Sencillos pasos que te ayudaran a adaptarte a tu nuevo trabajo
El hombre posee la capacidad idónea para adecuarse a diferentes ambientes según las exigencias del mismo.
Esto, se ha visualizado desde la
antigüedad con el personaje primitivo, quien tuvo que ceder a las condiciones de recursos precarios que rodeaban su vida, subsistiendo con las riquezas que a su vez, le proporcionaba la naturaleza. Antes, no tenían las «maravillas» que tenemos los seres humamos de hoy en día, y sin embargo, ellos lograban sobreponerse e ingeniárselas para crear nuevos y funcionales instrumentos. Durante toda nuestra vida estamos propensos a experimentar diversos cambios, es decir, en nuestra infancia podemos ser niños de contextura delgada, con buena alimentación pero con un organismo reacio a aumentar la masa muscular. A medida que transcurren los años, y con los cambios hormonales que experimentaremos para pasar de la niñez a la pubertad, aumentaremos de peso corporal. Es un proceso completamente normal en todas las personas; a algunas, les afectan más que a otras, pero siempre surgirán. Así, los cambios se van propagando a cada aspecto de nuestra vida, el personal, profesional y laboral. Algunas personas tienen mayor resistencia o
dificultad para adaptarse a los cambios y sacar el lado provechoso de ellos. En el ámbito personal, nos genera temor. Cuando comenzamos a experimentar ciertos cambios físicos en nuestro cuerpo, llegamos a sentirnos avergonzados por un proceso que es totalmente normal. Sin embargo, no lo sabemos. Igualmente, sucede en el ámbito profesional y laboral, en este caso, los cambios se convierten en retos y oportunidades de mejora continua para aprender o ascender de puesto laboral. En este sentido, aquellas personas que suelen persistir ante las dificultades y sobreponerse a cada obstáculo que generen los estímulos adversos, suelen estar caracterizadas por la habilidad de resiliencia, considerada por los expertos, como la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas en diversos aspectos de su vida. Esto, suele suceder también cuando iniciamos un nuevo trabajo, por ejemplo.
Estamos
a
la
expectativa
sobre
cómo
serán
las
tareas
y
responsabilidades allí manejadas. Cómo serán nuestros compañeros de trabajo, y sobre todo, cómo reaccionaremos a actividades que no habíamos realizado anteriormente, pero que son propias del puesto al cual nos postulamos y afortunadamente, quedamos. Miles de pensamientos transitan por nuestra mente, algunos, positivos, y otros, en forma de prejuicios. Así, nos desgatamos pensando en acontecimientos que aún no se suceden, debilitando nuestra capacidad de adaptación. Por ello, si estás próximo a iniciar un nuevo empleo, estás nervioso y a la expectativa, a continuación, te mencionamos paso a paso, cómo sobrellevar el proceso de la manera más idónea, para que puedas: ¡Adaptarte a tu nuevo trabajo!
¿Cómo logro adaptarme a mi nuevo trabajo? La adaptación es el proceso por el cual una persona desarrolla la capacidad para mantenerse en determinadas condiciones desconocidas. Son cambios que se generan por la influencia de factores externos e internos y están regidos por la actitud y conducta que desarrolle la persona en esos determinados momentos. Por ello, a continuación, te alentamos a: ¡Adaptarte a tu nuevo trabajo!
Infórmate: al iniciar un nuevo empleo, es relevante que inicies una investigación de tu lugar de trabajo. Puedes ayudarte de la página oficial de la empresa (si aplica), o acercarte a las instalaciones para conocerla un poco más antes de asistir a tu primer día. Ello, disminuirá los nervios por llegar a un lugar nuevo y desconocido en tu primer día de trabajo.
