espectáculos | 9
| Domingo 6 De julio De 2014
Grabaciones
lAnzAMientos
Adriana Franco
Suzanne Vega y el tarot
La enigmática cantautora
E
l espíritu encarnado, la magia hecha materia. Ésas podrían ser las ideas, la masa madre, por detrás del bienvenido nuevo álbum de la gran Suzanne Vega, Tales From the Realm of the Queen of Pentacles, que SMusic editó localmente. “Las canciones son sobre la vida espiritual, pero tal como es sentida a través del cuerpo”, ha dicho ella misma, para explicar esta exhortación desde el título a una de las cartas del tarot.
Tras siete años sin noticias (aunque entre 2010 y 2012 sacó los cuatro volúmenes de Close Up, en los que regrabó sus canciones, agrupándolas temáticamente), la talentosísima cantautora vuelve a su particular combinación de arreglos exquisitos (gracias al trabajo con Gerry Leonard y a colaboradores como Tony Levin y Larry Campbell), una voz que transmite lo que le sucede al alma, y letras que invocan a la Madre Teresa y a la caja de Pandora, Jacob y la lucha con el ángel, genios encerrados en botellas y hasta Epícteto. La californiana criada en el Spanish Harlem, la adolescente que tras asomar en el circuito folk recibió la descarga eléctrico-poética de Lou Reed al asistir a uno de sus shows en 1979, que transformó para siempre su estilo, aquella que en 1987, en su segundo álbum, cantó sobre el dolor de un niño golpeado (“Luka”) y sus palabras ganaron el mundo ya nos conquista con los primeros versos de este nuevo trabajo: “Una grieta apareció en la pared y una puerta surgió de ella”. Con ello nos instala en su particular territorio y nos lleva a pasear por canciones que no podremos dejar de tararear como la tan confesional “I Never Wear White” en la que asegura que el blanco es para los niños en verano, para las novias en el parque; “Mi color es el negro, el negro es para los secretos, los proscriptos y los bailarines, para el poeta de lo oscuro”, dice. Maravilla. O nos atrapa con ese comienzo de música de película de “Don’t Uncork What You Can’t Contain” en la que tomará las palabras como objetos para que giren, muten y se abran a nuevos juegos sonoros, casi dylanianamente. Sin olvidar el bellísimo comienzo, de palmas y casi nada más en “Jacob ant the Angel” que luego sumará instrumentos orientales y una orquesta de cuerdas. Adorada por Adele, reverenciada por Danger Mouse y tantos otros, Vega también tiene aquí seguidores locales. Anoche mismo, Flopa Lestani y Paula Maffia se reunieron en un escenario para rendirle homenaje, para cantar sus canciones, seguramente motivadas por la belleza oscura de estas nuevas, que, atención, requieren una escucha atenta.ß
Juan Villarreal y Marco Antonio Fernández
Ácido Criollo
espera, Entre dos y tres, La duda,
tango y criollismo:
Zamba del án-
Según el favor del viento, Buenos
Animales, Postales, El arquetipo y
gel, Cuando tallan los recuerdos,
Aires, Huaynero, Has visto caer una
Miracle. (sony music)
Tú, Recuerdo de Ypacaraí, La novia
lágrima, Zamba del lino, Grito San-
ausente, y otras (tangovía)
tiagueño y otros. (edición indepen-
Cuentos Borgeanos postales :
Volar, Esto es amor, La
brillo pop. Abril Sosa debutó dos años atrás como solista con el muy recomendable El piloto ciego. Lejos de entregar un segundo capítulo, se dejó llevar por la misma intuición que lo hizo abandonar la batería y Catupecu Machu, esta vez para rearmar Cuentos Borgeanos. Y en tiempos donde el pop argentino construido a fuerza de canciones y estética por esos dos grandes pilares que son Virus y Soda Stereo brilla por su ausencia, él y los suyos no temen sonar ni anacrónicos ni vintage. Al contrario, su registro vocal tiende a emparentarse con Gustavo Cerati (“Animales”), en sus letras hay todo tipo de referencias y guiños (por ejemplo, a Luis A. Spinetta en “La espera”: ‘Una mañana despierta Silvana sintiendo que todo su universo iba a cambiar’) y el amor es un tópico al que Cuentos no le teme, aún cuando roza lo cursi. Un buen retorno, con el Bajofondo Adrián Sosa en producción.ßSebastián Espósito
trACks Sorpresa dylaniana Esta semana se supo que fueron descubiertos por un coleccionista 149 acetatos con versiones y demos de Bob Dylan, hechos entre 1969 y 1970 mientras grababa Nashville Skyline, Self Portrait y New Morning, el mismo período que fue cubierto por la última edición de las
cantor nacional. La voz de Juan Villarreal ya se había ganado su “fama” dentro del circuito alternativo del tango. La noticia era que uno de los mejores cantores de la nueva generación había aparecido en un boliche llamado el Bar de Julio, a metros del Obelisco. La noticia era cierta y este disco lo termina de confirmar. Si una grabación es una foto de un instante musical, este disco despojado de artificios recupera esa intimidad evocadora entre el artista y el oyente, que fuera una marca del sello Blue Note. Con estos registros en primeras tomas, el cantante y guitarrista Juan Villarreal y el bandoneonista Marco Antonio Fernández crean un diálogo sensible en tangos, zambas y hasta guaranias. Como en una serenata confesional sin tiempo, el dúo erizará la piel en “Zamba del ángel”, “Absurdo” y “Canción del carretero”, cada vez que pongas play. ßGabriel Plaza
casi al filo: Corazón de lechiguana,
diente).
en crudo. Un power trío folklórico se merece un álbum (CD y DVD) en vivo para expresar su potencia y su desparpajo pero también su sutileza. Porque Ácido Criollo tiene de lo crudo y lo áspero y, además, de lo sutil. Las 17 canciones del CD grabado en vivo en el concierto del 3 de octubre del año pasado, en CAFF, andan vertiginosamente entre la rusticidad y el detalle. La clave es la combinación de un repertorio folklórico con la sonoridad del rock nacional de los setenta (incluso, en algunos temas es notoria la influencia spinettiana o de giros del rock progresivo vernáculo). Todo eso con un sonido lo-fi que lo hace genuino. Otro punto interesante de este disco –el tercero de la banda, los anteriores son de estudio– es un cancionero muy bien matizado con lo propio y lo ajeno, con lo conocido y lo poco difundido. ßMauro Apicella
Bootleg Series. Las grabaciones estaban en el departamento del Village que alquilaba Dylan para trabajar.
Adriana aquí y allí DBN acaba de editar en DVD el espectáculo Cantando con Adriana - Fiesta de disfraces, en el que recorre sus éxitos para chicos. La maestra jardinera estrena hoy su nuevo show, El sapo Poing Poing cumple años, en el Astral.