PRIMAVERA 2015 | GUÍA PARA EL ESTUDIO PERSONAL

PRODUCTIVIDAD: HALLEMOS GOZO EN LO QUE HACEMOS DÉ ENTRADA A LA ESPERANZA

UNA VICTORIA PERDURABLE El 28 de octubre de 2011 fue una gran noche para los Cardenales de St. Louis. Al vencer a los Rangers de Texas en la Serie Mundial, llegaron a la cima del mundo. ¡Vencedores! Fue fabuloso ganar el campeonato, pero al siguiente mes de abril tuvieron que comenzar de nuevo. Exactamente un año después de su espectacular victoria, los Cardenales pudieron ver cómodamente sentados en sus salas de estar cómo los Giants de San Francisco ganaban la Serie Mundial de 2012. Ser campeón de una serie es una victoria pasajera. Sería maravilloso si la victoria fuera permanente. Por más exitosos que seamos, hay una cosa que no podemos vencer: la muerte. Tal vez nos sintamos victoriosos por los logros y las posesiones que tenemos, pero la muerte llega y nos quita todo eso. En última instancia, nuestros pecados y nuestra rebelión nos vencen, y la consecuencia es la muerte. Dios, por Su gran amor, no nos deja en ese estado. Él envió a Jesucristo a la tierra para vivir la vida sin pecados que nosotros no podíamos vivir. Cuando Jesús murió en la cruz, murió la muerte que debíamos sufrir nosotros. Él cargó con nuestros pecados y nuestro castigo, y venció la muerte. Dios aprobó el sacrificio de Su Hijo, resucitándolo de los muertos. Jesús no solo venció la muerte; hoy, nosotros podemos tener una vida nueva en Él. Si usted desea que la victoria de Cristo sea su victoria, arrepiéntase de sus pecados y ponga su fe en Cristo. Admita ante Dios que usted es un pecador. Apártese del pecado que lo aleja de Dios y reciba el perdón que Jesús le regala. Confiese su fe en Jesucristo como Salvador y Señor. Exprese su arrepentimiento y su fe haciendo una oración similar a esta: “Querido Dios: Sé que soy pecador. Creo que Jesús murió para perdonar mis pecados. Me arrepiento de todo el mal que he hecho. Gracias por perdonarme. Ahora acepto la vida eterna que Tú me regalas. Gracias por la nueva vida. A partir de este día elijo seguirte. En el nombre de Jesús, amén”. Coméntele su decisión de seguir a Jesús a un pastor o compañero de estudio bíblico. Involúcrese en una iglesia que le ayude a crecer en su fe. Bautícese como un testimonio de su fe en Jesucristo. .

Índice Productividad: Hallemos gozo en lo que hacemos FECHA DE USO



Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6

Marzo 1

Sesión 1 Buen trabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8

Marzo 8

Sesión 2 Para quién trabajamos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18

Marzo 15

Sesión 3 Para qué trabajamos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28

Marzo 22

Sesión 4 Ponga a trabajar su dinero. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 38

Marzo 29

Sesión 5 Ponga en marcha su plan . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 48

Abril 12

Sesión 6 Dé un descanso a su trabajo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 58



Una mirada atrás . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 68

Dé entrada a la esperanza

Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 70

Abril 19

Sesión 1 La esperanza necesaria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 72

Abril 26

Sesión 2 La esperanza hallada. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 82

Mayo 3

Sesión 3 La esperanza personificada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 92

Mayo 10

Sesión 4 La esperanza expresada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 102

Mayo 17

Sesión 5 La esperanza renovada. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 112

Mayo 24

Sesión 6 La esperanza compartida . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 122



Una mirada atrás

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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Mas ahora... victoria (Pascua) Abril 5

Mas ahora… victoria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 134

Extra (Parte 1 de 2) Mayo 31

La obra de la creación de Dios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 141 E S T U D I O S B Í B L I CO S PA R A L A V I DA

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¡No se pierda esto!

ESTUDIOS BÍBLICOS PARA LA VIDA Guía para el Estudio Personal  Primavera 2015   Vol. 1, No.3 ERIC GEIGER Vice President, Church Resources

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Ilustrador bíblico El Ilustrador Bíblico (Biblical Illustrator) ofrece una información detallada acerca del origen de las costumbres, la historia, la cultura y la arqueología incluyendo además estudios de las palabras usadas en la Biblia en el idioma original a fin de proporcionar una explicación profunda que facilite la explicación. También se incluyen con frecuencia fotografías, mapas bíblicos y gráficos. Todo este caudal de información gratuita se refiere específicamente a los estudios que se realizan en el trimestre. ¡No se los pierda! Disponibles en: http://blog.lifeway.com/eblifewayadultos

