios en México. Los cinco socios se obligaron a dedicar tiempo, trabajo y empeño a los negocios de la sociedad, absteniéndose de participar por cuenta propia en otros que distrajeran su atención, excepto en aquellos que le interesaran a la sociedad y fueran aprobados por José Ollivier, quien sí podía participar en otras empresas individualmente. 150 Además, se acordó que si alguno de los socios se separaba voluntariamente; o hiciera mal uso del capital social, las utilidades; o presentará mala conducta (calificada por la mayoría de los socios), no tendría derecho a recibir el capital ni utilidades generadas, sino hasta el término de la sociedad. El capital aportado por cada socio recibiría un 5% de interés anual. La sociedad no se disolvería por el fallecimiento de alguno de sus socios. Si José Ollivier fallecía, su esposa Enriqueta Ouri de Ollivier continuaría con la sociedad, pero sólo con derecho a 12% de las utilidades. El resto que le correspondía a su esposo, se repartiría entre los demás socios.151 José Ollivier falleció el 4 de abril de 1910. Su esposa Enriqueta asumió la administración de los negocios, bajo la sociedad J. Ollivier y Cía. Sucesores. Sin embargo, por la crisis financiera de 1907, el estallido de la Revolución Mexicana (1910) y la Primera Guerra Mundial (1914-1918), los negocios sufrieron un decrecimiento y en 1919, al morir la viuda de José Ollivier, los socios restantes decidieron dividir a la sociedad en dos empresas: la primera con sede en París y de tipo colectivo. La segunda, con domicilio en México y del tipo comanditario.152
150
AHNM, Escritura 3746, volumen 50 Notaría 5, Bernardo García, 3/2/1910. Ídem. 152 D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 324. 151
101
La sociedad J. Tron y Cía. inició en la Ciudad de México, en 1876, con renovaciones cada 3 años.153 El 28 de febrero de 1885, José Léautaud, José y Enrique Tron, hermano y representante de Julio Tron, y Francisco Donnadieu, la constituyeron como una sociedad en comandita simple. José Léautaud fue el socio comanditario. Después, el 30 de enero de 1888, Francisco Donnadieu decidió separarse de esta sociedad. Los socios restantes constituyen J. Tron y Cía. como una sociedad colectiva dedicada al comercio, con un capital inicial de $100,000 pesos. La nueva sociedad se conformó por José Léautaud, José, Julio y Enrique Tron, y Damián Proal. José Tron fue el socio de mayor peso en la dirección del negocio y José Léautaud el que realizó las operaciones en París. Léautaud, Julio y José Tron fueron los socios colectivos que podían o no permanecer en México. Todos fueron gerentes y administradores, así como socios industriales y capitalistas. Debían dedicar su tiempo a “El Palacio de Hierro” de la Ciudad de México y se les prohibía hacer otros negocios. La duración de la sociedad fue de 4 años y 11 meses.154 El 25 de febrero de 1892, José Léautaud, Julio y Enrique Tron, este último representante de José Tron y José Signoret, firmaron la continuidad de la sociedad colectiva J. Tron y Cía., pero ahora integrada por un nuevo socio: José Signoret. Damián Proal se separó el 19 de enero de 1892. El capital de la sociedad continuó en $100,000, y su objeto siguió siendo el administrar el comercio “El Palacio de Hierro” y demás negocios de J. Tron y Cía. Los socios Enrique Tron y José Signoret se obligaron a emplear toda su aptitud, tiempo y trabajo en la compañía. Por ello se les consideró socios industriales y capitalistas y se les prohibió participar de manera individual en otros negocios ajenos a los de la sociedad. Los socios José Tron, José Léautaud y Julio Tron se consideraron socios colectivos y administradores. Tenían libertad para permanecer en el país o en Europa, pero estaban obligados a presidir la administración de los negocios en Europa y México si Enrique Tron y José Signoret se enfermaban o no podían
153
Martínez Gutiérrez, Patricia. El Palacio de Hierro. Arranque de la modernidad arquitectónica en la Ciudad de México. Fac.de Arquitectura y el Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, México, 2005, p. 39 154 AHNM, Escritura 33 y 34 del Volumen 655 de la Notaría 99 a cargo de Ignacio Burgoa, 30/1/1888.
102
llevar a cabo su labor. Se acordó que la sociedad duraría siete años, terminando el 31 de diciembre de 1898. En caso de fallecimiento de algún socio la sociedad continuaría operando y se les otorgaría a los herederos el capital del socio fallecido, ya sea en dinero o en bonos o valores equivalentes en acciones de CIDOSA, Bancos y otras compañías que haya adquirido la sociedad (ver Cuadro 8). Si en octubre y noviembre de 1898 los socios de común acuerdo decidían dar prórroga a la sociedad, se debía realizar una nueva escritura. Si decidían darla por terminada, debían designar un árbitro para que recibiera los sobres con la oferta de cada socio para ver quién se quedaba con la sociedad. Si no hubiera ofertas, el 1 de enero de 1899 se liquidaría la sociedad.155 El 6 de abril de 1898 los socios de J. Tron y Cía. decidieron modificar por completo a la sociedad, convirtiéndola en una sociedad anónima denominada “El Palacio de Hierro SA”. El objeto de esta compañía fue continuar con la explotación, ampliación y desarrollo de la tienda El Palacio de Hierro, así como de todos los demás negocios, bienes y valores de que era propietaria y tenía a su cargo la sociedad liquidada J. Tron y Cía. (ver Cuadro 8). Su capital inicial fue de $4, 000, 000, distribuidos en 40, 000 acciones al portador de un valor de $100 cada una. Su duración fue de 50 años, con opción de prórroga.156 En 1908, el capital de esta sociedad aumentó a 5 millones de pesos.157 Los datos de las diferentes tipos de organización jurídica que adquirió J. Tron y Cía., así como la información de los socios que formaron parte de ella, se encuentran sintetizados en el Cuadro 7. En este cuadro se observa que cuando J. Tron y Cía. se convirtió en SA, los socios fundadores José Léautaud, José, Julio y Enrique Tron, así como José Signoret, aportaron la mayor parte del capital. También se observa que los nuevos accionistas, en su mayoría, eran familiares, amigos, empresarios provenientes del Valle de Ubaye o antiguos socios de otros negocios: Justino Tron, Julio y José II Signoret, Alejandro Genin, Benveninto Derbez, Juan B. Ollivier, Antonio Reynaud, Domingo Meyran, Caire, Félix Suberville, Camilo Maure, Isidoro y José Caire. 155
AHNM, Escritura 38 Volumen 15 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 25/2/1892. AHNM, Escritura 75 Volumen 27 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 6/4/1898. 157 AHNM, Escritura 2866 volumen 43 Notaría 5 a cargo de Berrando Cornejo, 5/11/1908. 156
103
Cuadro 7. Evolución organizativa de la sociedad J. Tron y cía. 1888-1898 (pesos corrientes) Datos de la sociedad
Nombre
Edad
Estado
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
J.Tron y Cía. El Palacio de Hierro 30-1-1888 Colectiva 4 años
José Leautaud José Tron Julio Tron Enrique Tron Damián Proal
Civil 40 Casado 39 Soltero 32 25 Soltero 35 Soltero
Nombre Tienda Prórroga Sociedad Duración
J.Tron y Cía. El Palacio de Hierro 7-5-1892 Colectiva 7 años
José Leautaud José Tron Julio Tron Enrique Tron José Signoret
44 43 36 28 33
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
Fuente: Notaría 99 40 40
Datos de los socios Domicilio Capital París D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
Casado Casado Casado Soltero Soltero TOTAL
$ $ $ $ $ $
TOTAL
$ 861,500 $ 787,400 $ 550,000 $ 567,800 $ 335,000 $ 276,300 $ 250,000 $ 100,000 $ 50,000 $ 35,000 $ 30,000 $ 21,000 $ 8,000 $ 25,000 $ 20,000 $ 10,000 $ 10,000 $ 8,000 $ 10,000 $ 5,000 $ 5,000 $ 5,000 $ 5,000 $ 4,000 $ 4,000 $ 4,000 $ 4,000 $ 4,000 $ 3,000 $ 2,000 $ 4,000,000
El palacio de Hierro S.A. José Tron El palacio de Hierro S.A. José Leautaud 6/4/1898 Julio Tron Anónoma Enrique Tron 50 años José Signoret Juan B. Ollivier Justino Tron Leon Reminsat José Ollivier Antonio Reynaud Benveninto Derbez Domingo Meyran Felix canin Jose signoret II Julio Signoret Guillermo Franz Felix Suberville Mariano F. Jáuregui Estella Peker p.R. Sentenal Isidoro Caire Leon Bense F. Larradel Cayetano Costes Vicente Herrera Eugenio A. Gilly Alejandro Genin Jose Caire Camilo Maure Genaro Velasco
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notario Fondo Volumen Escritura Ignacio Burgoa Antiguo 655 34 Eugenio Pérez Antiguo 16 38 Eugenio Pérez Antiguo 27 75
Porcentaje Sueldo
aportado de utilidad $ 50,000 20% $ 20,000 20% $ 15,000 20% $ 10,000 25% $ 5,000 15% $ 100,000 15% 50,000 20,000 15,000 10,000 5,000 100,000
16% 16% 20% 28% 20% 100%
Puesto
Anual $ 1,200 $ 1,200 $ 1,200 $ 1,200 $ 1,200 $ 6,000
Gerente-Admdor Gerente superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
$ 1,200 $ 1,200 $ 1,200 $ 1,200 $ 1,200
Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
Fecha 30/1/1888 7/5/1892 6/4/1898
104
Las acciones que poseía J. Tron y Cía. al momento de su liquidación se enumeran en el Cuadro 8. En él se especifica la empresa, el número y valor de acciones que poseía al 31 de diciembre de 1897. Cabe resaltar que si comparamos su participación accionaria en CIDOSA con la que poseía J. Ollivier y Cía. para 1898, ésta era muy semejante en número de acciones: 7767 para J. Tron y Cía. y 7698 para J. Ollivier y cía. Además, al igual que esta compañía los socios de J. Tron y Cía. invirtieron en el Banco de Londres y México y en la Cía. Eléctrica e irrigadora SA y en la Fábrica de Lana San Idelfonso.
Cuadro 8. Acciones propiedad de J. Tron y Cía., al 31/12/1897 (pesos corrientes).
Empresa
No. de
CIDOSA Banco de Londres y México San Idelfonso S.A. Compañía Eléctrica, Irrigadora S.A. TOTAL
acciones 7,767 2,110 50 350 10,277
Valor $ $ $ $
Capital 130 120 100 10
$ 1,009,742.5 $ 253,200.0 $ 5,000.0 $ 3,500.0 $ 1,271,442.5
Fuente: Escritura 75 Volumen 27, notaría 40 de Eugenio Pérez, AHNM, 6/4/1898
Signoret, Honnorat y Cía. se creó en la Ciudad de México el 28 de marzo de 1887, cuando Antonio Bounfac decidió por voluntad propia separarse de la sociedad Signoret, Bourafac y Cía. Esta sociedad mercantil comercializaba ropa, casimires, paraguas y bonetería en las tiendas “El Puerto de Veracruz” y “El Zafiro”, del DF. También manejaba la representación de sus socios en la sociedad anónima Cía. Manufacturera de Cerritos, dueña de la fábrica de Cerritos en Orizaba, Veracruz. La nueva sociedad Signoret, Honnorat y Cía., tuvo como socios a León y Antonio Signoret y a León Honnorat. Su capital inicial fue de $12,000 pesos. Todos los socios aportaron la misma cantidad de capital y por ello todos fueron considerados gerentes-administradores de la tienda “El Puerto de Veracruz”. La sociedad se estableció con una duración de 5 años y se estipuló que
105
en los últimos 2 años de su existencia cada socio debía recibir un 33.33% de la utilidad.158 El primero de enero de 1892, los socios de Signoret, Honnorat y Cía. decidieron continuar con la sociedad, pero ahora integrando a Agustín Honnorat y aumentando el capital a $100,000. Esta nueva sociedad colectiva tuvo una duración de 5 años y siguió explotando el comercio de “El puerto de Veracruz”. Se acordó que los socios Desiderio Signoret, León y Agustín Honnorat estaban obligados a emplear todo su empeño, tiempo y trabajo en la sociedad, y que no se les permitía formar parte de otras sociedades individualmente, pero sí como parte de la sociedad. León y Antonio Signoret no quedaron obligados a dedicar todo su esfuerzo a la compañía, por lo que podían o no permanecer en México. La sociedad terminaría el 31 de diciembre de 1896, pero podía ser prorrogada con consentimiento de los socios. De ser liquidada, el 27 de febrero de 1897 se les permitiría a León y Antonio Signoret, así como a León Honnorat, tomar –si así les conviniere- cada uno para sí un 25% de las acciones de CIDOSA, que tenía la sociedad de Signoret, Honnorat y Cía., al precio de costo de adquisición.159 Esta sociedad siguió renovándose hasta el 30 de junio de 1912, que llegó a su fin. Sus socios decidieron disolverla y poner en subasta cerrada entre ellos la tienda “El Puerto de Veracruz”. Acordaron que mientras se otorgaba la escritura de disolución y adjudicación respectiva, los socios que adquirieran la tienda podrían seguir usando la razón social Signoret, Honnorat y Cía., agregándole “Sucesores”, pero solamente durante el plazo que se fijara al contrato de la sociedad que se organizara. Terminado ese plazo, no podía seguir usando la razón social mencionada. También acordaron que los cargos de vocal en los consejos de Administración de CIDOSA y del Banco de Londres y México, los seguiría ejerciendo León Signoret. La subasta fue ganada por Antonio Signoret, quien ofreció $855,000.00. Antonio Signoret se unió a Mariano Allegre, Antonio Donnadieu y Domingo Gastunel y Amado Martel, para fundar la sociedad Signoret, Honnorat y Cía.
158 159
AHNM, Escritura 53 y 54 del volumen 2006 de la Notaria 294 a cargo de Miguel Ma. Garduña, 28/3/1887. AHNM, Escritura 1 del volumen 15 Notaría 30 a cargo de Eugenio Pérez, 1/1/1892.
106
Sucesores, con duración de 8 años, con opción de prórroga de 5 años más. En esta sociedad Antonio Signoret fue el gerente superior y tenía la opción de no radicar en el país, mientras que los otros 4 socios debían vivir en México y hacerse cargo de la administración de la tienda “El Puerto de Veracruz”, poniendo todo su tiempo, actitud e inteligencia y no participando en otros negocios ajenos a la sociedad de manera particular. Respecto a las utilidades que se obtuvieran, se apartarían 20,000 pesos para amortiguar la deuda del costo de los inmuebles, además se acordó repartir sólo el 70% entre los socios y el 30% restante utilizarlo para títulos de gratificaciones entre los apoderados y demás empleados de la compañía en los términos que pactaran los socios.160 Los datos de los socios que pertenecieron a la Signoret, Honnorat y Cía., así como los capitales que aportaron se describen en el Cuadro 9. En este cuadro se observa que a diferencia de las otras sociedades mercantiles analizadas hasta ahora, en Signoret, Honnorat y Cía., de 1887 a 1912 todos los socios aportaron la misma cantidad de capital. Sin embargo, se les asignaba diferente porcentaje de utilidad, de acuerdo a la antigüedad y conocimiento del negocio. Además de la tienda de novedades “El Puerto de Veracruz”, Signoret, Honnorat y Cía. participó como accionista de las empresas que se enumeran en el Cuadro 10. En este cuadro identificamos que esta sociedad en 1892 poseía 3876 acciones de CIDOSA, que de acuerdo al Cuadro 2A eran un poco más de las acciones que poseían J. Ebrard y Cía., J. Tron y Cía. y J. Ollivier y Cía., las cuales tenían 3800 acciones cada una. Al igual que las sociedades anteriores, los asociados de Signoret, Honnorat y Cía. también invirtieron en el Banco de Londres y México, la Fábrica de Lana San Idelfonso y la Cía. Eléctrica e Irrigadora del Estado de Hidalgo. Además de la Cía. Bancaria de París y México.
160
AHNM, Escritura 5435, Volumen 64 Notaría 5 a cargo de Eugenio Pérez, 11/9/1912.
107
Cuadro 9. Evolución organizativa de la sociedad Signoret, Honnorat y Cía. 18871912 (pesos corrientes). Datos de la sociedad
Nombre
Edad
Datos de los socios Estado Domicilio Capital
Porcentaje
Sueldo
Civil
de utilidad
Mensual
aportado
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
Signoret, Honnorat y cía El Puerto de Veracruz 28-3-1887 Colectiva-mercantil 5 años
León Signoret Antonio Signoret León Honnorat
31 Soltero D.F. 36 Soltero D.F. 27 Soltero D.F. TOTAL
$ $ $ $
Nombre Tienda Prórroga Sociedad Duración
Signoret, Honnorat y cía El Puerto de Veracruz 1-1-1892 Colectiva-mercantil 5 años
León Signoret Antonio Signoret León Honnorat Agustín Honnorat Desiderio Signoret
35 40 32 21 38
D.F. D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 20,000 $ 20,000 $ 20,000 $ 20,000 $ 20,000 $ 100,000
D.F. D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 30,000 $ 30,000 $ 30,000 $ 30,000 $ 30,000 $ 150,000
Signoret, Honnorat y cía. sucesores Tienda El Puerto de Veracruz Fundación 11/09/1912 Sociedad Colectiva-mercantil Duración 8 años
Soltero Soltero Casado Soltero Soltero
4,000 4,000 4,000 12,000
35% 35% 30% 100%
$ $ $ $
Puesto
150 Gerente-Admdor 150 Gerente-Admdor 150 Gerente-Admdor 450
23% 17% 26% 17% 17% 100% $
-
Nombre
Fuente: Notaría 294 40 5 2 5
Antonio signoret Mariano Allegre Antonio Donnadiue Domingo Gatunel Amado Martel
71 46 46 33 31
Casado Casado Casado Soltero Soltero
16% 18% 15% 11% 10% 70%
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notario Fondo Volumen Escritura Fecha Miguel María Garduña Antiguo 2006 54 28/03/1887 Eugenio Pérez Antiguo 15 1 01/01/1892 Bernando Cornejo Contemparáneo 2 5 12/04/1902 Jesús Trujillo Contemparáneo 19 1436 19/11/1906 Bernando Cornejo Contemparáneo 64 5435 11/09/1912
Cuadro 10. Acciones propiedad de Signoret, Honnorat y Cía. 1892-1909 (pesos corrientes). Compañía
Fecha
1
CIDOSA 1 Banco de Londrés y México 1 Cía. Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A. 1 San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A. Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 1 de San Idelfonso S.A. Compañía Bancaria de París y México S.A. TOTAL 1. Aumento de Capital
No. de Valor Capital acciones nominal 14/10/1892 3,876 $ 100 $ 387,600 14/07/1896 $ 100 $ 29/04/1899 212 $ 100 $ 21,200 28/09/1903 590 $ 100 $ 59,000 23/07/1903 300 $ 100 $ 30,000 28/10/1909
3,260 8,238
$
100
$
326,000
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Compañía
Fondo
Notario
Vol
Escritura
CIDOSA
Antiguo
Rafael Morales
3032
Cía. explotado ra de las fuerzas hidroeléctricas
Contemporáneo
Ramón Ruiz
B anco de Londrés y México
Antiguo
Rafael Morales
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo
B. Cornejo
3,542
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo
B. Cornejo
3,694
S an Idelfonso Fábrica de tejid os de lana S.A.
Contemporáneo
Ramón Ruiz
19
Cía Irri gadora del Estado de Hidalgo S.A.
Antiguo
Ramon Ruiz
27
14
122 650
de San Idelfonso S.A. 3026
2 51 53 752 120
108
Lambert, Reynaud y Cía. se fundó el 7 de marzo de 1889 como una sociedad colectiva cuyo objeto fue la venta de lencería nacional y extranjera en la tienda “El Correo Francés”, ubicada en la ciudad de México. Su capital inicial fue de $12,000 pesos. Sus socios fueron Mateo Lambert, Casimiro Reynaud, Graciano Guichard y Julio Beraud. Todos fueron considerados socios administradores y directores, pero Mateo Lambert fue el gerente superior. Lambert y Reynaud fueron los socios con mayor aportación de capital, por lo que debían autorizar las operaciones más importantes. Además dado que el señor Lambert, Reynaud y Guichard no conocían la aptitud física y moral del señor Beraud para el desempeño de las obligaciones y trabajos que este contrato le imponía, quedó pactado que si Beraud no cumplía con lo asignado, no se le haría acreedor a participar en las utilidades hasta que reparara el daño o cumpliera lo estipulado. Lambert, Reynaud y Cía. tuvo una duración de 3 años, finalizando el 31 de diciembre de 1892, pero con opción de prórroga.161 Después de 1892, Lambert, Reynaud y Cía. continuó operando, pero se transformó en M. Lambert y Cía. Esta sociedad también tuvo por objeto la administración del cajón de ropa “El Correo Francés” y demás negocios de la antigua sociedad Lambert, Reynaud y Cía. Fue una sociedad mercantil colectiva, con un capital de 10,000 y una duración de 5 años. El capital aportado por cada socio generó un interés del 6% anual, que se pagó con cargo a la cuenta de pérdidas y ganancias. Además del capital aportado, los socios Guichard, Beruad y Francisco Reynaud se obligaron a emplear toda su aptitud, tiempo, trabajo y empeño a favor de la sociedad, dado que tenían el carácter de socios industriales y capitalistas. Asimismo, no podían ocuparse en otros negocios por su cuenta, excepto aquellos que aprobara Mateo Lambert. Este último tenía la capacidad de realizar negocios diferentes a la sociedad de manera individual y de radicar fuera del país.162 Al fallecer Mateo Lambert, los demás socios decidieron disolver esta sociedad y fundar el 28 de diciembre de 1903, M. Lambert y Cía. Sucesores. Esta nueva
161 162
AHNM, Escritura 107 del volumen 9225 de la Notaria 617 a cargo de Agustín Roldán, 7/3/1889. AHNM, Escritura 36, volumen 740 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 1/2/1899.
109
organización incluyó a Casimiro Reynaud, Graciano Guichard, Julio Beraud y Adrian David. Fue una sociedad colectiva mercantil que tuvo por objeto el comercio, explotación, compra y venta de artículos de lencería extranjeros y del país en la tienda “El Correo Francés” y demás negocios que tuviera la anterior sociedad (ver Cuadro 12). Los cuatro socios tenían a su cargo la administración, gerencia y dirección de los negocios de la compañía, así como el uso de la firma social, considerando que para pactar negocios ajenos al objeto de la compañía, debía consultarse previamente a Graciano Guichard y Julio Beraud. El capital aportado a esta sociedad fue de $4,000 por parte de Guichard y Beraud y $2,000 de los demás socios. Este capital generó un interés del 6% anual, que se pagó con cargo a la partida de pérdidas y ganancias. Los socios Francisco Reynaud y Adrian David debían emplear toda su aptitud, tiempo, trabajo y empeño a favor de la sociedad (eran socios capitalistas e industriales), no podían formar parte de otras sociedades, ni emprender de manera particular otros negocios, excepto aquellos que previa autorización de Guichard y Beraud, fueran de interés para la sociedad. Guichard y Beraud sí podían emprender negocios por su cuenta y se les concedía el derecho de vivir fuera del país. Asimismo, durante cualquier plazo de esta sociedad, Guichard y Beruad tenían la facultad de admitir como asociados a las personas que designaran, sin necesidad de liquidarla. Vencido el plazo de la sociedad, estos mismos socios podían optar por quedarse con “El Correo Francés” (liquidando con la parte que les correspondía a los demás socios) u optar por disolverla. M. Lambert y Cía. tuvo una duración de 3 años, con opción de prórroga hasta de 5 años, si los socios así lo decidían. No se disolvió por la muerte de alguno de los socios, ni porque alguno de ellos presentara incapacidad física o moral para realizar sus funciones de gerente-administrador. Se acordó que en el caso de que un socio hiciera un acto indebido que perjudicara a los intereses de la compañía, como el dar un uso indebido de la firma social, sería separado sin derecho a participar en las utilidades generadas.163 Los datos de los socios que pertenecieron a la Lambert, Reynaud y Cía., así como los capitales que aportaron se describen en el Cuadro 11. 163
AHNM, Escritura 154 Volumen 7, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 28/12/1903.
110
El cuadro 11 recopila los datos de los socios y capitales que conformaron Lambert, Reynaud y Cía. de 1889 a 1904. De acuerdo con su información, Mateo Lambert y Casimiro Reynaud fueron los socios que aportaron mayor capital y a los que les correspondía mayor porcentaje de utilidad hasta 1899, cuando Graciano Guichard y Julio Beraud se convirtieron en los socios principales por la muerte de Lambert. A diferencia de las demás sociedades mercantiles descritas, su socio principal no era de origen barcelonnette (Lambert era italiano) y además sus asociados permanecieron en México todo el tiempo que existió la tienda “El correo Francés”. M. Lambert y cía. también participó como accionista de las empresas que se muestran en el Cuadro 12. En este cuadro se observa que M. Lambert y Cía. poseía en 1892 menor número de acciones de CIDOSA que las sociedades mercantiles anteriores, pero también fue socio de Cía. irrigadora, de la Fábrica de San Idelfonso y de la Cía. Bancaria de París y México.
Cuadro 11. Evolución organizativa de la sociedad Lambert, Reynaud y Cía. 18891904 (pesos corrientes).
Datos de la sociedad
Nombre
Datos de los socios Estado Domicilio Capital
Edad
Porcentaje Sueldo
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
Lambert, Reynaud y cía El Correo Francés 7-3-1889 Colectiva 3 años
Mateo Lambert Casimiro Reynaud Graciano Guichard Julio Beraud
33 31 32 34
Civil Soltero Soltero Soltero Soltero
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
M. Lambert y cía. El Correo francés 1/2/1899 Colectiva 5 años
Mateo Lambert Graciano guichard Julio Beraud Francisco Reynaud
43 43 43 37
Casado Casado Soltero Soltero
D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 4,000 $ 2,000 $ 2,000 $ 2,000 $ 10,000
38.89% 30% 20% 11% 100%
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
M. Lambert y cía. sucesores El Correo francés 01/01/1904 Colectiva 3 años
Graciano guichard* Julio Beraud* Francisco Reynaud Adrian David
48 48 41 32
Casado Soltero Casado Soltero
D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
$ 4,000 $ 4,000 $ 2,000 $ 2,000 $ 12,000
30% 30% 24% 16% 100%
* Fuente: Notaría 697 40 5 5
D.F. D.F. D.F. D.F. TOTAL
aportado de utilidad $ 4,000 40% $ 4,000 36% $ 2,000 14% $ 2,000 10% $ 12,000 100%
Mensual $ 100 $ 100 $ 80 $ 70 $ 350 $ $ $ $ $
Puesto Gerente superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor Gerente-Admdor
100 50 50 50 250
$ 500 $ 500 $ 100 $ 50 $ 1,150
Gerente superior Gerente superior Gerente-Admdor Gerente-Admdor
El sueldo que se especifica es si vivien en la Ciudad de México, si radican en otro lado, sería de $100 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notario Fondo Volumen Escritura Fecha Agustín Roldan Antiguo 9225 107 07/03/1889 Eugenio Pérez Antiguo 740 36 01/02/1899 Bernando Cornejo Contemporáneo 7 154 28/12/1903 Bernando Cornejo Contemporáneo 12 216 18/08/1904
111
Cuadro 12. Acciones propiedad de M. Lambert y Cía. 1892-1909 (pesos corrientes). Compañía
Fecha
1
CIDOSA 1 Cía. Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A. 1 San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A. Compañía Bancaria de París y México S.A. TOTAL 1. Aumento de Capital
14/10/1892 29/04/1899 28/09/1903 28/10/1909
No. de
Valor
Capital
acciones nominal 2,799 $ 100 273 $ 100 608 $ 100 3,260 $ 100 6,940
$ $ $ $
279,900 27,300 60,800 326,000
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Compañía
Fondo
CIDOSA
Antiguo
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Notario Rafael Morales
Vol
Escritura 3,032
122
Contemporáneo B. Cornej o
3,542
51
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo B. Cornej o
3,694
S an Idelfonso Fábrica de tejid os de lana S.A.
Contemporáneo Ramón Ruiz
19
Cía Irri gadora del Estado de Hidalgo S.A.
Antiguo
27
Ramon Ruiz
53 752 120
Garcín Faudon y Cía. sociedad colectiva fue constituía en la Ciudad de México por Eduardo Garcín, León Faudon y Mario Pléasant con el objeto de ejercer el comercio de lencería nacional y extranjera en la tienda “El Gran Oriental”. En 1885 Adolfo Garcín y Emilio Faudon eran dueños únicos del cajón de ropa “El Gran Oriental”, bajo la razón social Argentin, Faudon y Cía. Sucesores, pero el 25 de febrero de 1886 disolvieron la sociedad, enajenando, cediendo y traspasando en toda forma a favor de Garcín, Faudon y Cía. los inventarios, activos y pasivos de “El gran Oriental”. Éste fue vendido en $39,420 pesos liquidables en pagares. En la nueva sociedad Garcín, Faudon y Cía. se contó con un capital inicial de $15,000 pesos y se acordó una duración de 5 años con opción a prórroga. Además se pactó no disponer de las utilidades que generara la tienda hasta el término de la sociedad para aumentar el capital social.164 El 31 de marzo de 1891, Eduardo Garcín, León Faudon y Mario Plésant continuaron con la sociedad Garcín, Faudon y Cía., pero con un capital de $30,000 (cada socio aporta $10,000), y con una duración de 8 años, contados desde el 1 de enero de 1891 hasta el 31 diciembre de 1898. También pactaron que a los socios no se les permitiera participar individualmente en otros negocios, pero sí a la sociedad como tal. Acordaron que la sociedad no se disolvería si fallecía alguno de los socios, y se le concedió a Mario Plésant la opción de 164
AHNM, Escritura 78 y 79 del volumen 651 de la Notaría 99 a cargo de Ignacio Burgoa, 25/2/1886.
112
separarse en los 3 primeros años. Al término de los ocho años, Eduardo Garcín se haría cargo de la sociedad, a menos que no le conviniera a sus intereses, caso en el cual León Faudon se haría cargo de ella.165 Garcín, Faudon y Cía., se transformó el 14 de marzo de 1905 a L. Faudon y Cía. sucesores. Esta nueva sociedad se formó por Camilo Plésant, Luciano Faudon y Francisco Rougon. Tenía como objetivo la administración de la tienda “El Gran Oriental” y demás negocios que tuviera la anterior sociedad (ver Cuadro 14). Fue declarada en quiebra en 1911 y vendió todos sus activos (que ascendían a $133,953.35) en el 50% de su valor (es decir, $76,976.67) a la compañía P. J. Jacques, sucesores, sociedad en comandita. José Ollivier estaba dispuesto a hacer una oferta para adquirir las mercancías, créditos activos, enseres y útiles de la organización “El Gran Oriental”, pero sólo ofreció pagar el 49% de su valor.
166
Los datos de fechas de fundación, capital, datos personales de los socios (nombres, edad, estado civil, domicilio, lugar de origen), puestos, sueldos asignados y porcentajes de utilidades que les correspondía se encuentran especificados en el Cuadro 13. En él se observa que los socios de Garcín, Faudon y Cía., al igual que Signoret, Honnorat y Cía. aportaron el mismo monto de capital, pero con la diferencia de que en esta sociedad se les otorgó el mismo porcentaje de utilidad y no se hizo distinción por su experiencia o conocimiento. Otra característica que la distinguía es que a diferencia de las demás sociedades cuyo capital seguía creciendo en 1910, ésta se declaró en quiebra en 1911. Además de la tienda de “El Gran Oriental”, L. Faudon y Cía. participó como accionista en las empresas que se enumeran en el Cuadro 14. En él se observa que la sociedad, en 1892, poseía sólo 2513 acciones de CIDOSA, mientras que las sociedades anteriores tenían 3800 y 2799 M. Lambert y Cía. También era accionista en menor proporción a sus antecesoras en las Cía. Explotadora de las fuerzas hidroeléctricas de San Idelfonso SA, el Banco Central Mexicano y la Compañía Bancaria de París y México SA.
165 166
AHNM, Escritura 56 del volumen 14 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 31/3/1891. AHNM, Escritura 4539, volumen 54, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 22/4/1911.
113
Cuadro 13. Evolución organizativa de la sociedad Garcín, Faudon y Cía. 18961905 (pesos corrientes) Datos de la sociedad
Nombre
Edad
Datos de los socios Estado Domicilio Capital
Porcentaje
Sueldo
Civil
de utilidad
Mensual
aportado
Puesto
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
Garcín, Faudon y cía El Gran Oriental 22-2-1886 Colectiva 5 años
Eduardo Garcín León Faudón Mario Plésant
26 Soltero D.F. 25 Soltero D.F. 33 Soltero D.F. T OTAL
$ $ $ $
5,000 5,000 5,000 15,000
33.33% 33.33% 33.33% 100%
$ $ $ $
50 Gerente-Admdor 50 Gerente-Admdor 50 Gerente-Admdor 150
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
Garcín, Faudon y cía El Gran Oriental 31/3/1891 Colectiva 8 años
Eduardo Garcín León Faudón Mario Plésant
31 Soltero D.F. 29 Soltero D.F. 38 Soltero D.F. T OTAL
$ $ $ $
10,000 10,000 10,000 30,000
33.33% 33.33% 33.33% 100%
$ $ $ $
100 100 100 300
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
L. Faudon y cía. sucesores El Gran Oriental 14/03/1905 Colectiva
Fuente: Notaría 99 40 5 5 5
Camilo Plesant Luciano Faudon Francisco Rougon T OTAL
$ 133,953.35
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Volumen Escritura Fecha Notario Fondo Ignacio Burgoa Antiguo 651 78 22/02/1886 Eugenio Pérez Antiguo 14 56 31/03/1891 Bernando Cornejo Contemporáneo 50 3541 28/10/1909 Bernando Cornejo Contemporáneo 49 3670 04/01/1910 Bernando Cornejo Contemporáneo 54 4539 22/04/1911
Cuadro 14. Acciones propiedad de L. Faudon y Cía. 1892-1909 (pesos corrientes). Compañía
Fecha
1
CIDOSA Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas de San Idelfonso S.A.1 1 Banco Central Mexicano Compañía Bancaria de París y México S.A. TOTAL 1. Aumento de Capital
14/10/1892 23/07/1903 13/05/1904 28/10/1909
No. de
Valor
Capital
acciones nominal 2,513 $ 100 200 $ 100 175 650 3,538
$ $
100 100
$ $
251,300 20,000
$ $
17,500 65,000
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Compañía
Fondo
CIDOSA
Antiguo
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Notario Rafael Morales
V ol
Escritura 3,032
122
Contemporáneo B. Cornejo
3,542
51
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo B. Cornejo
3,694
B anco Central Mexicano
Contemporáneo Ramón Rui z
30
1,138
B anco Central Mexicano
Contemporáneo Ramón Rui z
37
1,670
Cía. explotado ra de las fuerzas hidroeléctricas
Contemporáneo Ramón Rui z
14
650
53
de San Idelfonso S.A.
114
En general todas estas tiendas comerciales, se organizaron como sociedades colectivas o como sociedades comanditarias. En el primer tipo de organización, todos los socios eran responsables de las deudas y gestión de la empresa. En el segundo, algunos socios eran responsables de la administración y otros de aportar el capital, pero no participaban en la gestión. En el caso de las sociedades colectivas, éstas “tuvieron plazos cortos (de 3 a 5 años), generaron un interés por el capital aportados (entre el 5 y 6%) y sólo se permitió a sus socios retirar las utilidades hasta que finalizaba la sociedad. En ellas los socios se asignaban sueldos muy bajos (ver Cuadro 3 al 10), y si alguien decidía salirse sólo se le pagaba un porcentaje de su utilidad para que no se descapitalizara la sociedad, o se invitaba a otro socio y con el capital que éste aportaba se pagaba al socio saliente, pero en menor cantidad. Estas sociedades contaban con socios en Francia y con un manejo de negocios en Europa que les permitían aumentar sus importaciones. Además pasaban de empresas familiares a corporaciones con socios que no eran ajenos, sino que se conocían entre ellos. De hecho, si alguien quería vender, primero ofrecía su parte dentro de la misma sociedad. Asimismo, a pesar de que sus empresas cambiaban de dueños el negocio continuaba operando como antes”.167 En las sociedades en comandita, los socios comanditarios debían radicar en el país porque quedaban a cargo de los negocios comerciales, administrativos y judiciales, así como el uso de la firma social de la compañía. Les quedaba estrictamente prohibido hacer uso de dicha firma para negocios particulares o ajenos al objeto de la sociedad. Sí esto sucedía se les separaba inmediatamente. En el caso de los socios comanditados podían radicar fuera del país, pero debían hacerse cargo de los negocios, si los primeros faltaban. Durante el periodo de 1889 a 1910 sólo la sociedad de J. Tron y Cía. se organizó como una Sociedad Anónima (SA).168 Esto porque la tienda “El Palacio de Hierro” se transformó en una tienda de departamentos y se requirió de grandes capitales para ello. Las sociedades anónimas se forman por accionistas con 167
Entrevista a Aurora Gómez Galvarriato Julio 2007. En 1898, J.Tron y Cía. se convirtió en El Palacio de Hierro S.A.; y el 30/9/1925, J. Ollivier y Cía. se transformó en Almacenes de Ropa “La Ciudad de Londres” sucursal de J.Ollivier y cía. SA. 168
115
responsabilidad limitada, que designan a un consejo de administración y/o administradores profesionales, para que lleven a cabo la gestión de sus negocios. A pesar de las diferencias de cada tipo de organización, todas las asociaciones entre barcelonnettes estaban condicionadas por la confianza que se les tenía a los futuros socios y por las ganancias que se recibirían por hacer un nuevo negocio. Si la confianza no era plena o era traicionada, se aplicaban sanciones con altos costos económicos. Además, tanto en las sociedades colectivas como en las comanditarias resaltaba la figura del socio fundador, quien aportaba mayor capital, tomaba las decisiones más importantes (inversiones en bienes inmuebles, asociaciones con otras empresas, etc.) y al que sí se le permitía participar por su cuenta en otros negocios. Los socios fundadores más sobresalientes se identifican en el siguiente apartado.
Los principales socios Gómez Galvarriato señala que el estudio de los archivos de CIDOSA indica que desde su conformación esta compañía estaba administrada por gerentes, que a su vez eran supervisados por un consejo de administración formado por altos ejecutivos
de
las
empresas
comerciales
barcelonnettes,
sus
principales
accionistas. La autora señala que las actas de consejo permiten observar que “en sus consejos directivos no se sentaban individuos a título personal, sino representantes de las compañías comerciales que la mayoría de las veces no eran los principales propietarios, sino sus gerentes”.169 Por ejemplo, el primer consejo de administración170 de CIDOSA se formó por Tomás Braniff, Juan F. Dachary, de J. Ollivier y Cía., Antonio Proal, de J.B. Ebrard y Cía., Mateo Lambert, de Lambert, Reynaud y Cía., León Faudon, de Garcín, Faudon y Cía., como propietarios, y Mario Ollivier, de J. Ollivier y Cía., Honorato Beraud, de J.B. Ebrard y Cía. Graciano Guichard, de Lambert, Reynaud y Cía., y Eduardo Garcín, de Garcín, 169
Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit, (s/f) p.43 Para conocer los accionistas que formaron los Consejo de Administración de CIDOSA de 1905-1932, consultar los anexos de Gómez Galvarriato, Aurora. “The impact of revolution: Busines and labor in the Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. Tesis de doctor en Historia. Harvard University. Cambridge, Massachussets, Diciembre 1999a, pp. 631-632. 170
116
Faudon y Cía. como suplentes”.
171
Estos representantes – como se observa en
los Cuadros 3 al 10- ocupaban los puestos de gerente y atención del mostrador en el caso de Juan Dachary, encargado de ventas en el caso de Mario Ollivier, ambos en la tienda de “La Ciudad de Londres”; gerente superior de la tienda “El Correo Francés”, en el caso de Mateo Lambert, y gerente administrador, en el caso de todos los demás, en las tiendas de “El puerto de Liverpool”, “El Palacio de Hierro” y “El Gran Oriental. De ellos sólo Mateo Lambert (de origen italiano) era el propietario principal de la tienda que representaba. Todos los demás eran accionistas minoritarios que no contaban con el capital ni con la experiencia de los principales socios de las tiendas comerciales accionarias de CIDOSA. Los socios fundadores de las tiendas accionarias de CIDOSA fueron Juan Bautista Ebrard, quien aportó el 40% del capital a J.B. Ebrard y Cía., propietaria de la tienda comercial “El Puerto de Liverpool”; José Ollivier, gerente superior de J. Ollivier y Cía. y dueño del 40% del capital de la tienda “La Ciudad de Londres”; José Léautaud, quien poseía el 50% del capital de J. Tron y Cía., dueños de “El Palacio de Hierro”, y León Signoret, gerente de Signoret, Honnorat y Cía., propietarios de “El puerto de Veracruz”. Aunque aportó la misma cantidad de capital que sus correspondientes socios, le correspondía un mayor porcentaje de las utilidad (35%), dada su experiencia. Las fotografías de algunos de estos barcelonnettes se muestran en la Imagen 4. Imagen 4. Fotografías de los principales socios de las tiendas accionarias de CIDOSA, 1889-1911.
León Signoret
Fuente: Proal (1998) y Foto 222 Negativos 2-4 del Fondo Santa Rosa del AGEV. 171
AHNM, Escritura 155, del Volumen 3025, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/06/1889.
117
De los socios fundadores mencionados, sobresalieron por su visión de negocios y fortunas alcanzadas José Ollivier, José Léautaud y León Signoret. José Ollivier emigró a México en 1850. Trabajó como empleado de la casa de novedades de “La Ciudad de Londres (1838)”. Cuatro años después estableció su propia tienda en la Ciudad de México: “La Estrella de Santo Domingo (1854)”. Esta casa de comercio la vendió y se asoció con Ferdinando Jauffred para administrar la misma tienda donde había sido empleado (La Ciudad de Londres, 1863). En 1903 adquirió dos casas de novedades más: “La Sorpresa” y “La Primavera”. Posteriormente, con las ganancias generadas por estos y otros negocios como Cristalería La Moderna (1904) y la Cía. Francesa de Porcelana (1890) ubicada en la calle del Niño Perdido, en México, DF, una casa de novedades en Veracruz y una hacienda en Monterrey, participa en la creación de la Fábrica de Papel San Rafael (1890), la Cía. Azucarera El Pánuco (1898), y las fábricas textiles de CIDOSA (1889) y San Idelfonso (1895). No sólo tenía negocios en México, sino también en Inglaterra y París. Por ello, “debido a sus cualidades y al papel destacado que desempeño en México, el gobierno francés le otorgó en 1894 la Cruz de la Legión de Honor”.172 José Ollivier también poseía una gran visión para apostar por las finanzas. Por ello creó la Sociedad Financiera para la Industria en México (1898) y la Cía. Bancaria de París y México (1909). También participó como accionista del Banco de Londres y México y del Banco de Jalisco. Este empresario jugó un rol importante en la definición de las estrategias de sus negocios y su capacidad de emprender siguió intacta hasta su muerte en 1910.173 José Léautaud y los hermanos Tron (José, Julio y Enrique) desembarcaron en México en 1864, 1872 y 1873, respectivamente. José Léautaud trabajó diez años como empleado de la tienda “La Valenciana”, y los hermanos Tron en la tienda de “Las Fábricas de Francia (1842)”, de la Ciudad de México, la cual compraron en 1880, al relacionarse con Léautaud en la sociedad J. Tron y Cía. Las ganancias generadas por el desempeño y venta de esta tienda les permitió obtener el
172 173
Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Op.cit, 1998. D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 324
118
suficiente capital para participar como accionistas de la tienda de novedades El Palacio de Hierro SA -la cual sigue siendo en la actualidad una de las más importantes de México- CIDOSA, Fábrica de Papel San Rafael, Fábrica Textil La Perfeccionada, Compañía Trigadora de Hidalgo, Cía. Eléctrica e Irrigadora del Estado de Hidalgo y Cía. Industrial San Idelfonso.174 En 1898, cuando J. Tron se convirtió en Sociedad Anónima, José Léautaud se retiró a Francia y se ocupó de las compras en París, hasta 1963 cuando se vendió la empresa.175 León Signoret ingresó a México en 1873 y trabajó en la tienda de las Fábricas de Francia, ya en propiedad de J. Tron y Cía. Posteriormente se asoció con su hermano Antonio y con León Honnorat para fundar la tienda de novedades “El Puerto de Veracruz”. También participó como administrador del “Banco de Londres y México” y fue socio de CIDOSA, “Fábrica de Papel San Rafael”, “Cía. Industrial San Idelfonso”, “Banco Central Mexicano (1899)”, “Cía. Bancaria de París y México”, “Cía. Eléctrica e Irrigadora del Estado de Hidalgo”, “Cía. del Ferrocarril Eléctrico de Lerdo”, “Compañía Manufacturera de Jabón la Unión”, y de la “Fundición de Fierro y Acero de Monterrey” (1900). Gracias a esta última empresa León Signoret se vinculó con algunos miembros del grupo de industriales de mayor poder económico y político al norte del país a finales del siglo XIX, como Vicente Ferrara y Patricio Milmo176. León Signoret falleció en Barcelonnette, Bajos Alpes, Francia, el 30 de agosto de 1919. En su testamento designó como herederos a su esposa Athemais Reynaud viuda de Signoret, a su hermano Antonio Signoret, a sus hijos Luis Andrés y Alberto Signoret.177 Otros empresarios barcelonnettes que no fueron socios fundadores, pero que también sobresalieron por su visión de negocios y fortunas alcanzadas fueron Sebastián Robert y Enrique Tron (ver Imagen 4). Sebastián Robert -sobrino de José Ollivier- ingresó a México en 1865. Fue contratado como un simple empleado por la casa de novedades de Jauffred y 174
Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Op.cit, 1998. Martínez, G., Patricia, Op.cit., 2005, p. 39. 176 Gómez Galvarriato, Aurora. La industria textil en México. Lecturas de Historia Económica Mexicana. Instituto Mora, Colmich, Colmex, IIH-UNAM, México, 1999. 177 AHNM, Escritura 9428, volumen 54, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 25/10/1920. 175
119
Ollivier y Cía. Poco tiempo después, se convirtió en uno de los socios principales de la tienda “La Ciudad de Londres”. Posteriormente, se asocia con Émile Meyran y crean S. Robert y Cía., sociedad que administraba la tienda de novedades “La Valenciana”, y en 1884 “El Centro Mercantil”. Estas tiendas se ubicaron en la Ciudad de México. Ambas fueron consideradas dentro de los centros comerciales más importantes del país, tanto en la venta al mayoreo como al menudeo.178 Sebastián Robert, representando a S. Robert y Cía., junto con Alejandro Reynaud, José y Eugenio Signoret, y Juan Derbez, socios de A. Reynaud y Cía. propietarios de la tienda “Las Fábricas Universales”, y otros inversionistas fundaron en la Ciudad de México, el 24 de Noviembre de 1896, la Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA.)179 Los accionistas de CIVSA optaron por construir su propia fábrica textil: “Santa Rosa”, inaugurada en 1898 en Ciudad Mendoza, Veracruz. Las fábricas de Río Blanco, de CIDOSA, y Santa Rosa, de CIVSA, fueron las fábricas textiles más grandes de México a finales del siglo XIX 180. Sebastián Robert también invirtió en las fábricas textiles de “La Hormiga”, “La Alpina” y “La Corona”, donde se manufacturaba el algodón, se elaboraban sábanas y bonetería, respectivamente. Fue el primer barcelonnette en participar como socio en un banco mexicano: el Banco Nacional Mexicano (1881), que años más tarde, en 1884, cambió su nombre a Banco Nacional de México (Banamex).181. Sebastián Robert murió el 7 de marzo de 1908, a los 60 años. Este empresario, -al contrario de su tío José Ollivier- mantuvo un mayor control con los socios que invitaba a sus negocios. Le asignaba menores sueldos ($1,200 a $1,680 pesos por año, y J. Ollivier pagaba de $2,100 a $3,600), les exigía los comprobantes de gastos cuando realizaban viajes a Europa; les prohibía participar en otros negocios y estipulaba por escrito las normas que debían regular su comportamiento.182 178
Proal, Op. cit.,1998. Para un estudio pormenorizado de los socios y funcionamiento de CIVSA, ver Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit, 1999a 180 García Díaz, Bernardo. Op.cit, 1981 181 Meyer, Op. cit. 1980. 182 D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 378-380. 179
120
Enrique Tron participó como miembro de los consejos de Administración del “Banco de Londres y México”, Fábrica de Cigarros “El Buen Tono (1873)”, la “Compañía Nacional Mexicana de Dinamitas y Explosivos (1901)”, la “Sociedad Financiera para la Industria en México (1898)”, la “Compañía Bancaria de Obras, Bienes Raíces” y del “Intermediario Minero Franco-Mexicano”. Fue presidente de la Cámara de Comercio Francesa en México. Formó parte de la comisión monetaria que trabajó con el ministro de finanzas José Yves Limantour, durante el gobierno de Porfirio Díaz (1876-1910). Además fue consejero del ministerio de Comercio Exterior de Francia y caballero de la Legión de Honor desde 1906.183 José Ollivier, León Signoret, Enrique Tron y Sebastián Robert, aplicaron “una reinversión constante de sus ganancias mediante un proceso de acumulación, donde el producto sobrante fue atesorado en dinero o mercancías durante dos o tres generaciones, manteniendo un excedente que no alcanzaba para una riqueza de lujo ni de ostentación, para que cuando se fuera poseedor de un capital considerable, se retornara a la aldea de origen entregando el negocio a hermanos, hijos, sobrinos o paisanos que repetirán una y muchas veces más el mismo proceso”.184 Las empresas que fundaron y/o en las que fueron socios los cinco empresarios
barcelonnettes
anteriormente
mencionados,
se
encuentran
enumeradas en el Cuadro 15. En él se especifica la ciudad donde se situaban estas empresas, cuál era su actividad principal y en qué año se asociaron los barcelonnettes que se han aludido.
183
Ídem. Salazar, Roberto. Los franceses en la formación de la Burguesía industrial. Colmex. México, Diciembre 1978, p.6. 184
121
Cuadro 15. Empresas en las que participaron los principales socios barcelonnettes de las tiendas accionarias de CIDOSA, 1889-1911. Barcelonnette
NOMBRE DE LA EMPRESA
Joseph Ollivier
La Estrella La Ciudad de Londres en México Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica de papel San Rafael Cía. Francesa de Porcelana Cía. Industrial San Idelfonso Banco de Londres y México Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Cía Azucarera El pánuco Soc. Financiera para la Industria en México (SFIM) Banco Central Mexicano La Primavera La sorpresa Cristalería La Moderna Cía. Bancaria de Paris y México Banco de Jalisco Hacienda La Teja La Ciudad de Londres en Ver Joseph Léautaud Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica de papel San Rafael Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo El Palacio de Hierro Tienda de novedades Tienda de novedades Tienda de novedades La Perfeccionada Cía. Trigadora de Hidalgo Cía. Manufacturera Cerritos Leon Signoret Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica de papel San Rafael Cía. Francesa de Porcelana Banco de Londrés y México (BLM) Cía. Industrial San Idelfonso Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Banco Central Mexicano (BCM) Fundición de Fierro y Acero Monterrey Cía. Bancaria de París y México (CBPM) Cía. Del Ferrocarril eléctrico de Lerdo Compañía manufacturara de jabón La Unión Sebastian Robert Banco Nacional de México (BANAMEX) El Centro mercantil La Valenciana Cía. Manufacturera Cerritos Cía.Industrial Veracruzana S.A. (CIVSA) Banco de Morelos (BM) Banco Central Mexicano Cía. Bancaria de París y México (CBPM) La Alpina (sábanas) La Corona (bonetería) La hormiga (algodón) Henri Tron Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Cigarrera El Buen Tono Cía. Industrial San Idelfonso Cervecería Moctezuma Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Fábrica de papel San Rafael El Palacio de Hierro S.A. Soc. Financiera para la Industria en México (SFIM) Cía. Nal. Mexicana de dinamita y explosivos Cía. Maderera de la Sierra de Durango La Perfeccionada Intermediario minero Franco-mexicano Cía. Bancaria de Obras y bienes raíces (CBOBR)
GIRO DE LA EMPRESA
Telas y novedades Telas y novedades Fábrica textil Papel Fábrica de loza Fábrica textil Banca Eléctricidad Alimentos Banca Banca Telas y novedades Telas y novedades Cristal Banca Banca Agrícultura Fábrica Textil Telas y novedades Fábrica textil Papel Eléctricidad Telas y novedades Telas y novedades Telas y novedades Telas y novedades Fábrica textil Alimentos Fábrica textil Fábrica textil Papel Fábrica de loza Banca Fábrica textil Eléctricidad Banca Acero Banca Transporte Jabón Banca Telas y novedades Telas y novedades Fábrica textil Fábrica textil Banca Banca Banca Fábrica textil Fábrica textil Fábrica textil Fábrica textil Cigarros Fábrica textil Cerveza Eléctricidad Papel Telas y novedades Banca Manufactura Forestal Fábrica textil Minería Banca
CIUDAD
México, D.F. México, D.F. Orizaba, Ver. México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. Hidalgo México, D.F. México, D.F. México, D.F. Puebla, Pue México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. Monterrey, N.L. Veracruz, Ver. Orizaba, Ver. México, D.F. Hidalgo México, D.F. Lagos, Jal. Aguascalientes Monterrey, N.L. México, D.F. Hidalgo Orizaba, Ver. Orizaba México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. Hidalgo México, D.F. Monterrey México, D.F. Torreón Torreón México, D.F. México, D.F. México, D.F. Orizaba, Ver. Necoxtla, Ver. Cuernavaca, Mor. México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. México, D.F. Orizaba, Ver. México, D.F. México, D.F. Orizaba, Ver. Hidalgo México, D.F. México, D.F. México, D.F. México Durango México, D.F. México México, D.F.
AÑO EN QUE SE ASOCIO
1854 1863 1889 1890 1890 1895 1896 1897 1898 1898 1899 1903 1903 1904 1909
1889 1890 1897 1898
1886 1889 1890 1890 1896 1896 1897 1899 1900 1909
1884 1884 1884 1886 1896 1897 1899 1909
1889 1893 1896 1896 1897 1898 1898 1900 1901 1907
Fuente: Construído en base a Cuadro 1,2,3,4,5 de Galán (2002).
122
Como se observa en el Cuadro 15, los empresarios barcelonnettes continuamente se asociaban entre ellos, y/o se unían a otros grupos de empresarios para formar parte de los negocios más rentables de la época (la Cía. de papel San Rafael y Anexas, (1890), la Cervecería Cuauhtémoc (1890), la Cía. Cigarrera El Buen Tono, (1873), y las compañías textiles de San Antonio Abad (1892); San Idelfonso (1895), Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA, 1899) y la Cía. Industrial Veracruzana S.A. (CIVSA, 1892)185); esto para formar redes sociales y de negocios, que les ayudarán a obtener mayores beneficios económicos en un medio complicado e incierto. En el siguiente apartado, se analizará el funcionamiento de estas redes.
Redes de negocios En México, durante casi todo el siglo XIX, existió una sociedad con inequitativa distribución del ingreso. No se tuvo un mercado nacional integrado (sólo mercados locales y regionales fragmentados). Los sistemas legales fueron deficientes, provocando que los derechos de propiedad fueran poco transparentes y el sistema bancario no logró consolidarse hasta 1880.186 Ante este escenario y teniendo como base su cultura (los habitantes del Valle de Ubaye compartían principios de confianza, solidaridad, movilización social, esfuerzo, dedicación, lealtad y le daban gran importancia al valor de la reputación187) y su espíritu empresarial (experiencia en la producción y venta de telas, actitud frugal y de esfuerzo en el trabajo), los empresarios barcelonnettes crearon redes sociales188 y de negocios189, cuyas
185
De acuerdo a Haber, estas empresas formaron parte de las 12 corporaciones industriales con mayores ganancias en México durante el periodo de 1890-1940. Haber, Sthepen. Industria y subdesarrollo. La industrialización de México 1890-1940. Alianza editorial mexicana. México, 1992, pp.109-151. 186 Ver Marichal, Carlos. “El nacimiento de la banca mexicana en el contexto latinoamericano: problemas de periodización en Ludlow, Leonor y Marichal, Carlos. La Banca en México 1820-1920. Colección Lecturas de Historia Económica Mexicana. Instituto Mora, El colegio de Michoacán, COLMEX e IIH-UNAM. México, 1998, pp. 112-141. 187 Gouy, Op.cit., 1980. 188 Para Portes las redes sociales son “el conjunto recurrente de asociaciones entre grupos de individuos vinculados por lazos ocupacionales, familiares, culturales y afectivos, que contienen generalizaciones morales, creencias sobre el comportamiento o metanormas de confianza social que permiten determinar lo que es socialmente aceptado, lo que es incorrecto, y la sanción que se recibe por ello. Portes, Alejandro. The
123
metanormas de confianza recompensaban a quienes las cumplían, pero sancionaban gravosamente a los que no. La red social establecida por los empresarios barcelonnettes en México entre 1889 y 1910 fue una red que cumplía con el modelo de coordinación económica de los clanes o grupos económicos190. Inició su formación con lazos familiares y de paisanaje y, posteriormente, incrementó el número y la fuerza de sus lazos, al crear redes de distribución y producción entre compañías propiedad de diferentes empresarios –de origen barcelonnette o no- , con las cuales mantenían una interdependencia social y económica entre sus miembros.191 Aunque era una red grande en número de participantes, tenía el poder centralizado en los miembros de mayor riqueza: José Ollivier, Ernesto Pugibet, Augusto Genin, Enrique Tron, León y José Signoret, Sebastián Robert y José Léautaud. La migración de los barcelonnettes a México inició con los hermanos Arnuad, quienes establecieron en la Ciudad de México la tienda de Las Siete Puertas, en 1821. En esta tienda se contrata a Gabriel Derbez, Alphonse Jauffred, y Eugenio Caire, quienes con el dinero obtenido por su trabajo, en 1838, establecieron su propia tienda de novedades: “El portal de las Flores”. En esta tienda se continuó economiic sociology of inmigratios. Essays on Networks, Ethinicity and entrepreneurship. Rusell Sage Foundation, 1995, p.8 189 Casson define a las redes de negocios como asociaciones entre personas (interpersonales) o entre compañías (inter-institucionales), que buscan disminuir los costos de transacción y permitir la integración vertical de sus empresas, a través de flujos de información, flujos de producción y flujos de factores productivos que promuevan la coordinación y los lazos de confianza entre sus miembros. Además, señala que la red de negocios al igual que cualquier otra red, establece sanciones morales y sociales (exclusión de otras transacciones, pérdida de reputación), que evitan que sus miembros traicionen la confianza del grupo (es decir incumplan convenios) y con esto se eleven los costos de transacción. Casson Mark. Enterprise and leadership: studies on firms, markets and networks. Cheltenham Edward Elgar, 2000. 190 Los grupos económicos (GE's) son redes de empresas relacionadas por vínculos familiares, étnicos o de amistad, que poseen una estructura autoritaria y centralizada con una jerarquía vertical, donde sólo los miembros de la familia, clan o grupo de control ocupan los puestos más altos, y donde sus empresas se integran vertical y horizontalmente para disminuir costos de transacción, aprovechar economías de escala y obtener ventajas monopólicas, Castañeda, Gonzalo. Fundamentos microsociales del comportamiento económico, las instituciones y su evolución. UDLA, 2002 Cholula, Puebla. México. 191 Boltansky y Chiapello, mencionan que una red –de cualquier tipo-, se basa siempre en relaciones interpersonales fuertes que se sitúan más allá de lazos profesionales. Se basan en la confianza surgida por situaciones vividas en conjunto por sus miembros en el pasado; por la pertenencia a una misma institución, por la existencia de un objetivo o proyecto común, o por relaciones de amistad y de estima mutua. En las redes cada ser existe en función del número y del valor de las conexiones que pasan por él. Por esta razón la mayor sanción es el rechazo o exclusión, la cual priva a las personas de sus vínculos y la expulsa a los límites de la red donde las conexiones son escasas y sin valor. Excluir a alguien significa que la persona depende de los demás, pero de él ya nadie depende, no es buscado ni invitado por nadie. Boltansky y Chiapello. El nuevo espíritu del capitalismo. Akal, Madrid, España, 2002, pp. 18-185.
