Espectáculos
Página 2/LA NACION
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Sábado 12 de junio de 2010
En busca de un nuevo hogar Woody, Buzz y sus amigos llegan a una guardería, ahora que su dueño, Andy, está por entrar a la universidad
Sr. Espinas Es un erizo con indumentaria típicamente centroeuropea, dispuesto siempre a entregar abrazos pese a su apariencia
BUENA VISTA
Toy Story 3: los juguetes, en buena compañía Continuación de la Pág. 1, Col. 4 vuelven a ser los grandes protagonistas de la tercera película de Toy Story, cuya aparición en 1995 hizo conocer en el mundo el deslumbrante talento de los animadores de Pixar. Una segunda parte de similar altísimo nivel, en 1999, ayudó a consolidar el poderío del estudio al que se llega en pocos minutos de viaje desde San Francisco cruzando el escenario de película que ofrecen la bahía homónima y el imponente Bay Bridge. Pero aquí la atención principal no la tienen, al menos en una primera impresión, ni Woody ni Buzz ni el resto del ocurrente clan (Jessie, el cerdito Jam, el señor y la señora Cara de Papa, el dinosaurio Rex, el perro Slinky y los tres extraterrestres verdes que exclaman ¡ooohhh! siempre al mismo tiempo) que junto a ellos vuelve a las andadas en Toy Story 3, cuyo estreno en la Argentina anuncia Buena Vista para el próximo jueves. Lo primero que observa la prensa internacional, convocada aquí gracias a una iniciativa de Disney, es la gigantesca casa de muñecas –también levantada a escala humana, con dos pisos, todo el confort y hasta un ascensor propio– que ocupa el espacio central del Atrium, centro geográfico de la sede de Pixar. Es el hogar de Ken, el eterno novio de Barbie, otro de los personajes que reaparece. Pero el soltero más popular de este mundo de fantasía no está en la casa. Y quien sí, en cambio, recibe a los visitantes es una imponente réplica de peluche del Lotso, la segunda gran novedad de Toy Story 3. Este oso de tierno y rosado aspecto es el líder de los juguetes que viven en la guardería a la que llegan Woody, Buzz y sus amigos después de admitir que comienza para ellos otra etapa. Andy, el dueño de ellos, ahora tiene 18 años, está a punto de dejar su casa para entrar a la universidad y su
madre le reclama una decisión: qué hará con sus viejos juguetes. Nuevos y viejos personajes se cruzarán en aventuras marcadas por el paso del tiempo, la búsqueda de un hogar y la propia identidad de cada uno de ellos, con esa mezcla de ternura y emoción que Pixar logró llevar más adelante que el resto en materia de grandes producciones animadas.
Según pasan los años “El tiempo pasó. Andy creció y ahora se enfrenta a esta encrucijada. Nosotros también hemos madurado aquí en Pixar. Nuestros hijos también crecieron y todo este tiempo nos llevó a ver la evolución de Toy Story desde otra perspectiva. Y fue desde allí que surgió al idea de retomar la historia en el momento en que los juguetes tienen la sensación de que la vida de todos ellos junto a Andy está por terminarse”, explica Lee Unkrich, el director de Toy Story 3, en una charla mano a mano con LA NACION. Después de codirigir las dos Toy Story iniciales, Buscando a Nemo y
Lee Unkrich, 100% Pixar Empezó como editor y tras codirigir varios títulos exitosos quedó al frente de Toy Story 3
Monsters, Inc., Unkrich encaró su primer largometraje como máximo responsable a partir de una idea original urdida junto a John Lasseter y Andrew Stanton, dos pilares del estudio. “En esta historia nos encontramos con una enorme cantidad de nuevos juguetes. Es una ventaja o un problema, según se lo mire. Contar con tantas posibilidades aporta una increíble riqueza al relato. Y por otro lado lidiar con tantos personajes, desde una perspectiva técnica o de producción, puede convertirse en una pesadilla. Pero de las más disfrutables”. Entre ellos, sin dudas la elección de Ken despierta las mayores expectativas. “Barbie –ilustra Unkrich– funcionó muy bien en Toy Story 2 y para darle un nuevo valor pensamos en reforzar esa presencia con Ken, un personaje de gran potencial en materia de entretenimiento. Fue muy divertido poner en acción sus movimientos corporales.” Concretar esta tercera parte le llevó a Pixar cuatro años de trabajo y una inversión que el estudio no revela, pero que extraoficialmente se acercaría a los 200 millones de dóla-
