4

MARTES 13 Y 03 Y 2012

CASTIGADO

FÚTBOL: VIOLENCIA SIN FIN

TRAS LA BATALLA DE SAN MARTÍN HUBO UNA RÁPIDA REACCIÓN POLÍTICA: SE CLAUSURÓ LA CANCHA DE CHACARITA, QUE JUGARÁ A PUERTAS CERRADAS COMO LOCAL Y SIN SU PÚBLICO DE VISITANTE EN BUENOS AIRES; LOS DIRIGENTES DE ATLANTA AFIRMARON QUE POR MILAGRO NO HUBO UNA TRAGEDIA

Imágenes del caos tras el partido entre Chacarita y Atlanta, con destrozos en la cancha y patrulleros quemados por los barrabravas del equipo de San Martín

CARLOS BEER LA NACION

L

os hechos fueron tan graves, tan impactantes, que provocaron una rapidísima decisión política, inusitada para estos casos. Apenas pasado el mediodía, y mientras las voces de los dirigentes de Atlanta se multiplicaban hablando del caos que vivieron anteayer, afirmando que no hubo muertes de milagro, y ante la muy escasa respuesta de las autoridades de Chacarita, el Comité Provincial de Seguridad Deportiva Coprosede determinó un duro castigo para el club de San Martín. El ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, como presidente del Coprosede, clausuró temporariamente el estadio de Chacarita y, además, determinó que el club juegue a puertas cerradas, como local, y cuando sea visitante dentro del ámbito provincial lo haga sin su público. En la AFA, tal la costumbre, no hubo ningún pronunciamiento aunque no habrá una quita de puntos. Lo que alarma es que nuevamente, como en el reciente caso de Nuevo Chicago, la violencia salpicó a dirigentes: según fuentes de la AFA, en su informe el árbitro Fernando Rapallini denunció a tres funcionarios de Chacarita que lo increparon en el vestuario al término del cotejo.

OTRO PEDIDO DE SANCIÓN El Centro Simón Wiesenthal pidió a la AFA que sancione a Chacarita por los cánticos antisemitas que sus hinchas profirieron anteayer. La entidad especifica en un documento que “durante el partido se entonaron cánticos antisemitas tales como ‘ahí viene Chaca por el callejón, matando judíos para hacer jabón’. “No hay excusas para un comportamiento tan abominable. Nos hemos reunido en el pasado con Grondona, quien nos prometió tolerancia cero para las expresiones racistas”, dijo Shimon Samuels, director del centro.

Las declaraciones de los dirigentes de Atlanta giraron en torno a los mismos temas: la falta de cuidado policial, la presunción de la existencia de una zona liberada y la certeza de que el saldo de tres heridos fue el mal menor: podría haber sido una tragedia con varios muertos que lamentar. “La gente nuestra estaba en el lugar que tenía que estar. Por suerte nadie tuvo una herida de gravedad. No me gustaría que a ningún otro club le pase esto. Los dirigentes de Chacarita nos decían que iban a renunciar. Vamos a hacer un informe con lo que pasó en la AFA. Estamos contentos de que la sacamos barata”, dijo el presidente, Alejandro Korz. El secretario deportivo del club de Villa Crespo, Fernando Gómez, otro de los lesionados, se refirió al presunto acuerdo entre la barra local y la policía. “Uno siente que sí pudo haber una zona liberada. En la tribuna había tres policías que no estaban a la vista de las cámaras y cuatro agentes de seguridad que, pobres, mucho no pueden hacer”. Pero el dirigente que llevó el peso en las declaraciones fue el vocal de Atlanta, Marcelo Santoro. Por dos motivos: fue el que se llevó la peor parte en cuanto a los lesionados, con un piedra en la cabeza que, según su testimonio, le demandará una intervención quirúrgica el viernes próximo y, además, por aparecer en los videos como uno de los más vehementes a la hora de golpear a dos hinchas de Cha-

carita que ingresaron a la tribuna visitante cuando terminó el encuentro. “Le diría al Ministro que tuve miedo por mi vida, y que él me diga si fue zona liberada o no. El número de 500 policías no me cierra, pero no me concierne tampoco. No puedo entender que haya gente con esas ganas de matar. Yo pensé que iba a terminar peor de lo que terminó. A mi familia llegó la versión nefasta de que yo había muerto. Pensé que mi hijo se quedaba sin papá”, afirmó Santoro sobre el operativo y sus temores. En cuanto a su papel de agresor, contestó: “Si los organismos de seguridad hubiesen cumplido, yo me habría ido a mi casa tranquilo. Hago una autocrítica, pero una persona con un palo no me viene a saludar. Si no frenábamos a esos que entraron primero, nos habrían matado a todos”.

Desde distintos sectores se adelantó que los episodios serán judicializados. “Atlanta va a tomar los pasos que correspondan en forma legal, y luego tomaré yo los míos”, dijo Santoro. Casal aseguró que la Fiscalía de Estado intervendrá para iniciar acciones judiciales “reparatorias” por los daños provocados a tres móviles policiales. Mientras tanto, todavía retumban las palabras del arquero de Atlanta, Fernando Pellegrino, que desde su cuenta de Twitter exclamó desde dentro del vestuario de Chacarita: “Hijos de mil puta, la Policía y la gente de mierda que va a la cancha. No podemos salir del vestuario. Espero que la AFA y el Coprosede actúen”. Es un pedido de socorro desesperado que, como tantas veces, busca respuestas. Urgentes.

ESTA SEMANA, CHACARITA JUGARÁ EN SALTA Y EN CÓRDOBA

OTRAS PROVINCIAS, SIN DEFINICIÓN Las sanciones dispuestas a Chacarita tienen como marco la provincia de Buenos Aires. Pero, curiosamente, los próximos dos compromisos del club de San Martín son en otras jurisdicciones: mañana se medirá con San Lorenzo, por la Copa Argentina, en Salta, y el fin de semana contra Instituto, en Córdoba, por la B Nacional. Ninguno de estos distritos informó ayer si se plegaría a la sanción dispuesta por el Coprosede bonaerense de no permitir el ingreso de hinchas del equipo de San Martín, aun cuando jueguen de visitantes. Luego, el cronograma de partidos por el certamen de segunda de Chacarita incluye otros encuentros como visitante en jurisdicciones ajenas a la provincia: ante Guillermo Brown, de Puerto Madryn, contra Ferro, en la ciudad de Buenos Aires, y en la jornada final frente a Rosario Central.