124
contratando a otros inmigrantes del Valle, quienes posteriormente fundaron sus propias empresas o se asociaron con otros compatriotas para crear más negocios. Sin embargo, aunque los barcelonnettes apoyaban la movilidad social de sus compatriotas, aplicaron en sus empresas una ideología de mantener el status quo, a través de una estructura jerárquica centralizada y autoritaria. Generalmente los socios y los empleados con puestos más importantes192 eran los miembros de la familia, clan o grupo de control (ver cuadros del 3 al 10). Los empresarios barcelonnettes siempre buscaron primero asociarse con sus familiares y, posteriormente, con otros migrantes del Valle que demostraran cierta reputación. Por ejemplo, José Ollivier formó la sociedad J. Olliver y Cía. con su hermano Antonio y con sus sobrinos Mario, León y Teófilo, hasta 1898, cuando estos tres últimos incumplieron con el contrato pactado (viajaron a Francia cuando no se les era permitido), y entonces se asoció con Eugenio Roux, Ernesto Spitalier y Juan B. Bellon (ver Cuadro 5). José Ollivier también le dio la oportunidad a su sobrino Sebastián Robert de trabajar en la tienda de “La Ciudad de Londres” y participar con él en otros negocios. Robert también estaba unido por lazos familiares a Julio Tron, ya que el hijo de su hermana Elisa Robert y uno de sus herederos, León Barbaroux, se casó con Elena Tron, hija de Julio Tron. Del mismo modo, Julio Tron y José Léautaud estaban unidos por lazos familiares, ya que el hijo de José Leáutaud, Emile, contrajo matrimonio con Mathilde Tron, hija de su socio Julio Tron. La lista de los familiares directos padres, hermanos e hijos, así como de algunos de los familiares políticos de los principales socios de las tiendas accionarias de CIDOSA se incluye en el Cuadro 16. En él se especifica en la columna de observaciones cuando estos familiares estaban asociados. Este cuadro nos ayuda a darnos cuenta que algunos de estos empresarios no tuvieron hijos, por lo que elegían a sus sobrinos como sus herederos, como en el caso de Sebastián Robert. Tal vez el hecho de que estos inmigrantes contraían matrimonio
192
Proal menciona que sólo los parientes de los dueños de las tiendas podían ocupar los puestos administrativos de mayor jerarquía Proal, Op. Cit., 1998.
125
hasta regresar al Valle después de hacer su fortuna en México, lo cual ocurría generalmente cuando estos tenían edades de entre 45 y 55 años, pudo haber influido en su falta de paternidad. Por otra parte, el Cuadro 16 identifica que los empresarios barcelonentte mencionados también se vincularon por lazos familiares, de amistad y por cuestiones económicas a otros empresarios dominantes de la época. Por ejemplo, el caso de Enrique Tron, que se vinculó familiar y económicamente con Ernesto Pugibet al casarse este con su hija Adriana, y al ser ambos socios de la Cía. Nacional Mexicana de Dinamita y Explosivos, la Cía. San Idelfonso, Fábrica de Tejidos de Lana San Idelfonso, la Cía. Cigarrera El Buen Tono y la Sociedad Financiera para la Industria en México. Por estos mismos negocios, Henri Tron estaba asociado con Porfirio Díaz Jr, Hugo Scherer, Fernando Pimentel y Fagoada y Agusto Genin. La lista de algunas de las corporaciones donde los principales socios de las tiendas accionarias de CIDOSA se unieron a los empresarios mencionados se encuentra en el Cuadro 17. Éste incluye los datos de año de fundación, capital inicial y duración de cada compañía, así como la lista de socios y las acciones –en número y porcentaje- que cada uno de ellos poseía. Esta información sirve para identificar en cuántos y en qué tipos de negocios eran socios y de cuánto fue su aportación al capital a dichas empresas. Por ejemplo, León Signoret, se asoció con su hermano José Signoret, con su paisano José Ollvier y con Enrique Creel, Joaquín Casasús, Hugo Scherer y Fernando Pimentel en el Banco Central Mexicano y la Cía. Bancaria de París y México SA, y con Vicente Ferrara y Patricio Milmo en la Fundición de Fierro y Acero Monterrey. José Signoret, a su vez, se asoció a Luis Elguero en la Compañía Bancaria Mexicana. José Ollvier se asoció con José Yves y Julio Limantour, en la Azucarera de Pánuco SA y la Cristalería La Moderna.
126
Cuadro 16. Familias de los principales socios de las tiendas accionarias de CIDOSA Empresario Joseph Ollivier
Sebastian Robert Sebastian Robert Sebastian Robert Sebastian Robert Sebastian Robert Sebastian Robert Elisa Marie Robert Elisa Marie Robert
Parientes Jean Antoine Ollivier Magdelaine Pinoncely Antonio Ollivier Elizabeth Olliver Josephine Olliver Henriette Ollivier Henriette Ouri Madeleine Ollivier Ferdinand Ollivier Jeannne Olliver Henriette Ollivier Germaine Ollivier Joseph Ollivier Conte Marius Ollivier Jean Olliver León Ollivier Théophile Ollivier Jules- Joseph Olliver Jean Batiste Robert Josephine Olliver Elisa Marie Robert Remy Robert Marius Robert Anne Marie Berthe Ollivier Jean Paul Barbaroux Leon Barbaroux
Relación Padre Madre Hermanos Hermanos Hermanos Hermanos Esposa Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Esposo Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Padre Madre Hermanos Hermanos Hermanos Esposa Hijos Hijos
Elisa Marie Robert Jose Leáutaud Jose Leáutaud Jose Leáutaud Jose Leáutaud Jose Leáutaud Jose Leáutaud Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron Henri Tron
Fernand Barbaroux Robert Jean Pier Leáutaud Virginie Leáutaud Maria Catalina Leáutaud Emile Leáutaud Jeannne Leáutaud Josephine Leáutaud Louis Fabien Tron Joséphine Caire Joseph Tron Jules Tron Elisa Tron Justin Tron Leóntine Genin Henriette Tron Suzanne Tron Adrianne Tron Margueritte Tron Georgette Tron Henri Tron (JR) Yvonne Tron Marcelle Tron Lucette Tron Hubertte Tron Joseph Tron G. Suzanne Tron (2)
hijos Padre Madre Esposa Hijos Hijos Hijos Padre Madre Hermanos Hermanos Hermanos Hermanos Esposa Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos
Elizabeth Ollivier
Observación
Socio de J. Ollivier y cía Madre de Sebastian Robert
Muere a los 18 años Muere a los 5 años
Socio de J. Socio de J. Socio de J. Socio de J.
Ollivier y Ollivier y Ollivier y Ollivier y
cía cía cía cía
Hermana de Joseph Ollivier Ferdinand Bardaroux (esposo) Josephine Antoinnette Camille Ollivier (Esposa) Prima, hija de Antoine Ollivier Sobrino Heredero de Sebastian Robert Socio y Hererdero de Sebastian Robert. Esposo de Hélene Tron (hija de Jules Tron) Sobrino Heredero de Sebastian Robert
Prima Esposo de Mathilde Tron, hija de Julio Tron
Socio de J. Tron y cía. Socio de J. Tron y cía.
Hija de Augusto Genin Alberto Fraikin (esposo) Ernest Pugibet (esposo) Pierre Deniau (Esposo) Helene Vent Salazar (esposa) Jacques Deniau Henri Proal (esposo) Jacques Laroche Joubert (esposo) Andres Revol (esposa) Denise Gasne (esposa)
127
Cuadro 16. Familias de los principales socios de las tiendas accionarias de CIDOSA Empresario Joseph Tron Joseph Tron Joseph Tron Jules Tron Jules Tron Jules Tron Jules Tron Jules Tron Jules Tron Elisa Tron Elisa Tron Elisa Tron Elisa Tron Elisa Tron Elisa Tron Elisa Tron Justin Tron Justin Tron Justin Tron Justin Tron Justin Tron Justin Tron Leon Signoret Leon Signoret Leon Signoret
Leon Signoret Leon Signoret Leon Signoret Joseph Signoret
Parientes Florence St Aubyn Marie Loise Tron Georges Tron Julia Michel Louis Tron Hélene Tron Florence Tron Mathilde Tron Germaine Tron Hyppolyte Signoret Honotinne Signoret Tron Isabelle Signoret tron Joseph Signoret Tron Jules Signoret Tron Hyppolyte Signoret Tron Claire Signoret Tron Henrriette Genin Auguste Tron Marcel Tron Charles Tron Albert Tron Maurice Tron Surrain Signoret Briggete Brunn de Signoret Aline Signoret de Vialel Antonio Signoret Joseph Signoret Athemais Reynaud Luis Andrés Signoret Alberto Signoret Andre Vialel y Signoret Carolina Lacouture Jean Signoret Lacouture Josephine Signoret Lacoture
Relación Esposa Hijos Hijos Esposa Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Esposo Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Esposa Hijos Hijos Hijos Hijos Hijos Padre Madre Hermanos Hermanos Hermanos Esposa Hijos Hijos Sobrino Esposa Hijos Hijos
Observación Jacques Robert (Esposo) Marcelo Lacaille (Esposa) Yvonne Strill (Esposa) Leon Barbaroux (esposo) Maxime Guichard (esposo) Emile Leautaud (esposo) Andre Reynaud (esposo)
Hija de Augusto Genin Yvonne Pettit (esposa) Ana Maria Michel (esposa)
Hijo de Aline Signnoret
Joseph Signoret Fuentes: Testamento de León Signoret, Escritura 9428, Volumen 113 de Notaría 5 de Bernando Cornejo, AHNM, 25/10/1920 Archivos de Raíces Francesas en México A.C. Proporcionados por Minouche Suberville De Anglade, Jean-Louis. Un Gran patrón barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille . Sabenca de la Valeia y Jean -Louis D'Anglade. Barcelonnette, 2006. pp. 25-30, 97-107 y 130-141.
128
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920. Datos de la compañía Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Nombre Fecha de Duración Capital total Valor nominal de la acción
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Azucarera del Panúco S.A. 1 20/08/1900 20 $1,300,000 $100
Socios
J. Ollivier y cía (México) J. Ollivier y cía (Paris) Alfonso Michel J.Limantour (Frank y Wolfshon) Banco de Suiza en Francia Dionisio Ollivier Dionisio Ollivier e Antonio Ollivier F.Martínez Arauna A-Hritlinger Banco Central Mexicano Ramon Alcazar 06/02/1899 Enrique Creel 40 Guillermo Vernechren $6,000,000 Carlos Bracho $100 Deutuche Bank L. Bleichrocder Olegario Molino Jose Gabriel Escalante Jose Castellot Viviano villareal Joaquín Casasús Ramiro Trueba León Signoret Prospero Gloner Pablo Kosidousler José Signoret Emilio Meyran Agustin filuo José Ollivier Fernando Pimentel Pablo Guzman Hugo Scherer Cervecería Moctezuma S.A. 1 Sociedad Financiera para la industria en México 08/09/1910 Adrian Carranza José Mt. Estape $2,000,000 Henri Tron $118 Vivente Roji Felipe Suberbie Augusto Genin Gustavo A, Mondragon Alfonso Riveri Eugenio Ituarte Antonio bustillo Cía. Fundidora de Fierro y acero de Monterrey S.A. León Signoret 07/05/1900 Vicente Ferrara Patricio Milmo e hijos sucesores 5,000,000 (doláres) Eugenio Kelly Antonio Basagotti Manuel C.Treviño Tomás Kelly José Negrete Antonio ferrera Miguel Ferrara Isaac Garza Adolfo Zambrano Francisco Sada Valentin Rivero Tomás Mendinchaga Ernesto Madero y hnos.
Acciones No. % 150 1.2% 400 3.1% 400 3.1% 300 2.3% 3,827 29.4% 530 4.1% 750 5.8% 450 3.5% 500 3.8% 1,100 1.8% 3,650 6.1% 1,000 1.7% 1,350 2.3% 19,800 33.0% 9,900 16.5% 1,500 2.5% 200 0.3% 250 0.4% 250 0.4% 500 0.8% 800 1.3% 350 0.6% 250 0.4% 330 0.6% 250 0.4% 250 0.4% 250 0.4% 250 0.4% 100 0.2% 100 0.2% 500 0.8% 7,500 44.3% 1,353 8.0% 1,250 7.4% 953 5.6% 194 1.1% 135 0.8% 80 0.5% 50 0.3% 25 0.1% 25 0.1% 4 0.0% 19,000 19.0% 2,148 2.1% 10,000 10.0% 13,444 13.4% 21,500 21.5% 680 0.7% 4,173 4.2% 2,000 2.0% 1,000 1.0% 1,500 1.5% 1,200 1.2% 500 0.5% 650 0.7% 1,900 1.9% 3,000 3.0% 700 0.7%
129
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920. Datos de la compañía Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas de San Idelfonso S.A.1 23/07/1903 $2,000,000 $100
Nombre Fecha Duración Capital total3 Valor nominal de la acción3
Sociedad para la Industria en México S.A. (SFIM) 02/02/1900 75 $5,000,000 $250
Nombre
Cía. Maderera de la Sierra de Durango S.A. 23/03/1907 50 $2,300,000 $100
Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Compañía manufacturera de cigarros El Buen Tono S.A. 01/02/1899 25 $2,500,000 $100
Nombre Fecha Duración Capital total
Cristalería La Moderna 17/05/1904
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Fábrica de Papel de San Rafael y Anexas S.A.2 1898
$36,000
$7,000,000 $100
Socios Eugenio Signoret Tomás Braniff J.B. Bellon J.B. Ebrard y cía. J. Ollivier y cía A. Reynaud y Cía Eduardo Garcín Signoret, Honnorat y cía Porfirio Díaz jr. Henri Tron L. Faudon y cía Emilio Pinsón Max Chauvet Banco Central Mexicano Sociedad Financiera para la industria en México San idelfonso fábrica de tejidos de Lana Ernesto Pugibet Hugo Scherer jr. Eduardo Noetzelin Tomás Braniff Ernesto Pugibet Henri Tron Alfredo Cherneviere Guillermo Pichet Albert Socretinne Pimentel Hnos. Fernando Pimentel y Fagoaga Henri Tron Luis Barbosa Asiad Hugo Scherer y cía Hugo Scherer jr. Federico Kladf Banco de Durango Banco Central Mexicano Xavier Ycaza Angel Lopez Negrete Eduardo Hastman Jesús Salcido y Aviles Tomas Braniff Henry C.Walters José Callado Francisco peréz Vizcaíno Ernesto Pugibet Andres Eizaguirre Rafael Donde Manuel Gonzalez Cosío Porfirio Díaz jr. Henri Tron Hugo Scherer y cía Indalecio Sánchez Gavito Julio Limantuor Henri Cruciere Charles Deselle José Ollivier Hugo Scherer Henri Tron Tomás Braniff Oscar Braniff Eugenio Roux Fernando Pimentel y Fagoaga J.B. Ebrard José de la Macorra
Acciones No. % 5,000 25.0% 1,000 5.0% 560 2.8% 550 2.8% 450 2.3% 400 2.0% 350 1.8% 300 1.5% 300 1.5% 300 1.5% 200 1.0% 184 0.9% 100 0.5% 2,000 10.0% 3,000 15.0% 3,000 15.0% 1,000 5.0% 1,000 5.0% nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd 900 3.9% 64 0.3% 964 4.2% 964 4.2% 900 3.9% 64 0.3% 964 4.2% 964 4.2% 964 4.2% 964 4.2% 964 4.2% 964 4.2% 60 0.3% 4527 18.1% 300 1.2% 263 1.1% 1500 6.0% 176 0.7% 323 1.3% 282 1.1% 104 0.4% 74 0.3% 74 0.3% 100 0.4% 510 2.0% nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd
130
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920. Datos de la compañía Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A. 1 28/09/1903 99 $3,000,000 $100
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Banco de Londrés y México1 14/06/1896 50 $10,000,000 $100
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Banco Nacional de México 15/05/1884 50 $20,000,000 $100
Socios Accionistas Ginebra Ernesto Pugibet Henri Tron J. Ollivier y cía Alfonso Michel Hugo Scherer y cía Tomás Braniff Max Chauvet M. Lambert y cía. Signoret, Honnorat y cía Sociedad Financiera para la industria en México M. Bellon y cía sucesores Leon Hupon A. Reynaud y Cía Daniel Ituarte Eduardo Tellez Julio Beraud J. Ollivier y cía Signoret, Honnorat y cía El Palacio de Hierro S.A. Mateo Lambert León honnorat Alfonso Michel Antonio Bassagotti Rafael Dondé Rosendo Pineda Ignacio Torre y Meier H.C. Walters Antonio Mier y Celis Nicolás de Teresa Bénito Arena José María Bermenejillo Félix Cuevas Antonio Escandón Genaro de la Fuente José Gargollo Manuel Ibáñez Pedro Martín Juan J. Martínez Zorilla Rafael Ortiz de la Huerta Frnacisco M. Prida Gustavo Struck Leo Stein Francisco Iturbide Sebástian Camacho Jose María Roa Bárcena Pedro Pelaéx Francisco Cortinza Icaza Luis Lavie Pedro Suinaga ricardo Sainz Eduadro Ebrard Raimundo de la Mora José V. de Collado Pablo Macedo Indalecio Sánchez Gavito
Acciones No. % 7,508 25.0% 4,099 13.7% 2,257 7.5% 1,900 6.3% 1,760 5.9% 1,322 4.4% 1,300 4.3% 1,200 4.0% 608 2.0% 590 2.0% 429 1.4% 200 0.7% 200 0.7% 100 0.3% 76 0.3% 53 0.2% 50 0.2% nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd nd
131
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920. Datos de la compañía
Socios
Acciones No. % 9,770 9.8% 9,770 9.8% 8,140 8.1% 6,510 6.5% 6,510 6.5% 4,890 4.9% 4,230 4.2% 4,230 4.2% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 3,260 3.3% 1,630 1.6% 1,630 1.6% 1,630 1.6% 1,630 1.6% 1,300 1.3% 1,140 1.1% 980 1.0% 970 1.0% 810 0.8% 650 0.7% 650 0.7% 330 0.3% 500 7.1% 1,000 14.3% 500 7.1% 500 7.1% 1,500 21.4% 500 7.1% 500 7.1% 500 7.1% 500 7.1% 500 7.1%
Nombre Fecha Duración Capital total Valor nominal de la acción
Compañía Bancaria de París y México S.A. 28/10/1909 50 $10,000,000 $100
J. Ollivier y cía S. Robert y cía Carlos Markassuza Hauser Zivy y Cía Antonio signoret Clemente Jacques y cía P.J. Jacques sociedad en comandita Fabre Hermanos A. Reynaud y cía A. Richaud y cía. M. Lambert y cía. M. Bellon y cía Tardan Hermanos Veyan, Jean y cía J.B. Ebrard y cía. Signoret, Honnorat y cía Leon signoret Humberto Audiaguez Jose G. Escandon Mariano Allegre Abril de Greiguiel Hijos de Max Chauvet y cía F. Manuel y cía F. Sánchez y cía sucesores Hipolito Duran Bernando Albuneda Ailland y cía E. Manuel y cía L. Faudon y cía Manuel Levy Nombre Compañía Bancaria Mexicana S.A. Mariano Allegre Fecha 02/01/1920 Guillermo Brack Duración 50 Luis Elguero Capital total $350,000 Alberto Gonzalez Montalvo Valor nominal de $50 Agustín Legorreta la acción Alfredo Y. Main Luis Riba y Cervantes Hugo Rose José Signoret Baltazar Marquez 1. Aumento de Capital 3. Francos 2. Datos de The Mexican Year Book 1909-1910. nd. No disponible Fuentes. De Anglade, Jean-Louis (2006) pp. 145-153, 205, 238-250, 265, 274-279, 307 -315, 347, Goméz Galvarriato (1999a), Cerutti (1992), pp. 339, Miscelanea de Bancos, volumen 6. Centro de Estudios de Historia de México, CARSO. Ludlow, Leonor (1998), pp. 170. Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Compañía Notaría-Notario /fecha Escritura Vol Fondo Antiguo
Banco Central Mexicano
729. Jose del Villar 6/2/1889
Contemporáneo
Banco Central Mexicano
3. Ruiz 13/5/1904
1,138
Contemporáneo
Banco Central Mexicano
3. Ramón Ruiz 8/9/1910
1,670
37
Contemporáneo
Cervecería Moctezuma S.A.
3. Ramón Ruiz 29/6/1905
4,939
115
Contemporáneo
Cía. explotadora de las fzas hidroeléctricas de San Idelfonso S.A. 3. Ramón Ruiz 23/7/1903
650
14
Contemporáneo
Cía. Maderera de la Sierra de Durango S.A.
2. Jesús Trujillo 23/3/1907
1,554
19
Antiguo
Cía. Manufacturera de cigarros "El Buen Tono" S.A.
3. Ramón Ruiz 01/2/1899
Contemporáneo
Cía. Manufacturera de cigarros "El Buen Tono" S.A.
3 Ramón Ruiz 27/12/1902
368
7
Contemporáneo
Cía. Manufacturera de cigarros "El Buen Tono" S.A.
3. Ramón Ruiz 07/11/1907
2,662
64
Antiguo
San Idelfonso Fabrica de Tejidos de lana S.A.
3. Ramon Ruiz 28/12/1895
Contemporáneo
San Idelfonso Fábrica de tejidos de lana S.A.
3. Ramón Ruiz 28/9/1903
Contemporáneo
San Idelfonso Fábrica de tejidos de Lana S.A.
3. Ramón Ruiz 10/09/1906
Antiguo
Sociedad Financiera para la Industria en México S.A.
5. Bernando Cornejo 02/02/1900
Contemporáneo
Cía.Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey S.A.
3. Ramón Ruiz 27/01/1928
Antiguo
Banco de Londres y México
Contemporáneo
Compañía Bancaria de París y México S.A.
Contemporáneo Contemporáneo
8
30
171
5087 30
27
20
752
19
2,493
56
19,697
352
444. Rafael Morales 01/07/1889
2
3026
5. Bernando Cornejo 28/10/1909
3,542
51
Compañía Bancaria de París y México S.A.
5. Bernando Cornejo 21/01/1910
3,694
53
Compañía Bancaria Mexicana S,A,
3. Ramón Ruiz 02/01/1920
11,437
227
11
132
José Yves Limantour fue el secretario de Finanzas del gobierno de Porfirio Díaz. Era socio y amigo cercano de Ernesto Pugibet, Hugo Scherer, José Ollvier y Enrique Tron. Estos empresarios aprovechaban sus relaciones para solicitarle ciertas concesiones. Por ejemplo, “en 1900, la sociedad J. Ollivier y Cía. le solicitó a Limantour les anulara una multa por 212 bultos que se encontraban en la aduana de Tampico. Éste se las concedió.”193 También en 1905, la compañía “El Buen Tono” tenía problemas con unas patentes y Limantour solicitó a la Secretaría de Fomento “le diera facilidades a la empresa para obtenerlas”.194 Del mismo modo, José Yves solicitaba constantemente a J. Ollivier y Cía. de París le enviaran objetos de Europa. Por lo general eran artículos para su casa (muebles, candelabros, tapicería, etc.) o artículos de uso personal (ropa, zapatos).195 Sólo en ciertas ocasiones hizo pedidos especiales. Por ejemplo, en 1904, el 9 de junio, solicitó instrumentos de música para la Secretaría de Guerra; el 18 del mismo solicitó una enfermera, que mandó a buscar personalmente con la Señora Iturbide. El 21 de noviembre ordenó le compraran un diccionario Larousse.196 En 1908 requirió que le fuera enviada “una lápida de granito para su amigo Eduardo Cañas, accesorios para su automóvil, terciopelo, telas, árboles de Francia para sembrar en el Bosque de Chapultepec”197 y “un chasis para el automóvil de la esposa de Porfirio Díaz”.198 Durante su exilio, mantuvo correspondencia con Enrique Tron, Ernesto Pugibet y Hugo Scherer para conocer la marcha de los negocios que tenían en conjunto y sobre la situación del país en general.199 Pablo Macedo (senador), Hugo Scherer (miembro de la Comisión Monetaria), Fernando Pimentel y Fagoada (miembro de la Comisión Monetaria), Enrique Creel
193
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 1, 2a.Serie, 1900. Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 31, 2a.Serie, 1905. 195 Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 1, 2a.Serie, 1900. 196 Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 26, 2a.Serie, 1904. 197 Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 53, 2a.Serie, 1908. 198 Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 49, 2a.Serie, 1908 199 Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 72 y 73, 3a.Serie, 1911 194
133
(gobernador de Chihuahua y senador), Porfirio Díaz Jr., Joaquín Casasús (senador), José y León Signoret y Enrique Tron formaron parte de los hombres que tuvieron mayor riqueza y conexiones políticas durante el Porfiriato. Se desempeñaron como políticos y directores de empresas debido a su “alta capacidad de administración, pero sobre todo a su alta capacidad para conseguir préstamos e información”.200 Invirtieron en algunas de las compañías industriales más redituables del periodo: Cervecería Moctezuma, S.A., Cía. Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, Cía. cigarrera El Buen Tono SA, Fábrica de Papel de San Rafael y anexas SA, Fábrica de tejidos de Lana San Idelfonso201. Aunque con una participación accionaria menor al 10% del capital. Sólo en el caso de León Signoret fue de 19% para la Cía. Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey. De acuerdo a Cerutti, “la Cía. Fundidora fue un ejemplo nítido de articulación entre los más prominente burgueses locales, los de otras áreas de México y de los representantes de las burguesías de países avanzados. En sus años iníciales contó con un alto horno para la producción de lingotes de hierro con 350 toneladas de capacidad diaria. Su trabajo comenzó en febrero de 1903, anticipándose en décadas a lo que ocurriría en otras fábricas integradas de hierro y acero en América Latina. Su fundación sintetizó abiertamente las tendencias del desarrollo capitalista con eje en Monterrey, su imbricación con las tendencias de la economía mundial y las exigencias que en materia de división especializada del trabajo que generaba ya el capitalismo en México”.202 Otras empresas que se formaron por la unión de burgueses locales y extranjeros y que sobresalieron por fomentar el crecimiento del capitalismo industrial de finales del siglo XIX y principios del XX, fueron la Sociedad Financiera para la Industria en México y el Banco Central Mexicano. Estas empresas, junto con las demás enlistadas en el Cuadro 17 formaron parte de la red de negocios 200
Musacchio. Aldo y Read, Ian. “Bankers, industrialists and their cliques: elites network in Mexico and Brazil during early industrialization” in Enterprise and Society. Vol. 8 No. 4, USA, 2007, pp. 842-880. 201 Haber, Stephen. Op.cit. 1992, pp.109-151. 202 Cerutti, Mario. Burguesía, capitales e industria en el norte de México. Monterrey y su ámbito regional (1850-1910).Alianza / Raíces y Razones; y la Facultad de Filosofía y Letras de la UANL, México, 1992, pp. 187.
134
(interpersonales) y entre compañías (inter-institucionales) de los tres principales empresarios barcelonnette socios de CIDOSA, Enrique Tron, José Ollivier y León Signoret, las cuales se describirán a continuación.
Red de negocios interpersonal Basados en las relaciones familiares y de negocios que unían a Enrique Tron, José Ollivier y León Signoret con los empresarios y políticos mencionados en el Cuadro 16 y 17, se elaboró la red social de la Figura 1. En esta representación gráfica, se observa que Tron, Signoret y Ollivier (ubicados al costado izquierdo) se encontraban unidos entre ellos y con José Signoret, José Léautaud, Augusto Genin y Alfonso Michel (costado derecho), por negocios al ser socios en dos o más empresas; lazos familiares al ser parientes directos o por haberse realizado matrimonios entre sus hijos y por paisanaje, al ser originarios de la misma región geográfica con lo cual compartían cultura y normas sociales. En esta figura también se aprecia que Enrique Tron, José Ollivier y León Signoret se asociaban por amistad y por motivos económicos, al ser socios en dos o más compañías, con empresarios como Pablo Macedo, Hugo Scherer, Fernando Pimentel y Fagoada, Enrique Creel, Porfirio Díaz Jr., Joaquín Casasús, José Yves Limantour, Rafael Donde, Vicente Ferrara, Patricio Milmo, Xavier Ycaza y Luis Elguero. De hecho, estos empresarios barcelonnettes junto con otros miembros prominentes de la colonia francesa en la ciudad de México y de la élite en general, además de
asociarse
entre
ellos para
formar empresas, establecieron
organizaciones y prácticas sociales que les ayudaron a mantenerse cohesionados y aumentar sus oportunidades de negocios. Algunas de estas organizaciones fueron la Sociedad de Beneficencia, el círculo francés, el Casino francés de Santa Clara y la Parroquia Francesa de Nuestra Señora de Lourdes.
135
Figura 1. Red de negocios interpersonal de León Signoret, Enrique Tron y José Ollivier, 1889-1910.
Fuente: Elaborada con el programa Pajek. (http://vlado.fmf.uni-lj.si/pub/networks/pajek/)
La Sociedad de Beneficencia fue la "embajada informal" de la colonia francesa. Se le identificó como la organización más importante de socialización, enlace y creación de identidad de los inmigrantes franceses en México. Esta asociación se adjudicó el rol moral de órgano de control de la colonia, ya que no sólo vigiló las cuentas y el buen funcionamiento de las instituciones, sino que también reenvió a los elementos malos de la colonia a Francia, con el fin de evitar escándalos y que la falla de los compatriotas no destiñera el brillo de la colonia. La Sociedad de beneficencia fue fundada en 1842 y contó con una caja de ahorro, un hospital, una casa de ancianos, y un cementerio (Panteón de La Piedad, y posteriormente en 1942 el Cementerio de San Joaquín). En sus primeros años, proporcionó servicios de orientación, de transporte, alojamiento, trabajo, atención médica y préstamos a los afiliados por una módica cuota. Posteriormente en la 136
época de auge industrial de 1890 a 1910, cambio su papel de sólo ofrecer ayuda económica y facilitar la instalación de los nuevos miembros, a un organismo que sustituyera la falta de familia y ausencia de relaciones de los inmigrantes.203 El Círculo francés funcionó desde 1870, fue la casa matriz de la colonia francesa. Sirvió para unir a los miembros adinerados de la comunidad. En él se respiraba un ambiente de cooperación y refinamiento. Los "solterones" se encargaban de organizar los torneos de boliche, las veladas literarias, los bailes y las tardeadas. Con el tiempo el Casino fue un escaparate de la "cultura francesa" al que asistieron las elites mexicanas y algunos miembros distinguidos de las demás colonias extranjeras. Su funcionamiento favoreció la creación de varios clubes: la Sociedad filarmónica y dramática francesa, la asociación musical Lyre Galoise, la Sociedad de Gimnasia y la Sociedad Hípica Francesa, el Velo-club, el Club-France, el Orfeón francés, la Sociedad del 14 de julio, la Amicale Française. Todas fundadas con el afán de crear espacios para el esparcimiento de galos, ayudarlos a conservar un estilo de vida y a integrarse a la sociedad de México.204 El Casino francés de Santa Clara fue donde se organizó la fiesta del 14 de Julio (La Toma de la Bastilla), a la cual alguna vez asistieron el general Porfirio Díaz acompañado de su familia y todo el gabinete y más de dos mil invitados de lo más prominente de la sociedad y de las comunidades extranjeras de la Ciudad de México. La Parroquia Francesa de Nuestra Señora de Lourdes, sirvió no sólo para asistir a misa los domingos, sino también para conocer futuros socios, empleados o proveedores. Al existir entre los miembros de una red, dos o más tipos de relaciones (de trabajo, familiares, religiosas, culturales, paisanaje) se dice que es una red densa205, con multiplicidad de relaciones y una reputación multilateral. 203
Pérez Siller, Javier. La migración francesa de los siglos XIX y XX una contribución a la modernidad. Octubre,1999. (www.cultura.df.gob.mx/babel/fran/Siller.htm). 204 Ídem. 205 Las redes sociales pueden clasificarse por: 1) Su tamaño o número de participantes (grandes o pequeñas), 2) Su número de lazos entre los miembros de una red. 3) Su centralismo o grado de centralización en el control por parte de algunos miembros de la red (centralizada o descentralizada). Las redes sociales con mayor número de lazos entre sus miembros se consideran densas; y sí sus participantes presentan relaciones traslapadas desde distintos ámbitos son de carácter múltiplex. Portes, Op.cit, 1995.
137
La multiplicidad de relaciones de la red provoca que el oportunismo en una relación contamine la reputación establecida en otras relaciones. Por ejemplo, en el
ámbito
empresarial:
cuando
los
socios
llegaban
a
cometer
algún
comportamiento deshonesto, eran expulsados de la empresa, de la familia, del Club social, equipo deportivo, incluso de Iglesia del grupo, como en el caso de Mario y León Ollivier. Por otra parte, la reputación multilateral se presenta cuando los individuos para no perder posibles relaciones económicas ventajosas, son menos propensos a actuar de forma oportunista. En el caso de los barcelonnettes, esto se ve reflejado cuando actuaban de forma honesta y frugalmente en la tienda donde trabajan para que los dueños los observaran y los eligieran para ser socios de sus empresas.206 Además de los mecanismos de reputación, esta red social proporcionó flujos de información, de capital y de factores productivos que promovieron la integración y diversificación de la red de negocios de sus miembros, la cual se describe a continuación.
Red de negocios interinstitucional La red de negocios de Enrique Tron, León Signoret, José Ollivier y sus demás socios, se muestra en la Figura 2. En esta representación, se indica con círculos
a
las
tiendas
comerciales,
con
rectángulos
a
las
empresas
manufactureras y con cuadrados a las instituciones financieras. Algunos bancos e instituciones financieras se encuentran situados en medio de la figura y conectando a ambos subconjuntos (1 y 2), porque sus socios compartían acciones en estos bancos. La red se integra de manera: horizontal y vertical. Horizontal porque agrupa empresas que realizan la misma actividad (las tiendas comerciales) y vertical porque incluye las empresas que elaboran sus insumos (las fábricas textiles, hidroeléctricas) y a sus propias instituciones financieras (bancos). La red
206
Arnaud, Op.cit., 1891.
138
también muestra que los empresarios diversificaban sus inversiones en textiles, fábricas de papel, cervecerías, cigarreras, etc. La red de negocios de los empresarios barcelonnettes de la figura 2 era estable e interna207, porque creaban sus propios mercados de manera contractual, como el caso de CIDOSA y CIVSA, “que establecía contratos de ventas con sus clientes por muchos años, pero cada año el Consejo de directores, establecía la escala de descuentos que daría a sus clientes anualmente. Por ejemplo en el caso de CIVSA a sus compradores especiales como A. Reynaud y Cía.; S. Robert y Cía. y F. Manuel y Cía. dueños de las tiendas “Las Fábricas Universales”, “El Centro Mercantil” y “La Valenciana” les ofreció descuentos extras de 2 a 3% en pagos en efectivos y créditos de 60 días”.208 En México, el acceso al capital209 fue tal vez la barrera más importante para la creación y desarrollo de las empresas industriales. Por eso sus dueños dependieron de un mercado externo o de conexiones con cierta gente importante para tener acceso a grandes cantidades de capital. Es aquí donde surgieron las redes de negocios corporativas (entre firmas) y entre élites (o individuos), cuyo centro fueron los instituciones financieras que proporcionaron créditos baratos y les sirvieron como ventanilla de fondeo las empresas manufactureras. 210
207
Para Miles y Snow, la red de negocios puede formarse por largo plazo y de manera estable, mediante contratos que mantienen los lazos; pero que tiene la desventaja de que sí los proveedores y distribuidores solo se concentran en las firmas de la red, pierden la oportunidad de tener una participación más amplia en el mercado y se vuelven dependientes de la red. También se integran de forma interna, cuando las empresas crean su propio mercado. En él, las empresas compran y venden bienes y servicios a los mismos precios establecidos en el mercado externo pero con arreglos especiales (descuentos, plazos, etc.). Su falla más común es la sobre-extensión de la red, que abarca más de lo que le conviene ó por los errores cometidos por sus administradores al implementarla. Miles, Raymond y Snow C. Charles. “Causes of failure in network organizations” en California management review. Summer, 1992, p.55-61. 208 Gómez Galvarriato, Aurora, Op.Cit, 1999A, pp. 177-183 209 En el país durante finales del siglo XIX, los bancos ejecutaron la concentración y centralización del capital monetario de una sociedad en manos de unos cuantos hombres, que Limantour bautizó como Oligarquía financiera. Estos disfrutaban del poder de emitir moneda y de controlar y canalizar el crédito a su antojo. Los préstamos de los bancos generalmente fueron asignados por la política del privilegio y el abuso privado a los accionistas, o a los selectos miembros de los consejos de administración de las propias instituciones financieras, sin considerar la posibilidad real de la recuperación de los mismos. Ese uso y forma del sistema bancario, se bautizo como plutocrática. Canudas Sandoval, Enrique. Las venas de plata en la historia de México. Síntesis de Historia Económica del Siglo XIX. Editorial Utopía y Universidad Juárez Autónoma de Tabasco. Villahermosa Tabasco, Julio 2005, pp. 1023-1025. 210 Musacchio. Aldo y Read, Ian , Op.cit, 2007, p. 851.
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Figura 2. Red de negocios interinstitucional de José Signoret, Enrique Tron y José Ollivier de 1889-1920. I N T E G R A C I O N V E R T I C A L
El Palacio de Hierro
La Cd. De Londres La Ref orma del Comercio Fábricas Universales
El puerto de Liverpool La Valenciana
El Puerto de Veracruz
BANAMEX
CBPM
Subconjunto 1
El Centro Mercantil
El Correo Francés
Integración Horizontal
El Gran Oriental
Banco de Londres y México
Banco Central
SFIM
CBM
Subconjunto 2 Diversificación CIDOSA Azucarera del Pánuco Hidroeléctrica San Idelf onso
Cervecería Moctezuma
Fundidora de Fierro -Acero Cigarrera El Buen Tono
Cristalería La moderna
Fábrica papel San Raf ael Maderera de la Sierra Durango
Fuente: Elaborado en base a Figura 2 de Galán 2002, p. 82A.
En el caso de la red corporativa de los empresarios que se están estudiando, tuvieron su centro en el Banco Nacional de México (Banamex), Banco de Londres y México (BLM), Banco Central Mexicano (BCM), la Sociedad Financiera para la Industria en México (SFIM), la Compañía Bancaria de París y México (CBPM) y la Compañía Bancaria Mexicana SA (CBM). El Banco Nacional de México (Banamex), surgió en la Ciudad de México en 1884 de la unión del Banco Mercantil Mexicano (1882) y el Banco Nacional Mexicano (1882). Su capital fue de $20,000,000 de pesos suscritos en 200,000 acciones de 100 pesos. Tuvo una concesión por 50 años y fue el único con una cuenta asignada a la Tesorería. Esta cuenta se garantizó con los derechos de las aduanas. Banamex también fue el único que: “emitía billetes que aceptaban las
140
instituciones de gobierno, hacía monedas y era el responsable para arreglar contratos especiales para el servicio de la deuda pública interna y externa; así como para el pago de los impuestos con la federación, estados y municipios”.211 Algunos de sus socios y miembros del Consejo de Administración fueron: Antonio de Mier y Celis, José María Bermenejillo, Félix Cuevas, Ramón G. Guzmán, Eduardo Ebrard, Antonio Escandón, Gustavo Scutck y Pablo Macedo.212 Banamex, otorgó préstamos con mayores concesiones a las empresas de sus socios. Por ejemplo, en 1901 autorizó aumentar el crédito de la Cía. Industrial Manufacturera de Pablo Macedo a $380,000, el cual se otorgó como crédito hipotecario conjuntamente con el Banco de Londres y México. 213 Esta misma compañía en 1909 debía al banco $457, 959.71 como parte de la hipoteca de su fábrica de Juanacatlán, Jalisco, pero aún así solicitó que se le aumentara a $1,000,000 garantizándolo con la hipoteca de sus fábricas de Querétaro. El banco lo autorizó y le cobró una tasa de 7.5 % anual de interés en bonos hipotecarios. 214 Banamex
también
participó
como
accionista
en
varias
compañías
manufactureras. Tuvo 11,200 acciones de la Cía. Industrial de San Antonio Abad, las cuales vendió en 1922 a $40 pesos cada una.215 Y en 1923 fue propietario de 3,501 acciones de CIVSA, 477 de CIDOSA, 500 de la Cía. Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, 48 de la Cía. Minera Angustias, Dolores y anexas y 10 de la Cía. Minera Santa María de la Paz.216 Respecto a la forma en que Banamex financió a los socios de CIDOSA, encontramos que en 1891 autorizó un préstamo de $200,000 a $250,000 a la Cía. Manufacturera de Cerritos SA, aunque ésta ya debía para esa fecha $144,000.217. En 1921 le abrió a J. Ollivier y Cía. sucesores un crédito en cuenta corriente de $100,000 con garantía de 2,000 acciones de CIDOSA.218 Y en 1928, le otorgó a
211
Ludlow, Leonor. “La Formación del Banco Nacional de México: Aspectos institucionales y sociales” en Ludlow, Leonor y Marichal, Carlos. Op.cit., 1998, pp. 168-178. 212 Ídem. 213 AHBANAMEX, Libro 6 Acta del 09/10/1901 214 AHBANAMEX, Libro 8 Acta del 19/10/1909. 215 AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 16/10/1922. 216 AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 13/02/1923. 217 Archivo Histórico del Banco Nacional de México (AHBANAMEX), Libro 4 Acta del 20/10/1891. 218 AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 05/04/1921.
141
esta misma firma un préstamo de $60,000 con garantía de CIDOSA y CIVSA.219 Asimismo en 1922, aprobó la apertura de un crédito comercial por 75,000 dólares a favor del Banco de Montreal, el cual había sido solicitado por los socios de CIDOSA.220 El Banco de Londres, México y Sudamérica “fue el primer banco fundado en México (1864). Se apoyó en el intenso tejido de contactos mercantiles, mineros y políticos de la firma inglesa Manning y Mackintosh para controlar los canales de intercambio de mercancía y metálico del país”.221 En 1884 sus socios, se inconformaron por el monopolio de emisión fiduciaria otorgada a Banamex, y decidieron “recurrir al amparo de la justicia federal contra actos de la Secretaría de Hacienda. Alegando que el Código de comercio de 1884 no podía tener efectos retroactivos sobre su concesión de banco de emisión otorgada 20 años atrás. El Banco de Londres ganó el amparo en primera instancia y desató un debate jurídico económico sobre la cuestión del monopolio o la libre concurrencia. Porfirio Díaz ordenó en diciembre de 1884 al secretario de hacienda, Manuel Dublán, que negociara con ambos bancos un acuerdo de conciliación para que las dos instituciones continuaran prestando sus servicios de emisión. Dublán obtuvo del Congreso facultades extraordinarias que permitieron al Ejecutivo establecer nuevos bancos de emisión, abrogando ésta parte de las disposiciones restrictivas del Código de 1884. Cinco años más tarde, el Ejecutivo encargó a una comisión presidida por Joaquín Casasús, la elaboración de un nuevo Código de Comercio”.222 Dublan informó al Banco de Londres el plazo que tenía para ajustarse a la ley o suspender sus actividades. Para consolidar su posición el Banco de Londres México y Sudamérica planeó adquirir las acciones de otro banco, el Banco de Empleados. No fue fácil porque Banamex entró a la puja también, pero mediante la decidida ayuda de José Ives Limantour, el Banco de Londres pudo obtener en
219
AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 19/08/1928. AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 27/12/1922. 221 Marichal, Carlos. “El nacimiento de la banca mexicana en el contexto latinoamericano: problemas de periodización” en Ludlow, Leonor y Marichal, Carlos, Op.cit, 1998, pp. 118. 222 Canudas, Enrique, Op.cit, 2005, pp. 951-953. 220
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1886 la concesión del Banco de Empleados y modificó su denominación a Banco de Londres y México SA (BLM).223 El BLM se reorganizó como una sociedad Anónima de Responsabilidad limitada en julio de 1889. Su capital inicial fue de $1,500,000. Este ascendió en 1891 a $5,000,000, en 1896 a $10,000,000 y en 1899 a $15,000,000. 224 En este mismo año, el Banco de Londres, México y Sudamérica -representado por Enrique C. Walters-, otorgó a Thomas Braniff, Juan Llamedo e Ignacio de la Torre y Mier, la concesión para que operaran dicho banco en la Ciudad de México y en las provincias de Puebla, Veracruz, Querétaro, Michoacán, Guanajuato, Jalisco y San Luis Potosí.225 Los socios del BLM invirtieron en “el ferrocarril de Monterrey al Golfo, 45,000 libras esterlinas y 25,000 dólares oro para que pudiesen concluir las obras de esa vía y dotarla del material necesario para su tráfico. También invirtió en los Almacenes Generales de Consignación y Depósito en la Ciudad de México; y le abrió una línea de crédito por $300,000 a la Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey”.226 El Banco Central Mexicano fue un banco refaccionario, cuya concesión fue otorgada el 12 de octubre de 1898 por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a Ramón Alcázar, Enrique C. Creel, Guillermo Vernechren, Antonio V. Hernández, Carlos Bracho y al Deutuche Bank. Estos representantes tenían la obligación de establecer el banco en la Ciudad de México, y no fundar sucursales en donde existieran bancos de emisión, tenedores de acciones de la serie B del Banco Central Mexicano. Su duración era de 40 años y su capital de $6, 000,000 divididos en 60,000 acciones de $100 de la serie A y B. La serie B correspondía los bancos establecidos en la República.227 La importancia del Banco Central Mexicano radicó en que dado que “la legislación bancaria de 1897 no podía resolver un problema práctico fundamental, del intercambio de los billetes emitidos por las instituciones estatales fuera del ámbito geográfico dentro del cual estaban 223
Ídem, p.953 Ídem. 225 AHNM, Escritura 2, del Volumen 3026, Notaría444 a cargo de Rafael Morales, 01/07/1899. 226 Canudas, Enrique, Op.cit, 2005, p. 254. 227 AHNM, Escritura 8, del Volumen 5087, Notaría729 a cargo de José del Villar, 06/02/1899. 224
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autorizados a operar, el Banco Central Mexicano asumió la responsabilidad de llevar a cabo el intercambio de los billetes de todos los bancos provinciales de emisión”.228 Además el Banco Central Mexicano -al igual que Banamex y BLM-, también invirtió y otorgó créditos baratos a las empresas manufactureras de sus socios. Por ejemplo, en 1903 poseía el 10% de las acciones en la Cía. Explotadora de Fuerzas Hidroeléctricas de Hidalgo SA y en 1907 poseía el 4.19% de las acciones de la Cía. Maderera de la Sierra de Durango. La Sociedad Financiera para la Industria en México (SFIM) fue fundada el 2 de febrero de 1900. Su domicilio estaba en Ginebra, con sucursal en México. Tenía un capital de 5 millones de francos, divididos en 20,000 acciones de 250 francos. Su duración se estableció en 75 años. Tuvo como objetivo principal hacer toda clase de operaciones, negocios y empresas comerciales, financieras e industriales aún con inmuebles y toda clase de empresas de trabajo público en todos los países, especialmente en México, ya sea por su cuenta o por terceros.229 Contó con un Consejo de Administración en París, formado por Eduardo Noetzelin, Etitenne Maller; en México, por Thomas Braniff, Ernesto Pugibet y Enrique Tron, y en Ginebra por Alfredo Cheneriére, Guillermo Pichet y Albert Curreltini. 230 En 1903 poseía el 15% de las acciones de la Cía. Explotadora de fuerzas hidroeléctricas de Hidalgo SA y en 1910 era el principal accionista de Cervecería Moctezuma, con el 44.25 % de las acciones. Además frecuentemente concedió préstamos en francos a otras compañías manufactureras importantes de México, especialmente de aquellas fábricas que pertenecían a sus socios. Por ejemplo, en 1907 otorgó un préstamo de 5,000,000 de francos a la Cía. Algodonera e Industrial de La Laguna SA. El préstamo se confirió a través de una emisión de bonos al portador de 500 francos cada uno, pagaderos por semestre a una tasa del 6% anual, así como una garantía hipotecaría de la Hacienda Santa Clara y de un inmueble ubicado en la Ciudad Gómez Palacios, Durango.231 En 1908 concedió otro préstamo de 6,000,000 de francos oro a la Cía. de las Fábricas de Papel de 228
Marichal, Carlos, y Mario Cerutti. “Estudio introductorio” en Marichal, Carlos y Mario Cerutti (compiladores). La Banca Regional en México (1870-1930). Colmex, FCE, México, 2003, pp.29. 229 AHNM, Escritura s/n, del Volumen 11, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 2/02/1900. 230 AHNM, Escritura 1972, del Volumen 49, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 30/12/1905. 231 AHNM, Escritura 3420, del Volumen 84, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 7/01/1907.
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San Rafael y Anexas SA, a través de bonos al portador de 500 francos cada uno, pagaderos a 6 meses, con un 6% de interés anual.232 La Compañía Bancaria de París y México SA (CBPM) fue fundada en 1909 por José Olllivier, León Signoret, José Escandón y otros empresarios (Ver Cuadro 17). A diferencia del SFIM que fue un banco de financiación a largo plazo, la Compañía bancaria de París y México fue exclusivamente comercial y de corto plazo. Se dedicó a tramitar pagarés, préstamos al comercio y a la industria, administrar los movimientos de capitales y los órdenes de crédito y actuar como mandatario en las operaciones comerciales. Fue un banco clásico de financiamiento cuyo objetivo era reforzar la tesorería de sus clientes y ayudarlos a administra sus flujos financieros.233 Otra empresa, que también fomentó el crecimiento de la industria, pero ya para 1920, fue la Compañía Bancaria Mexicana SA (CBM), que tenía por objeto negociar préstamos descuentos, giros, compra y venta de acciones y bonos y cualquier clase de valor, así como cualquier clase de operación bancaria y mercantil. Su duración se estableció en 50 años y su capital era de $350,000 divididos en 7,000 acciones de $50 pesos cada uno. Entre sus socios destacaron José Signoret, Luis Elguero y Agustín Legorreta. 234 Todas estas instituciones financieras, tuvieron en común que otorgaban créditos con privilegios a las empresas de sus accionistas, “que eran al mismo tiempo, los más importantes comerciantes, latifundistas e industriales de México”. De acuerdo a Haber, el sector manufacturero mexicano se desarrolló en oligopolios o en una estructura industrial no competitiva235, porque la escala de tecnología de la que se echaba mano era inapropiada para el tamaño del
232
AHNM, Escritura 3642, del Volumen 86, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 01/0 71908. De Anglade, Jean-Louis, Op.cit., 2006, pp.324-327. 234 AHNM, Escritura 11437, volumen 227, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 02/01/1920. 235 Haber explica que las empresas manufactureras no podían ocupar el exceso de su capacidad productiva porque el mercado interno era estrecho, y además no les era posible exportar por sus altos costos de producción (derivados de la escasez de capital financiero, la importación de maquinaria y la baja productividad de la mano de obra mexicana). Entonces, para poder aumentar sus ganancias, estás manufactureras decidieron repartirse el mercado interno, organizándose en oligopolios y monopolios a través de la integraron vertical y horizontal, la compra o fusión de la competencia y la limitación de la participación de otras empresas en el mercado, a través del bloqueo al acceso de la tecnología, materia prima, protección gubernamental y red de comercialización. Haber, Op.cit, 1992, pp.109-151. 233
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mercado, y porque un pequeño grupo de financieros, hábiles en la manipulación tanto del mercado como del Estado, poseía un grado poco común de poder económico y político. Como élite, se trataba de un gremio impenetrable cuyos integrantes se asociaban entre sí una y otra vez en nuevas empresas. De manera simultánea, el escaso desarrollo de los mercados de capital impedía que otros grupos desafiaran su control sobre la industria, puesto que el núcleo comercialfinanciero era el único grupo lo suficientemente adinerado como para financiar nuevas compañías industriales.236 Por ejemplo, “en 1890 Augusto Genin solicitó a José Yves Limantour una audiencia para informarle que varios franceses deseaban invertir en México. Entre ellos León Signoret -como representante del Banco Francés Mexicano- que desea aportar 400,000 francos, a la creación de una fábrica de carburo de calcio, una de cloruro de potasio y una de explosivos industriales en Necaxa, Estado de México. La compañía que se propone llevaría el nombre de Sociedad de negocios mexicanos e iniciaría con un capital de 20 millones de francos a cargo de Emile Dumont”.237 Como se vio anteriormente, León Signoret ya poseía acciones en las principales compañías manufactureras de la época (Cía. Fundidora de fierro y Acero de Monterrey, CIDOSA, Fábrica de Papel San Rafael, fábrica San Idelfonso), y aún así quería seguir invirtiendo en nuevas empresas industriales no sólo porque poseía el capital, sino también porque contaba con las relaciones políticas que se lo consentían. Los barcelonnettes, al igual que otros grupos empresariales tuvieron “la habilidad para obtener del poder político el privilegio de la monopolización del mercado, que era determinante para asegurar una actividad empresarial exitosa. Esto lo consiguieron solamente garantizando la exclusividad en permisos y
236 237
Idem, p.109 Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 7,1a.Serie, 1890.
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concesiones del gobierno y/o a través del establecimiento de buenas relaciones con los representantes”.238 En este momento podemos destacar algunos rasgos importantes: los empresarios barcelonnettes en México, entre 1889 y 1910, constituyeron una red de negocios vinculados por lazos familiares y de paisanaje, donde sus empresas se integraban vertical y horizontalmente para ampliar sus mercados, obtener insumos y financiamientos productivos. Pero sobre todo para disminuir costos de monitoreo y transacción, reducir los incentivos a quienes no cumplían los compromisos, aprovechar economías de escala y obtener ventajas frente a sus competidores. Al convertirse en uno de los grupos con mayores fortunas en la sociedad mexicana de su tiempo, lograron fundar y participar en algunas de las empresas industriales y financieras más importantes de la economía de la época, como: la Compañía Industrial de Orizaba SA, la Cía. Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey, la Sociedad Financiera para la Industria en México y el Banco Central Mexicano. La importancia cobrada de las redes construidas y estrategias empleadas por estos empresarios, demandan a un estudio detallado de las mismas, lo cual se realizará en el siguiente capítulo. Capítulo 2: Importancia de una red. .................................................................................... 68 Comerciantes ................................................................................................................... 72 Fundación de la Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). ............................................ 81 Sociedades fundadoras .................................................................................................... 93 Los principales socios .................................................................................................... 116 Redes de negocios ......................................................................................................... 123 Red de negocios interpersonal ....................................................................................... 135 Red de negocios interinstitucional ....................................................................... 138
238
Romero, Ibarra, María Eugenia. “Hombres de negocios y cambio institucional, Estado de México, 18801910” en Romero Ibarra, María Eugenia. Las regiones en la historia económica mexicana. Siglo XXI y Facultad de Economía UNAM, México, 1999, pp. 130.
147
Capítulo 3: Estrategias de los empresarios de CIDOSA Las primeras fábricas textiles de algodón en México fueron la fábrica de Colima, fundada en 1826, propiedad del inglés George A. Resol, y
“Aurora
Yucateca”, construida en 1833 y propiedad de Abarda y Cía. “La Constancia Mexicana”, propiedad de Esteban de Antuñano y establecida en 1835, ambas ubicadas en Puebla; “La Magdalena Contreras”, de Antonio Garay, Lozada Carrera y el inglés Archivaldo Hope, que se situó en el Valle de México e inició operaciones desde 1836; “Cocolapan”, localizada en Orizaba desde 1836, propiedad de Lucas Alamán y los hermanos Legrand; “La Abeja”, de los ingleses L. Hammekan y Gradison, y la fábrica “La Colmena”, propiedad del inglés Hope y del francés Massie, ambas fundadas en 1839. Durante el Porfiriato (1876-1910), “las fábricas textiles crecieron a un ritmo sin precedente, ya que mientras en el periodo de 1843 a 1879 el número de husos había aumentado en 138%, en los 35 años siguientes (1879-1913) aumentaron en 194%. Esto debido a los cambios tecnológicos de la Revolución Industrial, el desarrollo de los medios de transporte y de comunicación (como el barco de vapor, el ferrocarril y el telégrafo), la apertura de los mercados regionales, el incremento de inversionistas extranjeros, el desarrollo de mercados de capitales y la creación de nuevos marcos institucionales para las actividades económicas (como el Código de Comercio, en 1884, la Ley de instituciones de Crédito en 1897, etc.)”239. Las fábricas de tejidos de algodón que más destacaron a finales del siglo XIX, principios del XX, fueron: “Río Blanco”, propiedad de la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA), “Santa Rosa”, de la Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA); “Hércules”, de la Compañía Industrial de Manufacturera SA; la “San Antonio Abad”, de Compañía Industrial San Antonio Abad SA; “Metepec”, de la Compañía industrial de Atlixco SA; “La Hormiga”, de La Hormiga SA, y “La Magdalena”, de J.L. Veyan y Cía.
239
Goméz-Galvarriato, “La Revolución en la distribución y en la producción de textiles en México durante el Porfiriato” (s/f) en www.cide.mx, p.5.
148
Estas compañías textiles “contaban con más del 40% del total de husos y telares que existían en el país. Elaboraban el 36.2 % de la producción de telas en México y poseían el 38.1 % del total del mercado nacional de productos textiles”.240 En este capítulo se realiza una comparación entre estas compañías textiles y CIDOSA para conocer: ¿Cuál de estas compañías llevaba el liderazgo tecnológico y en el mercado? ¿Qué sistemas de producción empleaban? ¿Cómo organizaban, controlaban y remuneraban a sus trabajadores? ¿Qué ganancias obtuvieron con estas formas de trabajo? Y, sobre todo, ¿existían diferencias o semejanzas entre ellas? Para contestar estas interrogantes, se iniciará describiendo el funcionamiento de las principales fábricas y compañías de hilados y tejidos de algodón en México de 1843 a 1913. Después se realizará un análisis de las patentes, maquinaria, y tipos de estrategias laborales y de comercialización que los empresarios utilizaron en las manufacturas de CIDOSA, de 1900 a 1928. Finalmente, se hace una comparación de los rendimientos económicos de CIDOSA con otras compañías. Al analizar las estrategias de las compañías textiles intento identificar los recursos y capacidades que hicieron de CIDOSA una de las empresas más redituable del periodo de 1890-1930.
240
Gómez Galvarriato, Idem. Cuadro 8. Principales compañías textiles de algodón en México, 1912, pp.59.
149
En la producción
Principales fábricas y compañías textiles en México 1843-1920. A continuación se realizará una breve descripción de las principales fábricas textiles que existieron en México de 1843 a 1893, con el propósito de compararlas con las compañías textiles organizadas en SA que se fundaron de 1889-1906. Esto para identificar semejanzas y diferencias entre ellas. Durante la década de los años 1830’s, las fábricas textiles de algodón del país sólo hilaban y producían manta de forma manual en los telares de los artesanos. Fue hasta 1840´s que se inició con el estampado manual, el blanqueado (1842), y algunas fábricas de Puebla y Querétaro con los telares mecánicos (1843) y con los teñidos (1845). De hecho, el estampado se realizó a mano hasta 1860, cuando un manufacturero de Tenancingo introdujo el empleo de anilinas y un cilindro francés para hacer estampados.
241
Las fábricas textiles que más rápidamente
incorporaron las máquinas mecánicas y los procesos de tejido y estampado fueron: “La Constancia Mexicana”, “La Magdalena Contreras”, “Miraflores”, “Cocolapan” y “Hércules”. La Constancia Mexicana fue inaugurada el 7 de enero de 1835 en la Ciudad de Puebla. Estuvo ubicada en el molino de trigo de la hacienda de Santo Domingo, en las riberas del Río Atoyac, en el estado de Puebla. Contó con energía hidráulica y vapor para mover su maquinaria. Empezó a operar sólo con el departamento de hilado. Dos años después, al intentar comprar más maquinaria, la empresa sufrió pérdidas por tres naufragios, pero a pesar de ello en 1839 la fábrica tuvo en operación 7 680 husos y en el área de tejido 90 telares. Más tarde, en el año de 1843, esta cifra aumentó a 113 y su producción a 600 piezas de manta semanalmente242. La fábrica de La Constancia Mexicana y la de “Economía” fueron propiedad de Esteban de Antuñano hasta 1857, cuando pasaron a manos
241 242
Keremitsis, Dawn. La industria textil mexicana en el siglo XIX. Colección Sepsetentas, SEP México, 1973, pp. 20-23. http: //morgan.iia.unam.mx /usr /Industrial /BOL%209/ VENTURA.HTML
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de sus herederos. En esos años, la fábrica mantuvo una inversión de $1,400,000; y según cálculos de Keremetsis, “dejó un beneficio del 2 % sobre la inversión”.243 En 1836 los hermanos Legrand, originarios de Francia, y el empresario Lucas Alamán inauguraron en una antigua fábrica de papel en Orizaba, Veracruz la Fábrica de Cocolapan que en 1843 tuvo 11,500 husos, 300 telares y 600 empleados que trabajaban en tres turnos. Cocolapan producía con energía hidráulica y vapor casi 40,000 piezas de mantas. En 1848 fue vendida a Manuel Escandón quien declaró, para 1850, “una inversión de $890,000, y un beneficio del 7 %”.244 La fábrica de La Magdalena Contreras se situó en el Valle de México, en un espacio económico en el que se había realizado la manufactura artesanal de paños durante la época colonial. Inició operaciones desde 1836, bajo la Administración de Garay y Cía, cuyos socios eran los españoles Antonio Garay, Lozada Carrera y el inglés Archivaldo Hope. Su proceso productivo estaba integrado verticalmente hacia atrás y hacia adelante, ya que contaba con sus propios sembradíos de algodón de donde obtenía su materia prima, la cual procesaba en su fábrica y, finalmente, la distribuía y comercializaba en sus cajones de ropa. En 1850 tuvo un valor de $1, 200, 000 pero, entre 1856 y 1865, sufrió una crisis financiera y fue vendida a Pío Bemerejillo (español) quien, en 1898, la vendió a Meyran Donnadie y Cía., y en 1903 a Adrián Jean y Luis Veyan245. La fábrica Magdalena Contreras contó “desde sus inicios con todas las innovaciones tecnológicas que se habían producido en el ramo textil desde la Revolución Industrial: energía hidráulica y de vapor, bastidores mecánicos de la misma calidad que los inventados por Richard Arkwright, telares iguales a los inventados por James Hargreaves, procedimientos innovadores para efectuar el
243
Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 74-75. Ídem 245 Trujillo Bolio, Mario. “La fábrica la Magdalena Contreras (1836-1910). Una empresa textil precursora en el Valle de México”, en Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Historia de las grandes empresas en México, 1850-1930, UANL y FCE, México,1997, pp.245-274 244
151
acabado, blanqueado y teñido, etc.. Toda esta maquinaria se encontraba distribuida en un área de 14 919 mts2 destinados a la fábrica de algodón”.246 En el Distrito Federal La Magdalena Contreras y Miraflores eran las mayores y más adelantadas técnicamente de todas las fábricas mexicanas. Exhibieron sus productos en la Exposición de París en 1854 y a menudo las encontramos mencionadas por la calidad de sus productos.247 La fábrica de Miraflores, propiedad de la familia Martínez del Río, fue fundada en 1840 en el Estado de México. Utilizó energía hidráulica y de vapor. Entre 1845 y 1854 produjo más de 465,000 piezas de manta y mantuvo una inversión de $500,000, con un beneficio de 7.4%248. En Querétaro, en 1843, se creó la fábrica textil Hércules, propiedad de Cayetano Rubio, la cual fue la más importante durante la Reforma y el Imperio. Abasteció de textiles al mercado de Guanajuato. Como carecía de una fuente de energía adecuada se construyó un túnel a través de las montañas para mover la fábrica con fuerza hidráulica. Su inversión para 1850 ascendió a $1,000, 000 y su beneficio al 9.3%.249 Los datos de años de fundación, propietarios, ubicación, inversión, maquinaria, mano de obra, materia prima y volumen de producción de estas cuatro fábricas textiles, de 1843 a 1887, se encuentran resumidos en el Cuadro 1.
