Land Art o el Arte de la Tierra Land Art es un término americano, que significa “arte de la tierra”, llamado así por Walter de María para describir sus primeras intervenciones en el paisaje.

sábado, 25 de febrero de 2012 - Por: Flavia Lucia Zanassi

“Movimiento continuo” - Juan Doffo (2001) - Fotografía 120 x 150 cm.

Land Art es un término americano, que significa “arte de la tierra”, llamado así por Walter de María para describir sus primeras intervenciones en el paisaje. Es una expresión del arte que pretende provocar emociones en el espectador y reflejar la relación entre el hombre y la tierra, el medio ambiente y el mundo, expresando al mismo tiempo el dolor debido al deterioro ambiental que existe hoy en día. Estas obras están conectadas a la acción y a la performance. Algunas de ellas precisan de un proyecto y un equipo instrumental y por su monumentalidad han sido calificadas de megalómanas. Otra característica particular de las obras del Land Art es que no se conciben para ser vendidas, ni para ser exhibidas en un museo, rompen con la tradición escultórica y muchas de ellas son efímeras. En los años sesenta, algunos artistas norteamericanos como Robert Smithson, y Michael Heizer decidieron realizar obras fuera del entorno urbano, en plena naturaleza, integrando el arte con el paisaje natural. El Land Art puede parecer un cruce entre escultura y arquitectura y se considera un nuevo comportamiento artístico alejado de los modos tradicionales, al igual que otros movimientos surgidos en los años sesenta y setenta en respuesta a la comercialización del objeto artístico tradicional. También se destacaron Christo Javacheff junto a su pareja Jeane-Claude, Richard Long, Janes Turrel y Walter de María, entre otros. En Argentina se puede mencionar a Juan Doffo, Nícolas García Uriburu y Adrián Villar Rojas, quienes se han dedicado a este tipo de arte. El principio fundamental del Land Art es alterar, con un sentido artístico el paisaje, para producir el máximo de efectos, sensaciones y emociones en el observadorespectador que se enfrenta a un paisaje determinado El artista del Land Art utiliza como materia prima para sus obras la tierra y el medio ambiente; el soporte y el material son el propio paisaje existente, tanto urbano como rural, montañas y desiertos. Su principal técnica es la instalación en el paisaje. Los artistas trabajan sobre la topografía, cavan zanjas, simas o surcos; hacen grandes movimientos de tierras usando excavadoras o camiones oruga; construyen enormes rampas, embalan edificios o rocas; distribuyen colorantes en playas o

desiertos, pintan árboles o piedras. Otros, simplemente caminan una y otra vez para marcar un camino, o colocan piedras, o hacen espirales con algas. El paisaje es parte fundamental de la obra. El artista dialoga primero con el entorno y posteriormente la obra realizada conservará esta conversación. Así surge la transformación que permite a esta experiencia artística recuperar valores ancestrales, comunicar ideas, pensamientos y sensaciones. En conclusión, el Land Art representa la relación entre el hombre y el medio ambiente, una correspondencia que refleja el amor que tiene el hombre por la naturaleza, pero a la vez los conflictos que existen entre ellos, como la sobreexplotación de sus recursos y la destrucción del hábitat. Muestra la interacción entre el arte creado por el hombre y la belleza artística natural, la transformación de sus paisajes, sin alteraciones dañinas, ni mal uso de recursos naturales. Sin embargo no se pueden ignorar algunas acciones del Land Art, las cuales a pesar de su postura ecologista, no fueron totalmente respetuosas con la naturaleza. Este es el caso de Michael Heizer, quien dio un tajo de 450 metros a una montaña removiendo más de doscientas mil toneladas de rocas, o Christo y Jean-Claude que bordearon dos Islas con telas, las cuales cubrieron cardúmenes de peces que quedaron sin luz, desorientándose. El artista que practica este tipo de arte siempre modifica el medio natural en que interviene, intentando adecuarlo a una finalidad estética que está en su mente, y no a la condición original de la naturaleza. Por lo general es un arte efímero, nunca vive del paso del tiempo y va desapareciendo lentamente por cuestiones climáticas, erosiones del terreno o rara vez el mismo artista decide deshacer la obra después de haberla registrado. Este tipo de obras es difícil de exhibir en galerías o museos, puesto que sus proporciones son monumentales y se encuentran en lugares difíciles de acceder, o fuera del alcance del espectador. De esta manera el único medio para dar a conocer la obra es a través de registros fotográficos y fílmicos, que son expuestos en galerías y museos. Por lo tanto, el testimonio es también una obra de arte.

http://www.diariodemocracia.com/notas/2012/2/25/land-arte-tierra-31693.asp