Érase una vez

En esta isla vivía un gran dinosaurio, al cual le gustaba escuchar y bailar cumbiazos. .... Pudo llegar al palacio. El castillo se encontraba bajo el mar, así que el murciélago se comunicaba mediante ... Tan incomparables. Como corales.
466KB Größe 8 Downloads 150 vistas
Érase una vez, pero no érase una vez, porque el “Érase una vez” ya está muy usado………………… Una abuelita, ya muy viejita, a la que visitaban sus nietecitos. Era un día muy bonito, y después de darles galletas y chocolate caliente, decidió contarles una historia, la cual era algo así: Cabecita blanca, demuestra experiencia Montaña cubierta de nieve Amor y paciencia De mi abuela siempre he aprendido.

Nada mejor para el corazón Que un buen tazón de pasión Pasteles cubiertos de merengue Sin hambre siempre al salir de casa de abuelita.

Te amo abuela En tus brazos siempre protegida Lo único que quiero Es estar contigo toda la vida.

Hermosos jardines de rosas y jazmines La reina del palacio No hay nada mejor para abuelita Que sus nietos consentidos.

Todo empieza en el vuelo del día 30 de junio de 1998 para mascotas, en el que iban muchos animales, los cuales ustedes ya conocen. MI MASCOTA Mi mascota es mi amigo Siempre está conmigo 1

Y yo lo persigo Cuando muerde a mis enemigos.

Le gusta jugar También aullar Cuando me escucha cantar Se pone a chillar.

Yo lo amo completo Porque siempre me pone contento Y está muy atento A mi descontento.

Siempre juntos estaremos Pues siempre nos amaremos Mejores amigos siempre seremos Aunque lejos estemos.

Ese día hubo una fuerte turbulencia y el avión cayó en una isla llamada “Chakalaupa”. En esta isla vivía un gran dinosaurio, al cual le gustaba escuchar y bailar cumbiazos. EL DINOSAURIO Verde y alto Nada similar al pato Bailando por el pasto Un buen cumbiazo.

Con ese humor Que al mundo le da terror Pero quién diría

2

Que tiene mucha alegría. Mini brazos Nada como los lazos De un tendedero Allá en Polanco.

Hace ¡Grrrr! Al ritmo del tambor Todos hacen ¡Uy! Ay ese ¡Uyuyuy!

Los animales comenzaron a construir refugios, ya que pensaban que jamás volverían a sus vidas normales. Se dieron cuenta que, al anochecer, se escuchaban fuertes estruendos, los cuales eran provocados por las pisadas del bailongo que se estaba echando el dinosaurio. El caballo blanco se sentía invisible, así que decidió jugar a ser explorador y salió en busca de comida, pero nunca imaginó que al salir de la comunidad se encontraría con el gran dinosaurio. CABALLO BLANCO Ese hermoso caballo blanco que corriendo por las montañas va, Corre como si tuviera alas, Relincha sin cesar, Piensa que es águila, y brinca de felicidad.

Su libertad la admiro, Pues junto con él puedo dormir tranquilo, Siento su calor, su confianza, 3

Estar con él es como una alabanza. El viento mueve sus crines blancas, Se agitan, como tenampas, Quiero su amistad, su lealtad, Que me saque de este sueño.

Que me lleve lejos, donde sólo la imaginación lo hace, Que su galope me tranquilice, Y todo lo bueno lo utilice para inspirar, ¡Corre caballo blanco! Te espero hasta despertar.

Al ver al caballo, el dinosaurio pensó, –éste está bueno para un pozole-, así que comenzó a perseguirlo por toda la isla. El caballo era mucho más rápido que el dinosaurio, así que corrió hacia la playa. Estaba tan asustado que se puso blanco como la nieve. Al llegar a la playa, les avisó a todos sus amigos lo que estaba pasando, pero no sabía que el dinosaurio lo estaba siguiendo. De pronto, apareció el dinosaurio, y, al encontrar a todos los animales, enfureció demasiado y comenzó el verdadero caos. Al ver al enfurecido dinosaurio, todos los animales comenzaron a correr despavoridos. Las conejitas, que eran gemelas, con su hermosura saltaban y saltaban sin parar intentando escaparse del feroz dinosaurio. LA CONEJITA FELIZ Aquí viene la conejita Brincando por la ciudad Con una sonrisota Que se parece a su dueñita. 4

Para vivir con alegría Va saltando con emoción Porque es un lindo día Para reír sin parar.

Te daré un abracito Con grande emoción Para pasarte mi sonrisita Que tengo en la ciudad.

Ya viene la lunita Tendré que dormir Soñaré como tomo un heladito Que me congelará el cerebrito.

SALTA Y SALTA La conejita saltando está Por la comida que le van a preparar Mueve su colita al ritmo del compás Percibiendo el olor de tan delicioso manjar.

Salta y salta Al ritmo del ta, ta, ta Menea su colita Para expresar su alegría.