246
Trujillo Bolio, Mario. Empresariado y manufactura textil en la Ciudad de México y su periferia. Siglo XIX. CIESAS, México, 2000, pp. 56-63. 247 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 75. 248 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 75. 249 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 61, 75.
152
Cuadro 1. Principales fábricas textiles de algodón en México, 1843-1893. Datos de la fábrica
Año
Datos de Producción Algodón Producción Producción Husos Telares No. de consumido de manta de hilaza en kilos1 (pzas)2 kilos2 obreros 302,851 31,200 301,392 7,680 113 340 538,668 156,000 1,092,009 7,680 122 434 75,029 7,000 130 180 104,000
Nombre Fundación Ubicación Propietarios
La Constancia Mexicana 07/01/1835 Puebla, Puebla Esteban de Antuñano y José Saviñon Testamentaria de Antuñano (1857) Pedro Borges (1879)
1843 1850 1879 1885
Nombre Fundación Ubicación Propietarios
La Magdalena 1836 San Angel, D.F. Garay y Cía. (1850) Pio Bermenejillo (1864)
1843 1850 1879 1885 1893
328,265 192,932 414,225
Nombre Fundación Ubicación Propietarios
Cocolapan 1839 Orizaba, Veracruz Lucas Alaman y Legrand hermanos Escandón Hnos. (1848-1899)
1843 1850 1879 1887 1893
387,565 351,055 342,990 276,240 276,000
39,156 52,017
468,832 699,838
60,000
200,000
Nombre Fundación Ubicación Propietarios
Miraflores 1840 Cuatitlán, Edo. De México Martínez del Río hermanos J.H. Robertson y cía. (1874-1893)
1850 1879 1887 1893
239,408 125,621
40,544
465,470
Hércules3 1843 La Cañada, Querétaro Cayetano Rubio
1843 1850 1879 1893
291,203 351,055 471,612 1,200,000
Nombre Fundación Ubicación Propietarios
8,320 54,870
334,880 520,147
90 326 304
800 520
7,768
304
320
11,500 11,784 13,000 9,840 9,840
300 446 300 200 200
600 600 Agua 345 Agua y vapor 400 Agua y vapor 450 Agua
5,700 6,894
160 263
8,436
320
400 Agua 430 Agua 300 Agua 350 Agua y vapor
8,400 7,500 10,000 9,000
112 500 600 650
3,000 Agua 495 Agua y vapor 1,080 Agua y vapor
104,000 650,000 20,800 100,000 68,531
239,200 1,400,000
Agua Agua Agua y vapor Agua y vapor
8,600 8,472 6,768
120,000 400,000
Potencia
Agua Agua y vapor Agua y vapor Agua y vapor
Productividad Piezas de Kilos de establecimiento manta por hilaza x kl obrero algodón (Inversión) 91.76 1.00 $ 1,400,000 359.45 0.49 $ 240,000 $ 364,000 Valor del
$ 1,200,000 $ 350,000 $ 420,000 $ 400,000
68.59
0.98 0.37
$
890,000
65.26 86.70
0.83 0.50
$
178,200
150.00
1.38
$ $ $
500,000 168,775 178,775
$ 1,000,000
PROMEDIOS DE 1843-1893 379,722 68,531 572,177 8,730 286 614 1. Los datos de 1850 estaban en quintales, por lo que se múltiplicaron por 46.04 para convertirlos a kilos 2. Para los años 1843, el dato era por semana, así que para calcular el dato anual se multiplicó por 52 semanas 3. Los datos de los años 1879 y 1893 incluyen las fábricas de Hércules, Purísima y San Antonio Fuentes: Apendice de Trujillo (1992), pp. 270-272. y Keremetsis (1973), pp. 51-77. Cuadro 1. Estado que manifiesta las fabricas de hilados y tejidos de algodon de la República Mexicana , 1850 en Soberanis (1988), p. 44 Cuadro 4. Grandes Fábricas textiles, 1879-1912 de Goméz-Galvarriato (s/f), p. 40 Archivo General de la Nación (AGN), Departamento del Trabajo, Caja 49.
101.36 346.67
33.33
144.79
En este cuadro se observa que: I) La fábricas tenían mayor cantidad de husos que telares, porque producían más hilaza que telas. II) Utilizaron energía hidráulica y/o vapor. III) La producción en La Magdalena, Miraflores y Cocolapan disminuyó en periodos de inestabilidad como la Guerra de Reforma (1857-1860) y la intervención francesa (1864-1867). De hecho la producción de Cocolapan se mantuvo a la baja de 1843 a 1893. IV) Los obreros de todas las fábricas fueron incrementando su producción individual de piezas de manta (productividad 250). Esto más por la incorporación de maquinaria que por un uso eficiente de los insumos. Por ejemplo, en el caso del algodón la mayoría de las fábricas producía menos de un kilo de hilaza por cada kilo de algodón que utilizaba. 250
Productividad es el cociente que se obtiene al dividir la producción por uno de los factores productivos. (mano de obra, materiales, etc.). El incremento de la producción es un aumento de las mercancías elaboradas con los mismos o menos recursos y significa una disminución de los costos unitarios. Para Coriat, un incremento en la productividad es cuando dentro de un mismo ritmo de trabajo, la misma cantidad de trabajadores produce mayor cantidad de productos debido a la mayor eficacia técnica de los medios de producción utilizados. Coriat, Benjamín. El taller y el cronometro. Ensayo sobre el taylorismo, el fordismo y la producción en masa. Siglo XXI, 10ª. Edición, México, 1982.
153
0.51
1.22 0.25
0.75
Después de 1890, éstas y otras fábricas textiles fueron adquiridas por sociedades anónimas que se dedicaban a construir o remodelar fábricas ya existentes. Las compañías de este tipo que más se destacaron fueron: A) CIDOSA, que compró en 1889 las fábricas de “San Lorenzo” y “Cerritos”, en 1899 “Cocolapan”, y construyó en 1892 la fábrica de “Río Blanco”, todas ubicadas en la región de Orizaba en el Estado de Veracruz. B) La Compañía Industrial Veracruzana SA, que edificó en 1896 la fábrica Santa Rosa en Necoxtla (Ciudad Mendoza), Veracruz. C) La Compañía Industrial de Manufacturera SA, dueños desde 1899 de las fábricas textiles “Hércules”, “San Antonio” y “Río Grande”, ubicadas las dos primeras en Querétaro y la última Jalisco. D) La Compañía Industrial San Antonio Abad SA, propietarios a partir de 1892 de las fábricas “San Antonio Abad”, “La Colmena” y “Miraflores”, ubicadas en el DF y el Estado de México. E) La Compañía industrial de Atlixco SA, que erigió en 1902 la Fábrica de Metepec, en Atlixco Puebla. F) La Compañía Industrial de Guadalajara SA, propietaria desde 1899 de las fábricas “Río Blanco”, “La Experiencia” y “Atemajac” en Jalisco. F) La sociedad Veyan Jean y Cía. Sociedad en Comandita propietaria desde 1903 de la fábrica “La Magdalena”, en el DF. G) La Hormiga SA, que poseía la fábrica del mismo nombre, ubicada en San Ángel, DF. Los datos de años de fundación, accionistas, ubicación de fábricas textiles propiedad de estas compañías se encuentran resumidos en el Cuadro 2. En este cuadro se observa que estas compañías fueron fundadas de 1889 a 1906 por empresarios que al igual que los socios de CIDOSA, “eran parte de los financieros-industriales, que ocupaban posiciones en las juntas directivas de los bancos más importantes del país”251 y/o que eran dueños de las principales casas de comercio en México, como Sebastián Robert, Alejandro Reynaud, Rafael Donde, Luis Barrosos, Íñigo Noriega (ver redes sociales y de negocios del capítulo anterior). También se identifica que el monto de las inversiones (capital) aumentó, debido a los cambios tecnológicos de la Revolución Industrial, el desarrollo de los ferrocarriles y los cambios en la legislación económica.
251
Haber, op.cit, 1992.
154
Cuadro 2. Principales Compañías textiles de algodón en México, 1889-1906. Datos de la empresa
Tomás Braniff J.B. Ebrard y cía J.Olliver y cía J.Tron y Cía. Signoret, Honnorat y cía Lambert, Reynaud y cía Garcín, Faudon y cía Juan Quinn TOTAL
$ $ $ $ $ $ $ $ $
Capital aportado 700,000 323,000 323,000 323,000 323,000 242,000 216,000 100,000 2,550,000
Nombre
Compañía Industral de San Antonio Abad S.A. Sociedad Anónima (S.A.) Fundación 28/01/1892 Duración 30 años Capital $1,000,000
Remigio Noriega y hmnos Antonio Basagotti Enrique L. Walters Luis Barroso Remigio Noriega Iñigo Noriega Laureano Gomez Entería TOTAL
$ $ $ $ $ $ $ $
500,000 60,000 10,000 20,000 200,000 200,000 10,000 1,000,000
Nombre
A. Reynaud y Cía S. Robert y cía Alejandro Reynaud Enrique Reynaud Audiffred Hnos. F.Manuel y cía Jauffred y Gariel Enrique Fleury Honorato Reynaud Paulino Richaud Antonio Reynaud Bellón Agorreca y Cía Hauser Zivy y Cía Rivero y Liaño J.P. Jacques y cía Desdier Sibilot y cía. Agustin Clariond León Rebattu Borelly Grez y cía. Derbez y Borell Juan B. Detchandy Fernando Donadieu Adolfo Fabre Ollivier Hnos Bartolomeo Rebattu Marcos Rueff Gaymard Sapitalier Zaldo Hnos y Cía. Francisco Charanconnet Vendrell B.A. Emilio Donadie José André Enrique Praderé Pacual Roux Chabrand y Caffarel Casimiro Balp Fellix Vinatier TOTAL
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
300,000 150,000 120,000 100,000 50,000 50,000 40,000 35,000 30,000 30,000 25,000 25,000 25,000 25,000 22,000 20,000 15,000 15,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 10,000 5,000 5,000 2,000 2,000 2,000 2,000 3,000 1,000 1,000 1,200,000
Nombre Sociedad Fundación Duración Capital
CIDOSA Anónima (S.A.) 28-6-1889 30 años $2,550,000
Compañía Industrial Veracruzana S.A. Sociedad Anónima (S.A.) Fundación 24/11/1896 Duración Capital $1,200,000
Socios
%
Fábrica textil
Ubicación
27.45% Cocolapan 12.67% San Lorenzo 12.67% Cerritos 12.67% Rio Blanco 12.67% 9.49% 8.47% 3.92% 100%
Orizaba, Ver. Nogales, Ver. Orizaba, Ver. Tenango, Ver.
50.0% 6.0% 1.0% 2.0% 20.0% 20.0% 1.0% 100.0%
Cuatitlán, México Tlanepantla, México Cuatitlán, México D.F.
Miraflores La colmena y Barrón San Antonio Abad
25.0% Santa Rosa 12.5% 10.0% 8.3% 4.2% 4.2% 3.3% 2.9% 2.5% 2.5% 2.1% 2.1% 2.1% 2.1% 1.8% 1.7% 1.3% 1.3% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.8% 0.4% 0.4% 0.2% 0.2% 0.2% 0.2% 0.3% 0.1% 0.1% 100%
Necoxtla, Ver.
155
Cuadro 2. Principales Compañías textiles de algodón en México, 1889-1906.
Datos de la empresa Nombre
Compañía Industrial de Atlixco S.A. Sociedad Anónima (S.A.) Fundación 05/01/1899 Duración 50 años Capital $2,000,000
Nombre
Cía industrial Manufacturera S.A.de R.L. Sociedad Anónima (S.A.) Fundación 04/08/1899 Duración 30 años Capital $4,300,000 Nombre
Cía. Industrial de Gualajara S.A. Sociedad Anónima (S.A.) Fundación 2/12/1899 Duración 25 años Capital $2,000,000 Nombre Sociedad Fundación Duración Capital
Veyan Jean y cía. S.en C. En comandita (S. en C.) 1903
Nombre Sociedad Fundación Duración Capital
La Hormiga S.A. Anónima (S.A.) 05/09/1906
Socios Santiago Sréchaga B. Roves y cia. Sucursales A. Richaud y cía. S. De Lambelz y cía. Solana Barranche y cía. Antonio Basagotti Luis Barroso Agustín Garcín Felix Martino Arias Benjamín D. Aragan Leopoldo Gavito Iñigo Noriega Sotero de Juamblez Constantino Noriega Emilio Andre Eduardo Vega Vicente Barrencho TOTAL
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
Capital aportado 150,000 750,000 350,000 22,500 30,000 150,000 10,000 10,000 240,000 170,000 50,000 22,500 10,000 5,000 10,000 10,000 10,000 2,000,000
%
Fábrica textil
7.5% Metepec 37.5% 17.5% 0.8% 1.5% 7.5% 0.5% 0.5% 12.0% 8.5% 2.5% 1.1% 0.5% 0.3% 0.5% 0.5% 0.5% 100% $
Ubicación Atlixco, Pue.
-
Rafael Dondé Carlos de Varona Enrique L. Walters Eduardo Ebrard Enrique Hernandez Jose Maria Bemenejillo Juan A. de Azurmendi Fortoul Chapuy y cía. L. Gas y cía. Lawrens Brun y cía. Bellón Agorreca y cía. E.Lebre y cía. TOTAL
$ $ $ $ $ $
600,000 600,000 220,000 290,000 290,000 2,000,000
30.0% Rio Blanco Zapopan, Jal. 30.0% Atemajac Guadalajara, Jal. 11.0% La experiencia Zapopan, Jal. 14.5% 14.5% 100.0%
Adrien y Camilo Jean Luis Veyan León Meyran TOTAL
$ $ $ $
500,000 1,550,000 400,000 2,450,000
20.4% La Magdalena San Angel, D.F. 63.3% 16.3% 100.0%
Sebastian Robert Emilio Meyran Santiago Archerrera Pedro A. chain TOTAL
$ $ $ $ $
440,000 250,000 180,000 130,000 1,000,000
Hércules La Purísima San Antonio Rio Grande
La cañada, Qro. La cañada, Qro. Querétaro, Qro. Juanacatlán, Jal.
$2,450,000
$1,000,000
44% La Hormiga 25% 18% 13% 100%
Tlalpan, D.F.
Fuente: Tabla 1. Distribution of CIVSA's Shares 1896-98., pp. 111. Gomez Galvarriato (1999a), De anglade (2006) pp. 374, Cuadro 4. Grandes Fábricas textiles, 1879-1912 de Goméz-Galvarriato (s/f), p. 40, Trujillo Bolio (2000), p. 149 y Olveda (2006) , pp. 190. Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Compañía Notaría Escritura Volumen Fondo Notario Compañía Industrial Manufacturera S.A. Ramón Ruiz 3 36 28 Antiguo Cía. industrial de Atlixco S.A. Juan M. Villeda 25 5 13 Antiguo Cía. San Antonio Abad S.A. Jose Villela 725 37 890 Antiguo Cía. Industrial de Orizaba S.A. Rafael Morales 444 3025 155 Antiguo La Hormiga S.A. Bernando Cornejo 5 1028 26 Contemporáneo
156
La Revolución Industrial permitió el uso de energía hidroeléctrica y de maquinaria automática, como la hiladora Rabbeth, los telares Northrop (1895), y las máquinas de estampado norteamericanas252. Ambos factores impulsaron la construcción de fábricas más eficientes que producían en grandes volúmenes para alcanzar economías de escala. Otro de los factores que impulsó el proceso de industrialización fue la construcción de transportes, específicamente los ferrocarriles.253 Estos, al igual que la minería, los bancos, la industria petrolera, y la agricultura comercial (el algodón de La Laguna, el henequén en Yucatán, etc.) cobraron auge al final de siglo XIX y principios del XX. Los ferrocarriles aumentaron las exportaciones mexicanas pero también incrementaron las importaciones de equipos para desarrollar infraestructura y, con ello, una mayor dependencia de la economía mexicana al sector externo. Asimismo, contribuyeron a la comercialización de la agricultura y la disminución de los costos de transporte de carga de 10 centavos por tonelada/kilómetro en viaje de carreta en 1878 a 2.3 centavos de tonelada/kilómetro en ferrocarril en 1910. Acortaron las distancias y ampliaron las dimensiones del mercado local y regional, hasta integrarlos en un mercado nacional que, junto con la disminución de los costos de transportes, estimuló el aumento de la producción industrial. 254 Por su parte el Código de Comercio creado en 1884 y reformado en 1889, les permitió a los inversionistas conjuntarse en sociedades por acciones; y la Ley de Instituciones de Crédito de 1897, establecer bancos de los que obtenían grandes cantidades de capitales para crear manufacturas de mayor tamaño, como las fábricas textiles de algodón que se enlistan en el Cuadro 3.
252
Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 100-121. De 1880 a 1908, las principales compañías ferroviarias del país fueron las estadounidenses Nickerson, Atchinson, Topeca y Santa Fe Raiload, propietaria del Ferrocarril Central Mexicano, que poseía la ruta México-Ciudad Juárez; la Cía. Palmer y Sullivan propietaria del Ferrocarril Nacional Mexicano, que viajaba de México a Nuevo Laredo; y la Huntihgton Southern Pacif Company, dueña del Ferrocarril Internacional, que iba de Piedras Negras a Torreón conectando al ferrocarril Central. También existió el Ferrocarril Interoceánico que viajaba México-Veracruz (igual que el Ferrocarril Mexicano), el Mexicano del Sur (Puebla a Oaxaca), y varias líneas regionales o locales en Sonora, Chihuahua, Hidalgo, Yucatán, Zacatecas, etc. Herrera Canales, Inés. “XV. La circulación (comercio y transporte en México entre los años 1880-1910)”, en Cardoso, Ciro (Coordinador). México en el siglo XIX (1821-1910). Historia económica y de la estructura social. Nueva Imagen, México, 1980, p. 439 254 Haber, Sthepen. Industria y subdesarrollo. La industrialización de México 1890-1940. Alianza editorial mexicana. México, 1992, p.29. 253
157
En este cuadro se detallan los datos de volumen de producción, maquinaría, mano de obra y materia prima utilizada por las principales fábricas textiles de México en 1893, 1912 y 1913. También se señala la productividad de piezas de manta por obrero que se realizaba en cada fábrica. Con estos datos es posible comparar la producción de las fábricas textiles que existieron en México de 1843 a 1890 (que se presenta en el Cuadro 1) con la de las compañías textiles que operaron a partir de 1889. De acuerdo a la información del Cuadro 1 y 3 se observa que, para la primera década del siglo XX, las fábricas textiles de algodón: A) Aumentaron su número de telares en un 135%y el número de husos en 116%255. (Esto porque cambiaron su producción hacia el tejido y el estampado, disminuyendo la elaboración de hilaza). B) Incrementaron su producción de piezas de manta en un 126%, al pasar de un promedio de producción de 68,531 piezas de manta, durante el período de 1843-1887, a 155,025 piezas, de 1893-1913. C) Elevaron la productividad (piezas de manta por obrero) en un 46%: de 144 piezas promedio por obrero, de 1843-1887, a 212 piezas, de 1893-1913. Ese aumento es de menor magnitud que los anteriores, porque al igual que sus antecesoras acrecentaron su producción comprando más máquinas y no siendo más eficientes al utilizarlas. Todas las fábricas enlistadas en el Cuadro 3 integraron su producción hacia adelante y hacia atrás, como las fábricas que operaron de 1843 a 1890. Sin embargo a diferencia de sus antecesoras: 1) Utilizaron energía hidroeléctrica y maquinaria moderna. 2) Produjeron a mayor escala. 3) Fueron administradas por gerentes supervisados por un consejo de Administración formado por altos ejecutivos de las empresas comerciales que eran sus principales accionistas.256 4) Algunas de ellas incrementaron su producción en etapas de inestabilidad social y/o política como la Revolución Mexicana (1910-1917).
255 256
Considerando solo los telares y husos modernos Goméz-Galvarriato, Op.cit. (s/f), p.43.
158
Cuadro 3. Producción de las principales compañías textiles de algodón en México, 1893-1913. Empresa
Fábricas
Kilos algodón consumidos 1,683,240 207,000
Datos de producción Productos Husos Telares Estampado No. de Potencia pzas hilaza (kilos) Antiguos Modernos Antiguos Modernos Antinguas Modernas obreros 50,088 1,481 2,090 11,088 300 470 Agua y vapor
CIDOSA Cía. Industrial
1893 San Lorenzo
de Orizaba S.A.
Cerritos 1 Río Blanco
276,240 1,200,000
1902 San Lorenzo Cerritos Río Blanco
1,790,673 551,335 313,940 925,398
714,214 212,585 159,533 342,096
1912 Cocolapan San Lorenzo Cerritos Rio Blanco
1,795,036 256,199 381,033 300,826 856,978
918,254 188,080 269,400 170,981 289,793
1913 Cocolapan San Lorenzo Cerritos Rio Blanco
1,926,118 465,063 374,625 231,059 855,371
829,169 162,377 218,758 130,391 317,643
5,000 34,000
Cía. Industrial San 1893 Antonio Abad S.A. La colmena y Barron San Antonio Abad
1,400,000 400,000 1,000,000
1912 Miraflores La colmena y Barron San Antonio Abad
597,230 186,010 250,560 160,660
279,963 53,765 113,748 112,450
1913 Miraflores La colmena y Barron San Antonio Abad
698,698 186,483 253,521 258,694
300,232 36,572 129,413 134,247
1912 La Magdalena
426,353
302,314
Veyan Jean y Cía S. En C.
181 1,000 70,516 17,412 7,576 45,528
3,468
3,468
0
89,240 20,048 19,048 7,576 42,568 92,708 20,048 19,048 11,044 42,568
20,540 8,600 11,940 0 4,323 0 0 0 22,237
0
11,092 11,088
1,654
181
0
4
3,718 872 1,036 125 1,685
4
4
6
3,899 872 1,036 306 1,685
4
6
4
6
6
750 400 350 38,280 11,460 14,160 12,660
0 -
38,280 11,400 14,160 12,720
17,128
0
-
por obrero
400 Agua 1,220 Agua y vapor 2,550 896
181
Productividad Pzas de manta
3,718 918 550 2,250
231.57 290.06 152.04
4,284 602 642 465 2,575
Hidroeléctrica Hidroeléctrica Hidroeléctrica Hidroeléctrica
312.43 419.63 367.70 112.54
4,278 600 642 469 2,567
Hidroeléctrica Hidroeléctrica Hidroeléctrica Hidroeléctrica
270.63 340.74 278.02 123.74
1,100 500 Agua y vapor 600 Vapor 1,233 331 550 352
0
1,233 331 550 352
0
667
-
4 0 0 4
1,024 348 355 321
154.50 320.42 350.31
4
1,818 359 555 904
101.87 233.18 148.50
4
2
1,000 Hidroeléctrica
302.31
159
Cuadro 3. Producción de las principales compañías textiles de algodón en México, 1893-1913
Empresa
Fábricas
Cía. Industrial 1912 Manufacturera S.A. Hércules La Purísima San Antonio Rio Grande 1913 Hércules La Purísima San Antonio Rio Grande Cía. Industrial Veracruzana S.A.
Cía. Industrial de Guadalajara S.A.
Cía.Industrial de Atlixco S.A.
La Hormiga S.A.
PROMEDIO
Kilos algodón consumidos 482,576 161,532
321,044 593,737 169,498
Datos de producción Productos Husos Telares Estampado No. de Potencia pzas hilaza (kilos) Antiguos Modernos Antiguos Modernos Antinguas Modernas obreros 230,159 0 40,918 988 387 0 3 1,170 46,261 21,958 433 0 400 Hidroeléctrica 25,203 200 0 70 40,932 3 100 117,763 18,960 355 387 0 600 Hidroeléctrica 247,476 100,919
0
46,318 21,958
146,557
676,832
281,685
891,531
370,849
1912 Rio Blanco Atemajac La experiencia
270,740 59,014 6,240 205,486
122,239 17,363 31,637 73,239
1913 Rio Blanco Atemajac La experiencia
405,269 108,274 105,166 191,829
119,320 16,953 41,770 60,597
465,885
263,690
626,425
314,035
381,132
140,163
22,800
23,300
417,689
147,134
32,013
23,562
1912 Metepec 1913 Metepec 1912 La Hormiga 1913 La Hormiga 1893-1913
387
0
4
1,100 425
por obrero
115.65 360.04 409.32 196.27
237.46 Hidroeléctrica
424,239
1912 Santa Rosa 1913 Santa Rosa
1,088 633
Productividad Pzas de manta
398,184
155,025
0
24,360
455
387
4
40,184
-
1,410
4
1,560 Hidroeléctrica
180.57
1,420
4
1,600 Hidroeléctrica
231.78
40,592 0 63,020 63,020 63,020 0
0
24,168 3,800 9,016 11,352
0 -
24,168 3,800 9,016 11,352
34,472
0
-
34,452
20,803
10,585
18,841
-
769 98 250 421
0
801 98 250 453
0
217.12
2 0 2 0
900 120 300 480
144.69 105.46 152.58
2
817 121 Hidroeléctrica 242 454
140.11 172.60 133.47
2
1,565
5
1368 Hidroeléctrica
192.76
1,487
5
1230 Hidroeléctrica
255.31
650
0
1,000 Hidroeléctrica
140.16
1,000 Hidroeléctrica
147.13
672 195
675
672
3
484,757
757
211.65
1. Datos de 1887 Fuente: AGN, Departamento del Trabajo, Caja 5, Exp. 3. Censo Industrial de fábricas de hilados y tejidos en México, 1912 y 1913. Cuadro 4. Grandes fábricas textiles, 1879-19178 de Goméz-Galvarriato (s/f) y datos reportados al director general del timbre del semestre de 1 de noviembre de 1901 al 30 abril de 1902, reproducido en Everaert, D.Luis, 1989, pp. 158-159
160
Haber señala que durante los primeros años de la Revolución Mexicana (19101913) las empresas manufactureras disminuyeron su producción por la ocupación de sus fábricas por los ejércitos revolucionarios y la destrucción de los sistemas de transportes. Sin embargo no dejaron de producir. Incluso algunas, como las fábricas de telas y cigarros, generaron ganancias y repartieron dividendos. Por ejemplo en el caso de CIDOSA esta cía. incrementó la producción en 10% en su fábrica de Río Blanco. Tuvo un rendimiento promedio sobre sus acciones de 1910-1913 de 5.22%. Repartió dividendos en 1912 de $20.02 y de $11.26 en 1913. La fábrica de Metepec de Cía. Industrial de Atlixco aumentó su fabricación de mantas en 19% y entregó dividendos por $3.00 en ambos años con un rendimiento promedio de sus acciones de 3.55%. Santa Rosa de CIVSA incrementó su fabricación en 32%; mantuvo un rendimiento promedio de 5.97% y entregó dividendos por $12.00 y $12.60 respectivamente.257 San Antonio Abad, la Colmena y Barron de la Cía. San Antonio Abad SA, incrementaron su producción en 19% y 14%, pero la compañía no repartió dividendos, aunque sí tuvo un rendimiento positivo de sus acciones que en promedio fue de 4.35%.258 De 1914 a 1916 continuaron los ataques a los sistemas de transportes, la ocupación de las plantas y los préstamos obligados que disminuyeron la producción industrial de las fábricas de telas de algodón, papel, cerveza y vidrio. Por su parte la industria del acero y del cemento permanecieron cerradas durante todo el periodo.259 Además, por el levantamiento de Venustiano Carranza en el norte, se provocó una escasez de algodón para las fábricas textiles del centro del país. Esta escasez obligó a San Antonio Abad, La Colmena y Barrón a cerrar sus puertas el 18 de agosto de 1913. Otras 86 fábricas solicitaron ayuda al gobierno de Huerta para evitar el cierre. Ante esta situación el Departamento de Trabajo propuso como solución restablecer el transporte de algodón de La Laguna a los centros fabriles e importar, temporalmente, algodón de Estados Unidos sin pagar derechos de importación. Aún con estas medidas el algodón siguió escaseando y esto motivó a los empresarios de 257
Haber, op.cit, 1992, pp. 146-170. . Ídem 259 Ídem 258
161
la Confederación Fabril Nacional Mexicana a sostener una reunión con Huerta, el 14 de septiembre de 1913, para ofrecer su apoyo económico a cambio del restablecimiento del tráfico de algodón. A pesar de ese apoyo económico, Huerta no pudo restablecer el abasto de algodón, ni de otros insumos, como el combustible.260 Lamentablemente no se poseen datos numéricos para ejemplificar la caída en la producción de las compañías textiles por la escasez de algodón durante este periodo; sólo se cuenta con alguna información cualitativa sobre las fábricas de CIDOSA y CIVSA. De acuerdo a los informes del Consejo de Administración de CIDOSA, las dificultades aumentaron a partir de 1914, debido a las frecuentes interrupciones del tráfico, que complicaron el transporte de productos y provocaron escasez de materias primas, de combustibles y de otros insumos imprescindibles en la fabricación. 261 Por ejemplo, en Abril de 1914, CIDOSA solicitó a la Secretaría de Comunicaciones un carro de ferrocarril para arrastrar ácido sulfúrico y carros para aceite que le compró a la Cía. petrolera “El Águila” para la fábrica de Río Blanco. CIVSA también solicitó carros de ferrocarril para transportar combustible a Santa Rosa. Ambas peticiones se autorizaron y la Secretaría de Comunicaciones le ordenó a la Cía. del Ferrocarril Mexicano que hiciera entrega de ellos.262 Por otra parte, cuando fue posible aprovechar el tráfico, hubo de hacerse siempre con grandes riesgos debido a los frecuentes ataques de que eran objeto los convoyes, y a la desorganización de los ferrocarriles, que hicieron que se perdieran algunos envíos de productos manufacturados y materias primas263, como el ocurrido en agosto de ese mismo año, cuando los accionistas de CIVSA solicitaron apoyo para localizar los carros de algodón pedidos en Torreón y que se les transportó por error a otra compañía.264
260
Ramírez Rancaño, Mario. Burguesía textil y política en la Revolución Mexicana. Serie de Sociología y política en México, Instituto de Investigaciones Sociales. UNAM, México, 1987, pp. 98-101. 261 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1914. Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués, Querétaro, 1990, pp.88. 262 Archivo General de la Nación (AGN), Departamento del trabajo, Caja 81, Expediente 23, 1914. 263 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1914. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 88-89 264 AGN, Departamento del trabajo, Caja 79, Expediente 34, 1914.
162
Con el aumento del conflicto civil y la caída de Huerta en 1914, los industriales debieron acercarse al gobierno de Venustiano Carranza. Al primer encuentro de los industriales con Carranza, convocado por el gobierno en septiembre de 1914, sólo acudió el 40% de los representantes de las fábricas. Entre ellos no estaban los más importantes (CIDOSA, CIVSA, Cía. Industrial Manufacturera SA, etc.). Carranza inició las sesiones poniendo énfasis en el monopolio del algodón cuando a los industriales les preocupaba el arrastre del algodón de La Laguna al centro fabril y la falta de insumos, como el combustible.265 En julio de 1915, CIDOSA solicitó apoyo a la Secretaría de Comunicaciones para transportar algodón por ferrocarril ya que por falta de materia prima había disminuido su producción y estaban a punto de suspenderla. La Secretaría le contestó que no había material rodante pero que se atendería tan pronto fuera posible. CIVSA padeció las mismas circunstancias para la fábrica de Santa Rosa.266 Asimismo para evitar pérdidas por la inestabilidad monetaria de los diferentes gobiernos, los accionistas de CIDOSA y CIVSA tomaron la decisión de realizar todas sus transacciones en peso oro.267 Aunque, “la constante baja de la moneda fiduciaria no tuvo consecuencias tan directas gracias a las medidas que se tomaron en previsión, sí dio lugar a dificultades para reunir las cantidades necesarias de moneda metálica para el pago de los salarios (obligatorio por decreto)”.268 Por ejemplo en 1916, Juan Michel apoderado de CIVSA, solicitó de $4,000 a $6,000 pesos en plata a la semana para el pago de raya a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Dado que BANAMEX sólo le ofrecía $1,500.00. La SHCP autorizó la petición y la envió a la comisión de cambios y monedas.269 En 1917, el país volvió al orden constitucional con Carranza, pero las comunicaciones ferroviarias siguieron siendo inseguras e inconstantes. CIDOSA reportó en su informe de 1916, “la pérdida de una importante partida de algodón que 265
Ramírez, Rancaño, Op.cit., 1987, pp. 185-187. AGN, Departamento del trabajo, Caja 101, Expediente 35 y 36, 1915. 267 Gómez Galvarriato, Aurora. “The impact of revolution: Busines and labor in the Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. Tesis para doctor en Historia. Harvard University. Cambridge, Massachussets, Diciembre 1999ª, pp. 540-542. 268 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1916. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 90. 269 AGN, Departamento del trabajo, Caja 43, Expediente 19, 1916. 266
163
fue reducida a cenizas en uno de los ataques consumados en la línea del ferrocarril Mexicano.270 El 9 de octubre de 1917 CIDOSA y otras compañías solicitaron al gobierno carros de ferrocarril para transportar 500 pacas de algodón varadas. 271 Además, el 24 de julio de 1920, el Gobierno de Veracruz solicitó apoyo al Departamento de Trabajo para el arrastre de carros de combustible y algodón que, de no llegar pronto, provocarían el cierre de la Fábrica de Santa Rosa de CIVSA.272 Los empresarios textiles también debieron enfrentar la exención de pago de los derechos a los tejidos de algodón importados que provocaron la suspensión de las transacciones, por seis meses, hasta que se establecieron los derechos abolidos.273 El 19 de julio de 1917 Carranza permitió la importación de productos textiles y causó una guerra contra esta industria. La lucha inició con la Ley de Incautación de las Fábricas, de septiembre de 1917, que amenazaba con expropiar las fábricas que sostuvieran paros no justificados por parte de los propietarios, según la fracción XIX del Artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Esta ley nunca se llevó a cabo dadas las protestas legales de los empresarios y la lentitud de los senadores para aprobarla. Casi para terminar 1917, Carranza y los industriales limaron asperezas en el Primer Congreso Nacional de Industriales, organizado en noviembre. En éste los empresarios textiles, petroleros y mineros lograron cierta benevolencia de Carranza al suprimir los decretos librecambistas, aunque sólo faltaban 15 días para que expiraran.274 Otro problema fue la promulgación de leyes que protegían los intereses de los trabajadores, como el artículo 123 de la Constitución de 1917 y la Ley de Trabajo del Estado de Veracruz promulgada en 1918. Esta última provocó actos de indisciplina y atentados contra personas e intereses de CIDOSA y CIVSA.275 En septiembre de 1919, 23 obreros tejedores de la fábrica de Santa Rosa, con uso de violencia, cortaron la tela de los telares antes de que terminara el rollo y colocaron una de distinto ancho. Alegaron que la fábrica a propósito cambio la tela
270
Informe rendido por el Consejo de Administración en 1916. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 90. Centro de estudios de Historia de México, CARSO, Fondo Venustiano Carranza, Carpeta 54, Legajo 6077. 272 AGN, Departamento del trabajo, Caja 209, Expediente 39. 273 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1917. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 91. 274 Ídem. 275 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1918. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 91. 271
164
por una menos ancha para disminuir el salario a los trabajadores. Ante esto Camilo Maurer representante de CIVSA decidió cerrar la fábrica.276 La Junta de Conciliación de Arbitraje, por haber cerrado la fábrica, impuso a Camilo Maurer pagar multa de $100 ó ir a la cárcel por 36 horas. Maurer solicitó amparo para evitarlo, exponiendo que en CIVSA tanto la tela de 62 cm como la de 72 cm tenían el mismo pago, $1.40 los cien metros que estaba por encima de 99 centavos que pagaban otras fábricas.277 Más allá de estos conflictos, “lo que mayores perjuicios ocasionó a la producción fue la suspensión de los trabajos nocturnos a causa del precepto de la Ley Veracruzana que impuso que dichos trabajos fueran pagados con un aumento de 50 por ciento en el tipo de salarios. Fue hasta febrero de 1919 que se restableció parcialmente el segundo turno en Río Blanco y en San Lorenzo, y completo en Cerritos. Además CIDOSA también recibió daños por un incendio en el edificio de acabados de Río Blanco en septiembre y una huelga general que duró cinco semanas en octubre y noviembre.278 Fue hasta la década de 1920 que la producción textil logró recuperarse por completo porque el gobierno de Calles (1924-1928) volvió a beneficiar a los empresarios con tarifas proteccionistas para la industria y con la sustitución de importaciones, entre ellas la de artículos de algodón, para poder disponer de fondos para importaciones más básicas como la maquinaría.279 Los volúmenes de producción de la industria textil de algodón nacional de 1917 a 1930 se pueden consultar en el Anexo A. En él se observa que de 1917 a 1923 el promedio de producción fue de 25,481,601 piezas, mientras que durante el 1925 a 1928 la producción alcanzó un volumen de 35,785,116 piezas. En el siguiente apartado se analizarán los recursos y capacidades que hicieron a las fábricas textiles de CIDOSA las de mayor producción y ganancias de 1889-1930.
276
Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Sección Fomento, Serie Industria, Caja 170 (603), Expediente 53 de 1920. 277 Ídem. 278 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1918 y 1919. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 91-92. 279 Keremitsis, Op.cit, 1973, pp.228-229
165
Recursos Agua La industria textil mexicana dependió de la energía hidráulica desde que se fundaron las primeras fábricas en el siglo XIX. En Puebla, las manufacturas aprovechaban las aguas del río Atoyac; en el DF las del río Tlalnepantla; en Jalisco las del Lerma-Santiago280 y en Orizaba la de los ríos Orizaba, Tlilapan y Blanco (Ver Imagen 1). Las compañías que obtuvieron los derechos del agua de estos ríos fueron CIDOSA, CIVSA y The Santa Gertrudis Jute Mill Company Limited. Imagen 1. Río Blanco, alrededores de Orizaba.
Fuente: Archivo General de la Nación (AGN), Fototeca, propiedad artística y literaria. Briquet A. No. 2. La primera concesión de las aguas del río Orizaba fue otorgada el 7 de noviembre de 1881 al señor Enrique Wiechers para el uso de la planta de Cerritos. Fue por 624 litros por segundo, con un pago anual de $100. El 20 de abril de 1886 el
280
Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 99-108.
166
señor Wiechers vendió la fábrica con la concesión a la Cía. Manufacturera de Cerritos, que -a su vez- las vendió a CIDOSA el 12 de julio de 1889.281 Signoret, Honnorat y Cía. Obtuvo mediante cesión de Enrique Camacho las concesiones para las aguas del río Blanco y Salado, así como del manantial denominado “La Laguna”, otorgadas por el municipio de Nogales el 4 de mayo de 1889 y por el 8 de abril de 1894. Estas concesiones pasaron inmediatamente a CIDOSA.282 Con el objetivo de aumentar la fuerza motriz de sus fábricas los accionistas de CIDOSA solicitaron concesiones adicionales a las ya mencionadas. El 28 de agosto de 1895 requirieron al Ayuntamiento de Ixhuatlancillo les otorgara el permiso correspondiente para tomar las aguas de los ríos Pala y Orizaba. La concesión que recibió fue para establecer una toma de agua a 200 varas de distancia del puente del municipio, con el compromiso de no modificar el curso del río y de devolver la misma cantidad de agua que recoja. Asimismo, debía pagar por esta concesión la suma de $100 adelantados a la Tesorería del municipio. No podía traspasar la concesión sin permiso del ayuntamiento, ni usar el agua para fines distintos a los convenidos.283 Posteriormente, el 6 de febrero de 1896 requirieron otra concesión: ahora sobre el agua del río Blanco al municipio de San Juan del Río. Este Gobierno les permitió tomar el agua que caía después del desagüe de la turbina del señor Miguel Bringas, hasta antes de la toma que tiene la fábrica de yute Santa Gertrudis, por un pago anual de $200.284 El 30 de octubre de 1897 la compañía firma un contrato con el señor Bringas para que cediera de las aguas del Río Blanco a su cargo, la cantidad de 5,000 litros de agua por segundo en tiempo de secas y hasta 10,000 litros por segundo en época de lluvias.285 Sin embargo, los ríos tenían muchas fluctuaciones en su caudal y a menudo no resultaban suficientes para mover la maquinaría pesada. Esto cambió con el uso de la energía hidroeléctrica que, además, permitió a las fábricas trabajar jornadas
281
Archivo Histórico del Agua (AHA), Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. AHA Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4516, Expediente 59830 y 59832. 283 AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, Caja 1436, expediente 19546 284 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 1440, Expediente 19588. 285 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4457, Expediente 58825. 282
167
más largas con un control más riguroso de las temperaturas, y disminuir el peligro de incendios de los almacenes de algodón.286 La primera hidroeléctrica en la industria de tejidos de algodón fue la instalación de Rincón Grande (ver Imagen 2) propiedad de CIDOSA. Esta planta fue inaugurada en 1897. Contaba con 4 turbinas que accionaban 4 generadores eléctricos de 550 caballos de fuerza (HP), encargados de distribuir energía a las tres fábricas propiedad de la compañía.287.
Imagen 2. Hidroeléctrica de Rincón Grande
Fuente AGEV, Fondo Orizaba, Foto 92, Negativo 31. CIDOSA también contó, a partir de 1910, con la hidroeléctrica de Cocolapan que utilizó las aguas del Río Blanco y tuvo una capacidad de 2,200 caballos de fuerza. Y la planta de Boquerón que se ubicó en un punto intermedio entre Río Blanco y las okantas Cocolapan y Rincón Grande288. Esta instalación aprovechó las aguas del río Blanco después de su confluencia con el río Orizaba. Su canal tuvo 286
Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 99-108. Sothworth, John. Veracruz Ilustrado. Editora de Gobierno de Veracruz, México, 2005, pp.122. 288 Los planos de los canales, acueductos, instalaciones y de las obras hidráulicas e hidroeléctricas de CIDOSA se encuentran en el fondo de Aprovechamientos Superficiales del AHA. 287
168
una capacidad de 7,800 litros por segundo y producía 2,800 caballos de fuerza. Las líneas de transmisión tuvieron una longitud de 21 kilómetros.289 Las hidroeléctricas de CIDOSA se abastecieron de las diferentes concesiones de agua que ya se enumeraron y de otras más que le otorgaron y/o adquirió CIDOSA entre de 1899 y 1911, como la que consiguen con la compra de la fábrica de Cocolapan, en 1899, por “hasta 8,125 litros por segundo como máximo de las aguas del río Blanco”290, o la del 24 de enero de 1902, cuando la Secretaría de Fomento le concede usar 4,000 litros más de agua del río Blanco y 7,509 litros del río Salado291, y la de 1908, cuando el señor Adolfo Díaz Rugama les traspasó la concesión de las aguas del río Blanco, del tramo de la Cía. de Yute hasta la caída de Tuxpango, con lo cual CIDOSA obtuvo el derecho de utilizar 10,000 litros más por segundo.292 Otras compañías que tenían hidroeléctricas y concesiones sobre los ríos en Orizaba fueron la compañía
Manufacturera de Yute Santa Gertrudis SA y la
Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA). Santa Gertrudis obtuvo el 19 de mayo de 1909 el derecho de utilizar 18,000 litros por segundo de las aguas del río Blanco. La concesión fue por 99 años y la utilizaba para dotar de la corriente a su planta hidroeléctrica que se ubicaba en el margen izquierdo del río Blanco, en el fondo de la barranca del mismo nombre, entre los municipios de Ixtaczoquitlán y Orizaba. Esta instalación tenía una superficie de 183,345 metros 2 de terreno y 47, 472 metros2 sobre el río.293 CIVSA contó con dos concesiones sobre el uso del agua del río Blanco: una por 5,000 litros por segundo, otorgada en 1895 a Víctor Garcín, quien la cedió a la compañía; y otra hasta por 2,500 litros, concedida en 1897 para el aprovechamiento del agua para producir energía eléctrica en su instalación de Zoquitlán.294 Las diferentes concesiones sobre las aguas de los ríos de la región de Orizaba otorgadas de 1889 a 1911 a CIDOSA y otras compañías se encuentran 289
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México (AHNM), Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 9378, volumen 113, 11/9/1920. 290 AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. 291 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 172, Expediente 4020 292 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 59779 293 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4513, Expediente 59678 294 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4513, Expediente 59773
169
resumidas en el Cuadro 4. De acuerdo a la información que en él se presenta, se observa que CIDOSA tenía autorizados 45,489 litros por segundo de agua en época de secas, mientras que Santa Gertrudis sólo contaba con 18,000 litros y CIVSA con 12,500. Es decir, CIDOSA gozaba de 153% más volumen de agua que las otras compañías concesionadas de la región. Cuadro 4. Concesiones de agua de los ríos de la región de Orizaba, de 1889 a 1911. Compañía
CIDOSA
Fecha de la Río concesión 12/07/1889 04/05/1889 08/04/1894 28/08/1895 06/02/1896 26/08/1897 26/08/1897 30/10/1897 30/10/1897 11/01/1900 06/10/1903 29/01/1907 24/01/1908 29/12/1908 19/10/1908 19/10/1908
Orizaba Blanco y Salado La Laguna Pala y Orizaba Tlilapan y Blanco Tlilapan y Blanco Tlilapan y Blanco Blanco y Orizaba Blanco y Orizaba Blanco Blanco Blanco y salado Blanco Laguna Nogales Salado Salado TOTAL (secas) 11/05/1909 Blanco
The Santa Gertrudis Jute mill company limited CIVSA 22/12/1897 Blanco 20/10/1898 Blanco 25/11/1911 Blanco
Temporada Volumen de Pago agua (lts x o periodo segundo) anual 624 $ 100.00
Secas lluvías secas lluvías
Jun-Nov Dic-May
Secas Secas lluvías
TOTAL (secas) Fuente: Archivo histórico del Agua (AHA) Fondo Caja Expediente Aprovechamientos Superficiales 172 4,020 Aprovechamientos Superficiales 4505 59,644 Aprovechamientos Superficiales 1440 19,588 Aprovechamientos Superficiales 4516 58,830 Aprovechamientos Superficiales 4528 60,052 Aprovechamientos Superficiales 4457 58,825 Aprovechamientos Superficiales 4506 59,678 Aprovechamientos Superficiales 4513 59,779 Aprovechamientos Superficiales 4513 59,773
10,000 20,000 5,000 10,000 8,125 4,000 7,509 10,000 71 100 60 45,489 18,000
2,500 5,000 10,000 13,000 12,500
Persona o compañía que cedió /dependencia que otorgo Municipio de Orizaba Signoret, Honnorat y cía. Signoret, Honnorat y cía. $ 100.00 Mpio. Ixhuatlancillo $ 200.00 Mpio. San Juan del Río Scría. Fomento Scría. Fomento Sr. Bringas Sr. Bringas Escandon, Hmnos. Scría. Fomento Scría. Fomento Adolfo Díaz Rugama Mpio. Nogales Mpio. Nogales Mpio. Nogales
Fábrica o hidroeléctrica donde se utilizaron Cerritos Río Blanco Usos industriales Cerritos Rincon Grande Rincon Grande Rincon Grande Río Blanco Río Blanco Cocolapam Hidroeléctrica Cocolápam Río Blanco San Lorenzo Usos industriales Usos industriales Usos industriales
Mpio. Ixtaczoquitlán
Santa Gertrudis
Víctor Garcín Scría. Fomento
Santa Rosa Zoquitlán
De acuerdo a este mismo cuadro, el agua concesionada a CIDOSA se utilizaba de la siguiente forma: 1. Las aguas del río Salado y del río Blanco, en la Fábrica de Río Blanco, ubicada en el municipio de Tenango. Esta manufactura tenía cinco turbinas y 15 motores eléctricos que recibían la fuerza de la instalación de Rincón Grande. 2. Otra parte de las aguas del Río Blanco (10,000 litros) se usaba en la fábrica de San Lorenzo, ubicada en la municipalidad de Nogales. Esta recibía la fuerza motriz de 3 turbinas y dos motores eléctricos accionados por la instalación de Rincón grande. 170
3. Las aguas de los ríos Pala y Orizaba en la fábrica de Cerritos situada en la municipalidad de Orizaba. Cerritos tenía dos turbinas que eran movidas por las aguas del río Orizaba que llegaban a través de un acueducto (ver imagen 3). Y contaba un motor eléctrico que recibía energía de Rincón Grande. 4. 12,125 litros de las aguas de Río Blanco en la fábrica e hidroeléctrica de Cocolapan ubicadas en el municipio de Orizaba. La fábrica tenía dos turbinas y era casi toda movida por electricidad. La instalación eléctrica de Cocolapan producía 2,200 caballos y contaba con un canal y tubos de transmisión (ver Imagen 3). 5. -Las aguas del río Tlilipan en la hidroeléctrica de Rincón Grande ubicada en el municipio de San Juan del Río. Rincón Grande producía una fuerza de 2,250 caballos. Y contaba con una concesión para reunir a las aguas del río de Tlilipan a las del río Blanco para ser utilizadas en su totalidad con un costo relativamente pequeño, atendiendo las necesidades del canal existente.295 La ubicación de las fábricas textiles, hidroeléctricas y fuentes de agua propiedad de CIDOSA se encuentran señaladas en el mapa 1. En él se muestra la cercanía con los ríos y con las vías del ferrocarril en su ruta Veracruz- Ciudad de México. Mapa 1. Ubicación de las fábricas, hidroeléctricas y fuentes de agua de CIDOSA, 1900-1930.
CÓRDOBA
Atzacán
CD. MENDOZA
ORIZABA
Amatlán Ixtaczoquitlán de los Reyes Rafael Delgado
Nogales Maltrata
Zongolica
0
5
10
15
20 25
50
75 km
® Derechos Reservados. Secretaria de Comunicaciones y Transportes.
Fuente: http://portal.veracruz.gob.mx/portal/ 295
AHNM, notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 2436, Volumen 35 del 24/4/1908 y Sothworth, John. Op.cit. 2005, pp.122.
171
Imagen 3. Pasillo de transmisión de Cocolapan y acueducto de Cerritos.
Fuente: AGEV, Fondo Orizaba, Foto 67 y 71..
172
En enero de 1912, Antonio Reynaud, Director General de CIDOSA solicitó a la Secretaría de Fomento que extendiera sus concesiones de uso de agua para fines industriales de los ríos Blanco, Tlilipan, Salado y de la laguna de Nogales en Orizaba, Veracruz, a 99 años. Argumentó que de acuerdo al balance de 1911 (ver Anexo D), las obras hidráulicas, eléctricas y a las de la industria misma, representaban un capital invertido de más de $18, 000, 000, y por lo cual “no había en todo el país un conjunto de obras, edificios y maquinaría de tal importancia” 296. El valor de las cuatro fábricas y las tres instalaciones hidroeléctricas de CIDOSA presentados en el balance de 1911 se encuentra especificado en el Cuadro 5. Si comparamos esos valores con el estudio de evaluación realizado -a petición de los propios accionistas- por el arquitecto Miguel Ángel De Quevedo y el Ingeniero Oyarxbal en 1907, se observa que los valores asignados a las inversiones de CIDOSA fueron muy similares. Excepto para la fábrica de Cocolapan que fue remodelada y reinició operaciones en 1910, por lo cual aumentó su valor. Y para la hidroeléctrica de Boquerón que empezó a operar en ese mismo año. La Secretaría estudió la solicitud de CIDOSA y la aprobó el 13 de junio de 1912.297 CIVSA también solicitó a la Secretaría de Fomento en noviembre de 1911 que prorrogara sus concesiones a 99 años y que aumentara el volumen autorizado hasta por 10,000 litros en seca y 13,000 en lluvias.298 Justificó su petición entregando informes en que demostraba que sus inversiones equivalían a $6,030,000 pesos, de los cuales la obra hidráulica representaba $1,039,000. La petición de 99 años no fue autorizada y sólo se le otorgaron 70 años, que debían ser contados a partir del 26 de abril de 1911.299.
296
AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60,052. Ídem. 298 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4523, Expediente 59970. 299 AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 4523, expediente 59972 297
173
Cuadro 5. Inversión en planta de CIDOSA 1907-1911 (pesos corrientes). Activo Fábrica Río Blanco
1907
1911
$ 10,262,452.93 $ 10,951,872.38 Fábrica San Lorenzo $ 2,625,000.00 $ 2,630,697.39 Fábrica Cerritos $ 795,000.00 $ 798,723.31 Fábrica Cocolápan $ 1,454,022.88 $ 2,410,354.21 Instalación eléctrica Cocolapan $ 400,000.00 $ 497,086.81 Instalación hidroeléctrica Rincón Grande $ 800,000.00 $ 973,902.60 Instalación hidroeléctrica Boquerón $ 158,620.62 Muebles y enseres $ 8,809.53 TOTAL
$
16,336,475.81 $ 18,430,066.85
Fuente: AHA, Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60052 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notaría / Notario
Fecha
Volumen
Escritura
5. Bernando Cornejo
24/04/1908
35
2436
Por el uso del agua concesionada a 99 años, CIDOSA pagó a la Secretaría de Fomento $9,727.25, en 1917 y de $1,333.60 para 1918. El monto de un año a otro disminuyó drásticamente, debido a que CIDOSA y algunas otras empresas hidroeléctricas solicitaron a la Dirección de Aguas se le eximiera del pago de la fuerza teórica que amparan sus concesiones, pues por causas de fuerza mayor, no podían hacer uso de todas las dotaciones de agua a que tenían derecho. Esta petición fue autorizada por el presidente Venustiano Carranza, el 14 de noviembre de 1918.300 Los pagos correspondientes por uso de agua de CIDOSA de 1917 a 1927 a la Secretaría de Fomento se especifican en el Cuadro 7. En este cuadro se muestran los datos de fuerza efectiva y de fuerza teórica tanto para las fábricas como para las instalaciones hidroeléctricas. A partir de 1918 el total de contribución anual sólo incluye el uso de la fuerza efectiva. El cuadro también indica que la electricidad generada se destinaba para uso propio y para la venta. Rincón Grande vendía 130 HP a las villas de Río Blanco y Nogales para alumbrado y Cocolapan 46 HP de su fuerza efectiva al municipio de Orizaba. Ambas hidroeléctricas cobraban $1 pesos por cada HP.301
300 301
AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 4020, expediente 172 Ídem.
174
En el año de 1924 las plantas hidroeléctricas de Cocolapan, Rincón Grande y Boquerón, produjeron la mayor cantidad de fuerza efectiva del periodo de 1917 a 1927. La cantidad de kilo wat (KW) que corresponde a esa fuerza efectiva se presenta en el Cuadro 6. En él se incluye la producción mensual de las hidroeléctricas de CIDOSA para 1924 y de la planta Zoquitlán de CIVSA para 1935. Se presentan datos de diferentes años porque no fue posible localizarlos para la misma fecha. Aún así es posible compararlos dado que ambos representan volúmenes de producción en unidades.
Cuadro 6. Energía eléctrica en KW producida por CIDOSA y CIVSA, 1924 y 1935. CIDOSA 1924 CIVSA 1935 MES COCOLAPAN RINCON GRANDE BOQUERON TOTAL ZOQUITLÁN Enero 83,040 230,400 118,560 432,000 301,650 Febrero 117,152 246,900 37,440 401,492 287,790 Marzo 152000 306,800 458,800 303,790 Abril 184,288 284,400 468,688 274,560 Mayo 170,016 331,400 501,416 122,720 Junio 164,864 300,100 107,040 572,004 183,920 Julio 89,280 263,700 76,640 429,620 191,580 Agosto 178,000 102,400 280,400 178,220 Septiembre 49,856 224,300 189,800 463,956 159,310 Octubre 334,706 212,500 547,206 180,570 Noviembre 327,586 176,700 504,286 164,360 Diciembre 341,293 187,600 528,893 110,290 Totales 2,014,081 2,942,800 631,880 5,588,761 2,458,760 Fuente: AHA, Fondo Aprovechamientos supeerficiales, Caja 172, Expediente 4020, y Caja 1817, Expediente 27165.
De acuerdo al Cuadro 6, la planta de CIVSA superaba en producción de energía a Cocolapan y Boquerón. Pero si las comparamos contra el total de energía producida por las tres hidroeléctricas de CIDOSA, se observa que su producción era 56% menor. A continuación se revisará los procesos de trabajo en los cuales se utilizó la energía producida por las hidroeléctricas de CIDOSA.
175
Cuadro 7. Impuestos pagados por el uso de agua de las fábricas textiles e instalaciones hidroeléctricas de CIDOSA, 1917-1927 (pesos corrientes) 1917 1918 1919 1 1 FÁBRICAS SAN LORENZO RIO BLANCO Uso Industrial SAN LORENZO RIO BLANCO Uso Industrial SAN LORENZO RIO BLANCO FUERZA EFECTIVA Volumen máximo concedido 4,761.936 4,000 7509 4,761.936 780 1,266.10 Gto. minimo del rio 2,000 3,500 Blanco/Orizaba/Tilapan Promedio aprovechable 3,000 5,504.50 Altura de caida 26 23 Capacidad máxima 940 1588 780 1,266.10 Mitad de la anterior 390 633.1 390 633.1 Menos 75 Caballos efect. 315 558.1 315 558.1 A .75 en 1917 y .5 H.P. otros $ 705.00 $ 1,191.00 $ 238.05 $ 157.50 $ 279.05 $ 238.10 $ 157.50 $ 279.05 FUERZA TEORICA Caballos teoricos corresp. 940 1,588 520 844.1 520 844.1 a .025 el H.P./$0.05 millar $ 470.00 $ 794.00 $ 130.00 $ 211.03 $ 130.00 $ 211.03 HIDROELÉCTRICAS COCOLAPAN RINCON BOQUERON COCOLAPAN RINCON BOQUERON COCOLAPAN RINCON GRANDE GRANDE GRANDE FUERZA EFECTIVA Producida para uso propio 2114 2705 388.50 724.60 279.80 552.60 726.46 Producida a la vta (pago $1) Menos 75 Cab. Efec 204.80 A .75 en 1917 y .5 H.P. otros $ 1,585.50 $ 3,762.00 $ 2,028.75 $ 194.25 $ 362.30 $ 102.40 $ 276.30 $ 363.23 FUERZA TEORICA Volumen concedido 8,125.00 10,000.00 7,733.00 Gto. minimo del rio 3,800.00 8,000.00 Blanco/Orizaba/Tilapan Promedio aprovechable 5,962.50 9,000.00 Altura de caida 27.88 41.80 27.60 Capacidad máxima 1,662.30 3,762.00 2,134.00 Menos fza producida 388.50 724.60 279.80 Total HP efectivos 1,273.80 3,037.40 1,854.30 1,273.80 1,854.30 Cab.teorico equivalentes 2,114 7,424 2,705 1,698.40 4,049.90 2,472.40 1,698.40 2,472.40 a .5 en 1917 y .25 H.P. otros $ 1,057 $ 3,712 $ 1,353 $ 424.60 $ 1,012.47 $ 618.10 $ 424.60 $ 618.10 AGUAS TORRENCIALES NO APROVECHAS Volumen medio aprovechable 3,500.00 Altura de caida 41.80 Capacidad teorica durante 6 1,950.70 meses En un año 975.40 A .25 H.P. $ 243.85 Contribucion anual total $ 9,272.25 $ 1,333.60 1. Las fuentes de uso industrial son la Laguna de Nogales y el Canal de Mirafuentes. Se miden en metros cúbicos y su pago es de $ 0.05 por millar Fuente: Archivo histórico del agua (AHA) Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 172 Expediente 4020.
