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BUENOS AIRES
| Sábado 2 de noviembre de 2013
BUENOS AIRES Edición de hoy a cargo de Luis Moreiro | www.lanacion.com/buenosaires
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tORmENtA | el interior, castigado
En la ciudad cayeron 50 milímetros y no hubo complicaciones La lluvia más fuerte se registró entre las 16 y las 16.30 de ayer; no hubo evacuados
La correntada en Jesús María también arrastró un móvil policial; sus dos ocupantes se salvaron
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Por el temporal se derrumbó un puente en Córdoba y hay un hombre desaparecido
Un remisero cayó al agua con su auto en Jesús María; el vehículo apareció debajo de otro puente; hubo más de 60 personas evacuadas en la capital provincial Orlando Andrada
CORRESPONSAL EN CóRDOBA
CORDOBA.– Un aluvión de agua provocado por torrenciales lluvias, registradas entre anteanoche y la madrugada de ayer, dejó graves secuelas en gran parte de la provincia. Un remisero que fue arrastrado por las aguas turbulentas de un río está desaparecido en Jesús María, en tanto que más de dos centenares de personas debieron ser evacuadas de sus viviendas en distintas localidades. Dos policías salvaron providencialmente sus vidas al saltar de un patrullero que fue arrastrado por la correntada. En Jesús María y Colonia Caroya, en pocas horas cayeron 150 milímetros de agua. Se inundaron numerosas viviendas humildes, cuyos moradores fueron evacuados, las calles se convirtieron en torrentes, se desbordaron ríos, arroyos y canales de riego, y se desplomó uno de los más viejos puentes carreteros. Precisamente, el puente que colapsó es el Centenario, situado detrás del anfiteatro del Festival de Doma y Folklore. La base del puente fue socavada por la crecida del río Guanusacate y la mitad de la estructura, que data de 1905, se derrumbó. En ese momento, alrededor de las 5, el remisero Arturo Maturano, de 60 años, lo atravesaba para ir a buscar a un pasajero y fue arrastrado por la
correntada. Apenas se dio la alerta de lo sucedido, se movilizaron bomberos y policías, quienes horas más tarde pudieron localizar el vehículo debajo de otro puente sobre la ruta 9, pero el infortunado conductor había desaparecido. Por otra parte, dos policías se salvaron durante la madrugada después de que la creciente arrastrara el patrullero en el que circulaban por el barrio Los Nogales, de Jesús María. El móvil policial fue encontrado en el cauce, kilómetros adelante. El cabo Francisco Palomeque y el agente Carlos Lucero debieron arrojarse del móvil para salvar sus vidas, cuando recorrían la zona para prevenir a los vecinos de la llegada de la crecida. Palomeque, quien conducía el vehículo, quedó con el móvil cruzado y tuvo que salir por la puerta del acompañante. “Veo que por el costado el agua pasa a la altura del zócalo y llega a la mitad de las puertas, traté de controlar el móvil; pero cuando vi que no lo podía hacer le dije a mi compañero que saliera porque nos llevaba el agua”, contó el policía. Agregó que la presión del agua no lo dejaba abrir la puerta. “Quedé adentro y se cerró la puerta del acompañante, así que salí por la ventana y me tuvieron que sacar del agua.” Los policías sufrieron golpes, pero están fuera de peligro. El intendente de la ciudad de Je-
sús María, Gabriel Frizza, dijo que una de las situaciones más complicadas se vivió en el barrio Sierras y Parques, donde fueron evacuadas numerosas familias. Desde Colonia Caroya indicaron que debieron ser evacuadas tres familias. En Jesús María llovieron más de 150 milímetros, al igual que en pueblos vecinos de la zona de Sierras Chicas, en el departamento Colón. La marca pluviométrica más alta fue en La Granja con 190 milímetros. Ante la gravedad de la situación, el gobernador José Manuel de la
Otra víctima mortal en Jujuy ^b^b^ Una mujer murió en Jujuy y un hombre resultó herido a raíz del temporal que afecta a la provincia, donde más de 200 personas permanecen evacuadas y se registraron cortes de energía eléctrica y voladura de techos. Fuentes sanitarias informaron que la mujer, identificada como María Albina Sánchez, de 73 años, se quemó al intentar iluminar su casa con una vela.
