16
INFORMACION GENERAL
I
Lunes 8 de febrero de 2010
TENDENCIAS URBANAS s PARA REFRESCARSE AL LLEGAR A CASA
IMPORTANTES PRECIPITACIONES
En siete días llovió más que la marca normal de febrero Cayeron 196,9 mm y el promedio del mes es de 87,9; para hoy pronostican buen tiempo
MARCELO TUCUNA
En la terraza de Virrey del Pino 1551, los propietarios pueden darse un chapuzón a prueba de vértigo
Las piscinas en altura, un adicional buscado en los nuevos edificios Para los constructores, un natatorio representa un valor agregado, aunque no siempre son utilizados LAURA REINA LA NACION Están arriba, casi tocando el cielo. Y también abajo, besando la tierra. Las hay de todas formas y tamaños; pueden ser cubiertas, al aire libre y hasta una mezcla de ambas. Algunas regalan postales soñadas de la ciudad; otras ofrecen algo de verde en plena selva de cemento, y hay unas cuantas que apenas cumplen la función para la que han sido creadas: refrescar los cuerpos agobiados de tanto calor. Las piletas han ganado protagonismo en los últimos años, tanto que ya no son un amenity diferenciador, como lo eran en los años 90, cuando empezaron a hacerse populares en los edificios de la ciudad de Buenos Aires. Hoy, todo emprendimiento inmobiliario de cierto nivel las incluye entre los servicios básicos, tan necesarios como un ascensor o una cochera. La cuestión, entonces, no pasa ahora por tener o no pileta, sino por dónde ponerla. ¿En el jardín, a ras del suelo? ¿En la terraza, cerca del cielo? ¿Elevada unos pisos? La respuesta, claro, dependerá de lo que ofrezca el terreno. Miguel Ludmer, titular de Interwin Marketing Inmobiliario, explicó que las piletas se ponen donde hay espacio y sol, y consideró que hoy son las instalaciones más valoradas después de la seguridad. “Ahora, incluir una piscina en el edificio es casi una obligación. Si hay lugar para construir una, hay que ponerla. Y si el terreno es muy pequeño, aunque sea hay que ofrecer un jacuzzi o un espejo de agua”, comentó. Lo cierto es que de los últimos emprendimientos comercializados
por Interwin todos tienen pileta. El más nuevo, próximo a construirse en el barrio de Villa Urquiza, en Ceretti al 2200, incluye dos: una en el jardín para uso familiar y recreativo, y otra en el piso 19, destinada al público adulto y con una característica especial: se trata de una “piscina in/ out”, es decir que es tanto externa como interna. “La piletas en planta baja tienen la ventaja de ser más seguras y prácticas, y son aptas tanto para chicos como para gente que tiene pánico a las alturas. La desventaja es que muchas veces no tenés tanto sol si el terreno no es grande. Por otro lado, la pileta en altura regala una vista panorámica muy buena y asegura más luz, pero pueden ser ventosas”, comparó Ludmer.
Inversión y servicio
Costos vs. prestigio Los costos también son un factor para tener en cuenta a la hora de decidir dónde ubicar una piscina. “Es más económica construirla en la planta baja que en la terraza porque allí arriba se requiere una instalación sanitaria más compleja y refuerzos estructurales adicionales. La ventaja de tener una pileta en altura es que, en general, tienen mejores visuales”, explicó a LA NACION el arquitecto Roberto Baylac, del estudio B&W Group. Sin embargo, más allá de los costos, el gerente comercial de la desarrolladora Argencons, Ignacio Camps, hacedora de la prestigiosa marca Quartier, prefiere ubicar las piscinas arriba, aun cuando haya que sacrificar esos valiosos metros: “Las piletas en la terraza dan más prestigio y calidad al edificio”. Siguiendo esta tendencia, las to-
➔ Imagen. Las piletas en altura
demandan más inversión y sacrifican metros de construcción, sin embargo los edificios con una piscina en pisos superiores ganan en prestigio, según explican los constructores.
➔ Confort. En los edificios desti-
nados al público ABC1 las piletas son tomadas como un servicio básico, como un ascensor o una cochera.
rres Le Parc Figueroa Alcorta tienen los servicios en altura, compuestos por gimnasio, vestuarios, piscina climatizada in/out con nado contracorriente, bar, spa y solarium con hidromasajes exteriores. Pero en la planta baja, entre ambas torres, hay otra pileta climatizada, rodeada de jardines. Según Néstor Tena, gerente de ventas de Ocampo Propiedades, inmobiliaria que comercializa varios emprendimientos con pileta, entre ellos el de Virrey del Pino 1551, que posee una en el décimo piso, desde donde se ven el campo municipal de golf y el río, la pileta no sólo es importante para el que vive en el edificio, sino también para el que decide invertir. “Si el edificio tiene piscina, permite sacar mayor valor de alquiler y es más segura la renta. A la hora de invertir, la gente se fija en la zona, la calidad y detalles de terminación del edificio, y en el valor agregado que tiene la construcción, como la piscina o el gimnasio”, explicó Tena. Pero estén arriba o abajo, sean grandes o pequeñas, a las piletas citadinas las persigue una maldición: apenas son usadas. “Aunque las piscinas se transformaron en algo que debe estar en los edificios destinados al público ABC1, casi no se usan”, disparó Baylac. Una realidad fácilmente constatable los días de semana, aunque menos cierta los días de descanso. Por eso, algunos, en lugar de servicios, ya las incluyen como parte de la decoración o la ornamentación que acompaña a toda torre de categoría. Y no son pocos los que aseguran que su función es más decorativa que recreativa.