Uso Industrial
1
4,761.936
$
238.10
BOQUERON
198.90
$
$
99.45
3,037.40 4,049.90 1,012.47
1950.7 $ $
243.85 2,640.04
176
Cuadro 7. Impuestos pagados por el uso de agua de las fábricas textiles e instalaciones hidroeléctricas de CIDOSA, 1917-1927 (pesos corrientes) 1924 1925 1927 FÁBRICAS San Lorenzo Rio Blanco Uso Industrial San Lorenzo Rio Blanco Uso Industrial San Lorenzo Rio Blanco FUERZA EFECTIVA 4,761,936 4,761,936 Volumen máximo concedido 4,000 7,509 4,000 7,509 4,000 7,509 Gto. minimo del rio 2,000 3,500 2,000 3,500 2,000 3,500 Blanco/Orizaba/Tilapan Promedio aprovechable 3,000 5,504.50 3,000 5,504.50 3,000 Altura de caida 26 23 26 23 26 Capacidad máxima 780 1,266.10 780 1,266.10 780 Mitad de la anterior Menos 75 Caballos efect. 705.00 1,191.10 705.00 1,191.10 A .75 en 1917 y .5 H.P. otros $ 352.50 $ 595.53 $ 238.10 $ 352.50 $ 595.53 $ 238.10 $ 390.00 $ 863.54 FUERZA TEORICA Caballos teoricos corresp. 1,040.00 1,727.07 a .025 el H.P./$0.05 millar $ 520.00 $ 863.54 HIDROELÉCTRICAS COCOLAPAN RINCON BOQUERON COCOLAPAN RINCON BOQUERON COCOLAPAN RINCON GRANDE GRANDE GRANDE FUERZA EFECTIVA Producida para uso propio 611.17 731.63 659.61 435.76 370.23 708.33 695.01 323.10 Producida a la vta (pago $1) 46 130.00 46 130.00 Menos 75 Cab. Efec A .75 en 1917 y .5 H.P. otros $ 305.58 $ 365.81 $ 329.80 $ 263.88 $ 315.12 $ 354.17 $ 393.50 $ 291.55 FUERZA TEORICA Volumen concedido Gto. minimo del rio Blanco/Orizaba/Tilapan Promedio aprovechable Altura de caida Capacidad máxima Menos fza producida Total HP efectivos Cab.teorico equivalentes 2,032.32 6919.87 a .5 en 1917 y .25 H.P. otros $ 215.84 $ 890.53 AGUAS TORRENCIALES NO APROVECHAS Volumen medio aprovechable Altura de caida Capacidad teorica durante 6 meses En un año A .25 H.P. Contribucion anual total $ 2,097.12 $ 2,119.29 1. Las fuentes de uso industrial son la Laguna de Nogales y el Canal de Mirafuentes. Se miden en metros cúbicos y su pago es de $ 0.05 por millar Fuente: Archivo histórico del agua (AHA) Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 172 Expediente 4020.
Uso Industrial 4,761,936
$
238.10
BOQUERON
540.46
$
270.23
$
2039.39 203.94
$
3,887.23
177
Procesos de trabajo. El proceso de trabajo de hilados y tejidos de algodón en las grandes fábricas inicia con “la limpieza del algodón en las batientes y la separación de fibras y eliminación de la borra por medio de cardas. Después se realiza el doblado y estirado de las fibras (en los estiradores y veloces) para uniformarlas y hacer más delgadas. De ahí se procede a la hilatura, en donde se estiran y tuercen las fibras en los husos hasta conseguir el tamaño del hilo deseado. Se tejen los hilos en los telares y, finalmente, se destina al blanqueo, tintura, estampado y doblado para que le den la presentación final a la tela”.302 La maquinaria y los procesos de trabajo que las fábricas de tejidos e hilados de algodón utilizaron en México a partir de 1910, fueron: 1) Cargadora para colocar las pacas de algodón que alimentan la abridora 2) Abridora: da apertura a las pacas de algodón, desintegra el algodón que viene comprimido y hace las hebras. Si se desea obtener diferentes hilos se mezclan los algodones de diferentes calidades. Las fibras más resistentes y finas se utilizaban para hilo de pie, y las menos resistentes y gruesas para hilo de trama 3) Batiente: enrolla las hebras. 4) Cardas, que peinan, limpian perfectamente el algodón y separan, una por una, las fibras de modo que al salir forma una cinta. 5) Reunidora de telas: cuando se da doble cardado, se debe pasar por las reundidoras, que junta las cintas en una napa para el doble cardado. 6) Peinadoras. 7) Manuares o estiradoras que doblas y estiran 8) Pabiladoras o veloces gruesos que doblan y estiran 9) Máquinas de hilar o tróciles para estirar, torcer y generar hilo. Los tróciles tienen canillas. 10) Carretero de canilla, que pasa los hilos de canilla a carrete para limpiarlos y acumularlos en los carretos especiales del urdidor. 11) Urdidor, bastidores que peinan y donde se colocan los hilos. 12) Máquina engomadora, para reunir todos los hilos que componen el ancho de la tela. 13) Bastidores de atado y de repasado, para formar la tela de acuerdo al dibujo. 14) Telares, que tejen los hilos. 15) Dobladoras, que mediante operaciones mecánicas miden la tela y le dan la presentación final. 302
Chavez, Orozco. Monografía económico-industrial de la fabricación de hilados y tejidos de algodón. Secretaría de la Economía Nacional, Departamento de Industrias, México, 1933, pp. 43-51 (Biblioteca del Centro de estudios de Historia de México, CARSO).
178
16) Foulares (rodillos) y Jigger (tinta con rodillos) para el tinte. 17) Aprestos y tórculos para el estampado.303
Estas máquinas se agruparon por tipo de operación o por procesos y se organizaron físicamente en “departamentos donde se juntaron las máquinas especializadas en una sola operación o en una sola pieza”304, como el departamento de preparación e hilados, donde se instalaron las máquinas abridoras de las pacas de algodón, los batientes, las cardas y demás maquinaria que limpiaban e hilaban el algodón. El departamento de tejidos, que tenía los telares, urdidores y engomadoras. El departamento de blanqueo, con sus ollas, estufas y secadoras se encargó de hacer la costura de piezas y el chamuscado para eliminar borras. 305 En el desengomado se lavaba con sosa para eliminar el pegamento de los hilos. Posteriormente se secaría. La tintorería, con los tanques, las rociadoras y oxidadoras se encargaban de agregar colores sustantivos o distractos y colores básicos que no se fijaban directamente al algodón pero daban tonos muy vivos. El departamento de estampado realizaba con los aprestos, tórculos, engomadoras, y dobladoras, el color, vaporizado, lavado, ensanchado y presentación final de la tela.306 En CIDOSA de 1892 a 1920, la fábrica de Río blanco estuvo destinada a la elaboración de hilados tejidos y estampados de algodón. Sus principales departamentos fueron los de hilados, tejidos, blanqueo, tintorería, estampe y acabados. El departamento de hilados se formó por 14 batientes dobles y las correspondientes máquinas sacudidoras; 117 cardas, 11 estiradoras y 80 pabiladores o veloces y 116 troxiles. Este departamento surtía de hilazas a 1,685 telares modernos cuyos productos pasaban para su acabado al departamento de blanqueo, tintorería y a 10 máquinas de estampe.307 Río Blanco también contó con almacenes muy amplios para las telas elaboradas, para la materia prima, materiales, refacciones, productos químicos. También tenía 303
Idem Coriat, Op. cit, 1982, pp. 42. 305 Chavez, Orozco, Op.cit, 1933, pp.43-51 306 Idem 307 AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1 y Caja 603 Expediente 2, 1921. 304
179
talleres de mecánica, fundición, carpintería, departamentos de tintoreras, calderas y maquinaria eléctrica. La dirección, la administración, y el personal superior tenían habitaciones bien acondicionadas en el mismo perímetro de la fábrica. Fuera de éstos se encontraban las casas del personal secundario: empleados y obreros con sus familias, el mercado, la iglesia. Estas casas formaban un pueblo de importancia que cubría una gran extensión de terreno (47,555 mts 2). Tenía calles amplias, jardines, escuelas y demás servicio públicos (alumbrado público o privado y agua). Poseía extensos terrenos en los poblados de alrededor y contaba con obras hidráulicas que desarrollaron una fuerza de 1,580 HP.308 La fábrica de San Lorenzo estuvo igualmente destinada a la elaboración de hilados y tejidos de algodón pero no contó con tintorería ni estampado. Sus 1536 telares y demás maquinaria de hilados se encontraban situados en amplios salones, a lado de almacenes de materias primas y productos, oficinas y casa para la dirección, empleados y obreros. Las obras hidráulicas con toma de agua propia del río Blanco le proporcionaron fuerza directa de 1,040 caballos de fuerza.
309
La fábrica de Cocolapan fue destinada como las demás fábricas de la compañía a la elaboración de hilados y tejidos de algodón. Tuvo 1079 telares fabricados en Europa y contó con maquinaria para elaborar tejidos de fantasía. Toda su maquinaria fue movida por fuerza eléctrica, generada por la antigua instalación hidráulica. Debido a que se ubicaba muy cerca del centro de la ciudad de Orizaba, su edificio y terrenos aledaños, tenían un valor comparativamente mayor que los de las demás fábricas. 310 La fábrica de Cerritos utilizó las aguas del río Orizaba y el Pala, de donde obtenía una fuerza de 316 caballos de fuerza. Disponía de 306 telares entre antiguos y modernos. No contaba con estampado ni tintorería. El edificio de la fábrica era una instalación antigua, así como los departamentos de administración y la casa de los obreros y empleados.311 Los departamentos de hilados, tejidos y estampados de las fábricas de CIDOSA se muestran en la Imagen 5.
308
AHNM, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 9378, volumen 113, 11/9/1920. Ídem. 310 Ídem. 311 Ídem. 309
180
La imagen 5 se forma por las máquinas de batientes, hilados, telares y urdidores del departamento de hilados y tejidos y por las afelpadoras y estampadoras del departamento de estampados. Las fotografías muestran que los salones de las fábricas eran de grandes dimensiones, pues debían dar cabida a cientos o miles de estas máquinas, además del material y personal que necesitaban para operarlas. Tan sólo en Río Blanco existían “en su salón de hilatura 35,000 husos, además de columnas, flechas, poleas, bandas, horquillas y otras máquinas que resultaban de gran impacto visual, acrecentado por el intenso y persistente estruendo que producían los telares”.312 En el caso de las demás compañías su maquinaria y organización de sus plantas fueron similares a los utilizados por las fábricas de CIDOSA. Por ejemplo en Santa Rosa, propiedad de CIVSA, se tenían los departamentos de: recepción de materiales,
distribución
de
productos
terminados,
gerencia,
un
taller
de
mantenimiento y los de hilados, tejidos, estampe, acabados, blanqueado y tintorería.313 El departamento de hilados contaba con 13 batientes, 103 cardas, 10 estiradores, 74 veloces y 103 tróxiles. El departamento de tejidos contaba con 1435 telares y 4 máquinas de estampe.314 Tanto CIDOSA como CIVSA tenían en sus fábricas una integración vertical de hilados, tejidos y estampados. Sin embrago esta integración solo fue parcial, ya que no producían su principal materia prima, que era el algodón. Las máquinas que poseían Rio Blanco y Santa Rosa en sus departamentos de hilados y tejidos entre 1912-1913, se enumeran en el Cuadro 8.
312
Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués, Querétaro, 1990, pp. 72. 313 Goméz- Galvarriato, Aurora, Op.cit.,1999ª, pp.168. 314 AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1 y Caja 603 Expediente 2.
181
Cuadro 8. Maquinaría de CIVSA y CIDOSA, 1912-1913. Departamentos
1912 CIVSA Santa Rosa
CIDOSA Río Blanco
Hilados Abridoras 1 nd Batiente 13 14 Cardas 103 117 Estiradores 10 11 Veloces 74 80 trociles 103 116 Husos 40,592 42,528 Tejidos Cañoneros 8 nd Urididores 18 nd Engomadoras 7 nd Telares 1,435 1,654 Estampe 4 10 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, exp 1 Caja 603, Expediente 2 y AHA, Caja 4523 Expediente 59972.
Sólo se incluyó a Río Blanco y Santa Rosa en el cuadro anterior porque eran casi iguales en capacidad de producción –más de 40,000 husos y 1,000 telares-. Las demás fábricas de las otras compañías se presentan en el anexo B. En él se incluye una lista detallada de las máquinas y departamentos de las fábricas de Hércules y Río Grande de la Cía. Industrial Manufacturera SA y de La Experiencia, Atemajac y Río Blanco de la Cía. Industrial de Guadalajara SA (CIGSA). Estas listas especifican la capacidad, marca y potencia de cada máquina. Las listas, junto con el Cuadro 8, nos revelan que las fábricas textiles en México de 1890 a 1930 aplicaban una organización funcional que consistía en “departamentos especializados integrados hacia atrás y hacia adelante; para asegurar un flujo continuo de materias primas y productos. Sin embargo, este tipo de organización les generó altos costos de coordinación y un gran número de activos especializados”315, como ciertas máquinas o patentes. Las patentes e inventos que se desarrollaron en las fábricas, o por los socios accionistas de CIDOSA, se enumeran en el siguiente apartado.
315
Miles, Raymond y Snow C. Charles. Causes of failure in network organizations” en California management review. Summer, 1992, p.61.
182
Imagen 5. Departamento de hilados y departamento de tejido de la fábrica de Cerritos
Fuente: AGEV, Fondo Orizaba, fotos 77,78,81
183
Imagen 5. Departamento de hilados de la fábrica de Cocolapan.
Hilados
Urdidores
Fuente: AGEV, Fondo Orizaba foto 69 y 70. 184
Imagen 5. Departamento de estampado de la fábrica de Río Blanco.
Afelpadoras
Estampadoras
Fuente: Museo del Valle de Barcelonnette, Francia mostradas en García Díaz, Bernardo (2007), pp. 61, 69. 185
Patentes De 1890 a 1920 las compañías textiles utilizaron maquinaría y procesos de trabajo importados de Estados Unidos o de Inglaterra. Debido a las facilidades para comprarlas (exención de aranceles, precios bajos, etc.) y que ninguna compañía invirtió en construir maquinaría textil o desarrollar tecnología. 316 Sólo realizaron ciertas mejoras a los procesos de trabajo y diseñaron algunos productos. Por ejemplo, en el caso de CIVSA, ésta perfeccionó los picaros para telares y un molde para el estampado de pecheras, cuellos y puños de camisa. Pero optó por comprar telares tradicionales ingleses, sobre los automáticos norteamericanos, debido a su menor precio de compra y menor costo de mantenimiento ante la falta de técnicos no capacitados en México, así como la falta de piezas.317 CIDOSA, a su vez, patentó una mejora a la teñidura de algodón y utilizó maquinaria de origen inglés, norteamericano y de Alsacia. El Palacio de Hierro SA desarrolló un procedimiento para rizar fibras y un sistema de falda ajustable invisible, etc.. Las mejoras patentadas por éstas y otras compañías y tiendas de textiles se muestran en el Cuadro 9 e Imagen 6. En los datos que muestra el Cuadro 9 se indica el nombre de la compañía y las patentes obtenidas por sus inventos. Así lo denomina la Secretaría de Fomento en 1890. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, en realidad fueron mejoras a procesos de trabajo y no inventos.318.
316
Keremtsis, Op.cit, 1973, pp.110-111. Goméz- Galvarriato, Aurora, Op.cit.,1999ª, pp.148-150. 318 Un invento es el descubrimiento original básico que hace posible un cambio en los métodos productivos. La innovación es la aplicación de este nuevo invento en la actividad económica práctica. De acuerdo a Schumpeter, son las innovaciones las que producen las olas o picos relevantes en la historia, que se traducen en desarrollo. Por otra parte, no todas las invenciones conducen a innovaciones. No todas las innovaciones son productos de las invenciones. Por lo tanto, la invención por sí sola no produce ningún efecto, ya que debe conjugarse con las innovaciones y con la actitud y acciones de los hombres de negocios (es decir, el dinamismo tecnológico de los empresarios) para generar las olas de desarrollo. Dean, Phyllis. La primera revolución industrial. TR. J. Solé Tura, Península, Barcelona, España, 1968, p.109. 317
186
Cuadro 9. Patentes registradas en México por compañías y tiendas de textiles, de 1898-1920. Compañía Compañía Industrial de Orizaba S.A.
Número
1709 1800 1801 Compañía Industrial
15322
Veracruzana S.A. 18994 Cía. San Antonio Abad S.A.
El Palacio de Hierro S.A.
J.B. Ebrard y cía.
Gas, L. y cía.
4888 5258 5259 5260 12874
4439/ 4440 4448 19229
Patentes obtenidas Invento Inventor Mejora a teñidura algodón y Diego Mattel otras fibras textiles Dibujo industrial de percales y estampados Dibujo industrial de percales y estampados Dibujo industrial de percales y estampados Molde para estampado de Sr. A. Pellizza pecheras, cuellos y puños para camisas Mejoras en tacos picker o Bénito Suárez picaros para telares Arguelles Dibujo Industrial para pañuelo
Fecha 08/02/1898 1890-1903 1890-1903 1890-1903 16/08/1912
16/03/1920 1913
Dibujo Industrial para pañuelo Dibujo Industrial para pañuelo Dibujo Industrial para pañuelo Sistema de falda ajustable, invisible Procedimiento para rizar fibras vegetales por medio de lavado Corte de blusa en dos partes
1913 1913 1913 11/04/1912
Cuello postizo Camiseta- calzon
03/03/1913 1912
20/10/1913 24/10/1912
Fuente: Instituto Mexicano de Patentes Industriales (IMPI). Gacetas de invenciones y marcas. Oficina de Patentes y Marcas. Sría. de Fomento, 1890-1931 y AGN, Marcas y patentes Caja 171-173
Las fotografías de la Imagen 6 muestran: 1) El sistema de molde y estampado para pecheras, cuellos y puños de camisa de CIVSA, que consistía en disponer las distintas piezas en alguna de las formas marcadas. Las líneas llenas indicaban dónde debían hacerse los cortes y las punteadas, los dobleces. El espacio comprendido dentro de los perímetros es el que se debía estampar319. 2) El sistema de falda ajustable de El Palacio de Hierro SA. Esta pieza se sujetaba con cinta, debajo de la cintura y no era visible. El frente tenía broches ajustables para hacer la holgura necesaria, sin que se deformara la
319
AGN, Marcas y patentes, Clase 43.1 Caja 171, Expediente 21, 16/8/1912.
187
pieza. La parte de atrás se formaba por varios pliegues que quedaban en la cintura320. 3) Modelo para cuello postizo de J.B. Ebrard y Cía., que consistía en una punta larga que servía para mantener el cuello perfectamente cerrado. Se colocaba con botones y tuvo una duración como invento de 5 años321. 4) Dibujo para corte de blusa en dos partes de J.B.Ebrard y Cía. Esta pieza se cortaba en la pieza A (que era el cuerpo de la blusa, y la pieza b, que era una tira que servía para formar la manga de la blusa. Tenía un corte de media luna y en el centro llevaba un dibujo en forma de “Y”. Su duración como invento fue de 5 años.322
Como es fácil deducir ninguna de estas mejoras sirvió para detonar el desarrollo tecnológico del sector, pero sí para aumentar las ventas de sus mercancías. Las estrategias de comercialización que utilizaron los socios de CIDOSA se analizan en el siguiente apartado.
320
AGN, Marcas y patentes, Clase 43.1 Caja 171, Expediente 92, 11/4/1912 AGN, Marcas y patentes, Clase 43.6 Caja 173, Expediente 80, 3/3/1913 322 AGN, Marcas y patentes, Clase 43.3 Caja 171, Expediente 93, 24/10/1912 321
188
Imagen 6. Inventos patentados por tiendas y compañías textiles en México, 1898-1920
CIVSA, Sistema de estampado
J.B. Ebrard, Cuello postizo
El Palacio de Hierro, Falda ajustable
J.B. Ebrard, Corte de blusa
Fuente: AGN, Marcas y patentes, clase 43.1 y 43.3. Caja 171 y 173, expedientes 21,92,93 y 80.
189
En la comercialización Marcas. Durante el siglo XIX la mayoría de las fábricas textiles en México concentraban su producción en el hilado y tejido de manta. Sin embargo, para 1890-1900 algunas fábricas se especializaron en ciertos productos. Otras manufacturaban toda una variedad de textiles de calidad. Fue el caso de CIDOSA, que elaboraba calicós, sábanas, telas de colores para camisas, cretonas, franelas, crepé, tela de toallas, muselinas, telas elegantes, casimires, driles, holandas de lino y encajes en toda variedad de colores y estilos.323 Con estos productos CIDOSA fue premiada en la Exposición Universal de Chicago, de 1893, y sus productos llamaron la atención en la exposición de París, de 1900.324. Además de la calidad y variedad, CIDOSA distinguía sus mercancías registrando las marcas y los diseños con los cuales se comercializaban. Anteriormente las tiendas de textiles, como “Las Fábricas Universales” de A. Reynaud y Cía.; “El Puerto de Liverpool”, administrada por J. B. Ebrard y Cía., o “El Palacio de Hiero”, propiedad de J. Tron y Cía. –entre otras-, ya habían registrado ante la Secretaría de Fomento sus marcas para telas y camisas (M.R. 155 y 265). Sin embargo, fue CIDOSA la primera compañía textil en contar con una marca registrada para sus productos. Esta marca fue la de “La Yucateca” (MR 377), la cual utilizó para comercializar mantas, en 1892. CIDOSA también inscribió marcas para hilados, tejidos, telas y hasta para su fábrica de Río Blanco (MR 22701,22702). Los nombres que más elegía para sus marcas eran los nombres de las telas en francés (Tulle de France para Calicot, Belle Buse, Toile D’Orizaba, Tissage Mecanique Teinture, Toile de Mulhouse, Toile du Nord, Toile de France, Toile de Soie, y Toile de Irlande) y los nombres de sus fábricas San Lorenzo y Río Blanco. Entre los diseños de telas “resaltaron las telas de
323 324
Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 120-121. Southworth, op.cit, 2005, pp.123.
190
Vichy, llamadas en México mascotas, nombre registrado en 1902”. 325 Las marcas y diseños de las telas se registraban para evitar falsificaciones. Las marcas registradas por CIDOSA y por otras compañías y tiendas textiles en México, de 1890 a 1931, se enlistan en el Cuadro 10. En la lista de marcas del Cuadro 10 sobresalen aquéllas que fueron diseñadas y nombradas como ciertos animales (oso blanco, mariposa, león, etc.). De hecho, las figuras de los animales eran las que más utilizaban los empresarios textiles para diseñar etiquetas que colocaban sobre las telas, membretes, circulares, listas de precios, envases, envolturas y cajas de empaque. Estas etiquetas eran grabadas,
pintadas,
impresas,
litografiadas
o
estampadas
por
cualquier
procedimiento manual o mecánico en cualquier tamaño, color o combinación de colores. Asimismo, la compañía se reservaba el derecho exclusivo de reproducirlas y de utilizarlas con cualquier otra leyenda, dibujo o detalles.326 En el caso de CIDOSA, usó la representación del oso, mariposa, pájaro, pero sobre todo la de “el león en sus diversas posiciones, diseños y colores”.
327
La Cía.
Industrial de Atlixco SA utilizó el venado, Cía. Industrial de San Antonio Abad SA el toro; Veyan, Jean y Cía, Suc. S. en C. el pavo real, y la Hormiga SA utilizaba el caballo. Sólo la Cía. Industrial Manufacturera SA manejó la figura de “Moctezuma”. Independientemente de la figura en la etiqueta, las marcas les permitieron a las compañías textiles diferenciar sus productos y atraer más clientes. Algunas de las marcas ilustradas con figuras de animales registradas en la Secretaría de Fomento de 1903 a 1924 se muestran en la Imagen 7. De estas litografías resalta la MR 8105 de CIDOSA, que muestra un león a color, y que se utiliza como símbolo de esta compañía hasta la fecha.
325
Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués, Querétaro, 1990, pp.91. 326 IMPI, Gaceta de invenciones y marcas, 1922, pp. 291-292. 327 IMPI, Gaceta de invenciones y marcas, 1908, pp. 238-239.
191
Cuadro 10. Marcas registradas por las compañías y tiendas de textiles en México, 1890-1931.
Compañía Compañía Industrial de Orizaba S.A.
Número 377 540 541 542 543 544 545 546 547 548 549 550 551 552 553 1226 1227 1228 1229 1275 1276 1277 1278 3167 3269 3284 3416 4121 4266 4267 4517 4518 4519 4520 4521 4522 4523 4524 4525 6999 7000 7814 8105 13135 19433 19913 20598 20671 20889 21755 22629 22630 22631 22632 22633 22634 22635 22701 22702 22706 22718 22719 22720 22723 22893 22894 22943 23015 25177 25308 25309 25332 31122
Datos de las Marcas Producto que ampara La yucateca Mantas Tulle de France para calicot Calicot San Lorenzo Telas Belle buse Telas San Lorenzo Mantas Madagnilam Telas Sin denominación Telas Mexicana Telas Madaplant fort Telas Extre.fort Telas Cretone englais Telas Grano de oro Telas Cretona Inglesa Telas San Lorenzo Telas Tela mexicana Telas Sin denominación Percales Sin denominación Percales y estampados Sin denominación Percales y estampados Sin denominación Percales y estampados Sin denominación Hilados y tejidos Brandon extra drillings Hilados y tejidos León Hilados y tejidos San Lorenzo 26,82 Telas Río Blanco Telas Blancas Leon Telas Sin denominación Telas Sin denominación Telas Sin denominación Hilados, tejidos y estampados Sin denominación Telas Sin denominación Percales estampados Dos cisnes Tejidos de algodón Sin denominación Telas Sin denominación Telas Sin denominación Hilados y tejidos Faro Telas Rio Blanco Telas Tissage Mecanique Teinture Telas Rio Blanco S.S. Telas Bandon Extra drillings N.D. Telas Oso Blanco Hilados y tejidos La mariposa Hilados y tejidos Alsaciana Tejidos de algodón Sin denominación Tejidos de algodón Sin denominación Tejidos de algodón Sin denominación Telas de algodón Sin denominación Telas de algodón CIDOSA Telas de algodón Sin denominación Telas de algodón Río Blanco Telas de algodón Río Blanco Telas de algodón Tela de Rosa Calicot Silesia Inglesa Calicot El ideal Calicot Tela del hogar 15 Calicot Grano de oro Calicot Toile D'Orizaba Calicot Nasou 500 Calicot Fábrica Río Blanco Fábrica Fábrica Río Blanco Fábrica Río Blanco Mantas Toile de Mulhouse Calicot Tela Costeña Calicot Tela Russel Calicot Tela del sur Calicot Toile du Nord Calicot Tela suprema Calicot Cretona extra Calicot Extra fort Calicot Sin denominación Tejidos de algodón Toile de France Telas Blancas Toile de Soie Telas Blancas Toile de Irlande Telas Blancas El sol de México Telas Nombre
Fecha 21/11/1892 1890-1903 1890-1903 1890-1903 16/12/1893 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 1890-1903 9/11/1897 10/11/1897 10/11/1897 10/11/1897 29/12/1897 29/12/1897 29/12/1897 29/12/1897 05/02/1903 21/04/1903 22/05/1903 05/08/1903 22/01/1904 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 01/10/1903 07/02/1907 07/02/1907 27/12/1907 03/04/1908 10/03/1913 17/05/1921 06/09/1921 13/02/1921 24/03/1922 31/05/1922 08/02/1923 14/09/1923 14/09/1923 14/09/1923 14/09/1923 14/09/1923 14/09/1923 14/09/1923 02/10/1923 02/10/1923 27/09/1923 01/10/1923 01/10/1923 01/10/1923 01/10/1923 02/10/1923 02/10/1923 14/09/1923 19/12/1923 23/10/1925 07/12/1925 07/12/1925 07/12/1925 02/02/1931
192
Cuadro 10. Marcas registradas por las compañías y tiendas de textiles en México, 1890-1931. Datos de las Marcas Número Nombre Producto que ampara Fecha 12319 Sin denominación Tejidos de algodón 22/05/1912 12320 Sin denominación Fábrica Metepec 22/05/1912 20870 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20871 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20872 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20873 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20874 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 29774 Sin denominación Telas 10/07/1929 29973 Sin denominación Telas 10/07/1929 Compañía Industrial de Guadalajara S.A. 11852 Sin denominación Telas 18/12/1911 11853 Sin denominación Telas 18/12/1911 11854 Sin denominación Telas 18/12/1911 11855 Sin denominación Telas 18/12/1911 11856 Sin denominación Telas 18/12/1911 11857 Sin denominación Telas 18/12/1911 11858 Sin denominación Telas 18/12/1911 25511 Fábrica Río Blanco Fábrica 17/02/1926 25512 Fábrica Río Blanco Fábrica 17/02/1926 28774 La competidora Telas 11/12/1928 28775 Perla de oro Telas 11/12/1928 28776 Superior Telas 11/12/1928 28777 Silesia Francesa Telas 11/12/1928 Compañía Industrial Manufacturera S.A. 2381 Telas 1890-1903 9016 Sin denominación Telas 01/10/1903 9017 Sin denominación Telas 01/10/1903 9018 Sin denominación Telas 01/10/1903 9019 Sin denominación Telas 01/10/1903 9020 Sin denominación Telas 01/10/1903 9021 Sin denominación Telas 01/10/1903 9022 Sin denominación Telas 01/10/1903 9023 Sin denominación Telas 01/10/1903 9024 Sin denominación Telas 01/10/1903 9025 Sin denominación Telas 01/10/1903 18170 Sin denominación Fábrica 28/05/1920 22373 Moctezuma Telas 19/07/1923 27999 Moctezuma Telas 17/05/1928 Compañía Industrial San Antonio Abad S.A. 17774 Sin denominación Fábrica 12/02/1920 27574 Tela del norte Telas 24/12/1927 27575 Toile de France Telas 24/12/1927 27576 Toile Russe Telas 24/12/1927 27577 Extra Fort Telas 24/12/1927 28191 Olan china Telas 03/07/1928 28192 Manta Blanca 2 Telas 03/07/1928 28193 Manta Blanca 1 Telas 03/07/1928 28490 Manta lavado espcializado Telas 08/10/1928 28491 Tela de novia 3 Telas 08/10/1928 28492 Manta Blanca especial 6000 Telas 08/10/1928 Compañía Industrial Veracruzana S.A. 2121 Sin denominación Telas 21/09/1900 2123 Sin denominación Telas 27/01/1900 2124 Sin denominación Telas 27/01/1900 Veyan, Jean y Cía. Sucs. S.en C. 23354 Sin denominación Telas 04/04/1924 23355 Sin denominación Telas 04/04/1924 23356 Sin denominación Telas 04/04/1924 La hormiga S.A. 27300 Sin denominación Camisas 29/09/1927 27301 Sin rival Telas 29/09/1927 27302 Tela costeña Telas 29/09/1927 27303 Invencible 50 Telas 29/09/1927 27304 Invencible 45 Telas 29/09/1927 27305 invencible 2 Telas 29/09/1927 27480 Invencible 1 Telas 26/11/1927 27481 Perla del pacífico 1 Telas 26/11/1927 27482 Extra fort 2 Telas 26/11/1927 27483 Grano de oro Telas 26/11/1927 A. Reynaud y cía 155 La madrileña Telas 1890-1903 1701 Tejidos de algodón 1890-1903 1706 Corbatas 19/04/1899 J. Tron y Cía 265 Marca para camisas camisas 1890-1903 Signoret, Honnorat y cía 2321 Telas 08/04/1901 2455 Camisería 1890-1903 2455 Telas 03/08/1901 18908 Al Puerto de Veracruz Tienda 07/12/1920 M. Lambert y cía 23311 El correo Fránces Tienda 01/04/1924 Fuente : Instituto Mexicano de Patentes Industriales (IMPI). Gacetas de invenciones y marcas. Oficina de Patentes y Marcas Secretaría de Fomento, 1890-1931. Compañía Compañía Industrial de Atlixco S.A.
193
Imagen 7. Etiquetas de las compañías textiles en México, 1903-1924.
“El Oso Blanco” M.R. 6999
“La Mariposa” M.R.7000
CIDOSA “ M.R. 20598
“El león” M.R. 3269
M. R. 8105 (sin denominación)
Fuente: IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1903, 1907, pp.76-77, y 1922, pp.291-292, y AGN, Fototeca, fondo Texidor, Tx.4-001
194
Imagen 7. Etiquetas de las compañías textiles en México, 1903-1924. Cía. Industrial de Atlixco M. R. 13444 (sin denominación)
Cía. Industrial San Antonio Abad “El toro” M. R. 17774
La Hormiga S.A. M.R. 27304 (sin denominación)
Veyan, Jean y cía. Sucs. S. en C. M.R. 23554 (sin denominación)
Fuente: IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1912, pp.382-383; 1927 pp. 715; 1920, pp.182-183 y 1924, pp. 223. 195
Imagen 7. Etiquetas de las compañías textiles en México, 1903-1924. Cía. Industrial Manufacturera S.A. “Moctezuma” M.R. 22373
CIDOSA M.R. 22702
Fuente. IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1923 pp. 918-919 y 1923 pp. 13121313.
Redes de distribución Las compañías textiles distribuían sus productos a través de las propias tiendas de novedades que las fundaron. En el caso de CIDOSA, ésta comercializaba telas y ropa al mayoreo y menudeo a través del seis tiendas principalmente: “El Palacio de Hierro”, “La Ciudad de Londres”, “El Puerto de Liverpool”, “El Puerto de Veracruz”, “El Correo Francés” y “El Gran Oriental” ubicadas en la Ciudad de México.328 En el caso de CIVSA, en cuatro, “Las Fábricas Universales”, “El centro Mercantil”, “La Reforma del comercio” y “la Ciudad de México” del D.F.329. Para La Hormiga SA, en dos, “El centro mercantil” y “La Valenciana” también en el D.F. La compañía industrial de Guadalajara en “La ciudad de Londres” y “Las fábricas de Francia” ubicadas en Guadalajara”. La cía. San Antonio abad, la Cía. 328
Everaer, Luis. Op.cit, 1990, pp.78. De acuerdo a Goméz Galvarriato, CIVSA no contaba con un departamento de ventas, publicidad o distribución, ya que la mayoría de sus ventas (el 93% en 1905 y el 91% en 1925) eran para las compañías miembros del consejo, como A. Reynaud y Cía. propietarios de “Las Fábricas Universales” y S. Robert y Cía., dueños de “El Centro Mercantil” y “la Valenciana”. Gómez Galvarriato, Op.cit., Diciembre 1999ª, pp. 170. 329
196
Industrial de Atlixco y la compañía Industrial Manufacturera en la tienda de “la Reforma de Comercio” de la ciudad de México. Aunque esta última compañía también distribuía sus productos en los comercios de “las Fábricas Universales” y “la Ciudad de Londres, Guadalajara”. Finalmente la compañía Industrial de San Idelfonso comercializaba sus telas en la tienda “El puerto de Liverpool” y en la “Francia Marítima”.330 Estas tiendas, a su vez, tenían como distribuidores a sus propias sucursales o agentes de ventas que se encontrarán repartidos a lo largo del territorio mexicano, practicando la arraigada costumbre de las ventas ambulantes. La venta personal y por sucursales les permitió acercarse a pueblos aislados y obtener ganancias de mercados locales y regionales. Un ejemplo de esta distribución regional, las sucursales que mantenían en Veracruz, San Luis Potosí y en Jalisco la tienda de comercio “La Cuidad de Londres”, que se dedicaba a la venta al menudeo y mayoreo de artículos de bonetería y rebocería, abarcando el mercado de la Ciudad de México, Veracruz, Michoacán, Sinaloa, Sonora, Durango, Zacatecas, Guanajuato, Tepic y Baja California”.331 También instalaron sucursales, o hacían convenios con tiendas locales de otros comerciantes para aumentar la distribución de sus productos (integración horizontal) y obtener altos rendimientos por ventajas monopólicas. Por ejemplo, Proal menciona que los comerciantes del Valle lograron rendimientos económicos por encima de sus competidores ingleses y alemanes porque contaban con sucursales y vendedores ambulantes a lo largo de la República Mexicana, que les permitía conocer los gustos y demanda de cada uno de los pueblos del país, mientras que sus competidores sólo se concentraban en ciertas ciudades Los ingresos de ventas que las principales compañías textiles en México, lograron con estas cadenas de distribución regional se enumeran en el Cuadro 10.A. En él se observa que CIDOSA fue la compañía que alcanzó mayores ingresos en 1912 y 1913. En promedio 133 por ciento más altos que los de CIVSA, su principal competidor. Esto gracias a que poseía cuatro fábricas textiles cuya producción superaba las 800,000 piezas, mientras que CIVSA sólo tenía una fábrica y su 330 331
Goméz-Galvarriato, s/f. Op.cit., Cuadro 2. De los cajones de Ropa a los Grandes Almacenes, pp.25 Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Los Barcelonnettes en México. Clío. México, 1998.
197
producción era de alrededor de 300,000 piezas pero, además, porque contaba con más tiendas para distribuir sus productos. Por otra parte, es importante mencionar que otras formas de aumentar las ganancias en las tiendas fue el utilizarlas como bancos y el formar monopolios. Por ejemplo, las tiendas del “El Palacio de Hierro”, “La Ciudad de Londres´”, “El Puerto de Liverpool”, “Al puerto de Veracruz”, “La Reforma del Comercio”, “Al puerto de Veracruz”, “El correo francés”, “El Gran Oriental”, “El Centro Mercantil”, y
“La
Valenciana”;funcionaron como bancos al recibir dinero de sus socios y el ahorro de sus empleados, por el cual pagaba un rédito anual. Asimismo se organizaron con otros comerciantes franceses para realizar compras en conjunto y así fijar precios y existencias en sus diferentes comercios.332
Cuadro 10.A. Ingresos por ventas de las principales compañías textiles en México, 1912-1913 (pesos corrientes). Compañía 1912 1913 $ 3,558,194.06 $ 4,209,106.96 CIDOSA CIVSA $ 1,656,632.79 $ 1,681,121.30 San Antonio Abad $ 999,813.88 $ 1,366,980.31 Veyan, Jean y Cía. S.en C. $ 736,946.17 ND Cía.Industrial $ 771,536.65 $ 677,656.76 Manufacturera Cía. Industrial de $ 409,677.89 $ 448,912.65 Guadalajara Cía.Industrial de Atlixco $ 1,300,835.96 $ 1,309,573.45 La Hormiga S.A. $ 611,323.64 $ 549,881.38 TOTAL $ 10,044,961.04 $ 10,243,232.81 Fuente: AGN, Departamento del Trabajo, Caja 5
Otros clientes importantes de las tiendas comerciales socios de las compañías textiles eran las clases en el poder y las clases altas de la sociedad mexicana que buscaban telas, prendas y, en general, artículos considerados de "lujo", que provenían de Europa.333 Por ejemplo, en el caso de la tienda “La Ciudad de Londres´”, uno de sus clientes más asiduos fue el general Joaquín Amaro, 332
Martínez Gutiérrez, Patricia. Op.Cit.,2005, pp. 40-105.
333
Ídem.
198
Subsecretario y Secretario de Guerra y Marina de 1920 a 1931. “El general Amaro empezó a ser cliente de La Cuidad de Londres desde julio de 1917. Desde entonces la Cía. le ofreció un crédito casi ilimitado. Debido a sus gustos delicados y exquisitos, la tienda siempre procuró poner avíos muy finos a sus prendas y confiarlas a los mejores operarios; como los trajes elaborados en julio de 1921, que tenían insignias bordadas en seda y botones y presillas en oro”.334 El general Amaro también le compraba a esta tienda espadas, cinturones, cortinas, muebles y el vestuario, zapatos, gorras y fundas para armas del personal militar a su cargo. Así lo evidencia un oficio del 16 de abril de 1922, en el que les solicita 200 uniformes que se repartirían entre coroneles de Caballería (5), tenientes de Caballería (5), mayores de Caballería (5), capitanes de primera (25), de segunda (25), tenientes (60) y subtenientes (70), 5 más para repartir según el criterio del general Amaro.335 En la imagen 8 se incluye la fotografía de una muestra de gabardina enviada al Gral., para la elaboración de uniformes militares; así como el formato que debía llenarse durante la toma de medidas de los oficiales. A partir de 1924, Joaquín Amaro es nombrado Secretario de Guerra y Marina y elige a las tiendas “El Palacio de Hierro” y “High Life”, en Monterrey Nuevo León, para sus confecciones personales, aunque “La Ciudad de Londres” seguía confeccionando los uniformes del personal militar.336 De hecho, el 5 de agosto de 1929 el director de la tienda, el señor Arnaud, envía una carta al general Amaro, preguntándole el motivo por el cual dejó de visitar la tienda, “He notado con sincera pena que de un tiempo a esta parte nos ha privado usted de sus estimables compras dando la preferencia casas similares en el ramo. Tratándose de un buen amigo mío como lo es usted, me mortifica doblemente el olvido en que está usted relegando esta su casa, donde como siempre ha sido un verdadero placer, y sobre todo para mí en lo particular, atender las órdenes con que ha tenido a bien honrarnos hasta hace poco. Deseo muy cordialmente que el motivo que nos priva del agrado de servirle, no se deba a alguna incorrección de parte de alguno de nuestros empleados, y de ser así le agradecería lo indicará. Vuelvo a reiterar a usted el vivo deseo que tenemos de volverlo 334
Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT), Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 205, Inventario 105 Legajo 10-21. 335 APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 205, Inventario 105 Legajo 3-5. 336 APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 204, Inventario 105 Legajo 3-5.
199
a ver pronto por esta su casa y recibir en breve sus gratas órdenes que siempre han sido objeto por parte nuestra de toda la atención y cuidado que se le debe a un antiguo y muy estimado amigo como lo es usted…… El general responde que el motivo de su ausencia son algunas deficiencias en el Departamento de Sastrería”.337 Imagen 8. Muestra de tela para uniformes y plantilla para toma de medidas.
Fuente: Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT), Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 205, Inventario 105 Legajo 3. Las compras que realizó el general Amaro en la tienda “La Ciudad de Londres”, “El Palacio de Hierro” y “High Life”, de 1920-1928, se enlistan en el Cuadro 11. Dentro de estas compras destacan por sus montos las de uniformes para el personal militar que el general Amaro realizó, en su calidad de Secretario de Guerra, a la tienda “La Ciudad de Londres”. Aunque CIDOSA no era el único proveedor de esta tienda, sí era uno de los más importantes, por lo que puede deducirse que parte de la tela con la que confeccionaron estos uniformes fue elaborada y distribuida por CIDOSA.
337
APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 306, Legajo 34.
200
Por lo tanto, el que a través de las redes de distribución de CIDOSA (Fábricas- tienda comercial mayorista y/o minorista- agente de ventas- consumidor) se surtiera de mercancías al Secretario de Guerra y a su personal militar, aumentaba substancialmente las ventas y permitía contar con aliados poderosos para controlar cualquier problema legal que pudiera presentarse. Por ejemplo, en 1924 A. León le solicitó al Gobierno de Plutarco Elías Calles que le ayudara a recuperar unos bultos de mantas y géneros de las tiendas del “El Correo Francés” y de “las Fábricas Universales” que le robaron en Tierra Blanca. A cambio le ofrece su ayuda para que triunfe en las próximas elecciones en Ocozucautla, Jalisco.338 En 1925, J. Ollivier y cía. le solicitó al Gral. Amaro intercediera por su velador en Lagos de Jalisco, el Sr. Serrano, para que pudiera portar un arma, debido a la creciente inseguridad en esa zona. También en 1927 le solicitan su ayuda para un salvoconducto para que su personal acuda a cuidar la cosecha de la hacienda de la tienda en Lagos de Morelos, debido a que se prohibió el paso por conflictos armados en la región. El Gral. Amaro intercede y se les concede ambos.339 El Gobierno también ayudó a los empresarios textiles, a controlar y resolver los conflictos laborales. Esto se estudiará en el siguiente apartado.
338 339
APC y FT, Fondo Plutarco Elías Calles, Expediente 110, Inventario 3168. APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Inventario 306, Legajo 33.
201
Cuadro.11. Compras del general Joaquín Amaro a diferentes tiendas en México, de 1920-1928. Fecha No. 29/05/1920 29/05/1920 31/05/1920 04/10/1920 25/10/1920 30/11/1920 09/04/1921 16 30/04/1921 3 16/03/1922 16/03/1922 17/03/1922 19/04/1922 30/05/1922 200 17/07/1922 28/07/1922 15/11/1922 12/01/1923 30/04/1924 32 31/05/1924 23/07/1924 20/08/1924 22/08/1924 30/08/1924 12/09/1924 6 18/09/1924 26/11/1924 4 28/11/1924 19/12/1924 27/01/1925 28/01/1925 08/05/1925 29/05/1925 17/07/1925 30/07/1925 2 31/07/1925 31/07/1925 20/08/1925 26/08/1925 26/09/1925 30/09/1925 21/10/1925 7 30/11/1925 1 17/12/1925 30/12/1925
LA CIUDAD DE LONDRES Descripción Cuentas pendientes de 1917 y 1918 Mercancía Uniformes Compostura de trajes Uniformes Compostura de trajes Uniformes Uniformes Cuenta de la división Cuenta partícular Uniformes Uniformes Uniformes Uniformes Uniformes Cuenta división Vestidos y sombreros Uniformes Abrigos, casimires Sombreros, chalecos Trajes casimir Compostura de trajes Factura 77141 Trajes casimir Muebles Trajes casimir Factura 78099 Muebles Factura 19479 Factura 19489 Factura 79682 Uniformes Uniformes Hechura de trajes Factura 8509 Factura 22113 Factura 80652 Hechura de trajes Factura 22825 Factura 22992 Uniformes Capote Factura 81884 Trajes casimir TOTAL Facrura 24555 Uniformes Uniformes Trajes casimir Uniformes Trajes casimir Trajes casimir Trajes casimir Abrigos, casimires Trajes, sombrero y calzado Trajes, sombrero y calzado Uniformes Uniformes Uniformes Uniformes Capas para torear Uniformes Uniformes Compostura de trajes Trajes casimir Uniformes Trajes casimir Uniformes pantalones
HIGH LIFE EL PALACIO DE HIERRO Valor Fecha No. Descripción Valor Fecha No. Descripción Valor $ 11,916.40 $ 1,245.00 $ 9,161.40 $ 4,185.70 $ 3,587.85 $ 552.75 $ 5,055.00 $ 675.00 $ 900.00 $ 13,874.53 $ 904.60 $ 3,482.40 $ 46,159.65 $ 2,713.50 $ 2,222.10 $ 15,316.00 $ 305.00 $ 1,662.10 $ 1,472.10 $ 288.50 $ 392.15 $ 527.95 $ 251.40 $ 1,005.50 $ 1,951.75 $ 829.60 $ 829.60 $ 730.05 $ 24.00 04/04/1925 Zapatos $ 30.40 18/04/1925 Batas, calcetines $ 577.40 $ 20.00 27/04/1925 botas $ 80.44 04/05/1925 Trajes $ 291.60 $ 55.33 29/04/1925 Trajes $ 762.18 15/06/1925 Trajes $ 2,086.69 $ 864.73 16/06/1925 $ 868.00 19/06/1925 Muebles $ 35.05 $ 311.71 26/06/1925 Juegos $ 80.44 $ 246.38 29/06/1925 Calzado $ 1,015.46 $ 246.38 $ 35.00 09/07/1925 Camisas $ 479.64 $ 799.90 $ 799.90 16/07/1925 Tela gabardina$ 75.64 $ 12.00 $ 22.00 $ 1,478.09 $ 259.43 $ 975.34 $ 231.27 $ 6,381.46 TOTAL $ 3,392.20 TOTAL $ 2,990.74 $ 34.50 $ 811.46 $ 734.02 $ 120.66 $ 125.72 $ 270.00 $ 2,171.88 $ 542.97 $ 668.69 $ 270.00 $ 718.96 $ 211.16 $ 231.21 $ 321.76 $ 280.00 $ 497.75 $ 110.61 $ 359.98 $ 89.50 $ 186.04 $ 226.27 $ 180.99 $ 472.59 $ 365.54
16/01/1926 30/03/1926 29/04/1926 2 26/07/1926 1 10/10/1926 10/10/1926 10/10/1926 8 10/10/1926 5 05/11/1926 4 07/12/1926 1 20/12/1926 06/01/1927 1 12/03/1927 2 13/04/1927 2 08/06/1927 2 09/07/1927 9 31/08/1927 1 31/08/1927 1 27/02/1928 17/03/1928 1 19/04/1928 26/04/1928 1 23/07/1928 2 18/08/1928 12 TOTAL 326 Fuente: Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca Serie Exp. Fondo Inventario 306 306 306 306 205 205 105 105
1 2 1 1 3 2 2 2
Proveedores Proveedores Proveedores Proveedores Proveedores Proveedores Proveedores Proveedores
286 287 286 286 105 104 62 62
Legajo 34 de 63 11 DE 11 33 de 63 25 de 63 3 de 5 3 de 6 11 de 21 10 de 21
202
Laborales Salarios y el papel del Estado En las fábricas textiles -a diferencia de sus negocios comerciales- los accionistas de CIDOSA: I) No actuaban como administradores, sólo como accionistas. II) No vivían en la ciudad en que estaba la fábrica. Radicaban en la Ciudad de México o en Francia. III) Contrataban personal que no era de origen barcelonnette. Las manufacturas requerían de personal técnico especializado y de grandes cantidades de trabajadores operativos. Por ello se optó por contratar extranjeros para los puestos técnicos y administrativos. Y mexicanos, para los puestos operativos, como se especifica en el Cuadro 12. En él es posible observar que CIDOSA siempre necesitó mayor cantidad de mano de obra que las demás compañías, por el tamaño de la fábrica de Río Blanco, la más grande de la época. Los primeros obreros de Río Blanco eran indígenas, campesinos, obreros, tejedores de otras zonas, artesanos, etc. La mayoría de ellos sin experiencia y disciplina en el trabajo organizado y la producción capitalista. Además, el trato que recibían era rígido, autoritario y en ocasiones hasta recibían maltrato físico por parte de los jefes. Las jornadas laborales eran de 6:00 AM a 8:00 PM, bajo condiciones de trabajo insalubres (excesivo ruido y polvo) y con un salario diario que iba de $0.5 a $2 pesos (ver Anexo C. Salarios). Existía un sistema de multas y castigos por la ruptura de mercancías, descomposturas de maquinaria, hablar con los compañeros, observar a las mujeres o cantar. Asimismo se les obligaba a comprar en las tiendas de raya de las fábricas, que eran propiedad de socios o parientes de los dueños, para recuperar el gasto en salarios.340
340
García Díaz, Bernardo. Un pueblo fabril del Porfiriato: Santa Rosa, Veracruz. Ed. FCE, México, 1981.
203
Cuadro 12 . Empleados y obreros que trabajaban en las compañías textiles de México, 1920-1927 Empleados administrativos Empresa CIDOSA Cía. Industrial de Orizaba S.A.
Cía. Industrial San Antonio Abad S.A.
Fábrica 1920
Extranjeros
Obreros
Hombres
Mujeres
Niños
180
142
38
180
0
Cocolapan San Lorenzo Cerritos Rio Blanco 1923
18 16 12 134 112
15 13 11 103 103
3 3 1 31 9
18 16 12 134 0
0 0 0 0 0
Cocolapan San Lorenzo Cerritos Rio Blanco 1927
5 8 5 94
5 7 4 87
Cocolapan San Lorenzo Cerritos Rio Blanco 1920 San Antonio Abad La Colmena y Barron 1923 San Antonio Abad La Colmena y Barron 1927
CIVSA Cía. Industrial Veracruzana S.A.
TOTAL Mexicanos
TOTAL Mexicanos
11 11 0
1 1 7
4,320
4,320
688 740 445 2,447 4,816
688 740 445 2,447 4,816
847 784 439 2,746 4,450
847 784 439 2,746
Santa Rosa 1920
Guadalajara S.A.
Rio Blanco
Cía.Industrial de Atlixco S.A.
Veyan Jean y Cía S. En C.
0
4,081
82
284
0
654 712 445 2,270 4,431
34 28 0 20 112
68 32 27 157 273
754 711 403 2,563
35 30 47
58 43 36 136
1,141
851
290
0
501
501
391
110
0
460
180
0
22
13
35
15
10
25
-
-
10
7
3
10
-
-
640
640
12
9
3
12
832
273
52
2
9
-
1,157
7
-
1,157
9
552
552
427
73
52
3
2
1
3
-
-
605
605
405
200
1,463 2,588
96 99
-
-
1,064 537 527
83
57
26
83
-
-
1,729 2,957 1,540 452 965
1,559 2,778 1540 383 855
4
1,346 387 855
4
99
170 270
0 0
95 65 110
1,662 26
22
4
24
2
-
702
176
526
184
4
4
0
4
0
-
98
98
51
47
25
Atemajac
10
7
3
10
0
-
245
245
40
205
80
La Experiencia
12
11
1
10
2
-
359
359
85
274
79
364
480
157
1,001
-
702
-
1,001
Rio Blanco
138
138
72
58
8
Atemajac
248
248
48
122
78
La experiencia Manufacturera S.A.
Niños
25
1923
Cía. Industrial
Mujeres
35
Santa Rosa El León La Covadonga 1927 Cía. Industrial de
Hombres
807 825 451 2,367 1,141
San Antonio Abad La Colmena y Barron 1920 Santa Rosa 1923
Extranjeros
1920
615 21
17
Rio Grande
8
8
Hércules 1923 Hércules Rio Grande 1927 Hércules Rio Grande 1920
13 25 10 15
-
-
300
71
715
211
717
393
70
12
747 1,482
322 629
141 330
2 10
698 784
240 389
139 191
1,399
0
126
850
100
100
675
210
170
8
1,110
1,110
9 21
4 4
13 25
1,200 2,445
1,200 2,433
-
8 13
2 2
10 15
1,071 1,374 2,336
1,069 1,364
-
2,310
1,136 1,200
Metepec 1923
1,154
Metepec 1920
1,525 3
10
-
-
1,050
1050
La Magdalena 8 4 4 Fuente : Archivo General de la Nación, Departamento del Trabajo: Expediente Expediente Caja Caja 11 4 62 274 39 1 106 277 207 33,44 5 279 33 12 208 288 16,39,41,42 1 209 299
8
-
-
1,055
1055
La Magdalena 1923
244 1,464
-
21
-
2,310
615
4
13
10
Caja 395 405 409 426 430
Expediente 3 1 3 4 1,5
-
Caja 435 637 1171
Expediente 2 2 1
204
Estas condiciones de trabajo originaron diversos conflictos con los obreros (huelgas, paros, etc.) y dieron la pauta para el nacimiento de agrupaciones que se dedicaban a defender los derechos de los trabajadores: “El Círculo Mutualista Recreativo de Morelos”, “Club Melchor Ocampo”, “Gran Círculo de Obreros Libres” y la “Casa del Obrero Mundial”. Estas dos últimas agrupaciones sentaron las bases para crear los sindicatos de las fábricas de Santa Rosa y Río Blanco.341 La Constitución de 1857 en sus artículos cuarto y quinto, otorgaron libertad de trabajo; el sexto y séptimo brindaron la oportunidad de manifestar ideas y el noveno, estableció que: “a nadie se le puede coartar el derecho de asociarse o de reunirse pacíficamente con cualquier objeto lícito”.342. Sin embargo, en el Código Penal de 1871, tipificó como delito “la reunión de los trabajadores que formen tumultos o motín o cualquier otro medio de violencia física o moral con el objeto de hacer que aumenten los salarios, disminuyan los jornales o impidan el libre ejercicio de la industria”.343 Esto ocasionó que los trabajadores de 1870 a 1910, sólo formaran asociaciones mutualistas y cajas de ahorro. Los primeros sindicatos en México surgieron en 1911 cuando Madero reconoció los artículos 4º, 5º, 6º, 7º y 9º de la Constitución de 1857, y se fortalecieron con la inclusión de la fracción XVI del artículo 123 en la Constitución de 1917. Los sindicatos impulsaron con mayor fuerza los conflictos laborales, porque ahora los trabajadores contaban con una organización legal que respaldaba sus demandas. Sin embargo desde antes de su existencia, la organización y movimiento obrero ya había manifestado una presencia importante en la escena nacional, como en la huelga en Río Blanco, de 1907, y en la huelga de Cananea. Ambos considerados los conflictos laborales de mayor relevancia histórica del país. El conflicto obrero-patronal de 1907 inició en Puebla cuando los industriales del Centro Industrial Mexicano (CIM) publicaron, en diciembre de 1906, un reglamento para las fábricas de Puebla-Tlaxcala que empeoraba las condiciones de trabajo y limitaba la libertad personal de los obreros. El 4 de diciembre de 1906 el Gran Círculo de Obreros Libres (GCOL) de Puebla declara huelga y los obreros preparan 341
Ídem. López Aparicio. Movimiento Obrero en México. Jus, México, 1958.,pp.85-97. 343 Ídem. 342
205
un contra-reglamento. Los empresarios se niegan a negociar y en ese mismo mes se anuncia el cierre de todas las fábricas textiles de la región Puebla-Tlaxcala, de Orizaba, Distrito Federal y Querétaro. Ante tal magnitud del conflicto, Porfirio Díaz decide intervenir como árbitro y el 4 de enero de 1907 emite un laudo que disminuía el poder del obrero al cerrarle la posibilidad de huelga y calificar por medio de libretas la actividad sindical de los obreros. Estas medidas provocaron el descontento de los obreros de las fábricas de CIDOSA y CIVSA; y el 7 de enero atacaron las tiendas de raya y los comercios “El Centro Comercial”, “El Puerto de Veracruz”, “El Modelo” de Víctor Garcín y la casa de Empeño de Lauro Machorro.344 En la madrugada de ese día llegó el Ejército bajo el mando del Subsecretario de Guerra, General Rosalindo Martínez, y fusilaron a Rafael Moreno presidente, Manuel Juárez, vicepresidente del GCOL de Santa Rosa, Rafael Troncoso compañero de la filial de Santa Rosa y otros cuatro obreros no identificados. Encarcelaron a Pascual González, Ismael Cornazari directivos de las sucursales de Orizaba; Manuel Nava presidente del GCOL de Santa Gertrudis, José Neira militante del Partido Liberal Mexicano y fundador del GCOL, Pedro Martínez, Paulino Martínez editor del periódico opositor el Colmillo Público, José Rumbia pastor metodista y Eduardo Cancino. Y obligaron a los obreros a regresar a su trabajo”.345 Con la caída de la dictadura (1911) los empresarios no contaban más con la estrategia del golpe y represión de Díaz por lo que varios –entre ellos los dueños de CIDOSA- decidieron cambiar sus estrategias laborales y empezaron a ceder a ciertas peticiones de los obreros, además de ponerse a las órdenes del nuevo gobierno cuando éste convocó el 20 de enero de 1912 a la Primera Junta de Industriales y Obreros Textiles para solucionar la huelga textil del país. 346 En esta convención se acordó disminuir la jornada de trabajo a 10 horas y aumentar los salarios en 10%. No obstante, los problemas con los obreros continuaron, sobre todo por los salarios y las condiciones laborales (como las tiendas de raya, las multas, etc.), por lo que el Gobierno Federal emplazó a una 344
García Díaz, Bernando, “La revuelta de Río Blanco”en García Díaz, Bernardo. La Huelga de Río Blanco (1907-2007). Gobierno del Esto de Veracruz-Llave, Universidad Veracruzana y Secretaria de la Educación de Veracruz, México, 2007, pp.201-217. 345 Ídem, pp. 218-222. 346 Ramírez Rancaño, Mario. Op.cit., 1987. p.39
206
segunda reunión en julio de 1912. En ésta los industriales presentaron su proyecto de reglamento de trabajo, el cual fue el único que se presentó (ninguno por parte de los obreros o el gobierno). En este reglamento se regulaba la duración de la jornada de trabajo en 10 horas, la hora de entrada al trabajo, la conducta de los obreros, los días de descanso, el trabajo de los menores, la abolición de las multas y el pago con vales, entre otras cosas. Sin embargo, no se especificaba el aumento al salario real, lo que buscaban los trabajadores. Sólo se decidió formar una comisión que determinaría una tarifa única. Esta medida desagradó a los industriales y a los obreros por igual. Los primeros porque alegaban que cada región mantenía diferentes circunstancias de impuestos, de vías de comunicación y de acceso a materias primas. Advirtieron que al pagar el mismo jornal que otras fábricas que gozaban de menores impuestos o mejores vías de comunicación, se les ponía en desventaja. Por parte de los obreros, éstos rechazaban la tarifa porque representaba la disminución de salarios para algunos y ningún aumento de salario para otros. A pesar de estas protestas, al momento de la votación la tarifa fue aceptada por todos los industriales y el gobierno optó por convencer a los trabajadores, explicando que sí bien en una minoría se disminuía el salario o permanecía igual, una gran mayoría (90%) aumentaría su salario.347 Para motivar a los empresarios al cumplimiento del reglamento del gobierno, Madero propone a la Cámara de Diputados un impuesto del 8% sobre la venta de hilados y tejidos, el cual se reintegrará en un 50% sí el empresario cumple con las tarifas del Reglamento autorizado. Con este impuesto, “el gobierno de Madero (1911-1913) resultó ser más generoso que el de Díaz al disminuir el impuesto especial del 5% sobre ventas de hilados y tejidos de algodón establecido en 1893. Además a Francisco I. Madero también le interesaba dar continuidad a la acumulación de capitales, sólo que ahora utilizando la vía institucional. Por ello fundó el Departamento del Trabajo. Los empresarios vieron con buenos ojos esta medida, porque ahora negociarían todos los conflictos obreros con este organismo,
347
Ramirez, Op.cit, 1987, pp.82-83.