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RONNIE FLOYD General Editor DAVID FRANCIS Managing Editor ÁNGEL ORTIZ Manager, Multi-Language Publishing ELIZABETH DÍAZ-WORKS Content Editor MICHELLE SAWFFORD Digital Content Specialist Envíe sus preguntas y comentarios a: Manager, Multi-Language Team Estudios Bíblicos para la Vida® para Adultos: Guía para el Estudio Personal One LifeWay Plaza Nashville, TN 37234-0135 O un mensaje electrónico a [email protected] Estudios Bíblicos para la Vida para Adultos: Guía para el Estudio Personal (ISSN pending; Ítem 005075116) is published quarterly by LifeWay Christian Resources, One LifeWay Plaza, Nashville, TN 37234, Thom S. Rainer, President. © 2014 LifeWay Christian Resources. ¿Tiene algún problema con el pedido de la literatura? Visite www.lifeway.com/espanol o escriba a LifeWay Church Resources Customer Service, One LifeWay Plaza, Nashville, TN 37234-0113. Para subcripciones envíe un FAX al (615) 251-5818 ó un mensaje a la dirección de correo electrónico subscribe@lifeway. com, Para múltiples copias que se envían a una misma dirección cada trimestre, envíe un FAX (615) 251-5933 ó un mensaje a la dirección de correo electrónico [email protected]. También puede hacer su pedido mediante nuestra página Web: www.lifeway. com y en los Estados Unidos, Puerto Rico y Canadá puede llamar gratis al teléfono 1-800-257-7744 de 8:00 a.m. a 4:00 p.m. Hora del Centro. Creemos que la Biblia tiene a Dios como su autor; la salvación como su finalidad; y la verdad, sin ninguna mezcla de error, como su tema. Para ver los principios doctrinales que sustentamos, visite: www.lifeway. com/doctrinalguideline. A menos que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas se han tomado de la Santa Biblia, Versión Reina-Valera 1960, © Copyright Sociedades Bíblicas en América Latina, publicada por Brodman & Holman Publishers, Nashville, TN. Usada con permiso. Impreso en los Estados Unidos de América.

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Unas palabras del Editor General

¿No tiene usted, a veces, la sensación de que mientras más gasta, menos obtiene? Todos nos encontramos con esos obstáculos, pero hay una forma de evitarlos. Mi hijo Nick y yo hemos escrito un estudio llamado “Productividad: Hallemos gozo en lo que hacemos”. Las respuestas se encuentran en la práctica de la mayordomía bíblica, la administración de nuestro tiempo, dones y recursos para la gloria de Dios. Al leer lo que dice la Biblia acerca de nuestro trabajo y el dinero, descubriremos cómo pasar de ganar para nosotros mismos a descubrir el gozo de utilizar nuestro trabajo y nuestras entradas para el reino de Dios. El segundo estudio es “Dé entrada a la esperanza”. Cada persona con la que usted se relaciona tiene algún motivo de sufrimiento en su vida. Todos hemos cometido errores. Todos sentimos vergüenza o remordimiento por algo en nuestro pasado. Hemos tratado de arreglar las cosas en nuestra vida y fracasamos. Después de un tiempo, muchos perdemos la esperanza. El estudio de Pete Wilson, “Dé entrada a la esperanza”, no nos da una salida fácil: reconoce que necesitamos esperanza porque fallamos, pero también nos muestra que siempre hay esperanza. Hemos agregado un estudio especial para la Semana de Resurrección: “Mas ahora… victoria”. El Dr. Fred Luter, pastor de Franklin Avenue Baptist Church en New Orleans, nos expone algunas maravillosas verdades de 1 Corintios 15, acerca de la victoria que tenemos en Cristo.

Editor General @RonnieFloyd | RonnieFloyd.com

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PRODUCTIVIDAD: HALLEMOS GOZO EN LO QUE HACEMOS

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¿Cuál es el equilibrio bíblico entre ambos? Trabajo y descanso. Equilibrio. Muchos trabajan demasiado, motivados por una adicción al trabajo. Otros hacen el mínimo esfuerzo posible, lo indispensable para permanecer en el empleo y recibir un sueldo. Ambos grupos necesitan equilibrio. Muchos ganan más de lo que necesitan y llenan sus vidas de experiencias y cosas. Otros luchan para pagar los gastos más básicos. Ambos grupos necesitan equilibrio. Este estudio presenta los mandatos bíblicos de trabajar y descansar, y nos muestra acciones que nos ayudan a lograr el equilibrio. Al aplicar los principios bíblicos, pasamos de vivir y ganar para nosotros mismos a descubrir que nuestro trabajo y nuestro salario son recursos que podemos invertir para el reino de Dios.

