El pasado domingo 12 de noviembre asistí a la “Feria Internacional del libro infantil y juvenil”, la cual este año se encuentra ubicada en el Parque Bicentenario, específicamente en Av. 5 de mayo número 290 Col. San Lorenzo Tlaltenango, Delegación Miguel Hidalgo. La experiencia que viví al asistir a la feria del libro, fue realmente enriquecedora y oportuna para mi formación docente, cabe destacar que nunca había tenido la oportunidad de visitar y conocer un espacio cultural tan magnífico. Llegué a la FILIJ alrededor de las 1:00 pm, primeramente, hice un breve recorrido a los espacios que alberga el parque bicentenario, como el orquideario, la campana gigante, y los invernaderos con los que se cuenta. En seguida me dirigí a tomar una actividad en el Cuentódromo llamada ¡Niños y niñas! Vamos a narrar con Norma Torres, la cual tuvo inicio a las 2:00 pm; en dicha actividad un grupo de niños y niñas provenientes del “Centro Cultural de España” narraron diferentes cuentos españoles. Está primera actividad me pareció simplemente increble, pues me dio la oportunidad de ampliar mi panoráma ante las técnicas que se pueden tomar al momento de ver el contenido del cuento y que sin importar la edad de los alumnos, se pueden lograr grandes e importantes beneficios para los pequeños. En mi recorrido por la feria me encontre a un grupo de bailarines (zanqueros) que recorrian todo el parque amenizando con música tradicional referente a la tradición del día de muertos. También tuve el privilegio de asisitir a la presentación del libro de Norma Muñoz Ledo y Mónica Bergna, las cuales se presentaron en el espacio destinado a la presentación de editoriales “café y letras”. Por otra parte la organización dentro de la FILIJ desde mi punto de vista es muy buena, los mapas y anuncios son muy claros y explícitos, a pesar de que el día en el que asistí había mucha gente. La correcta distribución de la feria, facilitaba su recorrido permitiendo aprovechar cada rincón de la misma. Los stands que encontraba me parecieron de buen tamaño, sin embargo, me hubiera gustado que se diera más espacio entre los mimos. La cantidad de editoriales que se ubican en dicha feria era impresionante, podíamos encontrar desde las más conocidas (Norma, Larousse, Santillana, Editoriales Naranjo, SM, Alfaguara, Corimbo, Fondo de Cultura, Babi di-bú, etc.) hasta aquellas que de manera personal desconocia (Kalandraka, Lóguez, Kokinos, Pequeño editor, Algar, Editorial juvenil, entre otras más). El tiempo paso muy rápido dentro de la feria, entre las actividades, talleres, exposiciones y demás salí de la FILIJ, a las 5 de tarde, con una grata experiencia y unos cuantos materiales adquiridos como “Y DESPUES ME ENAMORE DE TI” , “Mi amigo el tigre” y “Mi primer libro”.