207
que además les proporcionaría informes sobre empresas, climas, población y enlazaría a los desempleados con la oferta de trabajo”.348 Todos los gobiernos de 1912 a 1920, sin importar su ideología, fueron generosos con la burguesía textil. Pero el gobierno de Victoriano Huerta (1913-1914) fue el de mayor coincidencia con los industriales debido a la política de mano dura y represión hacia los obreros que compartía con la dictadura de Díaz. Sólo el gobierno de Carranza también trató de imponer ciertos decretos de los jefes militares -como Pablo González en Puebla, Francisco Murguía en México y Cándido Aguilar en Veracruz-, que buscaban mejorar las condiciones de vida de los obreros e ir en contra de los intereses de los empresarios. Estos decretos no surtieron necesariamente efecto por la confusión de la época que no permitió aplicarlos y por la intervención del gobierno de Carranza que declaró, el 8 de septiembre de 1916, la nulidad de las leyes o disposiciones dictados por los gobernadores en el ramo de fomento.349 Conjuntamente en 1917, con el artículo 123 en la Constitución, Carranza desapareció el Departamento de Trabajo, dejando la responsabilidad de la solución del conflicto obrero-patronal a las juntas de Conciliación y Arbitraje regionales y a los gobiernos de los estados. Más tarde, durante el gobierno de Plutarco Elías Calles (1924-1928) se llevó a cabo la Segunda convención textil en 1925-1927. En esta reunión se acordó que la industria de hilados, tejidos y estampados de algodón, se dividiera en dos grupos. El primero, formado por las fábricas de Sinaloa, Sonora, Veracruz, Hidalgo, Chihuahua, Nuevo León, Jalisco y Distrito Federal. El segundo, por manufacturas de Puebla, Querétaro, Oaxaca, Tlaxcala, Guanajuato, Estado de México, Coahuila, Chiapas, Guerrero, Colima, Michoacán, Durango y Nayarit. Los salarios que debían pagarse en las fábricas de ambos grupos fueron los que se describen en el Cuadro 13.
348 349
Ramirez, Op.cit, 1987, pp.87. Idem, pp. 185-187
208
Cuadro 13. Salarios aprobados por la Convención Textil de 1925-1927. Salarios Mínimos Monto Aumento (%)
Grupos Peón Primero $ Segundo $
1.00 1.00
Obrero a jornal encargado de máquina Primero $ 1.00 Segundo $ 1.00 Destajos en tejidos y preparación Primero Tarifa Segundo Tarifa Mudadores Primero $ 0.50 Segundo $ 0.50 Fuente: Pruneda, Fernando (1942), pp.40
100% 65%
120% 100%
100% 85% 150% 110%
Todos los demás salarios no contemplados debían aumentar 5 por ciento en salarios mayores a $7.00. En salarios menores a $7.00, en 10 por ciento (cláusula 3). Estos acuerdos se aprobaron en mayo de 1926. En agosto de 1927 se decretó un impuesto extraordinario de 5 por ciento sobre las ventas para las fábricas que adoptaran las tarifas de la convención y de un 13 por ciento para las que no las aplicaran. Esto fue para obligar a las fábricas a implementarlas como se había hecho en 1912. Pero los empresarios textiles se ampararon ante ese impuesto y ganaron el juicio. Los conflictos aumentaron y fue necesario que el presidente Calles nombrara una comisión técnica en octubre de 1928, para que estudiara a la industria y determinara sus recomendaciones. Los salarios fueron ratificados por la comisión en 1929, pero no fueron aceptados por el segundo grupo, que representado a través del Centro Industrial Mexicano (Cía. y Fábricas de Puebla, principalmente) pidieron al Presidente no se aplicaran. Por su lado, los industriales del primer grupo, a través de la Cámara Nacional de la Industria textil (que incluía a los empresarios de CIDOSA), enviaron otro memorándum a Calles para refutar al Centro Industrial Mexicano. Y se agudizó la división entre fabricantes textiles.350 El ajuste a los salarios de la Convención de 1925-27 no representaba ningún incremento para los empresarios del primer grupo. Ellos ya pagaban salarios por 350
Pruneda, Fernando. La industria textil del algodón en México. SHCP, México, 1942, pp. 40-42.
209
esos montos y hasta más altos (ver Anexo C, salarios por puesto). Pero para los empresarios del segundo grupo sí constituía un aumento. Por ello, “en 1931 lograron negociar con las autoridades y con sus trabajadores para firmar un convenio en el que se estableció la supresión de los efectos de la cláusula 3 para sus fábricas. Ese acuerdo no duró mucho: en 1934 los obreros lograron desaparecer los grupos y se establecieron los salarios del primer grupo en todo el país”.351 Además de los salarios, los empresarios debieron negociar con el gobierno otras prestaciones económicas y de seguridad social para los trabajadores.
Prestaciones y seguridad social. La seguridad social nació en Alemania con el Gobierno de Bismarck (18831889). Estaba orientada a brindar una compensación económica y en especie a los trabajadores por las enfermedades y accidentes de trabajo e incapacidad por vejez. El hecho de que la gran industria requiera de mano de obra numerosa, constante y resistente a su ritmo de trabajo, obliga a los empresarios a ofrecer ventajas especiales a los obreros por encima de otros oficios. Esas ventajas pueden ser pensión por jubilación o por enfermedades, caja de ahorros y servicio médico.352 En México las empresas manufactureras debieron proporcionar esas prestaciones debido a las demandas de los trabajadores y para cumplir con la legislación que se promulgó al respecto. En 1904 en el Estado de México se proclamó la Ley de obligaciones pecuniarias de los patrones en caso de accidente del trabajo o enfermedades, esta ley obligaba a los empresarios a pagar salarios y atención médica a los trabajadores incapacitados hasta por 15 días. En Nuevo León, Bernardo Reyes expidió en noviembre de 1906 la Ley sobre accidentes profesionales y enfermedades de los trabajadores. La cual especificó que los patrones debían proporcionar servicio médico y medicinas hasta por 6 meses. Además de cubrir la capacidad total temporal con medio salario por dos años, la
351 352
Ídem. Coriat, Op.cit, 1982, pp. 55-65.
210
incapacidad total permanente con dos años de salario completo y la muerte con salario completo desde 10 meses hasta 2 años. En enero de 1918, en el Estado de Veracruz el gobernador Cándido Aguilar promulgó la Ley del Trabajo para el estado. Y en 1921, Adalberto Tejeda la Ley de Enfermedades Profesionales y No Profesionales y el reparto de utilidades. Esta ley obligaba a las empresas a pagar los gastos de las enfermedades profesionales y comunes de los trabajadores.353 Algunas de las prestaciones y conceptos de seguridad social que pagaron las compañías textiles a sus empleados en 1920-1923 se enlistan en el Cuadro 14. En él se indica que en 1920 todas la Compañías textiles les pagaban a sus trabajadores –además del salario-, el tiempo extra, los accidentes de trabajo. Sólo la Compañía Industrial Manufacturera SA costeaba la pensión por invalidez o vejez. Aunque ninguna empresa repartía utilidades, algunas de ellas proporcionaban escuela, alojamiento y la posibilidad de tener una caja de ahorro. Asimismo, todas les permitían descansar entre semana, algunas inclusive en los días festivos. En el caso de los trabajadores de CIDOSA, ellos recibían salarios más altos que los de otras compañías, con excepción algunos puestos administrativos de la fábrica de “San Antonio”, de la Cía. Industrial de San Antonio Abad, “Hércules”, de la Cía. Industrial Manufacturera SA y “La Magdalena”, de Veyan, Jean y Cía. S en C. Les pagaban el tiempo extra duplicándoles el sueldo, al igual que CIVSA, y les cubrían gastos médicos, medicinas y medio sueldo en cuanto accidentes como muchas otras Cías. También les permitían descansar los domingos y les ofrecían casas con agua y electricidad, escuelas y cajas de ahorro. Aunque estas prestaciones eran iguales, y en algunos casos inferiores a las ofrecidas por otras compañías textiles, les sirvieron a CIDOSA para retener a los trabajadores y aminorar las presiones de los sindicatos.
353
Blasquez, Carmen y Corzo, Ricardo. Colección de Leyes y decretos de Veracruz 1824-1919. Universidad Veracruzana, Xalapa, Ver, 1997.
211
Cuadro 14 . Sueldos y prestaciones otorgadas por las Compañías textiles a sus trabajadores, 1920-1923. Empresa CIDOSA Cía. Industrial de Orizaba S.A.
Cía. Industrial San Antonio Abad S.A.
CIVSA Cía. Industrial Veracruzana S.A.
Fábrica
Sueldo promedio diario Obrero Obrero Obrero hombre mujer niños
Empleado
Hrs. Trabajo Niños Noche Tiempo Extra
Adultos
no
Sí
Sí
Ninguno
no
Sí
Sí
no
Sí
Sí
no
Sí
Sí
Casas, Luz y Sí agua Casas, Luz y Sí agua Casas, Luz y Sí agua
Medio salario, médico y medicinas Medio salario, médico y medicinas Medio salario,
No
no
Si
Si
Ninguno
Si
No
no
Si
Si
Ninguno
Si
8
7 doble salario 7 doble salario 7 doble
No
no
Si
Si
8
salario 7 doble
médico y medicinas Medio salario,
No
no
Si
Si
salario
médico y medicinas
Casas Si electricidad y agua Casas Si electricidad y agua
2.91
8
8
San Lorenzo
5.00
2.68
2.68
2.68
8
8
Cerritos
5.00
2.91
2.91
2.91
8
8
Rio Blanco
5.00
2.91
2.91
2.91
8
8
1921 Cocolapan
5.00
2.36
2.36
0.94
8
8
San Lorenzo
5.00
2.36
2.36
0.92
8
8
Cerritos
5.00
2.36
2.36
0.85
8
Rio Blanco
5.00
2.36
2.36
0.96
8
2.78
2.78
8
8
7 Convenio
no
si
Ninguno
No
1.50
1.50
8
8
7 Convenio
Según el caso raya, No media y médico Según el caso raya o No media, medicinas y médico
no
4.50
no
no
si
Ninguno
No
5.05
2.08
2.15
8
8
6 doble salario
Medio sueldo y médico en Fábrica
no
No
Sí
Casas
No
Cuarto y cocina Cuarto y cocina Cuarto y cocina
No
Extranjero Máximo
Mínimo
0.825
2.42 2.57
3.00
8 8
7 7
3.29
2.52
2.90
8
7
Guadalajara S.A.
Rio Blanco
4.09
1.18
1.18
0.80
8
Atemajac
4.03
1.33
1.33
1.00
8
La Experiencia
4.03
1.53
1.53
1.00
8
1920 Rio Grande
3.50
1.66
1.66
0.80
8
3.8 a
1 a 1.5
1 a 1.5 .5 a 1
Los de ley Domingo y días festivos Domingo días de Ley Medio sueldo más consulta médica Medio sueldo más consulta médica Medio sueldo más consulta médica
8
8 7 o 7.5
6.75 Cía.Industrial de Atlixco S.A.
1922 Metepec
Veyan Jean y Cía S. En C.
1920 La Magdalena
Extranjero Máximo
2.25
3 a 10
1.5 a 2
Mínimo
no hay antecedentes
Promedio
4.06 3.44
1920
Hércules
Sí
7.76
La Covadonga
Manufacturera S.A.
no hay antecedentes no hay antecedentes no hay antecedentes no hay antecedentes
2.91
Cía. Industrial de
Cía. Industrial
permanente o vejez)
Media raya, médico y medicinas Media raya, médico y medicinas Media raya, médico y medicinas Media raya, médico y medicinas
2.91
1923 Santa Rosa El León
Otras prestaciones Descanso Alojamiento Caja de semanal Ahorro
% Escuela utilidad
enfermedad de trabajo
5.00
Barron 1920 Santa Rosa
Pensión (temporal,
7 doble salario 7 doble salario 7 doble salario 7 doble salario
1920 Cocolapan
1921 San Antonio Abad La Colmena y
Prestaciones económicas Pago por accidentes o
Sueldo completo, médico y medicinas 50% Medio sueldo más consulta médica y medicinas
No aplica (NA)
NA
Sí
Si
No aplica (NA)
NA
Sí
Si
No aplica (NA)
NA
Sí
Si
Sueldo completo por accidente Medio sueldo o
NA
Sí
Si
Casas
No
No
No
Sí
Cuarto y
No
cambio de trabajo
No No
casas
Promedio
1.99
.9 a 1.5 .9 a 1
Fuente : Archivo General de la Nación, Departamento del Trabajo: Expediente Expediente Caja Caja 11 62 208 33 39 106 209 16,39,41,42 207 33,44 395 3
2.12
8
7
8 6a8
Caja 405 409 426
Domingo y días festivos 7
Expediente 1 3 4
10% Raya o media raya según el caso
no hay antecedentes
no
Sí
Caja 430 435 637
Expediente 1,5 2 2
Sí
Casas
No
212
En 1928 Mauricio Chane, Director general de CIDOSA, propuso que para resolver el pago por enfermedades profesionales y comunes, la empresa y los trabajadores aportaran a una cooperativa $ 1.50 por mes por cada obrero, ya que a la fecha la compañía pagaba todos los gastos de acuerdo a la Legislación estatal.
354
CIVSA también sugirió que la pensión por accidente y vejez fuera
pagada por el gobierno, los obreros y la fábrica, y que se les concientice a los obreros de los daños que causan a la industria las huelgas. 355 Ese mismo año el Presidente Calles dicta un laudo para evitar conflictos por enfermedad entre obreros e industriales, donde obliga a los segundos a pagar los gastos. CIDOSA solicitó al gobierno federalizara las leyes del trabajo y fomentara a través de ellas las cajas de ahorro, seguros médicos, jubilaciones. Esto para evitar huelgas y conflictos injustificados provocados por agitadores. 356 Dada la importancia de la industria textil en el país, en diciembre de 1932 se aprobó esta solicitud en el Congreso, y los Conflictos obrero-patronales textiles fueron competencia federal. 357 Además de la seguridad social, los empresarios debieron enfrentar en la década de los treinta la falta de consumo nacional, la sobreproducción y algunas crisis agrícolas.358 Los efectos que estos factores tuvieron sobre las ganancias e inversiones de las compañías textiles, -en especial de CIDOSA- se analizan en el siguiente apartado.
354
AGN, Presidentes: Plutarco Elías Calles, CIDOSA, 5690. AGN, Departamento del Trabajo, Caja 209, Expediente 41. 356 AGN, Departamento del Trabajo, Caja 209, Expediente 39. 357 AGN, Presidentes: Abelardo L. Rodríguez, CIDOSA 017(011), Expediente 20, feb.1933. 358 Camiro, Max. “La industria textil de México y política económica del Estado 1933 a 1943. La situación en 1944”. Las perspectivas en Jornadas 48. Cuestiones Industriales de México, COLMEX, México, 1945, pp.55. 355
213
Financieras
Inversiones y rendimientos Después de la revolución se generó en México una crisis de confianza en los empresarios por la aplicación de las nuevas leyes como la Constitución de 1917 y la Ley del Trabajo. La Constitución establecía ciertos derechos de propiedad del Estado sobre recursos naturales como el petróleo y la tierra. Y la Ley del trabajo, otorgaba ciertos derechos a los trabajadores: salarios y jornadas de trabajo mínimas, vacaciones, prestaciones, derecho a organizarse en sindicatos, derecho a la huelga, etc. Estas leyes permitieron a otros grupos de interés, como campesinos y obreros, acceder al poder. Y los empresarios optaron por no crear plantas nuevas, no cambiar maquinaria y desacelerar las inversiones fabriles.359 En el caso de los socios de CIDOSA éstos, desde de su fundación en 1889 y hasta 1911, habían invertido el capital de la compañía principalmente en las instalaciones fabriles y sus componentes (edificios, maquinaria, materia prima, herramientas, etc.). Sin embargo a partir de 1920 la composición de sus inversiones se modificó. El Cuadro 15 nos muestra la inversión destinada a los diferentes activos de la empresa de 1889 a 1920. De acuerdo a este Cuadro, en 1889 se invirtió el 51% del capital inicial en adquirir las instalaciones fabriles de San Lorenzo y Cerritos. Después en 1911, con la remodelación de Cocolapan, el capital invertido en las fabricas incluyendo las hidroeléctricas aumentó al 69.32% del total de los activos de la compañía. Siendo la fábrica de Río Blanco la de mayor inversión por su tamaño (más del 40%). Esto cambió para 1920 cuando la inversión destinada a las fábricas y las hidroeléctricas se redujo al 43.92% del total del activo de CIDOSA. La decisión de disminuir la inversión en las instalaciones fabriles fue –además de la depreciaciónporque sus empresarios se dieron cuenta que a nivel mundial el padrón de
359
Haber, Op.cit., 1992, p.191.
214
acumulación había cambiado de textiles a petróleo, y aunque las fábricas seguían siendo redituables por las redes, sus rendimientos empezaban a decrecer. Cuadro 15. Inversión en Activos fijos y circulantes de CIDOSA, 1889-1920 (pesos corrientes). Activo TOTAL Fábrica Río Blanco
1889 $ 2,550,000.00
Fábrica San Lorenzo
$ 700,000.00 $ 614,646.76
Fábrica Cerritos Fábrica Cocolápan Hidroeléctrica Cocolapan Hidroeléctrica Rincón Grande Hidroeléctrica Boquerón Muebles y enseres Líneas de transmisión
% 100%
1911 $ 26,574,175.08
$ 10,951,872.38 27.5% $ 2,630,697.39 24.1% $ 798,723.31 $ 2,410,354.21 $ 497,086.81 $ 973,902.60 $ 158,620.62 $ 8,809.53
eléctrica Alumbrado Nogales Terrenos en la Ciudad de México Oficinas en México Construcción en Veracruz Terrenos en Veracruz Pto. Efectivo
$
58,194.55
Dividendos anticipados
$ $
483,948.50 3,667,120.24
Existencias generales
% 1920 100% $ 25,138,803.32
41.21% 9.90% 3.01% 9.07% 1.87% 3.66% 0.60% 0.03%
$ 6,182,617.11 $ 1,220,817.38 $ 1,671,717.79 $
415,675.29
$ $ $
825,579.50 401,791.24 321,710.34
$
43,281.02
0.00% 19,521.56 0.00% $ $ 177,000.00 0.00% 0.00% $ 13,497.41 0.00% $ 9,270.00 0.00% $ 13,523.00 0.22% $ 168,342.70 1.82% 13.80% $ 6,695,107.39 14.81% $ 6,959,351.59
% 100%
24.59% 4.86% 6.65% 1.65% 3.28% 1.60% 1.28% 0.00% 0.17% 0.08% 0.70% 0.05% 0.04% 0.05% 0.67% 0.00% 26.63% 27.68%
$ 3,934,844.94 Cuentas Deudoras Fuente: AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60052 y Caja 1436 Expediente 19546 AHNM, Notaría 5 a cargo de Bernando Cornejo, Escritura 9378, Volumen 113 del 11/9/1920
En el Cuadro 16 se muestran algunos de los rendimientos sobre la inversión de CIDOSA y CIVSA, durante el periodo de 1905 a 1931. Lamentablemente no se cuenta con todos los datos del periodo porque no se pudo acceder a los archivos de la empresa. Sin embargo con la información localizada en otros acervos y en obras de otros investigadores, se lograron calcular algunos rendimientos. De acuerdo a la información del Cuadro 16, CIDOSA fue más redituable en su inversión que CIVSA en 1905, 1906, y 1911. Sólo en 1920 CIVSA obtuvo rendimientos superiores. Ambas compañías disminuyeron sus rendimientos en casi la mitad, al concluir el Porfiriato en 1911 y, aunque para 1920 tuvieron un ligero repunte, las ganancias no lograron recuperarse. De hecho con la crisis de sobreproducción de 1929 CIDOSA registra su primera pérdida en 1931 y CIVSA en 1930. 215
Cuadro 16. Rendimientos sobre la inversión de CIDOSA y CIVSA, 1905-1931. Año
Capital
1905 1906 1911 1920 1931
CIDOSA Ganancias
Rendimiento sobre la inversion 26.40% 28.87% 11.74% 12.87% -10.41%
$ 8,500,000 $2,244,094.90 $ 8,500,000 $2,453,692.67 $ 15,000,000 $1,761,569.45 $ 22,500,000 $2,894,701.26 $ 14,625,000 -$1,523,122.85 CIVSA Año Capital Ganancias Rendimiento sobre la inversion 1905 $ 3,350,000 $ 751,272.66 22.43% 1906 $ 3,350,000 $ 497,184.47 14.84% 1911 $ 3,350,000 $ 306,154.98 9.14% 1920 $ 9,045,000 $1,400,984.49 15.49% 1930 $ 9,045,000 -$ 341,399.74 -3.77% Fuentes: Actas de asambleas de Accionistas, en Everaer, (1990), pp. 85-94, y AGN, Departamento del Trabajo, Caja 5 Expediente 3 y Goméz Galvarriato, aurora (1999a), pp. 524-526, 542-544 y 556-557 .
Los empresarios textiles también dirigieron parte de sus inversiones a bienes raíces, que eran más seguros y en algunos casos más redituables. Por ejemplo los socios de CIDOSA desde la fundación de sus fábricas compraron terrenos en los municipios de Río Blanco, Nogales, Orizaba y el Puerto de Veracruz. Estos terrenos se enlistan en el Cuadro 17. En él se observa que la mayor extensión de tierra que poseía la empresa se encontraba en los municipios de Tenango de Río Blanco (más de 92,000 mts2) y Nogales (17,000 mts2). Aunque también poseían terrenos en la Ciudad de México (1,017 metros en las Haciendas Isabela Católica y Uruguay) y en el Puerto de Veracruz (la manzana 39,91, 92 y 93 con una superficie de 33 807.59 metros).360
360
AHNM, Escritura 8977, Volumen 192, de la Notaría 3 a cargo de Ramón Rúiz, 28/2/1916.
216
Cuadro 17. Terrenos propiedad de CIDOSA, 1889-1932 Fecha de compra
8/1/1895 11/1/1898 8/1/1898
Dueño anterior
Toribio Hernandez Víctor Garcín Víctor Garcín
8/12/1898 9/12/1898
15/7/1889 8/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 3/8/1889 15/7/1889 15/6/1889 3/8/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 24/09/1900 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 15/7/1889 10/2/1898 10/2/1898 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907 02/05/1907
Tomás Braniff Tomás Braniff Tomás Braniff Tomás Braniff Tomás Braniff Tomás Braniff
Felipe Loyo
Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo Felipe Loyo
Extensión del Colonia terreno (mts2) 568.75 354.00 Unión y progeso 432.00 Barrio Nuevo Unión y progeso 435.00 Juárez 770.00 Juárez 1,423.30
813.00 900.00 900.00 900.00 900.00 857.00 900.00 886.00 900.00 900.00 892.00 900.00 900.00 900.00 900.00 2,370.00 900.00 900.00 900.00 900.00 900.00 676.00 890.00 693.00 900.00 900.00 900.00 584.00 777.00 900.00 900.00 900.00 918.00 900.00 1,096.00 7,936.00 18,606.00 1,569.80 1,743.21 1,923.00 1,539.65 1,467.31 1,919.00 1,680.35 1,814.00 1,884.05 1,241.00 1,239.70 1,504.00 1,905.00 2,129.36 1,820.00 1,813.90 1,984.00 3,129.35 2,032.80 1,919.00 1,787.45 1,563.93 1,863.40 1,886.00 1,980.00
Emilio Carranza Emilio Carranza
Morelos Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina Santa Catarina
Ubicación Nogales Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Orizaba Nogales Río Blanco Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco
Fecha de venta 09/06/1932 06/09/1932 26/07/1932 26/07/1932 10/06/1933 10/06/1933 27/07/1933
10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 10/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933 01/08/1933
17/04/1933 29/05/1933 14/12/1933 14/12/1933 15/02/1934 12/01/1935 12/01/1935 12/01/1935 12/01/1935 12/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935 22/01/1935
Nuevo dueño Francisco Alvaréz Mauro Monter Oreao Martín Morter Orea Martín Morter Orea Franciso García Sainz Franciso García Sainz Sindicato de Obreros y similares de Río Blanco
Precio de venta $ 227.50 $ 113.28 $ 860.44 $ 83.34 $ 156.50 $ 308.00 $ 50.00
Jesús Vazquez Espinoza $ 120.93 Gregorio Valencia $ 116.88 Miguel Cruz $ 133.94 Jose Domínguez $ 134.87 José Iglesias $ 133.94 Francisco Trujillo $ 128.61 Sacramento Sanchez $ 133.94 Adolfo Ramírez $ 134.87 José Naranjo $ 125.00 Miguel Corona $ 125.87 Dario C. Martínez $ 137.50 Agustín Gutierrez $ 125.00 Placido Vazquez $ 125.00 Andres Medina $ 182.00 Magdalena Ramírez $ 182.00 Blandina Reyes $ 355.50 Julio Luna $ 116.88 Marcelino Pliego $ 134.87 Asunción Garrido $ 140.00 Ascencióm Sanchez $ 125.01 Consuelo Ramírez $ 125.01 Isabel Beltrán $ 87.75 Jacinto Salazar $ 136.03 Juan Sancez $ 85.28 Miguel Morales $ 131.01 Julian Flores $ 116.88 Leobardo Vazquez $ 125.87 Miguel Sanchez $ 135.42 Plutarco Vazquez $ 108.72 Modesto Flores $ 116.88 Juan García $ 125.87 Jesús H. Vasquez $ 133.94 Anastacio Escalante $ 128.97 Gonzalo Díaz $ 135.00 Raquel Ramírez Rodriguez $ 156.67 H.Ayuntamiento de Río Blanco $ 50.00 Hugo Torres $ 1,860.60 Gonzalo Lopez $ 156.98 Juan Lopez $ 174.32 Vicente Bueno $ 195.60 Magdaleno Castillo $ 153.97 Cenobio Crabal $ 146.73 Tomás Juárez $ 195.60 Angel Durán $ 168.04 Antonio Pérez $ 189.30 Pedro Montiel García $ 188.41 Gregorio Castro $ 124.10 Bernade Hernandez $ 123.97 Manuel Amador $ 150.47 Pablo Ramírez $ 192.50 Miguel Díaz $ 212.94 Jseús Varela $ 180.40 Salvador Vivar $ 183.19 Ignacio Espitiu G. $ 199.20 Julían Vega $ 312.94 Enrique Ajuris $ 203.28 José Samaniego y Valencia $ 195.60 Evodio Herrera $ 178.75 Daniel Castillo $ 156.40 Pavlino Ocaña $ 186.34 Daniel Torres $ 188.60 Sotero Vazquez $ 186.90
217
Cuadro 17. Terrenos propiedad de CIDOSA, 1889-1932. Fecha de compra
Dueño anterior
Extensión del terreno (mts2) 425.86 2,785.30 1,508.60 1,353.40 1,495.50 1,721.40 1,655.40 2,823.00 1,722.40 1,427.80 1,780.00 471.15 1,320.00 1,982.90 2,329.80 1,222.40 3,435.40 2,000.00 2,809.00
1,168.00 1,870.30 1,110.00 1,427.30 611.00 1,623.80 1,217.20 1,718.40 1,718.40 2,176.00 2,000.00 70.00 810.75 388.50 498.00 1,000.00 4,000.00 1,185.00 1,250.00 1,270.00 2,528.00 2,639.00 175.00 54.00 180.40 783.80 781.20 792.00 1,431.55 753.50 1,277.35 1,210.00 792.50 797.50 1,997.76 1,520.40 1,082.00 1,504.00 750.00 1,017.00
Colonia
Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Salvador Gonzalo García Independencia Piedra Gacha Independencia Independencia Independencia Independencia Independencia Independencia Independencia Independencia Independencia Independencia Piedra Gacha El Aguila Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Felipe carrillo Puerto Uruguay e Isabela Católica Manzana 39,91,92 y 93
Ubicación Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Nogales Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco México D.F.
Fecha de venta
Nuevo dueño
14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 14/11/1935 28/02/1936
Fidel Blanco Clemente Virueta Bernardino García Florencio Guameros Atanasio Morales Francisco Tlapacoyos Isabel Maldonado Fortino Ramos Andres Tecama Benjamin Huerta Feliciano Trujillo José Morales Modesto Munuve Delfino Zamora Felipe Osorio Pedro Serrano Pedro Mellado Eligio Martinez Fructuoso García Rafael Tecama Chaltzi Jseus Vara Luis N. Blanco Miguel Lima Basilisa Rodelas Rueprto García Clotilde Soriano Jesús Rosales Nicolas Hernandez German Zuñiga Lucio Cabrera Aurelio Martinez Julio Porras Juan Rojas Angel castillo Paula Enriquez Mnauel Merino Juan Rojas Ricardo Hernandez Lucio Cabrera Feliz Lopez Agustin Gonzalez Ruben Medina
Precio de venta $ 43.36 $ 28.83 $ 150.19 $ 205.30 $ 180.16 $ 205.73 $ 202.62 $ 287.75 $ 172.14 $ 144.78 $ 267.93 $ 70.95 $ 201.11 $ 197.17 $ 236.34 $ 183.26 $ 349.55 $ 80.00 $ 112.36 $ 141.45 $ 185.53 $ 106.15 $ 143.21 $ 93.39 $ 161.38 $ 183.26 $ 205.97 $ 245.03 $ 219.13 $ 80.00 $ 7.00 $ 32.43 $ 15.54 $ 19.92 $ 40.00 $ 160.00 $ 47.40 $ 50.00 $ 50.80 $ 101.12 $ 105.56 $ 70.00
11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936 11/11/1936
Diego Pérez Jose Maria de Jesús Martín Ramos Tomás Pérez Lázaro Gonzalez Domingo Gonzalez Tomás Martínez Lorenzo Contreras Sabino Pateiro Ernesto garcía Tomás Pérez AbelRamírez Sabino Pateiro Samuel Hernandez Camilo Bello Antonio Sanchez
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
82.94 85.84 86.21 5.93 87.14 157.47 82.88 139.40 133.10 87.17 87.72 131.75 167.24 119.06 165.51 82.55
28/02/1916 Sra. Rosa Luz Tejeda de Díaz33,809.59 Veracruz, Ver. TOTAL 225,274.82 Fuente: Libros de comercio del Registro Público de la Propiedad de Orizaba, Veracrzu (RPPO) y AHNM Notaría 3, Notarío Ramón Ruiz, vol. 192. Escritura 8977 del 28/2/1916
218
En los terrenos de Río Blanco, los socios de CIDOSA construyeron aproximadamente 1,100 casas para rentarlas a sus obreros y empleados. En 1924 el Gobierno de Veracruz, invitó a los propietarios de terrenos baldíos a donarlos al Estado para construir casas de bajo costo. Ante estas circunstancias CIDOSA, que era un importante terrateniente, decide en 1925 conservar los terrenos más valiosos y vender los demás a sus trabajadores o donarlos a los sindicatos. Esto como parte de su estrategia para evitar la expropiación de la reforma agraria ya que sus terrenos eran la mejor tierra para propósitos agrícolas. La importancia de la venta de terrenos para CIDOSA fue tal que en 1927 los pagos de colonos eran mayores a la cantidad que la compañía recibía por su alquiler. Tal vez porque ese año se efectuaron los enganches. Para 1928 los pagos parecían normalizados siendo del 56% de lo que obtenía por el alquiler.361 Las ventas y/o donaciones de terrenos de CIDOSA se acentuaron en la década de los treinta. Siendo una de las más importantes la que ocurrió en abril de 1933 cuando CIDOSA vende al H. Ayuntamiento de Río Blanco un terreno de 7,936 mts.2 a un precio de $50 para que se construyera una escuela; o la de julio de 1933, cuando el consejo de Administración de CIDOSA faculta a Juan Lacouture, para que vendiera algunos terrenos de la compañía (1423 mts. 2) ubicados en los municipios de Orizaba, Nogales y Río Blanco, al Sindicato de Obreros y similares de Río Blanco, a un precio de $50 con valor fiscal de $1,008.00, para que fueran ocupados por las oficinas del sindicato, y cuya única condición de la empresa fue que no quedaran dentro de las zonas de protección a los canales, o con proximidad a la fábrica o a las casas de los obreros, ya que éstos podrían necesitarse para ampliaciones.362 El cuadro 17, también muestra las fechas, precios y personas a las que les fueron vendidos o cedidos estos terrenos a partir de 1932, cuando la empresa registró un periodo de decaimiento en sus ganancias y eso la obligó a reducir también sus inversiones en bienes raíces.
361
Gómez Galvarriato, Aurora. “La transformación de los pueblos fabriles del Valle de Orizaba” en 20/10 Memoria de las Revoluciones en México. Primavera, 2009. México, pp.102. 362
Registro Público de la Propiedad de Orizaba (RPPO), Libro de comercio, 27/7/1933.
219
Por su parte el Consejo de CIVSA considera en 1927 “que las casas de la compañía no son redituables y pide a los gerentes estudiar la posibilidad de venderlas a los mismos obreros que las rentan. Ellos argumentan que los obreros serían buenos compradores, además podría causarse un problema si no se les vende a ellos. CIVSA implementó esta idea cerca de 1970, aproximadamente 50 años después de que CIDOSA lo hizo”.363 Otra parte de los terrenos propiedad de CIDOSA, fueron rentados a los Gobiernos municipales para que construyeran edificios públicos. “En 1922 CIDOSA reportó ser propietaria de la parroquia católica y del mercado. Por este último, CIDOSA cobraba a la municipalidad de Río Blanco $96 pesos mensuales en 1926”.364 Otra forma en que los socios de CIDOSA obtuvieron ingresos, desde la fundación de sus fábricas hasta 1912 fueron las tiendas de raya. Estos negocios les servían a los empresarios para recuperar parte de los salarios de los obreros, al obligarlos a comprar en ellas los alimentos, ropa y otros bienes que necesitaban. Existían en la Fábrica de San Lorenzo, en Río Blanco y Santa Rosa, pero sólo podían comprar sus respectivos obreros. Las tiendas de raya recibían los vales emitidos por las compañías textiles como adelanto del salario a solicitud del obrero. Los vales se podían canjear por mercancías o por dinero al 90% de su valor. El sábado siguiente el monto adelantado a los trabajadores se descontaba de sus salarios para pagar la deuda. CIDOSA concesionó su tienda de raya de la fábrica de Río Blanco a Víctor Garcín, y CIVSA la concesionó a la familia Fuentes, a cambio de $150 mensuales y una comisión de 5% sobre los descuentos semanales que hicieran a la raya de los obreros por comprar mercancía en la tienda.365 Después de los conflictos de 1907, donde los obreros quemaron las tiendas de Víctor Garcín. Él decidió vender su propiedad a Manuel Diez y abandono la zona. Mientras que los socios de CIVSA ordenaron al Director general de la
363 364 365
Gómez Galvarriato, Aurora. 1999ª, Op,cit, pp. 476. Gómez Galvarriato, Aurora. 2009, Op,cit, pp.98. Ídem, pp. 102.
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fábrica de Santa Rosa anular cualquier obligación de la compañía con la tienda de raya. 366 En 1912 las tiendas de raya fueron prohibidas por la Convención de Industriales y obreros textiles y en 1914 por el Gobernador de Veracruz, Cándido Aguilar y por la Constitución de 1917. 367 Las tiendas de raya y los bienes inmuebles formaron parte de los negocios de los socios de CIDOSA que ayudaron a esta compañía a aumentar sus ganancias y los dividendos que repartían a sus socios, los cuales se describen a continuación.
Dividendos y capital, 1895-1936. CIDOSA, CIVSA, Cía. Industrial San Antonio Abad y Cía. Industrial de Atlixco, fueron de las compañías manufactureras con mayores utilidades durante el periodo de 1900-1930. Inclusive, durante la Revolución éstas mantuvieron cierto margen de ganancia que les permitió repartir dividendos a sus socios 368. Los dividendos repartidos por estas y otras empresas manufactureras de 1895 a 1925 se muestran en el Cuadro 18. De acuerdo a los datos del Cuadro 18, las compañías que otorgaron a sus accionistas los más altos de dividendos de 1901 a 1925 fueron la Cía. Industrial La Laguna, Cía. Cigarrera El Buen Tono y CIDOSA. Está última repartió dividendos superiores a las de las demás compañías textiles porque obtuvo mayores ganancias (ver cuadro 16). Sin embargo, a pesar de los montos repartidos en dividendos, los dueños de las compañías textiles continuaron aplicando en sus fábricas la lógica del ahorro y de reinversión de sus tiendas comerciales. Casi todas conservaron parte de sus ganancias en fondos, lo cuales usaron para financiar el crecimiento de sus manufacturas. Por ejemplo los dueños de la Cía. Industrial de Atlixco y los de CIDOSA establecieron desde su fundación un fondo de reserva por el 10% de las 366
Ídem, pp. 103. Ídem, pp. 103. 368 Ver Haber, S. Op.cit, 1992. 367
221
utilidades anuales que obtuviera la compañía, hasta por un monto máximo de la quinta parte del capital social exhibido.369
Cuadro 18. Dividendos de compañías manufactureras de México, 1895-1925 (pesos corrientes). Año
1895 1896 1897 1898 1899 1900 1901 1902 1903 1904 1905 1906 1907 1908 1909 1910 1911 1912 1913 1914 1915 1916 1917 1918 1919 1920 1921 1922 1923 1924 1925
Cía. de Cigarros El buen tono $ 60.00 $ 64.00 $ 58.00 $ 65.00 $ 68.00 $ 77.00 $ 62.00 $ 24.00 $ 24.00 $ 50.00 $ 45.00 $ 57.00 $ 68.00 $ 66.00 $ 62.00 $ 31.00 $ 30.00 $ 30.00 $ $ 14.60 $ $ $ 23.44 $ 23.44 $ 23.44 $ 39.84 $ 46.88 $ 46.88 $ 46.88 $ 46.88 $ 46.88
Fábrica de lana San Idelfonso $ $ $ $ 18.00 $ 20.00 $ 18.00 $ $ $ $ $ $ 57.00 $ 8.00 $ 8.00 $ $ 4.00 $ 2.00 $ 2.00 $ 3.00 $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
3.00 0.60 2.72 2.99 4.02 7.14 5.13 4.12 4.14 2.03
CIDOSA
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
16.00 18.00 32.00 23.00 54.00 56.00 50.00 50.00 59.00 47.00 42.00 36.00 20.02 20.02 11.26 20.02 20.02 14.34 13.59 34.87 40.25 53.62 34.48 38.67 15.54 15.24
San Antonio
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
Abad 72.00 85.00 51.00 49.00 9.00 11.00 11.00 9.00 5.00 2.00 6.00 11.46 8.00 6.00 12.00 -
Atlixco
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
20.00 20.00 20.00 4.00 3.00 3.00 6.00 3.00 3.00 6.00 6.00 -
CIVSA
$ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $ $
37.00 29.00 29.00 33.00 27.00 27.00 30.00 29.00 27.00 23.00 13.00 12.00 12.60 5.40 5.30 14.33 21.79 22.03 30.31 13.91 21.92 8.22
Cía. Jabonera de La Laguna $ $ $ $ $ $ $ 50.00 $ 85.00 $ 49.00 $ 88.00 $ 78.00 $ 80.00 $ 80.00 $ 111.00 $ 104.00 $ 89.00 $ 40.00 $ 50.00 $ 20.00 $ $ $ $ 41.02 $ 21.72 $ 55.72 $ 76.38 $ 16.32 $ $ 40.00 $ 51.75 $ -
Cervecería Moctezuma $ $ $ $ $ $ $ $ 15.00 $ 5.00 $ 45.00 $ 22.00 $ 27.00 $ 32.00 $ 22.00 $ 17.00 $ 32.00 $ 14.00 $ 12.00 $ 8.00 $ 8.00 $ $ $ $ 10.16 $ 37.24 $ 23.94 $ 37.24 $ 33.25 $ 19.95 $ 19.95 $ 19.95
Fuente : Haber (1992) Cuadro 7.4. y Cuadro 8.7. pp. 146 y 170.
En el caso de CIVSA, sus socios acordaron conservar parte de sus ganancias para hacer frente a los riesgos futuros. Para ello, establecieron el fondo preventivo, el del riesgo imprevisto, el de la fluctuación sobre divisas, el del seguro y el de penalización sobre deudores. 370 Estos fondos también sirvieron para aumentar el capital y realizar nuevas inversiones. Por ejemplo, en 1913, el capital de CIVSA se incrementó en 80% de 369
AHNM, Escritura 155 del Volumen 3025, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/6/1889 y Escritura 5 Volumen 13 Notaría 25, a cargo de Juan M. Villeda, 5/1/1899. 370 Gómez Galvarriato, Aurora. 1999ª, Op,cit, pp. 116.
222
$3,350, 000 a $6,030,000, y se utilizaron $2,680,000 de un total de $3,667,770.31 de las ganancias retenidas en los fondos en 1912. También en 1919 cuando el capital de CIVSA aumenta en un 50% de $6 030,000 a $9, 045,000, se utilizaron $3,015,000 de un total de $3,428,748.84 que se tenían en 1918.371 CIDOSA también contó con un fondo de previsión, uno de amortización y uno de seguro. Los montos de estos fondos para 1911 y 1919, se enumeran en el Cuadro 19. En este cuadro se observa que los fondos representaban el 58% del total de capital social de 1911 y el 40% en 1919. Además comparándola con la información del Activo, se observa que la suma de todos los fondos de capital representaba el 32.90% de la inversión que la compañía tenía en 1911 y el 24% en 1919. Los socios de CIDOSA utilizaron los recursos de estos fondos para los aumentos del capital de 1920 a 1936 y para realizar nuevas inversiones. De hecho como se observa en el Cuadro 19, el grado de apalancamiento o el financiamiento de los activos a través de pasivos solo representó para CIDOSA un poco más del 4%. Esto indica que la mayor fuente de capital para CIDOSA –al igual que para CIVSA- fue la reinversión de utilidades.
Cuadro 19. Activos, cuentas de capital y pasivos de CIDOSA, 1911 y 1919. 1911 26,574,175.08 15,000,000.00 2,721,591.54 1,558,097.35 3,960,683.04 490,613.36
1919
100% $ 25,138,803.32 Activo Total $ 56% $ 15,000,000.00 Capital social $ Fondo reserva $ 10.2% $ 2,628,582.13 Fondo previsión $ 5.9% $ 634,608.50 Fondo amortización $ 14.9% Fondo seguro $ 1.85% $ 474,029.70 Cuentas de garantía $ 2,304,714.37 Total de fondos $ 8,730,985.29 32.9% $ 6,041,934.70 Pasivo (ctas. Acreedoras) $ 1,081,620.34 4.07% $ 1,083,040.14 Fuente: AHA, Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60052
100% 60%
10.5% 2.5% 0.0% 1.89% 9.17% 24.0% 4.31%
y Caja 1436 Expediente 19546. AHNM, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 9378, Volumen 113 del 11/9/1920
371
Gómez Galvarriato, Aurora. 1999ª, Op,cit, pp. 118-122.
223
La primera reinversión de utilidades importante que aplicaron los socios de CIDOSA fue en 1908, cuando se aumentó el capital de $8, 5000, 000 a $15, 000, 000, tomándose del fondo de previsión $3, 000, 000 y el resto de la emisión de acciones.372 Después, en 1920, se decidió disponer de recursos de diferentes fondos de la empresa, para incrementar el capital social de $15, 000, 000 a $22, 500, 000. El balance del 31 de diciembre de 1919 (ver Anexo D) mostraba como importe total de los valores, bienes muebles e inmuebles de la compañía $11, 316, 001.56. Según estudio hecho por peritos, el valor real ascendía a $16, 755, 756.66. 373 La diferencia constituía por sí misma un valor que pertenecía a los accionistas y debía consolidarse a su capital. La asamblea general de accionistas del 30 de agosto de 1920 acordó que la cantidad de $5, 439, 755.10 se aplicaría para cubrir parte del aumento del capital social que se había acordado. Como el fondo de previsión poseía en ese momento un total de $956, 620.12, y por pertenecer igualmente a los accionistas, se pactó que también podía aplicarse. Asimismo, de varias cuentas de garantía se tomó $1, 115, 714.25, que sumado a lo anterior dio un total de: $7, 512, 089.47. De éstos, $7, 500, 000 se utilizaron para incrementar el capital y los $12, 089.47 se destinaron al fondo de reserva. 374 Las acciones que respaldaron el nuevo capital se canjearon en proporción de dos de las anteriores por tres de las nuevas, conservando su valor de $100 cada una.375 Este aumento del capital fue el último registrado por CIDOSA de 1920 a 1933, tal como se observa en el Cuadro 20. De acuerdo a este cuadro, durante la década de 1930, CIDOSA registra una pérdida de capital del 35 por ciento en 1931 y del 23 en 1933. Esto fue debido la crisis de demanda de bienes de consumo que se sufrió en 1929.
372
AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908. La inflación para 1918 fue de 124.36 por ciento y en 1920 de 5%. Super tabla histórica, del Ing. Manuel Aguirre Botello, www.mexicomaxico.org. 374 AHNM, Escritura 9378 del Volumen 113, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 11/09/1920. 375 Ídem. 373
224
Cuadro 20. Modificaciones al capital de CIDOSA, 1920-1974 (pesos corrientes). Fecha
Tipo de Modificación
11/09/1920 04/09/1931 18/07/1933 14/11/1936 13/06/1949 20/05/1957 05/06/1971 05/11/1974 Fuente:
Capital anterior
Capital Capital Actual % del cambio aportado Aumento $ 15,000,000 $ 7,500,000 $ 22,500,000 50.00% Disminución $ 22,500,000 -$ 7,875,000 $ 14,625,000 -35.00% Disminución $ 14,625,000 -$ 3,375,000 $ 11,250,000 -23.08% Aumento $ 11,250,000 $ 5,625,000 $ 16,875,000 50.00% Aumento $ 16,875,000 $ 25,312,500 $ 42,187,500 150.00% Aumento $ 42,187,500 $ 42,187,500 $ 84,375,000 100.00% Aumento $ 84,375,000 $ 5,625,000 $ 90,000,000 6.67% Aumento $ 90,000,000 $ 20,000,000 $ 110,000,000 22.22% AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4506, Expediente 59678 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notaría/Notario Fondo Volumen Escritura Fecha 5.Bernando Cornejo Contemporáneo 113 9378 11/09/1920 32.Rafael Rebollar Contemporáneo 89 6799 04/09/1931 48.Rafael del Paso Contemporáneo 99 6705 18/07/1933 48.Rafael del Paso Contemporáneo 141 9141 14/11/1936
En el mundo, la producción de bienes superó las necesidades reales de consumo de 1925 a 1930, sobre todo en los Estados Unidos, donde las mercancías aumentaban conforme se reconstruían las economías europeas. Las causas de la sobreproducción fueron: A. La distribución desigual de las rentas, que llevaba implícita la limitación del consumo a las capas sociales más ricas, que en la mayor parte de los países no eran muy numerosas. Galbraith señala que en los Estados Unidos el 5 por 100 de la población recibía la tercera parte de la renta nacional. B. El mantenimiento de precios de monopolio, tipo cartel, que obligaba a la existencia de grandes cantidades de mercancías sin vender, al comprometerse los fabricantes a mantener unos precios pactados de antemano. C. Desfase entre precios agrícolas e industriales: los primeros crecieron más lentamente que los segundos e hicieron disminuir, el poder adquisitivo de los campesinos, importante clientela de la industria.376 En México, de 1926 a 1932, las ventas de tejidos de algodón cayeron y las existencias se acumularon. En el Cuadro 17, se presentan las ventas semestrales de tejidos de algodón en el país de 1923 a 1934. En él se observa que del segundo semestre de 1926 al primer semestre de1929, las ventas fueron menores a los $50,000,000, y que los años de menor monto de venta fueron 1931 y 1932. 376
www.zonaeconómica.com/crisis-29
225
Cuadro 17. Ventas de tejidos de algodón en México 1923-1934. AÑO
Ventas (pesos corrientes) 1923 1 sem $ 49,193,142.75 2 sem $ 47,755,705.39 1924 1 sem $ 40,172,453.99 2 sem $ 56,262,583.61 1925 1 sem $ 57,291,058.68 2 sem $ 51,104,545.64 1926 1 sem $ 51,378,639.06 2 sem $ 44,059,233.30 1927 1 sem $ 44,901,353.98 2 sem $ 46,167,226.73 1928 1 sem $ 48,272,507.61 2 sem $ 48,020,903.18 1929 1 sem $ 44,815,202.07 2 sem $ 52,196,571.04 1930 1 sem $ 50,416,370.62 2 sem $ 44,185,673.38 1931 1 sem $ 40,689,549.34 2 sem $ 39,408,484.35 1932 1 sem $ 40,389,448.92 2 sem $ 41,615,356.63 1933 1 sem $ 46,767,370.07 2 sem $ 55,305,860.47 1934 1 sem $ 68,723,568.91 Fuente: Biblioteca Miguel Lerdo de Tejada de la SHCP Archivos Económicos. Diario de los negocios, 3-dic-1934.
Durante el periodo de 1926 a 1932, la industria textil solicitó al gobierno cerrar temporalmente por sobreproducción. Pero no le fue concedido, por lo que debió operar un turno por día, acumular inventarios que disminuían sus precios y pagar un incremento salarial de entre el 10 y 25 por ciento a los trabajadores, porque el gobierno del presidente Calles los obligó.377 Haber afirma que la economía mexicana se contrajo en 1926, -antes de la Gran Depresión- e inició su recuperación a partir de 1932 debido a que: 1. Gran parte de la población de México vivía en pequeñas comunidades y producía para la subsistencia, lo que sirvió para que el colapso de las exportaciones y la crisis del 29 tuvieran un menor impacto que en otros países. 2. Los precios del petróleo
377
Haber, S. Op.cit., 1992, pp.208-212.
226
y la plata se recuperaron rápidamente, permitiendo a la economía mexicana incrementar sus ingresos por la misma vía que los había perdido.378 En el caso de CIDOSA sus mercancías se empezaron acumular a partir de 1929 porque elaboraba principalmente telas de color para casimires y driles dirigidas a clases altas. Las cuales vendía a precios ya pactados a las tiendas comerciales de sus socios (ver apartado de estrategias de comercialización). En el Consejo de Administración de 1930 los socios comentan que “la situación del país era poco propicia para la venta de sus productos y solicitaron a las autoridades permiso de parar temporalmente las fábricas para intentar reducir las existencias”.379 La Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo les autorizó laborar sólo cuatro días por semana. Aun así, por la depresión económica que se sufría, los altos costos de la mano de obra y las elevadas existencias de los productos terminados, los socios proponen reducir el capital social.380 El 29 de junio de 1931 los socios de CIDOSA celebraron una asamblea general extraordinaria. Ahí acordaron reducir el capital a la suma de $14, 625, 000, representado por 225 mil acciones de $65 cada una. Pactaron que no se emitirán nuevos títulos, sólo se aplicaría a los actuales un sello en el que expresara la reducción del capital.381 Entre 1931 y 1932 las fábricas de CIDOSA permanecieron cerradas diciembre, enero y febrero. Sólo trabajaron 27 horas por semana, y se volvió a disminuir el capital social de la compañía, quedando ahora en $11, 250, 000, representado por 225 mil acciones, de $50 cada una.382. Ante este panorama los socios se plantearon la disolución y liquidación anticipada de la empresa, lo que condujo al gobierno federal a intervenir y firmar un acuerdo para igualar los salarios textiles con los de las industrias similares en el país y trabajar sólo 219 jornadas laborales, en vez de 302 que se venían realizando.383
378
Ídem. Actas de Asambleas del Consejo de Administración de CIDOSA 1929 y 1930, en Everear, op.cit, 1990, pp. 92-93 380 Ídem. 381 AHNM, Escritura 6799 del Volumen 89, Notaría 32 a cargo de Rafael Rebollar, 04/09/1931. 382 AHNM, Escritura 6705 del Volumen 99, Notaría 48 a cargo de Rafael Del Paso, 18/07/1933 383 Actas de Asambleas del Consejo de Administración de CIDOSA 1931 y 1932, en Everear, op.cit, 1990, pp. 92-93. 379
227
Fue hasta 1935 que se restableció la semana de trabajo completa y hasta noviembre de 1936, que el capital volvió incrementarse a un monto de $16, 875,000, representado por 337,500 acciones, con valor de $50 cada una. El monto del aumento fue de $5,625,000, el cual equivalía al revaluó del activo fijo.384 Para este aumento de capital se crearon 112,500 acciones de $50, que se entregaron a razón de una acción nueva por dos de las antiguas y con participación en las ganancias a partir del 1 de enero de 1936. También se acordó que se prorrogaría la duración de la sociedad por 34 años, desde el 26 de abril de 1952, fecha en que expiraba el plazo anterior, hasta el 26 de marzo de 1986. 385 Las modificaciones al capital de CIDOSA de 1936 en adelante no se incluyen en este análisis porque rebasan los límites temporales de este trabajo. Sin embargo de acuerdo a lo investigado, después de la segunda guerra mundial (1942-1945), el deterioro y vejez de la maquinaria y equipo, así como por el desmantelamiento de sus departamentos386, provocó que CIDOSA disminuyera sus ganancias y fuera vendida en 1962 a Jerónimo Arango, Carlos Trouyet y Manuel Senderos, quienes continuaron operando las fábricas en Orizaba hasta 1993, cuando la empresa fue declarada en quiebra. Las compañías textiles en México de 1889 a 1930, lograron aumentar su producción porque integraron sus procesos productivos (hilado, tejido y estampado), usaron nuevas tecnologías (energía hidráulica y eléctrica) e incorporaron mayor número de obreros -aunque no elevaron su productividad.387
384 385
Actas de Asambleas del Consejo de Administración de CIDOSA 1936, en Everear, op.cit, 1990, pp. 94. AHNM, Escritura 9141 del Volumen 141, Notaría 48 a cargo de Rafael Del Paso, 14/11/1936
386
En 1950, los socios de CIDOSA reorganizaron sus fábricas textiles. Desmantelaron el departamento de acabados y su maquinaria y fuerza laboral fueron trasladados a la Ciudad de México, donde se fundo la sociedad Acabados México S.A. Esta empresa se ubicó en Calzada de Xochimilco y se encargó de la presentación final de las telas a través del blanqueo, apresto, almidonado, estampado y tinte. También desmantelaron sus talleres de mantenimiento dado que la nueva maquinaria norteamericana ya no requería los servicios de carpintería, fundición, etc. Everear, op.cit, 1990. 387
Chandler señala que en las industrias mecánicas, como la textil, la producción total aumenta más por la incorporación de personal y maquinaria que por la innovación continuada en la tecnología y la organización. Por esta razón, la ampliación del tamaño de la empresa genera pocas ventajas en lo que se refiere al aumento de la productividad y disminución de costos. Chandler, Op.cit, 1987, p.349. En México, para la primera década del siglo XX, las fábricas textiles de algodón: A) Aumentaron su número de telares en un 135%y el número de husos en 116% . (Esto porque cambiaron su producción hacia el tejido y el estampado, disminuyendo la elaboración de hilaza). B) Incrementaron su producción de piezas de manta en un 126%, al pasar de un promedio de producción de 68,531 piezas de manta, durante el período de 1843-1887, a 155,025 piezas, de 1893-1913. C) Elevaron la productividad (piezas de manta por obrero) en un 46%: de 144 piezas promedio por obrero, de 1843-1887, a 212 piezas, de 1893-1913. Ese aumento es de menor magnitud
228
En el caso de CIDOSA, fue la pionera en uso de energía eléctrica y creación de fábricas de gran escala (Río Blanco) que requirieron nuevas estructuras organizativas. De acuerdo a Gómez Galvarriato, CIVSA imitó en su estrategia y estructura a CIDOSA, porque a pesar de que CIVSA sólo controlaba una fábrica hasta 1920 y CIDOSA varias, CIDOSA tuvo que desarrollar ciertas prácticas contables y administrativas que luego adoptó CIVSA y que le generaron ganancias derivadas de la experiencia previa de CIDOSA.
388
Una forma de apreciar la
importancia de las estrategias organizacionales y la construcción de las redes de los empresarios de CIDOSA es pasar revista a los efectos regionales en un lugar como el Valle de Orizaba en Veracruz. Capítulo 3: Estrategias de los empresarios de CIDOSA ................................................... 148 En la producción ......................................................................................................... 150 Principales fábricas y compañías textiles en México 1843-1920. .................. 150 Recursos .................................................................................................................. 166 Agua .......................................................................................................................... 166 Procesos de trabajo................................................................................................ 178 Patentes ................................................................................................................... 186 En la comercialización ............................................................................................... 190 Marcas. ..................................................................................................................... 190 Redes de distribución ............................................................................................. 196 Laborales...................................................................................................................... 203 Salarios y el papel del Estado .............................................................................. 203 Prestaciones y seguridad social. .......................................................................... 210 Financieras .................................................................................................................. 214 Inversiones y rendimientos.................................................................................... 214 Dividendos y capital, 1895-1936. .............................................................................. 221
que los anteriores, porque al igual que sus antecesoras acrecentaron su producción comprando más máquinas y no siendo más eficientes al utilizarlas. 388 En 1920 las ventas se incrementan y el consejo de CIVSA decide rentar la fábrica de La Covadonga en Puebla, así como subcontratar producción de ropa en Amatlán y en La Claudina en Perote Veracruz. También compra la fábrica de El León ubicada en Puebla. Con estas decisiones, su producción se incrementó entre 25 y 30 millones de metros de ropa por año entre 1920 y 1923. Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit,1999ª, p.539.
229
Capítulo 4: Efectos regionales El Valle de Orizaba389 fue un entorno geográfico y sociocultural propicio al desarrollo de los negocios. Sus características físicas, a las que se añadía paradójicamente una accidentada orografía, la dotaron de abundantes fuentes de agua y de un clima templado húmedo. Eso contribuyó a que desde muy temprano en la Colonia fuese usado como área de reposo y descanso de largas travesías ultramarinas, así como depósito de productos agrícolas muy importantes, como sucediese con el tabaco.390 El Valle poseía además otras características estratégicas que lo hicieron deseable: como era su relativa cercanía a las ciudades de Veracruz, Puebla y México; la estrechez de sus caminos que permitía tener un mayor control sobre el tráfico de mercancías y servicios de transporte como el ferrocarril. Lo cual hacia de él un sitio privilegiado para el desarrollo de una serie de actividades económicas de carácter industrial como serían la fabricación de textiles, cerveza, chocolate, tabaco, etc. En ese contexto geográfico, regional, muy temprano a escasos doce años de haber obtenido la Independencia de España, se inició el establecimiento sistemático de empresas textiles. Sin embargo, y aún cuando existía desde 1810 la fábrica Lucas Martín en Xalapa, esta zona nunca alcanzó a tener la importancia que tendría la industria establecida en Orizaba a finales del siglo XIX. El proyecto de industrialización impulsado por el gobierno de Porfirio Díaz, propició el establecimiento otras primeras fábricas textiles estilo europeo como: Cerritos (1882), San Lorenzo (1883) y Río Blanco (1892), la Compañía limitada de
389
Para efectos de este estudio comprende los municipios de Orizaba, Río Blanco, Nogales y Ciudad Mendoza. 390 En 1764 el Gobierno Virreinal instaló el Real Monopolio de Tabaco en Orizaba. El Real Monopolio, fue la primera empresa que transformó sustancialmente la estructura económica y la vida de los habitantes de la región, porque propició el fraccionamiento del suelo a través del arrendamiento, proporcionó créditos a pequeños agricultores para que fueran independientes e incorporó a los indios a al economía de mercado al pagarles un jornal de 2 a 4 reales. Este salario fue casi el doble del promedio durante el siglo XVIII, por lo cual atrajo a muchos trabajadores a la región, y en 1774 Orizaba fue declarada villa. Del Valle, Pavón, Guillermina. “El cultivo de tabaco y la transformación de la jurisdicción de Orizaba a fines del siglo XVIII” en Silva Riquer, Jorge. Los mercados regionales de México en los siglos XVIII y XIX. CONACULTA e Instituto Mora, México, 2003, pp.89-124.
230
manufacturas de Yute (1892), la Fábrica de Santa Gertrudis (1895) y la fábrica de Santa Rosa (1896). Mapa 1. Ubicación del Valle de Orizaba.