Ronnie y Nick Floyd Ronnie y Nick Floyd escribieron este estudio en colaboración. Ronnie ha servido como pastor principal de Cross Church en el noroeste de Arkansas desde hace más de 26 años. Nick Floyd, su hijo, es uno de los pastores en esa iglesia y predica semanalmente en el campus Fayetteville. Esta pujante e innovadora iglesia, con diversos centros, lleva el mensaje de Jesucristo a miles de personas. Lea el blog de Ronnie: RonnieFloyd.com. Siga a Ronnie y Nick en Twitter: @RonnieFloyd y @NickFloyd8.

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SESIÓN 1 BUEN TRABAJO

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SESIÓN 1

¿Qué le gustaba más de su primer trabajo?

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EL ASUNTO

El trabajo es un don de Dios, no una maldición.

APLICACIÓN PARA LA VIDA La cama está tan calentita… y el cuarto está tan frío. Los ojos se sienten pesados. Usted mira el despertador y siente el peso de un millón de problemas y de las tareas que le esperan. Se levanta trabajosamente de la cama, va tropezando hasta la cocina para servirse un café, se da una ducha y aún medio dormido se viste y sale a trabajar. Algunos trabajan todo el día, esperando que termine su turno para poder irse a casa y al día siguiente comenzar de nuevo el mismo proceso, día, tras día. ¿Es esta la vida de trabajo que realmente Dios quiso que tuviéramos? Nadie está exento de tener un mal día en el trabajo pero, ¿acaso el tiempo que pasamos trabajando tiene que ser una tortura de la que solo deseamos ver el fin? Dios fijó una pauta completamente diferente en el libro de Génesis. En los dos primeros capítulos Dios nos habla de una manera fuerte sobre cómo debemos encarar nuestro trabajo. Veremos que el trabajo es un don de Dios, no una maldición.

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SESIÓN 1

¿QUÉ DICE LA BIBLIA? Génesis 1:28; 2:8-9, 15-17

Palabras clave

1:28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y

Huerto (2:8)—Esta palabra viene de un verbo hebreo que significa “defender” o “proteger”. En el huerto de Edén, Adán y Eva disfrutaban de toda la protección y provisión de Dios.

multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. 2:8 Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente;

y puso allí al hombre que había formado. 9 Y Jehová Dios hizo nacer de la tierra todo árbol

delicioso a la vista, y bueno para comer; también el árbol de vida en medio del huerto, y el árbol de la ciencia del bien y del mal.

Ciencia del bien y del mal (2:9)—Hay diferentes interpretaciones de esta frase, pero algo queda claro: este árbol ofrecía un conocimiento que era innecesario, inadecuado y prohibido para la humanidad. Este árbol provocó vergüenza, castigo y expulsión.

15 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el

huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase. 16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo

árbol del huerto podrás comer; 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal

no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.

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EL ASUNTO

El trabajo es un don de Dios, no una maldición.

Génesis 1:28 En Génesis 3:17-19, Dios maldice el trabajo como consecuencia de la desobediencia de Adán. Esta maldición afecta nuestro trabajo, pero el trabajo en sí no es la maldición. De hecho, cuando leemos Génesis 1:28, vemos que Dios le ordenó a Adán que se ocupara de trabajar. Dios le dio trabajo a Adán antes de que el pecado entrara en escena. Dios le dio a Adán tres mandatos: Reproducirse: Adán y Eva debían tener hijos que también se reproducirían y llenarían la tierra. Poner orden: Aquí la imagen es de sometimiento. Representa la responsabilidad de que Adán y Eva trabajaran fielmente para aprovechar los recursos naturales que Dios había puesto a su alrededor. Gobernar: Adán y Eva debían dominar todos los peces, aves y seres vivos. Dios estableció el orden desde el principio. El trabajo es un regalo de Dios, no una maldición, así que en Génesis 1:28 vemos que el plan divino es que cumplamos fielmente con nuestro trabajo. Dios podría haberles dicho que se quedaran sentados esperando que Él supliera todas sus necesidades; pero en cambio, le ordenó a Adán que fuera activo. Una de las mejores maneras en que podemos ver que el trabajo es un regalo de Dios es el hecho de que Él lo usa para proveer para nuestra familia y para quienes dependen de nosotros. Si no trabajáramos, ¿cómo supliríamos esas necesidades? Aun en los momentos en que nos sentimos frustrados por nuestro trabajo, podemos dar gracias porque Dios nos provee a través de este.

¿Qué relación existe entre la bendición de Dios y nuestro trabajo?

P R E G U N TA

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SESIÓN 1

#2

El trabajo que usted tiene actualmente, ¿cómo cumple sus propósitos y extiende el reino de Dios?

