ON FEBRUARY 24,JACINTA'S BODY WAS PLACED IN a

Mother Superior accompanied the body and thus was able to visit the Cova da Iria, ... the little casket of my Jacinta, it was all so nice, I burst into tears at the sight, ...
743KB Größe 6 Downloads 0 vistas
P REPARING FOR THE C ONSECRATION OF THE A RCHDIOCESE OF S AN F RANCISCO TO THE I MMACULATE H EART OF M ARY Part 49

ON FEBRUARY 24, JACINTA’S BODY WAS PLACED IN a leaden casket sealed in the presence of the authorities and some pious women. It was transferred to the family vault of a generous and devout man from Ourem. The Mother Superior accompanied the body and thus was able to visit the Cova da Iria, as Jacinta had prophesied. Jacinta’s father was at the train station to meet the body. “When I saw so many people around the little casket of my Jacinta, it was all so nice, I burst into tears at the sight, just like a little child. I never cried so much in all my life. ‘Nothing helped you,’ I sobbed, ‘nothing would cure you. You stayed here for two months, then you went to Lisbon…There you died alone, all alone…’” Fifteen years later, on September 12, 1935, the Bishop of Leiria commanded that Jacinta’s body be transferred to the parish cemetery in Fatima, where she was to be buried with Francisco in a grave built for two children. When Jacinta’s casket was opened, her body was still whole and incorrupt. In 1951, the body of Jacinta was transferred to the basilica of the Queen of the Most Holy Rosary of Fatima. Francisco’s body was transferred to the basilica shortly afterwards. The basilica had been constructed on the place where the apparitions occurred. The construction of the shrine at Fatima was not without obstacles and has a long and beautiful local history, with the heroic devotion of the local people at the center of the drama. The Freemasons placed two bombs at the shrine in 1922, one of which exploded, destroying the roof of the little church that had been built at the place of the appaitions. The other bomb had been placed at the holm oak where Our Lady appeared and that bomb did not explode. The little church is still there today. On May 13, 2000, Francisco and Jacinta were beatified by Pope St. John Paul II and on May 13, 2017, on the 100th anniversary of the first apparition, they were canonized by Pope Francis. We must beg them frequently to pray for us, so that we can be faithful to the daily Rosary, the offering of our everyday sufferings, and the frequent reception of the sacraments, so that we can get to Heaven. †

EL 24 DE FEBRERO, EL CUERPO DE JACINTA FUE COLOCADO en un ataúd de plomo sellado en presencia de las autoridades y algunas mujeres piadosas. Fue trasladado a la bóveda familiar de un hombre generoso y devoto de Ourem. La Madre Superiora acompañó al cuerpo y así pudo visitar la Cova da Iria, como lo había profetizado Jacinta. El padre de Jacinta estaba en la estación de tren para encontrarse con el cuerpo. "Cuando vi a tanta gente alrededor del pequeño ataúd de mi Jacinta, todo fue tan agradable, rompí a llorar al verlo, como un niño pequeño. Nunca había llorado tanto en toda mi vida. "Nada te ayudaría," sollozaba, "nada te curaría. Te quedaste aquí dos meses, luego fuiste a Lisboa ... Y allí tu moriste sola, sola ... '" Quince años más tarde, el 12 de septiembre de 1935, el Obispo de Leiria ordenó que el cuerpo de Jacinta fuera trasladado al cementerio parroquial de Fátima, donde se enterraría con Francisco en una tumba construida para dos niños. Cuando se abrió el ataúd de Jacinta, su cuerpo estaba todavía entero e incorrupto. En 1951, el cuerpo de Jacinta fue trasladado a la basílica de la Reina del Santísimo Rosario de Fátima. El cuerpo de Francisco fue trasladado a la basílica poco después. La basílica había sido construida en el lugar donde ocurrieron las apariciones. La construcción del santuario de Fátima no fue sin obstáculos y tiene una larga y hermosa historia local, con la devoción heroica de la gente local en el centro del drama. Los francmasones colocaron dos bombas en el santuario en 1922, una de las cuales explotó, destruyendo el techo de la pequeña iglesia que se había construido en el lugar de las apariciones. La otra bomba había sido colocada en el encino donde Nuestra Señora apareció y esa bomba no explotó. La pequeña iglesia todavía está allí hoy. El 13 de mayo de 2000, Francisco y Jacinta fueron beatificados por el Papa San Juan Pablo II y el 13 de mayo de 2017, en el centenario de la primera aparición, fueron canonizados por el Papa Francisco. Debemos rogarles frecuentemente que oren por nosotros, para que podamos ser fieles al Rosario diario, la ofrenda de nuestros sufrimientos cotidianos y la frecuente recepción de los sacramentos, para poder llegar al Cielo. †