Fuente: INEGI. Carta Fisiográfica, 1:1 000 000
231
El hecho de que operaran todas estas compañías textiles en la región del Valle de Orizaba, nos permite reflexionar en varios sentidos. ¿Fue la región natural lo que hizo posible que en esta zona se establecieran siete fábricas textiles que contribuyeron a crear un entorno industrial textil, o fueron acaso las políticas gubernamentales porfiristas las que crearon el entorno propicio a dicho establecimiento? ¿Fueron acaso las suspicacias de los productores las que decidieron la localización de esta industria? ¿Fueron las condiciones materiales expresadas en vías de comunicación, acceso a mano de obra barata y alimentos para una población creciente? ¿Fueron acaso todos estos factores juntos y las propias expectativas generadas por las fábricas como fuentes de trabajo las que gestaron un entorno favorable, proclive al desarrollo industrial en esta rama? ¿Es posible medir los efectos regionales ocasionados por la industria textil de estos años? Algunas respuestas podemos adelantar en este momento gracias a los aportes legados por la historiografía nacional y regional. Entre los factores de localización industrial destacados están sin duda, el establecimiento de vías del ferrocarril mexicano, el acceso a abundantes recursos hídricos, mano de obra, fuentes de alimentos y políticas gubernamentales del régimen. Sin embargo estos no pudieron ser aprovechados racionalmente sin la perspicacia empresarial, impregnada de una cultura que lo ligaba estrechamente al mundo de los negocios en la escala en que fueron evolucionando. Conviene tener presente que el empresariado de entonces estaba más estrechamente vinculado al control, supervisión y expansión de sus negocios. Aunque en el caso concreto que nos ocupa, cuando los pioneros lograron a amasar una cierta fortuna dejaron al frente de sus negocios a sus parientes y socios, que ya sabíamos respetaban los acuerdos de la red. Sin embargo, estos factores generales de localización si bien nos permiten comprender qué fue lo que hizo posible en parte el desarrollo de la industria textil, no nos explica las maneras en las cuales se fraguaron sus efectos en el Valle de Orizaba. A esto se intenta atisbar algunas explicaciones.
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Importancia de CIDOSA El establecimiento de la industria textil en México fue producto de una serie de acontecimientos históricos que le precedieron: 1. La liberación de la propiedad por la desamortización de los bienes de la iglesia. 2. La capacitación de los trabajadores en los obrajes391. 3. El mejoramiento de las vías de comunicación. 4. Un sistema de crédito con el Banco de avío. 5. Consolidación del Estado Mexicano. 6. Creación de la Constitución de 1857 e instituciones nacionales. 7. Entrada de la Inversión extranjera. 8. Instauración de un gobierno central y por su disposición política a las necesidades de expansión del capital transnacional. 9. Política proteccionista a la industria nacional. Antes de proceder a la revisión concreta del Valle de Orizaba, es importante destacar el peso de la región en el contexto industrial más amplio tanto nacional como estatal. Como se ha mostrado antes, la dificultad material de analizar todo el periodo de estudio sin fisuras y no disponer de series estadísticas continuas, en seguida nos referiremos al ámbito más amplio con series parciales para las regiones que consideramos de mayor importancia respectivamente: Puebla, México D.F., Veracruz, Jalisco y Querétaro.
Industria textil de algodón La industria textil estuvo constituida por todas las operaciones relativas a las fabricación de hilos, hilazas, cordeles, cuerdas, cables, redes, tapices y toda clase de tejidos y mallas elaboradas con fibras vegetales, animales y sintéticas. En México, desde el siglo XIX la industria textil integró a las fábricas del hilado y
391
El obraje se refiera a que un solo individuo, empresario o artesano-maestro, era dueño de los medios de producción y reunía bajo un solo techo y en un mismo tiempo, a un número de trabajadores, quienes mediante un salario elaboraban telas para el dueño. Los obrajes permitieron una división simple de trabajo, pues diferentes personas en el interior del taller se dedicaban a diferentes fases del proceso de elaboración de una tela: lavado, cardado, hilado y finalmente el tejido, siendo este último exclusivamente trabajo de hombres, mientras que las primeras tareas, especialmente la transformación de la fibra de hilo, eran en su mayoría realizadas por mujeres. Estos primeros trabajos se distribuían en talleres u obrajes más pequeños que estaban sometidos a los grandes, así había obrajes dedicados al cardado, otros realizaban todas las operaciones hasta el hilado y vendían parte o todo su hilo a otros obrajes dedicados principalmente al tejido o algún trabajo como el hilado de la lana, que era distribuido a trabajadores a domicilio www.mexcostura.com/13/erase.html).
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tejidos de algodón, lana, artícela, seda, fibras duras: ixtle, henequén y yute; y a partir de 1930, fibras sintéticas.392 De estas ramas, el tejido de algodón ha sido siempre el de mayor producción. Aún antes de la Colonia, los artesanos mexicanos ya hilaban y tejían algodón. Pero fue hasta los siglos XVI y XVII que surgieron en México los obrajes de lana y de algodón. Los obrajes de algodón se formaron por los talleres que producían manta y que se encontraban principalmente en la ciudad de Puebla, que ha sido el mayor centro de producción de los textiles de algodón del país.393 Desde la colonia Puebla siempre mantuvo el mayor volumen de producción y el mayor porcentaje de fábricas textiles de algodón que las otras regiones, porque “era la ruta entre el puerto de Veracruz y el DF, con lo cual ofrecía a los inversionistas la cercanía al mercado y a la principal materia prima, el algodón importado que arribaba al Puerto de Veracruz y el que se cultivaba en el Papaloapan. Además disponía de molinos y haciendas que sirvieron para instalar manufacturas textiles movidas por energía hidráulica e hidroeléctrica y principalmente porque contaba con mano de obra capacitada en el trabajo de hilanderos y tejedores, que además trabajaban por bajos salarios. Los industriales textiles en Puebla entre 1880-1890, pagaban 25 centavos de salario mínimo mientras que en Orizaba era de 35 centavos. 394 El Distrito Federal, fue el segundo territorio con mayor número de fábricas textiles de algodón del país. Las manufacturas se instalaban ahí, porque era –y siempre ha sido- el territorio más densamente poblado, y por tanto el mejor mercado. La tercera región más importante en la producción de tejidos de algodón fue el Valle de Orizaba en el Estado de Veracruz. Los empresarios eligieron operar sus manufacturas ahí, por las razones antes mencionadas. También porque obtuvieron diversas concesiones de terrenos por parte del Gobierno del Estado de Veracruz y porque a diferencia de Puebla, las fábricas que operaron en Orizaba,
392
Camiro, Max. “La industria textil de México y política económica del Estado 1933 a 1943. La situación en 1944”. Las perspectivas en Jornadas 48. Cuestiones Industriales de México, COLMEX, México, 1945, pp.55. 393
Keremitsis, Dawn. Op.cit, 1973, pp. 20-23.
394
Gamboa Ojeda, Leticia, Op.cit, 1985, pp. 40.
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desde sus inicios apostaron por la producción mecanizada a gran escala, la cual necesitó de grandes extensiones de tierra y prácticamente la fundación de nuevos poblados, como el municipio de Tenango de Río Blanco y de Santa Rosa Necoxtla. Otras regiones textiles importante del país fueron Guadalajara, Jalisco y Querétaro, Querétaro. Guadalajara –durante el periodo de estudio- fue la segunda ciudad más poblada del país después del DF. Contaba con la infraestructura urbana y el crecimiento demográfico que la industria necesitaba para desarrollarse, y además, debido a su situación geográfica, permitía a las empresas distribuir sus mercancías hacia el noroeste (Durango, Zacatecas, Colima, Nayarit, Sinaloa) y el centro de México (Guanajuato, México DF).395 Querétaro por su parte, también cuenta con una larga tradición en los obrajes y una ubicación privilegiada, que le han permitido -desde la Reforma- abastecer de textiles al mercado de Guanajuato y la Ciudad de México. En el Cuadro 1 se enlistan el total de fábricas de tejidos de algodón por Estado. Los estados se encuentran clasificados según su ubicación geográfica en el país: centro, norte, golfo y pacifico. De acuerdo a este cuadro en 1850, Puebla tuvo 17 fábricas de tejidos de algodón, en 1898-1899 fueron 21, en 1910-1911 fueron 44 y en 1926-1927, 51. Sin embargo a pesar de contar con numerosas fábricas, estas siempre tuvieron menor capacidad de producción, comparadas con las del Distrito Federal y las de Veracruz. Tan solo por citar un ejemplo, en 1843 la fábrica de la Constancia Mexicana poseía 7,680 husos, mientras que Cocolapan en Veracruz, poseía 11,784 husos y La Magdalena en el Distrito Federal 8,472. Este tipo de información ha sido referida y analizada por diversos estudiosos del tema, sin embargo la siguiente inserción ha sido una construcción propia con el fin de destacar la región objeto de estudio
395
Guadalajara contaba con agua y electricidad desde 1883, así como teléfono y transporte eléctrico desde 1896. Arias, Patricia. Op.cit., 1993, pp. 75-.109.
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Cuadro 1. Fábricas de Hilados y tejidos de algodón en México, 1850-1927 ESTADOS 1850a 1898-1899 1902-1903 1907-1908 1910-1911 1926-1927 CENTRO Distrito Federal 7 13 9 14 12 23 Guanajuato 1 6 5 6 6 4 Hidalgo 2 3 3 2 2 Mexico 6 9 8 7 7 Puebla 17 21 32 38 44 51 Queretaro 1 1 1 1 1 2 San Luis Potosí 1 2 1 1 1 Tlaxcala 9 9 8 8 8 Suma 26 59 70 79 81 98 NORTE Coahuila 1 9 11 8 9 9 Chihuahua 3 4 4 4 3 Durango 5 10 10 8 7 3 Nuevo Leon 4 4 4 4 4 Sonora 1 1 1 1 1 1 Tamaulipas 1 Suma 7 27 30 25 25 21 GOLFO Veracruz 8 10 12 14 14 11 PACIFICO Colima 3 3 2 2 Chiapas 1 1 1 1 1 Guerrero 1 2 2 2 Jalisco 4 6 6 5 5 5 Michoacan 5 5 5 5 3 Nayarit 4 4 3 1 2 Oaxaca 3 3 3 3 1 Sinaloa 3 3 3 2 1 Suma 4 26 27 24 21 13 Resumen Centro 26 59 70 79 81 98 Norte 7 27 30 25 25 21 Golfo 8 10 12 14 14 11 Pacifico 4 26 27 24 21 13 TOTAL 45 122 139 142 141 143 Fuente: Elaboración propia con datos de Estadísticas Económicas del Porfiriato y Soberanis (1988), p.44 AGN y La Industria, el comercio y el trabajo en México 1925-1927. Tomo I-V de la Secretaria de Industria, Comercio y Trabajo, pp.58. AGEV a. Para este año, se agrupan las fábricas del Estado de México en las del DF y las de Tlaxcala con las de Puebla.
236
Entre 1850, el Distrito Federal tenía 7 fábricas, en 1898 eran 13, de 1910-1911 fueron 12 y en 1926-1927 fueron 23. Estas manufacturas también tuvieron menor capacidad instalada que las fábricas ubicadas en Veracruz. Por ejemplo Río Blanco en 1912 tenía 42,568 husos y 2654 telares; mientras que la Magdalena tenía 17,128 husos y 667 telares. Veracruz en 1850 tenía 8, en 1898 eran 10, y de 1910-1911, fueron 14, y 19261927, disminuyeron a 11. El Estado de Veracruz con menor número de fábricas fue capaz de obtener un mayor volumen de producción de textiles de algodón que Puebla y el Distrito Federal porque sus fábricas fueron de mayores tamaños y más eficientes económicamente hablando. Eficiencia que como ya se ha dicho fue resultado de la amplitud de la red de intereses de los empresarios. Querétaro y Jalisco, por su parte, mantuvieron en promedio 1 y 5 fábricas a lo largo de casi todo periodo. A pesar de esto, el volumen de ventas y capacidad instalada de las fábricas situadas en estos territorios fueron mayores que las de la mayoría de las fábricas poblanas y del D.F. Por ejemplo, la fábrica Hércules ubicada en La Cañada en Querétaro, de 1850 a 1879 poseía 500 telares mientras que La Constancia Mexicana solo contaba con 130 y la Magdalena con 326. El total de fábricas textiles en cada uno de los Estados anteriores durante el periodo de 1850 a 1926, se representa en la gráfica 1. En ella se puede apreciar más claramente que, Puebla siempre mantuvo una tendencia al alza en el crecimiento de su industria textil, mientras que el D.F. mostró altibajos y Veracruz, Querétaro y Jalisco casi se mantuvieron constantes, con el mismo número fábricas.
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Gráfica 1. Número de fábricas de tejidos de algodón de los principales Estados productores, 1926-1927. 60 50 40 30 20 10 0 1850
1898
Distrito Federal
1902 Puebla
1907 Queretaro
1910 Veracruz
1926 Jalisco
Para el periodo de 1889-1930, no se cuenta con la información detallada de la capacidad instalada de cada una de las fábricas textiles ubicadas en los Estados de Puebla, Veracruz, Jalisco, Querétaro y el D.F. Sin embargo se conoce el total de maquinaría
así como el capital invertido en maquinaria y edificios de las
fábricas de tejidos de algodón en cada Estado para 1926-1927. Esta información se describe en el del cuadro 2.
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Cuadro 2. Maquinaría, fuerza motriz y capital invertido en la Industria textil de algodón en México 1926-1927.
CAPITAL
TOTAL
OTRAS
INVERTIDO EN
VAPOR
HIDROELECTRICA
HIDRAULICA
FUERZA MOTRIZ EMPLEADA
TRICOTOSAS
RECTILINEAS
CIRCULARES
ESTAMPADORAS
TELARES
HUSOS
MAQUINILLAS PUNTO TROXILES TRAMA
TROXILES DE PIE
ENGOMADORES
URDIDORES
VELOCES
MANUARES
CARDAS
BATIENTES
MAQUINARIA
MAQUINARIA Y
ESTADOS DEL EDIFICIOS CENTRO Distrito Federal 43 349 56 230 61 24 272 91 119,741 3,466 12 921 62 66 815 7,152 905 8,872 $ 9,639,421.88 Guanajuato 5 37 9 18 13 3 20 3 8,364 368 200 298 498 $ 1,350,692.21 Hidalgo 6 40 8 30 7 4 24 11 14,914 533 4 60 1,060 1,120 $ 746,897.30 Mexico 13 137 27 85 20 10 86 46 44,674 1,408 853 360 1,213 $ 1,292,245.70 Puebla 116 720 106 454 122 55 414 248 240,324 9,315 11 450 5,106 8,840 312 14,258 $ 26,745,704.02 Queretaro 7 58 9 31 10 4 40 15 17,876 647 224 80 615 40 735 $ 1,111,029.11 San Luis Potosí 4 3 3 $ 4,300.00 Tlaxcala 16 118 18 70 19 10 63 40 34,916 1,474 4 745 1,293 2,038 $ 2,891,167.56 Suma 206 1,459 233 918 252 110 919 454 480,809 17,215 31 1595 62 66 7,859 19,621 1,257 0 28,737 $ 43,781,457.78 NORTE Coahuila 13 140 56 96 32 14 93 66 45,466 1,802 2 905 28 315 1,236 2,484 $ 4,579,960.21 Chihuahua 5 33 5 14 5 4 14 8 7,372 321 70 300 20 390 $ 515,326.77 Durango 7 39 23 21 9 3 23 16 11,804 380 29 29 120 570 15 705 $ 886,647.46 Nuevo Leon 7 44 10 34 15 6 35 24 18,780 823 30 445 425 150 1,050 $ 1,679,960.60 Sonora 3 21 4 11 6 2 12 6 5,592 170 40 75 200 315 $ 789,964.90 Tamaulipas 96 80 80 $ 127,658.96 Suma 35 277 98 176 67 29 177 120 89,014 3,592 2 29 29 0 1,165 1423 850 1,586 5,024 $ 8,579,518.90 GOLFO Veracruz 48 399 51 278 73 32 277 171 161,216 6,446 13 2,840 6,124 15 8,979 $ 18,314,560.81 PACIFICO Colima 4 11 5 6 2 704 4 30 100 130 $ 35,000.00 Chiapas 2 9 4 6 2 1 6 4 2,788 91 72 72 $ 214,265.89 Guerrero 3 23 6 15 5 2 15 10 7,658 252 273 273 $ 771,697.18 Jalisco 14 109 15 73 22 13 83 51 47,966 1,850 5 550 1,316 1,866 $ 2,764,353.04 Michoacan 14 55 10 36 9 5 35 14 17,940 595 26 4 780 780 $ 1,229,315.59 Nayarit 10 56 15 31 8 4 27 23 12,304 332 348 60 408 $ 500,000.00 Oaxaca 4 32 3 12 6 2 21 7 8,644 331 340 340 $ 539,571.93 Sinaloa 3 16 11 4 1 7 3 3,150 82 200 200 $ 250,000.00 Suma 54 311 53 189 56 28 200 114 101,154 3,537 5 26 4 0 2,321 1,476 272 0 4,069 $ 6,304,203.63 Resumen Centro 206 1,459 233 918 252 110 919 454 480,809 17,215 31 1,595 62 66 7,859 19,621 1,257 0 28,737 $ 43,781,457.78 Norte 35 277 98 176 67 29 177 120 89,014 3,592 2 29 29 0 1,165 1423 850 1,586 5,024 $ 8,579,518.90 Golfo 48 399 51 278 73 32 277 171 161,216 6,446 13 2,840 6124 15 8,979 $ 18,314,560.81 Pacifico 54 311 53 189 56 28 200 114 101,154 3,537 5 26 4 2,321 1476 272 4,069 $ 6,304,203.63 Suma 343 2,446 435 1,561 448 199 1,573 859 832,193 30,790 51 1,650 95 66 14,185 28,644 2,394 1,586 46,809 $ 76,979,741.12 Fuente: Elaboración propia con datos de, La Industria, el comercio y el trabajo en México 1925-1927. Tomo I-V de la Secretaria de Industria, comercio y trabajo, pp.60-61. AGEV
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De acuerdo a la presente información, Puebla poseía más de 240,000 husos y 9,315 telares, si consideramos que en el Estado existían 51 fábricas, entonces el promedio de husos y telares por fábrica era de 4,712 y 183 respectivamente. En el caso del D.F. este tenía 23 fábricas y 119,741 husos y 3,466 telares, en promedio 5,206 husos y 150 telares por manufactura. Por su parte Veracruz con tan solo 11 fábricas poseía 161,216 husos y 6,446 telares. En promedio cada fábrica en Veracruz poseía 14,656 husos y 586 telares. Con estos datos es posible identificar que la capacidad instalada de las fábricas en Veracruz, en especial las de CIDOSA y CIVSA en la región de Orizaba era 30% mayor que la de las fábricas de Puebla y D.F. En el caso de Jalisco, este contaba con 47,966 husos y 1,850 telares en 5 fábricas, es decir tuvo un promedio de 9.593 husos y 370 telares. Mientras que Querétaro tuvo en promedio 8,938 husos y 323 telares en sus dos fábricas activas. Estos números estaban por arriba del promedio de Puebla y el Distrito Federal, pero por debajo en un 34% del promedio de Veracruz. Respecto al capital invertido en maquinaria y equipo en 1926-1927, Puebla tuvo el 35% del total nacional de capital invertido en la industria textil del algodón ($26, 745, 704.02) en 51 fábricas. El D.F. contaba con el 26% ($9, 639, 421.88) en 23 fábricas. Jalisco el 4% ($2,764,353.04) en 5 fábricas y Querétaro el 1.44% ($1,111,029.11) en dos fábricas. Veracruz, tenía el 24% del capital ($18, 314, 560.81) en 11 manufacturas. Esto porque las fábricas de Veracruz, principalmente: CIDOSA y CIVSA, eran de grandes dimensiones, utilizaban mayormente la energía hidroeléctrica y contaban con maquinaria más moderna que las de Puebla. Esta maquinaría les permitió las fábricas de CIDOSA y CIVSA elaborar mayormente telas finas estampadas que iban dirigidas a las clases altas. En el caso de las fábricas ubicadas en el Estado de Puebla, estas confeccionaban principalmente mantas para las clases bajas. Los productos elaborados por las fábricas de hilados y tejidos de algodón en las diferentes regiones del país de 1926 y 1927, se enlistan en el Cuadro 3. En el se señala en kilogramos la producción de géneros de manta, tejidos con hilo de color, blanqueados, 240
estampados, teñidos, driles, lomas y de otros productos como toallas, bonetería y cobertores. En la información contenida en el mismo cuadro, se puede apreciar que los géneros que más se elaboraron en México de 1926-1927 fueron la manta cruda para mostrador (39% del total de la producción de géneros), los tejidos con hilo de color (20%), los estampados (15%), los blanqueados (12%) y los teñidos (7%). Puebla fue el principal proveedor de mantas crudas. El DF de tejidos de hilo de color y estampados; y Veracruz de blanqueados y teñidos. Jalisco y Querétaro produjeron mayormente manta e hilaza. Respecto a los volúmenes de venta, Puebla tenía el 32%, el Distrito Federal el 22%, Veracruz el 18%, Jalisco el 4% y Querétaro el 3%, del total nacional. Para completar la información analizada, se debe considerar el personal ocupado, el número de fábricas y el total de producción de la industria textil de algodón en México de 1926 a 1939 expuestos en el Anexo F, y que aquí se representan en la Gráfica 2. En ella se observa que de 1926 a 1935, Veracruz se mantuvo por encima del D.F. elaborando más del 20% del total de textiles en el país, mientras que Puebla casi el 30% y el D.F. el 17%. Sin embargo, a partir de 1937, Veracruz sufrió una caída en su participación -disminuyó al 18%, pero aún así fue mayor que la del D.F.-, esto porque como se mencionó anteriormente, de 1931 a 1936, los propietarios de la fábricas CIDOSA, así como otras compañías textiles establecidas en Veracruz, redujeron su volumen de producción y su capital invertido debido a la caída en ventas por los efectos de la crisis del 29 y por el cambio del padrón de acumulación que se traslado de los textiles al petróleo.
241
Cuadro 3. Tipos de tejidos de algodón elaborados en México, 1926-1927. KILOGRAMOS DE GENEROS ESTADOS
kg. de algodón
Hilaza devanada Manta Cruda
consumido
para la venta
Tejidos con Blanqueados hilo Estampados Teñidos
Driles
KILOGRAMOS DE OTROS PRODUCTOS Lonas
Varios
SUBTOTAL
Toallas
Cobertores Varios
Boneteria SUBTOTAL PRODUCCION Ventas realizadas
para mostrador de color
CENTRO Distrito Federal 2,832,698 283,881 216,324 782,882 191,578 732,808 66,631 123,700 46,990 5,624 2,166,537 Guanajuato 356,836 16,384 132,878 11,321 94,268 238,467 Hidalgo 295,616 43,174 16 28,874 63,038 14,988 68,271 14,370 372 189,929 Mexico 672,082 27,763 323,927 163,987 487,914 Puebla 6,654,769 897,265 3,121,972 527,417 372,498 609,566 207,792 36,933 4,876,178 Queretaro 596,504 97,394 432,765 432,765 San Luis Potosí 1,610 1,120 266 1,386 Tlaxcala 1,078,055 20,959 572,009 95,571 2,242 189,543 65,355 34,184 2,843 961,747 Suma 12,488,170 1,386,820 4,799,891 1,611,172 629,356 1,546,905 408,049 172,254 46,990 140,306 9,354,923 NORTE Coahuila 969,657 139,067 465,917 26,559 112,694 79,054 43,275 866,566 Chihuahua 301,019 55,438 209,677 3,633 268,748 Durango 115,359 375 52,617 424 53,041 Nuevo Leon 405,632 36,739 182,585 8,326 6,781 37,296 36,328 308,055 Tamaulipas 25,454 25,454 25,454 Suma 1,817,121 375 283,861 858,179 34,885 112,694 85,835 106,025 0 40,385 1,521,864 GOLFO Veracruz 3,278,046 123,915 173,021 346,882 967,918 543,746 527,105 243,321 7,624 2,809,617 PACIFICO Chiapas 25,760 20,013 1,270 362 21,645 Jalisco 805,774 81,902 254,839 24,096 134,427 58,620 60,734 97,700 11,003 14,967 656,386 Michoacan 287,115 26,505 142,782 37,726 419 24,599 205,526 Nayarit 178,307 140,629 10,432 2,797 153,858 Oaxaca 95,955 36,485 41,285 1,922 544 80,236 Sinaloa 126,846 68,116 30,360 101,476 Suma 1,519,757 108,407 594,748 172,493 145,278 58,620 60,734 124,583 44,704 14,967 1,219,127 Resumen Centro 12,488,170 1,386,820 4,852,508 1,611,172 629,356 1,546,905 408,049 172,254 46,990 140,306 9,354,923 Norte 1,817,121 375 231,244 858,179 34,885 112,694 85,835 106,025 0 40,385 1,521,864 Golfo 3,278,046 123,915 173,021 346,882 967,918 543,746 527,105 243,321 7,624 2,809,617 Pacifico 1,519,757 108,407 594,748 172,493 145,278 58,620 60,734 124,583 44,704 14,967 1,219,127 TOTAL 19,103,094 1,619,517 5,851,521 2,988,726 1,777,437 2,261,965 1,081,723 646,183 91,694 203,282 14,905,531 % 39% 20% 12% 15% 7% 4% 1% 1% 100% Fuente: Elaboración propia con datos de, La Industria, el comercio y el trabajo en México 1925-1927. Tomo I-V de la Secretaria de Industria, Comercio y Trabajo,
TOTAL
47,599
21,293 28,068
167,104
1,555
19,912 1,535 19,585
3,970
1,581
9,873
72,240 24,240
53,124
42,613
12,486 71,720
982
263,584
9,139
pesos corrientes
255,908 29,603 21,140 0 87,664 24,240 0 12,486 431,041
2,706,326 284,454 254,243 515,677 5,861,107 554,399 1,386 995,192 11,172,784
7,881,849.92 604,557.84 646,636.90 772,571.83 14,146,709.42 1,246,075.74
10,121
2,152,918.17 643,073.02 107,834.73 876,136.25 4,732.14 3,784,694.31
2,795,042.23 28,093,443.88
1,691 25,815
7,852
18,985
516
28,528 26,331
1,498
27,506
16,991
18,985
64,980
876,687 268,748 81,944 334,386 25,454 1,587,219
606
36,464
37,070
2,970,602
9,889,189.10
21,645 738,288 236,455 153,858 80,236 101,476 1,331,958
42,022.27 1,730,277.84 408,384.82 518,523.92 186,659.75 248,158.09 3,134,026.69
11,172,784 1,587,219 2,970,602 1,331,958 17,062,563
28,093,443.88 3,784,694.31 9,889,189.10 3,134,026.69 44,901,353.98
885
308
3,231
4,424
0
308
3,231
4,424
53,124 42,613 1,498 27,506 606 36,464 885 56,113 106,583 10% 20% pp.59,64-65. AGEV
71,720 16,991
263,584 18,985
308 89,019 17%
3,231 285,800 53%
431,041 64,980 37,070 4,424 537,515 100%
885
242
Gráfica 2. Participación de los Estados en la producción de textiles de algodón en México 1926 a 1939. 35% 30% Distrito Federal
25%
Jalisco 20%
México
15%
Nuevo León Puebla
10%
Querétaro
5%
Veracruz
0% 1926
1930
1935
1937
1939
A pesar de la caída de producción de CIDOSA, la industria textil de algodón en Veracruz se conservó dentro las cinco principales industrias del Estado. Veracruz siguió figurando como uno de Estados con mayor producción textil del país, tal como se señala en los datos del Primer censo industrial en México de 1930 para los Estados de Veracruz, Puebla, Querétaro, Jalisco, Nuevo León, Estado de México y el D.F, que se encuentran en el anexo E. De acuerdo a los datos del Censo de 1930, Veracruz fue el segundo Estado con mayor producción industrial, sólo por debajo del Distrito Federal, pero por encima de Nuevo León, Puebla y Jalisco.396 En todos estos Estados, exceptuando Nuevo León, sus principales industrias fueron la de los alimentos y los textiles de algodón. Mientras que en Nuevo León, fueron la de los alimentos y la metalurgia. La región de Orizaba y el Estado de Veracruz en general, después de 1935 no volvieron a figurar dentro de las zonas industriales más importantes del país. Esto debido a la falta de renovación de inversiones, pero principalmente a que a partir de 1940 “los textiles disminuyeron su producción y otras actividades económicas desplegaron su espacialidad en el territorio veracruzano. Entre ellas se destacaron, 396
Biblioteca Lerdo de Tejada, SHCP. Archivos económicos, Industrias textiles en México, El Nacional, 23/4/1933.
243
la construcción ferroviaria, la extracción de petróleo, el azúcar, cerveza, café, tabaco, siderúrgica, cemento, electricidad y papel”.397 De hecho aunque los socios de CIDOSA invirtieron grandes capitales ($2,550,000 en 1889, $26,574,175.08 en 1911 y $25,138,803.32 en 1920) en la región, no convirtieron a Orizaba en un polo de desarrollo398 para el Estado de Veracruz, como lo fue Monterrey para Nuevo León. Esto fue debido a la que después de 1930 no renovaron su maquinaría y trasladaron sus capitales a otros rubros más redituables como el petróleo y los bienes raíces.399
CIDOSA en el Valle de Orizaba Orizaba fue una ciudad manufacturera con discreto crecimiento durante las primeras dos décadas del siglo XIX. En este tiempo tenía solo ingenios de azúcar y aguardiente, una fábrica de puros y cigarros que funcionaba con el estanco de tabaco, 3 molinos de harina de trigo, 4 tocinerías, 8 tenerías que curtían pieles, herrerías, imprentas y varias hilanderías artesanales.400. Muchas de esas actividades se vieron potenciadas por todas las actividades de carácter industrial mecánico como fueron las empresas textiles. En este punto parece importante resaltar la ubicación geográfica del conjunto de empresas que formaban CIDOSA con la intención de apreciar el patrón de su localización, si es que lo hubo. La primera manufactura textil situada en la región fue Cocolapan. Esta fue fundada en 1836 por Lucas Alamán y los hermanos Legrand. 397
García Aguirre, Feliciano. Op.cit., 1998, pp.101. Respecto a los polos de desarrollo consultar las obras de Francoise Perroux: La economía del Siglo XX y Técnicas cuantitativas de planificación. 399 En este punto las polémicas abren un espacio de discusión todavía fértil entre los historiadores. Por ejemplo Cerutti, afirma que el Estado de Veracruz y en particular Orizaba fue un proyecto de ciudad industrial mal lograda, porque: 1) no pudo convertirse en un centro manufacturero como Monterrey debido a que no desarrolló una industria metal-mecánica que fue el siguiente paso del desarrollo capitalista, 2) no estaba cerca del mercado de Estado Unidos, 3) no utilizó las nuevas fuentes de energía como el gas y el petróleo, pero sobre todo porque no incluyó a nuevos miembros en sus redes y porque no se anticipó a los efectos de las leyes que surgieron después de la revolución como lo hizo Monterrey con sus sindicatos blancos y asociaciones empresariales. Cerutti, Mario. Op.cit., 2000, pp.124. En este sentido nosotros hemos podido apreciar a lo largo de nuestra investigación que la red de inversionistas y propietarios de CIDOSA también poseían intereses en la industria metal mecánica de Monterrey por lo menos hasta el Porfiriato. La apreciación de Cerrutti es importante porque al comparar la región de Orizaba con la de Monterrey pone el acento en la importancia de la industria metal.mecánica y la cercanía un mercado mayor como el de EU, para afirmar que Orizaba fue una región mal lograda. 400 Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002. 398
244
Se ubicó en una antigua fábrica de papel localizada en los suburbios de Orizaba, en la ribera izquierda del río Blanco y contigua a la estación del ferrocarril. Desde su inauguración contó con maquinaría y procesos de trabajo similares a los de las fábricas inglesas de textiles de algodón. En la década de 1840, fue la hilandería más grande del país, con 600 empleados que trabajaban en tres turnos, y operaban 11,784 husos y 446 telares. En ese mismo año las demás fábricas tenían en promedio 8,000 husos, 100 telares y 400 empleados. En 1882 se instaló la segunda fábrica textil, Cerritos, propiedad de Enrique L. Wiechers de ascendencia alemana. Cerritos se ubicó en el barrio de San Juan de Cerritos, en un solar que había sido estanco de tabaco. Sus terrenos estuvieron formados por los antiguos ranchos de Cerritos y El Cristo. Contaba con 400 trabajadores, 5000 husos y 181 telares. Además tenía turbinas que eran movidas por las aguas del río Orizaba, canalizada a través de un acueducto.401 La tercera fábrica de la región fue San Lorenzo. Esta fue propiedad del empresario norteamericano Tomás Braniff y fue inaugurada en 1883; se ubicó en los predios conocidos como “El ingenio”, en la villa de Nogales, a 30 Kilómetros al poniente de Orizaba. Estaba situada al lado de la vía férrea y muy cerca del río Blanco. Su edificio constaba de un departamento de hilatura en la planta baja y uno de tejido en la plata alta. También contaba con un departamento de acabado en un local aparte.402 En 1887 fue la más grande del Estado, operando con 11,088 husos y 300 telares. Las siguientes fábricas de la región, fueron Río Blanco propiedad de CIDOSA y Santa Rosa propiedad de CIVSA. La fábrica de Río Blanco se estableció en el municipio de Tenango en 1892 y la fábrica de Santa Rosa en Necoxtla en 1898. Ambas fueron las fábricas textiles más grandes de México de 1900- 1930 con una capacidad de producción comparable a las manufactureras europeas de principios del siglo XIX.403 En 1912 contaban, cada una, con más de 40,000 husos y más de 1,000 telares. Sus inversiones superaban el monto de $1,000,000 de pesos.
401
Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués, Querétaro, 1990, pp. 59. 402 Ídem. 403 García, Bernardo, Op.cit. 1980.
245
Habiendo hecho la comparación con otras compañías textiles del país, tal vez convenga para tener presente aún más la importancia de CIDOSA, compararla con su entorno más inmediato. Si analizamos los datos de volumen de producción, materia prima, maquinaria, número de obreros, ubicación y propietarios de las principales fábricas textiles del Estado de Veracruz entre los años de 1850 a 1912, las principales fábricas textiles de algodón se ubicaron en las regiones de Jalapa y Orizaba, de ellas, destacaron Cocolapan, San Lorenzo y Cerritos. Estas manufactureras aún antes de ser propiedad CIDOSA fueron las de mayor número de obreros, maquinaría, volumen de producción e inversión. Una vez fundadas las fábricas de Río Blanco (1892) y Santa Rosa (1896), fueron las de mayor capacidad productiva. Como se puede apreciar en el cuadro siguiente, por el número de husos, salarios, inversión y número de obreros las fábricas de CIDOSA en conjunto fueron las más importantes en el conjunto estatal.
246
Cuadro 4. Principales fábricas textiles en el Estado de Veracruz 1850-1912. Fábrica
Ubicación Dueño Municipio
Algodón (quintales)
Productos manta hilaza
No. de obreros
Raya o Jornal
Valor de Inversión
Husos
Telares Potencia
1850 Cocolapan
Manuel Escandón
7,625
699,828
600 $
11,784
446 Agua
Bella Unión
Orizaba
Viudad de Elías
1,508
52,017
135,200
$
285,400 $ 18,200
890,000
7,500
20 Agua
Libertad Prosperidad Tuxteca Jalapa
Bernando Sayago
1,444
104,000
$
8,320
1,800
25 Agua
832
64,880
51 $
212,480
1,800
20 Agua
Victoria
Francisco Fernandez
312
28,800
$
3,120
600
22 Agua
Industrial
Jalapa
José Welsh
3,120
286,000
$
33,920
3,000
Agua
Lucas Martín Nuestra señora del Rosario 1887 Cocolapan
Jalapa
Luis García
1,612 728
147,420 68,640
$ $
7,800 4,680
3,064 1,584
Agua Vapor
Orizaba
Escandon hmos.
6,000
60,000
San Lorenzo
Nogales
Tomas Braniff
4,500
100,320
6,000- 8,000 nd
200,000
$ 178,200.00
9,840
200 Agua
698 5.46 ctvos
$ 240,527.37
400 4 a 3 reales
$ 400,000.00
11,088 5,000
300 vapor 181 Agua
Cerritos de San Juan Orizaba
Cia. Manufacturera Cerritos
Industrial jalapeña
Jalapa
Agustín Cerdán
La probidad
Jalapa
E. Manuel y f. Forfilio
Molino de Pedreguera Lucas Martin
Jalapa
A. Sayago
Banderilla
La Purisima en las Puentes 1912 Cocolapan
Coatepec
Carlos G. Femel Rafael G. Femel Gas Castillo y G.
Orizaba
CIDOSA
5,565
188,080
602
San Lorenzo
Nogales
CIDOSA
8,276
269,400
642
$ 0.56 a 2.5
$
832,000
Cerritos de San Juan Orizaba
CIDOSA
6,534
170,981
465
$0.56 a 2
$
600,000
7,576
125 Hidroeléctrica
Río Blanco
Tenango
CIDOSA
18,614
289,793
2,575 $ 0.56 a 2.5
$ 2,000,000
42,568
1,685 Hidroeléctrica
Santa Gertrudis
Orizaba
Cía. Manufacturera de Yute
0.65
$
Santa Rosa
Necoxtla
CIVSA
281,685
$ 657 1,560 $
1.00
$ 1,300,000
La Claudina
Perote
Cándido Pérez y cía
Industrial jalapeña
Jalapa
Pantaleon Cerdan
La probidad
Jalapa
E. Manuel Sucs
60
San bruno
Jalapa
Zaldo hmnos y cía.
La Purisima
Coatepec
Zaldo hmnos y cía.
84 $ 94 $
Lucas Martin
Banderilla
Guillermo Pasquel
75 $
2,000 1,200 800 a 900 30,000
nd
400 44 a 50 ctvos
35,000
12,000
20,000 13,000
1,375
12,000
3,000 46 a 50,000
14,701
130 3 reales
$ 100,000.00
3,500
Vapor y agua
40 4 reales a 12
$ 25,000.00
154 3 reales a 12
$ 70,000.00
2,045 1,000
Agua Agua
$ 120,000.00
1,400
Agua
120/130 18.75 ctvos a $ 200,000.00 5 pesos
4,176
Agua
52 37 ctvos
110 $2.5 a 3 0.75 90 $
20,048
872 Hidroeléctrica
19,048
1,036 Hidroeléctrica
615,000
Eléctrica 40,184
1,410 Hidroeléctrica
$
110,000
$
48,600
Vapor Hidráulica
$
45,000
Hidráulica
0.60
$
35,000
Hidráulica
1.00
$
180,000
0.62
$
58,788
Hidroeléctrica Hidráulica y vapor
Fuente: AGN, Cuadro 1. Estado que manifiesta las fabricas de hilados y tejidos de algodon de la República Mexicana , 1850 en Soberanis (1988), p. 44 y Depto. Del trabajo Caja 49 Biblioteca Lerdo de Tejada, SHCP. Archivos económicos, Industrias textiles en Mexico 08/Caja7 /FOLL24
Veracruz reseña geográfica y estadistica. De Ch.Bouret, México,1912. Lámina 4, p.4
247
Volvamos un poco la mirada al patrón de localización de las fábricas pertenecientes al objeto de estudio. Con la finalidad de hacernos de una mirada esquemática más clara de este importante fenómeno económico, se empleara el mapa construido por Bernardo García Díaz (2007: pp 56). Las fábricas no siguieron un patrón preconcebido ni muchos menos planificado, más bien se ubicaron a los lados de la vía de transporte más eficiente disponible en ese momento, como el ferrocarril. Las decisiones que condujeron a la ubicación de las fábricas fueron construyendo un corredor industrial sin proponérselo. Corredor que fue gestando una trama urbana que no seguía los patrones típicos de las ciudades coloniales, no obstante sigue siendo materia de estudio e interés. Gracias a ello es posible apreciar en la actualidad las dificultades que debieron sortear la construcción de una importante región en el Estado de Veracruz.
248
Mapa 2. Localización de las fábricas textiles en la región del Valle de Orizaba
A Veracruz
2
A Veracruz
1
'' Las Fábricas Textiles Del Valle De Orizaba '' 3
Ferrocarril Carretera Población
4 El Río o nc Bla
5
Fábrica:
Ubicación:
1. 2. 3. 4. 5. 6. 7.
Orizaba Orizaba Orizaba Río Blanco Nogales Nogales Santa Rosa Necoxtla
Santa Gertrudis Cerritos Cocolapan Río Blanco Mirafuentes San Lorenzo Santa Rosa
6
7
A México
A México
Fuente: Bernardo García Díaz (2007: pp 56)
249
Derrama económica De acuerdo a Rivera Carbó, los grandes capitales detrás de la industria textil de la primera mitad del siglo XIX no tenían interés en la región de Orizaba, más que en lo que podía afectar directamente al desempeño de su empresa.404 Lo mismo sucedió con los empresarios textiles que fundaron CIDOSA y CIVSA. Estos vivieron e invirtieron sus capitales en negocios en la Ciudad de México o en Francia, y sólo fundaron en Orizaba las fábricas textiles, para aprovechar las concesiones del gobierno y los recursos hidráulicos de la región. Como se ha destacado antes, estos empresarios poco visitaban las fábricas, solo acudían a los Consejos de Administración en la Ciudad de México y dejaban su operación en manos de los directores y gerentes, algunos de ellos socios minoritarios o parientes como fue el caso de Casimiró André, Víctor Léautaud, Víctor y Eduardo Garcín. Víctor Garcín hermano de Eduardo Garcín fue tal vez el que más sobresalió porque era el que más negocios poseía y por los incidentes de protestas obreras conocidos como la Huelga de Río Blanco, donde varios obreros incendiaron las tiendas de este empresario en enero de 1907. Él mismo tenía la concesión de la tienda de raya de Río Blanco, una panadería, un molino de maíz, tres pulquerías (“Río Blanco”, “El Toreo”, “La Competencia”), una cantina (“La Vanguardia”) y un Billar (“Los pasos de Tenango”).405 La ubicación, el capital y los impuestos que pagaba por estos negocios se pueden apreciar en el Cuadro 5.
404
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002, p.301. Archivo del Municipio de Río Blanco, Pagos por Derechos de patentes. Ramo Legumbres y carbón y ramo de pulque, 17/12/1886. 405
250
Cuadro 5. Negocios que poseía Víctor Garcín en Tenango, Veracruz, 1901. Fecha
Negocio
Capital
Dirección 24,000.00 Frente a la fábrica
Municipio Tenango
Pago por derecho de patente $ 15.00
01/11/1901 Tienda Río Blanco
$
12/11/1901 El Toreo
$
300.00 Calle real
Tenango
$
15.00
12/11/1901 La competencia
$
190.00 Calle principal
Tenango
$
15.00
12/11/1901 Los paseos de Tenango $
150.00 Calle real
Tenango
$
15.00
12/11/1901 La Vanguardia
$
150.00 Calle principal
Tenango
$
15.00
12/11/1901 Panadería
$
$
3.00
1,000.00
15/11/1901 Molino de maíz $ Fuente: Archivo municipal de Río Blanco, Pagos por derecho de patente, Ramo Legumbres y carbon y ramo pulque
1.50
Otros negocios donde participó fue la sociedad en comandita simple Manuel Diez y cía. Ésta fue fundada en 1907 y tuvo un capital de $100,000 y se encargaba de administrar la tienda de abarrotes y ropa, “Casa Diez”. El capital que fue aportado por Manuel Diez ($30,000), Víctor Garcín ($65,000) y José Garcín ($5,000). Víctor Garcín contribuyó con mayor monto dado que era el socio comanditario y los demás los comanditados.406 Los datos de socios, capital aportado y tipos de sociedades en que se organizó Manuel Diez y cía., del periodo de 1907 a 1929 se enlistan en el Cuadro 6. En él se observa que dicho empresario abandonó esta sociedad como resultado de los incidentes de 1907.
406
Registro Público de la Propiedad de Orizaba (RPPO), Libro de comercio, febrero de 1907, Escritura 309.
251
Cuadro 6. Evolución organizativa de Manuel Diez y cía. 1907-1933. Datos de la sociedad
Nombre
Datos de los socios Lugar de Domicilio Capital
Porcentaje
Orizaba Orizaba D.F. D.F.
Manuel Diez José Garcín Casimiro André Manuel Morante Diez Sebastian Gutierrez Diez Víctor Leautaud Grimaldo Morante TOTAL
España Francia Francia España España Francia España
Orizaba D.F. D.F. Orizaba Orizaba Orizaba Orizaba
$ $ $ $ $ $ $ $
110,000 120,000 130,000 20,000 30,000 10,000 420,000
15% 15% 18% 20% 12% 11% 9% 100%
Manuel Diez José Garcín Casimiro André Manuel Morante Diez Víctor Leautaud Grimaldo Morante Baltazar Mroante Diez TOTAL
España Francia Francia España España Francia España
Orizaba D.F. D.F. Orizaba Orizaba Orizaba Orizaba
$ $ $ $ $ $ $ $
90,000 90,000 90,000 50,000 25,000 25,000 10,000 380,000
15% 15% 10% 20% 14% 19% 7% 100%
Director Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor
Manuel Diez José Garcín Casimiro André Manuel Morante Diez Víctor Leautaud Grimaldo Morante Baltazar Mroante Diez TOTAL
España Francia Francia España España Francia España
Orizaba D.F. D.F. Orizaba Orizaba Orizaba Orizaba
$ $ $ $ $ $ $ $
65,000 78,000 78,000 50,000 25,000 25,000 10,000 331,000
12% 12% 12% 25% 15% 8% 16% 100%
Director Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor
Francia Francia España España España
D.F. D.F. Orizaba Orizaba Orizaba Orizaba Orizaba
$ $ $ $ $
100,000 100,000 107,000 58,000 35,000
12% 12% 25% 22.5% 22.5% 4% 2% 100%
Nombre Tienda Fundación Sociedad Duración
Manuel Díez y cía. Casa Diez feb-07 Comandita
Víctor Garcín Manuel Diez José Garcín Casimiro André TOTAL
Nombre Tienda Prórroga Sociedad Duración
Manuel Díez y cía. Casa Diez 12/05/1924 Mercantil-colectiva 2 años
Nombre Tienda Reconstitución Sociedad Duración
Manuel Díez y cía. Casa Diez 31/12/1929 Mercantil-colectiva
Nombre Tienda Reconstitución Sociedad Duración
Manuel Díez y cía. Casa Diez 10/03/1931 Mercantil-colectiva
Nombre Tienda Reconstitución Sociedad Duración
Manuel Díez y cía. sociedad en comandita Casa Diez José Garcín 10/03/1933 Casimiro André comandita simple Manuel Morante Diez 4 años Grimaldo Morante Baltazar Mroante Diez Roberto Escamilla Juan Armada TOTAL
aportado de utilidad $ 65,000 $ 30,000 $ 5,000 $ $ 100,000
Sueldo Puesto
Origen Francia España Francia Francia
$
400,000
Anual Director Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor
$ $ $ $ $ $
700 700 700 700 700 400
Director Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Gte.-Admor Empelado
Empleado Empleado
Fuente: Archivo del Registro Público de la propiedad y de inspección y Archivo General de Notarías del Estado de Veracruz (ANEV) y Registro Público de la Propeidad de Orizaba (RPPO) Escritura Notario Fecha 309 RPPO feb-07 786 y 787 José Camacho 06/03/1927 796 José Camacho 31/12/1927 858 y 904 RPPO dic-29 403 José Camacho 13/01/1930 950 José Camacho 19/07/1935
252
Otra empresa que constituyeron algunos socios de CIDOSA fueron la sociedad colectiva Segura, Braniff y cía. para administrar Luz y Fuerza Motriz de Orizaba S.A. Sus socios eran Ricardo Segura, Tomás Braniff y Juan B. Eduardo Garcín. Las empresas de socios barcelonnettes enlistadas anteriormente pagaban derecho de patente al Gobierno del Estado de Veracruz. Este fue el impuesto aplicado a los giros mercantiles, establecimientos industriales y talleres de artes y oficios, así como a los juegos permitidos por la ley. Formaba parte de las Contribuciones o impuestos directos que también incluían el cobro por fincas urbanas o rústicas, la contribución sobre plantíos de caña de azúcar, de café y de tabaco; los productos de las notarías propiedad del Estado y de oficios públicos vendibles y renunciables de propiedad particular.407 Del total de la recaudación del Estado, los impuestos directos fueron los que mayor monto alcanzaron (más del 70%) del total de los cobros de 1888 a 1908. De hecho, los ingresos provenientes de los derechos de patentes, representaron casi el 30% del total de los impuestos recaudados de 1888 a 1910 como se describe en el Cuadro 7.
407
También existieron las contribuciones o impuestos indirectos, que incluían la traslación de dominio, la patente de fierro para ganado y madera, el consumo de ganado, el impuesto a herencias y legados y las mandas forzosas para bibliotecas públicas de Veracruz. Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Memoria de la Tesorería General del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave presentada a la H. Legislatura, el 17 de Septiembre de 1910. Oficina Tipográfica del Gobierno del Estado Xalapa, Ver. 1911, pp.60.
253
Cuadro 7. Impuestos recaudados en los principales municipios del Edo. De Veracruz, 1888-1910. Municipio
Derecho de patente Monto %
IMPUESTOS Contribuciones Directas Contribuciones Indirectas Monto % Monto %
TOTAL Monto
1888 Total del Estado $ 230,976.26 100% $ 503,859.96 79% $ 135,996.39 21% $ 639,856.35 Veracruz Pto. $ 72,990.72 32% Orizaba $ 36,185.28 16% 1889 Total del Estado $ 223,752.42 100% $ 527,463.75 75% $ 173,553.85 25% $ 701,017.60 Veracruz Pto. $ 71,216.04 32% Orizaba $ 35,826.36 16% Jalapa $ 22,876.00 10% Córdoba $ 17,834.00 8% 1890 Total del Estado $ 238,409.84 100% $ 570,171.40 77% $ 174,274.94 23% $ 744,446.34 Veracruz Pto. $ 69,074.16 29% Orizaba $ 37,978.80 16% Jalapa $ 23,253.78 10% Córdoba $ 19,697.22 8% 1908 Total del Estado $ 397,720.51 100% $ 995,774.99 71% $ 405,209.16 29% $ 1,400,984.15 Veracruz Pto. $ 116,845.88 29% $ 277,166.38 75% $ 94,272.49 25% $ 371,438.87 Orizaba $ 115,624.28 29% $ 184,833.21 78% 51,400.46 22% $ 236,233.67 1909 $ Total del Estado $ 402,807.94 100% $ 586,155.56 41% $ 859,064.51 59% $ 1,445,220.07 Veracruz Pto. $ 115,693.00 29% $ 162,024.52 44% $ 206,517.67 56% $ 368,542.19 Orizaba $ 121,064.29 30% $ 140,747.50 59% 99,837.97 41% $ 240,585.47 1910 $ Total del Estado $ 216,394.82 100% $ 308,451.36 40% $ 470,882.85 60% $ 779,334.21 Veracruz Pto. $ 59,774.33 28% $ 85,184.46 43% $ 112,059.39 57% $ 197,243.85 Orizaba $ 63,482.53 29% $ 75,003.74 60% 49,236.87 40% $ 124,240.61 Fuente: AGEV, Memoria presentada a la H. Legislatura del Estado Libre y Soberano de Veracruz Llave 1 de enero 1890 al 30 de junio de 1890. Jalapa, Imprenta del Gobierno del Estado, 1891. Cuadro No. 14 Comerciantes y contribución anual de 1890 en Levi, Manuel. Cuadro No. 25 Valor de las contribuciones directas al Estado según padrones año 1889, 1890 en Levi, Manuel. Memoria de la Teoseria General del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave presentada a la H. Legislatura el 17 de Septiembre de 1910. Oficina Tipográfica del Gobierno del Estado Xalapa, Ver. 1911, pp.45- 46 y 60 Memoria de la Secretaria de Economía Nacional, 1934
% 100%
100%
100%
100% 100% 100% 100% 100% 100% 100% 100% 100%
De acuerdo a los datos de este cuadro, de los impuestos por derechos de patentes, Orizaba generó el 26% del total recaudado en el Estado de 1888 a 1890. Sus montos superaron a los de Xalapa y Córdoba, y sólo estuvieron por debajo de los del Puerto de Veracruz. Situación que cambió durante la primera década del siglo XX, cuando los impuestos cobrados fueron muy similares e inclusive fueron mayores a los del Puerto, gracias a los aportes de la industria textil y en especial a los realizados por las fábricas propiedad de CIDOSA que obtuvieron su mayores ganancias durante esos años. Solo por citar un ejemplo, de acuerdo a los datos del Cuadro 8 las fábricas de Cocolapan y San Lorenzo pagaron por concepto de impuestos estatales $7,549 pesos, casi el 21% del total de lo recaudado por derechos de patente de Orizaba en 1888, que fue de$36, 185.28. 254
En la misma información también se observa que los impuestos a los directos del municipio de Orizaba, fueron los de mayor recaudación de 1908 a 1910. Sus montos se mantuvieron en un porcentaje de 78% en 1908, y 60% de 1909-1910 con respecto a las contribuciones totales, mientras que el municipio Veracruz y el total del Estado su participación paso del un 70% en promedio en 1908, a un 40% en 1909-1910.
Cuadro 8. Impuestos pagados por las fábricas de San Lorenzo, Cerritos y Cocolapan, 1887. Fábrica
Ubicación Dueño Municipio
Administrador
Cocolapan
Orizaba
Escandon hmos.
Alberto G.
$ 1,411.00
San Lorenzo
Nogales
Tomas Braniff
Hurphy Leniun
$ 1,228.00 $ 4,066.00 $ 1,323.00 $ 6,618.00
Cerritos de San Orizaba Juan
Municipal
Impuesto Estatal Federal $ 3,483.00
$ 1,223.00
Cia. Manufacturera de los Cerritos
Total $ 6,117.00
$ 3,540.00
Fuente : AGN, Departamento del trabajo, Caja 49.
En este momento vale la pena contemplar la derrama económica generada por salarios. Estos fueron analizados con más detalle en el apartado de estrategias laborales, donde se noto que sus montos eran similares al promedio de la industria textil de la región408, solo que estos se pagaban a mayor número de obreros. CIDOSA contó durante todo el periodo de estudio con más de 4,000 empleados en todas sus fábricas, mientras que CIVSA solo tuvo entre 1500 y 1700 empleados. Después de este breve recorrido, es posible apreciar que las derramas económicas
ocasionadas
por
las
fábricas
de
CIDOSA
se
unieron
preponderantemente al resto de las actividades empresariales que tuvieron lugar en el Valle de Orizaba. Los efectos más visibles se pueden apreciar a lo largo de estos años en la trama urbana.
408
En 1920, CIDOSA pagaba 5 pesos a sus empleados administrativos y 2.91 a sus obreros. CIVSA pagaba 5.05 y 2.15.
255
Un acercamiento a la urbanización de Orizaba Los cambios encabezados por la fundación de la primera fábrica textil en Orizaba, no fueron lo suficientemente exitosos como para lograr que el gobierno rompiera la unidad orgánica típicamente preindustrial de la ciudad. De hecho, la traza
y la
imagen
urbana
permanecieron
con
pocas alteraciones,
sin
modificaciones radicales.409 Solo la población cambio en tamaño y composición por la migración de trabajadores nacionales y extranjeros, calificados y no calificados atraídos por las fábricas textiles instaladas en el Valle. Si comparamos la población de Orizaba antes de que operaran las fábricas textiles de Cerritos, San Lorenzo, Río Blanco y Santa Rosa, observamos que 1877 tenía 12,696 habitantes. Mientras que para 1900 ya con la instalación de las fábricas mencionadas la población aumentó a 32, 894 habitantes. Esto fue un crecimiento de un 159%, mientras que en las demás ciudades del Estado la tasa del crecimiento fue alrededor del 90% para el periodo. El crecimiento de la población de los principales municipios del Estado de 1877 a 1930 se observa en el Cuadro 9. De acuerdo a sus datos, la población de Orizaba en el siglo XIX fue similar a la de las principales ciudades del Estado: Xalapa, Veracruz Puerto y Córdoba. De hecho el municipio de Veracruz Puerto siempre registró una mayor población que cualquier otro municipio excepto en 1900 donde fue superado por Orizaba en casi 500 habitantes, esto por el inicio de operaciones de las fábricas de Río Blanco y de Santa Rosa. Después, de 1910 a 1930, el crecimiento de la población de Orizaba disminuyó a un promedio del 9.3%, pero aún así continuó siendo el segundo más poblado del Estado debido a la fuerte atracción de población ejercida por las fábricas textiles.
409
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002, pp.64, 66.
256
Cuadro 9. Población de algunos municipios del Estado de Veracruz, 1877-1930. Población total Municipio 1877 1900a 1910 1921 1930 Total del estado 504,905 981,030 1,132,859 1,159,935 1,377,293 Veracurz pto. 16,720 32,263 53,115 58,225 55,295 Orizaba 12,696 32,894 37,679 39,563 42,904 Papantla 18,439 23,967 31,316 34,870 39,768 Xalapa 10,000 20,388 28,640 29,933 31,370 Córdoba 11,600 20,612 23,302 26,892 30,390 Santa Rosa 1,402 6,688 10,707 Nogales 4,096 7,072 9,527 Tenango del Río 3,329 7,357 9,656 a. Datos de 1895 para la población de Santa Rosa, Nogales y Tenengo del Río Blanco
1900 94% 93% 159% 30% 104% 78%
Tasa de crecimiento 1910 1921 15% 2% 65% 10% 15% 5% 31% 11% 40% 5% 13% 15% 377% 73% 121%
1930 19% -5% 8% 14% 5% 13% 60% 35% 31%
Fuente: Estadísticas Sociales del porfiriato 1887-1910, Sría. de Economía, México 1956. Cuadro 1. Población por entidades (p.8), (p.9) Cuadro 2. Población existente en las capitales de las entidades federativas Cuadro 4. Habitantes existentes en diversas poblaciones del país (p.11), AGEV, Sothworth (2005), Población en el Canton de Orizaba, p. 159. Censo general de habitantes 1921. Veracruz, Depto. De estadística Nacional, México 1928, pp. 120-242. Censo del Estado de Veracruz Llave, 1930. Secretaría de la economía Nacional. Cuadro II. Población de los municipios, pp.11-13.
Los primeros obreros que llegaron a trabajar a las fábricas textiles del Valle de Orizaba fueron en su mayoría, hombres indígenas, campesinos, obreros, tejedores de otras zonas, artesanos, etc.410 En cuanto a los supervisores y empleados administrativos, primeramente se contrataron extranjeros, pero después se delegaron funciones y se capacitaron a los trabajadores mexicanos para ocupar los puestos de confianza. En la imagen 1 se muestra una fotografía de los directores, jefes de departamentos, correiteros, ayudantes y cabos del departamento de tejidos de la fábrica de Río Blanco en 1920. En ese mismo año solo 82 de los 4320 trabajadores de las fábricas propiedad de CIDOSA eran mujeres, casi el 2%. Esto contrastaba con el total de población femenina de 1921 en las localidades del Valle de Orizaba, que representaba casi el 50% o más de la población total, tal como se muestran en los datos del Cuadro 10. Esto se explica porque “los trabajadores que emigraron a la región fueron acompañados de sus familias, cuyos miembros a veces también fueron ocupados en las fábricas, las mujeres como costureras y los niños como obreros de medio tiempo”.411
410
Para un análisis más detallado de los trabajadores que arribaron a la región, ver García Díaz, Bernardo. Textiles del Valle de Orizaba, 1880-1925: cinco ensayos de historia sindical y social. Universidad Veracruzana, Colección Historias Veracruzanas No. 7. Xalapa, Ver, 1990. 411 Gómez Galvarriato, Aurora. “La transformación de los pueblos fabriles del Valle de Orizaba” en 20/10 Memoria de las Revoluciones en México. Primavera, 2009. México, pp.95.
257
Imagen 1. Trabajadores de la fábrica de “Río Blanco”
Fuente: AGEV, Río Blanco, No. 398
Cuadro10. Población por sexo de las localidades que conforman la región del valle de Orizaba, 1921 y 1930. Municipio TOTAL DEL EDO. Orizaba Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Río Blanco Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Nogales Santa Rosa Santa Rosa Santa Rosa
1921 1930 total Hombres Mujeres total Hombres Mujeres 1,159,935 1,377,293 Orizaba 39,563 17,837 21,726 42,904 19,578 23,326 El Carrizal 490 247 243 945 470 475 Rancho Nuevo 41 21 20 153 79 74 San Buenaaventura 124 76 48 San Joaquín 25 13 12 122 68 54 Tenango 6,169 3,137 3,032 7,289 3,595 3,694 Xicotepec 141 70 71 250 130 120 Nogales 6,407 3,193 3,214 9,020 4,414 4,606 Encinal 354 179 175 124 67 57 Muyuapan 110 53 57 Ojo Zarco 44 85 41 99 54 45 Palo Verde 214 109 105 La Carbonera 70 36 34 Chicahuaxtla 115 55 60 4 2 2 Camerino Z. Mendoza 5,153 2,596 2,557 9,032 4,454 4,578 La Cuesta 436 215 221 412 191 221 Necoxtla 1,099 530 569 1,263 610 653 Localidades
Fuente: AGEV, Censo del Estado de Veracruz Llave, 1930. Secretaría de la economía Nacional. México, 1933. Cuadro XXXVIII. Población distribuida por localidades (p.254-448)
El crecimiento de la población en la región, también incrementó los servicios públicos de educación, vivienda, agua, luz, pavimentación, etc. Algunos de estos servicios fueron proporcionados por el gobierno municipal de 1800-1870, por las compañías textiles durante el Porfiriato y por los sindicatos durante y después de la Revolución.412 Sin embargo, en ese ambiente de gran efervescencia, el uso del suelo debió adquirir gran importancia. Aspecto que no estamos en condiciones de 412
Goméz Galvarriato, Aurora. Op.cit, 2009, pp. 93.