Sota se trasladó al lugar y recorrió las zonas afectadas. Tras ello se reunió con el intendente radical Gabriel Frizza, y comprometió la colaboración de la provincia para la reconstrucción del puente Centenario, arrastrado por la crecida. Sobre la situación general, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Passerini, confirmó que hubo familias evacuadas en las ciudades de Córdoba, Río Ceballos, Juárez Celman y Jesús María. A su vez, el director de Defensa Civil provincial, Diego Concha, confirmó que “algunos ríos y arroyos que estaban secos tomaron un caudal importante, como el río de La Granja, que creció tres metros”. La lluvia caída en la provincia tuvo promedios que oscilan en los 120 milímetros, aunque en la zona de La Granja llegó a los 190. En Porteña, Tránsito, Las Varillas, James Craik y Tío Pujio, las precipitaciones superaron los 150 milímetros. La lluvia, pese a todo, sirvió para aumentar el nivel de los diques que presentaban una situación crítica por la prolongada sequía. En la ciudad de Córdoba, el intendente Ramón Mestre declaró el estado de emergencia ambiental. La lluvia superó los 70 milímetros y fueron evacuadas unas 60 personas. El río Suquía aumentó su caudal, lo que obligó a clausurar las dos manos de la avenida Costanera.ß
Un muerto y abundante lluvia en Santa Fe Un motociclista fue atropellado en el Gran Rosario; los caminos de tierra, intransitables José E. Bordón PARA LA NACiON
SANTA FE.– Lluvias que en 24 horas superaron los 300 milímetros, viviendas parcialmente anegadas y varias rutas cortadas porque el agua superó la carpeta asfáltica, y un hombre muerto en el Gran Rosario, como consecuencia de un choque atribuido al mal tiempo, eran anoche las características salientes en la zona sur-oeste de la provincia, de Santa Fe, que, junto con amplias zonas de la provincia de Córdoba (ver aparte), resultó la más afectadas por el temporal de lluvia y viento que se abatió sobre una amplísima zona del centro del país. El centro del fenómeno meteorológico se ubicó en los departa-
mentos San Jerónimo y Belgrano, al sudoeste de esta capital. Según informes requeridos por la nacion a autoridades municipales y comunales, el mayor registro de lluvia se verificó en la pequeña localidad de Centeno, en el departamento San Jerónimo, donde cayeron 350 milímetros en apenas 24 horas. En San Genaro, situada en el mismo departamento, cayeron 340 milímetros en el mismo período. En Las Rosas, cabecera del departamento General Belgrano, 280 kilómetros al sur de esta capital, entre las 13 del jueves y las 18 de ayer precipitaron 240 milímetros. Le siguieron Montes de Oca, con 224 mm, y Tortugas, con 190 milímetros. Como consecuencia de estos registros varias rutas estuvieron cerradas al tránsito vehicular. El caso que más complicó el desplazamiento de vecinos fue el corte de la ruta nacional 34, desde San Genaro hasta Rosario, que tuvo 8 tramos cubiertos por las aguas. La ruta nacional 9, cerca de Arms-
trong, también estuvo clausurada. En la zona centro de la provincia, los promedios de lluvias en los departamentos La Capital, Las Colonias, San Justo y Castellanos superaban los 100 milímetros. El pronóstico del tiempo indicaba que en todos ellos iba a continuar el mal tiempo. Los caminos de tierra presentan dificultades, con lo cual hay inconvenientes para el retiro de la producción láctea desde los tambos hasta las usinas pasteurizadoras en el corazón de la cuenca lechera del centro oeste de la provincia. En los departamentos del extremo norte, la zona más castigada por la continua sequía –que en algunos casos se prolonga desde hace tres años– hubo lluvias importantes en los departamentos de San Cristóbal, 9 de Julio y Vera. En cambio, en el departamento General Obligado, los registros fueron escasos. En zonas rurales del departamento San Cristóbal, cercanas a la ciudad de Ceres –la más impor-
tante de la zona– el registro pluviométrico marcó 180 milímetros de agua caídos en 24 horas. En el departamento 9 de Julio, en el paraje Las Quinientas, situado a 15 kilómetros de El Nochero, en la provincia de Santa Fe y a 6 kilómetros del límite con la provincia de de Santiago del Estero, en 20 horas cayeron 140 milímetros. En los departamentos Vera y General Obligado el promedio de agua caída fue muy inferior, aunque, como señalaron los productores, al menos llovió después de varios meses. De todas formas, toda la red de caminos de tierra quedó intransitable. El temporal, además, se cobró una víctima mortal en jurisdicción de Capitán Bermúdez, en el Gran Rosario. Ayer a la tarde, se produjo una colisión entre una camioneta y una moto en la ruta nacional 11. Como consecuencia de las heridas falleció el motociclista identificado como Carlos Herrera, de 62 años.ß