Esta conejita Que muy chiquita está Mueve la cabecita Porque loquita está.

5

Al fin lo logró Al tener el manjar en sus manos Cantó y bailó Al ritmo del tambor. Saltaban tan alto y con tanta desesperación, que no se dieron cuenta que estaban aplastando a las pequeñas arañas con sus patas largas.

LAS TEMEROSAS Las temerosas suben y bajan, Comen y duermen Pero también temen.

Son comida para aves y sapos Pero con su veneno poderoso, ni eso las daña. Son solitarias, pero están siempre acompañadas Por ocho patas que les ayuda a construir telas de araña.

Ellas corren y corren E intentan huir, Se paralizan y lloran Porque nadie las quiere aquí.

Temen porque mueren Ya sea bajo la suela de nuestro zapato O por los gritos que damos Nosotros, las asustamos.

De pronto, las conejitas quedaron atoradas en una telaraña, y su amiga la ranita las salvó dándoles un gran lengüetazo.

6

LA RANITA La ranita bajo el agua va Poco a poco nadando está Hasta llegar a su casa Pues su mamá la quiere ver llegar.

Sigue nadando dice su mamá Pues ahí viene el cocodrilo sino te comerá La ranita sigue sin parar Pues en su casa ya debe de estar.

La ranita se golpeó tan fuerte Y ahora llorando va Mareada se encuentra la ranita Su camino ya no puede seguir Pues está golpeada que descansando está.

Nada, nada ranita, dice su mamá Debes llegar a casa Aquí te voy a esperar La ranita sigue nadando Para que al llegar a casa Su mamá una taza de té le pueda preparar.

La abeja traviesa, sin dudarlo, picó en la yugular al dinosaurio y lo dejó paralizado durante un largo, largo rato. Oliendo una florecilla Una abeja apareció Y sin pensarlo dos veces En la nariz me picó. 7

Yo ni grité ni corrí Tan sólo la cogí Con cuidado por las alas Pues me pareció algo vieja.

Y mirándole a los ojos Le dije malhumorada “Si yo a ti no te hecho nada, ¿Por qué tú a mí me has picado?”

Y la abeja que es tan vieja Resultó ser muy traviesa Y con su zumbido Me dejó sin oído.

Los animales comenzaron a hacerles señales de ayuda a las embarcaciones cercanas, y tuvieron la suerte de que una de las embarcaciones acudió al llamado de auxilio con un bote de rescate dirigido por un niño algo extraño, pues tenía muchos tatuajes. Lo apodaban “El niño de los tatuajes”. EL NIÑO DEL TATUAJE Es un niño muy tatuado Sus tatuajes se los hizo del otro lado, Mucha gente piensa mal de él Lo que no saben es que es honesto y fiel. Personas amables Te hablan con respeto Pero al verlo No le dan aliento. Mucha gente lo juzga 8

Por sus marcas de vida Sin saber Lo que le ha enseñado su familia. No hay que juzgar Al niño tatuado Sin haberle hablado Es una persona de respeto y cuidado. Todos pudieron subir al bote de rescate y llegar hasta el barco. Una vez en él, los animales se encontraron con la sorpresa de que el capitán era una alegre hormiga, y su tripulación eran pequeñas hormiguitas listas para la acción. LAS HORMIGAS Caminando con azúcar van Sobre el suelo temblando están Pasos cortos y largos dan ¡Caminemos, ya vamos a llegar!

La hormiga es amiga Cuando se trata de una miga Sin importarle lo que La gente diga.

Son insectos más que pequeños Con patas y antenas muestran Empeño.

9

Entre plantas y bellotas andan sin cesar Pero preservando el ambiente ellas Están. Al anochecer, los animales decidieron salir a cubierta para respirar un poco de aire fresco, y se dieron cuenta de que la luna estaba justo en medio del cielo, rodeada de pequeñas estrellas. Luna lunita Qué bella te ves En esta noche fría Asomándote otra vez.

Me gusta tu forma También tu color Tu brillo me alumbra Y me quita el temor.

No quisiera que te fueras Ni aunque tu quisieras Mi mejor amiga Tu brillante luz me abriga.

Luna lunita Con sabor a queso

10

Espero con ansias Tu pronto regreso. Al bajar la mirada, se encontraron con un curioso amigo de ojos amarillos, lo que les causó un poco de miedo, y las hermosas hermanas conejo decidieron asustarlo. AMIGO DE LOS OJOS AMARILLOS Esos ojos amarillos Que me miran en la sombra Pertenecen a un amigo Que se acuesta en la alfombra.

Mi amigo blanquinegro Mi peludo compañero Si lo veo yo me alegro Y para comer lo espero.

Me despierta ronroneando Y al dormir está a mi lado Creo que está muy consentido Yo lo quiero demasiado.