258
desarrollar porque requiere una investigación distinta, donde la compraventa del suelo y la renta del mismo fuesen objetivo central. En 1805 el gobierno municipal de Orizaba instaló agua y cañerías para el primer cuadro de la ciudad. En 1826, colocó 150 faroles de un sistema de alumbrado público y en 1846 amplió el servicio de agua para los barrios de Cocolapan y Angostura, por la instalación de la fábrica de Cocolapan. Fue hasta el imperio francés (1864-1867) que el gobierno empedró la calle principal y mejoró el alumbrado público. Colocó un reloj en la torre de la parroquia y reparó el puente de San Juan, también adelantó la construcción del Teatro Llave. Después de la República Restaurada, el municipio aumentó las obras. En 1870 construyó un desagüe nuevo, cajas repartidoras de agua y amplio el sistema de alumbrado público hacia la fábrica de Cocolapan. En 1874 construyó otro canal para surtir de agua potable a la población.413 En cuanto a las compañías textiles, CIDOSA en 1891 inauguró el primer sistema de iluminación eléctrica impulsado por la fábrica Cocolapan contratada por el Ayuntamiento de Orizaba. Además construyó en Tenango de Río Blanco, la Iglesia, el mercado, escuelas, parques, el Palacio Municipal y 1,100 casas para alquilar a sus obreros y empleados. También en 1908 contribuyó con el gobierno de Orizaba para que se pavimentaran 4210 m2 de calles. 414 En la imagen 2, se muestran fotografías panorámicas de Orizaba, Rio Blanco y Nogales para el año de 1908. En estas imágenes se observa que en todos estos municipios, existía un camino principal (o “camino real”) que los comunicaba y del cual partía la traza de la ciudad.
413 414
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002, pp.64, 66. Ídem.
259
Imagen 2. Panorámica de Orizaba, 1908.
Fuente: AGN, Fototeca, propiedad artística y literaria. Briquet A. No. 1.
Orizaba-Garita de Nogales
Fuente: AGN, Fototeca, Fondo Briquet A. No. 4
260
Tenango de Río Blanco, Veracruz. .
Fuente: Archivo Municipal de Río Blanco (AMRB).
En la fotografía del municipio de Río Blanco también se observa que la fábrica de Río Blanco estaba instalada a un lado del camino principal, el cual actualmente es la carretera México-Orizaba. En el caso de CIVSA, esta empresa construyó en 1897 en Necoxtla 542 casas para rentar a sus empleados, iglesias, el palacio municipal, una vía para el tranvía local, una parte de la vía ferroviaria Veracruz-México. En 1906, la iluminación de las calles, un acueducto para dotar de agua a una parte del Pueblo de Santa Rosa. En 1917, la plaza central y en 1928 donó junto con CIDOSA y la Cervecería Moctezuma $15,000 para la construcción de la autopista MéxicoVeracruz.415 Los sindicatos por su parte construyeron en los años veintes el Banco Obrero,416 tiendas cooperativas de consumo, los Institutos de Educación y las Academias Técnicas para adultos y niños; la escuela América, el cine y teatro Juárez. El Banco Obrero y las tiendas cooperativas tuvieron sus antecedentes en
415
Gómez Galvarriato, Aurora. Op,cit, 1999ª, pp. 457-465. Este es un aspecto de la vida y organización sindical que debiera explorarse a profundidad con la intención de valorar su influencia en el entorno social orizabeño. Aspecto que se señala porque sin duda durante los años que operó debió tener beneficios en el tejido social, cosa que no estamos en condiciones de desarrollar. 416
261
las tiendas de raya o tiendas de empresa. Estos negocios les servían a los empresarios para recuperar parte de los salarios de los obreros, al obligarlos a comprar en ellos los alimentos, ropa y otros bienes que necesitaban. La tienda de raya cambiaba los vales que la compañía otorgaba a los obreros, cobrándoles una comisión por ello. Existían en la Fábrica de San Lorenzo, en Río Blanco y Santa Rosa, pero solo les permitían comprar a sus respectivos obreros. 417 Las tiendas de raya operaron hasta 1912, cuando las leyes laborales las prohibieron. Esto dio pie a que surgieran otras negocios comerciales que cobraban tasas de interés más altas (la tienda de raya de CIVSA cobraba 5% mensual y otras tiendas 12%.) Para solucionar esto, los obreros decidieron abrir sus propias tiendas cooperativas y Bancos para comprar barato y obtener créditos con tasa accesibles. En 1928 fundaron las tiendas cooperativas de las fábricas de Santa Rosa, Río Blanco, Mirafuentes, San Lorenzo y Santa Gertrudis. En estas tiendas permitieron a todos los obreros y campesinos comprar en ellas. También crearon la sociedad mutualista CIDO-mutua que otorgaba vales como ayuda a los trabajadores, sólo que sin descontarles comisión alguna. Por su parte, el Banco Obrero en 1928 cobraba el 2% de interés mensual y pagaba el 1% a los ahorradores. Parte de sus ganancias se utilizaron para construir la escuela primaria América, el cine y teatro Juárez.418 (Ver imagen 3) Tanto las compañías textiles, como los sindicatos impulsaron las actividades de educación y de entretenimiento como el teatro, los clubs, bandas de música y equipos deportivos como: “los equipos de Beisbol de Río Blanco (UDRB), de Santa Rosa “Sparta”, “Río Blanco Stars”, “Titan”, “Bacardi”, “Venus”, “Fabriles XX”, “Reforma”, “Sporting”; y el equipo de futbol “Orizaba A.C.”
419
. Estas
actividades fueron posibles gracias a “las leyes que obligaron a las compañías a mantener jornadas laborales de 8 horas con descansos obligatorios, que generalmente se daban los sábados por la tarde y los domingos todo el día”.420
417
Ídem, pp. 410-442. Ídem. 419 García Díaz, Bernando. Santa Rosa y Río Blanco. Colección Veracruz imágenes de su historia. Archivo General del Estado de Veracruz, 2a. edición México, 1991. 420 Gómez Galvarriato, Aurora. Op,cit, 1999ª, pp. 452-457. 418
262
Imagen 3. Escuela América en Orizaba
Fuente: Archivo Sindicato de Santa rosa publicado en Gómez (2009), pp.109.
En cuanto a educación, tanto CIDOSA como CIVSA, apoyaron a las escuelas municipales de los pueblos donde se establecieron y posteriormente apoyaron las iniciativas de los obreros de establecer más escuelas primarias, kínder y escuelas de oficios. De hecho con el artículo 123 de la Constitución de 1917 y el 85 de la Ley laboral de Cándido Aguilar de 1914, se obligó a las fábricas de más de 100 trabajadores a establecer escuelas en sus fábricas. Al principio ambas compañías rechazaron estas disposiciones argumentando que ya apoyaban a las escuelas públicas, pero con el tiempo y la presión de los sindicatos, cambiaron su posición aumentando el apoyo sobre todo a escuelas de oficios”.421
421
Ídem, pp.510.
263
El establecimiento de estas escuelas, benefició a la población de la región. En el Cuadro 11se identifican los datos de población mayor de 10 años que sabía leer y escribir por municipio en 1930 .De acuerdo a estos datos, el municipio del Puerto de Veracruz, fue el de mayor población alfabetizada del Estado con el 73% de sus habitantes. Orizaba fue el segundo con un 67% y Xalapa, fue el tercero con un 62%. Por su parte, Río Blanco y Nogales, tenían alrededor del 60% de su población alfabetizada; mientras que Santa Rosa contaba con un 50%. Todos estos municipios estaban por encima del promedio del Estado que era del 32% de los habitantes. Además “el índice de alfabetización de los obreros de las fábricas de CIDOSA y CIVSA fue el más alto que el resto del país: 50% en Río Blanco, 55% en Nogales y 62% en Santa Rosa”.422 Cuadro 11. Población de 10 años o más que saben leer y escribir en algunos municipios del Estado de Veracruz, 1930. 1930 Municipio
TOTAL
TOTAL DEL ESTADO Veracruz Orizaba Jalapa Santa Rosa Tenango de Río Blanco Nogales
957,472 55,295 32,079 31,370 7,462 6,805 6,701
Población de 10 años o más Saben leer y Saben leer Ni leer ni Saben leer y escribir escribir escribir (%) 310,988 18,418 628,066 32% 41,514 1,059 12,722 75% 21,626 661 9,792 67% 19,550 459 11,361 62% 3,716 189 3,557 50% 4,245 177 2,383 62% 4,049 139 2,513 60%
Fuente: AGEV, Censo del Estado de Veracruz Llave, 1930. Secretaría de la economía Nacional. Dirección general de estadística, México, 1933. Cuadro XVII. Alfabetismo de la población de diez años o más (p.191-229)
Los sindicatos apoyados por las compañías textiles y algunos gobiernos municipales encabezados por ex trabajadores de las fábricas, construyeron a partir de los años veintes, los Institutos de Educación y las Academias Técnicas para adultos y niños. Las cuales tenían como fin combatir el analfabetismo y capacitar a los trabajadores. También iniciaron con escuelas nocturnas para los obreros. La primera fue la de la fábrica San Lorenzo en 1912, cuyo sueldo del maestro fue pagado por CIDOSA. En 1916 igualmente instalaron escuelas
422
Gómez Galvarriato, Aurora. “De operarios a Obreros: la organización laboral” en García, Díaz, Bernardo. La huelga de Río Blanco, 1997-2007. Ed. Secretaria de Educación de Veracruz, Gobierno del Estado, Veracruz, 2007.
264
nocturnas en Río Blanco y Santa Rosa. Estas escuelas se enfocaron a la instrucción básica y técnica para aumentar la productividad de los obreros. 423 Los centros de enseñanza continuamente recibieron ayuda de las empresas y del gobierno; por ejemplo, en 1926 el sindicato de Río Blanco solicitó a la dirección de CIDOSA, CIVSA y San Idelfonso, ayuda para establecer una escuela técnica textil. Las compañías aceptaron ayudar y en 1929, CIDOSA donó $10,000 pesos en efectivo, CIVSA $6,000, San Idelfonso $300 y el Gobierno Federal $13,650. También aportaron una máquina abridora, una alimentadora, un batiente, dos cardas, un estirador, un veloz pabilador, un veloz intermedio, un veloz fino, un troxil de pie, uno de trama, un cañonero, un urdidor, 6 telares y una dobladora.424 A manera de síntesis las actividades industriales tuvieron efectos múltiples en la vida de la población. Los trabajadores tuvieron acceso a salarios remunerados durante más de cuatro décadas, lo cual permitió tener acceso a una forma de vida distinta a la que tenían en sus lugares de origen. Las exigencias del asentamiento poblacional que crecieron aceleradamente durante todos estos años, demandaron servicios de vivienda, agua, drenaje, electricidad, salud, educación y recreación como nunca antes sucedieran en el Valle de Orizaba. Además de los servicios propios de la organización y administración municipal, así como las formas de acceder políticamente a ella -relacionarse con el empresariado, autoridades estatales y federales-, describirían estilos de vida impensados. La actividad empresarial y fabril sin dudarlo, funcionó como atractor de una fuerte migración ocasionada por la derrama económica. Sin embargo, el desarrollo regional no fue el objetivo principal de las empresas, éste estuvo sujeto a la suerte que tuvieron dichas empresas en el cambiante mundo de negocios que operaba en ese entorno social.
423 424
Gómez Galvarriato, Aurora. Op,cit, 1999ª, pp. 510. AGEV, Sección Fomento, serie Industria, Caja 170.
265
Conclusiones Después de este recorrido y habiendo adelantado a algunas respuestas a las preguntas planteadas originalmente es importante destacar que la presente investigación no fue una indagación con clausura. Es decir que la cantidad de interrogantes generada en su transcurso se abre a otros campos problemáticos que por ahora no se está en condiciones de desarrollar. Sin embargo, los resultados obtenidos ofrecen ya sus certidumbres. Las lecciones historiográficas nos han legado sin duda importantes conocimientos de la experiencia de la industria textil en México. Estas lecciones como ya vimos se abren sobre todo a tres campos problemáticos: el propio del rendimiento industrial y su valoración en conjunto; el de los empresarios y trabajadores y el de su papel en el desarrollo económico del país. Gracias al primero de los empeños se posee una mirada de los alcances y límites del desarrollo textil, sin los que no hubiera sido posible realizar estudios más amplios como los referidos al desarrollo económico del país o los estudios comparativos. Sin embargo, y pese a que el estudio del empresariado se ha realizado en algunos casos a profundidad, así como el de las organizaciones y luchas obreras, el estudio de las organizaciones empresariales, sus estrategias administrativas se estudian tímidamente. Es en este aspecto en donde más claramente se ubica el desarrollo de esta tesis. Estudiar el mundo empresarial presenta ciertos retos. En primer lugar, las fuentes de información son dispersas y de difícil acceso. En segundo lugar a pesar de que existen multitud de explicaciones teóricas, no se dispone de un marco teórico privilegiado para analizar las estrategias de los empresarios a largo plazo. Las teorías sin embargo si bien se abren a un espectro en donde las empresas se encadenan al comportamiento general de la economía. Sobre todo a partir del surgimiento de las teorías del desarrollo y específicamente del desarrollo regional que pusieron el acento en los factores de localización, en los lugares centrales y en la teoría de base de exportación, resultan insuficientes tratándose del mundo empresarial, pues éste quedo subordinado y con frecuencia borrado por los 266
análisis macro. En este sentido son relevantes las apreciaciones de Douglas North que enfatiza la importancia del ambiente institucional en el cual operan las empresas. Aspecto que viene bien en un sentido al estudio del desarrollo empresarial, porque nos invita a poner atención en el papel e importancia del contexto institucional y social en el que funcionan las empresas. En tercer lugar las explicaciones referidas al comportamiento empresarial, sus redes y estrategias, son tratadas cada una por separado otorgándoles el peso que los teóricos consideran tienen cada uno. Así algunos enfatizan en las estructuras organizacionales, en las estrategias que permiten alcanzar ciertos objetivos o en el tamaño e importancia de la red de intereses. Por ejemplo autores como Alfred Chandler, Ronald Coase , Olliver Williamson, Alejandro Portes, Casson, Mark Granovetter, Luc Boltansky y Eve Chiapello, si bien no ofrecen una mirada abarcadora del mundo empresarial, aportan aspectos y relaciones sugerentes. De todas ellas nos hemos servido para atisbar el mundo de las estrategias y de las redes empresariales utilizadas por la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA) entre los años 1889 a 1930. Gracias a todos estos aportes -tanto historiográficos como teóricos-, se pudo indagar con cierta prestancia la importancia de una red construida por los empresarios de CIDOSA. Una red que se puso a prueba en condiciones sociales de gran incertidumbre como fueron las luchas revolucionarias de 1910, la Primera Guerra Mundial y la crisis internacional de 1929. Pero también las estrategias de los empresarios y el entorno sociohistórico en el cual estos operaron. Pasar revista a estos fenómenos es importante porque gracias a ello la hipótesis que guio esta investigación fue probada suficientemente. Los socios de CIDOSA mantuvieron alianzas basadas en principios de confianza, solidaridad, esfuerzo, dedicación y lealtad gracias a su origen barcelonnette, pero también en incentivos económicos. Quienes no cumplían fielmente los compromisos se hacían acreedores a sanciones y pérdida de recompensas. Gracias a sus mecanismos e identidad colectiva, estos inmigrantes tuvieron acceso a créditos, mercancías, descuentos y otros tipos de financiamientos. 267
Además debido a la solidaridad que mantenían entre compatriotas, aplicaban la práctica del favor con favor se paga. Brindándose oportunidades de empleo, recursos financieros, protección, etc. a cambio de lealtad y trabajo constante. Repitiendo la práctica cada vez que alguno de los migrantes adquiría una posición privilegiada. Esta estrategia se habría de repetir a lo largo de los cuarenta años analizados. Si bien es cierto la migración del Valle de Ubaye se transformó debido a varios acontecimientos históricos -como serían la lucha revolucionaria, la Primera Guerra Mundial y la Constitución Mexicana de 1917, etc.-, al cambiar los incentivos institucionales que tuvieron durante el siglo XIX, no impidió que en el siglo XX continuarán desplegando sus estrategias, fortaleciendo sus vínculos matrimoniales, relaciones amistosas y económicas. Estos vínculos les permitieron disminuir los costos de monitoreo en sus negocios. El acceso al financiamiento francés motivo a los inmigrantes barcelonnettes, que ya se ubicaban en comercio de textiles, a asociarse para fundar sus propias fábricas textiles. Además participar como accionistas de los principales bancos (Banco Nacional de México, Banco de Londres y México, Sociedades financiera para la Industria en México, etc.) y compañías manufactureras (Cía. cigarrera el Buen Tono, cía. Fundidora de fierro y Acero de monterrey, cía. de papel San Rafael, etc.) de México durante el periodo de 18901930.
Este proceso que implica la acumulación de capital para avanzar del
comercio a la producción industrial y a las finanzas no siguió necesariamente este orden. Algunos de ellos pasaron del comercio a las finanzas directamente, otros más lo hicieron directamente en la fabricación textil para de ahí desplegarse en los otros dos ámbitos. Los comerciantes barcelonnettes aplicaron estrategias de diversificación, integración horizontal y vertical. Sin embargo, dichas formas de integración fueron parciales en sus negocios de consumo, industriales y de financiamiento, pues no lograron migrar hacia otras ramas productivas promisorias como el petróleo y gas. Es importante destacar que estos empresarios se mantuvieron asociados con otros empresarios poderosos de la época como: José Yves Limantour, Enrique Creel, Joaquín Casasus, Porfirio Díaz Jr., Agusto Gennin, Hugo Scherer, 268
Vicente Ferrara, Pablo Maceda, Xavier Ycaza, Tomás Braniff, Patricio Milmo y Fernando Pimentel y Fagoada. Con quienes mantuvieron sus iniciales estrategias de lazos familiares, de amistad y de negocios. Conservando en todos los casos estrecha relación con todos los gobernantes de México. Por eso la red de sus intereses se extendió geográficamente a casi todo el país de oriente a occidente, del centro al norte, manteniendo siempre sus vínculos internacionales Europeos. Una extensa red sin precedentes en la historia del México moderno. Las asociaciones que formaron con coterráneos, gobierno y otros empresarios, les permitió crear una red de negocios que les proporcionaba información, recursos productivos -mano de obra, capital-, recursos políticos privilegiados como concesiones de agua, exención de impuestos, etc. y ventajas monopólicas en sus empresas, como en CIDOSA, que fue una de las compañías manufactureras más redituables de México. Destacan como causas de sus éxitos: 1. Su organización técnica funcional donde se daba mayor énfasis a la fabricación mediante maquinaria moderna y estandarización de los procesos de trabajo. 2. Al avance tecnológico en el uso de energía (vapor, electricidad, etc.), 3. El incremento de su escala de fabricación incorporando mayor número de obreros y máquinas (como en el caso de Río Blanco). 4. Las concesiones y privilegios del gobierno (en aguas, impuestos, compras, etc.). 5. El desarrollo de vías de comunicación y transporte, 6. Pero principalmente por las redes sociales y de negocios a las que pertenecían sus dueños, las cuales como ya se ha dicho les imponían un sistema de normas y valores basados en la fe católica que recompensaban su lealtad (nuevos convenios para otros negocios, financiamiento, concesiones de los gobiernos, etc.) pero castigaban su desobediencia con expulsión de las empresas. Por otra parte, cuando los empresarios textiles se vieron afectados por la Revolución no sufrieron daños directos en sus fábricas pero sí, en las redes de distribución al afectarse los sistemas de transporte y comunicación. Sin embargo, las compañías textiles como CIDOSA obtuvieron utilidades a pesar del conflicto, de los cambios políticos, sociales y económicos, generados
la guerra civil;
principalmente porque mantuvieron relaciones cercanas con los diferentes gobernantes de México. Seguir conservando sus concesiones e intereses fue el 269
objetivo central de su estrategia, por eso tuvieron la habilidad y flexibilidad para adaptarse a las nuevas leyes y exigencias de los obreros, sin dejar de obtener ganancias para sus empresas. De hecho la queja de los empresarios por el aumento de salarios y prestaciones que impusieron las Leyes del trabajo y la Constitución de 1917 parece estar atenuado por los volúmenes de ganancias que ellos obtuvieron. Es destacable el hecho de que los socios CIDOSA lograran obtener las mayores ganancias del sector textil mexicano, durante las dos primeras décadas del siglo XX. Una de las razones principales era que vendían telas finas de calidad con marcas registradas y apetecibles por los consumidores, a través de sus redes de comercialización que eran más amplias que las de su competencia, ya que poseía mas tiendas de ropa y agentes de venta en toda la república. Además de tener acceso privilegiado a fuentes de financiamiento interno como reinversión de utilidades, participación accionaria en bancos como BANAMEX, Banco de Londres y México, Banco Central Mexicano, etc., y externo, proveniente de los socios franceses, que cotizaban acciones en las bolsas de valores de Ginebra y Paris. Por si fuera poco también tuvieron acceso al financiamiento de organismos como la Sociedad financiera para la industria en México que tenía su sede en Suiza. Otra circunstancia que debieron enfrentar las compañías de tejidos de algodón, y que sí afecto sus ganancias, fue la Crisis mundial de 1929. Está provocó una caída de sus ventas e inversiones en planta productiva. De 1926 a 1932 las telas y prendas de vestir en México se acumularon en las tiendas y las fábricas textiles solicitaron al gobierno disminuir sus días de trabajo e inclusive cerrar por un tiempo. El gobierno no accedió y los inventarios siguieron acumulándose, provocando pérdidas a los empresarios textiles. En el caso de CIDOSA, esta compañía vendía sus productos a las clases altas, por lo cual sus pérdidas fueron mayores que aquellos que producían principalmente manta, ya que el mercado que más se contrajo fue el de los productos de lujo. El impacto de la crisis del 29, fue de tal magnitud que en 1931 la compañía registró su primera pérdida desde 1889; y su capital disminuyó en 35%. En 1932 su capital volvió a disminuir en 23% y en 1933 los socios plantearon la 270
posibilidad de disolver la sociedad. Ante este panorama, el gobierno decidió ceder a las peticiones de los empresarios y les permitió disminuir las jornadas laborales, trabajando cuatro días a la semana. La transformación del patrón de acumulación en el mundo y la crisis de confianza de los empresarios hacia al gobierno por la ley del trabajo que daban más poder a los obreros, los socios de CIDOSA y de otras empresas textiles optaron por ya no crear plantas productivas, disminuir sus inversiones en las fábricas de tela (del 69.32% en 1911 a 43.92% en 1920) y trasladar sus capitales a bienes raíces. De hecho desde la fundación de la compañía en 1889, los socios de CIDOSA adquirieron grandes extensiones de terrenos en los municipios de Río Blanco, Orizaba, Nogales, Veracruz puerto y en la Ciudad de México. Estos terrenos fueron utilizados para construir casas de alquiler para los obreros, rentarlos para el gobierno y/o construir oficinas para la empresa. Los efectos sociales que tendrían sus iniciativas, a lo largo de cuarenta años, aceleró el crecimiento demográfico en el ámbito territorial concreto de los municipios del Valle de Orizaba. Además contribuyó a elevar el nivel de ingreso de los trabajadores quienes adquirían bienes de consumo en tiendas de la empresa, accedían a viviendas alquiladas o vendidas mediante créditos con bajas tasas de interés, así como influir en la educación de los habitantes y promover los deportes y la música. Estos aspectos positivos del establecimiento de las industrias tuvieron sin duda su contraparte, expresada en la organización de lucha obrera, y en los niveles de pobreza y hacinamiento de la población que habitaba en los terrenos de las compañías. Los socios de CIDOSA igualmente contribuyeron al desarrollo urbano de la región del valle de Orizaba, al permitir que sus fábricas proporcionaran electricidad a los ayuntamientos, al hacer donaciones para que se construyeran escuelas, parques, mercados, iglesias, edificios públicos y vías de comunicación como líneas de telégrafos, carreteras, etc. El establecimiento y operación de las fábricas de CIDOSA en la región de Orizaba, tuvo efectos mayores. Contribuyo a situar a Veracruz como uno de los Estados de mayor producción industrial en el país en las primeras tres décadas del siglo XX. Sin embargo sería hasta 1962 cuando 271
CIDOSA fue vendida a Jerónimo Arango, Carlos Trouyet y Manuel Senderos, quienes continuaron operando las fábricas hasta 1993, cuando fue declarada en quiebra. Actualmente se tiene contemplado realizar una central de abastos en el antiguo edificio de la fábrica de Cerritos y un estadio de futbol en los terrenos de la fábrica de Cocolapan. Con esto se perderá la oportunidad de resguardar el patrimonio industrial de esta región y de utilizarlo para realizar estudios que nos ayuden a comprender ¿Por qué CIDOSA y sus fábricas no generaron un polo de desarrollo en la región? Y ¿Qué impactos ambientales ocasionaron el funcionamiento de estas manufacturas al valle de Orizaba? Estas y otras interrogantes quedaron pendientes por responder en otras investigaciones ¿Cuáles son las lecciones más generales que nos ofrecen este análisis? 1. Que la estrategia diseñada por los empresarios de CIDOSA y la red construida para mantener sus negocios florecientes, con asideros nacionales e internacionales funciono para hacer crecer sus negocios en un medio como ya se ha dicho de gran incertidumbre afectado por situaciones internas y externas;
2. Sus
estrategias y redes como se pudo apreciar fueron más eficientes para enfrentar las incertidumbres de la lucha armada de 1910 y la Primera Guerra Mundial, que la crisis de sobreproducción que difundió sus efectos internacionalmente después de 1929; 3. Que la elección de herramientas teóricas y conceptuales facilitaron el análisis de la empresa objeto de estudio, no obstante los aspectos relacionados con el desarrollo regional de un territorio que no parece estar exactamente situado en los centros de consumo ni en los de producción de materia prima, pero si en las vías de comunicación y en las de abastecimiento de los recursos hídricos. La fuerza de trabajo se fue conformando al paso de los años con migrantes de zonas aledañas; 4. Sin duda en la operación y funcionamiento de esta emblemática empresa, el entorno institucional fue un importante medio para su desarrollo; 5. En el proceso de análisis y valoración del desempeño de esta empresa, si bien destacan sus éxitos, la posibilidad de analizar sus errores y formas de sanción a algunos de sus socios quedó fuera de esta investigación por falta de fuentes. Sus fracasos como ya se ha dicho, se hicieron visibles después de la tercera década del siglo XX, migrar hacia otras fuentes de inversión más seguras fue sin duda 272
parte de sus estrategias. 6. Un aspecto que llama poderosamente la atención es el papel de las mujeres en la construcción de las redes empresariales, solo en un caso un empresario cede sus negocios a su viuda, como fue José Ollivier, para el resto se desconoce el papel de las mujeres en la red de dicho empresarios. Con frecuencia lo que si se visibiliza es que una forma de ampliar la red era con los vínculos matrimoniales, al casar a sus hijas con otros empresarios. No obstante el papel de las mujeres relacionado con el mundo del trabajo es un tema pendiente por esclarecer.
273
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Fuentes: Centro de Estudios de Historia de México, CARSO Raíces Francesas en México, A.C. Biblioteca Lerdo de Tejada de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) Biblioteca del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (INEGI) Archivo General de la Nación (AGN) Archivo Histórico de las Notarias de la Ciudad de México (AHNM) Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV) Archivo del Registro Público de la propiedad y de inspección y Archivo General de Notarías del Estado de Veracruz (ANEV) Archivo Municipal de Orizaba Archivo Municipal de Nogales Archivo Municipal de Río Blanco Archivo histórico del agua (AGA) Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT) Archivos Históricos de BANAMEX (AHBANAMEX) Archivos Históricos de patentes del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) Registro Público de la Propiedad de Orizaba (RPPO)
284
ANE XOS
285
ANEXO A. Datos sobre la industria textil nacional Año
No. de fábricas No de telares No de Husos No. de obreros Producción en Valor en ventas Producción / Producción / (pesos
1917 99 1918 104 1919 114 1920 120 1921 121 1922 120 1923 113 1924 109 1925 124 1926 131 1927 132 1928 132 1929 139 1930 141 1931 142 1932 137 1933 155 PROMEDIO 125 Fuente: Pruneda (1942) pp. 4
20,489 25,017 27,026 27,301 28,409 27,819 27,770 26,536 28,734 29,446 29,290 29,295 28,825 29,229 29,228 27,900 31,438 27,868
573,072 689,173 749,237 753,837 770,945 758,624 752,255 721,580 780,691 780,144 777,380 791,333 792,336 800,023 799,129 773,579 855,256 759,917
No. De fabricas en operación 1935 1936 Hilados de algodón 31 33 Hilados y tejidos de algodón 89 91 Hialdos y tejidos de algodón y aristisela 17 20 Hilos 18 24 Tejidos de aldon 21 28 Tejidos de algodón, aristesela y seda 36 36 toal 212 232 Fuente: Pruneda (1942) 68
22,187 27,680 33,185 37,936 38,227 39,677 38,684 37,080 42,359 44,114 41,008 38,889 38,881 38,860 36,883 34,626 35,426 36,806
No. De
No. De
kilogramos corrientes) obreros Maquinas 16,032,426 64,129,744 722.60 27.01 18,300,426 48,566,675 661.14 25.62 23,823,818 69,778,410 717.91 30.69 28,524,622 120,492,434 751.91 36.52 32,331,811 93,941,985 845.78 40.45 31,189,011 85,023,398 786.07 39.66 27,280,775 92,283,070 705.22 34.97 26,369,920 92,872,871 711.16 35.25 35,977,418 104,395,152 849.35 44.45 36,206,792 93,510,666 820.76 44.72 35,808,522 88,746,682 873.21 44.39 35,147,733 90,966,026 903.80 42.83 34,421,394 93,729,079 885.30 41.92 36,781,477 94,602,044 946.51 44.36 31,071,002 78,563,663 842.42 37.51 32,219,409 84,161,245 930.50 40.20 39,886,229 102,073,240 1,125.90 44.98 30,668,987 88,108,023 828 38.56
Grupos
Lugar DF Jalisco México Neuvo León Puebla Queretaro Veracruz
Puebla df Veracruz TOTAL
1935 62 8 9 4 77 4 10
1936 59 13 11 4 89 5 10
No.fabricas Valor I Valor producción 39.70% 30.25% 30.10% 26.00% 28.29% 17.55% 4.00% 18.50% 21.45% 69.70% 77.04% 69.10%
1937 36 90 26 25 48 38 263
1937 65 14 12 4 99 6 10
p.69
286
ANEXO B. MAQUINARÍA CIA INDUSTRIAL MANUFACTURERAS, S.A. "RIO GRANDE" EL SALTO, JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto DEPTO. PREPARACION E HILADOS Abridoras 2 A 15.5 Platt & Bros Batientes 5 A 15.5 Platt & Bros Trituradoreas 1 A 15.5 Dobson & Barlow Cardas Chaponas 3 A 15.5 Platt & Bros Cardas de cilindro 62 A 15.5 Varias marcas Manuares 7 A 15.5 Platt & Bros Mecheras en grueso 7 A 15.5 Platt & Bros Mecheras intermedias 9 A 15.5 Platt & Bros Mecheras en fino 24 A 15.5 Mecheras superfino Cordoneras 1 A 15.5 J.M. Summer Devanadoras 20 A 15.5 Varias marcas Torcedoras 1 A 15.5 Dobson & Barlow Salfatinas de hilar Tróciles de pie 40 A 15.5 Varias marcas 14,400 7500 Tróciles de trama 20 A 15.5 Varias marcas 9,360 7500 Dobladoras 2 A 15.5 Varias marcas Trituradoras de desperdicios 1 A 15.5 Dobson & Barlow Batientes engrasadores Batanes Cardas abridoras 5 A 15.5 Platt & Bros Cardas de enrollar Cardas de peinado Continuas de hilar Descatizadoras en mojado Descatizadoras a vapor Desmotadora Exprimidoras Lavadoras de lana Lizosas Peinadoras rectilineas Revolvedoras Secadora de lana Intercétiles Peinadoras circulares Veloces Reunidoras Napa Estiradoras Napa Peinadoras de algodón DEPTO. TEJIDO Y ACABADO Canilleras Cañoneras Maquinas de hacer lisos Maquinas de hacer peinados Maquinas engomadoras Maquinas urdidoras Bastidores de atado Bastidores de repaso Tinas pasteras Telares atriles combinación
2 6 1 1 4 11 8 5 2 122
A A A A A A A A A A
15.5 15.5 15.5 15.5 15.5 15.5 15.5 15.5 15.5 15.5
Lesson's Varias marcas Moor Mill Ltd Moor Mill Ltd Varias marcas Varias marcas Varias marcas Varias marcas Varias marcas Varias marcas
287
ANEXO B. MAQUINARÍA CIA INDUSTRIAL MANUFACTURERAS, S.A. "RIO GRANDE" EL SALTO, JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto Telares cajines 97 A 15.5 Varias marcas Telares cajines chacalos 1 A 15.5 J.M. Summer Telares circulares 2 A 15.5 Hodgson Telares circulares chacalos Telares chacalos 70 A 15.5 Varias marcas Telares doble ancho 10 A 15.5 Varias marcas Telares manguera 1 A 15.5 J.M. Summer Telares planos 664 A 15.5 Varias marcas Telares pabellon 1 A 15.5 J.M. Summer Bastidores de revisar 7 A 15.5 Rio Grande Prensas de empacar 4 A 15.5 Varias marcas Torculos 5 A 15.5 Varias marcas Aprestadores 4 A 15.5 Societé Alsacienne Afelpadores 1 A 15.5 Montfort & Glad Dobladilladoras Enanchadoras 2 A 15.5 Varias marcas Enrolladoras 2 A 15.5 Varias marcas Estampadoras 3 A 15.5 T. Gladd Generadoras Golpeadoras 1 A 15.5 Long Brigde Jabonadoras 1 A 15.5 Sin marca Lavadoras 7 A 15.5 Long Brigde Marcadoras 1 A 15.5 Henry Wallrock Ramas 2 A 15.5 Mather & Platt Rasuradoras 1 A 15.5 Mather & Platt Ramas de teñir Rociadoras 3 A 15.5 F. Gadd Oxidadoras 1 A 15.5 Mather & Platt Aparatos esmeriladores 1 A 15.5 Thomas & Roch Aparatos filtradores 1 A 15.5 Sin marca Ollas de blanqueo 1 A 15.5 Mather & Platt Pasteras 1 A 15.5 Sin marca Secadoras de añil 6 A 15.5 Varias marcas Mercerizadoras 1 A 15.5 R.G. Tanques de tintorería 3 A 15.5 Varias marcas Bobinuares Cepillos Dobladora medidora 6 A 15.5 Varias marcas Enmotadoras fantasia Estufa para secar 1 A 15.5 Guils Lavadora de piezas Mesas de acabado 11 A 15.5 R.G. Ramas de secar 2 A 15.5 Mather & Platt Navajas Palmers Planchadoras Tanques lavadores Tanques para teñir piezas 3 A 15.5 Varias marcas Vaporizadoras 2 A 15.5 T.Gladd Telares franceses Telares ingleses
288
ANEXO B. MAQUINARÍA CIA INDUSTRIAL MANUFACTURERAS, S.A. "RIO GRANDE" EL SALTO, JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto Telares alemanes Carreteros de canilla Carreteros de madeja Circulares p/camiseta y calzoncillo Circulares p/ media y calcetin Circulares para resorte Circulares p/punta de cubrecorsé Circulares para afelpado Circulares para tubos de cubrecorsé Rectilínea para calcetines, etc Rectilinea para sweters Remalladoras Máquinas de cadeneta Máquinas para cerrado Máquinas de sobrecostura Máquina de costura Máquina de hacer ojales Estufas para ahormar Maquina para quesos 7 A 15.5 Lesson's Máquina para conos 2 A 15.5 Lesson's Afirmadoras 2 A 15.5 T. Gladd DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS Calderas 3 A 15.5 Tanques de Petróleo 6 A 15.5 Motores de gas Motores de vapor Motores de aire Motores de carbon vegetal Motores de electricidad 21 A 15.5 Turbinas 4 A 15.5 Dinamos Generadores 7 A 15.5 Hornos fundidores de acero Hornos fundidores de bronce Hornos fundidores de fierro 1 A 15.5 Cajas de modelar Cepillos 3 A 15.5 Tornos 8 A 15.5 Taladros 3 A 15.5 Tarrajas 2 A 15.5 Fresadoras 1 A 15.5 Martinetes 1 A 15.5 Bancos mecanicos 2 A 15.5 Bancos modelistas 1 A 15.5 Bancos carpintería 13 A 15.5 Cepilladoras de carpintería 1 A 15.5 Machihembradoras 1 A 15.5 Sierras circulares 1 A 15.5 Tornos de carpintería 2 A 15.5 Traslapadoras de carpintería 1 A 15.5 Sierras vueltas 1 A 15.5 Molino para tierra refracc. 1 A 15.5 Generador autógeno 1 A 15.5 Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
Galloway Sin marca
Varias marcas
Byram & Cía Varias marcas Varias marcas Pitt's Mach. Co. Sin marca Sin marca Sin marca
The Egaan Co. The Egaan Co.
The Egaan Co.
289
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA "LA EXPERICIENCIA" MPIO. ZAPOPAN, JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x DEPTO. PREPARACION E HILADOS Batiente doble 1 A 15.5 Dobson & Barlow Batiente repasadores 2 A 8 Howard & Bulloug Trituradoreas 1 A 3 William Tathan Cardas Chaponas 21 A 22 Hovard & Bulloug Cardas de cilindro Manuares 3 A 22 Hovard & Bulloug Mecheras en grueso 3 A 22 Hovard & Bulloug 170 Mecheras en grueso 1 A 8 Curties Sone 60 Mecheras en fino 10 A 22 Howard & Bulloug 1,380 Mecheras superfino 1 A 8 Curties Sone 130 Cordoneras 3 A 8 Sin marca 9 Cordoneras 1 A 15.5 Sin marca 24 Mecheras intermedias 5 A 22 Hovard & Bulloug 504 Salfatinas de hilar Tróciles de pie 19 A 20 Hovard & Bulloug 5,700 Tróciles de trama 13 A 20 Hovard & Bulloug 4,180 Tróciles de trama 4 A 20 Platt Brothers 1,472 Trituradoras de desperdicios Batientes engrasadores Batanes Cardas pabiladoras Cardas de enrollar Cardas de peinado Continuas de hilar Descatizadoras en mojado Descatizadoras a vapor Desmotadora Exprimidoras Lavadoras de lana Lizosas Peinadoras rectilineas Revolvedoras Secadora de lana Intercétiles Peinadoras circulares Veloces Reunidoras Napa Estiradoras Napa Peinadoras de algodón DEPTO. TEJIDO Y ACABADO Canilleras 1 A 8 Sin marca Cañoneras 3 A 15 Sin marca Maquinas de hacer lisos Maquinas de hacer peinados Maquinas engomadoras 3 A 8 Hovard & Bulloug Maquinas urdidoras 4 A 15 Henry Livesey Bastidores de atado 4 A 8 Bastidores de repaso 1 A 8 Tinas pasteras 2 A 8 Telares atriles
minuto 1,200 1,500 1,000 160 370 650 400 1,000 700 150 150 700 7,000 6,500 6,500
20 140
290
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA "LA EXPERICIENCIA" MPIO. ZAPOPAN, JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto DEPTO. PREPARACION E HILADOS Telares cajines 68 A 8 Platt Bros 150 Telares cajines chacalos 8 A 8 Gregson & Monk 150 Telares circulares 2 A 8 Hattersley 150 Telares circulares chacalos Telares chacalos Telares doble ancho 2 A 8 Henry Livesey 120 Telares doble ancho 2 A 8 Robert Hall & Sons 120 Telares planos 362 A 8 Henry Livesey 190 Telares planos 19 A 8 William Mills 190 Bastidores de revisar 463 Prensas de empacar Torculos Aprestadores Afelpadores Dobladilladoras Enanchadoras Enrolladoras Estampadoras Generadoras Golpeadoras Jabonadoras Lavadoras Marcadoras Ramas Rasuradoras Ramas de teñir Medidoras 2 A Henry Liversey 34 Tanques de tintorería 1 A Erkens & Brix Estufas para secar 2 A Erkens & Brix Rociadoras Oxidadoras Aparatos esmeriladores Aparatos filtradores Ollas de blanqueo Pasteras Secadoras de añil Mercerizadoras Tanques de tintorería Bobinuares Cepillos Dobladora medidora Enmotadoras fantasia Estufa para secar Guils Lavadora de piezas Mesas de acabado Ramas de secar Navajas Palmers Planchadoras
291
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA "LA EXPERICIENCIA" MPIO. ZAPOPAN, JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto DEPTO. PREPARACION E HILADOS Tanques lavadores Tanques para teñir piezas Vaporizadoras Telares franceses Telares ingleses Telares alemanes Carreteros de canilla Carreteros de madeja Circulares p/camiseta y calzoncillo Circulares p/ media y calcetin Circulares para resorte Circulares p/punta de cubrecorsé Circulares para afelpado Circulares para tubos de cubrecorsé Rectilínea para calcetines, etc Rectilinea para sweters Remalladoras Máquinas de cadeneta Máquinas para cerrado Máquinas de sobrecostura Máquina de costura Máquina de hacer ojales Estufas para ahormar DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS Calderas 1 Tanques de Petróleo 1 Motores de gas Motores de vapor Motores de aire Motores de carbon vegetal Motores de electricidad 7 General Electric 100,125,6.5.3 Co. H/P Turbinas Dinamos Hornos fundidores de acero Hornos fundidores de bronce Hornos fundidores de fierro Cajas de modelar Cepillos 1 Tornos 3 Seneca Falls 11", 11" & 22" Taladros 2 Champion Blower 1" & 3/4 Tarrajas Fresadoras 1 Martinetes Bancos mecanicos 3 Bancos modelistas Bancos carpintería 4 Cepilladoras de carpintería Machihembradoras 1 Sierras circulares 1 Tornos de carpintería 2 Traslapadoras de carpintería Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
292
ANEXO B. MAQUINARÍA CIA INDUSTRIAL DE GUAD, S.A., ATEMAJAC EDO DE JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x DEPTO. PREPARACION E HILADOS Abridoras Batiente 2 A 8 Platt Bros Trituradoreas Cardas Chaponas 15 A 8 Platt Bros Cardas de cilindro Manuares 2 A 8 Platt Bros Mecheras en grueso 2 A 8 Platt Bros Mecheras intermedias 3 A 8 Platt Bros Mecheras en fino 9 A 8 Platt Bros Mecheras superfino Cordoneras 2 A 8 Jhon M Summer Co. Devanadoras Torcedoras Salfatinas de hilar Tróciles de pie 14 A 8 Platt Bros Tróciles de trama 14 A 8 Platt Bros Dobladoras 1 A 8 Platt Bros Trituradoras de desperdicios 1 A 5 Platt Bros Batientes engrasadores Batanes Cardas pabiladoras Cardas de enrollar Cardas de peinado Continuas de hilar Descatizadoras en mojado Descatizadoras a vapor Desmotadora Exprimidoras Lavadoras de lana Lizosas Peinadoras rectilineas Revolvedoras Secadora de lana Intercétiles Peinadoras circulares Veloces Reunidoras Napa Estiradoras Napa Peinadoras de algodón DEPTO. TEJIDO Y ACABADO Canilleras Cañoneras Maquinas de hacer lisos Maquinas de hacer peinados Maquinas engomadoras 2 A 8 Gregson & Monk Maquinas urdidoras 4 A 8 Gregson & Monk Bastidores de atado 2 A 8 Bastidores de repaso 1 A 8 Tinas pasteras Telares atriles
minuto
1,020 175 330 600 744 1,025 894
9,600 9,560 800
58 36
293
ANEXO B. MAQUINARÍA CIA INDUSTRIAL DE GUAD, S.A., ATEMAJAC EDO DE JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto Telares cajines Telares cajines chacalos Telares circulares Telares circulares chacalos Telares chacalos Telares doble ancho Jacquards Telares planos 280 A 8 Gregson & Monk 40" 200 Telares triple anchos Bastidores de revisar 1 A 8 Prensas de empacar 1 Telas 8 John Shaw & Son Torculos 2 Telas 8 Mather Platt Aprestadores 1 Telas 8 Mather Platt Afelpadores Dobladilladoras Enanchadoras 3 Telas 8 Alsacianas Enrolladoras 1 Telas 8 Estampadoras 2 Telas Generadoras Golpeadoras Jabonadoras 2 Telas 8 Mather Platt Lavadoras 3 Telas 8 Alsacianas Marcadoras 1 Telas 8 Mather Platt Ramas Rasuradoras Ramas de teñir Rociadoras 1 Algodo/Telas 8 Sin marca Oxidadoras 2 Telas 8 Long Bridge Aparatos esmeriladores Aparatos filtradores Ollas de blanqueo 3 Telas 11.5 Sin marca Pasteras Secadoras de añil Mercerizadoras Tanques de tintorería 2 Telas 6 Sin marca Bobinuares Cepillos Dobladora medidora 3 Telas 8 Mather Platt Enmotadoras fantasia Estufa para secar Guils Lavadora de piezas Mesas de acabado Ramas de secar Navajas Palmers Planchadoras Tanques lavadores Tanques para teñir piezas Vaporizadoras 1 Telas 8 Long Bridge Telares franceses
294
ANEXO B. MAQUINARÍA CIA INDUSTRIAL DE GUAD, S.A., ATEMAJAC EDO DE JALISCO 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto Telares ingleses Telares alemanes Carreteros de canilla 2 A 8 Jhon M. Sunmer 00 495 Carreteros de madeja Circulares p/camiseta y calzoncillo Circulares p/ media y calcetin Circulares para resorte Circulares p/punta de cubrecorsé Circulares para afelpado Circulares para tubos de cubrecorsé Rectilínea para calcetines, etc Rectilinea para resortes Rectilinea para sweters Remalladoras Máquinas de cadeneta Máquinas para cerrado Máquinas de sobrecostura Máquina de costura Máquina de hacer ojales Estufas para ahormar DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS Calderas 5 The Bromnell, 120-80-75 Atlas, Backak H.P. Tanques de Petróleo 5 300,000 Lts Motores de gas Motores de vapor Motores de aire Motores de carbon vegetal Motores de electricidad 42 ASIA Alemana30-8-30 H.P. Turbinas Dinamos Hornos fundidores de acero Hornos fundidores de bronce Hornos fundidores de fierro 1 1 Tonelada Cajas de modelar Cepillos 1 Tornos 2 The Rohon Carp. Seneca Falls Taladros 1 Tarrajas 2 Fresadoras 1 Martinetes Bancos mecanicos 1 Bancos modelistas Bancos carpintería 2 Cepilladoras de carpintería Machihembradoras Sierras circulares 1 Tornos de carpintería 1 Traslapadoras de carpintería Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
295
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN E "EL HERCULES", EDO. QUERETARO. 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad DEPTO. PREPARACION E HILADOS Husos Rev x Abridoras 2 A 8 Howard y Bullongh Batiente 4 A 15 Platt y H.B. Trituradoreas Cardas Chaponas 45 A 15 Platt Brothers Cardas de cilindro Manuares 6 Mecheras en grueso 6 A 15 Platt Brothers 70 y 80 Mecheras intermedias 7 A 15 Platt y H.B. 124 y 148 Mecheras en fino 13 A 15 Platt y H.B. 160 y 200 Mecheras superfino Cordoneras 6 A 15 Panumth 16 Devanadoras 12 A 18 Sin autor Torcedoras 1 A 8 Sin autor Salfatinas de hilar Tróciles de pie 34 A 15 Howard y Bullongh 300 y 380 Tróciles de trama 14 A 15 Howard y Bullongh 328 y 352 Dobladoras Trituradoras de desperdicios Batientes engrasadores Batanes Cardas pabiladoras Cardas de enrollar Cardas de peinado Continuas de hilar Descatizadoras en mojado Descatizadoras a vapor Desmotadora Exprimidoras Lavadoras de lana Lizosas Peinadoras rectilineas Revolvedoras Secadora de lana Intercétiles Peinadoras circulares Veloces Reunidoras Napa Estiradoras Napa Peinadoras de algodón DEPTO. TEJIDO Y ACABADO Canilleras Cañoneras 5 A 15 Howard y Bullongh 180 Maquinas de hacer lisos Maquinas de hacer peinados Maquinas engomadoras 3 A 8 Howard y Bullongh Maquinas urdidoras 8 A 15 Howard y Bullongh Bastidores de atado 16 A Bastidores de repaso Tinas pasteras 3 Almidón Sin Autor Telares atriles
minuto
175
650 720 1,100
80
7,500 7,000
550
296
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN E "EL HERCULES", EDO. QUERETARO. 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Telares cajines Telares cajines chacalos Telares circulares Telares circulares chacalos Telares chacalos Telares doble ancho Jacquards Telares planos 597 A Pan Curtis y W Smith Telares triple anchos Bastidores de revisar Prensas de empacar 2 A Rogers Ketchum Torculos 1 A Sin Autor Aprestadores Afelpadores Dobladilladoras Enanchadoras Enrolladoras Estampadoras Generadoras Golpeadoras Jabonadoras Lavadoras Marcadoras 1 A Sin Autor Ramas Rasuradoras Ramas de teñir Rociadoras Oxidadoras Aparatos esmeriladores Aparatos filtradores Ollas de blanqueo Pasteras Secadoras de añil Mercerizadoras Tanques de tintorería Bobinuares Cepillos Dobladora medidora 3 A Howard y Bullongh Enmotadoras fantasia Estufa para secar Guils Lavadora de piezas Mesas de acabado 2 A Ramas de secar Navajas Palmers Planchadoras Tanques lavadores Tanques para teñir piezas Vaporizadoras Telares franceses
200
297
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN E "EL HERCULES", EDO. QUERETARO. 1926 Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Telares ingleses 597 A 15 Parr Curtis y W. Smith Telares alemanes 5 Carreteros de canilla Carreteros de madeja Circulares p/camiseta y calzoncillo Circulares p/ media y calcetin Circulares para resorte Circulares p/punta de cubrecorsé Circulares para afelpado Circulares para tubos de cubrecorsé Rectilínea para calcetines, etc Rectilinea para resortes Rectilinea para sweters Remalladoras Máquinas de cadeneta Máquinas para cerrado Máquinas de sobrecostura Máquina de costura Máquina de hacer ojales Estufas para ahormar DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS Calderas 1 Galloway Std 100 H.P. Tanques de Petróleo 6 600 Mts Cubicos Motores de gas Motores de vapor Motores de aire Motores de carbon vegetal Motores de electricidad 9 A.E.G. 608 H.P. Turbinas 1 Wre y Bennett 80 Dinamos Hornos fundidores de acero Hornos fundidores de bronce Hornos fundidores de fierro Cajas de modelar Cepillos 2 Sin Autor Tornos 4 Sin Autor Taladros 2 Sin Autor Tarrajas Fresadoras Martinetes Bancos mecanicos 6 Bancos modelistas Bancos carpintería 8 Cepilladoras de carpintería 1 The Egan Co. Machihembradoras Sierras circulares 2 Sin Autor Tornos de carpintería 1 Sin Autor Traslapadoras de carpintería Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
298
ANEXO B. MAQUINARÍA FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN "RIO BLANCO" EN GUADALAJARA, 1926 Depto de preparación e hilados Maquinaría Capcidad Número Materia horas Marca Husos Rev. Por min Abridoras 1 Algodón 8 platt y bros 1000 Batientes 2 Howard 1300 Cardas chaponas 7 Howard 180 Manuares 1 Howard 280 Mecheras en grueso 1 Cortes 600 Mecheras intermedio 2 Howard 800 Mecheras en fino 3 Cortes 334 1000 Tróciles de pie 8 Brooks 1895 5613 Tróciles de trama 5 Howard 1500 5613
Depto. De ejido y acabado Cañoneras 1 Maquina engomadora 1 Maquina urdidora 1 Telares planos 98
Howard Howard Howard Himyhivery
100
800 40 47 180
Depto de fzas físicas turbinas 1 Quac Torno 1 Taladro 1 Banco mecánico 1 Banco carpintería 1 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
299
ANEXO C. SALARIOS FABRICA DE "RIO BLANCO", GUADALAJARA, JALISCO, 1921. Salario Número de empleados Máximo fijo Mínimo Fijo Puesto Hombre Mujer Hombre Mujer Hombre Mujer Director técnico 1 Empleados admón 1 20 Cabos preparación 2 22 Cabos de hilados 1 22.5 Barrenderos 2 7.5 Batienteros 2 20 Carderos 1 Ayudnates de acrderos 1 Estiradores 2 Ay. Estiradores 1 Veloceros 4 Ay veloceros 4 Trocileros de pie 8 Ay trocileros de pie 7 Trocileros trama 5 ay trocileros tama 5 Ay trocaleros 1 Canilleros 1 Cañoneros 7 Atadores 1 ay atadores 1 Engomadores 1 2.4 Ay engomadores 1 Urdidores 1 Dobladores 1 Revisadores 1 0.8 Tejedores 26 23 Corrieteros 1 2 Ay corrietero 1 2 Pesadores 1 1.24 Mozo de patio 0.9 Portero 2 1.24 Comunero 1 1 1.24 Maestro de taller 1 3.72 Mecanicos 1 2.5 Ay mecanico 2 1.2 Herreros 1 1 Ay herrero 1 0.8 Hojalatero 1 1.65 Carpintero 1 3.19 ay carpintero 1 1.39 Aceitadores 1 1.93 Peones 20 0.8 Maestro calderas 1 1.65 Turbineros 1 1.65 TOTAL 127 24 4.64 20.00 1.60 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Destajo
2.06 1.52 0.234 0.14 0.28 0.148 3.19 1.65 3.19 3 1.02 1.26 3.19 0.48 0.28
cia hank hank hank 100 k
100 k
100 k hilo
1.08 100 k 2 0.6 pza
1.41
300
ANEXO C. SALARIOS HILADOS Y TEJIDOS "LA MAGDALENA" MPIO SAN ANGEL D.F. JUNIO 1921 Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Máximo Mínimo Ayudantes 32 1.04 1.04 Mudadores 102 1.04 0.76 Engomadores 6 4 2.5 Ayte de engomador 8 2.5 1.3 Fatigueros Barrenderos 18 1.5 1.38 Pabileros 69 2 1.5 Peones de telas 8 1.71 1.5 Empacadores 6 2.5 1.5 Carreiteros 12 5 4 Batienteros 9 2 1.5 Escarmenadores 6 1.75 1.5 Tintoreros 6 2.5 1.5 Mecanicos 13 5 2 Herreros 3 3.5 2 Hojalateros 3 3 1.5 Carpinteros 12 3.5 2.25 Aceitadores 14 2 1.5 Electricistas 4 5 2.5 Ayudantes 12 2.5 2 Veladores 5 3 2.5 Porteros 2 3 3 Carderos 18 2 1.97 Tejedores 450 4.5 1.75 Canilleras 12 1.5 1.15 Carreteras 70 2 1.15 TOTAL 900 0 2.72 1.81 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
