LEA LA BIBLIA CADA DIA Por Stanford Orth Usado con permiso TERCER AÑO SEPTIEMBRE JEREMÍAS Jeremías se conoce como “el Profeta Llorón” porque no esconde sus sentimientos profundos y sus escritos son de los más emocionantes en la Biblia. A este profeta le tocó vivir los años más tristes y humillantes de la nación hasta esa fecha. Además, el profeta sufrió la hostilidad y el rechazo de su propio pueblo, el cual insistió constantemente en continuar su camino de desobediencia, camino que lo llevaría a la destrucción. TRASFONDO HISTÓRICO Jeremías profetizó por cuarenta años, en el tiempo de los últimos reyes que reinaron en Judá antes de que el pueblo Judío fuera llevado en cautiverio a Babilonia y que nunca, desde esa fecha, haya tenido rey. Este fue un tiempo de cambio en la escena mundial. Asiria había dominado el mundo Oriental por muchos siglos. En el año 722 a.C. Asiria había conquistado Samaria, la capital del reino norteño de Israel, y había llevado a muchos de esa nación al exilio. Ahora, en el tiempo de Jeremías, Babilonia está surgiendo como una potencia mundial que amenaza a Asiria. La amenaza de Babilonia, más rebeliones internas, distraen temporalmente a Asiria, y los Judíos disfrutan un poco de tranquilidad y un corto avivamiento espiritual durante el reinado de Josías en Judá. Jeremías influyó en que el pueblo volviera hacia la obediencia a Dios. El rey Josías mandó que quitaran los ídolos y que se le enseñara la Palabra de Dios al pueblo. Nínive, la Capital de Asiria, cayó en el año 612 a.C. y las batallas que siguieron confirmaron la ascendencia de Babilonia. Egipto trató de apoyar al últmo ejército de Asiria, pero Nabucodonosor, hijo del rey de Babilonia, destruyó los ejércitos de Asiria y Egipto en la batalla de Carquemis en el año 605 a.C., quedando Babilonia como conquistadora del mundo. Los reyes de Judá que siguieron a Josías volvieron a la idolatría, la inmoralidad y la injusticia social. Jeremías vio la mano de Dios en la ascendencia de Babilonia, y advirtió a los reyes y al pueblo que Dios usaría a Babilonia para castigar a Israel. Les aconsejó que se sometieran a Babilonia, pero no quisieron oírle, y lo acusaron de traidor, encarcelándole mientras seguían resistiendo tanto a Jeremías como a Dios. En 605 a.C., después de la batalla de Carquemis, Nabucodonosor llevó cautivos a algunos de los líderes jóvenes de los judíos, incluyendo a Daniel. Al morir su padre, Nabucodonosor regresó a Babilonia para tomar el trono. En 597 llevó al rey Joaquín al exilio, y en 586 destruyó la ciudad de Jerusalén. El rey Sedequías ya se había huido, pero fue capurado y llevado preso a Babilonia. Jeremías quedó siempre aconsejando a los que quedaron. Sin embargo ellos siguieron resistiendo sus consejos. Nabucodonosor había dejado un gobernador, pero lo mataron. Querían huir a Egipto y Jeremías les aconsejó que no fueran, pero no le hicieron caso sino que se fueron, llevándolo con ellos a Egipto donde murió. Las profecías de Jeremías tienen que ver con los reyes y los eventos del período que se ha descrito. EL MENSAJE DE JEREMIAS La mayor parte del ministerio de Jeremías tuvo que ver con la rebeldía y desobediencia de los

judíos, como también de la próxima destrucción de su nación por Babilonia. Jeremías tuvo una vida muy triste. Su pueblo no le hizo caso, fue rechazado y sufrió mucho. Su ministerio demuestra que Dios sigue dando oportunidad hasta el último momento de esperanza, pero que el castigo es inevitable para el rebelde. Confirma que las profecías de Dios, a través de sus profetas, son verdaderas y que se cumplen al pie de la letra. Sin embargo pudo introducir dos elementos positivos en sus mensajes. (1) Explicó que el exilio no sería permanente, pues duraría sólo 70 años y (2) profetizó que Dios haría un nuevo pacto con la nación Judía, para reemplazar la ley de Moisés que el pueblo no había guardado. Los detalles del Nuevo Pacto se verán en la lectura del próximo mes. Jeremías fue un hombre que sintió profundamente la triste condición y el castigo de su pueblo. También constantemente permaneció fiel en declarar la palabra que Dios le había dado, aún cuando éste no era aceptado. BOSQUEJO DE JEREMIAS I. Llamamiento del profeta. II. Profecías hasta el reinado de Sedequías III. Profecías durante el reinado de Sedequías IV. Profecías después de la caída de Jerusalén V. Profecías contra las naciones VI. Apéndice

cap.1 cap. 2-20 cap.21-39 cap.40-45 cap.46-51 cap.52

GUA PARA LA LECTURA DE JEREMÍAS Cap. 1 ¿Qué le dijo Dios a Jeremías para que tuviera valor de profetizar? 9, 27 Cap. 2 ¿Cómo desobedeció la nación de Judá a Dios? Cap. 5 ¿Porqué mandó Dios a su pueblo al cautiverio en Babilonia? 19 Cap. 7 ¿Obedecía el pueblo cuando los profetas les llamaban la atención? 25-26 Además de la idolatría, ¿qué otra abominación cometió el pueblo? 31 Cap. 8 ¿Qué fue lo que más le entristeció a Jeremías? 18-22 Cap. 10 ¿Porqué es Dios superior a los ídolos? Cap. 13 ¿Qué es el significado del cinto podrido? Cap. 15 ¿Porqué se gozaba Jeremías? 16 Cap. 16 ¿Porqué le quitará Dios todo gozo a su pueblo? 9-13 Cap. 17 ¿Porqué será que unos serán castigados y otros recompensados? 5-11 Cap.18 ¿Qué es el significado del alfarero y el barro? Cap.19 ¿Qué le dice Dios al pueblo por la señal de la vasija rota? Cap.20 ¿Cómo demostró Jeremías su humildad, pero también su valor? Cap.23 ¿Habrá una profecía del Mesías en este capítulo? Cap.24 ¿Qué representan los higos buenos? y ¿los malos? RECORD PERSONAL DE LECTURAS Jeremías 1 Jeremías 11 Jeremías 2 Jeremías 12 Jeremías 3 Jeremías 13 Jeremías 4 Jeremías 14 Jeremías 5 Jeremías 15 Jeremías 6 Jeremías 16 Jeremías 7 Jeremías 17 Jeremías 8 Jeremías 18 Jeremías 9 Jeremías 19 Jeremías 10 Jeremías 20

Jeremías 21 Jeremías 22 Jeremías 23 Jeremías 24 Jeremías 25 Jeremías 26 Jeremías 27 Jeremías 28 Jeremías 29 Jeremías 30

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