Parte ya es de la familia Su presencia reconcilia Me maúlla entre ratos Es la charla con mi gato. Siguieron caminando y se encontraron con un grupo de tenebrosos murciélagos, a los cuales asustaron y todos comenzaron a gritar y correr como locos. Uno de los murciélagos les preguntó - ¿A dónde van todos ustedes amigos? - pero nadie le respondió, todos se quedaron petrificados.

11

MURCIÉLAGOS Pieles negras los enfundan Y las sombras los ocultan. Criaturas que a los niños asustan, Pero muy interesantes resultan.

Durante el día, de la bati-cueva se apropian, Mientras duermen, el héroe no los nota. Como Batman la justicia buscan, A su sed voraz de fruta.

Aunque los rayos de sol no logran percibir, La bati-señal es la excepción, Mientras el Guasón no se deja perseguir, Sabemos que Batman victorioso va a salir.

Nuestros amigos con facilidad consiguen hogar, No te tienen que rogar, En tu techo los vas a encontrar. El murciélago les contó que él era el encargado de cuidar el castillo de la hermosa princesa, y por eso debía parecer temible, pero en realidad, era muy amable. LA PRINCESA Y EL DRAGÓN El dragón raptó a una princesa, así por sorpresa 12

La encerró en una torre tan alta Que a las aves espantaba.

Sola y triste la princesa lloraba Aunque nadie la escuchaba Y cansada de tanto llorar Se puso a cantar.

La princesa cantaba fatal Todo lo cantaba muy mal El dragón se tapó las orejas Pues su canto era muy feo.

La princesa siguió cantando Un día todo se estaba inundando El dragón salió volando Y la princesa estaba nadando Aunque nadaba despacito Pudo llegar al palacio. El castillo se encontraba bajo el mar, así que el murciélago se comunicaba mediante un woki toki con un pececito llamado “Chencho” que allí vivía. MI PECECITO ¿Ese es mi pececito? Muy lejos lo veo nadar. 13

Aletea y aletea, ¡Aletea por todo el mar!

Su amiga la medusa Mira qué guapa va Subiendo y subiendo Con el amigo calamar

Todos juntos van nadando No se cansan de nadar Pareciera que van bailando Al redoble del tumbar

El mar parece cielo Sólo que con luces de colores Son los colores de los peces El manjar de mis amores. Los animales le pidieron al murciélago que los llevara al castillo de la princesa porque querían conocerla. Éste no lo dudo ni un segundo y se comunicó de inmediato con Chenco para pedirle que los dejara pasar. Al llegar al castillo, la princesa se puso feliz, ya que la habían ido a visitar nuevos amigos. Los animales se dieron cuenta que a lo lejos se encontraba una sombra bailando alegremente MI SOMBRA Mi sombra se me perdió ¿Y dónde estará? ¿Estará bajo una hoja,

14

o tal vez atrás del sol? Mi sombra se me perdió Y ya no sé dónde buscar Busco por aquí, busco por allá Porque mi sombra no me sigue más.

¿Quién la vio pasar, desinflar o tal vez bailar? ¡Ya no sé qué hacer! Doy vueltas sin parar. Y sigo sin encontrar.

Miro hacia atrás, hacia adelante Y cuando miro hacia un costado Veo mi sobra llegar Atadita a mis zapatos Conversando con mi gato.

Bailaba alrededor de una hermosa mariposa que lucía sus increíbles alas. 15

Verdes las hojas de los árboles Flores de muchos colores Mariposa multicolor Ayer pequeña oruga Hoy por gusano cambió.

Volando de flor en flor Adornando el sol Mariposa en el aire Jugando voy.

Bonita mariposa Alegre vuela Quisiera verte Mientras esperas.

Tus alas de colores Veo pasar Y con delicadeza Las quisiera acariciar. De repente se escuchó - ¡Cuidado, ya viene! -. Seguido, se oyó un fuerte ¡GRRRRR! -. Todos se pusieron como locos al pensar que por fin les había llegado su hora final. El dinosaurio encontró a los animales temblando de miedo y les dijo me di cuenta de que los animales son amigos, no comida, solamente quiero alguien con quien poder jugar y compartir mi pelota. LA PELOTA Querida pelotita Tu tan redondita Que rebotas y rebotas En mi cabecita.

16

Pelota pelotita, Tu tan chiquitita Que te vuelas Por mi ventanita.

Pelota pelotita Pelotota, Cada vez que rebotas Suelto una sonrisota. Esos colores Celestiales Tan incomparables Como corales.

Los animales contentos por saber que su hora final aun no llegaba decidieron hacerse amigos del dinosaurio. Éste les enseñó a bailar cumbia y a rebotar y rebotar una y otra vez la pelota colorida. Al terminar de contar la grandiosa historia, la abuelita les dijo a sus nietecitos que no quería que le tuvieran miedo a nada, que hicieran muchos amigos y que no se dejaran llevar por las apariencias. Y colorín colorado, este cuento se ha terminado.

17