301
ANEXO C. SALARIOS FABRICA DE SAN "ANTONIO ABAD" 1921 DISTRITO FEDERAL
Puesto Ayudantes Mudadores Engomadores Barrenderos Pabilleros Peones de Telas Empacadores Cabos correiteros Batienteros Escarmendadoras Tintoreros Mecanicos Herreros Hojalateros Carpinteros Aceitadoras Elecctricistas Ayudantes Veladores Porteros Carderos Tejedores Canilleras Carreteras Veloceros Trocileros Envanadoras Torcedoras Mozos de despacho Atadores Pepenadores Dobladoras didores Estiradores Cabos cardas Cabo de preparacion Cabo Hilados Cabo Engomadores Cadillero Queseras Bobinoir Acarreadores de canilla Limpiadores de canilla Boteros de cardas Paquetero Acarreador carretes Limpiadores de Borra lanqueo Aprestos Tinte algodón
Número de obreros Mexicanos Extranjeros 21 16 4 7 1 1 5 5 5 3 2 9 2 2 9 4 1 1 4 3 5 132 2 16 20 36 4 3 6 4 5 3 4 5 2 1 2 1 1 3 2 2 1 4 1 1 3 14 26 7
SALARIO Maximo Mínimo 1.4 1.07 1.07 1.07 1.57 1.57 1.69 1.07 1.79 1.79 1.51 1.51 2.37 1.88 5 3.56 1.94 1.78 1.78 1.78 2.18 1.84 4.16 1.9 4.75 1.9 4 1.9 5.83 1.07 1.71 1.4 2.75 2.75 2.75 2.75 3.17 2.14 2.77 2.33 2.23 2.23 5.53 1.4 1.19 1.19 2.19 1.04 2.69 1.3 2.82 1.11 2.31 1.5 1.97 1.95 1.4 1.4 3.38 2.45 1.07 1.07 1.99 1.99 3.32 2.42 1.74 1.3 6.17 2.78 4.16 4.16 4.5 2.97 5.34 5.34 5.34 5.34 1.5 1.5 1.34 1.13 1.57 1.07 1.4 1.4 1.67 1.67 3.3 3.3 1.4 1.4 1.4 1.07 1.9 1.07 1.9 1.07 1.6 1.4
302
ANEXO C. SALARIOS FABRICA DE SAN "ANTONIO ABAD" 1921 DISTRITO FEDERAL Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo Estampadoras 1 7.5 7.5 Estampadoras ayudantes 13 2.24 1.4 Ayudantes Tintoreros 12 1.84 1.4 Afelpadoras oficial 5 5 5 Afelpadoras ayudantes 20 1.4 1.4 Acabado 11 1.99 1.4 Fogoneros 7 5.83 5.83 Ayudantes 1 2.08 2.08 Carreros 4 5.33 1.71 Albañiles 8 2.97 1.51 Peones de patio 16 1.51 1.51 Sohaufeur 1 4.17 4.17 Jardinero 2 1.67 1.51 TOTAL 522 2.79 2.10 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
303
ANEXO C. SALARIOS COCOLAPAM, ORIZABA EDO DE VERACRUZ AGOSTO 1921 Número de obreros Mexicanos Extranjeros
SALARIO Maximo Mínimo
Puesto Ayudantes Mudadores 55 0.82 Engomadores 7 7.17 Ayte de engomador 5 2.31 Fatigueros Barrenderos 7 1.81 Pabileros 54 5.83 Peones de telas 6 2.31 Empacadores Cabos de correiteros 17 7.01 Batienteros 10 2.06 Escarmenadores 4 4 Tintoreros Mecanicos 21 11 Herreros 2 6.18 Hojalateros 2 4.63 Carpinteros 12 4.12 Aceitadores 9 2.88 Electricistas 15 7.33 Ayudantes 10 4.12 Veladores 8 2.06 Portadores 9 2.47 Carderos 18 7.5 Tejedores 330 5.5 Canilleros 11 2.88 Carreteros 9 2.47 Estibadores 10 2.66 Troxileros 93 4.17 Urdidores 11 4.67 Atadores 9 4.17 Repasadores 12 6.33 Albañiles 9 3.61 Cañoneros 43 2.17 Peones 39 2.88 TOTAL 847 4.24 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
2.31
1.65 2.66
6.18 1.65 1.81 6.18 3.3 2.06 2.06 4.12 2.47 1.65 2.06 3.3 1.65 1.65 1.65
1.65 1.65 2.59
304
ANEXO C. SALARIOS CERRITOS ORIZABA EDO. DE VERACRUZ AGOSTO 1921 Número de obreros Mexicanos Extranjeros 99 27 2 2 2
SALARIO Maximo Mínimo 2.47 1.82 4.95 1.65 1.65
Puesto Ayudantes varios Mudadores Engomadores Ayte de engomador Fatigueros Barrenderos Pabileros 10 3.5 Peones de telas 4 2.06 Empacadores Cabos de correiteros 3 5.36 Batienteros 10 2.06 Escarmenadores Tintoreros 9.07 Mecanicos 7 Herreros Hojalateros Carpinteros 4 6.18 Aceitadores 5 2.06 Electricistas 1 4.33 Ayudantes Veladores 4 3.05 Portadores 2 2.06 Carderos 7 6.5 Tejedores 79 4.33 Canilleros 4 2.06 Carreteros 6 2 Estibadores 4 2.5 Troxileros 51 3 Urdidores 6 5 Atadores 2 2.33 Repasadores 2 4.33 Albañiles 4 5.16 Cocheros 1 1.89 Cañoneros 6 2 Peones 75 2.88 TOTAL 429 3.44 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
2.5
1.65
1.23
3.3 1.65
1.65 2.47 2.67 1.65
2 3.32 1.65 2.88 1.65 1 2.08
305
ANEXO C.SALARIO CIA INDUSTRIAL DE ATLIXCO, S.A. "METEPEC" EDO. PUEBLA 1921 Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo BATIENTES Abridor 1 2 Alimentadores 3 1.8 Bacudidor 1 1.65 Despedazadores 2 1.5 Peones 2 1.5 Atienteros 8 1.8 Pepenador arpileras 1 1.25 CARDAS Carderos 6 2.45 2.25 Porteros 6 1.4 1.28 Moaderos 1 1.5 Afiladores de cardas 2 2.5 1.65 Estiradores 10 2.98 2.78 Veloceros 53 2.34 2.12 Aytes de veloceros 10 1.05 Carretilleros 13 1.05 Barrenderos 2 1.05 Trocileros pie 44 2 1.86 Aytes de trocileros 16 1 Trocileros trama 35 2.5 2.26 Aytes trocileros 23 1 Cabosde Ayudantes 2 1.5 Empaquede canilla 8 0.75 Encuendadores 4 1.05 Arrenderos 2 1.05 Humedecedor 1 1.25 Sacudidores 4 1.05 Pepenadores 5 1.05 Limpiadores 6 1.05 Aceitadores 2 1.28 Comunero 1 1.05 Portero 1 1.5 Cañoneros 22 2.08 1.9 Comuneros 1 1.11 Faciadores de carretes 7 1.11 Carretilleros 2 1.11 Barrenderos 2 1.11 Hurdidores 17 2.55 1.98 Engomador 1 Semanal 18.33 Antepasadores 5 2.13 1.76 Aytes repanadores 5 1 Aratadores 9 3.12 2.88 Pepenadores 4 1 Tejedores 419 3 2.4 Trameros 2 1.75 1.25 Cargadores de telas 4 1.5 Barrenderos 19 1.37
306
ANEXO C.SALARIO CIA INDUSTRIAL DE ATLIXCO, S.A. "METEPEC" EDO. PUEBLA 1921 Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo Comuneros 3 1.11 Humeedecedor 1 1.25 Aviadores 2 2.5 1.5 Refacciones 1 1.25 DESPOSITO DE PLANTAS Medidores 3 3 2.5 Revisadores 5 2.25 Dobladores 7 1.5 Clasificadroes 1 2 Enterciadores 1 2.37 1.25 Correiteros 16 5 4.7 Ayte Correiteros 8 3.5 Mecanico 1 3 Ayte mecanico 1 1.5 Carpintero 1 2.5 Ayudante Carpintero 1 1.5 Portero 1 3 Tanqueo 42 2.3 1.7 Titoreria de hilaza 3 1.75 1 Tintoreria de generos 40 1.4 1.25 Estampa 36 2 1 Afelpado 10 1.25 0.8 Apresto de blanco 27 2 0.8 Apresto de color 26 1.75 0.8 Emparejadora de constura 14 1.75 1 Empaque 5 1.5 1.12 Muestrarios 3 2.5 0.8 Almacen 1 1.5 Aprobado 4 2.5 1.25 FUERZA HIDRAULICA Engrasodores 5 1.32 Turbinero 1 2.75 Ayte turbinero 1 1.32 Encargado 1 5 Compuerteros 6 1.25 VAPOR Fogonero 1 3 Ayudante 1 2.75 FZA ELECTRICA Encargado 1 3.5 Turbinero 2 2 Transformador 1 1.32 ALUMBRADO Electricistas 1 3 Ayte Electricista 1 1.25 Presero 1 1.25 TALLER MECANICO Mecanicos 4 3.5 2.75
307
ANEXO C.SALARIO CIA INDUSTRIAL DE ATLIXCO, S.A. "METEPEC" EDO. PUEBLA 1921 Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo Herreros 2 3 Hojalateros 3 3.5 3 Tornero 1 3.5 Bandero 1 2 Ayudantes 4 2.5 1.5 FUNDICION Maestro 1 4 Fundidores 2 2.5 2.25 Ayudantes 1 1.08 CARPINTERIA Maestro 1 6.5 Modelista 1 3.5 Carpinteros 6 2.5 Ayudantes 2 1.5 1 GENERALES Veladores 5 3 1.75 Mozo de almacen 1 3.5 Mozo de despacho 1 2 Mozo de correo 1 1.75 Hulero 1 1.25 1.5 Cargadores 13 1.75 Peones 9 1.25 CASERIO DE OPERARIOS Vigilantes 2 1.75 Carreros 3 1.25 Barrenderos 6 1 Limpia petica 2 1 TOTAL 1154 1.99 1.76 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
308
ANEXO C. SALARIOS FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS "EL HERCULES" ESTADO DE QUERETARO ENERO 1921 Salario Puesto No. Obreros Trabajo Maximo Mínimo BATIENTES Cabos 2 Diario 1.90 Batienteros 12 Diario 1.73 Borreros 2 Diario 1.25 Abridores 2 Diario 0.95 Barrenderos 2 Diario 0.95 0.74 CARDAS Carderos 16 Diario 1.73 Boteros 4 Diario 1.50 Turbineros 2 Diario 1.33 Aceitadores 2 Diario 1.43 Barrenderos 3 Diario 1.14 Comuneros 3 Diario 1.25 1.14 PABILADORES Estibadores 12 Destajo 1.67 1.10 Veloces Gordos 12 Destajo 1.67 1.10 Intermedios 18 Destajo 1.97 1.10 Finos 27 Destajo 1.45 1.00 Ayudantes 30 Diario 1.25 Carreteros 5 Diario 1.31 1.25 Peones 3 Diario 1.14 HILADOS Cabos 2 Diario 2.75 Ayudantes 2 Diario 1.93 Camilleros 4 Diario 1.42 Barrenderos 5 Diario 0.95 Trocilleros de Trama 28 Destajo 2.40 1.56 Trocilleros de Pie 71 Destajo 2.06 1.63 Mudadores 72 Diario 0.95 Cordoneros 4 Diario 1.14 1.00 DEVANADO Cabos 1 Diario 0.60 Devanadores 17 Destajo 3.34 1.22 Paquetero 1 Destajo 4.12 3.00 CARRETEROS Amarradores 60 Destajo 0.97 0.74 Barrenderos 2 Diario 0.95 URDIDO Urdidores 11 Destajo 3.62 1.76 ENGOMADO Ayudantes 3 Destajo 2.60 Peones 6 Destajo 2.40 Fogoneos 2 Diario 2.07 Leñero 1 Diario 1.14 ATADO Atadores 9 Destajo 3.30 1.36 Peinero 1 Diario 1.52 DOBLADO Dobladores, emparejadores, marcadores, 12 etc Destajo 3.00 1.50 TELARES
309
ANEXO C. SALARIOS FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS "EL HERCULES" ESTADO DE QUERETARO ENERO 1921 Salario Puesto No. Obreros Trabajo Maximo Mínimo Cabos 1 Diario 4.50 Carreteros 13 Destajo 3.21 2.92 Medidores 6 Diario 1.79 Canilleros 2 Diario 1.50 Pesadores 2 Diario 1.25 Trameros 6 Diario 0.95 Barrenderos 6 Diario 1.50 Peones 1 Diario 1.25 Tejedores, según actitud y dedicacion 520 Destajo 2.14 1.50 TALLERES Mecanicos 12 Diario 3.41 1.00 Herreros 3 Diario 3.34 1.25 Carpinteros 11 Diario 2.38 0.95 Hojalateros 2 Diario 2.42 1.52 Talabarteros 2 Diario 2.00 1.49 Electricistas 2 Diario 3.66 2.38 VARIOS Empleados 7 Diario 4.33 3.66 Porteros 2 Diario 1.90 1.25 Preseros 2 Diario 1.40 Registros 2 Diario 2.21 2.08 Veladores 7 Diario 1.14 Mozo correo 1 Diario 1.14 Cocheros 2 Diario 2.75 1.75 Albañiles 10 Diario 1.50 0.95 Peones 16 Diario 1.25 1.14 Capitan de peones 1 Diario 1.49 Criados 2 Diario 0.75 Esculcadores 3 Diario 2.50 1.75 TOTAL 1115 126.51 46.79 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
310
ANEXO C. SALARIOS FABRICA DE SANTA ROSA, MAYO 1921 Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo Batienteros 23 2.35 1.65 Carderos 19 4.6 2.14 Pabileros 31 2.51 1.65 Veloceros 43 5.64 2.75 Trocileros de piey trama 152 4.85 2.42 Tejedores 437 4.85 2.2 Canoneros 60 1.99 1.75 Urdidores 13 4.48 3.16 Repasadores 19 2.82 2.2 Cabos correiteros 15 8.89 7.66 Aytes de Correiteros 4 5.77 5.77 Engomadores 9 5.5 2.8 Aytes de engomador 7 1.97 1.97 Carreteros 5 1.81 1.73 Aceiteros 11 2.23 1.81 Tintoreros 23 2.23 1.65 Mecanicos y aytes 27 8.9 1.98 Herreros y aytes 8 5.2 2.97 Carpinteros y aytes 20 4.16 2.31 Hojalateros y aytes 7 4.27 1.78 Electricistas 9 9.33 4.12 Aytes de electricista 9 5.56 3.93 Albañiles 17 5.56 2.6 Peon de albañil 18 1.78 1.65 Calderas 6 3.25 1.65 Barrenderos 19 1.65 1.65 Peones de telas 3 1.73 1.73 Empacadores 4 5.83 3.5 Veladores 11 5 2.5 Porteros 11 6.66 2.5 Cargadores 16 2.82 1.65 Aytes diversos 65 2.97 1.65 Aytes menores de edad 139 1.43 0.83 Operarios diversos de estamp. 236 3.3 1.65 Caballerangos y mozos 8 2.64 1.65 Peones diversos 50 1.65 1.65 TOTAL 1554 4.06 2.42 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
311
ANEXO C. SALARIOS CIA. INDUSTRIAL VERACRUZANA, S.A. MPIO DE ATLIXCO, EDO DE PUEBLA 1921 Número de obreros SALARIO Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo Ayudantes 60 1.11 1 Mudadores 32 0.9 0.9 Engomadores 1 0.02 Aytede Engomador 3 2 1.25 Barrenderos 10 1.5 1.11 Papileros 30 2 1.5 Peones de telas 2 1.5 1.5 Empacadores 1 0.2 0.15 Correiteros 8 4 4 Batienteros 10 2.5 1.8 Tintoreros 12 2.75 1.4 Mecanicos 11 7 1 Herreros 2 2.75 1 Hojalateros 2 3 0.75 Carpinteros 9 3 2.25 Aceitadores 6 3 1.25 Electricistas 1 7 2 Ayudantes 3 3 2 Veladores 2 3 2 Porteros 8 2.5 2 Carderos 8 1.89 1.23 Tejedoras 200 5 1.5 Canilleras 4 1 1 Carreteras 4 1 1 Trosileros 38 2.5 2 Cañoneros 15 1.5 1 Urdidores 6 4 2 Retadores y Repasadores 5 6 3 Aprestos 12 1.5 1.3 Almacen 10 5 1 Patios y varios servicios 50 3 1 TOTAL 565 2.75 1.50 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
312
Anexo C. Salarios Rio Blanco 1922
Obreros
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
1 2 3 4 5 6 7
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores Aayudante engomado Albañiles
16 33
8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros (costureras) Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cañoneros Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mudadores Mecánicos Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Repasadores Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
12 18 6 15 30 6 35 1 12 25 28 44 3 19 5 590 29 27 14 10 7
Máximo Mínimo Promedio 1.82 1.65 1.735 4.13 1.25 2.690 2.15 1.65 1.900 2.06 1.65 1.856 3.13 1.65 2.390
17 15 24
3.66 5.28 2.39 1.65 1.75 7.00 5.94 4.75 1.65 7.00 5.70 2.00 2.64 1.00 2.50 3.13 2.00 9.35 3.63 2.00 8.25
1.80 2.06 1.65 1.65 1.75 1.90 1.65 4.75 1.65 5.77 2.06 1.25 1.65 1.00 1.50 1.65 2.00 2.06 1.82 1.50 5.05
4.75 6.18 7.20 9.80 7.26 10.00 8.33 7.43 1.10 9.90 3.13 4.50 1.10 5.20 1.40 4.00 5.50
1.82 2.06 3.30 3.15 2.06 10.00 8.33 7.43 0.83 2.06 1.65 4.50 0.83 2.06 1.30 3.00 5.50
156
2.50
1.65
90 545 26 14 66 2645
3.13 4.00 3.00 2.88 3.75 4.34
1.65 2.00 2.50 2.06 1.48 2.56
10 29 6 10 14 1 1 1 70 75 455 4 12 4 4 10 1
3
2
5
2.730 3.670 2.020 1.650 1.750 4.450 3.795 4.750 1.650 6.385 3.880 1.625 2.145 1.000 2.000 2.390 2.000 5.705 2.725 1.750 6.650 3.285 4.120 5.250 6.475 4.660 10.000 8.330 7.430 0.965 5.980 2.390 4.500 0.965 3.630 1.350 3.500 5.500 2.075 2.390 3.000 2.750 2.470 2.615 3.45
313
Número de empleados
Empleados Mexicano Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Sumas
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
Promedio
1 1 87 88
7 8
10
3
Salarios individuales cuota diaria Destajo Maximo Hombre Mujer 12.60
Hombre
Hombre 3.00
Mínimo Mujer 4.50
Promedio 1.25
3.51
Fijo Maximo Mínimo Promedio Mujer Menor Hombre Mujer Menor 9.90 2.06 1.50 1.65 1.65 0.82 2.70
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
314
Anexo C. Salario San Lorenzo 1922
Obreros
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo Mínimo Promedio 2.06 1.65 1.855 2.06 1.65 1.855 2.06 1.65 1.855
1 2 3 4 5 6
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores Ayudante engomado
4 4
7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50
Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Cajoneros Canilleros Correiteros Carpinteros Cañoneros Cuenderos Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mudadores Mecánicos Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Repasadores Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores
4 11 4 3 5
2.48 3.66 2.96 1.82 1.65
1.65 1.80 1.65 1.65 1.65
2 15 7 6 10 6 41 2
5.33 4.12 1.65 1.65 6.74 4.70 3.00 2.06
1.75 2.06 1.65 1.65 4.95 2.48 1.65 1.65
3 28 8 3 6
4.50 3.13 4.02 5.66 3.25
2.25 1.65 1.65 1.65 1.65
2
2.88
2.06
1
5.44
5.44
6.50 5.80 0.99 8.50 1.65 3.33 1.10 3.30
6.50 5.80 0.83 2.06 1.65 2.25 0.83 1.65
3.50 4.25
1.07 4.25
2.50
1.65
5
1 1 37 12 99 6 10 2 2 3 1 85
1 1
2.065 2.730 2.305 1.735 1.650 3.540 3.090 1.650 1.650 5.845 3.590 2.325 1.855 3.375 2.390 2.835 3.655 2.450 2.470 5.440 6.500 5.800 0.910 5.280 1.650 2.790 0.965 2.475 2.285 4.250 2.075 -
315
Número de empleados
Obreros 51 52 53 54 55
Mexicano
Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Salario
Extranjero
278 10 3 44 439
Máximo
Mínimo
4.00 2.50 2.20 3.75 3.03
2
2.00 1.25 1.65 1.48 1.95
Promedio 3.000 1.875 1.925 2.615 2.49
Empleados Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador Sumas
1
10
6 1 1
7
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Maximo Mínimo Hombre Mujer Hombre Mujer 5.66 2.66 3.00
7
2
17
2
Promedio 1.25
4.77
Fijo Maximo Mujer
Hombre 8.50
Menor 2.06
Hombre 1.50
Mínimo Promedio Mujer Menor 1.65 1.65 0.83 2.65
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
316
Anexo c. Salarios Cerritos 1922
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos
11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49
Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cañoneros Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mudadores Mecánicos Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Repasadores Trameros Talabarteros Trosileros
Número de empleados Mexicano
Extranjero
Salario Máximo
Mínimo
5
2.06
1.65
2 4 2 10
1.82 5.16 2.50 2.06
1.82 2.88 2.50 1.65
2
1.65
1.65
7 6 4 3 4 6 1
6.50 2.00 2.06 5.36 6.18 2.00 1.90
2.47 1.65 1.65 5.36 1.65 1.25 1.90
75 4 1 2
2.06 4.02 4.50 4.95
1.65 1.65 4.50 4.95
27 7 99
0.99 9.07 1.88
0.83 1.65 1.65
2
3.00
2.50
51
2.50
1.65
Promedio 1.855 1.820 4.020 2.500 1.855 1.650 4.485 1.825 1.855 5.360 3.915 1.625 1.900 1.855 2.835 4.500 4.950 0.910 5.360 1.765 2.750 2.075
317
Número de empleados
Obreros 50 51 52 53 54 55
Mexicano
Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Salario
Extranjero
93 6 4 10 324
Máximo
0
Mínimo
4.00
2.00
3.05 3.75 2.97
2.06 1.48 1.96
Promedio 3.000 2.555 2.615 2.47
Empleados Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador
1
10
3
7 1
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Maximo Mínimo Hombre Mujer Hombre Mujer 6.50 3.96
Promedio 5.44
Fijo Hombre
Maximo Mujer
Menor Hombre 9.07 1.50 1.65 Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Mínimo Mujer
Promedio Menor 0.83
2.68
318
Anexo C. Salarios Cocolapan 1922
Obreros
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo Mínimo Promedio 2.06 1.65 1.855 2.88 2.06 2.470 2.06 1.65 1.855 3.61 1.65 2.630
1 2 3 4 5 6 7
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles
10 9
8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50
Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cañoneros Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Peinadrs Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mudadores Mecánicos Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Repasadores Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores
9
4.17
1.80
7
1.82
1.65
18 9 11 17 12 43
4.12 2.48 2.68 7.00 4.12 2.00
2.06 1.65 1.65 5.77 2.06 1.75
20 9 15 7 4
4.12 2.00 7.33 3.25 2.00
1.65 2.00 4.12 1.65 1.75
2 2
6.18 4.65
3.30 4.65
55 21 37
9.00 9.00 0.99 11.00 2.88
9.00 9.00 0.83 3.75 1.65
12
2.50
2.50
93
2.00
1.65
5 9
1 1
2.985 1.735 3.090 2.065 2.165 6.385 3.090 1.875 2.885 2.000 5.725 2.450 1.875 4.740 4.650 9.000 9.000 0.910 7.375 2.265 2.500 1.825 -
319
Número de empleados
Obreros 51 52 53 54 55
Mexicano
Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Salario
Extranjero
330 11 8 54 436
Máximo
2
Mínimo
4.00
2.00
2.06 3.75 3.53
1.65 1.48 2.43
Promedio 3.000 1.855 2.615 2.98
Empleados Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador Sumas
1
10
4 5
7 1 1
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Maximo Mínimo Hombre Mujer Hombre Mujer 5.83 2.17 2.00
Promedio 1.25
5.52
Fijo Maximo Mujer
Mínimo Promedio Hombre Menor Hombre Mujer Menor 11.00 1.82 1.50 1.65 1.65 0.83 2.60 Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
320
Anexo C. Salarios Hercules 1922
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Ayudantes Acarreador pabilo Paqueteros aguadores Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Cordoneros Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cabos Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Comuneros Fogoneros Porteros Grabadores Herreros Hojalateros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Maquinistas Medidores Peones Pesadores Pegadores turbineros Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros Trosileros ayudantes Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Extranjero 2 2 9 4 3 2 7 12 17 4 24 2 1 16 60 4 14 10 2 1 17 9 4 24 2 2
3 2 3 4 2
15 6 11 2 52 2 3 6 95 24 503 14 6 62 1069
Salario Máximo Mínimo Promedio 0.95 0.95 0.950 1.49 1.49 1.490 2.75 1.83 2.290 1.42 1.42 1.420 1.50 1.00 1.250 1.40 1.40 1.400 1.50 0.95 1.225 3.00 1.33 2.165 2.14 1.14 1.640 1.14 1.14 1.140 1.50 0.95 1.225 1.05 1.05 1.050 3.66 3.66 3.660 2.14 2.14 2.140 1.50 0.62 1.060 1.31 1.31 1.310 3.66 2.75 3.205 2.38 1.25 1.815 2.21 2.08 2.145 2.00 2.00 2.000 2.25 1.50 1.875 3.33 2.00 2.665 1.90 1.14 1.520 2.00 1.25 1.625 3.66 3.66 3.660 5.83 3.66 4.745 1.25 1.25 1.250 2.07 2.07 2.070 1.90 1.25 1.575 3.34 1.25 1.200 2.42 1.52 1.970 1 10.85 10.85 10.850 1 11.66 11.66 11.660 3.41 0.60 2.005 1.79 1.79 1.790 1.25 1.14 1.195 1.25 1.25 1.250 1.14 1.14 1.140 1.40 1.33 1.365 2.50 2.12 2.310 0.95 0.95 0.950 2.25 1.25 1.750 1.52 1.52 1.520 1.75 0.66 1.205 3.00 1.50 2.250 1.14 1.40 1.270 1.75 0.60 1.175 2 2.47 1.93 2.18
321
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60
Mexicano
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas
Extranjero
8
Salario Máximo Mínimo Promedio 1 18.66 16.5 17.58 1 8.33 8.33 8.33 0 0 5 3.66 4.33
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Hombre
Maximo Mujer 5.00
Mínimo Promedio Menores Hombre Mujer Menores 2.50 1.00 0.75 0.75 0.75
Fijo Maximo Mínimo Promedio Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor 4.00 1.14 1.52 0.95 0.80 0.75 Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
322
Anexo C. salarios Metepec 1922
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Número de empleados Mexicano
Extranjero
Abridores 1 Aceitadores 2 Amarradores Acabadores Afelpadores 10 aguadores Albañiles Atadores 9 Batienteros 8 Banderos 2 Barrenderos 31 Boneteros Bodegueros Carderos 6 Carreteros 22 Canilleros Correiteros 16 Carpinteros 12 Cabos 2 Cocheros Debanadores Dobladores 7 Diversos 626 Estiradores 10 Electricistas 7 Engomadores 1 Empacadores 5 Estampadores 36 Encargados Fatigueros Fogoneros 2 Fundidores 4 Grabadores 4 Herreros 2 Hojalateros 3 tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Maquinistas Molineros Peones 11 Pesadores 1 Pegadores de hilo Pintores Revisadores 18 Rodillero Trameros 2 Talabarteros Trosileros 118 Torcedores Tintoreros 43 Tejedores en general 419 Urdidores 17 Veladores 5 Veloceros 63 Sumas 1525 Fuente Exp. 1 Caja 430 Depto del Trabajo AGN
Salario Máximo Mínimo Promedio 2.00 2.00 2.000 1.28 1.28 1.280 1.25 1.00 1.125 3.12 2.50 2.810 1.80 1.80 1.800 2.05 1.80 1.925 1.05 0.80 0.925 2.45 2.25 2.350 2.08 1.90 1.990 5.00 4.25 4.625 2.50 2.50 2.500 1.50 1.50 1.500 1.50 1.50 1.500 1.55 1.55 1.550 2.98 2.78 2.880 3.00 3.00 3.000 3.00 3.00 3.000 1.50 1.25 1.375 2.00 1.50 1.750 3.00 3.00 3.000 2.50 2.25 2.375 2.50 2.25 2.375 3.00 3.00 3.000 3.50 3.00 3.250 1.25 1.25 1.250 1.50 1.25 1.375 2.09 2.09 2.090 1.75 1.25 1.500 1.62 1.30 1.460 1.40 1.25 1.325 3.00 2.50 2.750 2.55 1.98 2.265 3.00 3.00 3.000 2.34 2.12 2.230 0 2.25 2.05 2.15
323
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61
Mexicano
Extranjero
Salario Máximo
Mínimo
Promedio
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas administrador Fuente Exp. 1 Caja 430 Depto del Trabajo AGN
324
Anexo C. Salarios Rio grande 1922
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores aguadores Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cabos en v/s dep Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidoresx kilo Grabadores Herreros Hojalateros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Maquinistas Molineros Peones Pesadores Pegadores de hilo Pintores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros de pie Torcedores de cordón Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
6 2 22 2 1 21 15 15 2 10
2.00 0.80 2.03 1.06 1.24 2.66 2.80 2.12 1.65 1.24
1.24 0.8 0.69 1.00 1.24 1.49 0.96 1.65 1.65 0.83
3 22 63 1 9 18 15 2
1.65 2.32 1.86 1.02 6.00 4.00 5.31 1.65
1.06 2.06 0.69 1.02 3.50 0.54 1.35 1.00
5 4 27 4 9 2 14
2.50 3.35 1.91 1.48 6.14 5.00 4.00
1.21 0.50 0.83 1.00 1.24 2.45 1.06
4 6 4 2 1 3 1 3
3.62 0.10 6.00 2.87 2.44 3.50 3.20 2.40 4.00
1.24 0.10 0.89 1.20 0.71 3.50 1.50 2.40 2.00
72 3 60 2 15
1.78 1.33 0.83 1.81 1.33
1.00 1.33 0.83 0.89 0.83
2.01 2.45 1.55 0.89 1.75 2.80 2.86 2.12 2.38 2.50
1.53 0.83 0.66 0.83 1.00 1.70 1.05 1.65 1.00 1.24
30 3 59 5 14 550 17 14 62 1224
0
Promedio 1.620 0.800 1.360 1.030 1.240 2.075 1.880 1.885 1.650 1.035 1.355 2.190 1.275 1.020 4.750 2.270 3.330 1.325 1.855 1.925 1.370 1.240 3.690 3.725 2.530 2.430 0.100 3.445 2.035 1.575 3.500 2.350 2.400 3.000 1.390 1.330 0.830 1.350 1.080 1.770 1.640 1.105 0.860 1.375 2.250 1.955 1.885 1.690 1.87
325
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69 70 71 72 73 74 75 76 77 78 79 80 81 82 83 84 85 86 87 88 89
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Pabilero Comuneros Lpmdores Acrrdrs Peinero Cargadores Medidores D. Trama Armadores desperdc Turbinas Mecánicos Cobreros Lavaderos Apretros Secadores Chamucdrs Restidres Tórculos Jabondres Maestro preparación Maestro hilados Maestro telares Maestro borras Maestro blanqueo Maestro estampado Maestro grabado Maestro acabado
Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo 1 1
Mínimo
25 18.66
13
7.5
4 4 5 4 1 2 2 4 2 8 7 33 2 11 9 13 2 13 10 4
1.24 1.24 1.24 1.32 1.24 1.24 1.65 1.24 2.66 1.11 1.78 9.17 5.32 3.25 1.55 1.21 1.21 1.77 2.22 1.32 9.59 15.71 14.28 6.66 15.76 14.28 10 8.33
1 1 2 1 1 1 2 1
Promedio 22.5 17.63 0 0 4 5.75
20 16.6
1.24 1.02 1.02 1.24 1.24 1.24 1.65 1.04 2.23 0.75 1.12 0.53 0.53 0.69 1.06 0.69 1.06 0.69 1.21 0.69 9.59 15.71 10.5 6.66 15.76 14.28 10 8.33
1.24 1.13 1.13 1.28 1.24 1.24 1.65 1.14 2.445 0.93 1.45 4.85 2.925 1.97 1.305 0.95 1.135 1.23 1.715 1.005 9.59 15.71 12.39 6.66 15.76 14.28 10 8.33
Sumas 153 12 Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
326
Anexo C. Salarios Santa Rosa 1922
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44
45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores aguadores Albañiles Aytes. Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos y cepilladores Carreteros Canilleros Cañoneros Correiteros y ayudantes Carpinteros Cabos Cocheros Costureras Debanadores Dobladores Diversos Pabiladores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Maquinistas Molineros Muestrarios Peones Pesadores Pegadores de hilo Pintores Repasadores Aytes. Repasadores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros pie, trama Torcedores Aytes. Trocileros Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores y porteros Veloceros Aytes. Veloces Sumas
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
17 18
5.50 1.65
2.60 1.78
23
2.35
1.65
22
1.65
1.65
17
2.31
2.06
60 19 20 7
8.50 6.00 6.25
5.77 1.65 4.17
30
1.65
2.00
31 18 15 4 207
2.50 7.74 2.80 3.50 5.18
1.75 1.65 1.98 2.25 1.65
6 7 6 8 4
3.25 7.25 6.75 7.42 5.00
2.75 4.00 3.50 1.65 3.75
1
8.33
8.33
2 263
1.25 1.65
1.65
108
4.30
2.90
56 23 437 13 22 43 25 1563
3.00 2.01 5.00 4.50 6.50 2.95 0.83 5.10
5.00 1.65 1.75 3.25 2.50 2.10
19 12
0
3.10
Promedio 2.820 2.820 2.250 1.650 2.185 7.830 3.825 5.208 1.825 2.125 4.695 2.390 2.875 3.415 3.000 5.625 5.125 4.535 4.375 8.330 0.625 1.650 3.600 4.000 1.830 3.375 3.875 4.500 2.525 0.825 4.15
327
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas administrador Cañoneros Cargadores Mecánicos y ayudantes Repasadores ayudnates menores Suma
Mexicano Extranjero
60 16 27 19 95 217
Salario Máximo Mínimo
0
2.2 2.82 8.17 4.2 0.83 18.22
1.65 1.65 1.85 2.5 0.83
Promedio 0 0 0 0 0 0 2.000 2.235 3.500 3.000 0.83
Salarios individuales de cuota diaria
Hombre
Destajo Maximo Mujer Menores 5.50 3.00
Mínimo Hombre Mujer Menores 1.75 1.65
Fijo Maximo Mínimo Promedio Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor 8.33 0.83 1.65 0.83 Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1 y Caja 435 Exp. 2.
328
Anexo C. Salarios La magdalena 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cañoneros Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Peinadrs Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mudadores Mecánicos Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Repasadores Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Extranjero 10 6 2 90 10 2 10 12 6 2 4 2 12 60 10 8 6 6
4 31 2 3 8 4 4 3 2 1 1 1 1 1 1 1 2 10 3 6 1 3 1 1 80 6 596 10 4 6 1055
Salario Máximo Mínimo Promedio 1.60 1.38 1.490 1.71 1.38 1.545 2.25 2 2.125 3.00 1.04 2.020 1.70 1.28 1.490 2.00 2.00 2.000 2.50 1.78 2.140 3.00 1.60 2.300 1.97 1.60 1.785 2.36 2.36 2.360 1.71 1.38 1.545 3.00 2.12 2.560 1.97 1.97 1.970 2.00 1.04 1.520 2.00 1.04 1.520 6.00 4.00 5.000 3.44 1.50 2.470 3.00 2.36 2.680 1.78 1.60 1.690 2.00 1.50 1.750 2.00 1.75 1.875 6.00 3.00 4.500 4.50 1.71 3.105 2.25 1.48 1.865 6.00 4.00 5.000 6.00 4.00 5.000 1.97 1.97 1.970 3.00 2.00 2.500 7.00 7.00 7.000 4.00 4.00 4.000 2.50 2.00 2.250 6.00 4.00 5.000 5.00 5.00 5.000 5.00 5.00 5.000 4.00 3.00 3.500 1.38 1.38 1.380 4.00 3.00 3.500 2.50 1.50 2.000 4.00 4.00 4.000 2.41 1.38 1.895 1.71 1.71 1.710 3.00 3.00 3.000 2.50 1.70 2.100 1.38 1.04 1.210 4.00 1.60 2.800 4.00 2.50 3.250 3.00 2.00 2.500 2.50 1.50 2.000 0 3.14 2.32 2.726
329
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61
Mexicano
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador suma
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
Promedio
1
4
1 1 4
4
7
200
100
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Hombre
Maximo Mujer 3.00
Mínimo Promedio Menores Hombre Mujer Menores 2.50 2.00 1.60 1.50 1.04
Fijo Maximo Mínimo Promedio Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor 3.00 2.50 2.00 1.50 1.50 1.04 Fuente Exp. 1 Caja 405 Depto del Trabajo AGN
330
Anexo C. Salarios Miraflores 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55 56
Abridores Acarreador Amolador Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boteros Bodegueros Carderos Carreteros Carretillero Correiteros Carpinteros Cañoneros Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Cuendero Canillero Encargados Mozos Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Mudadores Maestros hilados Pepenador Mecanicos Portero Peones Pesadores Rodillro Turbineros Revisadores Repasadores Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Pabilero Sumas
Número de empleados Mexicano
Extranjero 2 1 1
2 2 3 1 4 2 3 11 1 4 3 4 1 1 1 18 3 2 3 1 1 2 1 1
2 1 13 1 2 1 5 1 1 2 1 3 29
80 2 3 16 1 243
Salario Máximo Mínimo Promedio 1.21 1.21 1.210 1.09 1.09 1.090 1.70 1.7 1.700 2.00 1.00 1.500 3.08 2.51 2.795 1.70 1.36 1.530 1.50 1.50 1.500 1.22 1.21 1.215 1.36 1.22 1.290 1.70 1.70 1.700 1.37 1.06 1.215 0.88 0.88 0.880 3.75 2.50 3.125 4.50 2.00 3.250 4.16 2.50 3.330 1.80 1.80 1.800 0.88 0.88 0.880 1.00 1.00 1.000 2.00 0.75 1.375 1.01 0.77 0.890 2.50 2.42 2.460 2.82 1.36 2.090 0.88 0.88 0.880 0.88 0.88 0.880 3.00 2.00 2.500 0.66 0.66 0.660 2.50 2.50 2.500 4.00 1.25 2.625 2.00 2.00 2.000 0.80 0.80 0.800 1 9.30 9.30 9.300 0.72 0.72 0.720 5.83 4.00 4.915 1.71 1.71 1.710 1.00 1.00 1.000 2.00 2.00 2.000 4.00 4.00 4.000 2.00 2.00 2.000 1.75 1.75 1.750 2.00 0.66 1.330 1.35 0.63 0.990 4.07 0.63 2.350 4.23 2.50 3.365 2.00 1.50 1.750 2.28 0.78 1.530 1.21 1.21 1.210 1 2.25 1.69 1.969
331
Número de empleados 57 58 59 60 61 62
Salario
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas 1 3.33 Administrador 1 10 Salarios Individuales de cuota diaria Destajo Maximo Mínimo Promedio Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores 4.23 2.18 1.19 0.63 0.70 0.55 Fijo Maximo Mínimo Hombre Mujer Menor Hombre Mujer 8.33 0.75 0.66 Fuente Exp. 1 Caja 405 Depto del Trabajo AGN
Promedio Menor 0.66
332
Anexo C. Salarios San antonio 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Acarreador Amolador Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boteros Bodegueros Carderos Carreteros Carretillero Correiteros Carpinteros Cabos Chaufer Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mecanicos Molineros Peones Costureras Blanqueo Pintores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Extranjero 1 3 15 20 3 10 6 2 6
9 12 5 7 4 2 10 1 60 10 2 5 8 10 21
6 2 2
8 17 22 24 1 1
60 8 132 5 3 29 552
Salario Máximo Mínimo Promedio 2.25 2.25 2.250 1.71 1.40 1.555 4.61 1.55 3.080 5.00 1.55 3.275 2.97 2.08 2.525 2.29 1.07 1.680 1.94 1.78 1.860 2.08 1.40 1.740 1.90 1.51 1.705 2.23 1.67 1.950 1.51 0.55 1.030 5.00 3.56 4.280 5.83 1.50 3.665 6.17 2.75 4.460 5.33 4.16 4.745 2.51 1.25 1.880 1.62 1.62 1.620 2.25 1.07 1.660 1.78 1.40 1.590 2.75 2.75 2.750 5.34 1.57 3.455 1.88 1.88 1.880 6.66 1.52 4.090 1.79 1.07 1.430 4.16 1.40 2.780 4.75 2.20 3.475 4.00 1.90 2.950 4.16 1.50 2.830 1.75 1.51 1.630 4.89 1.00 2.945 2.00 1.03 1.515 1.57 1.57 1.570 5.34 5.34 5.340 1.39 1.07 1.230 1.84 1.55 1.695 2.15 2.15 2.150 4.64 1.50 3.070 3.88 2.14 3.010 1.78 1.40 1.590 0 3.14 1.75 2.448
333
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61
Mexicano
Extranjero
Salario Máximo
Mínimo
Promedio
Mínimo Mujer
Menores
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador Salarios individuales de cuota diaria Destajo Hombre
Maximo Mujer 6.17
Menores
Hombre
Promedio
1.07
1.79
Fijo Maximo Hombre Mujer Menor Fuente Exp. 1 Caja 405 Depto del Trabajo AGN
Hombre
Mínimo Mujer
Promedio Menor
334
Anexo C. La comena 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amarradores Acabadores Afelpadores aguadores Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Canilleros Correiteros Carpinteros Cabos Cocheros Debanadores Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Maquinistas Molineros Peones Pesadores Pegadores de hilo Pintores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Extranjero 1 5 3 2
18 5 6 6
28 31 4 10 4 4 4 2 20 3 3
10 1 2 11 1
5 3
3 9 56 1 214 8 7 54 544
Salario Máximo Mínimo Promedio 1.71 1.71 1.710 1.71 1.71 1.710 1.71 1.71 1.710 1.64 1.64 1.640 2.00 1.12 1.390 3.50 2.00 2.910 2.57 1.71 1.970 1.39 1.39 1.390 1.97 1.71 1.840 1.74 1.00 1.370 1.39 1.39 1.390 3.06 3.06 3.060 3.25 2.00 2.500 3.00 3.00 3.000 1.39 1.39 1.390 1.64 1.64 1.640 1.39 1.39 1.390 3.00 1.90 2.450 2.31 1.64 1.920 1.45 1.45 1.450 1.92 1.92 1.920 3.50 1.50 2.500 3.25 2.75 3.000 1.85 1.85 1.850 1 8.50 8.50 8.500 1.39 1.00 1.120 2.50 2.50 2.500 2.31 2.31 2.310 1.39 0.69 1.040 2.00 1.00 1.500 2.00 1.00 1.500 3.25 0.70 1.920 3.00 2.00 2.500 2.00 1.50 1.680 2.00 1.39 1.440 1 1.72 1.36 1.52
335
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61
Mexicano
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas administrador Sumas
Salario
Extranjero
Máximo
2
5 13.33
1 1
2
Mínimo
Promedio
2.86 13.33
0 0 0 0 3.93 13.33
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Hombre
Maximo Mujer 2.55
Menores
Hombre
2.40
Mínimo Mujer Menores 1.42 1.38
Promedio
Mínimo Mujer Menor 1.39 1.00
Promedio
Fijo Maximo Hombre Mujer Menor 3.00 1.64 Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Hombre
336
Anexo C. Salarios Atemajac 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amolador Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boteros Bodegueros Carderos Carreteros Camilleros Correiteros Carpinteros Cabos Chaufer Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mecanicos Molineros Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
2 2
1.24 1.24
1.24 1.24
3 3 5
3.18 1.99 1.24
0.60 1.65 1.24
4 14
1.99 1.53
1.49 0.53
3
5.23
4.09
4 1 2
1.24 2.59 4.07
1.15 2.59 1.49
1 1
2.66 1.93
2.66 1.93
2
2.38
2.38
4
3.19
1.49
2
1.24
1.24
36
2.22
0.83
130 4
3.33 2.62
0.44 1.95
2.13 2.66
0.84 1.89
18 241
0
Promedio 1.240 1.240 1.780 1.760 1.240 1.740 1.100 4.840 1.195 2.590 2.750 2.660 1.930 2.380 1.920 1.240 1.690 1.550 2.550 1.420 2.270
337
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66
Mexicano
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador Canilleros Rodillero Comunero Portero Cordoneras Suma
Salario
Extranjero
2 1 2 1 1 7
Máximo
Mínimo
1.24 2.18 1.24 1.24 0.83
Promedio
1.24 2.18 1.24 1.24 0.83
1.24 2.18 1.24 1.24 0.83
0
Salarios individuales de cuota diaria Destajo Hombre
Maximo Mujer 5.23
Hombre
Maximo Mujer 10.00
Mínimo Promedio Menores Hombre Mujer Menores 2.71 2.27 1.57 0.53 0.44 Fijo Menor 1.24
Hombre 1.24
Mínimo Promedio Mujer Menor 1.24 0.83 0.60
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
338
Anexo C. Salarios La experiencia 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amolador Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Camilleros Correiteros Carpinteros Cabos Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mecanicos Molineros Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
4
1.78
1.24
4 4 4 1 6 2 8
2.46 3.25 2.05 1.24 1.35 1.38 2.40
1.65 1.86 2.05 1.24 1.24 1.25 2.12
30
1.24
1.00
6 6 6
6.00 4.40 2.53
3.33 2.48 2.00
2
1.60
1.60
6 12 4
2.00 8.30 5.50
1.50 1.65 1.30
1
2.00
2.00
1 1
3.84 2.24
3.84 2.24
1
6.50
6.50
17 4
1.55 2.00
0.88 1.83
2
1.61
1.61
1 54
1.50 2.00
1.50 1.24
2 228 6 9 38 470
2.83 3.50 5.00 1.49 2.00 2.47
2.05 1.00 2.00 1.20 1.42 1.80
0
Promedio 1.510 2.055 2.555 2.050 1.240 1.295 1.315 2.260 1.120 4.665 3.440 2.265 1.600 1.750 4.975 3.400 2.000 3.840 2.240 6.500 1.215 1.915 1.610 1.500 1.620 2.440 2.250 3.500 1.345 1.710 2.130
339
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69 70 71 72 73 74 75 76 77 78 79 80 81 82 83 84
Mexicano
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador Canilleros Algodoneros Alfareros Ay. Estiradores V.Veloceros Hilonero Cañonero Caballerangos Cañeros Cordoneros comuneros Fontaneros Hortelanos Jardineros Mayordomo m. De prep. m. Mecánico Mecanicos Profesores Preseros Porteros Reolero Rieleros Suma
13 3 2 18 22 38 1 3 4 6 2 2 4 1 1 1 1 7 4 4 5 1 2 145
Salario
Extranjero
Máximo
Mínimo
1.4 1.24 1 1.24 1.24 0.84 1.24 1.5 1.3 1.24 1.24 0.96 1.4 1.3 3.35 6.5 5 2.8 2.9 2.5 2.21 1.84 1.44
Promedio
1.24 1.24 1 1.24 1.24 0.84 1.24 1.24 0.96 1.24 1.24 0.96 0.95 1.3 3.35 6.5 5 0.76 2 0.96 1.2 1.84 1.44
1.32 1.24 1 1.24 1.24 0.84 1.24 1.37 1.13 1.24 1.24 0.96 1.175 1.3 3.35 6.5 5 1.78 2.45 1.73 1.705 1.84 1.44
0
Salarios indiviudales de cuota diaria Destajo Hombre
Maximo Mujer 6.75
Mínimo Promedio Menores Hombre Mujer Menores 5.50 1.50 1.35 1.30 0.90
Fijo Maximo Mínimo Promedio Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor 8.30 1.28 0.84 1.24 1.24 0.84 Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
340
Anexo C. Salarios Rio Blanco Guad. 1923
Obreros 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 43 44 45 46 47 48 49 50 51 52 53 54 55
Abridores Aceitadores Amolador Acabadores Afelpadores Ayudante engomado Albañiles Atadores Batienteros Banderos Barrenderos Boneteros Bodegueros Carderos Carreteros Camilleros Correiteros Carpinteros Cabos Cocheros Debanadoes Dobladores Diversos Estiradores Electricistas Engomadores Empacadores Estampadores Encargados Fatigueros Fogoneros Fundidores Grabadores Herreros Hojalateros Maestros tintoreros Maestros hilados Maestros Cardas Mecanicos Molineros Peones Pesadores Pegadores Pintores Revisadores Rodillero Trameros Talabarteros Trosileros Torcedores Tintoreros Tejedores en general Urdidores Veladores Veloceros Sumas
Número de empleados Mexicano
Extranjero 1 2
2 1 1 1
2 6 2 2
3 2
1
2 1 1 2
2 1
2 7 19
48 1 4 8 124
Salario Máximo Mínimo Promedio 1.65 1.65 1.650 1.24 1.24 1.240 1.65 1.39 1.520 2.50 2.00 2.250 2.06 2.06 2.060 1.24 1.24 1.240 2.06 1.52 1.790 2.00 1.00 1.500 4.20 1.72 2.960 3.19 1.29 2.240 2.00 1.00 1.500 2.40 0.82 1.610 1.65 1.65 1.650 1.86 0.82 1.340 1.65 1.65 1.650 3.72 3.72 3.720 3.72 1.93 2.825 0.82 0.80 0.810 1.24 1.24 1.240 1.24 1.24 1.240 1.24 1.24 1.240 2.00 0.82 1.410 2.50 0.50 1.500 2.50 1.50 2.000 0.90 0.90 0.900 2.00 1.00 1.500 0 2.04730769 1.38230769 1.71480769
341
Número de empleados
Empleados 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69
Mexicano
Gerente superintendente Cajero Contador Oficinistas Administrador luminero Preseros Caballerango Hueteros Mecanicos Cordonero Manteros Porteros Sumas
Maximo Hombre
Extranjero
Salario Máximo
1 1 2 2 2 1 3 2 14
Mínimo
1.65 0.82 1.04 0.93 3.72 1.02 2.72 0.9
Salarios Individuales de cuota diaria Destajo Mínimo Mujer Menores Hombre Mujer 2.50 2.50 2.50 0.50
Promedio
1.65 0.82 1.04 0.75 0.5 1.02 0.82 0.9
0.50
1.65 0.82 1.04 0.84 2.11 1.02 1.59 0.9
Menores 0.50
Fijo Hombre
Maximo Mujer 4.20
Menor 1.24
Hombre 0.82
Mínimo Promedio Mujer Menor 0.82 0.82 0.50
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
342
ANEXO D. BALANCES Balance al 31/12/1911 Activo Fábrica de Río Blanco Fábrica de San lorenzo Fábrica Cocolapam Fábrica Cerritos Instalación Rincón Grande Instalación Cocolapam Instlación Boquerón Muebles y enseres Efectivo en cajas México y fábricas Existencias generales Dividendos anticipados (cupón 29) Cuentas deudoras TOTAL
Valor $ 10,951,872.38 $ 2,630,697.39 $ 2,410,354.21 $ 798,723.31 $ 973,902.60 $ 497,086.81 $ 158,620.62 $ 8,809.53
Pasivo Capital social Fondo reserva Fondo previsión Fondo amortización Fondo seguro Cuentas acreedoras Ganancia TOTAL
Valor $ 15,000,000.00 $ 2,721,591.54 $ 1,558,097.35 $ 3,960,683.04 $ 490,613.36 $ 1,081,620.34 $ 1,761,569.45 $ 26,574,175.08
$ 58,194.55 $ 3,667,120.24 $ 483,948.50 $ 3,934,844.94 $ 26,574,175.08
Fuente: Archivo Histórico del Agua (AHA) Fondo Aprovechamientos Superficiales Caja 4528 Expedietne 600052
Balance al 31/12/1919 ACTIVO Frabrica de Río Blanco Fábrica de Cocolapam
$ 6,182,617.11 $ 1,220,817.38 $ 1,671,717.79
Fábrica de Cerritos
$
415,675.29
Hidroeléctrica Rincon Grande Hidroeléctrica Boqueron
$ $ $
825,579.50 401,791.24 321,710.34
Alumbrado de nogales
$
19,521.56
Fábrica de San Lorenzo
Hidroelectrica Cocolapam
$ 177,000.00 Oficinas en México $ 13,497.41 Terrenos en Veracruz $ 13,523.00 Líneas de transmisión eléctrica $ 43,281.02 Construcción en Veracurz $ 9,270.00 Efectivo $ 168,342.70 Existencias generales $ 6,695,107.39 Cuentas deudora $ 6,959,351.59 Inmuebles en México
TOTAL Fuente: Notario Bernando Cornejo
PASIVO Capital social
$ 15,000,000.00 $ 2,628,582.13 Fondo de previsión $ 634,608.50 Fondo de seguro $ 474,029.70 Cuentas de garantía $ 2,304,714.37 Cuentas Acreedoras $ 1,083,040.14 Dividendos $ 119,127.14 Saldo de Ganancias y pérdidas $ 2,894,701.26 TOTAL $ 25,138,803.24 Fondo de reserva
$ 25,138,803.32 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México Notaría Volumen Escritura Fecha 5 113 9378 11/09/1920
343
Anexo E. Primer censo industrial en México, 1930.
Industria
TOTAL NACIONAL I. Textiles Hilado y tejido de algodón Hilado y tejido de lana IV.Productos alimenticios V. Luz VI. Química
Valores en pesos corrientes Inversión al Personal
Número de
establecimientos 31/12/1929 ocupado 979,529,483 318,763 194,543,983 76,840 171 133,500,000 38,500 31 21,000,000 5,300 239,175,808 103,200 670 295,800,000 8,700 60,090,111 12,284
Producción
Número de
Valores en % Inversión Personal
establecimientos 900,332,923 193,711,189 101,500,000 16,000,000 313,961,622 67,800,000 31,321,796
Producción
100% 20% 14% 2% 24% 30% 6%
ocupado 100% 24% 12% 2% 32% 3% 4%
100% 22% 11% 2% 35% 8% 3%
Veracruz Total del estado I. Textiles Hilado y tejido de algodón Hilado y tejido de lana hilado y tejido de yute Escobas, cepillos y plumeros II. Metalurgía III. Indumentaria y tocador IV.Productos alimenticios V. Luz VI. Química
3,806 64 11 34 15 4 229 402 2,105 80 37
122,251,715 44,101,795 40,542,146 4,230 3,531,778 23,641 691,970 786,479 43,954,585 14,703,839 820,541
35,317 7,550 6,851 36 648 15 873 1,132 17,812 1,064 124
101,306,364 25,838,660 24,228,121 7,780 1,582,242 20,517 1,525,352 1,736,855 40,100,163 3,594,649 1,033,791
100.00% 1.68% 0.29% 0.89% 0.39%
100.00% 36.07% 33.16% 0.00% 2.89%
100.00% 21.38% 19.40% 0.10% 1.83%
100.00% 25.51% 23.92% 0.01% 1.56%
6.02% 10.56% 55.31% 2.10% 0.97%
0.57% 0.64% 35.95% 12.03% 0.67%
2.47% 3.21% 50.43% 3.01% 0.35%
1.51% 1.71% 39.58% 3.55% 1.02%
Distrito Federal Total del estado I. Textiles Hilado y tejido de algodón Hilado y tejido de lana Calcetería y bonetería Fibras duras (escobas, etc) II. Metalurgía III. Indumentaria y tocador IV. Productos alimenticios V. Luz VI. Química
3,476 192 65 5 54 16 535 747 742 15 146
182,323,452 32,549,943 18,326,257 6,088,388 6,332,184 61,128 12,942,923 12,324,983 24,944,766 26,411,095 16,133,993
61,001 12,397 6,536 1,619 3,098 99 8,414 8,736 8,901 1,585 3,957
245,859,932 32,085,606 17,057,213 5,423,799 7,058,048 103,326 22,232,100 25,211,604 53,390,775 21,753,936 21,976,882
100.00% 5.52% 1.87% 0.14% 1.55% 0.46% 15.39% 21.49% 21.35% 0.43% 4.20%
100.00% 17.85% 10.05% 3.34% 3.47% 0.03% 7.10% 6.76% 13.68% 14.49% 8.85%
100.00% 20.32% 10.71% 2.65% 5.08% 0.16% 13.79% 14.32% 14.59% 2.60% 6.49%
100.00% 13.05% 6.94% 2.21% 2.87% 0.04% 9.04% 10.25% 21.72% 8.85% 8.94%
344
Industria
Valores en pesos corrientes Inversión al Personal
Número de
establecimientos 31/12/1929
Producción
ocupado
Número de
Valores en % Inversión Personal
establecimientos
Producción
ocupado
Jalisco Total del estado I. Textiles Hilado y tejido de algodón Hilado y tejido de lana Rebozos Jarciería II. Metalurgía III. Indumentaria y tocador IV. Productos alimenticios V. Luz VI. Química
4,200 258 79 25 22 26 493 727 917 72 90
30,510,333 5,952,657 59,612 22,104 711,269 885 976,734 945,885 15,305,739 2,623,144 2,171,442
21,248 3,592 120 109 827 14 1,641 2,054 8,864 830 461
33,216,310 6,196,757 53,312 78,008 1,114,282 5,216 1,286,623 3,036,452 13,877,326 2,520,846 2,522,529
100.00% 6.14% 1.88% 0.60% 0.52% 0.62% 11.74% 17.31% 21.83% 1.71% 2.14%
100.00% 19.51% 0.20% 0.07% 2.33% 0.00% 3.20% 3.10% 50.17% 8.60% 7.12%
100.00% 16.91% 0.56% 0.51% 3.89% 0.07% 7.72% 9.67% 41.72% 3.91% 2.17%
100.00% 18.66% 0.16% 0.23% 3.35% 0.02% 3.87% 9.14% 41.78% 7.59% 7.59%
Edo. de México Total del estado I. Textiles Hilado y tejido de algodón Hilado y tejido de lana Rebozos II. Metalurgía III. Indumentaria y tocador IV. Productos alimenticios V. Luz VI. Química VII. Papel
3,392 822 105 345 117 268 256 661 41 73 3
43,038,550 3,673,266 1,404,546 2,196,649 37,227 169,210 207,755 4,216,110 21,409,438 407,381 12,070,393
11,475 2,795 1,127 1,123 255 624 559 2,774 541 177 1,829
31,067,665 4,876,072 2,036,143 2,679,050 96,244 258,908 538,440 10,124,143 2,317,927 437,957 10,472,960
100.00% 24.23% 3.10% 10.17% 3.45% 7.90% 7.55% 19.49% 1.21% 2.15% 0.09%
100.00% 8.53% 3.26% 5.10% 0.09% 0.39% 0.48% 9.80% 49.74% 0.95% 28.05%
100.00% 24.36% 9.82% 9.79% 2.22% 5.44% 4.87% 24.17% 4.71% 1.54% 15.94%
100.00% 15.70% 6.55% 8.62% 0.31% 0.83% 1.73% 32.59% 7.46% 1.41% 33.71%
Querétaro Total del estado I. Textiles Hilado y tejido de algodón Hilado y tejido de lana Bonetería y Rebozos Jarciería II. Metalurgía III. Indumentaria y tocador IV. Productos alimenticios V. Luz VI. Química
619 199 47 60 4 88 51 70 100 7 18
6,580,302 3,517,624 2,964,047 7,759 537,619 8,199 18,893 240,036 731,356 1,774,993 124,089
3,344 2,035 1,615 70 156 194 132 233 405 180 58
7,122,193 3,142,761 2,713,144 15,039 371,077 43,501 99,698 384,087 59,254 471,617 317,167
100.00% 32.15% 7.59% 9.69% 0.65% 14.22% 8.24% 11.31% 16.16% 1.13% 2.91%
100.00% 53.46% 45.04% 0.12% 8.17% 0.12% 0.29% 3.65% 11.11% 26.97% 1.89%
100.00% 60.86% 48.30% 2.09% 4.67% 5.80% 3.95% 6.97% 12.11% 5.38% 1.73%
100.00% 44.13% 38.09% 0.21% 5.21% 0.61% 1.40% 5.39% 0.83% 6.62% 4.45%
345
Industria
Valores en pesos corrientes Inversión al Personal
Número de
establecimientos 31/12/1929 Nuevo León Total del estado I. Textiles Despepite Ixtle Despepite algódon Hilado y tejido de algodón Pasamerías Broches, escoabas Jarcierías II. Metalurgía III. Indumentaria y tocador IV.Productos alimenticios V. Luz VI. Química
1,201 36 7 3 4 9 9 4 148 133 534 25 22
53,733,578 3,502,776 23,806 98,134 2,999,388 262,781 118,406 261 19,332,004 1,578,359 10,292,970 5,479,197 1,623,032
Producción
ocupado 16,159 1,612 89 47 1,292 88 78 18 4,402 1,052 3,939 419 338
Número de
Valores en % Inversión Personal
establecimientos 68,744,280 2,283,710 22,202 269,977 1,630,410 208,283 147,919 4,919 20,470,091 2,839,101 25,269,015 2,596,014 2,960,617
100.00% 3.00% 0.58% 0.25% 0.33% 0.75% 0.75% 0.33% 12.32% 11.07% 44.46% 2.08% 1.83%
Producción
ocupado 100.00% 6.52% 0.04% 0.18% 5.58% 0.49% 0.22% 0.00% 35.98% 2.94% 19.16% 10.20% 3.02%
100.00% 9.98% 0.55% 0.29% 8.00% 0.54% 0.48% 0.11% 27.24% 6.51% 24.38% 2.59% 2.09%
100.00% 3.32% 0.03% 0.39% 2.37% 0.30% 0.22% 0.01% 29.78% 4.13% 36.76% 3.78% 4.31%
Puebla Total del estado 3,636 156,444,982 25,925 61,641,948 100.00% 100.00% 100.00% 100.00% I. Textiles 947 37,901,740 13,258 31,412,317 26.05% 24.23% 51.14% 50.96% Hilado y tejido de algodón (fábricas) 56 35,413,180 11,069 29,157,224 1.54% 22.64% 42.70% 47.30% Hilado y tejido de algodón (talleres) 24 55,299 77 37,715 0.66% 0.04% 0.30% 0.06% Hilado y tejido de lana 69 484,411 256 242,277 1.90% 0.31% 0.99% 0.39% Bonetería y Rebozos 12 4,520 20 10,089 0.33% 0.00% 0.08% 0.02% Calcetería 14 1,889,587 742 1,743,273 0.39% 1.21% 2.86% 2.83% Palma 518 802 53,802 14.25% 0.00% 3.09% 0.09% Jarciería 22 19,839 40 30,391 0.61% 0.01% 0.15% 0.05% Escobas 232 34,904 252 137,582 6.38% 0.02% 0.97% 0.22% II. Metalurgía 246 205,786 986 1,074,403 6.77% 0.13% 3.80% 1.74% III. Indumentaria y tocador 217 271,834 956 696,025 5.97% 0.17% 3.69% 1.13% IV. Productos alimenticios 1,071 19,807,990 5,906 20,268,989 29.46% 12.66% 22.78% 32.88% Cuero 133 227,368 356 519,247 3.66% 0.15% 1.37% 0.84% V. Luz 48 94,444,752 1,172 350,414 1.32% 60.37% 4.52% 0.57% VI. Química 122 311,719 445 839,797 3.36% 0.20% 1.72% 1.36% Fuente: Primer Censo Industrial de 1930 . Secretaria de economía Nacional. México 1933. Cuadros II, III y IV de los Tomos IX. Distrito Federal, XVI.Jalisco, XV. Edo. De México, XIX: Nuevo Leon, XXI. Puebla, XXII. Querétaro y XXX. Veracruz pp. 252-257. 449-453, 491-494, 621-625, 702-705 y 990-998.
346
Anexo F. Datos de la industria textil de algodón en los Estados en México, 19261939. Estado
Número de fábricas
Personal ocupado
Producción
% No. Fábricas
% % Personal Producción
1926 Total nacional Distrito Federal Jalisco México Nuevo León Puebla Querétaro Veracruz
$ $ $ $ $ $
95,437,874 16,451,107 3,879,187 1,518,591 2,191,026 29,768,197
17.24% 4.06% 1.59% 2.30% 31.19%
$
19,733,640
20.68%
171 23 5 7 4 51 2 11
38,500 $ 6,536 $ 120 $ 1,127 $ 1,292 $ 11,069 $ 1,615 $ 6,851 $
101,500,000 17,057,213 53,312 2,036,143 1,630,410 29,157,224 2,713,144 24,228,121
13% 3% 4% 2% 30% 1% 6%
17% 0% 3% 3% 29% 4% 18%
16.81% 0.06% 2.13% 1.71% 30.55% 2.84% 25.39%
205 58 10 11 4 62 8 10
42,975 6,353 2,546 2,248 1,394 12,567 1,672 6,829
$ $ $ $ $ $ $ $
165,341,073 29,023,344 8,590,019 6,887,224 2,333,111 49,835,617 3,780,770 35,394,556
28% 5% 5% 2% 30% 4% 5%
15% 6% 5% 3% 29% 4% 16%
17.55% 5.20% 4.17% 1.41% 30.14% 2.29% 21.41%
184 47 9 11 3 63 5 10
43,300 6,129 2,896 2,704 1,252 12,725 1,275 7,041
$ $ $ $ $ $ $ $
167,858,757 29,934,188 10,521,540 8,665,659 2,880,382 54,013,958 3,674,200 30,059,900
26% 5% 6% 2% 34% 3% 5%
14% 7% 6% 3% 29% 3% 16%
17.83% 6.27% 5.16% 1.72% 32.18% 2.19% 17.91%
1930 Total nacional Distrito Federal Jalisco México Nuevo León Puebla Querétaro Veracruz
1935 Total del país Distrito Federal Jalisco México Nuevo León Puebla Querétaro Veracruz
1937 Total del país Distrito Federal Jalisco México Nuevo León Puebla Querétaro Veracruz
1939 Total del país 175 42,603 $ 194,972,746.00 Distrito Federal 34 5,484 $ 31,402,879.00 19% 13% 16.11% Jalisco 7 3,252 $ 10,899,374.00 4% 8% 5.59% México 10 2,673 $ 11,650,266.00 6% 6% 5.98% Nuevo León 3 1,100 $ 3,111,446.00 2% 3% 1.60% Puebla 66 12,727 $ 61,178,963.00 38% 30% 31.38% Querétaro 6 1,493 $ 4,999,295.00 3% 4% 2.56% Veracruz 10 6,894 $ 35,781,380.00 6% 16% 18.35% Fuente: Elaboración propia con datos de : Biblioteca Lerdo de Tejada, SHCP. Archivos económicos, Industrias textiles en Mexico Revista de Estadística, Dir. general de estadística, Secretaria de Economía Nacional Enero 1943. Méx. Biblioteca del INEGI, Primer Censo Industrial de 1930 . Secretaria de economía Nacional. México 1933. Cuadros II, III, y IV de los Tomos IX. Distrito Federal; XIV. Jalisco; XV. Edo. De México; XIX. Nuevo León; XXI. Puebla; XXII. Quéretaro y XXX. Veracruz, pp. 252-257, 449-453, 491-494, 621-625, 702-705 y 990-998. Cuadro 1, 5 y 9 del 2o. Censo Industrial de 1935 Rama hilados y tejidos de Algodón, pp. 24, 32, 38-39
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