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ESPECTACULOS
I
CLASICA s EN HOLANDA
Miércoles 18 de enero de 2012
MUSICA s FESTIVAL EN LA COSTA
CINE
Jazz en Pinamar: once días en doce escenarios
ESTRENOS
Valentino, Deborah Dixon y Sandra Ballesteros, entre otros
Gustav Leonhardt, un pionero en el historicismo
Murió el músico Gustav Leonhardt Fue uno de los impulsores del historicismo en la interpretación de música antigua AMSTERDAM (DPA).– El clavecinista, director de orquesta y organista holandés Gustav Leonhardt, reconocido mundialmente por sus grabaciones de música barroca junto con maestros como Nikolaus Harnoncourt, murió anteayer a los 83 años, según dio a conocer un portavoz de la Iglesia Nueva de Amsterdam, donde Leonhardt fue organista durante años. Los expertos consideran a este músico, nacido el 30 de mayo de 1928 en Graveland, norte de Holanda, como el intérprete de clave más destacado de siglo XX, uno de los mayores expertos en el repertorio barroco y en la interpretación de la obra de Johann Sebastian Bach. El músico holandés fue uno de los pioneros mundiales en el movimiento de intérpretes de música clásica que utiliza instrumentos de época, uno de cuyos máximos exponentes actuales es el violagambista y director de orquesta español Jordi Savall. Al tesón y el empuje de Leonhardt se debe, entre otras realizaciones, la serie de grabaciones realizada junto a Harnoncourt de la integral de las cantatas de
Bach, una labor titánica realizada por ambos entre 1970 y 1990 y aparecida en el sello discográfico Teldec. Esta integral supuso una innovación en muchos aspectos, como en el empleo de niños tanto en el coro (voces de soprano y contralto) como en las partes solistas (recitativos y arias para estas cuerdas), respetándose así la ejecución vocal de los tiempos del compositor. En total, Leonhardt grabó más de 200 discos y CD. En 1999 recibió el premio Edison por su dedicación a la música clásica. “Bach es el más grande de todos. Mi admiración por él no para de crecer y jamás se apaga, a pesar de que pase el tiempo. No sabría cómo explicarlo. Es un gran misterio, el misterio de Bach”, comentó el músico una vez. Con la desaparición de Leonhardt también se cierra un capítulo en la historia de la interpretación de la música clásica de las últimas décadas. Este músico también participó en la grabación de bandas sonoras de películas, como Sonata de otoño, de Ingmar Bergman, o en Hanah y sus hermanas, de Woody Allen.
Hoy comienza en Pinamar una nueva edición del Festival de Jazz, que cada año, desde hace once temporadas, se realiza en esa localidad de la costa atlántica, como alternativa artística para los veraneantes y los vecinos. La grilla de este año ostenta la participación de más de 60 músicos en 40 conciertos que se realizarán en 12 escenarios. Algunos serán en salas cerradas y otros al aire libre, aunque todos tendrán entrada libre y gratuita, excepto los que están agendados en el Teatro de la Torre, ya que lo recaudado será a total beneficio de la Escuela Media N° 1, Corbeta Uruguay de Pinamar. El escenario principal será el de Estudio Playa, de Bunge y Avenida del Mar. Las actividades se extenderán hasta el 28 de este mes y comienzan con la Orquesta de Monte, que se presentará hoy, mañana y pasado mañana, a las 19, en Arte del Rey (De Los Delfines 81), en Amari Suites (Del Cazon 1125), y en Estudio Playa, respectivamente. Pasado mañana, a las 22, Barlovento Orquesta estará en el Marcin Hotel, de Cariló, y al día siguiente, a las 18, en Estudio Playa. El sábado, a las 23, será el turno de Moro Bellomo, Deborah Dixon + jazz 4 y Orquesta de Monte en el Teatro de la Torre (Constitución 687), con entrada a 20 pesos. El domingo, a las 18, Sotavento Big Band y Gabriel Gratzer compartirán el escenario de Estudio Playa. Y a la medianoche habrá un duelo de Big Bands en Status (Bunge y Libertador). Hasta el 28 todos los días habrá conciertos con algunos de estos grupos que irán recorriendo los distintos escenarios. El miércoles, a las 22, Jazz Express subirá al escenario de Marcín, de Cariló. Al día siguiente, Valentino Jazz Bazar protagonizará, a las 22, el concierto en Di Francesco, de Avenida del Libertador y De las Artes.