Estaba todo listo para la tormenta. Los vecinos de los barrios más afectados por las inundaciones se habían aprestado a instalar compuertas en las puertas de sus casas y comercios y a subir los objetos de valor a lugares altos, y el gobierno de la Ciudad había preparado un operativo especial frente a la eventualidad de un temporal. Sin embargo, y según la información oficial, en la jornada de ayer se acumularon unos 50 milímetros en Buenos Aires, y las precipitaciones entre ayer y anteayer alcanzaron los 100 milímetros. De la mano del cese de alerta por tormentas, también se fueron replegando los operativos de emergencia. Si bien se produjeron lluvias fuertes entre las 16 y las 16.30 en algunos sectores de la Capital y se registraron algunos incidentes menores, no hubo evacuados ni sucesos de gravedad en relación con la tormenta, según lo informó a la nacion el secretario de Emergencias porteño, Néstor Nicolás. “Hubo caídas de ramas sobre autos, anegamientos en lugares puntuales porque se taparon los sumideros, pero se trató de hechos relativamente menores. Por suerte no se dio una tormenta fuerte sobre la ciudad”, explicó el funcionario, quien agregó, a su vez, que “el fenómeno ha cesado”. A estos incidentes se sumó la reprogramación de vuelos de Aerolíneas Argentinas y Austral en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery por tres horas a partir de las 6, debido al anuncio del temporal. La actividad se normalizó, no obstante, a partir de las 9. De la mano del cambio de alerta por tormentas a lluvias intensas que emitió el Servicio Meteorológico Nacional a las 5.30, parte de los recursos asignados al operativo especial del gobierno de la ciudad comenzaron a ser replegados. “Preventivamente estábamos prepara-
dos para que sucediera, aunque el fenómeno a partir de ahora ya está terminado. Puede darse alguna lluvia más, pero no se espera ninguna situación de riesgo”, expresó Nicolás. Según el último parte de ayer del servicio de Meteorología de la ciudad, el nivel de riesgo había disminuido a “leve”, por la tendencia a la disminución y cese de la lluvia en las horas siguientes. Anoche comenzaban a registrarse ya algunas mejoras y desde el Servicio Meteorológico Nacional se pronosticaban lluvias aisladas, con cielo parcialmente nublado y temperaturas de entre los 17 y los 24 grados para hoy. Para mañana se pronostica que volverá el sol pasado el mediodía, con 13 grados de mínima y 23 de máxima. Desde el mismo organismo precisaron, además, los motivos por los cuales la alerta no llegó a convertirse en el fenómeno anunciado. Dijeron que “las tormentas se disiparon por cuestiones naturales, aunque muchas veces es mejor prevenir que curar”. Anteayer, el gobierno de la ciudad había dispuesto un operativo que involucró a los hospitales, el SAME, la guardia de auxilio, el personal de limpieza y la Policía Metropolitana, entre otros organismos. El Ministerio de Salud había declarado la alerta amarilla para el SAME, los hospitales y los centros de salud (Cesac), dependientes de la red pública de la Ciudad que quedaron afectados ante la posibilidad de emergencia. La Ciudad indicó que la Policía Metropolitana agregó casi 200 efectivos para las comunas 12 y 15 en resguardo de la seguridad, coordinación de las comunicaciones y control del tránsito. Y en el CUCC había 100 operadores telefónicos para recepción y derivación de llamadas de quienes pidieran auxilio al número gratuito 103. Además, se dispusieron 600 agentes de emergencias y voluntarios de Defensa Civil, Cruz Roja y Scouts Argentina y se sumaron 60 móviles de iluminación, grupos electrógenos, camiones hidráulicos y electrobombas.ß
El anunciado temporal no llegó con intensidad
S. AZNAREZ
Pocos daños y ningún evacuado en la provincia Hubo cortes de luz y algunas caídas de árboles; el nordeste fue la zona más afectada LA PLATA.– Anegamientos en algunos barrios y cortes de luz en varias zonas fue el saldo de la lluvia que ayer se precipitó durante casi todo el día sobre la extensa geografía bonaerense. El gobierno provincial informó que no hubo partes de evacuados en su territorio y que el fenómeno climático afectó en mayor medida el nordeste de la provincia, donde se produjeron fuertes ráfagas de viento que provocaron caídas de árboles y postes. En esta capital provincial, el temor por una tormenta mayor fue generalizado y dio cuenta de las secuelas de la inundación del pasado 2 de abril. Desde anteanoche, los platenses tomaron sus recaudos y acomodaron mobiliario, dejaron a mano lanchas,
gomones y kayaks, y en algunos casos trasladaron preventivamente a los miembros más vulnerables de la familia. Hubo también casos de gente que faltó al trabajo y tampoco mandó a sus hijos a la escuela y se pospusieron otros compromisos. Asimismo, en varios comercios se detectó una mayor compra que la habitual de algunos productos como agua mineral. El municipio mantuvo un operativo especial durante toda la jornada en la que se movilizaron unas mil personas, entre agentes municipales, de Defensa Civil, bomberos, policía local, además de voluntarios. Se continuó con las tareas de limpieza de sumideros y recolección de residuos. Ese dispositivo fue levantado pasadas las 18, cuando el Servicio Meteorológico informó el cese de la alerta. Anoche, empero, se dispuso la continuidad de una guardia mínima, según lo informado por Defensa Civil.ß