15 de agosto de 2017 Año 3 - 28

Pequeños Felipes

BIENVENIDA: Salude a cada niño personalmente, con mucho entusiasmo. COMUNICARNOS CON PAPITO DIOS: Motive a los niños a repetir su oración. DINAMICA: Seleccione al grupo en dos equipos, forme dos las. Coloca dos sillas al frente de las las (a unos tres metros) y sobre cada una de ellas, dos paquetes de galletas (puede usar chitos, papas, mecatos) y dos plato. Los dos primeros jóvenes en las las, después de una señal se dirigirán hacia las sillas, abrirán los paquetes de galletas y las vaciarán sobre el plato. Después regresarán a la la y saldrán los siguientes dos participantes, uno de

cada equipo, quienes se comerán una galleta, los siguientes dos se comen dos galletas y así sucesivamente hasta que todos pasen. El equipo que termine primero es el ganador, Después, puedes realizar las siguientes preguntas: ¿Cómo se sintieron los que no probaron ninguna galleta? ¿Quién de los participantes quedó más satisfecho de comer galletas? ¿A quién le hubiera gustado estar en el lugar del último participante?. OFRENDA: ¡Momento de honrar a Dios! UNIDAD: Diseñado para el cumplimiento de mi destino profético

Tema: Parábola de los obreros y la viña Base Bíblica: Mateo 20.1-16 Texto a memorizar. Mateo 20.15 Obje vo: Ayudar a los niños a vencer sen mientos nega vos como la envidia y el enojo Materiales: 1 cuaderno de 50 hojas, lápices, colores Introducción: En Pales na en empo de la recolección de la uva es urgente aprovechar toda la mano de obra que se logre conseguir, aunque sean los que trabajen una hora, porque si no se recoge la cosecha de uva antes que lleguen las lluvias, se puede perder. Los dueños de fincas iban a la plaza, donde los jornaleros esperaban ser contratados. Por trabajar de sol a sol, un jornalero cobraba un denario, moneda de plata y era un buen sueldo para un trabajador. 1. En ésta parábola Jesús hace una doble advertencia: la primera para los judíos. Se hace necesario entender que Jesús está contando esta historia a los judíos. Pregunte a los niños ¿Quiénes son los judíos? (Espere respuestas y mo ve a la par cipación) Los judíos son los hijos de Abraham, Isaac y Jacob. Hace 3300 años, sellaron un pacto con Dios y se convir eron en su pueblo. A ellos inicialmente se les contrato para que hicieran un trabajo, “viña” y el pago por un día de trabajo, el acuerdo fue un “Denario” Porque una advertencia a los judíos? para que no se imaginen que por serlo merecen más que los que hasta ahora conocen de Cristo; y la segunda advertencia es para los recién conver dos para que sepan que si se afanan en cumplir con la misión encomendad, tendrán un gran premio, un jornal como de día entero. Dios es el mejor amo del mundo porque ya no se trata de la can dad del trabajo que se hace sino de su inmensa generosidad. Pablo dice:”Por un leve trabajo el Señor nos concede un inmenso peso de gloria” (2 Cor. 4,17).

2.

La envidia del que cree que merece más por el trabajo realizado porque dedicó mayor esfuerzo o más empo que otros que a su parecer recibieron mayores beneficios es porque no sabe reconocer la inmensidad de dones que se le han concedido. Los primeros serán los úl mos y los úl mos serán los primeros. Hay personas que a los ojos del mundo están en primerísimo lugar porque se conocen sus buenas obras, si son conocidas es probable que hayan sido hechas por vanidad, con la mejor intención de que todos se enteren y esas no son las obras que Dios mas valora sino aquellas que se hacen por amor a Dios, esa verdadera caridad cris ana que ama al prójimo y ve sus necesidades y trata de remediarlas en silencio y por amor a Jesucristo. Quizá esas personas pasen inadver das y el mundo los coloque en el úl mo lugar pero es primerísimo en la eternidad.

La lección para nosotros es que Dios es el dueño de la viña y nos llama a su servicio desde la infancia, pero respondemos en diferentes épocas, a diferentes horas. Pasan los años y no nos interesamos por la salvación de nuestra propia alma y menos por ayudar a otros a alcanzar el cielo. ¿Qué tal si se acaba el día y no trabajamos en la viña y no obtuvimos el denario? ¿Y qué tal si respondemos al llamado que es para TODOS, trabajamos por la gloria de Dios y por el bien de los demás? Entonces nos espera la recompensa prome da por el más generoso Dueño. Será bueno pensar: “Somos jornaleros de Dios que por lo poco que hacemos nos paga un salario extraordinario que ningún jefe puede pagar y consiste en bendiciones y ayudas en la erra y el premio eterno en el cielo.