LAS MURGAS EN LA CIUDAD
Quejas de vecinos por los corsos porteños El corte de calles, el ruido, el consumo de alcohol y las peleas callejeras son los mayores reclamos No todo es carnaval para los vecinos que dicen padecer la música de las murgas como ruidos molestos, o para los automovilistas que, durante el fin de semana, quedan atrapados en embotellamientos porque los corsos ocupan durante varias horas las avenidas principales de la ciudad. Jorge González, vecino de Boedo, tardó 20 minutos más de lo normal para llegar a su casa el sábado a la noche. “Tuve que hacer dos desvíos y quedé atrapado en dos embotellamientos de tránsito, porque me crucé con tres corsos”, relató resignado a LA NACION. “La ciudad tiene un montón de parques inmensos. ¿Por qué no hacen los corsos en esos lugares y así el resto de la gente puede llegar bien a su casa o ir a un cajero seguro o, sencillamente, cenar y dormir tranquilo?”, dijo González. Vecinos de San Telmo también se quejaron. En realidad, ya lo habían hecho el año pasado, pero no tuvieron respuesta del gobierno porteño. “El corso es insoportable. Nadie quiere saber nada. Juntamos firmas con los vecinos para sacarlo, pero no nos dieron bolilla”, explica Luis Alberto, dueño de un garaje sobre la calle San Juan, que se hace peatonal para recibir al desfile de murgas que perjudica el ingreso y la salida de los autos. Julio Cristóbal, encargado del restaurante Café San Juan, también sobre la avenida San Juan, afirma: “No vino nadie a preguntarme si el corso me perjudicaba o no”.
LEANDRO ARANDA
En la mañana de ayer, en Boedo al 800, todavía quedaban restos de los festejos “Los comensales tienen dificultades para llegar; tienen que estacionar su vehículo lejos del restaurante, y comer escuchando los bombos”, señala Cristóbal. Además, como se tienen que sacar las mesas que están sobre la vereda, sabe que los fines de semana de febrero cuenta con un 50% menos de clientes. “La historia se repite también en restaurantes de
otros barrios”, agregó Cristóbal. Las quejas más recurrentes de los vecinos fueron los ruidos provocados por la música de las murgas, que no dejan dormir; el disturbio en el tránsito, por los embotellamientos, la inseguridad, la basura, el consumo de alcohol y las peleas callejeras, que anteayer tuvieron a la madrugada en el
corso de Almagro, sobre la avenida Corrientes. El director de Promoción Cultural de la ciudad, Baltazar Jaramillo, aseguró que se está trabajando para mejorar el carnaval y que se intenta responder a todos los reclamos vecinales para seguir optimizándolo.
Ana Falbo
Sólo en la primera semana de febrero, en la Capital y el Gran Buenos Aires llovió muy por encima del promedio histórico de todo el mes, y más que en todo enero pasado, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Ayer fue otro día de lluvias y tormentas en el área metropolitana, pero mejoró hacia las primeras horas de la tarde: el cielo se despejó y hubo sol. Hoy, según el pronóstico, no lloverá y habrá aumento de la temperatura. En la primera semana de febrero llovió casi todos los días; cayeron 196,9 milímetros en total, prácticamente el doble del promedio mensual, de 87,9 milímetros. Estas lluvias, en sólo una semana, son más que las acumuladas durante todo enero de 2010, que fueron de 153,5 milímetros. Y eso no es todo: las lluvias de enero y febrero 2010, juntas, totalizan 350,4 milímetros y superan la media de la estación –que va de diciembre hasta febrero–, que es de 341,6 milímetros. El gobierno porteño destacó ayer que el sistema pluvial “soportó sin inconvenientes” las últimas tormentas, muy superiores a las habituales para este mes. No obstante, las fuertes lluvias del miércoles pasado anegaron por lo menos calles de la zona de Pacífico. En un comunicado, el ministro de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, elogió el “trabajo realizado por las más de 20 cuadrillas” del
organismo, y les solicitó seguir “alertas porque los pronósticos indican que seguirán las lluvias”. De todos modos, y a pesar de que faltan 20 días para terminar el mes, parece improbable que más lluvias logren superar la marca histórica de febrero: 403,3 milímetros en 2003.
Alerta en Córdoba y Santa Fe El SMN pronosticó para hoy, en la Capital y el conurbano, cielo despejado, vientos moderados del Oeste y cambiando al Sudoeste, con una máxima de 28° y una mínima de 19°. Hacia la tarde-noche el cielo estará algo nublado, pero no se prevén lluvias. Mañana el cielo estará algo nublado, con vientos moderados del sector norte, y la temperatura máxima será de 30° y la mínima de 18°. El miércoles habrá nubosidad variable; la temperatura máxima fue estimada en 32° y la mínima en 21°. El SMN retiró la alerta meteorológica para la Capital, aunque, al cierre de esta edición, mantenía vigente otra en las zonas centro y norte de Córdoba, Entre Ríos, y centro y sur de Santa Fe. “Se prevé que con el avance de un frente frío desde el sudoeste, se desarrollen nuevas áreas de lluvias y tormentas, algunas de las cuales pueden ser fuertes con abundantes caídas de agua, probables ráfagas de viento y ocasional caída de granizo”, informó su página web el SMN.
MAURO V. RIZZI
Mar del Plata bajo el agua Una tormenta con fuertes vientos y lluvias castigó en la mañana de ayer la ciudad de Mar del Plata. El pronóstico es más alentador para aquellos que hoy están de vacaciones: cielo nublado, ráfagas de viento, pero sin lluvias y con aumento de temperatura. Mañana, la máxima será 29°.