LA BIBLIA - SU MENSAJE A pesar de que los libros de la Biblia fueron escritos por distintos hombres, en distintos sitios y en distintas épocas, sin embargo, todos los libros, ya sea en profecía, y en tipos o narraciones, unos en verso y otros en prosa, todos presentan un sólo mensaje para el hombre; redención en la persona de Jesucristo. La primera promesa del redentor está en Gn. 3:15, donde se le llama "la simiente de la mujer. En el mismo capítulo se verifica el primer sacrificio, al sacrificar Dios dos corderos para vestir con sus pieles a la primera pareja que había pecado. De ahí en adelante corre por toda la Biblia una vena de sangre; de sangre redentora. Los sacerdotes la aumentan con sus sacrificios, los profetas la proclaman con su mensaje y los salmistas la cantan con sus salmos. Ese mensaje de redención que la Biblia proclama, es anunciado en el Antiguo Testamento por medio de las profecías y los tipos y en el Nuevo Testamento por el relato del cumplimiento de esas profecías y tipos de la persona de Nuestro Señor Jesucristo; es narrado en los Evangelios, predicado en los Hechos, explicado y analizado en las Epístolas y consumado en Apocalipsis. CRISTO EN LA BIBLIA Para que Ud. Pueda tener una idea más clara en cuanto al lugar que Cristo ocupa en cada libro de la Biblia, le damos a continuación la lista respectiva. Génesis - La simiente de la mujer Éxodo - El cordero pascual Levítico - El sumo sacerdote Números - La estrella de Jacob Deuteronomio - Un profeta como Moisés Josué - Grande capitán Jueces - Mensajero de Jehová Ruth - El pariente más cercano 1 y 2 Samuel - Simiente de David 1 y 2 Reyes - Rey de reyes 1 y 2 Crónicas - El verdadero Rey de Dios Esdras - Señor del cielo y de la tierra Nehemías - Señor del cielo y de la tierra Esther - Nuestro Mardoqueo Job - Redentor resucitado Salmos - El Hijo de Dios Proverbios - Sabiduría Eclesiastés - Encima del sol Cantares - El amado Isaías - El profeta suficiente y glorificado Jeremías - Señor de justicia
Lamentaciones - Varón de dolores Ezequiel - El sumo sacerdote Daniel - Rey Óseas - el Hijo de Dios Joel - El dador del Espíritu Santo Amós - Tu Dios, Oh, Israel Abdías - El Señor en su reino Jonás - El profeta resucitado Miqueas - El Betlemita Nahúm - Portador de buenas nuevas Habacuc - El Señor en su santo templo Sofonías - El Señor en medio de Israel Hageo - El deseado de las naciones Zacarías - Profeta, sacerdote, y rey Malaquías - El sol de justicia Mateo - El rey de los judíos Marcos - El siervo Lucas - El hijo del hombre Juan - El hijo de Dios Hechos - Cristo en el cielo Romanos - El Señor de justicia 1 Corintios - Primicias de los que durmieron 2 Corintios - Nuestra suficiencia Gálatas - Nuestra libertad Efesios - La cabeza de la iglesia Filipenses - El Señor en el cielo Colosenses - La plenitud de Dios 1 y 2 Tesalonicenses - El rey que viene 1 y 2 Timoteo - El solo poderoso Tito - Dios nuestro Salvador Filemón - Pagador de nuestra deuda Hebreos - Nuestro Sumo Sacerdote Santiago - El médico divino 1 Pedro - El cordero suficiente 2 Pedro - El Señor de la gloria 1 Juan - El hijo de Dios que viene 2 Juan - Hijo de Dios e hijo del hombre 3 Juan - Cooperador de la verdad Judas - El juez que viene
Apocalipsis - El que está sentado en el trono Se puede ver claramente que la Biblia es un libro cristocéntrico. Cristo es su plenitud, su centro, su interés y su finalidad. De la Biblia puede decirse: "Porque la gloria de Dios la ilumina y la lumbrera de ella es el Cordero" El término LOGOS o VERBO está usado 200 veces a indicar Palabra de Dios escrita y 7 veces a indicar el Hijo de Dios vivo. (Juan 1:1, 14; 1 Juan 1:1; 5:7; Ap. 19:13) Estas palabras tienen varias comparaciones con: Verdad - Juan 14:6, 1:14; Sal. 119:151; Juan 17:17. Luz - Juan 1:4, 8:12; Pr. 6:23; Sal. 119:105. Preciosa - 1 P. 2:6-7, 2 P. 1:4. Admirable - Isa. 9:6; Sal. 119:129. Para siempre - Sal. 119:89; Mt. 24:34-35, 1 P. 1:25. Vida - Juan 11:25; 14:6; 1 P. 1:23; 1 Juan 1:1. Ambas contribuyen a salvación - He. 7:25, 1 Juan 5:18. Probadas - Isa. 28:16. Salvan - Hch. 16:31, 1 Co. 15:2. Purifican - Tito 2:14, 1 P. 1:22. Santifican - Juan 17:17; He. 10:14. Juzgan - Juan 5:26-27; 12:48. Glorifican - Ro. 15:9; Hch. 13:48. Ambas palabras son expresiones de la mente de Dios Palabra viva - He. 1:3. Palabra escrita - Oseas 8:12. Mensajeros de Dios para bendecir - Hch. 3:26; Lc. 11:28. Ambas infalibles - 1 Juan 3:5; Pr. 30:3. Tienen que recibir las dos para salvación - Juan 1:12; Stg. 1:21. Ambas desechadas y despreciadas por el hombre natural - Isa. 53:3; Mr. 7:9. El LOGOS de Dios es la expresión de Dios - sea en forma viva o forma escrita. Considere los atributos de la palabra de Dios en Sal. 119:86 - fiel. 119:96 - ancho, 119:128 - recto, 119:129 - maravilloso, 119:140 - puro, 119:160 - eterno, 119:172 - justicia y lea también Sal. 19:7-11. La Biblia es: Luz para nuestro entendimiento - Sal. 119:105. Espejo para nuestro conocimiento propio - Stg. 1:23.
