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• La leyenda de los Skull Killers.

Los boletos se agotaban cada vez que los Skull Killers tenian una presentación. Ellos no cantaban en cualquier lugar. Los auditorios debían tener como mínimo capacidad para diez mil personas y sus patrocinadores debían llenarlos de tantos lujos y excentricidades como pudieran, si la banda aceptaba visitar su ciudad para dar un concierto.

Cada una de sus canciones era un gran hit en todas las listas del Top Ten. Las estaciones de radio peleaban unas con otras por ser las primeras en tocar sus nuevas canciones. Usualmente los patrocinadores realizaban concursos para ganar pases VIP o Backstage entre los fans.

Hay fans de los Skull Killers alrededor de todo el mundo. Se les puede reconocer por sus vestimentas casi como uniformes muy particular: una mezcla de punks con emos y amantes del Heavy Methal. Sus presentaciones en vivo estaban llenas de mistisismo, sangre falsa y supuestos ritos demoniacos.

Sus nombres eran Aaron Butler (líder de la banda y vocalista principal), un tipo alto y muy delgado con cabellera larga y una mirada vacía. También estaba Basile Campbell (guitarrista y segunda voz), era un tipo pequeño y con tatuajes en toda la extensión de su cuerpo, con una habilidad sorprendente para los

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solos de guitarra eléctrica que ni los dioses hubieran podido imitar con esa guitarra.

Caden Davis (baterista), un tipo gordo, con brazos muy musculosos y la panza del tamaño de una pelota de playa. Él tenía la habilidad de seguir tocando con una sola mano mientras con la otra animaba a los fans a enloquecer durante los conciertos. Damien Edwards (bajista), él escribía el 70% de todas las canciones de la banda. Él amaba la espeleología y el ecoturismo, era el más atlético de todos. Aunque él no era el más popular entre ellos. Se decía que él amaba tanto el color verde que no dejaba de fumar canabis todo el tiempo.

Las modelos más famosas fueron novias de los miembros de la banda. El dinero les llegaba como agua cayendo en una cascada. Se suele decir que no había nada que los miembros de la banda desearan y que no pudieran conseguir de alguna manera. Se dice que una vez fueron a una agencia de autos de lujo donde compraron todos y cada uno de los autos que tenían ahí. También hubo rumores de que después realizaban carreras clandestinas con esos autos en el jardín de una de sus mansiones que se ubicaba muy lejos de la civilización.

Normalmente puedes escuchar historias sobre tiendas departamentales cerradas al público para que la banda pudiera andar de compras. Los hoteles siempre se quejaron por su comportamiento. La gente que trabajaba en esos hoteles siempre se

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refirió a ellos como egoístas, prepotentes, odiosos, hedonistas, groseros, mujeriegos, pervertidos, pero al final de todo: la mejor banda de rock de todos los tiempos.

Tuvieron drogas a manos llenas en los hoteles donde solían hospedarse. Probaron todo cualquier estupefaciente que puedas imaginar... Para miles de adolescentes esa era una vida de ensueño. La banda salió de la nada. Un caza talentos los descubrió tocando en el CTZN Bar en Chelmsford no muy lejos de Witham su pueblo natal.

En menos de un mes ya habían grabado su primer album y andaban en su primer gira mundial de conciertos. Contrataron a un importante manager de la industria musical británica. Tenías presentaciones en vivo en cada continente. Mucha gente que no era afisionada al rock, se volvieron fans de los Skull Killers.

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Después de los funerales (los cuerpos nunca fueron recuperados) a los que asistieron grandes personalidades del Mundo del Espectáculo comenzaron las especulaciones. ¿Cómo era posible que una Banda de Rock lograra tanta fama y éxito en tan solo cinco años de carrera artística? ¿Por qué tuvieron tanta

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aceptación en todo el mundo? ¿Por qué todas las mujeres querían andar con los miembros de la Banda? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué…?

Nada estaba claro… La gente empezó a recordar todo el misticismo que rodeaba su música y sus conciertos. Se habló de satanismo, tratos con el inframundo, vudú haitiano, religiones tribales africanas y magia negra. Esas fueron las explicaciones más lógicas para todo lo que una Banda de Rock compuesta por muchachos de no más de veinte años de edad y de un pueblo insignificante (Witham, Essex en el Reino Unido) había logrado durante los últimos cinco años.

Se especuló sobre una muerte falsa como parte de un truco publicitario de la misma Disquera para aumentar las ventas de los discos. En los Noticieros amarillistas comenzaron a entrevistar a personas que decían haber visto a alguno de los miembros de la Banda borracho en un Bar de su localidad o que le habían visto cargando gasolina en la estación del pueblo en su flamante auto deportivo. Dichas afirmaciones provocaron la ira de los fans quienes sufrían desgarradoramente por la muerte de sus ídolos. Se entablaron demandas millonarias contra la Disquera además de las grandes marchas que hubo desde Nueva York hasta Buenos Aires y desde Londres hasta Sydney exigiendo que las Disqueras detuvieran campañas publicitarias tan agresivas que lastimaban los sentimientos de los fans.

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La Disquera ganó todas las demandas, porque no había manera de comprobar si los Skull Killers seguían con vida. Su muerte les dio la inmortalidad. Los fans siempre los recordarán como los mejores. Sus discos serán parte de la colección de música que jamás será olvidada. Fueron y serán la mejor Banda de su tiempo. El punto es que todo sucedió tan rápido y en circunstancias tan misteriosas. Ahora todo está entre sombras. La oscuridad cubrió el rastro y lo que sabemos sobre los Skull Killers no son más que mitos y leyendas…

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