P R E G U N TA

Génesis 2:8-9, 15

#3

Cuando llegamos a Génesis 2:8-9, vemos dos factores muy importantes en nuestra concepción del trabajo como un regalo de Dios: Dios puso a Adán y a Eva en un lugar específico. Dios hizo que la tierra diera fruto. Piense en esto, considerando el contexto de su propio trabajo. Debemos comprender dos principios importantes: 1. Dios nos pone en un lugar específico. Piense en el lugar donde Dios lo ha llevado a trabajar. Piense en los estudios y la experiencia que le permitieron conseguir ese trabajo o empleo. Piense en las relaciones que fueron vitales para que lo contrataran. Recuérdese que Dios ha armado, pieza por pieza, todo el cuadro de su vida, incluyendo su trabajo. 2. Dios bendice el lugar donde lo ha puesto. El huerto era un lugar de perfección y belleza absolutas. Era un sitio para tener comunión ininterrumpida con Dios. En el capítulo 1 Dios le dijo a Adán que trabajara la tierra. En el capítulo 2 el Señor ordenó que brotaran árboles agradables a la vista y llenos de fruto. Aunque Dios le dio una tarea a Adán para cumplir, Dios seguía siendo quien daba el crecimiento. El trabajo es un regalo de Dios, no una maldición. Dado que eso es cierto, debemos aprender a considerar que estamos en un buen lugar donde Dios derrama cosas buenas. Él nos ayuda a ganarnos la vida, proveer para nuestras familias y disfrutar Sus bendiciones mientras estamos en esta tierra. Dios nos pone en un lugar específico y nos bendice en ese lugar para que podamos extender Su reino. Las bendiciones divinas que recibimos no son casualidades, por eso debemos usarlas para Él. Una pregunta clave que debemos formularnos es: ¿Para qué me ha dado Dios este trabajo en particular?

¿En qué sentido su trabajo es parte del designio general de Dios?

P R E G U N TA

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#4

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EL ASUNTO

El trabajo es un don de Dios, no una maldición.

“Perdemos muchas oportunidades porque vienen vestidas de overol y parecen trabajo”.

¿Qué decisiones que usted tome en su trabajo llevarán a una bendición o a una maldición?

—T H O M A S A . E D I S O N P R E G U N TA

#5

Génesis 2:16-17 En medio de la perfección del Edén, Dios le dijo a Adán que no comiera de un árbol. Todo lo demás —todo el huerto— estaba a su alcance. En lugar de trabajar en el huerto y disfrutar del fruto que Dios le había provisto, Adán se concentró en lo único que no podía tener. Por eso cayó en el pecado. ¿No hacemos lo mismo nosotros? Dios nos da un trabajo que suple nuestras necesidades y permite que la obra del reino progrese, pero nos desviamos y caemos en el pecado. “¡Si me hubiera quedado con lo que Dios me llamó a hacer, nunca me habría metido en este problema!” Adán podía elegir entre lo bueno y lo malo. Adán podía elegir entre obedecer y desobedecer. Adán podía elegir entre la bendición y la maldición. Dios nos pone en lugares específicos para hacer los que Él nos ha llamado a hacer, pero tenemos opciones: ¿Actuaremos con integridad? ¿Buscaremos una salida fácil? Las decisiones que tomamos en cuanto a lo laboral muestran lo que creemos acerca del trabajo. Aunque es lamentable, muchos lo consideran egoístamente como una forma de lograr una posición social o acumular cosas. Otros lo ven como una triste realidad que hay que soportar. Debemos estar siempre en guardia para no caer en la táctica del enemigo, que es crear descontento por lo que Dios nos ha llamado a hacer.

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SESIÓN 1

TRABAJADOR MODELO ¿Quién le enseñó el valor del trabajo? Escriba las características de la actitud de esta persona hacia el trabajo y lo que aprendió de ella:

E S T U D I O S B Í B L I CO S PA R A L A V I DA

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EL ASUNTO

El trabajo es un don de Dios, no una maldición.

PÓNGALO EN PRÁCTICA Entonces, ¿cómo decidimos apreciar el regalo del trabajo que Dios nos da? Cuidémonos de caer en el descontento. Cuando se sienta insatisfecho en su trabajo, mentalmente haga una lista de, por lo menos, tres formas en las que Dios lo ha bendecido en su tarea. Anime a un compañero. Busque una forma tangible de alentar a alguien en su trabajo. Por ejemplo, deje una nota para los conserjes. Dedique unas palabras de aliento al supervisor que condujo de forma excelente una reunión. Dé gracias a sus mentores. Recuerde a esa persona que mencionó en la actividad de la p. 15. Escríbale una nota o un mensaje para expresarle su gratitud por enseñarle a trabajar. Mencione en su nota uno o dos atributos clave que esa persona le enseñó con el ejemplo. Dios usa el trabajo para enseñarnos a seguirlo más profundamente. Así que salga de la cama, sírvase un café y espere con expectativa lo que Dios hará.

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SESIÓN 1

Mi opinión

Peticiones de oración

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