MARCOS 1:14-15 COMO CLIMAX DEL PRÓLOGO Por Roberto Flores González “Usado con permiso”
EL ANUNCIO DEL REINO, MENSAJE CENTRAL Y DIRECCIONAL DEL EVANGELIO DE MARCOS La presente monografía tiene por propósito el de establecer el pasaje de Mc. 1:14-15 como parte final del prólogo de Marcos cuyo fin es ser un sumario del evangelio así como un nexo con la sección siguiente. Para esto, es necesario primero observar la estructura gramatical del texto para más adelante descubrir el motivo histórico-teológico para todo el evangelio. I.
EL SENTIDO DEL TEXTO
Meta; de; to; paradoqh`nai to;n jIwavnnhn h\lqen oJ jIhsou`" eij" th;n Galilaivan khruvsswn to; eujaggevlion tou` qeou` kai; levgwn o{ti peplhvrwtai oJ kairo;" kai; h[ggiken hJ basileiva tou` qeou`: metanoei`te kai; pisteuvete ejn tw`/ eujaggelivw/.1 Esta perícopa se sitúa a partir del acontecimiento del arresto de Juan el Bautista. La preposición acusativa Meta; de; to; acompaña al verbo infinitivo aoristo paradoqh`nai señalando así una circunstancia conflictiva y dramática para que el lector observe el arribo de la siguiente acción que corresponde a la persona de Jesús. Como dice Taylor: “En 1:14 se narra el comienzo del ministerio público, que empieza con la detención de Juan el Bautista y la proclamación del mensaje de Jesús. Prescindiendo de la simple referencia a Juan, el evangelista no nos dice cuándo, dónde o en qué circunstancias comenzó el ministerio...es una cronología en clave de historia de la salvación”2 Cook y Foulkes también señalan: “El evangelista nos proporciona pocas referencias históricas con que amarrar el relato. Le interesa más el efecto dramático y el impacto teológico que la secuencia cronológica”.3 Es ahí donde que, a partir del efecto literario del arresto de Juan, el lector puede centrar ahora su atención en el personaje principal del evangelio4 El verbo aoristo h\lqen del vr. 14 señala la primera acción: El dirigirse al lugar del inicio de la predicación del “Evangelio de Jesucristo” (tal como lo indica 1:1). No es casualidad que el eje geográfico es Galilea, región que despreciaban los judíos por estar poblada en parte por gentiles.5 El verbo presente levgwn (acompañado de la conjunción coordinativa kai) extiende y refuerza la idea del versículo anterior. El autor ahora se centra en las palabras mismas de Jesús (por primera vez, después que en los primeros versículos quien hablaba era el Bautista). Se puede observar tres ideas en su mensaje:
1
Aland, Kurt, Black, Matthew, Martini, Carlo M., Metzger, Bruce M., and Wikgren, Allen, The Greek New Testament, (Deutsche Bibelgesellschaft Stuttgart) 1983. 2 Taylor, Vincent, Evangelio Según San Marcos. Ediciones Cristiandad. Madrid, 1979. Pag. 179 3 Cook, Guillermo y Foulkes, Ricardo. Marcos en Comentario Bíblico Hispanoamericano (edit. Justo Gonzales). Editorial Caribe: Miami, 1993. Pag. 67. 4 El verbo infinitivo paradoqh`nai en modo pasivo implica un arresto y entrega voluntaria como parte del plan divino. Para mas información del verbo paradidomi “entregar” “encarcelar” véase: Vine, W.E., Vine Diccionario Expositivo de Palabras del Antiguo y del Nuevo Testamento Exhaustivo, Editorial Caribe: Nashville. 1999. 5 Bravo, Carlos. Galilea Año 30: Historia de un conflicto. Colección Biblia. Edit. Edicay: Quito, 1991. Págs 1517. Véase también Cook y Foulkes, op. Cit. Pág 68.
