PECADO EN LA IGLESIA Héctor Romo García Usado con permiso Propósito General: Doctrinal. Propósito Específico: Instruir a la congregación a vivir en santidad y no justificar el pecado que conozcamos de un hermano. Tema: Pecado en la iglesia. Texto: 1 Corintios 5:1-5 I. La iglesia debe proclamar el arrepentimiento para el perdón de los pecados (v. 5:1). A. La palabra fornicación en su original griego es porneia de donde deriva la palabra pornografía. Esto implica todo tipo de inmoralidad sexual. B. La iglesia es el cuerpo de Cristo, y no debemos contaminarla con el pecado. El testimonio de la iglesia debe ser de santidad, no de pecado. C. La iglesia debe impactar e influir en el mundo, no el mundo impactar e influir a la iglesia. D. La Iglesia tiene la responsabilidad de predicar la palabra de Dios, para que ésta genere la convicción del pecado, y la necesidad del arrepentimiento para que Dios perdone ese pecado (Lc. 24:47) E. Cristo es quien mantiene pura a su iglesia. (Ef. 5:25-27) II. La iglesia no debe consentir el pecado, ni al pecador (ver. 2). A. En este pasaje observamos que el pecador es miembro conocido de la iglesia y que la iglesia de Corinto, consentía con la inmoralidad sexual. B. La iglesia no debe ser indiferente al pecado, ni al pecador. No importa quién sea el pecador, ni qué cargo ocupe, debe ser llamado al arrepentimiento de su pecado. C. La iglesia es la asamblea de aquellos pecadores arrepentidos y perdonados por Cristo. La Iglesia no debe tolerar conductas pecaminosas de sus miembros, debe lamentar esas conductas, pues afectan a todo el cuerpo de Cristo (Jos. 6:16-19 y 17:1-25). D. Cuando la iglesia tolera y consiente el pecado de sus miembros, pierde su propósito y deja sin esperanza a los incrédulos, pues estos no ven diferencia alguna que los lleve a Cristo. III. La iglesia debe disciplinar al pecador no arrepentido. A. Recordemos que el vocablo disciplina, significa instruir, por ello, la iglesia debe instruir nuevamente al pecador no arrepentido. B. Se le debe disciplinar siguiendo el procedimiento de Mateo 18:15-17, y la iglesia disciplina así: 1. Con la autoridad del nombre y poder de Cristo, esto es, reunida la iglesia, deberá juzgar los hechos pecaminosos y la negativa del hermano al arrepentimiento, enfatizando que: a. Es a tu Señor al que se hiere y lastima, es su nombre el que se está dañando. b. Es por tu Señor que se debe llevar a cabo esta disciplina. c. Es nuestro Señor solamente el que puede usar la disciplina para mover la conciencia del hermano pecador al arrepentimiento y a buscar reconciliación con Dios.

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2. Si no existe manifestación de arrepentimiento, la resolución de la iglesia debe ser “entregarlo a Satanás, para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús”. Esto significa: a. Retirarlo de la comunión de la iglesia. b. Déjenlo sin la protección y cobertura de la iglesia, esto es, al amparo del mundo pecaminoso. Dejarlo en el mundo incrédulo para que su carne experimente el dolor de las aflicciones mundanas. (Parábola del hijo pródigo). c. Todo esto tiene como propósito su rehabilitación, a fin de evitar que siga corrompiendo el nombre de Cristo. d. Como ejemplo para otros creyentes. (1 Ti 5:20) e. El pecador será salvo, pero su salvación será como pasar por fuego, y no obtendrá recompensa alguna.

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