Buena impresión: es importante que en tu primer día de trabajo, generes una buena impresión. Por ende, viste de manera adecuada en relación al puesto que cubrirás. Ni demasiado ni muy poco, sé cuidado con la ropa que elegirás, tu imagen determinará el efecto que causarás en los demás y lo que atraerás. Principalmente, debes inspirar respeto, por ello, pregunta por el código de vestido que siguen en la empresa, y ajústate a él.
Sé puntual: no hay nada más vergonzoso que llegar tarde a tu primer día de trabajo, por ello, planifícate y organízate desde el la noche anterior. Por ejemplo, si inicias un lunes por la mañana a primera hora; el domingo por la noche, organiza tu vestimenta y los documentos que llevarás. Asimismo, prepara tu comida con anterioridad.
Sé amable y cordial: al llegar a tu lugar de trabajo, sonríe amablemente y saluda a las personas, quizá, no las conoces pero debes ser cordial para lograr adaptarte a ellos. Así, llega y di: «buen día». Nada mejor para comenzar tu nuevo puesto de trabajo.
Intégrate: preséntate ante tus colegas y compañeros de trabajo, establece desde el inicio, una buena relación laboral. Entabla una conversación sobre las labores que cumple cada uno en la empresa, pregunta lo que desees saber de tu nuevo espacio de trabajo.
Organiza tu área de trabajo: una vez, te indiquen dónde desempeñaras tus funciones, adecúa el espacio a ti. Es decir, organízalo a tu estilo, de manera de que te sientas cómodo y libre en tu zona de trabajo.
Escucha y observa: cada persona tiene diferentes opiniones a nivel laboral, en un mismo tema. Tú, tendrás tus conocimientos y tu manera de llevar a cabo ciertas actividades. Por ello, cuando te estén explicando lo que debes hacer, escucha y observa detalladamente. Recuerda, estás llegando a un nuevo trabajo donde llevan mucho tiempo realizando las labores de una determinada manera; no te precipites a querer cambiarlos. Intenta adaptarte y a medida que transcurra el tiempo, podrás, poco a poco, realizar las actividades a tu modo, pero siempre, respetando los procedimientos obligatorios.
Mentalidad: piensa en positivo y eso atraerás. La empresa te seleccionó por algún motivo. Profesionalmente, están interesados en ti, y en los conocimientos y habilidades que puedas brindarles. Por ello, asiste con tu mejor disposición y energía, atrévete a experimentar cambios en tu vida a medida que impartes y recibes conocimientos.
¿Qué consejos debo tomar en cuenta? Adaptarse a un nuevo trabajo y ambiente laboral, implica enfrentar diversos retos a nivel profesional, como personal; pues, involucra el hecho de integrarte a un lugar que es desconocido para ti. Por ello, para llevar a cabo este proceso de la mejor manera y ajustarte exitosamente a tu nuevo espacio de trabajo, te mencionamos, anteriormente, como: ¡Adaptarte a tu nuevo trabajo!, con los pasos más relevantes que deberás tomar en consideración. Asimismo, a continuación, te mencionamos unos pequeños consejos que te serán de gran utilidad.
Asiste
entusiasta
a
tu
nuevo
trabajo,
y
demuestra
gusto
y
profesionalismo en las actividades desempeñadas.
Todo aquello desconocido que involucre tu área, pregúntalo. No te quedes con las dudas que te llevarán a desarrollar tu trabajo de manera incorrecta. No sientas temor, vas llegando a un nuevo lugar y para adaptarte, tienes que preguntar lo que no sepas
Al recibir críticas, acéptalas de la mejor manera.
No hables de tu trabajo anterior, ya estás en un lugar diferente. Si las cosas no se dan, positivamente, como sucedían en tu antiguo empleo, no lo digas; resérvalo para ti.
No emitas comentarios racistas, respeta a las personas. Recuerda, todos valemos por igual. Si te topas con un compañero que es extranjero, evita la xenofobia. Él, está allí porque es bueno, tiene capacidades y habilidades que le son útiles a la empresa. ¡Socializa, y acepta las diferencias en las personas!