res. “Pasó mucho tiempo, es cierto, pero en el medio estuvo el tema de la fusión entre Pixar y Disney. Cuando llegó el acuerdo encontramos luz verde para seguir contando cosas sobre Woody y Buzz”, dice Unkrich, para quien las secuelas sólo tienen sentido en la medida en que acercan nuevas ideas a personajes conocidos. “Sería absurdo, por ejemplo, hacer una segunda parte de Buscando a Nemo, pero en el caso de Toy Story en distinto, porque les damos a los personajes una nueva perspectiva. Lo que sí tuvimos que hacer fue reinventar a Woody y Buzz. Son como archivos, personajes casi de inventario que debimos actualizar para ponerlos a la altura de la tecnología actual”, explica el director antes de mostrar en una pantalla de alta definición dos imágenes de Woody. El de Toy Story 3 muestra ajustes en la boca, tiene un tono algo más oscuro y mejor desarrollados sus pliegues. “Pero quien vea la película no notará ningún cambio”, agrega. Los espectadores adultos habituados a seguir los films de Pixar en la versión original volverán a reencon-
trarse con las voces de Tom Hanks (Woody), Tim Allen (Buzz), Joan Cusack (Jessie), Wallace Shawn (Rex) y la cábala oficial del estudio John Ratzenberger (Jam). A ellos se sumarán Michael Keaton (Ken), Ned Beatty (Lotso), Jeff Garlin (Buttercup) y Timothy Dalton (Sr. Espinas). Las copias subtituladas, según informó Disney, estarán disponibles en las funciones nocturnas de las salas 3D y en una decena de cines de proyección convencional. El resto de las exhibiciones se hará en la versión doblada al español, que contó en este caso con el aporte de Mike Amigorena como la voz de Ken en nuestro idioma. Está previsto lanzar Toy Story 3 el próximo jueves con más de 200 copias. De ellas, medio centenar corresponderán a la versión en 3D (ver recuadro). Y, como también es costumbre, cada función se abrirá con el corto Día y noche, de Teddy Newton, uno de los más prometedores animadores de la inagotable fábrica de creatividad que en estos días recibe a sus visitantes con Woody, Buzz... y una casa de muñecas.
Ken Con camisa de manga corta, pañuelo al cuello y mocasines, el compañero ideal de Barbie se suma a los nuevos juguetes de la guardería Sunnycare
Buttercup Otra novedad: un unicornio de felpa, recubierto en tela y con destellos dorados en la frente, la cola y las patas
Dimensiones del futuro EMERYVILLE, California.– Para Lee Unkrich, director de Toy Story 3, ya está superada esa etapa en la cual una película en 3D está concebida sólo con el propósito de hacer que los objetos y los personajes salgan de la pantalla y pasen por encima de los espectadores. “Creo que el público espera otra cosa –afirma–. Y en mi caso, veo al 3D no como una plataforma a través de la cual los objetos salen de la pantalla y planean por encima del público, sino como una ventana por la cual entramos a un nuevo mundo. En nuestro caso nos viene muy bien,
porque Toy Story está contada no desde una perspectiva humana, sino desde el punto de vista de un grupo de pequeños juguetes que habitan un mundo humano. Quiero que estas herramientas no condicionen mi trabajo como cineasta, sino que me ayuden a reforzar la ilusión buscada y la posibilidad de contar una buena historia. Y me encanta imaginar, pensando en el futuro, que un chico de hoy podrá en el futuro convertirse en un científico brillante y crear la tecnología que nos permita alguna vez dejar de usar anteojos para disfrutar de esta posibilidad”.
Lotso El nuevo juguete que más dará que hablar. Un oso enorme de nariz violeta y preparado para abrazar cada noche a los niños