ESPECTACULOS

Viernes 26 de agosto de 2011

I

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MUSICA s RIFFS Y MOMENTOS MEMORABLES

Rock

del país

SKAY, BABASONICOS Y ZONA ROCK

MANIFIESTO Continuación de la Pág. 1, Col. 2 tres días el microestadio Malvinas Argentinas. Entre hoy y el domingo, se realizará el segundo Zona Rock. El capítulo porteño tendrá como grandes protagonistas a Ciro y los Persas, Nonpalidece y La Vela Puerca. El ex líder de Los Piojos tocará hoy luego de El Bordo, Salta la Banca y Sordos; la banda de reggae de Néstor Ramljak lo hará mañana como cierre de una jornada que también contará con Onda Vaga, Contravos y Heladeros

del Tiempo. El domingo, los uruguayos de La Vela Puerca compartirán el día con Las Manos de Filippi, Brancaleone, Eruca Sativa y Play Shodaka. La semana próxima Zona Rock viajará a Córdoba y a Mendoza. El 1° de septiembre Divididos, El Bordo y Salta la Banca van a tocar en Quality Espacio de Córdoba y, un día después, en el mismo lugar, La Vela, Las Manos de Filippi y Brancaleone. La grilla cordobesa se repetirá en el mismo orden en El Santo Disco de Mendoza, el sábado y el domingo próximos.

IMPERDIBLES Zona Rock E. Malvinas Argentinas, Gutenberg 350. Hoy, Ciro y los Persas; mañana, Nonpalidece y, pasado mañana, La Vela Puerca, entre otros. A las 16. Desde 80 pesos. Babasónicos Luna Park, Corrientes 99. Mañana, a las 21. Desde 80 pesos. Skay Estadio Obras, Av. del Libertador 7395. Mañana, a las 20. Desde 80 pesos.

MUSICA s LA BANDA SONORA DE LUIS ORTEGA

Willy Crook, Patán Vidal, Daniel Melingo, María Eva Albistur, Fernando Samalea y Luis Ortega DINA PANTONI

Los Quietos tienen la dicha sin movimiento Hoy, en Boris, debuta este delirante grupo de superamigos Una noche, el guitarrista “Gringui” Herrera llevó a Luis Ortega a comer un asado y a los veinte minutos estaban grabando un tema acompañados por la cantante y bajista María Eva Albistur. Poco después, mientras trabajaba ya con la idea de hacer un disco, el Ortega mejor conocido como cineasta llamó a Fernando Samalea para tocar unas percusiones en la música incidental de su nueva película, Verano maldito. “Quiero sumar un saxo, ¿a quién se te ocurre que podríamos llamar?”, le preguntó el cineasta/compositor/cantante al baterista/percusionista/bandoneonista. “¡Daniel Melingo!”, contestó Samalea. “Mejor sería tener dos vientos improvisando junto a la percusión... ¿se te ocurre otro?”, retrucó Ortega. “¡Willy Crook!, qué tanto.” Hubo entonces un cruce de músicos y varias zapadas, incluyendo una frente a una pantalla con imágenes de la película de Ortega, instalada en un estudio. “Por suerte pudimos reencontrarnos también con Patán Vidal, uno de los mejores músicos argentinos y quien sin duda aporta seriedad musical en esta banda eventual tan poco seria”, confiesa Samalea. La banda eventual tan poco seria tiene nombre, Los Quietos, y esta noche debuta en un local de Palermo. “Es un homenaje irónico a los grandes quietos del rock nacional, esos personajes que, entre la algarabía general, se quedan quietitos y callados en un rincón de los camarines”, escribe Samalea, y define la intención de la banda. “Hacemos canciones de todos –se suma entusiasmado Ortega–. Yo aporté algunas, que son relatos de baldosa y que Los Quietos ya conocían, pero más que nada mi