1. Cumplimiento del tiempo. El kairo;" de Dios (no el kronos del hombre) se ha completado, ha llegado a su plenitud. En otras palabras, la idea escatológica mencionada por Juan en los vrs. 7 y 8 es ahora una realidad. El tiempo es determinado por la voluntad de Dios. 2. La realidad del Reino. El tiempo perfecto del verbo h[ggiken señala un hecho concreto. Se traduce literalmente como “está a la mano”6 Si bien es cierto Jesús habló del Reino como algo futuro (compárese 14:25) también lo mencionó como una realidad presente en su persona y ministerio.7 3. La respuesta de los oyentes: Los verbos metanoei`te y; pisteuvete ambos en modo imperativo presente señalan el propósito a que apunta el mensaje de las buenas noticias “Evangelio” al comienzo del v. 1 La aceptación de la intervención de Dios en la historia de la humanidad a través de la persona y obra de Jesucristo. Cook y Foulkes dicen bien: “En ninguna otra cita se nos insta a creer “en” el evangelio, palabra que en el Nuevo Testamento tiene el sentido objetivo de “mensaje”, como fruto de la revelación y de la experiencia colectiva de la iglesia... Aquí “Evangelio” mantiene su sentido primigenio de mensaje del Reino personificado en Jesucristo, cuyo contenido se irá manifestando en la vivencia y práctica de Jesús”8 II.
MOTIVO HISTÓRICO- TEOLÓGICO DEL TEXTO
Si bien es cierto al comienzo del prólogo el protagonista es Juan el Bautista y su ministerio precursor, el texto no se reduce ni limita a dicho aspecto. La presencia y la acción de Jesús en su bautismo como en la tentación se hallan en los versículos 14 y 15, el clímax de apoyo para distinguir su papel y enrumbarlo hacia el resto del libro. Decir que Juan fue precursor del Mesías no significa que Jesús fuera continuador de la obra de Juan. El irá más allá, por eso Jesús ni siguió bautizando ni se quedó en el rumbo del Jordán. Precavidamente tomó distancia de la elite judía religiosa, de Jerusalén, y se fue al norte, a Galilea. Estas primeras palabras de Jesús en Marcos nos dan la esencia de su enseñanza: que el tan esperado Mesías vino para iniciar el reino personal de Dios en la tierra. La mayoría de las personas que oyeron este mensaje estaban en la opresión, pobres y sin esperanzas. Las palabras de Jesús fueron buenas nuevas para ellas porque les ofrecían libertad, bendiciones y esperanzas.9 La liberación que Dios venía a hacer ya no era cosa de un futuro utópico o de un idealismo religioso lejano, sino del presente. Su mensaje era “hoy”. Iba más allá de los profetas antiguos (incluso del nuevo profeta Juan), que se remitían a una escatología por realizar. Para el evangelista Marcos, Jesús mismo es la buena nueva, y el predicar las buenas nuevas es predicar a Jesús. El hacer esto es la meta completa de su Evangelio. Había concluido la gran “cuenta regresiva” de Dios, y el momento del “despegue” había llegado. CONCLUSIONES La secuencia del prólogo empieza con el título “Principio del evangelio”, continua con la persona del precursor como su obra y mensaje. Luego, el evangelista introduce la persona del 6
Spiros Zodhiates, The Hebrew-Greek key Study Bible. AMG Publishers: Chattanooga, 1990. Pags. 1313, 1827. También Strong, “ejggivzw” en Enhanced Strong’s Lexicon, Oak Harbor, WA: Logos Research Systems, Inc. 1995. 7 Para efectos de dialogo véase: Cullmann, O. La historia de la Salvación. Edit. Peninsula: Barcelona, 1967. Kuzmic, P. “Historia y escatología” en Al servicio del Reino, edits. Manfred Grellet, Visión Mundial: San José, 1992. Págs. 73-106. En relación a la propuesta actual dispensacional del Reino véase Blaising C, y Bock, D. Progressive Dispensationalism. Victor Bocks: Illinois, 1993. Págs 232-283. 8 Cook,G y Foulkes, R. Op cit. pág. 69 9 Douglas, J. D., Nuevo Diccionario Bíblico Certeza, Barcelona, Buenos Aires, La Paz, Quito: Ediciones Certeza) 1982. Véase también Carson, D.A.; France, R.T.; Motyer, J.A.; Wenham, G.J., Nuevo Comentario Bíblico: Siglo Veintiuno, El Paso, TX: Casa Bautista de Publicaciones, 1999.
Mesías en contraste con la de Juan. Al final del prólogo, el autor desea que los oyentes y lectores capten la esencia misma de las buenas noticias y que se centre en el mensaje pleno encarnado en la persona de Jesús. Cumplido dicho propósito, se da ahora el tiempo para seguir las narraciones de 1:16 hacia delante. ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.