La cantante y actriz Sandra Ballesteros ofrecerá dos funciones de standards jazzeros
La chica del dragón tatuado
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(EE.UU.-Reino Unido-Suecia-Alemania) De David Fincher. Con Daniel Craig y Rooney Mara. Un periodista recibe el encargo de un millonario para que descubra quién mató, años atrás, a su sobrina y en esta búsqueda tendrá la ayuda de una inteligente hacker.
Secretos de Estado
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(EE.UU.) De George Clooney. Con Ryan Gosling y George Clooney. En los días previos a las primarias presidenciales de Ohio el secretario de prensa de la campaña de uno de los gobernadores se ve involucrado en un escándalo político que amenaza con poner en riesgo las posibilidades de su candidato de llegar a la Casa Blanca.
Domingo de Ramos
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(Argentina) (Ver aparte).
Robo en las alturas
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(EE.UU.) De Brett Ratner. Con Ben Stiller y Eddie Murphy. Un grupo de empleados de un lujoso edificio descubre que el responsable del fraude de un fondo de retiro está viviendo en ese lugar que ellos administran.
El viernes, a las 22, la actriz y cantante Sandra Ballesteros llevará su repertorio de standards a Di Francesco. Y al día siguiente, para el cierre de este festival, Ballesteros compartirá el esce-
nario con Tango Jazz Quartet, Sotavento Big Band y los locales Flores-Siste-Delavy, en el Teatro de la Torre, con entrada a 20 pesos, a beneficio de la escuela Media de Pinamar.
Más información. Mirá los avances de las películas en www. lanacion.com.ar
CINE s ESTRENO DE MAÑANA
Héctor Bidonde, José Glusman y Gabriel Goity, en pleno rodaje del thriller PRIMER PLANO
Un juego macabro en pantalla El director José Glusman adelanta la historia de Domingo de Ramos Actor, productor y teatrista, José Glusman vuelve a la pantalla con su film Domingo de Ramos, que se estrena mañana. “La historia –dice durante un diálogo con LA NACION– es un thriller pueblerino con un relato particular. Aunque no me gusta calificar mis obras, esta historia es aparentemente sencilla situada en un espacio propio aunque real, en un lugar bello y particular del mundo que podría ser un barrio cualquiera en un día cualquiera. Sus personajes son seres con una diversidad de conflictos que se van desgranando a través del relato para lograr, finalmente, descubrir lo que les va ocurriendo en el curso de la anécdota.” –¿Dirías que el film se basa en una temática policial? –Hay mucho de policial en lo que ocurre en la película, pero no está basada en peleas o tiroteos. Sus protagonistas son un subcomisario que oculta un secreto, una mujer casada con un hombre inquietante y poderoso, un vecino cercano a estos personajes que ve amenazado su mundo particular y un jardinero que siente que su entorno se va desmoronando. Entre ellos comienza
un juego, a veces macabro, que terminará en tragedia. Glusman, que había dirigido Cien años de perdón, en 2000, y Solos, en 2006, añade: “El relato posee un tiempo narrativo que puede demandar cierto esfuerzo al espectador, pero poco a poco toda esa enredada madeja va quedando al descubierto y sus piezas toman forma y quedan al descubierto”. Señala que la historia partió de un cuento de Daniel López, coguionista del film, “y ambos trabajamos para que ese relato tomase forma cinematográfica”. –¿Domingo de Ramos tiene algún parentesco con tus dos producciones anteriores? –La temática es muy distinta a Cien años de perdón y, en cambio, se acerca más a Solos. El género policial siempre me atrajo y esta vez creo haber logrado un film distinto, atípico y con un clima que va aumentando en espesor hasta su finalización. El realizador eligió para su elenco a importantes nombres. “Cuando comencé a pergeñar la película, en el primero en el que pensé fue en Gabriel Goity, que daba el exacto
retrato de ese misterioso comisario, –apunta– y luego se fueron agregando al reparto Gigi Rua, Mauricio Dayub y Pompeyo Audivert, quienes lograron aportar a sus papeles todo ese ámbito casi tenebroso que pedía el guión. El rodaje me demandó seis semanas de intenso trabajo y, cuando terminé de filmar, sentí un gran alivio, pues en la pantalla estaba lo que yo me había propuesto a partir del guión, es decir hacer una película que necesitaba del esfuerzo de todos para lograr ese clima que va desde lo misterioso hacia lo casi patético.” Como resumen, Glusman dice: “El film transita por una propuesta estética y narrativa que va construyendo su relato con los puntos de vista de los diversos personajes y lo completa el espectador como un observador más. Estimo que mi modesta ambición tenga en el público el eco que mereció el esfuerzo de su rodaje, ya que hacer hoy en la cinematografía nacional un film independiente es, a la vez, un riesgo y una fascinante aventura”.
Adolfo C. Martínez