participación pasa por hacer gestos detrás de un biombo, gestos para mis compañeros. No soy músico, pero como Dani propuso eliminar los cortes y quebradas y Willy retrucó con que cada quieto toque un solo acorde por show, pensé que en ese sistema podía participar, con un biombo de por medio, por supuesto”. Música y delirio, qué tanto. Dice Melingo: “Una tarde estábamos tan quietos que decidimos alegrarnos con el movimiento de reírnos juntos, en grupo, sin olvidar lo que somos cada uno y nuestras labores solistas. Es una manera de sentirse en grupo y colaborar todos en partes iguales, en amistad”. –A fines del año pasado tocaste con Lions in Love y ahora con esta banda... ¿Dejaste por un tiempo el tango para volver al rock? Melingo: –El rock es algo que llevo en mi corazón, como el tango. No concibo la vida sin ninguno de los dos. Cuando puedo rockear rockeo, me cuelgo la Thinline y le saco un poco las telarañas (un poco nomás). Creo que nuestro rock es “la música de cabotaje” en América. Nos sentimos aviadores con él. En Europa somos como viejos navegantes que vienen de un país lejano a compartir con ellos nuestro acervo, que resulta más atrayente de lo que nosotros creemos y pensamos. Como una devolución, como si le debiéramos algo aún... Eso pasa con el tango,

PARA AGENDAR Los Quietos: la banda interpretará versiones de canciones de todos sus integrantes. Boris: Gorriti 5568. Esta noche, a las 22. Entradas: $ 60.

aparte del baile atrayente para los ojos europeos, es una devolución de su música de cámara popular pasada por nuestros arrabales. Nada más ni nada menos. ¿Y el disco de Ortega que logró que se juntara esta suerte de liga de superamigos musicales? “Lo está produciendo María –dice Luis–, y gracias a ella accedimos al milagro de reunir a Los Quietos. De movida ella dijo «esto es circo y celuloide». Creo que las canciones son más efectivas en lo narrativo que las películas, porque uno las va viendo en su cabeza. El disco está casi terminado, y si nuestra quietud nos lo permite espero poder editarlo antes de fin de año.” –¿A qué suena la banda? Albistur: –Suena a la suma de todos nosotros, es como si nos metieras a todos en una coctelera y agitaras un poco. El trago se llamaría Los Quietos. La idea fue reírnos y hacer música desde un lugar despreocupado, más allá de nuestros caminos solistas, aportando cada uno desde su lugar e instrumento. Como un encuentro celebratorio. Samalea: –Dado el elenco, imaginarás que será una velada, cuando menos, complicada y divertida. Para esta noche pensamos un show que incluya varios pasajes instrumentales, más algunas canciones de Dani, Willy, Luis y María Eva, remozadas especialmente. –¿En serio van a tocar detrás de unos biombos? –Era la intención, pero el otro día fuimos al bar y tuvimos que dar de baja los biombos porque no entran en el escenario. Era como un quiosquito para cada quieto, donde no se veían ni el cuerpo ni los instrumentos.

Sebastián Ramos

Babasónicos presenta A propósito; Ciro y los Persas, sigue el camino del solista con banda

A Babasónicos, en tanto, le llegó la hora de volver al Luna Park como a ellos más les gusta, con disco nuevo. A propósito, que salió en mayo y tuvo una suerte de avant-première en directo en el Quilmes Rock, será el eje del show de mañana. Adrián Dárgelos y los suyos suelen estrenar sus discos con una puesta en escena especialmente diseñada para la ocasión y con una lista de temas que se renueva, no sólo por la inclusión de las diez canciones nuevas (“Flora y fauno”,

“Fiesta popular”, “Desoras”, “En privado” y “Muñeco de Haití”, entre otras) sino también por extraer algunas piezas poco obvias de su discografía. Para la banda, A propósito se trata del manifiesto de Babasónicos, un viaje que puede resultar fantástico e incluir fábulas incorrectas que hablan de faunos, zorros y otras criaturas, pero también bajadas de línea como la expresada en “Fiesta popular”. Skay en Obras implica un festejo

doble. Por el ex guitarrista de Los Redondos, que vuelve a tocar en Buenos Aires, y por el mítico estadio de Avenida del Libertador, que reabre sus puertas al rock. Por ahora, sólo hay otro show confirmado y es el de Los Gardelitos, el próximo 15 de octubre. La banda del guitarrista fue rebautizada como Los Seguidores de Tláloc, el dios de la lluvia y la fertilidad, originario de la cultura de Teotihuacán. Aun en medio de una próxima andanada de visitas, son días fértiles para el rock local.