Espada para nuestro conflicto - Ef. 6:17. Miel para nuestro deleite - Sal. 19:10. Leche para nuestra nutrición - 1 P. 2:2. Carne para nuestro fortalecimiento - He. 5:14. Martillo para nuestra obstinación - Jer. 23:29. Fuego para nuestra purificación – Jer. 23:29. Oro para nuestro enriquecimiento - Sal. 119:72. Semilla para nuestra siembra - Lc. 8:11.
CÓMO SE DISTINGUE LA BIBLIA DE TODOS LOS OTROS LIBROS "La Biblia es el dios de los libros y el libro de Dios". 1. LA BIBLIA SE DISTINGUE DE TODOS LOS DEMÁS LIBROS POR SU PROFUNDIDAD. Este libro es insondable e inagotable (Sal.36:6). En un solo versículo, aparentemente sencillo, puede haber volúmenes de sentido. Tenemos, por ejemplo, a Juan 3:16; 1 Juan 4:8 y Sal. 23:1. Estos versículos han dado origen a una extensa literatura espiritual que ha sido de bendición para el mundo entero. No hay cita de libro alguno que pudiera servir de fundamento para tanta literatura como estos versículos de la Palabra de Dios. 2. LA BIBLIA SE DISTINGUE DE TODOS LOS DEMÁS LIBROS POR SU POTENCIA. ¿En cuáles aspectos se manifiesta esa potencia del Santo Libro? Veamos: A. En su potencia salvadora - la sola lectura de este libro regenera a los pecadores y los conduce del pecado a la santidad y de la degradación al honor. Ningún otro libro de carácter profano o religioso tiene en sí el poder regenerador o salvador de la Biblia. La experiencia ha demostrado esto en todos los campos misioneros. B. En su potencia consoladora. ¿Cuál libro puede como este sostener el corazón humano en medio de la prueba, confortarlo en medio de la enfermedad, tranquilizarlo ante la pérdida irreparable de seres queridos? ¡Cuánto consuelo han llevado a corazones entristecidos los primeros versículos de Juan 14! C. En su potencia alegradora - Sal. 19:8-10. El gozo que imparte en el corazón la lectura de las Sagradas Escrituras es un gozo profundo y duradero. D. En su potencia iluminadora - Sal. 119:104, Pr. 1:7, 2 Ti. 3:15. La lectura de la Biblia ilumina la mente, despierta las facultades y hace sabio al hombre. A tal punto se cumple esta verdad que muchas personas han aprendido a leer en la Biblia y después de algún tiempo causa admiración ver a estas personas, sin ninguna preparación académica y con sólo la iluminación de la Palabra de Dios, como se expresan y con qué sabiduría hablan de las verdades divinas. 3 LA BIBLIA SE DISTINGUE DE TODOS LOS DEMÁS LIBROS POR SU ADAPTABILIDAD UNIVERSAL. Los otros libros se adaptan a cierta categoría o a cierta raza pero la Biblia se adapta universalmente a todos los hombres: es el libro del niño, del joven y del adulto; del ignorante, del mediocre y del sabio:
de la raza blanca, negra, amarilla y de todas las razas es el libro para todos los hombres. Es, además, el libro de todas las edades, que nunca envejece, nunca pierde actualidad. Es el libro eterno. 4. LA BIBLIA SE DISTINGUE DE TODOS LOS DEMÁS LIBROS POR SU AUTOR. (2 P. 1:21) Los demás libros son del hombre; este es el libro de Dios. Dios es el autor de un solo libro - LA BIBLIA. Tomado de la revista “Momento de Decisión”, www.mdedecision.com.ar Usado con permiso ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.