GUÍA BÁSICA SUELOS DE COCINA

calidad natural

¿Qué tipo de suelo podemos escoger para nuestra cocina? Uno de los aspectos más importantes de nuestra cocina, sin duda, es el suelo que escojamos para ella. El color es importante para la combinación con el resto de elementos que instalemos, pero aún es más importante pensar bien el material que escogemos, ya que la cocina es uno de los espacios más transitados de nuestra casa y su superficie una de las que más sufre. Hay varios factores a tener en cuenta al elegir el suelo que cubrirá nuestra cocina: limpieza, combinación, motivos… Por ello veremos diferentes posibilidades.

1. Suelos porcelánicos rectificados Los suelos porcelánicos rectificados, es decir: cerámica tratada a alta temperatura y cortada con cantos rectos, son comunes hoy en día en las cocinas y ofrecen gran dureza y baja porosidad. Este tipo de suelos pueden imitar a la mayoría de materiales como son la madera, la pizarra o incluso el acero. Además se han convertido en tendencia actualmente por la idea de optar por formatos de gran tamaño (60x60cm, o incluso superiores al metro como 120x60cm) que consiguen crear la sensación de suelo continuo y esto combina a la perfección con los muebles de diseño moderno que se instalan hoy en día en las cocinas de medio mundo. 2. Suelos con cerámica tradicional

3. Suelos de madera natural

1. Suelos porcelánicos rectificados

2. Suelos con cerámica tradicional Históricamente las baldosas de gres tradicional son el tipo de suelo más utilizado para cocinas y aunque sus competidores tienen cada vez más éxito, siguen siendo muy solicitadas. Si prefieres una cocina más clásica compuesta por baldosas pequeñas estas son perfectas ya que sus medidas de 30x30 o 40x30 cuentan con bordes biselados con más espesor y cantos redondeados. Otra de las características distintivas de este tipo de baldosas es que el color de estas es sólo superficial, ya que el acabado inferior de la baldosa es siempre de “pasta roja”. La última de las características, aunque para muchos sea una de las más importantes, es que es la opción más económica.

3. Suelos de madera natural

Hoy día podemos añadir en esta guía la posibilidad de cubrir el suelo de tu cocina con madera debido a los desarrollos que la marca Woodex ha aplicado a sus suelos. Gracias a su tecnología tricapa que respeta la vitalidad de la madera e impide que se produzcan imperfecciones en su acabado, tenemos la opción de utilizar madera para el suelo de nuestra cocina. Poseen una estructura reforzada que posibilita que el aspecto natural y la perfección del acabado se conserven como el primer día. Esta tecnología, además, facilita que pueda ser colocado en cualquier estancia, como cocinas o baños, sin tener que preocuparse por la posibilidad de que se produzcan salpicaduras o pequeños derrames de agua. Y también es compatible con la instalación de suelos radiantes. Sin estos desarrollos tecnológicos que Woodex aplica a sus suelos, sería imposible crear listones con la gama de grandes anchos y largos que ofrecen en sus catálogos. Creando piezas únicas que confieren a los espacios en los que son colocadas un resultado sorprendente y distinguido.

4. Suelos de linóleo y vinilo Dos productos a simple vista parecidos que esconden muchas diferencias entre sí, comenzando porque la composición del linóleo es completamente natural y el vinilo es un producto sintético con un tacto similar al plástico. El linóleo está muy bien valorado por las siguientes características: • Es un producto respetuoso con el medio ambiente • Es impermeable al agua, fácil de limpiar, antibacterial y biodegradable. • El resultado final es el de un pavimento continuo sin juntas ya que se suministra en rollos de 2 metros de anchura o más. • Entre sus acabados encontramos la opción de estampados que simulan un aspecto similar al mármol, o bien tramas con moteados, o bien colores planos. • Su instalación no es excesivamente compleja, pero si queremos un buen resultado será necesario contar con un profesional En el caso del vinilo o PVC su gran ventaja es su precio más asequible. Técnicamente se comporta de igual manera que el linóleo y su instalación es similar.

5. Suelos de microcemento

6. Suelos laminados de madera Cuando hablamos de suelos laminados, nos referimos a aquellos compuestos por un material fabricado con varias láminas pegadas y prensadas a las que se adhiere una lámina con la fotografía de la madera elegida y un acabado plastificado que tiene como resultado un producto de aspecto similar a la madera real. Además el hecho de disponer de un acabado plastificado le confiere gran resistencia a los impactos, arañazos, quemaduras, al desgaste y a los productos de limpieza. Sin duda una de las mejores opciones para cambiar el suelo sin realizar obra y sin contratar a personal especializado. Su precio es ajustado, su montaje rápido y limpio (lo puedes hacer tú mismo) y existe una oferta estética amplia con diferentes acabados de madera.

4. Suelos de linóleo y vinilo

5. Suelos de microcemento Sin duda, es el elemento clave para conseguir una cocina de estilo industrial. Se trata de un compuesto químico que usa como base el cemento tradicional para obtener un fino fluido de increíble dureza y gran flexibilidad. Se adhiere perfectamente a muchos tipos de superficies, y resulta muy interesante si queremos renovar el viejo suelo de nuestras cocinas. El color se aplica en masa mediante pigmentos, y podemos elegirlo entre una amplia gama de tonos, si bien los más habituales son los grises. Recuerda que para instalar cualquier tipo de suelo debes respetar ciertos criterios constructivos básicos. Y que aunque no sea imprescindible, es recomendable contar con un experto tanto para el momento de asesoramiento como para la obra.

6. Suelos laminados de madera

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